Drill Capítulo 14
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Circulación perdida
Introducción
Las pérdidas del lodo completo en las formaciones de sub-superficie se llaman circulación
perdida o retornos perdidos. La circulación perdida ha sido, históricamente, uno de los
contribuyentes principales a los altos costos de lodo. Otros problemas tales como la
inestabilidad del hoyo del pozo, tubería atorada y aún reventones, han sido el resultado de
circulación perdida. Además, los beneficios obvios de mantener la circulación, prevención
o remediar las pérdidas de lodo, son importantes para otros objetivos de perforación tales
como obtener evaluación de buena calidad de la formación y lograr una cementación
primaria efectiva en la tubería de revestimiento.
La circulación perdida ocurre en una de las dos maneras básicas:
1. Invasión o lodo perdido en las formaciones que son cavernosas, de disolución,
fracturadas o no consolidadas.
2. La fractura, que es lodo perdido debido a la fractura hidráulica derivada de excesivas
presiones inducidas (vea la Figura 1).
INSERTAR FIGURA 1
Causas de circulación perdida
1. Invasión. En muchos casos, la circulación perdida no puede ser evitada en las
formaciones que son cavernosas, de disolución, fracturadas o no consolidadas. Las
formaciones de baja presión agotadas (usualmente arenas) son similares con relación al
potencial de circulación perdida.
a. Las formaciones gruesas, no consolidadas pueden tener suficiente alta
permeabilidad para que el lodo completo invada la matriz de la formación, dando
como resultado la circulación perdida. Esta alta permeabilidad con frecuencia está
presente en las arenas poco profundas y los lechos de grava. Las formaciones que
una vez fueron arrecifes y los ostionales también poseen tendencias similares. Una
razón importante para evitar la pérdida de lodo en los intervalos poco profundos es
que esto puede ocasionar que estas formaciones no consolidadas se deslaven,
formando una cavidad grande que es menos estable, la que podría hundirse más
fácilmente debido al sobrepeso y al peso del equipo de perforación.
b. Otra zona de pérdida potencial son las formaciones agotadas (usualmente arenas).
Las formaciones que están produciendo en el mismo campo, o generalmente en las
proximidades, pueden ocasionar presión de formación subnormal (agotadas)
debido a la extracción de los fluidos de formación. En tal caso, los pesos de lodos
requeridos para controlar otras presiones de formaciones expuestas pueden ser
demasiado altas para la formación agotada, forzando al lodo para que invada la
agotada formación de baja presión (vea la Figura 2). Si existe esta situación, se
deben formular planes para prevenir la ocurrencia de circulación perdida o tubería
atorada en la zona agotada. Los agentes conectores especiales y los materiales
selladores deben ser utilizados para formar un buen sello y costra filtro en la zona
agotada.
INSERTAR FIGURA 2
c. Las zonas cavernosas o de disolución están usualmente asociadas con las
formaciones volcánicas o de carbonato de baja presión (caliza y dolomita). En la
caliza, las bolsas son creadas por el flujo continuo anterior del agua que disolvió
parte de la matriz de la roca (lixiviar), creando un espacio vacío que
posteriormente se llena con aceite. Cuando estas formaciones de disolución son
perforadas, la sarta de perforación puede caer libremente a través de la zona de
vacío y generalmente una rápida pérdida de lodo se experimenta. El volumen y la
persistencia de esta clase de pérdida dependen del grado al cual las bolsas están
interconectadas. Las bolsas y las cavernas similares pueden desarrollarse durante
el enfriamiento del magma o de las cenizas volcánicas. Las formaciones
cavernosas y de disolución con frecuencia son fácilmente rastreables desde los
pozos compensadores y así como predecibles en los registros de lodos y la
litología.
d. La pérdida de lodo ocurre en las fisuras o fracturas en pozos donde no existen
formaciones cavernosas o permeables ásperas. Estas fisuras o fracturas pueden
ocurrir naturalmente, o pueden ser iniciadas o extendidas por las presiones
hidráulicamente impuestas. Las fracturas naturales existen en muchos casos, las
que pueden ser impermeables bajo condiciones de presión equilibradas. Las
pérdidas también pueden ocurrir en los terrenos de falla no sellada.
1. Fractura. La fracturación hidráulica es iniciada y la circulación perdida ocurre cuando
alguna presión de fractura crítica es alcanzada o excedida. Una vez que se crea o se
abre una fractura por una presión impuesta, ésta puede ser difícil de reparar (cauterizar)
y jamás puede reobtener la resistencia original de la formación, como se muestra más
adelante en la Figura 5. La circulación perdida puede persistir aunque la presión sea
reducida después. Esta es una de las razones por las que es mejor pretratrar por, y
prevenir, la circulación perdida que permitir que ésta ocurra. La circulación perdida
resultante de la presión inducida es usualmente causada por una de dos situaciones:
a. Colocar el revestimiento intermedio en el lugar equivocado. Si el revestimiento es
colocado arriba de la zona de transición, que cruza de presiones normales a
anormales, las presiones ejercidas por el lodo más pesado (requerido para
equilibrar los aumentos en las presiones) con frecuencia inducirán la fractura en el
asiento débil del revestimiento. Las pérdidas debido a la fracturación están más
comúnmente próximas al asiento del revestimiento anterior, no a profundidad de la
barrena, aún si el revestimiento está correctamente colocado.
b. Las presiones excesivas hoyo abajo son el resultado de muchas condiciones,
incluyendo:
i. Fuerzas mecánicas.
a) Hidráulicos inapropiados.
Velocidades de bombeo excesivo y velocidades que causan altas
presiones de Densidad de Circulación Equivalente (ECD)
b) Prácticas de perforación.
1) Aumentar las velocidades de bombeo demasiado rápidamente
después de las conexiones y viajes. Esto puede ser
extremadamente importante cuando se está tratando con fluidos
base aceite. La falla para hacer que las bombas aceleren
lentamente puede ejercer presiones de circulación mucho más altas
en la formación debido a la tendencia de los lodos base aceite a
adelgazarse a temperaturas mayores generadas mientras se está
circulando y a espesarse a temperaturas más bajas durante los
viajes. Es común que las presiones de circulación disminuyan
100+psi mientras el lodo se calienta a la temperatura de
circulación.
2) Elevando o bajando demasiado rápido la tubería (oleaje/achique).
c) Puentes de perforación inicial.
d) Velocidad excesiva de penetración (ROP) durante una velocidad de
flujo dada resultará en alta concentración de recortes en el fluido
anular causando un alto ECD.
e) Latigazos de la tubería.
ii. Condiciones del hoyo.
a) Pizarra desprendible o sólidos aumentados cargándose en el anular y
en la densidad de circulación equivalente alta.
b) Acumulación de recortes en la porción deslavada del hoyo o en el
lodo.
c) Lechos de recortes o combamiento de barita formándose en el lado
bajo de un pozo direccional o probablemente derrumbándose.
d) Puentes.
e) Procedimientos de pateos y control de pozo.
iii. Propiedades del lodo.
a) Viscosidades y esfuerzos gel excesivos.
b) Elevación de sólidos perforados.
c) Costras filtros espesas que reducen el diámetro hidráulico del hoyo del
pozo.
d) Densidad excesiva del lodo o aumentando la densidad del lodo
demasiado rápido.
e) Columnas de lodo no equilibradas.
f) Combamientos de barita.
Medidas preventivas
Las buenas prácticas de planeación y de perforación correcta son las claves para prevenir la
circulación perdida que minimiza las presiones excesivas en la formación.
Varias medidas pueden ser tomadas para prevenir o minimizar la circulación
perdida:
1. Coloque la tubería de revestimiento en la zona apropiada de modo que el gradiente de
fractura de la formación en la zapata del revestimiento sea el suficiente para soportar la
cabeza hidrostática de los lodos más pesados requeridos para equilibrar las presiones en
la formación abajo.
2. Minimizar las presiones hoyo abajo.
a. El Movimiento de la tubería no debe exceder las velocidades críticas cuando se
estén haciendo disparos. Cuando la sarta de perforación es corrida en el hoyo, hay
una presión de efecto de oleaje, derivada del efecto del pistón de la barrena y los
collares que aumentan la presión ejercida sobre el fondo del hoyo. Las buenas
prácticas de perforación mantendrán estos oleajes de presión dentro de la fractura
y la presión de la formación, como se muestra en la Figura 3.
INSERTAR FIGURA 3
Muchos pozos experimentan circulación perdida mientras corren la tubería o el
revestimiento dentro del hoyo. La longitud de la tubería en el hoyo afecta la
magnitud del oleaje. Las pruebas muestran que el flujo del lodo junto con la
tubería crea la mayoría de los oleajes de presión. Mientras más larga la tubería,
mayor el oleaje. Por lo tanto, mientras más profundo el pozo, más lento debe ser
corrida la tubería dentro del hoyo en tanto la profundidad de la barrena aumenta.
Los espacios libres anulares más pequeños también aumentan las presiones de
oleaje bastante, del mismo modo que las pérdidas de presión anular aumentan en
tanto los espacios libres del anular disminuyen (vea la Figura 4).
b. El movimiento rápido de la tubería, mientras está en circulación, también ocasiona
oleajes de presión aún mayores. La “perforación inicial” rápida de la tubería, o
escareado rápido mientras se está circulando, puede crear oleajes grandes.
c. Un ROP muy alto carga el anular con recortes, así aumenta el ECD, haciendo que
cualquier oleaje adicional en las conexiones sea más probable que cause fractura
como se muestra en la Figura 5. Es importante, previo a efectuar las conexiones,
cuando el ECD está próximo a la
INSERTAR FIGURA 4
presión de fractura. Mantenga la concentración de los recortes en el anular debajo
del 4% para minimizar el efecto de los recortes en el ECD.
d. Al iniciar o detener rápidamente las bombas de lodos puede causar oleajes de
presión. Iniciar las bombas demasiado rápidamente creará una presión que puede
ocasionar circulación perdida, especialmente cuando se desconecta la circulación
abajo después de un viaje. Parte del oleaje es causado por la presión requerida para
fracturar la estructura gel del lodo. Al rotar la tubería, cuando se inicia la
circulación, ayudará a fracturar los esfuerzos gel y reducirá
INSERTAR FIGURA 5
grandemente la presión de oleaje. La otra parte del oleaje es la presión requerida
para acelerar la columna de lodo a la velocidad normal de circulación. Mantener
baja la estructura gel y aumentar gradualmente la velocidad de la bomba reducirá
este tipo de presión de oleaje. Interrumpir la circulación a diferentes intervalos
cuando se dispara en el hoyo es otra manera de minimizar estas presiones.
e. Utilice suficientes collares de perforación para mantener el punto neutral en el
Ensamble Hoyo Abajo (BHA) para minimizar los latigazos de la sarta de
perforación.
f. Durante la fase de planeación del pozo, el diseño de las sartas de perforación y de
los revestimientos deben ser diseñados para ofrecer una operación segura y
adecuada, y también para optimizar los hidráulicos para obtener una buena
limpieza de hoyo y un ECD mínimo, especialmente en las áreas sensibles.
g. Lave y rectifique cuidadosamente a través de los obturantes (puentes).
h. Evite los pateos si es posible. La presión de cierre en la superficie es transmitida
hacia abajo al hoyo, fracturando con frecuencia la formación abajo en el punto más
débil. Esto no sólo resulta en pérdida de circulación, sino en la pérdida de control
del pozo. El estudio adecuado, la buena planeación y ejecución minimizarán la
posibilidad y severidad de un pateo. Aquellos responsables por la operación en el
sitio deben siempre estar conscientes de la presión y volumen máximos del
revestimiento de cierre. El volumen del fluido invasor está directamente
relacionado a las presiones de cierre y éstas deben ser minimizadas. Si un pozo
tiene que ser parado, los procedimientos correctos de controlar deben ser utilizados
para mantener la presión correcta constante hoyo abajo, requerida para controlar el
pozo.
i. Controle las propiedades del lodo en los rangos apropiados.
i. La viscosidad alta y los esfuerzos gel aumentan las presiones de oleaje
cada vez que la circulación es interrumpida y restaurada (vea la Figura 6).
Estas también aumentan el
INSERTAR FIGURA 6
ECD mientras se está perforando. Estos valores deben ser optimizados para
asegurar una buena limpieza de hoyo y suspensión de sólidos, y minimizar
las presiones de achique y oleaje y el ECD.
Muchas veces, las propiedades del lodo no pueden ser mantenidas a un
nivel que proporcionaría una limpieza adecuada del hoyo debido a otras
consideraciones operacionales. Las velocidades de flujo más altas y la
rotación agresiva del ducto de perforación son los mejores métodos para
mejorar la limpieza del hoyo. Los barridos de alta viscosidad son
recomendados en tales casos donde una buena limpieza de hoyo es
cuestionable. Estos barridos son generalmente hechos con lodo del sistema
activo que ha sido viscosificado por añadiciones de bentonita, polímeros o
Material de Circulación Perdida (LCM). El uso de LCM en estos barridos es
preferible en muchos casos ya que estos son cribados hacia la superficie y no
tienen efecto permanente sobre la viscosidad del lodo. Controlar el ROP
puede ser necesario si no se logra la limpieza eficiente del hoyo. Aunque
esto puede alargar las horas de rotación, éste generalmente será menos caro
que los costos incurridos al perder los retornos.
ii. Controle los sólidos de perforación al nivel mínimo práctico y añada
tratamiento apropiado para minimizar el aumento de costra filtro. Cualquier
cosa que reduzca el espacio libre anular ocasiona un aumento de presión. El
embolado de la barrena, los collares, los estabilizadores o la unión de la
tubería vástago disminuye el espacio libre anular. En el caso de un embolado
extenso de la barrena y/o del estabilizador, se ejercerá una presión
significativa sobre la formación. Un aumento en el arrastre o proceso de
achique sobre las conexiones son posibles indicadores de embolado. Algunas
veces una bola puede ser bombeada fuera de una barrena, pero si eso falla, la
práctica común de iniciar la perforación de la barrena debe ser evitado. La
combinación del espacio anular reducido y el oleaje del ducto puede causar
que la presión exceda la presión de la fractura.
iii. Los lodos de alta pérdida de fluido depositan una costra filtro espesa que
puede reducir el espacio libre anular. El espacio anular más pequeño
aumenta el ECD. Por lo tanto, la pérdida de fluido y el espesor de la costra
filtro debe siempre ser controlada en el rango apropiado. El lodo que
desarrollar una costra filtro fuerte, delgada, es más efectivo para la
prevención de circulación perdida en las pequeñas fracturas o poros.
iv. Perfore con una densidad de lodo mínima. Esto no sólo aumenta el ROP
sino que también disminuye otros efectos relacionados con el lodo.
v. Una buena selección del tamaño apropiado de los materiales obturantes
ayuda a reducir y eliminar las pérdidas de lodo completo dentro de las
formaciones porosas. La selección de tales agentes obturantes dependerá de
las características de la formación. Generalmente, las partículas que tienen
de un tercio a una mitad de la raíz cuadrada de permeabilidad en milidarcies
(md) deben ser capaces de obturar tales formaciones.
Una decisión más informada puede ser hecha con respecto a los pasos apropiados para
eliminar las pérdidas con la información recopilada antes.
Localizando la zona
Restaurar la circulación tan rápido como sea posible es muy importante ya que la
circulación perdida aumenta el costo del lodo y puede ocasionar otros problemas en el hoyo
del pozo que resulten en costos de operación adicionales.
1. Localice el punto exacto de la circulación perdida. Contrario a la creencia popular, la
mayoría de las pérdidas no ocurren al fondo del hoyo. Se ha establecido que más de la
mitad de las pérdidas ocurren justo debajo de la última zapata de revestimiento. Varios
métodos están disponibles para ubicar el punto de circulación perdida. Estos incluyen:
a. Examen del girador.
El examen del girador es efectuado al correr un pequeño accesorio de girador
dentro del pozo sobre un cable conductor sencillo de tal manera que el rotor con
aletas girará o rotará si hay cualquier movimiento horizontal del lodo. Los RPM
del rotor son registrados en una película como una serie de guiones o espacios. El
RPM estará muy lento hasta que el punto de pérdida sea alcanzado. Hay un
aumento definitivo en la velocidad del rotor en el punto de pérdida.
Hay dos objeciones para este método:
i. Esto requiere pérdida deliberada de grandes volúmenes de lodo.
ii. Esto no es efectivo cuando el material de sellado ya está presente en el
lodo.
b. Examen de temperatura
El examen de temperatura depende de un termómetro de sub-superficie para
medir la diferencia en la temperatura del lodo y en la temperatura de la formación.
Este es efectuado corriendo un elemento sensible en el hoyo que cambia su
resistencia en tanto cambia la temperatura. Se corren dos exámenes. El primero es
corrido para establecer el gradiente de temperatura del pozo después de que el lodo
ha alcanzado el equilibrio con la formación. El segundo examen es corrido
inmediatamente después de añadir lodo frío nuevo al pozo. Una discrepancia
aguda de la temperatura ocurrirá en el punto de pérdida.
c. Examen del rastreador radioactivo
Los exámenes radioactivos para ubicar el punto de pérdida consisten en elaborar
dos exámenes de rayos gama. Un registro base es corrido antes de la introducción
del material radioactivo. Un tarugo de lodo que contiene material radioactivo es
luego bombeado hacia abajo del hoyo y se corre un nuevo registro. Las
concentraciones altas del material radioactivo estarán localizadas en el punto de
pérdida. Este método proporciona datos exactos para localizar el punto de pérdida,
pero requiere de equipo caro y de deliberada pérdida adicional de lodo para
obtener la información deseada
d. Examen de hilo caliente.
La herramienta de hilo caliente es principalmente un cable de resistencia calibrado
que es sensible a los cambios de temperatura. Este es corrido a un punto deseado
en el hoyo y la resistencia es observada. El lodo es luego bombeado dentro del
hoyo. Si la herramienta está arriba del punto de pérdida, el lodo fluirá por este,
cambiando la resistencia. Si la resistencia no cambia, la herramienta está debajo
del punto de pérdida. La herramienta puede ser utilizada en cualquier clase de
lodos, pero una gran cantidad de lodo se requiere mientras se está efectuando el
examen.
e. Examen del transductor de presión.
Este tipo de examen involucra utilizar un cilindro corto abierto en la parte
superior y enderezado al fondo para restringir el flujo de lodo a través del tubo.
Una ventana con un diafragma de neopreno está ajustada a un lado del tubo. Hay
un electrodo que se mueve hacia delante y hacia atrás entre los dos electrodos
fijados en el diafragma. En tanto la presión diferencial varía a través del
diafragma, el potencial varía en el circuito eléctrico indicando la velocidad de flujo
del lodo y en dónde el lodo se vuelve estático.
Este método parece tener ciertas ventajas:
Es sencillo de construir y de operar.
No se tapona fácilmente por el material de circulación perdida.
Es operable en casi cualquier tipo de lodo.
Puede ser utilizado para localizar un hoyo dentro del revestimiento.
Dos desventajas aparentes son:
Se requiere de flujo considerable de lodos.
El equipo puede no estar fácilmente disponible.
Aunque es buena práctica localizar la zona ladrón, hay varias razones de por qué
los exámenes no son corridos más frecuentemente:
i. Se desperdicia tiempo considerable en conseguir el equipo necesario para
el equipo de perforación, y una pérdida deliberada de lodo se requiere para
estos exámenes.
ii. Los resultados de estos exámenes algunas veces son difíciles de interpretar.
iii. Las condiciones no siempre son las apropiadas para que las herramientas
puedan ser corridas debido a la presión anormal de la sub-superficie.
2. Determine la severidad de la pérdida. Esto se determina mejor por medio de la cantidad
de pérdida y la altura de la columna de lodo estática. Si la altura de la columna de lodo
estática no está visible esta puede ser determinada corriendo un pedazo de madera (4 in.
x 4 in. x 4 ft) en un cable. Otra opción es el uso de un dispositivo de medición eco
sónico.
a. Las zonas de pérdida pueden ser clasificadas como:
i. Las pérdidas por filtración (1 a 10 bbl/hr)
ii. Pérdidas parciales (10 a 500 bbl/hr)
iii. Pérdida completa (hoyo lleno hasta el nivel de lodo a 200 hasta 500 ft).
iv. Pérdida parcial o completa hasta las fracturas de profundidad inducida.
v. Pérdida completa y grave (hoyo lleno hasta el nivel del lodo a 500 hasta
1,000+ ft).
3. Determine el tipo de pérdida. Esto se determina mejor por medio de la litología. La
circulación perdida en cuanto esta se relaciona a la litología es discutida arriba en
“Causas de circulación perdida.” Estas clasificaciones pueden estar relacionadas a los
cuatro tipos de formaciones en las que las pérdidas de lodos ocurren (vea la Figura 1).
a. Las formaciones no consolidadas, poco profundas, donde la permeabilidad de las
rocas puede exceder los 14 darcies (vea “a” en la Figura 1).
Características de identificación.
i. Registros de desplazamiento que identifican la zona y sus características.
ii. Disminución gradual del nivel del lodo en los fosos.
iii. La pérdida podría resultar completa si se continua la perforación.
b. Las formaciones que tienen fracturas naturales tales como las de caliza y algunas
formaciones de pizarras duras (vea “c” en la Figura 1).
Características de identificación.
i. Registros de desplazamiento y marcadores geológicos.
ii. Puede ocurrir en cualquier tipo de roca quebradiza, y dura.
iii. La pérdida es evidenciada por medio del descenso gradual del lodo en los
fosos.
iv. La pérdida podría volverse completa si la perforación se continua y más
fracturas son expuestas.
c. Las fracturas que son inducidas a través de fuerzas hidráulicas o mecánicas
ejercidas sobre la formación (vea “d” en la Figura 1).
i. Registros de desplazamiento que incluyen hidráulicos anulares excesivos.
ii. Podría ocurrir en cualquier tipo de roca, pero se esperaría en las
formaciones con planos característicamente débiles, tales como pizarras
suaves.
iii. La pérdida es generalmente súbita y completa.
iv. La pérdida puede seguir a cualquier aumento en el peso del lodo o oleaje
súbito en la presión.
v. Puede presentarse en formaciones incompetentes o competentes.
d. Las zonas cavernosas normalmente confinadas a caliza (vea la “b” en la Figura 1).
Características de identificación.
i. Normalmente confinadas a caliza y dolomita.
ii. La pérdida de retornos es generalmente súbita y completa.
iii. La barrena puede caerse desde unas pocas pulgadas a unos pocos pies justo
precediendo la pérdida.
iv. La torsión excesiva puede ser experimentada antes de la pérdida.
4. La clasificación de pérdida por la determinación de la presión dentro de la zona.
a. La posición del fondo de la tubería de perforación en la parte superior de la zona
de pérdida sospechosa.
b. Anexe una longitud adecuada clasificada por tamaño de madera, aproximadamente
4 ft de largo, a la línea de examen del equipo de perforación y córrala hacia abajo a
través de la tubería de perforación hasta que el nivel del fluido estático sea
encontrado. Un dispositivo de medición eco sónico puede también ser utilizado
para encontrar el nivel de fluido.
c. La presión dentro de la zona de pérdida es luego calculada como a continuación.
INSERTAR CÁLCULO
d. La densidad del lodo estático que la zona soportará es calculada como se muestra a
continuación.
INSERTAR CÁLCULO
Medidas correctivas
Correlación de técnica a severidad
La mejor aproximación para controlar la circulación perdida es efectuar una evaluación de
la severidad de una zona de pérdida y relacionar el material de remedio y la técnica a este
en ambos términos, el tamaño del material y su función.
1. Pérdidas de filtración pueden ocurrir en cualquier tipo de formación cuando los agentes
obturantes no son lo suficientemente grandes para formar un sello (vea la Figura 8 a), o
cuando no hay partículas finas para completar el sello.
a. La técnica de extraiga-y-espere debe ser la primera técnica utilizada para intentar
reobtener los retornos completos (vea la técnica extraiga-y-espere).
b. Si el hoyo no permanecerá lleno mientras está esperando, la técnica de mezclar un
lecho LCM que contenga agentes obturantes, de tamaño fino a mediano o que
utiliza una inyección de lecho de alta pérdida de filtro debe ser considerada.
c. Reduzca el peso del lodo si es posible.
2. En la grava ocurren pérdidas parciales, pequeñas fracturas naturales y fracturas
inducidas apenas abiertas (vea la Figura 1). Las mismas técnicas utilizadas en las
pérdidas por filtración deben ser utilizadas en las pérdidas parciales.
a. La técnica de extraiga-y-espere debe ser la primera técnica utilizada para intentar
reobtener retornos completos (vea la técnica extraiga-y-espere).
b. Si el hoyo no permanecerá lleno mientras está esperando, se debe considerar la
técnica utilizar la técnica de mezclar un lecho LCM que contiene una mezcla de
agentes obturantes de tamaño mediano a grande o que utiliza una inyección de lecho
de alta pérdida de filtro.
c. Reduzca el peso del lodo si es posible.
3. Las pérdidas completas ocurren a las secciones de grava largas y abiertas, a los
intervalos de pequeñas fracturas naturales, a las grandes fracturas naturales o fracturas
inducidas abiertas (vea la Figura 1).
a. La técnica de extraiga-y-espere debe ser la primera técnica utilizada para intentar
reobtener retornos completos (vea la técnica extraiga-y-espere).
b. Utilice la técnica de inyección de lechada de alta pérdida de filtro (vea la técnica de
inyección de alta pérdida de filtro).
c. Si los retornos no son reobtenidos con esta técnica, se recomienda un tapón duro tal
como cemento, cemento-bentonita, cemento-gilsonita o diesel-aceite-cemento-
gilsonita (vea las técnicas para lechadas de cemento).
d. Reduzca el peso del lodo si es posible.
4. La pérdida parcial o completa para fracturas inducidas, a profundidad.
a. La técnica de extraiga-y-espere (de 4 a 8 horas) debe ser la primera técnica utilizada
para intentar reobtener retornos completos (vea la técnica de extraiga-y-espere).
b. Aplique una inyección de tapón suave (vea las técnicas sobre tapones suaves).
c. Si el hoyo no permanecerá lleno mientras está esperando, la técnica de mezclar una
lechada LCM que contiene una mezcla de agentes obturantes grandes o que utiliza
una inyección de alta pérdida de filtro debe ser considerada.
d. Reduzca el peso del lodo si es posible.
5. Pérdidas totales severas ocurren en las grandes fracturas naturales abiertas, cavernas y
fracturas inducidas abiertas.
a. Inyecte con cualquier inyección de lecho de alta pérdida de filtro o grandes
cantidades de lechos de diesel-bentonita-cemento (vea las técnicas para cada uno).
b. Si las pérdidas completas y severas continúan ocurriendo como fracturas naturales
más abiertas o se generan cavernas, se debe considerar la técnica de perforación
ciega o con lodo aereado y asentar el revestimiento.
c. Reduzca el peso del lodo si es posible.
Causas por las que hay falla para reobtener circulación
Algunas de las causas más comunes, directa o indirectamente, por las que se falla en
controlar la pérdida de circulación son:
1. La locación de la zona de pérdida no es establecida muchas veces, dando como
resultado en intentos para colocar el material en el punto equivocado. Las zonas no
están usualmente en el fondo sino que están cerca del último asiento del revestimiento o
punto de circulación perdida.
2. Los materiales de circulación perdida no se relacionan sistemáticamente al tipo y
severidad de la zona perdida. Debe existir una mezcla de tamaños de partícula para
iniciar y propagar un sello efectivo.
3. Algunas veces se presenta una renuencia a proceder con la técnica requerida para
relacionar la severidad de la zona de pérdida (por ejemplo perforación ciega y
asentamiento de la tubería).
4. Los registros adecuados no son mantenidos, aquellos que describen las pérdidas y los
materiales y técnicas utilizados en contra de estos. La razón de la exactitud de
experiencia en un área es valiosa.
5. Al cementar, las columnas no están equilibradas y el lodo de perforación rompe a través
del tapón antes de este se asiente. Además, cuando la tubería es retirada del hoyo
después de la colocación, el nivel del lodo en el anular se va hacia abajo y este lodo de
la formación puede atravesar la lechada recientemente endurecida. Las técnicas de
columnas equilibradas y dejar-caer-el-tapón deben ser empleadas.
6. La resistencia de la formación es demasiado débil para soportar la presión hidrostática
de la columna de fluido para controlar la presión en otras zonas expuestas.
Para que sean efectivas, las técnicas de circulación perdida y los materiales deben estar
funcionalmente relacionadas a las pérdidas que están remediando. Por ejemplo, cuando una
cantidad razonable (de 15 a 20 lb/bbl) de LCM no ha trabajado en un lecho de alta pérdida
de filtro, generalmente no tiene sentido utilizar concentraciones mayores del mismo o
materiales similares. El siguiente paso debe ser aumentar el tamaño de los materiales
obturantes.
NOTA: Éste no puede ser sometido a demasiado esfuerzo de modo que la técnica de
circulación perdida debe ser relacionada a la severidad de la zona de pérdida
Técnica de extraiga-y-espere
Esta técnica debe ser utilizada en contra de las pérdidas por filtración y parciales, y las
pérdidas en las fracturas inducidas.
Excepto por una pérdida completa y súbita de las calizas donde grandes fracturas,
bolsas o cavernas están presentes, la perforación y la circulación deben ser detenida a la
primera indicación de circulación perdida.
La barrena debe ser extraída hasta un punto de seguridad y se le debe permitir al
hoyo permanecer estático durante un período de 4 a 8 horas. Monitoree cuidadosamente el
pozo en busca de señales de fluidos invasores y por riesgo de un pateo. Después del período
de espera, las buenas técnicas de perforación deben ser seguidas para volver al fondo para
mantener presiones mínimas en la formación.
Sobre la especulación de que los retornos no serán obtenidos por medio de la espera,
un lecho LCM de 100-bbl o un volumen similar de lecho de alta pérdida de filtro puede ser
mezclado durante el período de espera. Si se anticipa que píldora LCM permanecerá en
almacenamiento por cualquier duración de tiempo, se debe añadir un biocide para prevenir
la degradación por bacterias de cualesquier componentes orgánicos.
La mitad de las pérdidas en el área de la Costa del Golfo fueron corregidas
utilizando esta técnica. Las pizarras fracturas expuestas a los lodos base agua generalmente
cicatrizarán y la circulación puede ser reobtenida, especialmente si las presiones pueden ser
reducidas con los hidráulicos y las prácticas de perforación mejoradas. Los fluidos base
aceite no exhiben este comportamiento de auto-cicatrización a la misma extensión.
Esta técnica es particularmente aplicable a las fracturas inducidas de profundidad.
NOTA: Las técnicas restantes requieren del uso de materiales de circulación
perdida.
Tapones de refuerzo
Inyecciones base agua
Inyección de alta pérdida de filtro (Salt gel tierra diatomácea)
Diesel/Bentonita (DOB) (tapón suave).
Bentonita Bengum (tapón suave).
Polímero de enlace cruzado (tapón suave).
Diesel/Bentonita/cemento (tapón duro).
Lecho de cemento (tapón duro).
Inyecciones base aceite
Tierra diatomácea.
Carbonato de calcio M-I-X.
Taponamiento con bentonita para lodos aceite (VG-69 en agua).
Uso de taponamiento o agentes obturantes
Esta técnica debe ser utilizada en contra de la filtración y pérdidas parciales y las pérdidas
completas menos severas. Un tapón de agentes obturantes en el lodo es mezclado y
aplicado como a continuación:
1. Establezca el punto aproximado de la pérdida, tipo de formación que está recibiendo el
lodo, l altura de las tuberías verticales de lodo en el hoyo y la velocidad de la pérdida.
El punto más probable de la pérdida está justo debajo de la zapata de revestimiento si se
sospecha de una fractura en la formación debido a un oleaje de presión.
2. Es práctico el uso de tubería de perforación de extremo abierto para colocación del
tapón. De otra manera utilice barrenas de conductos abiertos o barrenas de chorro con
las boquillas removidas. Si los materiales deben ser colocados a través de una barrena
de chorro o herramientas MWD/LWD, de mediano a fino, los agentes obturantes
clasificados por tamaño deben ser utilizados para prevenir el taponamiento de la
barrena. NOTA: Utilice materiales solubles en ácido para las pérdidas en el
yacimiento.
3. Mezcle un lecho de LCM con 100 a 250 bbl. Las mezclas de agentes obturantes
laminados y fibrosos, granulares, finos, medianos y gruesos, están disponibles
comercialmente y pueden ser sustituidos por aquellos añadidos separadamente. Utilice
lodo derivado del sistema de circulación o mezcla LCM en un lecho de bentonita
viscosa, recientemente preparada.
Añada 15 lb/bbl de NUT PLUG grueso.
Añada 5 lb/bbl de fibras de gruesa-a-medianas.
Añada 5 lb/bbl de fibras medianas-a-finas.
Añada 5 lb/bbl de laminillas de celofán de ½ in.
NOTA: El tamaño del material obturante debe ser fabricado a la medida de la
severidad de la pérdida ya que el tamaño de las aberturas que reciben el lodo son
conocidas con frecuencia. Esta lógica está basada en el conocimiento de que las bajas
velocidades de pérdida ocurren a través de pequeñas aberturas y velocidades de
pérdida más alta ocurren a través de las aberturas grandes. La Figura 7 ilustra cómo
los materiales que son demasiado grandes formarán un puente en la cara de la
abertura, mientras que los materiales debidamente clasificados por tamaño formarán
un tapón en la abertura donde no es probable que sean erosionados cuando la
circulación sea reasumida. La Figura 8 ilustra como el uso de materiales que son
demasiado pequeños pasan a través de la abertura y no forman un tapón. Cuando se
selecciona el tamaño de los materiales que se utilizarán, el tamaño de las boquillas en
la barrena y otras restricciones probables (por ejemplo, herramientas MWD, motores
de lodos) siempre deben ser considerados.
INSERTAR FIGURA 7 A, FIGURA 7 B.
4. Bombee la lechada LCM a través de la tubería de perforación de extremo abierto
opuesta a la zona de pérdida. Bombee a una baja velocidad hasta que los materiales
hayan detenido la pérdida. Repita una vez mas si el hoyo se llena y luego proceda a
aplicar una técnica de taponamiento con lechada de alta pérdida de filtro, si todavía no
hay indicación de éxito. Si el hoyo se llena, cierra los preventores de estallido (arietes)
y tapone el anular con 50 psi durante 30 minutos. Mida la presión en el anular
utilizando un manómetro de 0- a 300 psi. Las lechadas LCM que contienen una mezcla
de materiales son más efectivas. Los agentes obturantes deben contener cuando menos
agentes granulares fibrosos para ser efectivos. Una mezcla útil de LCM tiene de 3 a 6
partes de material granular, 2 partes fibrosas y 1 parte de material laminado.
Añada diferentes tamaños y formas de LCM para obtener una concentración total de
10 a 20 lb/bbl de LCM.
2. Coloque la barrena en la parte superior, u opuesta, a la zona de pérdida. Desplace la
lechada LCM al extremo de la tubería de perforación.
3. Cierre los arietes. Suavemente inyecte (5 psi máximo) el material dentro de la zona de
pérdida a una velocidad de 1 bbl/min. Mantenga la presión de inyección de 4 a 8 horas
o hasta que esta se disipe. Mida la presión de la inyección en el anular utilizando un
manómetro de 0 a 300 psi.
Para evitar fracturar otras zonas, se deben utilizar presiones de inyección seguras en
exceso de la presión hidrostática del lodo. Por ejemplo:
INSERTAR TABLA
NOTA: La presión de superficie mas la presión de la columna de lodos nunca deben
exceder la presión de sobrecarga (1 psi/ft).
Para pérdida parcial
1. Mezcle 100 bbl de lechada:
Añada de 10 a 20 lb/bbl de arcilla sepiolita o atapulgita a 80 bbl de agua. Si estas
arcillas no están disponibles y se utiliza bentonita como el viscosificador, añada ½
lb/bbl de cal para flocular las arcillas y aumentar la pérdida de fluido.
o:
Añada 50 lb/bbl de material de tierra diatomácea (como antes) o un sustituto
adecuado (LO-WATE). Utilice barita sólo si el peso del lodo es de 12 lb/gal o mayor o si
este es el único material en polvo inerte disponible.
Añada una combinación de tamaños y formas diferentes de LCM para obtener una
concentración total de 15 lb/bbl de LCM.
2. Coloque la tubería de perforación con el extremo abierto en la parte superior de u
opuesto a la zona de pérdida.
3. Desplace 25 bbl de lechada dentro de la zona a una velocidad de 2 a 4 bbl/min.
4. Cierre durante 20 a 30 minutos.
5. Desplace otros 25 bbl de lechada a la misma velocidad.
6. Continúe este procedimiento, esperando y desplazando alternadamente hasta que se
llene el hoyo. Algunas veces dos partidas de 100 bbl serán requeridas. La tubería de
perforación debe ser reciprocada durante estas operaciones para evitar que se atore.
7. Cuando se llena el hoyo, cierre los arietes e inyecte el anular con 50 a 100 psi
desplazando la lechada muy lentamente (1 bbl/min) hacia debajo de la tubería de
perforación. Anexe un manómetro de 0 a 300 psi al anular de manera que los valores de
presión baja puedan ser fácilmente leídos. Mantenga la inyección durante 30 a 60
minutos.
8. Extraiga del hoyo, recoja la barrena y continúe la perforación.
Añada una combinación de diferentes tamaños y formas de LCM para obtener una
concentración total de 20 a 30 lb/bbl de LCM.
Para desplazamiento, siga los Pasos 2 hasta el 8 en “Para pérdida parcial”.
2. Cuando los retornos de pérdida completa y severa ocurren en las formaciones con
grandes fracturas, bolsas, canales o cavernas ocurrentes naturalmente; cuando menos
una píldora convencional de circulación perdida tal como aquellas previamente
discutidas debe ser ubicada. Si este procedimiento falla en mejorar el problema de
circulación perdida, los tratamientos de caverna con rellenadores voluminosos tales
como trapos, sacos de lodo, heno, papel, madera, etc, deben ser considerados antes de
bombear los tapones de cemento.
Tapones duros
Varios tapones de cemento duro son, con frecuencia, efectivos en contra de las pérdidas
completas y las pérdidas completas severas.
La composición y la técnica de aplicación de la lechada de cemento que está siendo
utilizada para combatir la circulación perdida deben ser funcionalmente adecuadas si se
pretende que el trabajo tenga éxito.
1. Composición de lechada de cemento. El cemento, o cemento mas bentonita, es un
remedio importante para circulación perdida porque estas lechadas con frecuencia
sellarán las zonas de pérdida por disolución.
Tres lechadas de cemento Portland son recomendadas: cemento puro, de bentonita y
de gilsonita. Estos han sido seleccionados debido a que una amplia variedad de
propiedades pueden ser obtenidas y están disponibles generalmente.
Cemento puro Portland. Mezcle para obtener 15.6 lb/gal utilizando 46% de agua y
cemento. Esta lechada es un fluido denso y desarrolla alto esfuerzo de compresión
cuando este se endurece.
Cemento de bentonita o gel. El cemento de bentonita formado por medio de adición
de cemento al agua que contiene bentonita prehidratada proporciona propiedades
óptimas. La lechada formada tiene densidad más baja y mayores esfuerzos gel. Este
también tiene un esfuerzo de asentamiento mayor que una lechada formada por medio
de adición de agua a una mezcla seca de bentonita y cemento.
Al mezclar la lechada, trate el agua fresca que será utilizada con ¼ lb/bbl de ceniza de
soda y ¼ lb/bbl de cáustico para remover los iones de calcio y magnesio. Añada 10
lb/bbl de bentonita y permita que esta produzca. Utilice esta lechada de bentonita para
mezclar una lechada de 14.5 a 15.0 lb/gal de bentonita-cemento. Utilice 100 sacos de
cemento o más para tamaños de hoyo grandes.
Cemento de gilsonita Portland. La gilsonita puede ser añadida a las lechadas de
cemento que están siendo utilizadas para reobtener los retornos. Este disminuye la
densidad de la lechada y actúa como un agente obturante, ambos ayudan a mantener la
lechada en la proximidad del hoyo del pozo. Ésta debe ser corrido exactamente como
las lechadas de cemento-bentonita y debe ser inyectada si el hoyo se llena durante su
aplicación. Entre 25 a 100 lb de gilsonita por saco de cemento es lo recomendado.
Estos tres cementos se recomiendan porque proporcionan lechadas con un rango de
propiedades desde lechadas delgadas, pesadas que se endurecen a ligeras, lechadas
espesas que tienen propiedades obturantes. También están disponibles en todos lados.
Sin embargo, no se pretende utilizarlas para la exclusión de todas las otras
formulaciones de cemento.
1. Técnicas para aplicar cemento. Las lechadas de cemento deben ser utilizadas para
combatir las pérdidas en las fracturas naturales de 1/3 in a 1 ft de diámetro, y para
fracturar las calizas o piedras grandes.
NOTA: Cementar las zonas de pérdida falla muchas veces porque el lodo ha fracturado
a través de la lechada no endurecida. Las “columnas de Equilibrio” usualmente evitan
esto, particularmente si los pesos de la columna están cuidadosamente calculados.
Método de columnas equilibradas
1. Si es posible, perfore sin retornos a través de la zona completa de circulación perdida.
2. Salga del hoyo. Mida el nivel de lodo estático utilizando un pedazo de madera (4 in x 4
ft) en una línea de cable o en un medidor de nivel de fluido eco sónico.
3. Seleccione una lechada de cemento. De acuerdo a la severidad de la zona de pérdida,
mezcle y corra de 100 a 300 sacos.
4. Ubique la zona de pérdida, utilizando una técnica apropiada descrita anteriormente.
5. Corra la tubería de perforación y la cementación subpasando la zona de pérdida para
asegurarse de que está expuesta. Limpie del hoyo pasada la zona si se requiere. Jale
hacia fuera el sub cementado a un punto de 50 ft arriba de la parte superior de la zona
de pérdida.
6. Calcule el volumen de la lechada de cemento necesitada para ser ubicada. Mezcle y
bombee el cemento hasta que el volumen desea haya sido bombeado. Desplace la
tubería de perforación a +10 bbl/min. Deje suficiente cemento dentro de la sarta de
perforación para equilibrar el tapón en el anular. Esto eliminará el efecto de tubo-U y
minimizará la contaminación por cemento.
7. Lentamente salga del hoyo. Mientras la tubería es retirada, el nivel del lodo en el anular
caerá y causará un desequilibrio de presión desde la formación hasta el hoyo. Esto
puede causar que los fluidos de la formación o lodo atraviesen la lechada de cemento.
Para evitar esto, añada muy cuidadosamente lodo al anular a través de la línea de
llenado.
Añadir demasiado lodo al anular forzará el lodo desde el anular dentro de la
formación a través de la lechada de cemento antes de que este haya tenido tiempo de
endurecer. La cantidad de lodo bombeado debe igualar al desplazamiento de volumen
(no la capacidad) de la tubería. Si esto se efectúa sin cuidado, puede hacer más daño
que bien. Bombee la cantidad de lodo requerida cada 10 lingadas. Espere por el
endurecimiento del cemento cuando menos 8 horas.
8. Mida el nivel del fluido si este es más bajo o más alto que el nivel estático original, no
intente ajustar. Si este está más alto y otro tapón es corrido, ajuste añadiendo
proporcionalmente menos lodo en tanto la tubería es retirada.
Precauciones
Tapones suaves mezclados hoyo abajo (diesel/bentonita/Bengum). Utilice esta técnica en
contra de fracturas inducidas y para mantener las lechadas de cemento en o cerca del
hoyo del pozo hasta que se endurezcan.
El éxito de los tapones suaves mezclados hoyo abajo depende en hacer que la
cantidad correcta de componentes se reúnan y se mezclen cerca de la zona de pérdida. Se
debe ejercer cuidadosa atención a esto.
Por ejemplo, al utilizar diesel/bentonita, el lodo puede ser bombeado dentro del
anular para establecer la óptima velocidad de flujo de lodo constante antes de que la
lechada de diesel/bentonita salga de la tubería de perforación.
Precauciones
Evite la contaminación de la lechada con lodo base aceite o agua en las líneas de succión y
las bombas. Los siguientes pasos minimizarán la posibilidad de contaminación.
1. Drene todo el lodo aceite fuera de todas las bombas, líneas y tanques antes de mezclar.
2. Utilice agua para lavar en su totalidad las bombas, líneas y equipo de mezclado antes de
mezclar.
INSERTAR TABLA DE FLUJO 1
INSERTAR TABLA DE FLUJO 2