Radiografias en Niños
Radiografias en Niños
Radiografias en Niños
Doctor(a): Estudiante:
Ivon Veliz Carmelia Gonzalez
C.I:30.344.231
Los valores comunes de dosis efectiva en radiología dental son los siguientes:
Radiografía periapical: 1 – 8 μSv;
Radiografía panorámica: 4 – 30 μSv;
Radiografía cefalométrica: 2 – 3 μSv,
CBCT: 34 – 652 μSv, (para CBTC dentoalveolar de pequeño volumen) y 30-
1079 μSv (para CBTC craneofacial de gran volumen).
Por lo tanto, las dosis de los exámenes radiológicos dentales intraorales y
cefalométricos son más bajas, por lo general inferiores a la correspondiente a la
radiación natural de un día soleado. Las dosis en las radiografías panorámicas varían
más, pero incluso los valores más altos no superan a la exposición correspondiente a
unos pocos días tomando el sol sin protección. Los niveles de dosis en la CBCT,
siendo lógicamente mayores que las otras pruebas, nos aportan muchísima más
información precisa que los métodos anteriores. Por tanto, y siempre siguiendo el
principio de beneficio de los pacientes, la prueba diagnóstica a elegir será la que traiga
mayor beneficio exponiendo a los pacientes el menos número de veces y garantizando
no solo el correcto tratamiento y su éxito, sino también su seguridad.
Cuando se llega a la conclusión de que el paciente requiere una radiografía, se debe considerar
cual es el examen radiográfico más apropiado. Se puede seleccionar entre una variedad de
proyecciones, y la elección se basa en las relaciones anatómicas, el tamaño del campo y la
dosis de radiación de cada proyección. En odontología infantil las radiografías que se utilizan
con mayor frecuencia son:
Radiografías Intraorales: ofrece una imagen con alto detalle de los dientes y el hueso en el
área expuesta, entre ellas encontramos:
Radiografías Periapicales: muestran un diente completo y el hueso adyacente. Son muy útiles
para revelar caries, enfermedad periodontal y lesiones periapicales. Esencialmente existen dos
métodos para la toma de radiografías periapicales: la técnica paralela y la técnica de la
bisectriz. Técnica Paralela: la superficie de la película se coloca paralela al eje del diente con la
ayuda de un soporte el cual posee también un dispositivo alienador del haz de rayos x que
asegura el paralelismo y reduce la exposición parcial de la película; la anulación vertical del
cono para la toma de la radiografía con este tipo de técnica está dada solo con la colocación
exacta del cono contra el dispositivo alineador del sostén de la película. El rayo central choca
perpendicularmente con el eje del diente y con la superficie de la película hacia la mitad de la
longitud del diente. El hecho de colocar la película paralela al diente con un soporte hace que
la misma quede alejada del diente, situación que tendera a aumentar la imagen en la
radiografía, este efecto indeseable se compensa con el uso de un cono largo. A causa de la
poca profundidad del paladar y el piso de la boca de los niños, la ubicación de la película con
esta técnica está un poco comprometida, a pesar de ello las radiografías resultantes son
bastante satisfactorias.
Técnica de la Bisectriz: se basa en el principio de la isometría que establece que dos triángulos
son iguales si tienen dos ángulos iguales y un lado común. La aplicación clínica de esta regla
consiste en dirigir el rayo central de manera tal que caiga perpendicularmente sobre la
bisectriz que divide el ángulo formado por el eje del diente y la superficie de la película. La
anulación horizontal se consigue dirigiendo el rayo central a través de los contactos
interproximales y la angulación vertical dependerá de la proyección que deseamos realizar:
Proyección Maxilar Superior Maxilar Inferior Incisivos +40° -15° Caninos +45° -20° Premolares
+30° -10° Molares +20° -5° La ubicación del paciente para ambas técnicas son idénticas, para
radiografiar el maxilar superior la cabeza se coloca de modo que el plano sagital medio sea
perpendicular al piso y la línea tragus-ala de la nariz sea paralelo al piso. Cuando se está
radiografiando los dientes inferiores se ha de bascular ligeramente la cabeza hacia atrás para
compensar el cambio del plano de oclusión al abrir la boca. Con respecto a la ubicación de la
película en la boca del paciente, también es idéntica para ambas técnicas; en general las
películas se ubican de manera que todas las áreas de interés puedan ser visualizadas y por lo
general habrá múltiples vistas de un área en particular. En odontología infantil cuando se
emplea la técnica de la bisectriz donde el paciente debe sostener la película en la zona a
radiografiar con los dedos, se prefiere por la poca habilidad manual que puede tener el niño
utilizar el snap-ray (caimán), para facilitar la ubicación y soporte en boca de la película en el
momento de la toma.
Radiografía Lateral Anterior: se utiliza una radiografía N° 2 en caso de niños. La cabeza del
paciente se ubica de modo que el plano oclusal sea paralelo al piso y el plano sagital sea
perpendicular a él. El eje mayor de la película también perpendicular al piso. Se instruye al
paciente o a la madre del niño a que coloque la película justo al lado de la nariz de manera que
quede apoyada sobre la nariz y el labio superior, se sostiene la película con los dedos
extendidos. El cono se ubica de manera que el rayo x central caiga directamente sobre la
película en su punto central. El Angulo vertical es de +90°. Esta proyección demuestra toda la
porción anterior del maxilar superior que incluye dientes incisivos, tabla ósea vestibular y
espina nasal anterior; imagen importante en los casos de traumatismos en esa área, que nos
permite visualizar el desplazamiento, intrusión, fractura y ruptura de la tabla ósea vestibular y
poder realizar un mejor diagnóstico
Radiografía Lateromandibular: se emplea una película 12x18 cm. La cabeza del paciente se
ubica de modo que el plano oclusal sea paralelo al piso y el plano sagital sea perpendicular a
él. El eje mayor de la película también perpendicular al piso, se apoya en el hombro del
paciente y en su cara. Se instruye al paciente para que rote la cabeza hacia la película,
apoyando contra ella su nariz. Eleva entonces el mentón e inclina la cabeza unos 15° hacia la
película. El paciente sostiene la película con la palma de la mano y con los dedos extendidos. El
cono se ubica de manera que el rayo x central entre en un punto situado aproximadamente
1,25 cm por detrás y debajo del ángulo de la mandíbula, del lado opuesto al de la película. El
ángulo vertical es de -17°. El haz central de rayos x es perpendicular al plano horizontal de la
película. Esta proyección demuestra la región premolar-molar y el borde inferior del maxilar
inferior. Proporciona una cobertura mucho más amplia que la posible con las proyecciones
periapicales. Además, podemos citar las radiografías Waters y la Carpal.
Uso del delantal de plomo tanto para el paciente como para el odontólogo.
El lugar donde se ubique el aparato de rayos x debe ser amplio y con una barrera de
protección.
En los equipos de rayos x dentales el límite máximo del cronómetro que controla la
exposición no debe exceder de 5 seg.
Todo equipo odontológico de rayos x deberá poseer un filtro.
El operador debe permanecer fuera del haz de radiación como mínimo a 2 metros del
tubo y del paciente. –
El odontólogo y su asistente nunca deberán sostener con sus dedos la placa
radiográfica. –
Ninguna persona deberá sostener al paciente durante la toma de las radiografías. En
caso de ser necesario la persona que sostenga la radiografía debe estar protegida y
cumplir con ciertas características.
Los niños con discapacidades Tienen muchas más probabilidades de sufrir enfermedades
relacionadas con su boca como son: la caries, la pérdida de dientes de forma precipitada, la
periodontitis (perdida del hueso de la encía) e incluso las maloclusiones (mal alineamiento de
los dientes). Esto se debe a que estos pacientes suelen tener una higiene bucal de deficiente
que por problemas de movilidad o psíquicos no son capaces de cepillarse los dientes
correctamente por s i mismos.
No todas las técnicas radiográficas se pueden practicar con éxito en todos los pacientes; a
menudo es necesario modificarlas para acoplarse a pacientes con discapacidad. El radiólogo
debe ser competente para variar las técnicas radiográficas con el fin de cumplir con las
necesidades especiales de cada paciente.