Beneficio de Litigar Sin Gastos y Pacto de Cuota Litis. ¿Incompatibles
Beneficio de Litigar Sin Gastos y Pacto de Cuota Litis. ¿Incompatibles
Beneficio de Litigar Sin Gastos y Pacto de Cuota Litis. ¿Incompatibles
La Cámara Nacional Civil, Sala M(1), en decisión reciente, ha venido, en los hechos y vía procedencia de un recurso de
apelación, a conceder un beneficio de litigar sin gastos ante la existencia de un pacto de cuota litis, que fuera
denegado en primera instancia.Examinaremos, a renglón seguido, sin pretender un análisis completo, los aspectos
procesales de tan significativa resolución que viene a clarificar una temática controvertida.
Ante todo, recordemos que el instituto del beneficio de litigar sin gastos tiene base constitucional en los preceptos de
defensa en juicio y la igualdad ante la ley (arts. 16 y 18 CN), y, desde una perspectiva convencional, en el art. 8 de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos, al establecer como garantía judicial el derecho de toda persona a ser
oída por un juez o tribunal competente y dentro de un plazo razonable.
Destacaba muy bien Morello que, en la democracia social, al acceso a la justicia se lo vehiculiza con instituciones
palpables y equilibradoras, tal el beneficio de litigar sin gastos. No obstante, es bueno aclarar que, en otras latitudes,
como Inglaterra, Francia, Alemania, están instituidos sistemas objetivos de ayuda judicial integral(2).
El acceso a la justicia comprende, como lo demostraran Cappelletti y Garth, que el pueblo pueda ejercer sus derechos
o solucionar sus conflictos por medio del Estado, es decir, en primer lugar, el sistema legal debe ser igualitariamente
accesible a todos, y, en segundo lugar, estar encaminado a que su funcionamiento sea individual y socialmente
justo(3).
Cuando el magistrado resuelve un caso, debe hacerlo no solo en función de los intereses de las partes, sino también
con una visión social. Viene al caso recordar el art. 43 del Estatuto del Juez Iberoamericano: “Principio de equidad. En
la resolución de los conflictos que lleguen a su conocimiento, los jueces, (…) procurarán atemperar con criterios de
equidad las consecuencias personales, familiares o sociales desfavorables”.
El Poder Judicial al igual que los operadores jurídicos tienen una actividad encomiable en estas horas, remover trabas
para que toda persona pueda acceder a la justicia, y que nadie quede en el umbral. Claro está, bajo el amparo de la
buena fe y el deber de decir verdad.
Téngase en cuenta que no todos tenemos las mismas necesidades ni todos somos iguales, la importancia de la garantía
constitucional de igualdad ante la ley radica en la ponderación de las diferentes situaciones en que se debe dar
respuesta a un caso, para lo cual se recurre a los principios de razonabilidad y proporcionalidad.
Permítasenos, a modo de digresión justificada, prestar la atención sobre el principio de proporcionalidad. Bien señala
Peyrano(4), su existencia y alcances, revelan que se está produciendo un deslizamiento conforme al cual mientras
otrora los principios procesales eran meramente formales (la igualdad de partes, por ejemplo), técnicos (cual es el de
adquisición procesal o el de economía procesal) o ideológicos (la fatigante disputa entre activismo y garantismo), hoy,
y desde hace un tiempo, han aparecido principios procesales preocupados más directamente por cuestiones
axiológicas, vale decir que van en procura de que la resolución pendiente sea justa, ejemplos: la tutela judicial
efectiva, la proscripción del abuso del derecho(5), entre otros.
Volvamos nuestra mirada sobre el instituto del beneficio de litigar sin gastos. La CSJN viene señalando que la ratio
legis de la norma procesal se encuentra en la necesidad de conceder la posibilidad de acudir a la justicia a quien
carece de los bienes suficientes para afrontar los gastos que dicha situación demanda(6). Se desea nivelar
desigualdades y, sin consagrar ningún privilegio, colocar en igualdad de armas a quienes, entre otras causas, o razones
económicas, se encuentran en desventaja(7).
Es primordial tener presente que la posibilidad de obtener beneficio de litigar sin gastos, cuyo propósito es impedir
que la carencia de medios económicos imposibilite el efectivo acceso a la justicia(8), no se limita a quien es indigente
o pobre de solemnidad, pudiendo aprehender a todo aquel que demuestre que no está en condiciones de sostener los
gastos de un juicio o, en su caso, que no puede procurarse los recursos necesarios(9). Además, por virtud de la
franquicia, el beneficiario queda librado de prestar contracautela para la efectivización de las medidas cautelares que
obtuviere, mientras dicho beneficiario no mejore de fortuna. Y no cualquier mejoría de fortuna es suficiente como
para dejar sin efecto el beneficio, sino aquella que le permite salir de la situación de carencia de recursos suficientes
que en su momento hubiese considerado el juez para concederlo(10).
Por añadidura, no [ampara] “a quien carece de liquidez, pues este es un problema financiero que encuentra remedio
por caminos ajenos a las normas…”(11).
No se piense que en la circunstancia de litigar con la franquicia se debe concurrir al proceso a través de un letrado
oficial. Es equivocado razonar que no se puede estar representado por un particular, es probable que el profesional
actúe con la confianza de ganar y de ese modo pueda cobrar sus honorarios a la parte vencida(12).
A ello se podría sumar la situación que describe Benavente(13), la firma de un contrato de honorarios contingentes, es
decir, el letrado recibe como pago de sus servicios un porcentaje de lo que reciba el actor, si vence en el juicio. Se
establece entre ambos un contrato cuya característica esencial es la de ser aleatorio. El abogado sabe de derecho, y el
cliente conoce los hechos, por tanto, requieren su mutua colaboración para llevar adelante la empresa procesal, la que
resulta eficiente en la medida que ambos maximizan sus ganancias conjuntas. Se favorece de esta manera al litigante
de escasos recursos a quien se asegura la efectiva dedicación al pleito por parte del profesional, que si gana hace
ganar, y si pierde sólo pierde sin perjudicar los intereses del cliente.
Se puede apreciar que no resulta incompatible el beneficio de litigar sin gastos con el pacto de cuota litis, la
franquicia cumple una suerte de cobertura proteccional del patrimonio ante el avance que podrán realizar los
vencedores del proceso, como sus abogados.
Son varias las plumas que apoyan esta tesitura, entre otros, Díaz Solimine tiene dicho que en la relación entre el
beneficio de litigar sin gastos y el pacto de honorarios no surge incompatibilidad entre ambos. Ello es así por cuanto el
beneficio está previsto en favor de “los que carecieren de recursos”(14).
Abordaremos ahora otro punto de discusión que podría suscitar la resolución en comentario. El pacto de cuota litis.
Según el Diccionario de la Real Academia Española, pacto de cuota litis es un “Acuerdo entre el abogado y su cliente,
formalizado con anterioridad a terminar el asunto, en virtud del cual el cliente se compromete a pagar al abogado
únicamente un porcentaje del resultado del asunto, independientemente de que consista en una suma de dinero o
cualquier otro beneficio, bien o valor que consiga el cliente por el asunto”(15).
Para Palacio(16), es un convenio en virtud del cual la parte le reconoce al profesional que ha de asistirla una
participación sobre la suma que aquella obtenga con motivo de una sentencia definitiva.
A su turno, la CSJN tiene dicho que el pacto de cuota litis constituye un acuerdo en virtud del cual el abogado se hace
parti?cipe en el resultado del pleito y percibe un porcentaje si tiene éxito su gestión. Usualmente, se establece que
nada puede cobrar al cliente si el juicio se pierde y, a veces, también toma a su cargo los gastos del proceso. Estaba
regulado especialmente en el art. 4, pa?rr. 3, de la Ley de Arancel Nº 21.839, el cual establece que, si el pacto excede
un porcentual del 20 %, situación que no se verifica en la especie, los gastos que correspondieren a la defensa del
cliente y la responsabilidad de este por las costas estarán a cargo del profesional “excepto convención en
contrario”(17).
Asimismo, y en el plano operativo, se ha sostenido que es un convenio por el cual la parte que actúa en juicio se obliga
a reconocer al profesional que lo asiste o representa una participación de la suma que obtenga como resultado del
pleito a través del dictado de la sentencia definitiva(18).
Coincidimos con Ferreyra(19) cuando nos dice que en el pacto de cuota litis el abogado se hace partícipe y toma
interés directo en el resulto del pleito, estipulándose en carácter de honorarios una cuota parte determinada del
objeto del pleito.
Resulta conveniente destacar la diferencia existente entre el pacto y el convenio de honorarios, en este último, el
abogado acuerda con su cliente un monto de honorarios por su asistencia profesional judicial o extrajudicial,
cualquiera sea el resultado de la gestión o del proceso, en el pacto de cuota litis el honorario es una parte del importe
que se logre como consecuencia del proceso que se ha entablado y finaliza con la sentencia.
Hemos explicitado de qué se trata doctrinaria y jurisprudencialmente, solo resta aportar sus caracteres, por un lado, la
naturaleza aleatoria, por la cual la contraprestación del profesional se halla condicionada al resultado del proceso, y,
por el otro, la remuneración a porcentaje.
Vaya como corolario que entre ambos institutos no hay incompatibilidades, conclusión que nos lleva a coincidir con la
decisión de la Sala, la circunstancia que se haya convenido un pacto de cuota litis no es impeditivo para la concesión
del beneficio de litigar sin gastos, dado que este último está referido al acceso a la justicia de quien no cuenta con
recursos económicos a los fines del paraguas protector del sistema de justicia. En cambio, el pacto está vinculado a
una cuestión de naturaleza aleatoria concerniente al resultado del pleito que ha servido como base al convenio.
VOCES: DERECHO PROCESAL - PROCESO JUDICIAL - TASA DE JUSTICIA - PODER JUDICIAL - COSTAS - BENEFICIO DE
LITIGAR SIN GASTOS - JURISPRUDENCIA - PROCESO ORDINARIO - HONORARIOS - ABOGADO - PROCURADOR - PACTO
DE CUOTALITIS - DEBERES Y FACULTADES JUDICIALES - EJERCICIO PROFESIONAL - RESOLUCIONES JUDICIALES -
INTERPRETACIÓN DE LA LEY - ECONOMÍA PROCESAL
Nota de Redacción: Sobre el tema ver, además, los siguientes trabajos publicados en El Derecho: El costo del proceso y
el acceso a la justicia, por Eduardo Abel Fernández, ED, 177-1032; El beneficio de litigar sin gastos para extranjeros,
por Estela Robles, ED, 189-773; Los costos del acceso a la justicia. Los problemas que plantea el beneficio de litigar sin
gastos, por María Isabel Benavente, ED, 198-1005; La “verosimilitud del derecho” como importante criterio de
evaluación en el “beneficio de litigar sin gastos”, por A. Ricardo Wetzler Malbrán, ED, 216-202; ¿Hasta cuándo puede
plantearse el mejoramiento de fortuna de quien actuó judicialmente con beneficio de litigar sin gastos concedido?, por
Ignacio M. Bravo D’André, ED, 220-992; El pacto de cuota litis ante la desvinculación del abogado, por Ignacio M. Bravo
D’André, ED, 242-572; La prohibición de la concesión del beneficio de litigar sin gastos en la acción revocatoria
concursal a la luz de tratados internacionales y de tribunales supranacionales, por Pablo María Corna y Carlos Alberto
Fossaceca (h.), ED, 259-789; Beneficio de litigar sin gastos y pacto de cuotalitis, por Julio Chiappini, ED, 273-110; La
incidencia de la naturaleza jurídica de la tercería ante la omisión de pago de costas en los incidentes, por Diego
Giovannoni, ED, 279-126; 50 tesis sobre la condena en costas, por Julio Chiappini, ED, 282; Un otorgamiento anticipado
del beneficio de litigar sin gastos, por Julio Chiappini, ED, 296; Las costas en el beneficio de litigar sin gastos, por
Mariela Bonadeo, ED, 297. Todos los artículos citados pueden consultarse en www.elderechodigital.com.ar.
(1) 53177/2021. Incidente Nº 1. Actor: A., G. G. Demandado: R., S. s/ Beneficio de litigar sin gastos, Buenos Aires, 5 de
diciembre de 2023.
(2) BERIZONCE, Roberto O., Avances y repliegues del acceso a la justicia, cita on line: RC D 204/2024.
(3) FENOCHIETTO, Carlos Eduardo, Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, t. 1, Astrea, p. 321, cita a
COLOMBO, Código Procesal, 4ª edic., I, p. 182.
(4) PEYRANO, Jorge W., El principio de proporcionalidad y su influencia en las decisiones judiciales,
https://www.pensamientocivil.com.ar/system/files/principio_de_proporcionalidad.pdf
(6) Fallos: 314: 146, “David Daniel Paloika c. Provincia de Buenos Aires y otra”.
(7) BENAVENTE, María I., Los costos del acceso a la justicia. Los problemas que plantea el beneficio de litigar sin
gastos, ED 2002-198, Cita Digital: ED-DCCLXIV-27.
(8) ACOSTA, José Virgilio, CPCC de la provincia de Corrientes, comentado, concordado y anotado, t. 1, p. 178, MAVE.
(9) Cámara Segunda Civil y Comercial La Plata, “V. M. G. s/ Beneficio de litigar sin gastos”, 5-4-24, Cita Digital: MJ-JU-
M-150531-AR | MJJ150531.
(10) STJCorrientes, “Recurso de queja por denegación de recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley, en autos;
Correa, Luis Ismael s/ Beneficio de litigar sin gastos”, Expte. GXP 21011764/1, Res. Nº 56, 26-6-2013.
(11) Corte Sup., 11/7/2006, “Coihue S.R.L v. Santa Cruz, Provincia de s/beneficio de litigar sin gastos”.
(14) DÍAZ SOLIMINE, Omar Luis, Beneficio de litigar sin gastos, 2ª edic. actualizada y ampliada, Astrea, p. 185.
(16) PALACIO, Lino E., Derecho Procesal Civil, t. III, Abeledo Perrot, Buenos Aires, 1991, p. 413.
(17) Del voto del Procurador General al cual remite la CSJN, causa “L. 250. XXXV.RECURSO DE HECHO Ledesma, Máximo
Antonio y otro c/ responsables del accidente del 6/9/95 en avenida Garay y Pichincha”, del 6-2-2001. La ley vigente
(nº 27.423) lo regula en su art. 6º, aunque establece que el porcentual a partir del cual las costas estarán a cargo del
profesional, siempre que haya asumido los gastos correspondientes a la defensa del cliente, es del 30 % (inc. b).
(18) Voto del Dr. Balestrini en el Plenario Nº 330 de la Cámara Nacional del Trabajo, de fecha 29-02-2024.
(19) FERREYRA, César H. E. Rafael, Honorarios de abogados en la provincia de Corrientes. Ley 5822 comentada, MAVE,
p. 61.
__________________
Honorarios:
Abogado: pacto de cuotalitis; no presume solvencia patrimonial. Beneficio de Litigar sin Gastos: Concesión: requisitos;
apreciación judicial; pacto de cuotalitis; incompatibilidad; inexistencia.
1 – La sola existencia de un pacto de honorarios no autoriza a presumir la solvencia patrimonial de quien dispone de un
derecho que a esa altura del proceso reviste carácter de eventual. Por el contrario, bien puede resultar indicativa de
la situación inversa, ya que quien carece de recursos económicos puede haber optado por ceder una parte importante
de la indemnización que hubiere de corresponderle, a fin de tener acceso a los servicios profesionales del letrado de su
elección, que de otro modo no tendría posibilidad de solventarlo, en el convencimiento de que, con relación a los
restantes gastos y costas del proceso encontrará amparo en el instituto del beneficio de litigar sin gastos.
2 – Entre el beneficio de litigar sin gastos y el pacto de honorarios no surge incompatibilidad alguna, por cuanto la
franquicia está prevista a favor de “los que carecieren de recursos” (art. 78 del CPCCN), y el convenio de honorarios
consiste en participar en el resultado de estos.
3 – La concesión del beneficio de litigar sin gastos queda librada a la prudente apreciación judicial en tanto los medios
probatorios incorporados al incidente reúnan los requisitos suficientes para llevar al ánimo del juzgador la
verosimilitud de las condiciones de pobreza alegadas. M.A.R.
CNCiv., sala M, diciembre 5-2023. – A., G. G. c. R., S. J. s/ beneficio de litigar sin gastos.
Vistos y Considerando:
1º) El actor apeló la decisión del 22 de marzo de 2023, que rechazó la concesión del beneficio de litigar sin gastos
porque se convino un pacto de cuota litis con sus abogados del 25% de la indemnización que se perciba.
2º) Se inició el presente beneficio a raíz de la acción por daños y perjuicios derivados de un accidente de tránsito, en
el que reclama la suma de $4.253.060. De la prueba aportada a las actuaciones se extrae que la actora no posee bienes
de fortuna, es una persona de condición humilde. Trabajaba como mensajero con la motocicleta con la que habría
sufrido el accidente (ver informe del SINTyS del 10/05/2022), pero luego denunció que le fue sustraída y se encuentra
desempleado (ver declaración del 23/05/2022).
Cabe señalar que el material probatorio no ha sido cuestionado por la contraria y ésta última tampoco ha ejercido su
derecho de fiscalizar y ofrecer otras pruebas (conf. arts. 80 y 81 del CPCCN), ni tampoco respondió el memorial.
Asimismo, es dable remarcar que el Sr. Representante del Fisco tampoco se ha opuesto a la concesión del beneficio
solicitado (v. dictamen del 10/03/2023).
3º) El art. 6 de la ley 27.423 establece que los abogados y procuradores podrán celebrar con sus clientes pacto de
cuotalitis, por su actividad en uno o más procesos, en todo tipo de casos, con sujeción a las siguientes reglas:… b) No
podrá exceder del 30% del resultado del pleito, cualquiera fuese el número de pactos celebrados e
independientemente del número de profesionales intervinientes. Sólo podrá ser superior a ese porcentaje para el caso
que el profesional tome a su cargo expresamente los gastos correspondientes a la defensa del cliente y la obligación de
responder por las costas, en cuyo caso, el pacto podrá extenderse hasta el 40% del resultado líquido del juicio.
En el presente caso, conforme surge del instrumento digitalizado el 29/04/2022, se pactó en concepto de honorarios
un 25% de los importes que en definitiva se obtengan a favor del actor, quien asumió los gastos de tramitación del
juicio, como las costas en general y la tasa de justicia.
Al respecto, esta Sala ha sostenido que la sola existencia de dicho pacto no autoriza a presumir la solvencia
patrimonial de quien dispone de un derecho que a esa altura del proceso reviste carácter de eventual(1). Por el
contrario, bien puede resultar indicativa de la situación contraria, ya que quien carece de recursos económicos puede
haber optado por ceder una parte importante de la indemnización que hubiere de corresponderle, a fin de tener
acceso a los servicios profesionales del letrado de su elección. De otro modo, no tendría posibilidad de solventarlo.
Todo ello, en el convencimiento de que, en relación a los restantes gastos y costas del proceso encontrará amparo en
el instituto del beneficio de litigar sin gastos(2).
Así, se ha sostenido que entre el beneficio de litigar sin gastos y el pacto de honorarios no surge incompatibilidad
alguna. Ello es así, por cuanto la franquicia está prevista a favor de “los que carecieren de recursos” (art. 78 del
CPCCN), y el convenio de honorarios consiste en participar en el resultado de éstos(3).
En consecuencia, considerando los parámetros indicados, el tribunal advierte que se encuentran reunidos los requisitos
para acceder a la franquicia solicitada.
Conviene recordar que la finalidad del beneficio de litigar sin gastos consiste en asegurar una adecuada defensa en
juicio a quienes, por la insuficiencia de sus recursos, no están en condiciones para afrontar las erogaciones inherentes
a la actuación judicial. La franquicia tiene por objetivo asegurar el principio de igualdad de las partes ante la
jurisdicción y por otro lado el de la garantía constitucional de defensa en juicio (arts. 16 y 18 C.N.). Por ello, la
concesión del beneficio de litigar sin gastos queda librada a la prudente apreciación judicial, en tanto los medios
probatorios incorporados al incidente reúnan los requisitos suficientes para llevar al ánimo del juzgador la
verosimilitud de las condiciones de pobreza alegadas(4).
Por lo expuesto y de conformidad con lo dictaminado por el Fiscal de Cámara, el Tribunal resuelve: I. Revocar la
decisión del 22 de marzo de 2023, por lo que se concede al actor el beneficio de litigar sin gastos, con los alcances
previstos en el artículo 84 del CPCCN. II. Con costas en la alzada en el orden causado en atención a la ausencia de
contradictorio (arts.68 y 69 del Código Procesal).
Regístrese, notifíquese y devuélvase. – Carlos A. Calvo Costa. – María Isabel Benavente. – Guillermo D. González Zurro
(Sec.: Adrián P. Ricordi).
(1) Expediente nº 59637/2015 Incidente nº 1, “Faisal, Natalia c/ Lucas, Ezequiel Martín y otro s/ Beneficio de litigar sin
gastos”, del 07/11/2017; íd. CNCiv., Sala K “H., M. L. s/ beneficio de litigar sin gastos”, del 6/4/00.
(2) Conf. CNCiv., Sala B, en autos “D., C. A. c/ G., A. E. y otros s/beneficio de litigar sin gastos”, R. 493.614.
(3) Conf. Díaz Solimine Omar Luis, Beneficio de litigar sin gastos, Ed. Astrea, 2003, 2º edición actualizada y ampliada,
p. 185; CNCiv. Sala E, “F., M. c/P., C. R.” del 20/02/1992.
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