Fallo
Fallo
Fallo
#29016709#259424730#20200717093956673
Poder Judicial de la Nación
CÁMARA NACIONAL DE APELACIONES DEL TRABAJO - SALA VII
88.385/2016
confeccionada en tiempo y forma, ello en todo caso puede derivar en una nueva confección
pero no en la condena dineraria por no cumplir los requisitos que establece la norma legal
para ello (art. 80 LCT y decreto Nº 146/01).
Por lo expuesto, propicio el rechazo del recurso en este aspecto.
Similar solución tendrán los planteos por las multas del art. 24013 y el incremento
indemnizatorio del art. 2 de la ley 25323, conforme la ausencia total de los requisitos
formales para la procedencia de las mismas, de lo cual, tampoco se refiere el apelante en su
memorial (conf. art. 11 Ley 24013), sin que la simple mención en el acta de audiencia ante el
SECLO supla a la intimación fehaciente a la que aluden las normas legales.
Por lo expuesto, propicio el rechazo de éstos planteos.
También, en mi opinión, cabe el rechazo del planteo de inconstitucionalidad del tope
del art. 245 de la LCT, pues en ningún pasaje del decisorio de la instancia anterior, se aplica
tope alguno a la indemnización de la citada normativa que prospera.
Seguidamente, me abocaré al tratamiento del recurso de la parte demandada quien
cuestiona centralmente la mejor remuneración normal y habitual que adopta la judicante de
grado. Adelanto que la queja no podrá prosperar.
En efecto, véase que la fecha del distracto de produce el 20 de julio de 2016, por lo
cual siguiendo la letra de art. 245 de la LCT, se tomará en cuenta para la base de cálculo de
la indemnización por antigüedad, la mejor remuneración normal, mensual y habitual
devengada durante el último año de prestación de servicio, es decir del julio de 2015 a 2016,
por ello, siendo que en agosto de 2016 percibe su mejor remuneración mensual, normal y
habitual – dentro del periodo contemplado por la ley – y teniendo en cuenta que, la
modificación que introdujo la ley 25.877 que modificó el vocablo "percibida" por "devengada",
no busco reducir derechos con respecto a los salarios que se percibieron si no que amplio los
mismos apuntando a que los salarios ganados pertenecen al trabajador (porque prestó
servicios) aunque materialmente no lo haya percibido efectivamente -ya sea porque no se lo
pagaron, porque no fue a cobrarlo, porque el despido se produjo antes de la fecha de cobro u
otra causa-, es decir, más allá de su percepción efectiva se encuentra incorporado a su
patrimonio al menos como crédito, sin que ello implique que los salarios percibidos en el
último año de servicio no se consideren como pretende la demandada.
Referirse a la mejor remuneración, normal y habitual percibida, como antes de la
modificación, podría haber conducido a resultados disvaliosos en el sentido que de
considerarse que percibido implicaba la remuneración cobrada en forma efectiva por el
trabajador, solo le bastaba al empleador pagar una suma menor a la que legal o
convencionalmente correspondía y lograr así una disminución en la indemnización por
despido, quedando en definitiva librado la fijación del monto del resarcimiento a la voluntad
del empleador, de donde éste se beneficiaría en razón de su propio incumplimiento. Es
evidente que esa no fue la intención del legislador, y fue por ese motivo la doctrina y
jurisprudencia establecieron que la remuneración percibida no era la que el empleador
Fecha de firma: 17/07/2020
Firmado por: NESTOR MIGUEL RODRÍGUEZ BRUNENGO, JUEZ DE CAMARA
Firmado por: HÉCTOR HORACIO KARPIUK, SECRETARIO
Firmado por: GRACIELA LILIANA CARAMBIA, JUEZ DE CAMARA
Firmado(ante mi) por: GRACIELA CARAMBIA, JUEZ DE CAMARA
#29016709#259424730#20200717093956673
Poder Judicial de la Nación
CÁMARA NACIONAL DE APELACIONES DEL TRABAJO - SALA VII
88.385/2016
realmente abonaba, sino que debía tomarse la mejor remuneración, normal y habitual que
el trabajador tenía derecho a percibir, sin que ello implique que los salarios mensuales,
normales y habituales que fueron efectivamente abonados durante el último año de servicio
no tengan que ser considerados como pretende la apelante.
En cuanto a las restantes consideraciones vertidas en el escrito sobre la cuestión,
señalo que – tal como la Corte Suprema de Justicia de la Nación ha sentado criterio – el
jugador no está obligado a ponderar una por una y exhaustivamente todas las
argumentaciones y pruebas agregadas a la causa, sino sólo aquellas que estimare
conducentes para fundar sus conclusiones, ni analizar todas las cuestiones y argumentos
utilizados qué – a su juicio – no sean decisivos (conf. CSJN, 29/04/70, La Ley 139-617;
27.8.71, La Ley 144-611 y citas jurisprudenciales en “Código Procesal…” Morello, Tº II-C,
Pag. 68 punto 2, Editorial Abeledo – Perrot; art.386, última parte, del Código Procesal; y de
esta Sala, ver autos: “Bazaras, Noemí c/ Kolynos”; SD 32313 del 29.6.99).
En consecuencia, conforme lo expuesto y acreditadas las diferencias con la liquidación
final abonada, propicio rechazar el planteo y confirmar lo dispuesto en la sentencia de grado,
destacando que en el caso el hecho que la actora no hubiera intimado al pago de la totalidad
de los créditos, no resulta relevante, puesto que está en cabeza de la empleadora el pago del
total de las indemnizaciones derivadas del distracto sin necesidad de requerimiento previo
por parte del trabajador.
Luego, respecto de los planteos contra la distribución de costas decidida en la
sentencia de grado, entiendo que las mismas deben modificarse pues la imposición de las
costas deben seguir criterios jurídicos y no meramente matemáticos, y en este caso, la
demandada resulto perdidosa en definitiva. Por ello, propicio modificar la imposición de
costas de grado e imponer las mismas en su totalidad a la demandada (art. 68 CPCCN).
Finalmente, con relación a los honorarios, cabe señalar que teniendo en cuenta la
entrada en vigencia de la ley 27.423, para justipreciarlos, es necesario indagar en cada caso,
la época o momento en que se cumplió el hecho, acto o relación jurídica que engendró y
sirvió de fundamento a la obligación, ya que esa circunstancia determinará cuál es la
legislación aplicable.
Ello así en concordancia con lo dictaminado por la Corte Suprema de Justicia de la
nación en la causa CSJ 32/2009 (45e)/ CS1 originario “ESTABLECIMIENTOS LAS MARIAS
SACIFA C/ MISIONES, Provincia de s/ acción declarativa” en el acuerdo del 4 de septiembre
de 2018 (manteniendo los fallos; 321:146, 328;1381; 329:1066, 3148, entre muchos otros) y
por la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires en el fallo “MORCILLO
Hugo Héctor c/ PROVINCIA DE Buenos Aires s/ INCONST. Decre-ley 9020” de fecha 8 de
noviembre de 2017, que remite al criterio adoptado por la Corte Suprema de Justicia de la
Nación a partir del precedente que se registra en el fallo 319:1915 (mantenido en fallos:
320;31; 2349 y 2756; 321,146; 330, 532 y 1757; 325:2250).
#29016709#259424730#20200717093956673
Poder Judicial de la Nación
CÁMARA NACIONAL DE APELACIONES DEL TRABAJO - SALA VII
88.385/2016
#29016709#259424730#20200717093956673
Poder Judicial de la Nación
CÁMARA NACIONAL DE APELACIONES DEL TRABAJO - SALA VII
88.385/2016
#29016709#259424730#20200717093956673