Intro Metodologia Del Aprendizaje

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UNIDAD N° II: METODOLOGÍA DEL

APRENDIZAJE
La Lectura y sus destrezas

Ser Estudiante del Nivel Superior Universitario

Si partimos de considerar que durante la escuela polimodal, media o secundaria


se apropiaron de elementos básicos y orientaciones necesarias para incursionar y
aprobar en las distintas asignaturas; ahora deberá mejorarlos, perfeccionarlos para
convertirse en un buen estudiante de nivel superior universitario, esto implica
aprender a cuestionar, fundamentar, producir con autonomía personal. Recuerden
antes memorizaban y reproducían conocimientos con guía y asistencia directa por
parte del docente, ahora deberán aprender a aprehender con responsabilidad y
libertad y además nadie puede sustituirte en la tarea de estudiar.

Es importante reconocer que para que ocurra el aprendizaje, habrá que hacer
esfuerzos para aprender a aprender, aprender a conocer y para desaprender. Para
qué esto ocurra debe estar motivado, interesado, abierto a las distintas oportunidades
de aprendizaje, desarrollar la capacidad crítica y creativa para buscar y encontrar la
información adecuada, analizarla y aplicarla a cada situación problemática concreta.

Es decir, para aprender un contenido se debe construir una representación o un


modelo mental del mismo; lo que implica un verdadero proceso de elaboración en el
sentido de que el estudiante selecciona y organiza las diversas informaciones que le
llegan por distintos canales estableciendo relaciones entre las mismas.

Lo central en los estudios universitarios es el cambio de actitud, basada en la


responsabilidad y el esfuerzo individual la que posibilitará proyectarse en un futuro,
en un proyecto de vida, para lo cual se pueden señalar tres elementos principales:

1. Tiempo: varias horas del día para estudiar, aparte de las horas de asistir
a clase.
2. Organización personal: se debe ser honesto en relación al lugar que
ocupa el estudio dentro del espectro de actividades cotidianas, sin
perder de vista que debe ocupar un lugar prioritario.
3. Hábitos y técnicas de estudio: las técnicas son herramientas del
trabajo estudiantil que te permitirán aprender con mayor facilidad,
mayor cantidad y menor esfuerzo y tiempo.
4. Lugar: el espacio debe ser adecuado para el trabajo, eliminando loe
elementos de distracción.

El ir incorporando paulatinamente el hábito de estudio diario posibilitará


llevar las materias al día para su mejor aprovechamiento y poder cumplir con las metas
propuestas.
Ahora, se acercan algunas ideas para que sigas reflexionando esta inserción a la
vida de la educación universitaria:

• El estudiante goza de mayor libertad, pero hay que saber manejarla.


• El estudiante debería aprender a tolerar situaciones adversas que se pueden
presentar, porque no todas las materias me agradaran de la misma manera, ni
todo se va ajustar a mis necesidades, conveniencias, intereses, gustos.

• Se debería aprovechar todas las cosas y oportunidades que la Universidad


brinda para hacer uso responsable de las mismas.

• Reconocer y advertir la importancia de adoptar una actitud de autoevaluación


permanente, esto permitirá corregir aspectos negativos.

Ser estudiante de la Universidad, significa ser un sujeto ético, comprometido


consigo mismo, con los otros, con el medio, con la institución, además ser consciente
de las propias limitaciones con el objetivo de recurrir a los medios necesarios para
superarlas y al mismo tiempo poder descubrir las potencialidades que se poseen.
Estudiar es un proceso complejo, en el cual se pone en juego toda la persona,
las facultades se orientan hacia un objetivo. No hay que caer en el error de considerar
que estudiar es simplemente entender y recordar, por el contrario, se necesita
memoria comprensiva, siempre y cuando se parta de las simpatías y gustos, para que
de este modo no aparezca el cansancio, el aburrimiento y los esfuerzos resultan
arduos y espinosos.
Para el autor Hilas E (1.992) el estudio implica “Aprendizaje intencional
sistemático que tiene como propósito el conocimiento comprensivo de la información
que otras han producido para luego poder reelaborarlo de un modo significativo,
original y personal” y para Pablo Freire “Estudiar es realmente una labor difícil. Exige
de quien a ello se propone, una postura crítica, sistemática. Exige una disciplina
intelectual que no se gana a no ser practicándola”.
En el siguiente cuadro se explicita las fuerzas y facultades que se necesitan al
momento de estudiar.
Afectividad Gustar

Inteligencia Saber

Voluntad Estudiar Querer

Toma de apuntes de Fuente Oral

“La tinta más pálida es mejor que la memoria más retentiva”.

Proverbio Chino

Al hablar con cientos de estudiantes que han hecho mal los exámenes hemos
encontrado que uno de los defectos más frecuentes en sus métodos de estudio está
relacionado con la forma de tomar apuntes.

Los Apuntes

Tomar apuntes no es una simple tarea de copista, significa algo más que recoger
información. Deben retener la forma en que el profesor ha organizado e ilustrado la
clase, yendo más allá del registro literal del material a memorizar. Los apuntes habrán
de ayudar a comprender la asignatura.
Los apuntes incluirán todos los puntos del programa. Al tomarlos, la selección
del material estará determinada por su disposición de aprendizaje. Atender a una
disertación o participar en una discusión de clase con clara conciencia de los propios
objetivos, le ayudara a elegir el material a consignar en los apuntes, que no solo
registraran los hechos, sino todo lo que facilite la comprensión y el mejor uso de la
información recogida.
Escuchar y tomar apuntes, al igual que cualquier otra habilidad mejorará
rápidamente con la práctica. Lo importante es aprender tanto como puedas en clase,
porque esto te ayudará a entender mejor y a completar tus tareas fuera de ella.

Recuerda, tu profesor hablará a un promedio de cien palabras por


minuto, mientras que tú puedes pensar aproximadamente cuatrocientas
palabras

por minuto, es decir un promedio de 1 a 4 a favor del que escucha.

Debes recordar que para adquirir la habilidad de tomar apuntes correctos,


necesitas tiempo y esfuerzo así que no te des por vencido y renuncies después de un
esfuerzo inicial a medias. A veces pasan varias semanas para que el hábito de tomar
apuntes correctos se establezca firmemente, por tanto no te desanimes demasiado
pronto, pues esta habilidad es imperativa para tener éxito en los estudios.
Es conveniente ser ágil en la escritura dado que cuando menos tiempo empleamos
en escribir, más tiempo nos quedara para pensar, razonar e intervenir en el tema que se
está tratando. Es por eso que en la toma de apuntes el uso de abreviaturas
(convencionales o personales) resulta de gran utilidad.
Una vez que los apuntes fueron tomados y durante el transcurso del mismo día,
hay que darle una lectura para ordenarlos y completarlos según la necesidad. Si esto no
se hace, con el correr del tiempo se recordará cada vez menos y las notas que fueron
tomadas podrán tornarse incomprensibles.

La toma de apuntes involucra las siguientes operaciones del pensamiento:


Escucha con la mente abierta. No necesitas aceptar todo lo que se dice, pero
mantén una actitud abierta y no dejes que tu oposición te haga resistente a recibir la
comunicación aun antes de que el punto esté completamente desarrollado
Opciones del alumno ante toma de apuntes:

1) Tomar todo: Mal. Debe saltear repeticiones, detalles, sin importancia.


2) No toma nada: Mal. Distracción, desconexión, pérdida de tiempo.
3) Tomar notas: siguiendo las sugerencias para asegurarse escoger el camino
correcto.
Cantidad de notas a tomar:

⮚ Si el contenido de la clase son hechos concretos: gran cantidad.

⮚ Si hay familiarización con el tema: pocas notas, menor cantidad.

⮚ Si no hay bibliografía: mayor cantidad, notas completas.

Sugerencias para mejorar la toma de apuntes en función de los momentos de la


clase:

1er Momento:

a) Preparación previa a la toma de apuntes: Actitudes del alumno:


Ubicarse bien: De la mitad hacia delante donde se puede oír y ver con facilidad.
Generalmente los alumnos de las primeras filas tienen mejores apuntes.

1) Ser Puntuales: Faltar o llegar tarde implica tener apuntes incompletos, pierden la
ilación de los temas, es importante antes de comenzar la clase leer lo de la clase
anterior para estar en tema.
2) Ser Prolijo y Ordenado: Apuntes ordenados son causa y efecto del orden de
nuestros pensamientos.
3) Guardar Bien los Apuntes: Agrupar por materias en carpetas con hojas móviles y
grandes.
4) Prepárate físicamente. Disminuye las dificultades visuales o auditivas sentándote
cerca del profesor, en lugar de la parte de atrás del salón y mantén una actitud
cómoda y alerta, en vez de estar inclinado casi acostado en tu asiento.
5) Prepárate mentalmente: mantente atento en clase haciéndote preguntas como si
fuera un examen, comparando el contenido de la clase con el del libro,
interviniendo en las discusiones en clase, etc. Concéntrate en el profesor, no en
el piso o el techo, o en la persona sentada junto a ti.

2do Momento:

b) Toma de apuntes durante la clase:


Colocar fecha e indicar los apuntes de las diferentes materias por separados.

Elige el modelo que vas a adoptar según el contenido de la materia y deja los
espacios suficientes para aclaraciones y referencias necesarias (ver modelos).
Asegúrate de que anotas correctamente todos los nombres, fechas, lugares,
fórmulas, ecuaciones, reglas, etc.

No escribas oraciones enteras, utilizar frases sintetizadas de las mismas por lo


tanto selecciona el vocabulario.

Emplea una hoja de apuntes para cada hora de clase.

Siempre que sea posible, trata de realizar tus notas en forma de esquemas,
usando tu propio sistema de enumeración, de hacer esquemas y marcas para
distinguir los puntos de mayor y menor importancia.

Usa símbolos para destacar ideas en las que el profesor pone énfasis, anota los
ejemplos, ya que aclaran ideas que sin los mismos te parecerían abstractas.

Atiende los señalamientos especiales indicados por el profesor: Ej. “Esto es un


error común”. “Esto es importante”. Enumeraciones: “Los cuatro pasos del proceso
son”.
Advertencia sobre la idea principal.
Palabras Señal

❖ En una exposición oral anticipa el señalamiento verbal del profesor.

❖ Suelen preceder a una idea principal en un texto escrito.

A continuación se presentan algunas de ellas:

Primero, segundo Ante todo

Después Además

Por último También

Por otra parte Especialmente

Incluso Sobre todo


Esto es importante Es decir

Lo esencial Resumiendo

Aunque No obstante

Por tanto En síntesis

Se resalta De igual manera

Registra solo las ideas fundamentales, las palabras claves y los datos
importantes. Al terminar la clase, planea una sesión de lectura sobre la materia tan
pronto como sea posible. Repasa los apuntes cada tanto durante el cuatrimestre.
3er Momento:

Complementación posterior del Apunte:

a) Revisa y escribe tus notas lo más pronto posible después de la clase, pero no
la vuelvas a copiar. Usa los márgenes para poner abreviaciones, aumentar
puntos omitidos y corregir errores. (Ver cuadro aparte).
b) Lee tus apuntes cuidadosamente, para asegurarte que los entenderás sin
dificultad en lo futuro. Toma tu tiempo para aclarar el material que este casi
ilegible o parcialmente confuso.
c) Conforme vayas leyendo tus apuntes, subraya o marca de alguna forma los
puntos importantes o ideas que quieras dar atención especial cuando estudies
mas tarde para exámenes.
d) Coloca subtítulos a los apuntes ya confeccionados
e) En el espacio o modelo previamente determinado:
1. Realiza una síntesis de la clase.
2. Coloca notas sobre la bibliografía.
3. Anota preguntas a formular al profesor.
4. Anota opiniones personales.
5. Anota opiniones o datos obtenidos de los libros.
Modelos - Distribución de la Hoja

A-

Apuntes de clase

Condensaciones

B-

Apuntes de clase

Bibliografía

C- Bibliografía
Apuntes de
clase Condensaciones

D-

Definición Títulos. Ejemplos


Referencias:

T. Desarrollados Para ser llenado en:

Enunciados - Repaso

- Complementación posterior
Temas
- Situación de examen
Subtemas
Con:
- p. claves - Definiciones nuevas

La Lectura

Vamos a comenzar este tema realizando la siguiente Actividad:

TEST INICIAL
Tienes únicamente dos minutos para realizar las siguientes actividades:

1. Lee todo antes de comenzar algo.


2. Escribí tu nombre en el extremo superior derecho de la hoja.
3. Hace una circunferencia alrededor de la palabra “Nombre”, en la oración
anterior.
4. Dibuja cinco pequeños cuadrados en la punta izquierda de esta hoja.
5. Pone una cruz en cada una de los cuadrados anteriores.
6. Dibuja una circunferencia alrededor de cada uno de los cuadrados
anteriores.
7. Firma este papel al final de la hoja.
8. Traza una circunferencia alrededor del número 7.
9. Escribí tu domicilio al lado de tu firma.
10. Dibuja un rectángulo alrededor de la palabra izquierda del ítem 4.
11. Escribí una x en la punta inferior izquierda de esta hoja.
12. Encierra la x que acabas de dibujar dentro del triángulo.
13. Al llegar a este punto, decís tu nombre en voz alta.
14. Si hasta este punto realizaste todas las actividades en forma debida, grita
“¡Realice!”.
15. Cuenta del 1 al 10 en tu voz normal.
16. Traza tres circunferencias en algún lugar libre de esta hoja.
17. Escribí una x adentro de cada una de ellas.
18. Si llegaste a este punto, grita “Ya casi gane”.
19. Decir en voz normal: “Me falta un solo ítem”.
20. Ahora puedes comenzar: hace únicamente la actividad indicada en el ítem
número dos.

Comprensión Lectora

Muchos estudiantes tienen que asimilar cada día una cantidad constante y creciente
de información impresa, parte de ella es superflua para el trabajo y como tal se debe
identificar y descartar; mientras que otra parte de la información es esencial para las
actividades de cada día.
Tal información es de importancia decisiva y debe ser absorbida y empleada
profesionalmente; esta necesidad de la lectura profesional es bifronte:

1) identificar la “basura” y descartarla inmediatamente,

2) absorber rápidamente el material válido e importante con una buena


comprensión y retención.

Seguramente muchas veces no puede asignar el tiempo adecuado a la tarea de leer y


evaluar todo lo que pasa por su mesa, y puede que se sienta abrumado por las palabras.

Leer es una actividad muy compleja, que en condiciones normales, practicamos con
frecuencia como una tarea relativamente simple y fácil; donde los procesos mentales
involucrados se automatizan haciendo inaccesible la conciencia reflexiva del sujeto/lector.
La complejidad del proceso atiende no solo al texto, sino también a la función y
actividad del receptor/lector; en este sentido la finalidad del que lee no es solo recuperar el
discurso del escritor en cuanto tal, sino usarlo para integrar y extender el sistema del propio
conocimiento y de experiencias.
En el marco de estas consideraciones, vemos que la actividad de lectura de los
estudiantes requiere de valores específicos necesarios de reconocer, ejercitar y sistematizar
como habilidades permanentes en el oficio de estudiar e investigar.

“La lectura se puede describir como un proceso profundo de síntesis interpretativa


más allá de la superficial decodificación literal”.

Esto requiere familiarizarnos con estrategias cognitivas y metacognitivas, que nos


permitan alcanzar niveles de comprensión superiores en el manejo de los textos científicos
para acceder a la información de las diferentes disciplinas.

A tener en cuenta, la lectura es una actividad intelectual individual, es decir cada uno
lee lo que realmente le interesa y a su propio ritmo. En el acto de leer se pone en juego
conocimientos previos, que influyen en la comprensión, cuando leo debo entender el sentido,
el significado del texto.

En esta tarea de leer, el estudiante pone en juego lo que conoce acerca de:

El tema del que se trata el texto, es decir los conocimientos previos.

El tipo de texto (expositivo, informativo, argumentativo, narrativo.

El conocimiento del vocabulario.

El buen lector tiene en cuenta lo siguiente:


❖ Interpreta las palabras escritas.

❖ Comprende el sentido de las mismas.

❖ Entiende las ideas y los mensajes del texto.

❖ Compara las novedades que el autor ofrece con los conocimientos previos.

❖ Valora críticamente lo leído para asumirlo o rechazarlo.

Para todo estudiante la lectura es una herramienta básica, por las siguientes razones:

Porque es la mejor forma de construir conocimientos.

Porque el estudiante que lee bien, dedica tiempo a la lectura, comprende lo que lee y
tiene mayores logros en el aprendizaje.

Porque estimula la imaginación y el razonamiento.

Porque mejora el vocabulario y la escritura, en cuanto a redacción y ortografía.

Porque la mayor parte de la información se encuentra escrita en distintos soportes.

De ustedes depende el criterio de


selección y la necesidad de
estudiar y explorar un
texto para aprender.

Niveles en la Comprensión Lectora

Durante este proceso lector pasamos desde un nivel superficial a un nivel de mayor
complejidad:
1) Decodificación significa descifrar un código; en este caso se trata de dar un significado a
las letras impresas. Se admiten dos procesos decodificadores: uno, consiste ene asociar
la palabra escrita con el significado disponible en la memoria del sujeto. Es un rápido
reconocimiento visual de palabras escritas activando directamente su significado. El otro
proceso que cambien se denomina “recodificación” implica transformar las letras
impresas en sílabas y en sonido para activar así el significado.
Ejemplo: inmensurabilidad

Para decodificar observo la composición de la palabra:


2) La comprensión literal consiste en combinar el significado de varias palabras de forma
apropiada para formar proposiciones. La comprensión literal se atiene a la información
explícitamente reflejada en el texto.
3) La comprensión inferencial proporciona una comprensión más profunda del texto y va
más allá de lo explicitado en el texto. El lector mediante inferencias, elabora una
representación mental más integrada y esquemática a partir de la información expresada
en el texto y de sus conocimientos previos.
4) La metacomprensión o monitoreo es la conciencia y control que el lector tiene de su
proceso de comprensión. Consiste en establecer unas metas para la lectura, comprobar
sí se están alcanzando y rectificar oportunamente en su caso. Abarca, pues, procesos de
planificación, supervisión y evaluación.
Conocer las diferencias entre los buenos y malos lectores resulta de gran utilidad
precisamente para diseñar los procedimientos de intervención a fin de mejorar al
comprensión lectora (Sánchez, 1.988). Así los lectores pueden presentar dificultades en los
procesos de decodificación, acceso léxico, análisis sintáctico, integración de proposiciones,
confección de esquema y resúmenes, elaboración y asimilación de la información,
planificaron y control de la comprensión. Se sabe que el buen lector realiza estos procesos
más rápida y eficazmente consumiendo menos recursos atencionales, que quedan así
disponibles para otras actividades.

Factores que Influyen en la Comprensión Lectora

El nivel de comprensión alcanzada depende de diferentes factores:


Las características del texto, su temática y dificultad. Cada tipo de texto presenta una
estructura y organización propia. Cuando el alumnado se enfrenta a un texto tiene que tener
en cuenta las características del tipo de texto que es. Por ejemplo, es distinto leer un cuento,
un informe científico, un fragmento histórico o un artículo de periódico.
Los conocimientos previos que tenga el alumnado sobre el tema. El disponer de
algunos esquemas en relación con la estructura cognitiva del alumnado para poder activar
posteriormente las relaciones conceptuales que tienen, fruto de la propia experiencia, puede
facilitar mucho la comprensión y asimilación del mensaje del texto. Las relaciones bien
establecidas y amplias entre los diferentes contenidos y unos esquemas cognitivos bien
estructurados son condiciones necesarias para una buena comprensión. Todos hemos
experimentado lo diferente que resulta leer un texto que trata de una temática familiar frente
a otra desconocida.
Los objetivos, propósitos y expectativas del estudiante. Al enfrentarse ante un texto la
persona que lee va con unos determinados objetivos y expectativas desde los cuales
interpreta el mensaje. Por ejemplo, pasar hojas de periódico leyendo los titulares de las
noticias más importantes durante unos minutos, es un objetivo distinto a detenerse en los
suplementos. Leemos un texto de forma distinta cuando nos van a examinar de su contenido
posteriormente, cuando vamos a comprar el objeto que describe o cuando vamos a ponerlo
en funcionamiento siguiendo las instrucciones.
Los procesos cognitivos, metacognitivos y lingüísticos que la persona que lee realiza
durante la lectura. Estos procesos comprenden: atención y concentración en el texto,
identificación y reconocimiento de palabras, análisis sintáctico – semántico y pragmático del
texto, elaboración y almacenamiento de la memoria a largo plazo, recuperación de la
información en la memoria operativa y planificación y control de la comprensión que se
analiza con más detalle posteriormente.
Unos tipos de factores que condicionan la comprensión, según hemos comentado, son
los procesos cognitivos y metacognitivos que el sujeto realiza al leer. Tales procesos requieren
distinto grado de conciencia, atención, planificación y control por parte del sujeto. Así,
normalmente los componentes fonológicos, léxicos y sintácticos se producen
“automáticamente” ajenos a la conciencia del sujeto; mientras que los niveles de
comprensión de enunciados e interpretación de textos exigen más recursos cognitivos.
Cuando leemos un texto ejecutamos muchas operaciones mentales, y para poder
alcanzar el significado del texto resulta necesario que una parte de tales operaciones pasen
desapercibidas al sujeto y sin exigirle recursos atencionales.
La lectura es una actividad “estratégica”. El buen lector pone en juego unos
procedimientos o estrategias para obtener un resultado. Tales estrategias o destrezas son
susceptibles de ser mejoradas, de convertirse en objeto del proceso de enseñanza –
aprendizaje, con el fin de optimizar en los lectores su nivel de comprensión. Si la comprensión
es la meta de la actividad lectora es importante que los lectores evalúen si se está logrando.
Por ejemplo, un lector experto planifica la actividad lectora, es selectivo al dirigir su atención
a los diversos aspectos del texto, supervisa su propia comprensión y afina progresivamente la
interpretación del texto.

La Comprensión lectora supone tres fases:

✔ la lectura exploratoria

✔ la lectura analítica
✔ la representación de la información.

Pre-lectura o lo que se hace antes de comenzar la lectura exploratoria

• Captar la idea general del tema en cuestión, ver de qué trata y los aspectos en que se
desglosa.
• No es necesario leer todo el tema o conjunto de materia a estudiar, se trata de una
lectura rápida.
• Consiste en dar una ojeada, un vistazo a la materia.
• Determinar los objetivos de la lectura: (Para aprender -Para obtener información
precisa- Para seguir instrucciones -Para revisar un escrito- por placer- Para leer en voz
alta).
• Conviene conexionarlo con las partes anteriores del tema, temas anteriores, o los
conocimientos que sobre el mismo se poseen.
• Activar los conocimientos previos relacionando los propios con los contenidos del
texto.
• Es una fase breve, no más de 5 minutos.
• Se debe leer, títulos, subtítulos, palabras resaltadas en cursiva o negrita, recuadros,
resúmenes.
• Descubrir la estructura general del texto.
• Hay que dar un vistazo a gráficos, fotos, ilustraciones.
• Observar títulos, epígrafes y materiales no verbales (tener en cuenta que un mapa,
una grafía suele expresar, un cuadro cronológico etc., pueden proporcionar tanta
información como la lectura de varias páginas Hay que observarlos).

Actitudes frente a la lectura exploratoria

¿Qué debo hacer cuando leo?

✔ Centra la atención en lo que estás leyendo, sin interrumpir la lectura con


preocupaciones ajenas al libro.

✔ Ten Constancia. El trabajo intelectual requiere repetición, insistencia. El lector


inconstante nunca llegará a ser un buen estudiante.
✔ Debes mantenerte activo ante la lectura, es preciso leer, releer, para que
posteriormente en la lectura analítica pueda extraer lo importante, subrayar
esquematizar, contrastar, preguntarse sobre lo leído con la mente activa y
despierta.

✔ No adoptes prejuicios frente a ciertos libros o temas que vayas a leer. Esto te
posibilita profundizar en los contenidos de forma absolutamente imparcial.

✔ En la lectura aparecen datos, palabras, expresiones que no conocemos su


significado y nos quedamos con la duda, esto bloquea el proceso de
aprendizaje. Por tanto no seas perezoso y busca en el diccionario aquellas
palabras que no conozcas su significado.

(1º Etapa) Lectura Exploratoria: Examinar y Preguntar

Supongamos que un estudiante se sienta a la mesa de estudio y toma un libro de


texto de la materia que está preparando. Es la primera vez que toma ese libro, y debe
comenzar a leerlo. ¿Qué es lo primero que debe hacer?
El método Survey establece que, antes de comenzar a leer el libro detalladamente,
debemos hacerle un examen general lo mejor posible.

Examinar

Examen general de un capítulo: Una vez hecho el examen general del libro, y
suponiendo que estamos por leer un capítulo especial, es conveniente hacer también un
examen general del mismo. El propósito de este examen que proponemos, al igual del
practicado en el libro, es explorar el terreno antes de internarnos en él en demasía, sin
orientación.

En el examen de un capítulo debemos prestar especial atención a los títulos y subtítulos


que lo encabezan.

¿Qué es un título? Los autores de los libros de textos consumen mucho tiempo
pensando en los títulos, poniéndolos en los lugares adecuados y haciéndolos de tal manera
que expresen lo más posible y con la mayor claridad, lo que se trata en el libro, en un capítulo
o en una sección de un capitulo, ya que los títulos expresan casi siempre el tema central, la
idea o concepto más importante de un capítulo o sección; es decir, orientan sobre lo más
significativo e importante que hay que estudiar. Si el estudiante pasa por alto los títulos, no
los lee, no los interpreta atentamente, y no se fija suficientemente en ellos; está
desaprovechando ese cuidadoso trabajo del autor, y lo que es más importante desaprovecha
las ideas más útiles y significativas del contenido del libro. Porque debe tener en cuenta que
los títulos indican la organización del autor, como está dispuesta la materia y cuál es la
disposición de los temas, y, como ya dijimos, siempre ponen en claro cuál es el tema o idea
principal de cada capítulo o sección. Un examen cuidadoso de los títulos de cada capítulo nos
da una primera comprensión del mismo.

Asimismo, hay que prestar atención al orden de los títulos. La mayoría de los libros
emplean dos o tres órdenes de títulos. Si utiliza uno sólo y principal, generalmente se
encontrará en un renglón solo:

Luego los sub-títulos que están en el mismo renglón de lo que sigue a continuación,
esto es, el texto. Indican qué temas están subordinados al tema principal el cual se expresa
en el título principal.

Hay libros que utilizan un tercer orden de títulos: los sub-sub-títulos, que indican un
tema subordinado a un sub-título, o una idea importante subordinada al tema que se expresa
en el subtítulo.

Estos sub-sub-títulos van incluidos en el mismo texto, generalmente con un tipo de


letra (tipografía) diferente al usado en el texto mismo (cursiva, bastardilla).

EXAMINAR UN LIBRO: Al hacer el examen de un libro, se comienza leyendo el prólogo.


Prólogo es una tipografía distinta del resto del párrafo, es un sub-sub-título, que indica
un concepto importante que hay que retener y estudiar, o un concepto que el estudiante lee
por primera vez.

En consecuencia, leer con atención y retener los distintos órdenes de títulos, es la clave
para comprender la organización de los temas, cuál es el tema principal, cuales son los temas
subordinados a los temas y cuáles son los temas o conceptos importantes subordinados a los
temas subordinado al principal.
Una lectura cuidadosa de los títulos, sus significados y el orden en que están dispuestos,
nos da una cabal comprensión de que temas trata el autor, cómo lo organiza, cuales son los
principales y los incluidos.

Un estudio de los títulos del capítulo, antes de entrar en su lectura detallada, es una
formidable orientación sobre el contenido del mismo, y sobre lo que se puede esperar del
mismo.

También es bueno mirar por encima algunas frases, algunas fotografías, gráficos, etc.
Para obtener cabalmente una idea general antes de proceder a la lectura profunda.

Una vez realizadas estas tareas, en una 2 o 3 horas podemos dar por concluido el
examen general previo del libro. Qué es lo positivo de este examen?. Como ya dijimos, el
propósito de explorar el terreno antes de introducirnos sin orientación; es el mismo caso de
cuando se consulta un mapa de caminos antes de emprender el viaje. Sucede que muchos
estudiantes no le dan importancia al prólogo, pasan a la ligera el índice, no saben la función
de los títulos y subtítulos como organizadores de todos los temas que se tratan, no saben que
el autor nos indica la organización, importancia y disposición de los temas incluso con la
tipografía en que se compone el texto; en suma: no saben ni comprender el esquema inicial
general que, mediante la utilización de todos los puntos antes nombrados, el autor nos brinda
para ayudarnos a comprender cabalmente el libro de texto.

El propósito de este examen del libro, antes de comenzar a leerlo detalladamente, es


comprender sus orientaciones generales. El estudiante que no hace, o no está capacitado
para este examen previo, generalmente lee el libro como si fuera una novela de
entretenimiento, lo lee “de corrido”, sin ninguna orientación, y su aprovechamiento del texto
es muy inferior.
Preguntar

Las preguntas son una gran ayuda para el estudio. Sucede que las personas recuerdan
más y mejor lo aprendido mediante preguntas, que lo aprendido de memoria o leído
simplemente. E incluso se aprende todavía más cuando las preguntas son pensadas y
formuladas por la misma persona que está leyendo y estudiando.
Es muy distinto recordar de memoria lo estudiado, que recordarlo explicando y
resumiendo en dos o tres preguntas fundamentales; esto último es más fácil ágil y
provechoso. Las preguntas ayudan a aprender, a recordar, profundizar en el estudio, porque
hacen que lo que estamos estudiando tome significado preciso y específico. Como respuesta
al cuestionario; las preguntas no permiten que nos perdamos en la imprecisión, en la falta de
profundidad al estudiar.
La manera en que se formulan las preguntas, nos hacen pensar acerca de que es lo
estamos estudiando, lo cual hace que el libro que se está leyendo tome un significado preciso.
Pero además, y esto es un punto de vital importancia, las preguntas nos hacen pensar acerca
de qué es lo que queremos saber de lo que estamos estudiando, encausan nuestro
pensamiento, lo amplían, lo modifican, incluso pueden hacernos buscar otros conocimientos,
que el libro que leemos no satisface, si lo sostenemos a buen interrogatorio,
Las preguntas revelan nuestro propósito de saber, y mediante ellas, podemos seguir
sabiendo, en la medida que preguntar es suscitar nuestra potencia de pensamiento, mientras
que si no nos acostumbramos al hábito de leer y estudiar preguntando, y leemos y estudiamos
de memoria y corrido, nos estancaremos, nos detendremos en eso que estamos leyendo y
nada más que en eso.
El estudiante que se acostumbra a mal estudiar y leer, sin elaborar paralelamente una
lista de preguntas que resuma y profundice lo que está leyendo. No usa las preguntas
mientras estudia y pierde dos cosas:
1. No puede ir conociendo cómo va progresando en el estudio, porque le falta esa guía
fundamental de repaso y auto examen que es una lista de preguntas sobre lo que está
leyendo. Como consecuencia de esto, consumirá mucho más tiempo para repasar, que el
que consumiría utilizando una lista de preguntas, porque tendrá que repasar “de
memoria” todo. Repasar mediante preguntas es mucho más rápido y seguro.

2. No progresará realmente en el estudio, porque todo lo que sabe lo sabe de memoria,


como un calco del libro, y no ha sido capaz de elaborar una lista de preguntas sobre lo
fundamental del tema que lee, por lo tanto no puede profundizarlo, ampliarlo, discutirlo
si es preciso. Y si el estudiante no se acostumbra a estudiar preguntando, tampoco podrá
contestar los interrogantes que el mismo libro que está leyendo le propone. No
progresará.
Es siempre útil descomponer el capítulo o sección de capítulo en preguntas, ya sea con
un fin más profundo, que es estudiar verdaderamente, esto es, capaz de formular juicios en
base al interrogatorio previo a que se ha sometido al libro.
Preguntas del lector: Esta técnica de PREGUNTAR cuando se está leyendo y estudiando
suscita a su vez varias preguntas: En qué medida son buenas las preguntas? Cómo puedo
hacer uso de ellas? De dónde procederán? Cómo las hago? Cómo se yo que van a contestarse
las preguntas que formule a medida que voy leyendo? Quién debe formularla: el autor del
libro, o yo, el lector? Cuáles son más importantes, más valiosas?
¿Quién formula las preguntas? La fuente más importante de preguntas es el lector mismo.
El es el que está estudiando y debe ayudarse con preguntas. El autor, como veremos más
adelante, también colabora con este propósito del lector, incluyendo al final o al principio de
cada capítulo, una lista de preguntas que debe consultarse. Pero es el lector quién debe
hacerse las preguntas, porque él es el que está estudiando.
Cada vez que se vea un título, o un subtítulo, o un encabezamiento, de inmediato deben
surgir preguntas a la mente: ¿Qué significa la palabra o frase del título?. Una vez determinado
el significado por el diccionario, ver su relación con lo que trata el capítulo.
Nunca quedarse con la repetición memorística, sino buscar el porqué de las cosas y
demostrar nuestro propósito de saber esto es PREGUNTAR.
Sin ninguna duda, a muchos estudiantes se les aparecerá en este momento el siguiente
problema “No estoy acostumbrado a hacer preguntas: ¿“Cómo las hago?” La respuesta es:
“Exige práctica”.
Descomponer un texto en preguntas es una ayuda inestimable para comprenderlo
cabalmente, y, por otra parte para repasar y recordar lo leído, sólo nos bastará recordar las
preguntas para recordar fácilmente lo más importante de lo estudiado.
Al principio hay que acostumbrarse a formular las preguntas por escrito, después que se
examina un capítulo, o una parte del mismo. Este procedimiento es muy lento, consume
mucho tiempo, pero puede ayudar a adquirir esa técnica.
Cuando se ha cultivado suficientemente esta técnica de hacer preguntas por escrito,
una vez que se termine de leer, se puede entonces pasar a pensar las preguntas a medida de
que se va leyendo, mientras se lee, y a su vez suscitarán otras. Esto exige mucha práctica y
dedicación.
Preguntas del autor: (cuestionarios al principio o final del capítulo).
A veces, los autores usan preguntas como parte de su técnica de enseñanza. Ponen una
lista de preguntas al principio de cada capítulo o sección, que hay que ir contestando a medida
de que se va leyendo. A veces, estas preguntas van al final del capítulo. Hay que prestarles
mucha atención a estos cuestionarios que propone el autor. Muchas veces el estudiante lo
pasa por alto, sin darle importancia.
Estos cuestionarios que incluye el autor tienen un gran valor. Hay que leerlos luego de
examinar el capítulo, y contestarlos. Según cómo los contestemos, esto es, si lo hacemos de
forma completa, incompleta o deficiente, nos daremos cuenta si hemos estudiado bien,
regular, o necesitamos estudiar de nuevo.
Luego hay que leerlos por segunda vez, antes del examen y para prepararlos. El autor
ha condensado en estos cuestionarios lo más importante y significativo del capítulo; lo que
hay que saber, y nos proporciona un medio magnífico para que sepamos qué es lo que hemos
aprendido, y qué es lo que nos falta.
Auto examen o autoevaluación: Otro valor inestimable de la técnica de preguntar
mientras se va leyendo y estudiando, consiste en el examen que se hace uno mismo
(autoexamen) a medida de que va elaborando y contestando preguntas. Para comprobar que
es lo que ha aprendido, cómo va aprendiendo, cuál es el avance o progreso que lograremos
en el estudio y cuáles son las dificultades que tenemos para avanzar.
Ya sea elaborando y contestando preguntas hechas por uno mismo, ya sea contestando
las que incluye el autor o el profesor de la materia, de cualquier forma, uno se va examinando
a si mismo.
Las PREGUNTAS facilitan un medio de examinarse a si mismo, antes de que lo haga la
mesa o tribunal de examen. Y si uno se examina antes de que lo haga el tribunal, lo hará
mucho mejor cuando llegue la hora del examen formal.
Para este último punto, hay autores que incluyen en sus libros dos listas de preguntas:
una, para estudiar y repasar; y la otra compuesta de preguntas similares a las del examen.
Esto es una ayuda inestimable.
Esto es lo más importante que hay que decir sobre el segundo paso PREGUNTAR, del
método Survey Q 3R. el estudiante no debe olvidar que las preguntas facilitan enormemente
el estudio, y que éste será mejor cuanto más preguntas hagamos, y cuanto más completas
sean. ¿Cuándo debemos practicar el autoexamen?. Es conveniente determinar
en qué momento de la lectura debemos realizar el autoexamen.
Si ya tenemos un conocimiento previo del libro o de los temas que se desarrollan en el
mismo, podemos practicarnos el auto examen cada vez que terminemos un capítulo, si no
son muy extensos. Por el contrario, si el libro es complicado y su comprensión nos resulta
difícil, el autoexamen deberá realizarse en períodos más cortos, por ejemplo, cada vez que
terminemos un subtema específico de cada capítulo.
De cualquier forma, nunca dejemos el autoexamen para cuando terminemos de leer el
libro; éste es un período demasiado extenso y no recordaremos lo suficiente.
Valor de la BIBLIOGRAFIA para preguntar. ¿Cómo se yo que mis preguntas van a
contestarse?. Este problema aparece con frecuencia, en especial en los estudiantes no
acostumbrados a formular preguntas cuando leen. El problema en realidad, consiste en ser
capaz de formular preguntas adecuadas a la profundidad e importancia del tema que se está
leyendo, de manera que no sean preguntas inapropiadas, preguntas que no van a contestarse
en el libro, ni tampoco en nuestra propia elaboración del tema.
Para ser capaces de formular preguntas apropiadas, debemos solicitar el auxilio de la
bibliografía. Las preguntas adecuadas son las que tienen una base de conocimiento seguro
sobre el tema. Además del conocimiento que nos proporciona el mismo libro está el que nos
puede proporcionar la bibliografía sobre el tema, esto es, todos los otros libros posibles que
tratan al mismo tema. Los autores de los libros de texto incluyen al comenzar o finalizar un
capítulo, o al final del libro, una lista de libros que son los que se ha consultado para escribir
el libro. Esta bibliografía debe ser consultada por nosotros para fundamentar nuestras
preguntas y ampliar el dominio del tema. Además, podemos recurrir a otros libros que no
forman parte de la indicación del autor; los encontraremos en cualquier buena biblioteca y
nos ayudarán aún más a formular preguntas buenas y apropiadas.
¿Cuál es el momento apropiado para formular una pregunta? A medida que vamos
leyendo. El momento preciso para preguntar es cuando observamos que nuestra compresión
no tiene claridad, esto es, dudamos y nos sentimos inseguros de nuestra lectura. Cuando nos
damos cuenta que no entendemos, éste es el momento justo para formular una pregunta,
tanto para darle más precisión y claridad a lo que dice el texto como para dilucidar, mediante
nuestro razonamiento, algún aspecto oscuro y dudoso de la exposición del autor.

(2º Etapa) LECTURA ANALITICA


Durante el proceso de comprensión, el lector realiza algunas tareas básicas que le
permiten asignar significado proposicional a sucesiones de párrafos, capítulos y cualquier
unidad extensa del lenguaje:
a) Obtener las Ideas Principales.
b) Descubrir las jerarquías que las ideas guardan entre sí (obtener detalles importantes).
c) Contestar preguntas específicas (sean de vocabulario o de tipo inferencial). d) Valorar
y Criticar.
e) Aplicar lo leído.

El Párrafo como Unidad de Pensamiento

Denominamos al párrafo unidad de pensamiento, cuya estructura gira en torno a una


sola idea, expresada por el autor. Este brinda la secuencia en que se estructura cada párrafo.
De ahí que el uso del punto y aparte, nos dice que hemos llegado al fin de la exposición y
desarrollo de una idea.

La Idea Principal y su Localización

Esta idea esencial vendrá contenida en una de las varias frases del párrafo, la
denominamos frase principal, mientras las demás son frases secundarias o subordinadas, que
no harán más que ampliar, matizar o ejemplificar diferentes aspectos de esa idea
fundamental contenida en la frase principal.
Por regla general esta frase podremos encontrarla:

a) Al principio del párrafo;

b) En medio del párrafo;

c) Al final del párrafo.


a) Cuando la frase principal viene situada al principio del párrafo el lector apenas si tendrá
problemas para localizarla, y la lectura podrá hacerse con gran rapidez y
aprovechamiento. Una vez localizada la frase principal, todo el resto no será más que
ampliación, matización, etc. Por tanto, podremos agilizar enormemente nuestra lectura,
con el consecuente ahorro de tiempo.
b) Cuando la frase principal viene situada al centro del párrafo nos encontramos con lo que
podríamos llamar una trimembración del mismo, es decir, con un párrafo que podemos
considerar como dividido en tres partes fundamentales.
La primera parte del párrafo será una especie de preámbulo o introducción a través
de la cual llegaremos a la idea principal. Podríamos decir que en esta primera parte el
autor prepara el terreno para desembocar en el punto álgido del párrafo: la idea esencial.
Obviamente tendremos que mantener una actitud centrada y atenta durante la lectura
de este preámbulo para que no nos vaya a pasar desapercibida la idea central. La tercera
parte del párrafo aclara, matizará, etc., la idea principal, expresada en la segunda parte
del párrafo. En esta tercera parte nuestra lectura puede ser ya un poco más ágil y rápida.

c) Cuando la frase principal viene situada al final del párrafo hay que leer con sumo cuidado
y atención. La frase principal será entonces la conclusión general de todo lo dicho a lo
largo del párrafo: se van haciendo una serie de razonamientos parciales - más o menos
morosos- que desembocan en la conclusión definitiva del párrafo: la frase principal será
el punto álgido de la argumentación; ella completará todo el razonamiento precedente
otorgándole su plena significación.

Exprofeso hemos hablado aquí sólo de los párrafos normales o más frecuentes.
Indiscutiblemente existen distintas modalidades y variantes. Por ejemplo, podemos
encontrarnos con párrafos en los que se contenga más de una idea principal o párrafos en los
que ni siquiera aparezca la idea principal, como son los llamados párrafos de transición, los
cuales tienen como único objeto el conectar armoniosa y rítmicamente un párrafo con el
siguiente. Pero consideramos que con el estudio detenido del párrafo normal podremos luego
reconocer sin ningún problema los párrafos anormales o menos frecuentes. Lo único que hay
que hacer es ejercitarnos adecuadamente; enfrentarnos a un escrito y ponernos a localizar la
idea principal de cada uno de sus párrafos. Este es un ejercicio que debemos realizar cada uno
por nuestra cuenta; al final se verán los positivos resultados que se obtienen; nuestras
lecturas se harán increíblemente ágiles y nuestra comprensión será sencillamente óptima, ya
que conectaremos directamente con el pensamiento del autor.
Para ayudarnos perfectamente a localizar las ideas esenciales con mayor rapidez y
seguridad tendremos en cuenta lo siguiente:

⮚ Que la frase principal siempre será la más genérica de todas las frases del párrafo; será
aquella frase donde se nos exprese la afirmación más amplia y abstracta; será siempre la
conclusión y el resumen de las demás.

⮚ Que la frase principal siempre será la frase imprescindible dentro del párrafo: si la
quitamos, el párrafo aparecerá como truncado, el pensamiento del autor quedará
evidentemente incompleto.

⮚ Esto no sucede con las frases secundarias o subordinadas: si llegamos a suprimir una de
estas frases u oraciones completas veremos cómo apenas si variara el sentido global del
párrafo: perderemos, eso sí, algunos matices, pero nada más: el pensamiento del autor
puede captarse sin ninguna dificultad en plenitud de su sentido.

Ideas Secundarias
Es conveniente también que le prestemos atención a las frases secundarias y al modo
como éstas pueden ir ampliando, matizando, etc., la idea principal.

Estas ampliaciones y matizaciones se realizan a través de las frases secundarias del


modo siguiente:
Expresando con distintas palabras la misma idea de la frase principal; con ello se
refuerza el sentido de la misma y se explícita aún más, para que no pueda haber
equívocos. Son las frases secundarias repetitivas o reiterativas.

Expresando aún más claramente cuál es el verdadero sentir del autor al rechazar de
plano otro modo distinto de pensar con mayor o menor vehemencia. A estas frases
secundarias podríamos llamarlas de contraste, ya que en el contraste de ideas se
fundamenta su mecanismo de acción y su operatividad dentro del párrafo.
Ejemplificando la idea principal a través de detalles y casos concretos. Estos ejemplos
suelen ser muy útiles ya que nos ayudan a comprender cabalmente, el sentido real
de la idea esencial: nos llevan del terreno de lo genérico y abstracto al de lo concreto,
siempre de más fácil asimilación por parte del lector.
Razonando o argumentando con detalle el contenido de la frase principal. Por medio
de estas frases secundarias el autor nos hace comprender más profundamente las
ideas que expresa en la frase principal al mostrarnos claramente sus fundamentos
lógicos y teóricos.
Advertir adecuadamente cuál es la importancia real de cada frase secundaria dentro
de la estructura global de cada párrafo, posibilitará el que leamos con mayor ligereza
aquellas frases que apenas si introducen matices de verdadera relevancia con
respecto a la idea central del párrafo. Esto nos permitirá un ritmo alterno de lectura
de acuerdo a la mayor o menor dificultad o importancia de las distintas frases
subordinadas.
Palabras Señal

Existe una serie de palabras que, a modo de señales y a lo largo de todo el párrafo, nos
van indicando las variaciones del desarrollo del pensamiento dentro del mismo, haciéndonos
más fácil su adecuada captación: son las llamadas palabras señal.

Estas podemos distribuirlas en tres grupos:

1) Palabras que indican un avance en el curso del pensamiento;


2) Palabras que indican una detención; 3) Palabras que indican un retroceso.

1) Palabras avance: Siendo, en general, las más numerosas dentro del párrafo, se desarrollan
en el mismo sentido de la frase principal y representan una mayor insistencia en ese
sentido.
Ejemplos: también, asimismo, igualmente, del mismo modo, además, en resumen, etc.

2) Palabras pausa: Podrían ser suprimidas en algún momento sin que el texto sufriera por
ello una variación sustancial en su significado. Su finalidad es simplemente aclaratoria.
Ejemplos: porque, con tal que, por ejemplo, tal como, etc.
3) Palabras retroceso: Son quizá las más significativas. Hacen un mayor hincapié en el
razonamiento del autor, lo resaltan y refuerzan, ya que estos cambios y retrocesos dentro
del curso del pensamiento representan lo que el autor rechaza, aquellas posibles
objeciones que hay que resolver y anular. También las palabras retroceso pueden indicar
que se vuelve a tomar de nuevo el curso del pensamiento. Ejemplos: pero, sin embargo,
no obstante, a pesar de todo, prescindiendo de, en vez de, etc.

La importancia de estas palabras clave es que nos ayudan a seguir con mayor facilidad
el curso del pensamiento. Suponen una ayuda fundamental para el lector. Son como llamadas
de alerta al inicio mismo de las frases que nos van advirtiendo de las variaciones e incidencias
del flujo del pensamiento dentro del párrafo. De ahí que debamos siempre tenerlas en cuenta.

Conectores Lingüísticos

Los conectores son nexos que sirven para relacionar ideas (proposiciones y oraciones).
Generalmente se colocan encabezando la segunda idea.
Abrir Continuar Objetar otra Concordancia con Ejemplificación y Cerrar texto
texto opinión otra opinión afirmación

Veamos También Ni siquiera Por eso Por ejemplo Finalmente

A En cambio También Es decir En suma


continuación

Además Pero En relación con En efecto Por ultimo

En realidad No obstante Tal como Así es que En conclusión

Para continuar En vez de Con tal que Evidentemente En


consecuencia

Así mismo Sin embargo Así es que También En síntesis

Igualmente Al respecto Para concluir

Por un parte En cuanto a En definitiva

Por otra parte De todos modos

Técnicas de Subrayado

Subrayar es “señalar por debajo con una raya alguna letra, palabra o frase”. Consiste
en “poner de relieve, mediante rayas, signos de realce o llamadas de atención, las ideas
fundamentales de un tema”. Se pretende destacar palabras claves, ideas esenciales y
secundarias, es una técnica de análisis que intenta resaltar las ideas de cada párrafo para
ayudar en el proceso de estudio y así la síntesis resulta más fácil.
Se debe desterrar la idea de que los libros no se deben tocar, sólo leer. La única forma
de que los textos sirvan de algo es trabajándolos y uno de los mejores medios de los que el
estudiante dispone para tal fin es el subrayado.
El subrayado sólo resultará realmente útil si lo lleva a cabo el propio sujeto. Esta técnica
proporcionará buenos resultados, ya que, además de mantener la atención, facilita la
localización del material más relevante en consultas posteriores.

¿Qué pasos debo seguir para realizar un buen subrayado ?


1) Efectuar una primera Lectura, que permitirá visualizar los elementos más significativos
del tema. En ella se pueden consultar los términos que no se entiendan para la óptima
comprensión del tema en general.
2) Al realizar la segunda lectura, el estudiante se detendrá en aquellos párrafos que sean
más significativos en los aspectos más relevantes. Se subrayarán los aspectos más
importantes. Se debe procurar que las palabras subrayadas posean significado por sí
solas.
Será más conveniente señalar solamente las palabras más importantes en lugar de toda
la frase, ya que se favorece de esta manera una lectura rápida que, a su vez, facilitará la
obtención de una visión global. Si es necesario, el subrayado se puede acompañar con notas,
bien en alguno de los márgenes, bien en la parte inferior de la hoja.

Se procurará no caer en alguno de los siguientes defectos a la hora de subrayar:

⮚ Subrayar más de lo debido; es decir, tender hacia un subrayado general.

⮚ No diferenciar las ideas relevantes de los datos accesorios.


3) Respecto al contenido, la cantidad de materia que se debe subrayar estará en función de
diferentes aspectos:

El conocimiento o familiaridad hacia el texto a subrayar.


La importancia de la materia.
La forma cómo esté redactado el fragmento (en prosa, a través de esquemas, etc.).
La finalidad que posea sobre el estudio de ese tema.
Sea cual fuere el objetivo perseguido se deberán subrayar especialmente las ideas o
detalles más relevantes, así como los términos que puedan tener una especial importancia.

¿Cómo aplicar la técnica del subrayado?


No existen unas normas fijas a la hora de subrayar. Ya se ha comentado que debe ser
el propio sujeto quien debe crear su propio código. A pesar de ello, se sugieren una serie de
consejos para facilitar la labor al estudiante:

Recuadrar la idea general.

Subrayar con doble línea la idea principal.

Subrayar con una línea las ideas secundarias.

Por último, se subrayarán con línea discontinua las ideas explicativas o detalles que
posean cierta importancia.
En el cuadro siguiente se proponen varios modelos de subrayado que se pueden adoptar.

Ojo!! También se pueden utilizar otros Tipos

Lineal. Se dibujan líneas debajo de las palabras que resultan importantes porque son
las ideas principales, secundarias o explicativas. Las palabras subrayadas deben tener sentido
por sí solas (no tienen por qué depender del texto).

Este tipo suele ir acompañado de notas en los márgenes que pretenden explicar aquello
que ha sido subrayado. De este tipo de subrayado surge el resumen y la síntesis (extractos de
ideas básicas).

Lateral. En este tipo de subrayado predomina la raya vertical en vez de la horizontal.


Interesa resaltar un párrafo entero y no sólo palabras sueltas. Por eso se coloca una raya
vertical, bien a la derecha del párrafo o en las frases que se consideran importantes, bien en
el margen izquierdo. Generalmente se suelen poner las rayas en el margen derecho. Este tipo
pretende realzar todo el conjunto.

Estructural. Se acompaña al subrayado de notas en el margen que buscan explicar el


porqué de ese subrayado. Este tipo de subrayado es el más indicado para la posterior
confección de esquemas.

De realce. Se ayuda de signos. El objetivo de este tipo de subrayado es el de llamar la


atención sobre un determinado aspecto o idea. Estas señales se suelen poner en el margen
derecho. Cada estudiante deberá crearse su propio código, ya que lo que realiza la propia
persona suele ser lo que resulta más útil y práctico.
Son importantes las Anotaciones Marginales
❖ Analizar la estructura del texto.

❖ Captar las ideas principales que se desarrollan.

❖ Es la primera lectura completa del tema.

❖ Debe realizarse teniendo en cuenta la idea general captada en la prelectura.

❖ Es una lectura rápida y comprensiva a la vez, efectuada en silencio.

❖ Anota en un cuaderno las palabras o frases que no entiendas o ideas que te surjan.

Recurre al diccionario o al profesor para solucionar tus dudas. Esto te obliga a


concentrarte y también te vas dando cuenta de tu grado de comprensión del texto
que lees.
❖ Lee párrafo a párrafo. Contestar a preguntas del tipo:

- ¿De qué me habla este párrafo?

- ¿Qué me dice del tema?

❖ La respuesta a dichas preguntas se lleva al margen izquierdo (anotaciones


marginales).
Favorece una buena comprensión del tema al obligar a realizar análisis y síntesis de lo
leído.

Importancia del Uso del Diccionario

A la hora de estudiar un amigo imprescindible es el diccionario, o como decía la abuela


el “mata burro”, por cuanto brinda información calificada de manera científica, exacta y
precisa, su significante según el contexto y la ortografía.

Recordar que los diccionarios están ordenados alfabéticamente, una vez identificada la
palabra se selecciona el significado según el contexto, es decir el más adecuado a la temática
trabajada.

Los diccionarios se pueden clasificar de la siguiente manera:

🕮 Generales: Contienen información sintética de todas las materias y temáticas.

🕮 Sinónimos y antónimos: contienen vocablos de significación parecida

🕮 Plurilingües: contienen palabras en distintos idiomas.


🕮 Gramaticales: contienen las normativas de la correcta escritura basada
usualmente en el dialecto de prestigio de una comunidad hablante. Ponen
énfasis en el uso, las funciones comunicativas y el contexto social del lenguaje.

🕮 Ortográficos: contienen reglas de acentuación, puntuación, abreviaturas y


siglas.

🕮 Etimológicos: indican el origen o procedencia de las palabras.

🕮 Técnico – científicos: contienen el significado específico de las voces


procedentes de distintas disciplinas.

🕮 De idiomas: contienen palabras en dos idiomas.

🕮 Enciclopédicos: tratan todos los temas de manera extensa.

🕮 Especializados: técnicos, Médicos, Económico-Financiero, Científicos, Jurídicos


e Institucionales, de Informática e Internet, etc.

🕮 Panhispánicos de dudas: según la Real Academia Española, es un diccionario


normativo en la medida en que sus juicios y recomendaciones están basados
en la norma que regula hoy el uso correcto de la lengua española.

Importante!!!
Recordar que se puede buscar la
misma palabra en distintos
tipos de diccionarios, según las
necesidades de conocimiento.

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