Unidad 2 Delincuente Sexual y de Género
Unidad 2 Delincuente Sexual y de Género
Unidad 2 Delincuente Sexual y de Género
género
Unidad 2. Delincuente sexual y de
género
Presentación de la unidad.................................................................................. 3
Objetivos................................................................................................................... 4
2. Delincuente sexual y de género................................................................... 5
2.1 Factores de riesgo asociados................................................................. 6
Temario 2.2 Características del delincuente sexual y de género...................... 8
2.3 Motivaciones del delincuente sexual y de género......................... 10
2.4 Modus operandi, modo de operación................................................ 17
2.5 Perfil criminal.............................................................................................. 22
2.6 Perfil de la víctima.................................................................................... 25
¡Bienvenido a la unidad 2!
Durante esta segunda unidad tendrás oportunidad de estudiar, desde una
concepción un tanto positivista, la construcción del delincuente sexual, los
factores de riesgo asociados y sus características.
Analizaremos las diferentes motivaciones del delincuente sexual, así como su
modo de operar.
Comentaremos 4 tipos de perfiles del criminal sexual: el incestuoso, el que
conoce a su víctima, el criminal que desconoce a su víctima y el pedófilo.
Por último, analizaremos el perfil de la víctima, como posibles detonantes, pero
no determinantes.
“Lucho por una educación que nos enseñe a pensar y no por una educación que
nos enseñe a obedecer”. Paulo Freire.
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Objetivos
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2. Delincuente sexual
y de género
El acto de la violación y los delitos relativos a las ofensas sexuales se clasifican en Psicología como conductas
sexuales violentas y agresivas. En general, el concepto de conducta sexual violenta y agresiva comprende
una extensa serie de comportamientos, desde la exhibición pública de los genitales, el acoso sexual, el abuso
sexual, la violación y el incesto hasta los actos de sadismo en los que se presentan la tortura y el asesinato. En
todos estos casos se producen alteraciones y problemas psicológicos en la víctima, con diversos grados de
seriedad, que incluso pueden permanecer a través del tiempo y minar la personalidad de la víctima de por
vida.
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2.1 Factores de riesgo
asociados
Matamoros (2014), analiza que la sexualidad, el sexo y todos los asuntos sexuales han tenido un inadecuado
tratamiento y una escasa atención a lo largo de la historia. El tema del sexo no ha estado muy bien visto en la
historia reciente, debido a varios factores, entre los que destacan:
Hasta hace pocos años, la Los factores socioculturales Keijzer (1995), sugiere que en
sexualidad se trataba tienen una función básica en México las costumbres
únicamente como un proceso la condonación o el fomento sexuales hacen de las mujeres
que servía para reproducir a de la coerción y el abuso objetos, ya que la sexualidad
la especie, centrando la sexual. La construcción social masculina no promueve la
atención y la responsabilidad de la sexualidad masculina ha relación sexual como un
reproductiva en las mujeres. apoyado el abuso a las encuentro, sino más bien
Los hombres podían mujeres. Al ser consideradas como un “ejercicio de poder
considerarse de diferente éstas como objetos sexuales, y afirmación de la
manera, con una conducta de la sexualidad masculina le masculinidad con base en la
mayor permisividad. Esta niega a ellas sus derechos y potencia y el tamaño de sus
doble moral es uno de los poder en el campo sexual. genitales”.
resultados de la educación
sexual inculcada durante
siglos.
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2.1 Factores de riesgo
asociados
Al considerar la socialización
de los hombres jóvenes y su • La ausencia de modelos masculinos positivos.
relación con la violencia • La falta de información.
doméstica y el asalto sexual, • La falta de socialización positiva sobre las relaciones
las investigaciones sugieren sexuales y las relaciones entre hombre y mujer.
que varios factores se asocian • Haber observado violencia o haber sido víctima de violencia
con la violencia doméstica: en la familia de origen.
Los niños aprenden sobre el significado de ser “hombre" en el peor de los sentidos: algunos investigadores
describen esta variable como el factor de hipermasculinidad. Casi todos los hombres están expuestos a este
tipo de adoctrinamiento sexual. Estas creencias las promulgan principalmente otros hombres: padres, tíos,
abuelos, amigos, entrenadores, dirigentes de grupos juveniles y estrellas de la farándula, entre otros.
Los niños aprenden por medio de señales verbales y no verbales a centrarse en sí mismos y a pensar
rígidamente sobre el sexo, a considerar a las mujeres como simples objetos de quienes solo se obtiene sexo,
no como compañeras en igualdad de circunstancias con sus propios deseos y expectativas. Aprenden que
tienen que iniciar su actividad sexual, que se encontrarán con niñas renuentes; pero que si son persistentes, si
insisten lo suficiente, si las halagan y no se dan por vencidos, entonces conseguirán lo que quieren. Ven su
relación con las mujeres como un reto adverso y aprenden a utilizar su poder físico y social para superar a
esa persona menos importante (Matamoros, 2014).
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2.2 Características del
delincuente sexual y de género
La marcada tendencia a la distorsión se considera como una de las características principales, ya que esto
explicaría un estilo de funcionamiento en el que la persona se crea una idea, se forma una opinión sobre lo
que desearía que pasara y actúa como si fuera a ocurrir de verdad, sin considerar las probabilidades reales e
ignorando las reglas sociales, y siguiendo sus propios criterios, lo que potencia la falta de respeto por los
derechos y sentimientos de los demás (Jiménez, 2009).
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2.2 Características del
delincuente sexual y de género
Matamoros (2014), menciona que se han encontrado en 50% de violadores y 45% de abusadores
infantiles, déficits de asertividad o capacidad de dar a conocer de manera apropiada a otros sus
emociones y sus deseos.
A nivel cognitivo, Albert Bandura, menciona cuáles son los mecanismos por los que una persona
puede auto justificar una conducta reprochable, como puede ser una agresión sexual: la capacidad de
empatía en los violadores (entendida como capacidad de sufrir con o ponerse en el lugar del otro) es
muy limitada y siempre tienden a justificar su acción, ya sea negando la existencia de la misma o
culpando a la víctima de la acción.
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2.3 Motivaciones del delincuente
sexual y de género
Sin duda, uno de los principales cuestionamientos se basan en tratar de entender cuáles son las
motivaciones de los sujetos para actuar de alguna forma en específico.
Matamoros (2014), especifica que los procesos motivacionales se refieren a las causas, los orígenes,
cuyo análisis nos permite comprender comportamientos, reacciones, deseos, justificaciones y
pensamientos.
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2.3 Motivaciones del delincuente
sexual y de género
Matamoros (2014), hace referencia a Kleigninna y Kleigninna (1981), extrajeron que la motivación
puede considerarse como un constructo teórico que se define como un proceso multideterminado
que energiza y dirige al comportamiento con base en un objetivo.
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2.3 Motivaciones del delincuente
sexual y de género
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2.3 Motivaciones del delincuente
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2.3 Motivaciones del delincuente
sexual y de género
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2.3 Motivaciones del delincuente
sexual y de género
Solomon y Corbit (1974), tratan de explicar la motivación que subyace a fenómenos como la adicción a
las drogas y a las reacciones fisiológicas y emocionales que se producen como resultado de situaciones
extremas de peligro físico, como el paracaidismo.
De acuerdo a esta teoría, los estímulos que originan incrementos de excitación que finalmente producen
lo contrario, una reacción de calma, del sistema nervioso. Mientras que los estímulos que originan
disminuciones en la excitación finalmente causan un aumento en ésta. Además, ante cada exposición a
un estímulo, la respuesta original permanece bastante estable o puede incluso disminuir en tanto que el
proceso opuesto, la reacción a la respuesta original, tiende a aumentar su fuerza.
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2.3 Motivaciones del delincuente
sexual y de género
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2.4 Modus operandi,
modo de operación
Gómez (1999), señala que es posible clasificar a los agresores sexuales en cuatro grupos
en función del tipo de víctima:
Agresores Agresores
sexuales en el sexuales a
ámbito familiar desconocidos
Agresores Agresores
sexuales a sexuales a
conocidos. menores
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2.4 Modus operandi,
modo de operación
Violencia sexual cometida por agresores sexuales desconocidos
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2.4 Modus operandi,
modo de operación
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2.4 Modus operandi,
modo de operación
Violencia sexual cometida por agresor sexual que conoce a sus víctimas
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2.4 Modus operandi,
modo de operación
El modus operandi
del agresor sexual de La edad media se sitúa en los 40 años; los mayores de 50 años
menores de edad, es prefieren a menores de 10 años; mientras que los primeros eligen
el siguiente: adolescentes entre 12 y 15 años de edad.
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2.5 Perfil criminal
El diagnóstico de trastorno antisocial de la personalidad
es uno de los más frecuentes en agresores sexuales. Es
habitual encontrar en delincuentes sexuales adolescentes
un patrón de conducta con escaso control de impulsos y
de conducta antisocial general (Soria y Hernández, 1994).
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2.5 Perfil criminal
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2.5 Perfil criminal
La mayoría de los violadores no tienen como objetivo procurarse placer sexual; el sexo es un
instrumento, porque ellos podrían tener compañeras con quienes obtener este tipo de satisfacción.
Siempre hay elementos patológicos en el tipo de educación, en el padre, en la madre o en ambos a la
par.
Se trata de una persona que no distingue entre conquistar y violar a una mujer; 80% de los violadores
son menores de 30 años de edad. Cuando son mayores de esta edad, pueden poseer características
sádicas, por lo regular no están armados, pues solo uno de cada cuatro utiliza un cuchillo u otro
instrumento para atacar a su víctima (Hazelwood, 1990).
El victimario está motivado por la necesidad de
validar su poder, ya que los factores de soledad y baja
autoestima disminuyen su percepción de autoridad. El
factor precipitante es el deseo de dominar a la pareja
El violador se percibe como un hombre muy masculino,
orientado a la acción, se comporta como “muy macho”
y utiliza el sexo en contra de su víctima. Percibe
detalles minuciosos como provocaciones de la víctima
para seducirlo. Violenta a la víctima degradándola,
humillándola, infligiendo intenso dolor en ella y
dominándola. El violador no discrimina, y es por lo
general una persona que conoce a su víctima
(Elazelwood y Warren, 1990).4
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2.6 Perfil de la víctima
• Mujeres adultas
Partiendo del concepto sociológico de • Mujeres de tercera edad
“poblaciones de riesgo” y utilizando las • Menores de edad
encuestas de victimización, se han intentado • Prostitutas
determinar aquellos colectivos sociales con • Marginados sociales
riesgo de ser víctimas de un delito. No
obstante, los diversos estudios sobre perfiles de
víctimas señalan claramente la imposibilidad de
predeterminarlos más allá de factores
sociológicos genéricos (Soria, 1992).
De forma más precisa podemos afirmar que cualquier persona puede sufrir una agresión sexual,
pero especialmente aquellas de sexo femenino. Todo ello nos obliga a partir de la población general
y a observar a la víctima dentro de la esfera de la “normalidad”. Los intentos de clasificación
tipológica resultan inútiles en la práctica psicosocial, aunque pueden resultar de alguna validez en el
derecho aplicado.
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Para saber más
Para saber más sobre los temas vistos en esta unidad revisa los siguientes materiales:
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Cierre de la unidad
¡Felicidades!
Has concluido la unidad 2, continúa esforzándote.
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Fuentes de consulta
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