Sem3 UNI
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Lima, 2023
Política según RAE
política. F.
1. Arte, doctrina u opinión referente al gobierno de los Estados. ‖
2. Actividad de quienes rigen o aspiran a regir los asuntos
públicos. ‖
3. Actividad del ciudadano cuando interviene en los asuntos
públicos con su opinión, con su voto o de cualquier otro modo. ‖
4. Cortesía y buen modo de portarse. ‖
5. Conjunto de orientaciones o directrices que rigen la actuación de
una persona o entidad en un asunto o campo determinado. Su
política es no ofender a nadie. ‖ ~ de avestruz, o ~ del
avestruz. F. táctica de avestruz.
¿Por qué necesitamos la filosofía política? (29)
DEFINICIONES DE POLITICA
Para Aristóteles el ser humano es un ser racional y un ser social, binomio que se
apropia de la función comunicadora de la palabra como fundamental para
expresar lo que será justo o injusto en la sociedad, lo que es valioso o no entre
los hombres, lo que es dañino o bueno para el bien común, conceptos que se
irán desarrollando en cada ser desde la familia hasta su inserción en la
ciudad.
En términos romanos, la expresión ‘vivir’ es sinónimo de ‘estar entre los hombres’ lo mismo
que ‘morir’ lo es de ‘cesar de estar entre los hombres’. Esto es, el hombre en tanto hombre
es necesariamente social, contexto en el que surge el concepto de Civitas, ciudades que se
organizaban bajo el precepto de la ley y que jurídicamente comienza a asignar el poder
en unos cuantos como la máxima autoridad: el senado y posteriormente el emperador.
Aristocracia
Monarquia
Plutocracia
Democracia
Antiguamente la cuestión del buen gobierno tenia que ver tanto con
el carácter de los gobernantes –su prudencia, su valor, su
generosidad, etc.-, como con el sistema de gobierno propiamente
dicho. Por supuesto, también había debates sobre cuál era el sistema
adecuado: sobre si la monarquía era preferible al gobierno
republicano, por ejemplo, o viceversa. Hoy en día, el énfasis no se
pone en el mismo lugar: prestamos mucha más atención a las
instituciones del gobierno, y menos a las cualidades personales de
quienes las hacen funcionar. (17)
De acuerdo con Marx, en las sociedades capitalistas el estado tenia
que servir a los intereses de la clase capitalista, en las sociedades
socialistas serviría a los intereses de los trabajadores y,
eventualmente, bajo el comunismo desaparecería por completo.
Desde este punto de vista, la discusión sobre la mejor forma de
gobierno deja de tener sentido: la historia resolverá el problema por
nosotros (19)
Pero si las experiencias del siglo XX acabaron con el tipo de determinismo histórico
que tan influyente había sido en el siglo XIX, para principios del XXI había surgido
ya una nueva forma de fatalismo. Se inspiraba en el crecimiento de una nueva
economía mundial, y en la idea de que los estados tienen cada vez menos margen
de maniobra si quieren que sus ciudadanos se beneficien de esa economía global.
Cualquier estado que tratase de resistirse al mercado vería a su economía
desplomarse. Además, los únicos estados con posibilidades de éxito en la nueva
competencia mundial eran las democracias liberales, de manera que, aunque una
sociedad pudiera gobernarse de una modo distinto –mediante un régimen islámico,
por ejemplo-, el precio a pagar por ello seria un relativo declive de su economía, y
supuestamente ninguna sociedad deseaba tal cosa. Era la llamada tesis del «fin de
la historia». En esencia, afirmaba que todas las sociedades se verían impulsadas
por fuerzas económicas a adoptar básicamente la misma forma de gobierno (20-
21)
Hoy en día, naturalmente, damos por supuesta la democracia hasta
el punto de que nos cuesta imaginar otra forma de gobierno
legitima. ¿Cómo se ha producido este cambio? La historia es
compleja, pero una parte indispensable de ella corresponde a los
filósofos que argumentaron a favor de la democracia, cuyas ideas
fueron asumidas, popularizadas e incorporadas al pensamiento
político dominante. Probablemente el más famosos de esos filósofos
sea Jean Jacques Rousseau, cuya influencia en la Revolución Francesa
a través de su libro El contrato social casi nadie discute (24)
Bibliografía
❑ Miller, D. Filosofía política; Una breve introducción, Capítulo I: ¿Por qué necesitamos la filosofía política?,
págs.: 11-34.
❑ Adaptado de Esther Fragoso Fernández