Concepciones Filosoficas Sobre El Ser Humano
Concepciones Filosoficas Sobre El Ser Humano
Concepciones Filosoficas Sobre El Ser Humano
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Filosofía de la Educación Unidad n°4
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Filosofía de la Educación Unidad n°4
los principios emanados de la bondad y sabiduría de Dios que están inscritos en los seres
humanos en forma de Ley natural.
La Ley natural es parte de la Ley Cósmica, que es la ley que rige toda la Creación. Y
puesto que el ser humano está armoniosamente integrado en la Creación, ha sido creado por
Dios para que goce de la felicidad eterna, y ha sido investido de dignidad, de igualdad, pues la
Ley natural es igual para todas las personas.
Ahora bien, el ser humano puede obedecer o desobedecer la ley natural, ya que está
dotado de libre albedrío, y posee la capacidad de elegir entre el bien y el mal. Aunque su
conciencia le dice lo que está bien y lo que no, tiene libertad para decidir. A diferencia de la
posterior filosofía luterana y calvinista de los protestantes, para Tomás de Aquino el ser humano
no está determinado ni predestinado.
También la concepción del ser humano en Sto. Tomás está basada en la concepción
aristotélica. El ser humano es un compuesto sustancial de alma y cuerpo, representando el
alma la forma y el cuerpo la materia de dicha sustancia.
Sto. Tomás afirma la unidad hilemórfica del ser humano, que constituye una unidad en
la que existe una única forma sustancial, el alma racional, que informa inmediata y directamente
a la materia prima constituyendo el compuesto "hombre".
Del mismo modo que Aristóteles había concebido la existencia de una sola alma en el
ser humano, que engloba las funciones vegetativa y sensitiva, santo Tomás afirma que esa
única alma es la que regula todas las funciones del "hombre" y determina su corporeidad.
Edad Moderna: David Hume
En esta nueva visión del ser humano han tenido mucho que ver las nuevas corrientes
filosóficas de la época y la novel concepción de la ciencia (revolución científica). Para estudiar
este período, hemos elegido a David Hume (1711-1776). ¿Por qué razón? Por su audaz manera
de romper con los dogmatismos y prejuicios filosóficos de la época.
En la Edad Moderna, la mirada de la filosofía se vuelve hacia el propio ser humano, que
aparece escindido entre el cuerpo cuyo funcionamiento debe ser desvelado por la ciencia, y el
espíritu, mente o consciencia, y sede del pensamiento. Pero, ¿en qué consiste ese
espíritu? Para el filósofo escocés David Hume la cuestión es extremadamente difícil de resolver.
Hume fue, a este respecto, un escéptico.
Hume pensaba que el "yo", que el "espíritu" o "alma" no puede demostrarse realmente,
que el "yo", "espíritu" o "alma" era una mera idea, una creencia fruto de la costumbre. Solamente
podemos alcanzar la certeza, argüía Hume, de aquello que percibimos a través de nuestros
sentidos. Y puesto que carecemos de experiencia sensorial del "yo", éste es indemostrable; y
por eso, y a lo sumo, tenemos la creencia de que existe basándonos en nuestros recuerdos.
Edad Contemporánea: Freud
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