LaBrecha 6
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S E C R E TA R Í A D E F O R M A C I Ó N C O N F E D E R A L
LA BRECHA
NOVIEMBRE 2022 2
ESTADO
DE CRISIS
PERMANENTE
Lucha y acción sindical
SECRETARÍA DE FORMACIÓN CONFEDERAL
H
ay quienes piensan las crisis como
una oportunidad y quienes ven el fin
del capitalismo a la vuelta de cada
esquina. Los hechos nos demuestran que
no es así, que antes de morir el sistema de
acumulación capitalista se llevará por delante
todo lo que haga falta con tal de mantener o
aumentar la rentabilidad en forma de benefi-
cios. Un repaso histórico de las crisis en las
últimas décadas nos puede ayudar a entender
los mecanismos del capital para mantener y
tratar de aumentar sus ganancias y cómo
afecta esto a las clases populares. Asimismo,
se podrían anticipar algunos efectos de las
medidas que ya están siendo aplicadas y que
están sobre la mesa.
LABRECHA
LA BRECHA
SEPTIEMBRE 2022
NOVIEMBRE 2022 3
Grosso modo, podríamos dividir las cau- políticos de derecha, sin olvidar que se salía
sas de las crisis entre aquellas de origen pro- de una guerra mundial cuyo enorme coste hu-
ductivo, de demanda y financiero. Una división mano fue soportado fundamentalmente por
que no puede considerarse estanca ya que las clases populares. Además, en el caso de
sus dimensiones repercuten entre sí desen- España, cuyo régimen fascista sobrevivió gra-
cadenando problemas económicos, sociales cias al apoyo recibido de las fuerzas políticas
y/o ecológicos en momentos de crisis, y que de derechas hegemónicas en Estados Unidos
suponen un retroceso en los derechos y las y en los principales países europeos, el período
condiciones de vida de la clase trabajadora. histórico citado anteriormente, se resume en
Tras la II Guerra Mundial, transcu- una superexplotación de los trabajadores y tra-
rrió una época conocida como los 30 bajadoras y una feroz represión a quienes se
gloriosos donde el capitalismo en occi- levantaban contra la dictadura.
dente se consolidó bajo la concepción Con el tiempo este modelo de desarrollo
del «buen capitalismo». Estas tres déca- fue agotándose. La caída de la rentabilidad
das de la supuesta «edad de oro» del ca- y la búsqueda de incrementos de las
pitalismo han sido suficientes para que tasas de ganancias fueron presio-
muchas corrientes políticas «progresis- nando ferozmente para retornar a
tas» recurran a este periodo como punto una dinámica de reproducción capi-
de retorno. Si se dieron algunos avances talista liberalizada, capaz de garan-
en los derechos y en las condiciones de tizar el incremento de la rentabilidad
vida de los trabajadores, siempre fue- del capital sin límites. Todo esto
ron contra los intereses del capital y los vino acompañado de la
económica, social y laboral en la que nos en- tante. Desde 2010 hasta 2020, la pérdida de
contrábamos los y las trabajadoras, estaba poder adquisitivo alcanzó el 10%. Las des-
lejos de haber superado la crisis. Desde 2008, igualdades y la pobreza siguieron incremen-
se fueron incrementando las desigualdades y tándose, alcanzando los niveles más altos de
la pobreza a través de la institucionalización la UE, siendo el 5º país con mayor desigualdad
de la precariedad, el debilitamiento de los ser- y el 4º país con mayor porcentaje de población
vicios públicos y el abandono por parte de las en riesgo de pobreza de la UE. Ante la preca-
instituciones de los intereses de las trabaja- rización laboral, la fragmentación y la atomi-
doras. Al mismo tiempo, se fue desarrollando zación de la clase trabajadora, además de las
un modelo caritativo y asistencialista como distintas reformas laborales impulsadas, se
mecanismo de lucha contra la pobreza y la fue debilitando la negociación colectiva. La
exclusión social. aparición de trabajadores pobres evidenció
La respuesta política ante está crisis tuvo los costes de las políticas aplicadas. Un 13%
—y tiene— un coste económico y social impor- de la población asalariada en España, aun te-
niendo salario, se encontraba por debajo del
umbral de la pobreza. Al mismo tiempo, la
polarización fue creciendo. Una década más
Ante la precarización tarde del estallido de la crisis, los grandes
laboral, la fragmentación patrimonios se incrementaron en un 50% se-
Las consecuencias
de las políticas
establecidas
durante la crisis de
2008 vislumbraron
el raquítico sistema
público sanitario
que difícilmente
pudo dar respuesta
a la pandemia
la pandemia, así como la frágil situación en y así, garantizar el crecimiento económico vía
la que nos encontrábamos los y las trabaja- demanda. Sin embargo, la falta de voluntad de
doras. La coyuntura puso de manifiesto una abordar la raíz de los problemas con políticas
serie de problemas estructurales que exigían estructurales de gran calado siguió dejando
políticas de gran envergadura que dieran res- fuera a una parte importante de la sociedad.
puesta a la difícil situación socioeconómica de A pesar de los «esfuerzos» y las políticas como
la clase trabajadora. el Ingreso Mínimo Vital, en 2021 el 28% de la
El sistema capitalista se tambaleó a nivel sociedad en el Estado español siguió viviendo
mundial y las respuestas tenían que garantizar en riesgo de pobreza y exclusión social y 571
la reproducción del sistema. Dada la magni- mil hogares siguieron sin tener ningún ingre-
tud, los distintos gobiernos optaron por apro- so que aportar a su unidad familiar.
bar paquetes de medidas con una orientación En medio de este terremoto global, en sep-
distinta a las establecidas en años anteriores. tiembre de 2021, aparece una nueva crisis con
Los mismos organismos internacionales que la subida creciente de los precios energéticos
defendían asfixiar a la sociedad con recortes que se vio agravada, en febrero de 2022, con
de bienes y servicios públicos, la devaluación el estallido de la Guerra entre Rusia y Ucrania.
salarial y la priorización del pago de la deuda Desde entonces la escalada de precios de la
pública, como la Troika (Banco Central Euro- luz, el gas, el gasoil y la gasolina, así como de
peo, Comisión Europea y FMI) o el Banco Mun- otros productos básicos como el aceite o los
dial, reconocían el peligro de volver a esos mis- cereales, han incrementado la preocupación
mos planteamientos ante esta nueva crisis. por la inflación. Todo ello ha vuelto a detonar
La situación era distinta, esta vez había poco la economía y la política mundial.
margen para seguir asfixiando y decidieron in- Tras varios meses de guerra y máxima in-
yectar recursos a la sociedad para poder ga- certidumbre, los efectos directos sobre nues-
rantizar la sostenibilidad del sistema. La UE dio tra economía, la de la clase trabajadora, son
respuesta con los fondos europeos Next Gene- demoledores. Los últimos datos sobre infla-
ration para estimular la inversión y el consumo, ción rondan en torno al 10% mientras las su-
En los últimos años hemos visto cómo Desde CGT queremos denunciar la situa-
el capital sigue buscando nichos de rentabili- ción en la que se encuentra la clase trabajado-
dad y posiblemente el actual escenario plan- ra. Esta nueva coyuntura vislumbra un panora-
tee nuevos espacios para lograrlo. Para ello, el ma dantesco que puede empeorar más aún la
rol protagonista de los Estados ha sido clave situación. Por ello, creemos que es prioritario
para garantizar el aumento de la rentabilidad, recuperar la lucha en los centros de trabajo
planteando demandas cautivas, financiación y en los barrios: en contra del deterioro de la
a empresas, ayudas a la producción, asumien- atención sanitaria, en defensa de la educa-
do riesgos que el capital no quiere asumir o ción y el sistema público de pensiones, lle-
incluso, aprobando marcos regulatorios que nando las calles con nuestra movilización y
favorezcan las propias necesidades del capi- actos de protesta y potenciando la confianza
tal. Las crisis son momentos que se han apro- de los y las trabajadoras en la acción y orga-
vechado para aplicar doctrinas de choque nización sindical. Una muestra de ello suce-
económico, político y social. La historia nos dió el pasado sábado 15 de octubre: salimos
confirma que los Estados no han favorecido a las calles para luchar contra la devaluación
a la clase trabajadora y con el tiempo, no han y pérdida salarial, por unas pensiones dignas
hecho más que reducir el poder del trabajo y por la recuperación de los derechos
frente a las rentas del capital. Pero también la laborales. Una jornada de
historia nos ha enseñado que para defender reivindicación y lucha de
nuestros derechos —los ya logrados y los las muchas que se quiere
que están por alcanzar— hay que luchar, y programar de cara a este
eso es clave para una sociedad. otoño-invierno.