Anchaliquin Carlos
Anchaliquin Carlos
Anchaliquin Carlos
MARCO TEÓRICO
1) Principios básicos de la bioseguridad
Los principios básicos de bioseguridad son lineamientos esenciales que están
diseñados para prevenir la exposición a agentes biológicos y resguardar la salud de
las personas que trabajan en un laboratorio. La bioseguridad consta de tres
principios o elementos básicos para garantizar la contención adecuada de los
agentes biológicos: técnicas y las prácticas correctas de laboratorio, el empleo
sistemático de los equipos y los medios de seguridad (ambas son consideradas
barreras de contención primaria) (Vazques et al., 2019)
Existen dos tipos de barreras las cuales se conocen como barreras de contención
primaria y secundaria; la primaria consiste en técnicas y practicas adecuadas en el
laboratorio y el uso correcto de los equipos; mientras que la secundaria hace énfasis
en el diseño adecuado de las instalaciones de laboratorios. Estas barreras tienen
como objetivo prever la liberación de agentes patógenos y garantizar la seguridad
de los trabajadores del laboratorio. La “contención” es el método seguro para el
manejo de los materiales infecciosos en el medio ambiente del laboratorio donde
estos se manipulan o conservan, y su objetivo es reducir o eliminar la exposición de
los trabajadores de los laboratorios u otras personas, y del medio ambiente externo,
a agentes potencialmente peligrosos (Vazques et al., 2019).
El material contaminado de un laboratorio de microbiología se debe realizar con
mucha precaución, para prevenir la propagación de agentes biológicos patógenos
con la finalidad de proteger tanto a las personas como al medio ambiente, existen
medios de eliminación de material contaminado clasificados en: desechos
infecciosos, desechos especiales.
Los desechos infecciosos son aquellos que contienen agentes patógenos y generan
riesgo en la salud humana y al medio ambiente. Martínez (2019) afirma que son
aquellos desechos que contienen algún tipo de germen que inminentemente causa
riesgo a la salud humana y al medio ambiente. Estos desechos pueden ser:
Fluidos corporales como sangre y sus derivados, orina, sudor, esputo,
secciones faríngeas, secreciones vaginales, etc.
Instrumental que tuvo contacto con dichos fluidos.
Cultivos e instrumental manipulado (inoculación de bacterias) con
agentes
infecciosos, desechos de producción biológica.
Los desechos especiales se clasifican por sus características físico-químicas,
presentan peligro para la salud humana, animal y medio ambiente y estos son:
Desechos químicos peligrosos: tóxicos, corrosivos, inflamables y explosivos.
Desechos radioactivos: radiología, radioterapia y análisis químicos.
Desechos farmacéuticos: envases de medicamentos, liquidas y reactivos que
generen riesgo.
Cada desecho debe ser etiquetado con las características de material contaminado;
Martínez (2019) redacta que los desechos infecciosos constarán en recipientes con
funda de color roja y los desechos comunes con funda negra, su volumen se preverá
de acuerdo a la creación de los desechos. Estas fundas se deben trasladar a un
almacén que debe ser exclusivo para los desechos; después se realiza el
tratamiento adecuado para cada desecho y su almacenaje final estará alejado de
áreas que corra peligro la salud humana, animal y ambiental.
2) Tipos de riesgos:
Riesgo biológico
Se considera riesgo biológico a toda sustancia que contenga microorganismos
(virus, bacterias, hongos, esporas, cultivos celulares, etc); este tipo de riesgo se
encuentra presente en todas las actividades que se realicen en el laboratorio, por
ello se debe aplicar todas las medidas de seguridad. Martínez (2019) afirma que el
riesgo biológico al que se exponen los laboratoristas se clasifican en:
• Exposición severa o tipo I: en este rango podemos incluir la exposición de
fluidos corporales como: saliva, sudor, sangre, semen, secreción vaginal, leche
materna es decir secreciones que a través de las mucosas (salpicaduras y
aerosoles), piel no ilesa (dermatitis) o lesiones abiertas causados por cortaduras o
pinchazos.
• Exposición moderada o tipo II: existe cuando hay una exposición a través de
la piel causado por lesiones en las membranas mucosas o piel no intacta con fluidos
como: orina, sangre, saliva, vomito, esputo, secreciones nasales o vaginales, sudor
o material fecal.
• Exposición leve o tipo III: Son exposiciones de piel intacta
Riesgo físico
El riesgo físico en un laboratorio se debe a un cambio de energía entre la persona
y el ambiente a una rapidez y potencial mayor que la que el cuerpo puede resistir;
causando algún trastorno por el físico por el cambio brusco de energía; estos se
clasifican en:
Riesgo mecánico
Riesgo térmico
Riesgo eléctrico
Martínez (2017) redacta que los principales riesgos físicos a los que un trabajador
puede estar sometido son:
Ruido: La peligrosidad del ruido depende de la intensidad del mismo y el
tiempo de exposición del trabajador. Las fuentes de ruido en un laboratorio
de microbiología son centrífugas, cabinas de seguridad y agitadores
Iluminación: El exceso o defecto de luz puede provocar la pérdida de
agudeza visual, errores por deslumbramientos debidos a contrastes muy
acusados o fatiga visual, además de accidentes.
Temperaturas extremas: En un laboratorio de microbiología se emplean
procesos que necesitan temperaturas extremas (tanto frio como calor). o
Frío: Se utilizan líquidos criogénicos como el nitrógeno líquido. Este tipo de
producto se trabaja en un estado de congelación y puede causar
quemaduras en caso de derrame, también tiene asociado un alto riesgo de
inflamabilidad y corrosión. Para este tipo de productos es necesario una
seguridad especial durante el transporte, llenado de contenedores y
almacenamiento.
Riesgo Químico
Al manejar agentes químicos las personas conllevan un gran riesgo para la salud y
para el medio ambientes debido a las propiedades que cada compuesto químico
posee. Martínez (2017) afirma que las sustancias que suelen causar más riesgos
químicos en los laboratorios de microbiología son los ácidos y las bases, seguidos
de productos como los alcoholes y las cetonas (altamente inflamables) y los
colorantes. Entre los efectos que pueden causar un riesgo toxico se encuentran:
corrosión, irritación, asfixia, cancerígeno, etc. Esta toxicidad depende de ciertos
factores como la composición química, estado físico y dosis. Debido a la
peligrosidad de estas substancias, es importante que haya disponible un inventario
de productos químicos, un mapa de riesgos químicos y las fichas de datos de
seguridad de cada producto.
3) Equipamiento de seguridad en el Laboratorio
Lavaojos:
Los lavaojos están diseñados para proporcionar un rápido lavado de ojos en caso
de exposición a sustancias químicas o partículas extrañas, es esencial para un
laboratorio de microbiología ya que en este se trabaja con compuesto químicos y
microorganismos que pueden generar problemas oculares; esto depende del
compuesto y del microorganismo con que se el que se esté trabajando. Debe estar
ubicados en partes estratégicas para que el personal pueda acudir en seguida en
caso de emergencia. Es un sistema que debe permitir la descontaminación rápida
y eficaz de los ojos y que está constituido básicamente por dos rociadores o
boquillas separadas entre 10 y 20 cm capaces de proporcionar un chorro de agua
potable para lavar los ojos o la cara, una pileta, de 25 a 35 cm, provista del
correspondiente desagüe, de un sistema de fijación al suelo o a la pared y de un
accionador de pie (pedal) o de codo (Rosell et al., 1998).
Ducha de seguridad:
La ducha de seguridad, así como el lavaojos es fundamental para los laboratorios
donde se utilicen compuestos químicos peligrosos, está diseñada para proporcionar
un enjuague rápido y completo del cuerpo en caso de exposición de sustancias
química; debe suministrar un flujo de agua lo suficientemente fuerte y continuo para
enjuagar rápidamente cualquier sustancia química del cuerpo del usuario. La ducha
deberá proporcionar un caudal de agua suficiente para empapar el sujeto completa
e inmediatamente. El agua suministrada debe ser potable, procurando que no esté
fría (preferiblemente entre 20 y 35° C) para evitar el riesgo que supone enfriar a una
persona quemada en estado de shock y también que la poca aceptación del agua
fría cause una eliminación insuficiente del contaminante, al acortar el periodo de
ducha (Rosell et al., 1998).
Cabina de seguridad biológica:
Las cabinas de seguridad biológica BSC (Biological safety cabinets), forma parte a
uno de los equipos más importantes en los laboratorios de la microbiología y
biomedicina, cumpliendo con un rol sumamente importante para la generar
ambientes controlados para la protección de la muestra, persona y medio ambiente.
Las cabinas de seguridad biológica garantizan ambientes controlados para la
protección ya sea del producto, del usuario o del medio ambiente. Su forma de
operación es mediante la generación de presión negativa al interior del área de
trabajo, obligando así a que el aire circule a través de los filtros HEPA (High
Efficiency Particle Air), los cuales purifican en un 99.99% las partículas de aire
contaminadas (Organización Panamericana de la Salud [OPS], 2002); además que
a este proceso se le agrega indumentaria eléctrica y mecánica como la luz
ultravioleta, luz fluorescente y un ventilador, encargados para la desinfección, antes,
durante y después de manipulas estos gabinetes.
4) Vestimenta en el laboratorio:
Para poder entrar a un laboratorio de microbiología donde se pueden encontrar
varios riesgos para las personas, se debe tomar ciertas medidas para evitar daños
por los compuestos químicos, bacterias, hongos, etc. Se debe llevar cierta
indumentaria para prevenir peligros, esta indumentaria consta de:
Mandil con mangas largas
Pantalón sin roturas y totalmente cerrado
Zapatos cerrados y cómodos para evitar tropiezos
Mascarilla para prevenir inhalar compuestos químicos que puedan perjudicar
a la persona
Guantes de nitrilo de tipo quirúrgico para prevenir quemaduras al momento
de manipular químicos peligrosos.
En ciertos casos donde se utilice químicos que perjudiquen a los ojos se
deberá usar gafas de protección para evitar irritaciones.
5) Normas generales en el laboratorio
• No fumar: Existe un gran riesgo al consumir tabaco dentro de un laboratorio,
puesto que realizar esta actividad puede provocar la contaminación o reacción a
sustancias altamente inflamables.
• No comer: Si se ingiere alimentos dentro de un lugar donde se trabaja con
químicos y microorganismos se puede provocar una contaminación bilateral,
provocando daños a la salud.
• No beber: Al tener envases con líquidos podemos confundirlos con los envases
que contienes químicos, esto genera gran peligro ya que sería mortal para una
persona ingerir compuestos químicos.
CONCLUSIONES
Esta indagación fue a base de artículos con credibilidad científica, haciendo
énfasis en la importancia de las normas de bioseguridad en un laboratorio de
microbiología.
A base de la indagación se analizó la importancia que tienen estas normas
para el desempeño óptimo de estudiantes, laboratoristas e investigadores
para generar grandes conocimientos y eficaces resultados.
ANEXOS
BIBLIOGRAFÍA
Martinez, S. (2017). DISEÑO Y GESTIÓN DE UN LABORATORIO DE
MICROBIOLOGÍA (Tesis de grado). Universidad Politécnica de Cataluña,
Barcelona.
Martinez, N. V., (2019). Manual de bioseguridad para los laboratorios clínicos de
Microbiología, Citología y Biología Molecular. Universidad Nacional de
Chimborazo, 2018 (Tesis de grado). Universidad Nacional de Chimborazo,
Ecuador.
Organización Panamericana de la Salud (2002). Cabinas de seguridad biológica,
primera edición, páginas 1-77, Organización Panamericana de la Salud,
Washington D.C, U.S.A.
Vázquez, A. C., Ayala, I. M., Domenech I. O., Martínez I.F., Rodríguez, R. (2019).
Riesgo biológico en los laboratorios de Microbiología de las instituciones de
salud. Rev Panorama. Vol(14).