T 385 20
T 385 20
T 385 20
Magistrada ponente:
DIANA FAJARDO RIVERA
SENTENCIA
I. ANTECEDENTES
1
Ver, por ejemplo, las sentencias T-549 de 1995. M.P. Jorge Arango Mejía; T-098 de 1999. M.P.
Antonio Barrera Carbonell; T-1006 de 2001. M.P. Manuel José Cepeda Espinosa; T-392 de 2004. M.P.
Jaime Araujo Rentería; T-045 de 2007. M.P. Jaime Córdoba Triviño; T-085 de 2010. M.P. María Victoria
Calle Correa; T-943 de 2014. M.P. Luis Guillermo Guerrero Pérez; T-200 de 2018. M.P. Alejandro
Linares Cantillo; T-038 de 2018. M.P. Diana Fajardo Rivera; T-493 de 2018. M.P. Diana Fajardo Rivera;
T-389 de 2018. M.P. Diana Fajardo Rivera; y T-149 de 2019. M.P. Diana Fajardo Rivera, entre otras.
2
La señora Díaz Osorio es una mujer de 59 años, que (i) le quedan menos de tres
años para poder pensionarse, pues le faltan 128,57 semanas para completar las
1.300 requeridas; (ii) sufre una parálisis facial izquierda; (iii) padece sobrepeso por
exceso de calorías, por lo que debe someterse a una cirugía “bariátrica” para
mejorar su salud2; y (iv) cubre el 100% de la manutención de su señora madre de
76 años. Adicionalmente, manifestó que no tiene otra fuente de ingresos
económicos y por su edad no le es fácil vincularse con otro empleador 3. Por esto,
solicita que Uniagraria mantenga su vínculo laboral con la señora Leila Adriana
Díaz Osorio, como Jefe de Fortalecimiento de la Educación Media, cargo que se
encontraba desempeñando antes del despido, hasta que Colpensiones le reconozca
su pensión y la incluya en la nómina, con el respectivo pago de la primera mesada
pensional4.
2
Folios 1 a 3 y 20 a 22 del Cuaderno Principal, en los que obra el escrito de tutela (en adelante, cuando se
haga alusión a un folio del expediente, se entenderá que se hace referencia al cuaderno principal, salvo
que se diga algo distinto). Información respaldada con la Historia Clínica expedida por el Centro
Nacional de Oncología.
3
Folios 1 a 3.
4
Folio 9.
5
Folios 56 a 61.
3
II. CONSIDERACIONES6
6
Esta Sala de Revisión de la Corte Constitucional es competente para revisar el Fallo de tutela proferido
dentro del trámite de la referencia, con fundamento en lo dispuesto en el inciso 3º del Artículo 86 y el
numeral 9º del Artículo 241 de la Constitución Política, en concordancia con los Artículos 33, 34, 35 y 36
del Decreto 2591 de 1991, “Por el cual se reglamenta la acción de tutela consagrada en el Artículo 86 de
la Constitución Política”.
7
Artículo 86 de la Constitución Política y artículos 1 y 10 del Decreto 2591 de 1991.
8
Mediante Resolución 2539 de 1986, “Por medio de la cual se otorga personería jurídica a una
Fundación de Educación Superior”, el Ministerio de Educación en uso de sus facultades legales otorgó
personería jurídica a la Fundación Universitaria Agraria de Colombia, como Entidad de Educación
Superior de utilidad común sin ánimo de lucro, y aprobó en todas sus partes los estatutos adoptados por la
misma. Así, en el Artículo 3 del Estatuto General de Uniagraria se establece que uno de sus objetivos es
contribuir a la educación integral de los colombianos y formar profesionales, técnicos y científicos que
contribuyan a conformar una sociedad más armónica, solidaria, justa y libre. Recuperado de
https://www.uniagraria.edu.co/wp-content/uploads/2015/04/Estatutos-del-23-de-diciembre-de-1993-
vigentes.pdf.
9
Expediente, folio 39, donde consta un documento mediante el cual el Departamento de Gestión Humana
de la universidad certifica la suscripción de los diferentes contratos, por parte de la señora Leila Adriana
Díaz Osorio con Uniagraria.
10
Numeral 1 y 4 del Artículo 42 del Decreto 2591 de 1991.
4
porque los mecanismos ordinarios no resultan eficaces ni oportunos para lograr una
protección efectiva de los derechos fundamentales de la señora Leila Adriana Díaz
Osorio. La accionante es una mujer de avanzada edad (59 años) que acredita la
calidad de pre pensionada. Su único ingreso era el salario que devengaba y no le es
fácil conseguir otro empleo en este momento. Ventilar la discusión de la legalidad
del despido mediante la jurisdicción ordinaria laboral, por las particularidades
propias de estos procesos, no lograría satisfacer la necesidad de una protección
pronta y efectiva de sus derechos, extendiendo la situación de vulnerabilidad, de
manera indefinida en el tiempo11. Esto, especialmente en el contexto de la
pandemia, porque se trata de una mujer que cumple con los criterios para ser
considerada como una persona de alto riesgo por su condición de sobrepeso 12. Las
circunstancias descritas exigen a esta Sala aplicar los criterios de cumplimiento de
los requisitos de procedencia, teniendo en cuenta las especiales circunstancias de
urgencia.
11
Ver sentencias T-824 de 2014. M.P. Luis Guillermo Guerrero Pérez; T-693 de 2015. M.P. María
Victoria Calle Correa; T-638 de 2016. M.P. Jorge Iván Palacio Palacio; T-357 de 2016. M.P. Jorge Iván
Palacio Palacio; y T-325 de 2018. M.P. José Fernando Reyes Cuartas. La Corte estudió el caso de
personas prepensionadas que fueron despedidas de sus trabajos, por lo que solicitan su reintegro laboral
para completar el número de semanas para pensionarse.
12
Intervención del Viceministro de Salud Pública y Prestación de Servicios Luis Alexander Moscoso
Osorio, el 5 de abril de 2020.
13
Ver sentencias T-638 de 2016. M.P. Jorge Iván Palacio Palacio; y T-325 de 2018. M.P. José Fernando
Reyes Cuartas.
14
Artículos 25 y 53 de la Constitución Política de 1991. Sentencia T-638 de 2016. M.P. Jorge Iván
Palacio Palacio. La Sala de Revisión Estudió un caso de un empleado del sector privado que se
encontraba próximo a pensionarse y le fue terminado su vínculo laboral. Se declaró la carencia de actual
por hecho superado porque el accionante y la empresa acordaron el pagó unas sumas de dinero y
Colpensiones procedió a reconocer la pensión de vejez.
5
protegerlos frente a una posible desvinculación de sus cargos sin justa causa, por
cuanto son personas vinculadas al sector público o privado que están próximas a
pensionarse, al faltarles tres años o menos para cumplir los requisitos para obtener
la pensión de vejez: contar con 57 años de edad en el caso de las mujeres y haber
cotizado al menos 1.300 semanas al Sistema General de Seguridad Social 15. Esto,
cuando ello suponga una (i) afectación de su derecho al mínimo vital, dado que su
salario y eventual pensión son la única fuente de sustento económico; y (ii)
dificultad para integrarse de nuevo al mercado laboral, en razón de la edad del
individuo16.
10. Es importante aclarar que la estabilidad laboral reforzada por fuero de pre
pensión solo aplica en los casos en que sea necesario mantener el vínculo laboral
del trabajador, para que este pueda completar las semanas de cotización requeridas
en el Régimen de Prima Media, comoquiera que cuando le falten tres o menos
años de cotización se vea amenazada o frustrada la expectativa legítima de acceder
a la pensión de jubilación. Así cualquier aplicación de la figura por fuera del
escenario fáctico referido desborda y desnaturaliza la garantía constitucional de la
misma. Por ejemplo, la Sentencia SU-003 estableció que “cuando el único
requisito faltante para acceder a la pensión de vejez es el de la edad, dado que se
acredita el cumplimiento del número mínimo de semanas de cotización, en caso de
desvinculación, no se frustra el acceso a la pensión de vejez, de allí que no haya
lugar a considerar que la persona sea beneficiaria del fuero de estabilidad
laboral reforzada de pre pensionable, dado que el requisito faltante, relativo a la
edad, puede ser cumplido de manera posterior, con o sin vinculación laboral
vigente”21. Asimismo, cuando el actor no cuenta con la edad y le faltan más de tres
años de cotización para completar las 1.300 semanas que exige el Régimen de
Prima Media no procede la aplicación de la protección a la estabilidad en el
empleo. Por otro lado, cabe resaltar que el alcance de la protección difiere para los
trabajadores afiliados en el RAIS, puesto que el reconocimiento de la prestación
no está sujeta a cumplir una edad determinada ni a completar un número de
semanas, sino al ahorro de un capital determinado para financiar la satisfacción,
según los términos suscritos entre el trabajador y la Administradora de Fondo de
Pensiones.
24
Sentencias T-824 de 2018. M.P. Luis Guillermo Guerrero Pérez y T-595 de 2016. M.P. Alejandro
Linares Cantillo.
25
M.P. José Fernando Reyes Cuartas.
26
Sentencia T-325 de 2018. M.P. José Fernando Reyes Cuartas.
27
Folio 31 del expediente.
8
años y medio para pensionarse28. La desvinculación de la señora Leila Adriana
Díaz Osorio al empleo representó la pérdida de los únicos ingresos que gozaba
para cubrir su manutención y la de su madre de 76 años. Esta última situación
quedó demostrada mediante declaración juramentada ante la Notaria 60 del Círculo
de Bogotá, donde la accionante sostuvo que su madre dependía económicamente
de ella en el 100% de sus gastos. Aunado a ello, las condiciones de salud de la
misma, reflejadas en el sobrepeso y la parálisis facial izquierda, agravan su
situación, porque sin ingresos no puede adelantar los tratamientos requeridos,
como la cirugía “bariátrica” necesaria para mejorar su estado de salud.
15. En este caso el juez constitucional debe proteger urgentemente esos derechos
fundamentales que están siendo afectados, ante todo teniendo en cuenta que en el
contexto de la pandemia las violaciones tienen impactos e imponen amenazas y
riesgos aún más severos y desproporcionados, no sólo a las personas que reclaman,
sino al resto de la comunidad por los riesgos de contagio. Por las razones
expuestas, la Sala procederá a revocar el Fallo dictado, en primera instancia, por el
Juzgado Setenta y Siete Penal Municipal con Función de Control de Garantías de
Bogotá, el 6 de diciembre de 2019, dentro del proceso de la referencia, para en su
lugar conceder el amparo de los derechos fundamentales invocados. Así, ordenar a
la Fundación Universitaria Agraria de Colombia (Unigraria) proceder a
reincorporar, dentro de los diez días siguientes a la notificación de la presente
Sentencia, a la señora Leila Adriana Díaz Osorio al cargo que desempeñaba antes
del despido o a uno vacante, con funciones similares o equivalentes a las que
desarrollaba, sin desmejorar su condición laboral, hasta tanto Colpensiones le
reconozca la pensión de vejez y la incluya en la nómina de pensionados, siempre
que no exista alguna causal de despido justificado.
28
Folio 26 del expediente.
9
III. DECISIÓN
RESUELVE
10
DIANA FAJARDO RIVERA
Magistrada
Magistrada ponente:
DIANA FAJARDO RIVERA
11
Con el respeto acostumbrado a las sentencias adoptadas por la Corte
Constitucional, salvo el voto respecto de lo decidido por la Sala Segunda de
Revisión en la sentencia T-385 de 2020. En dicha sentencia, la Sala resolvió
revocar el fallo dictado en primera instancia por el Juzgado Setenta y Siete Penal
Municipal con Función de Control de Garantías de Bogotá, el 6 de diciembre de
2019, y en su lugar, conceder el amparo de los derechos fundamentales al trabajo, a
la seguridad social, a la estabilidad laboral reforzada (en adelante “ELR”) y al
mínimo vital de la señora Leila Adriana Osorio (en adelante, “accionante”) y, en
consecuencia, ordenar a la Fundación Universitaria Agraria de Colombia (en
adelante, “Unigraria” o “accionada”) que efectúe el reintegro de accionante al
cargo que desempeñaba antes del despido o a uno vacante, con funciones similares
o equivalentes al que desarrollaba, sin desmejorar su condición laboral, hasta tanto
Colpensiones le reconozca la pensión de vejez y la incluya en la nómina de
pensionados, siempre que no exista alguna causal de despido justificado.
12
a fin de verificar tal circunstancia y, por consiguiente, prevenir la interferencia
injustificada en la esfera de competencia del juez laboral.
29
La Ley 790 de 2002 impone la estabilidad de los trabajadores en el retén social (Art. 12), afectados en procesos de
renovación y modernización de la estructura de la administración nacional. La Ley 812 de 2003 extendió su
vigencia, pero mantuvo inalterado su objeto y ámbito de aplicación. De su articulado se desprenden las siguientes
características de las situaciones protegidas por la estabilidad: (i) Sólo se aplica a trabajadores de entidades del orden
nacional (Arts. 1, 16). Existen sentencias, como la T-724 de 2009, que extendió la aplicación de la regla a entidades
territoriales, pero carece de argumentos para realizar la extensión; (ii) Se refiere a las terminaciones de vinculación
por supresión, fusión, escisión o transformación de entidades del orden nacional (art. 16). Este es el alcance de la
L.790/2002. Sin embargo, sentencias como la T-768/2005, T-338/2008 han extendido la hipótesis de aplicación a
procesos como la liquidación forzosa de entidades o reestructuraciones; (iii) se opera a través de actuación
administrativa del Presidente de la República, previa disposición legislativa; y (v) la supresión de la entidad debe
tener su causa en el “Programa de Renovación de la Administración Pública” (Ver documento CONPES 3248/2003,
y sentencia SU-897 de 2012).
30
La Corte Constitucional ha establecido que la calidad de “prepensionados” se aplica a personas que están
próximas a pensionarse, frente a Programas de Renovación de la Administración y el retén social. Ver, sentencia
SU-897 de 2012.
14
entre empleados públicos y entidades estatales, no pueden ser entendidas de
ninguna manera como precedente directo o válido para interpretar el caso concreto.
9. Por lo demás, es un desacierto del fallo en cuestión que, con base en una
argumentación insuficiente y en contravía a lo estipulado por el Legislador en la
materia, decidiera conceder la protección a la ELR de la accionante bajo el
argumento que ostenta la calidad de prepensionada, pese a que el otro extremo de
la relación laboral es una institución educativa de naturaleza privada. No es dado
extrapolar o extender la garantía de la estabilidad en el empleo que protege las
expectativas de los empleados públicos a situaciones propias de las relaciones
laborales entre particulares. La discusión en torno a la validez o invalidez del
despido en este último supuesto debe seguir el curso de las reglas que para el
efecto establece el Estatuto del Trabajo y de la Seguridad Social, máxime cuando,
como en el caso concreto, el empleador accionado le reconoció y pagó a la actora
la indemnización de que trata el artículo 64 del CST.
Fecha ut supra
15