Chistes Legible

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Prólogo

El chiste como un acto de caridad


P. Jorge Enrique Mújica, LC

Cada vez que entramos a una iglesia lo primero en lo que se suelen


posar nuestros ojos es en el crucifijo que desde el altar preside todo
el lugar. La cruz y el crucificado que hay en ella se yerguen como
puntual cumplimiento de aquella profecía: "cuando sea levantado
de la tierra atraeré a todos hacia mí" (Jn 12, 32).

Hay en la sensibilidad popular una proximidad hacia lo que po-


dríamos llamar "una asimilada teología de la cruz" Esa teología de
la cruz no es otra cosa que una afinidad al sufrimiento de Dios por
la sencilla razón que de hecho los cristianos también sufrimos: si
Dios sufrió cómo no íbamos a sufrir también nosotros.

Pero tantas veces se olvida que si bien es cierto que la cruz y el


sufrimiento son una dimensión de la fe cristiana no lo es menos
la alegría. Y es que el cristianismo no es una religión de viernes
santo sino de domingo de resurrección. O en otras palabras: no es
una fe de sufrimiento y tristeza sino de alegría y gozo. El sufrir es
un apartado transitorio y muchas veces necesario pero el gozo es
un estado que Dios no sólo da como premio en el cielo sino que
también nos permite experimentarlo en diferentes momentos de
nuestra existencia como anticipo de lo que vendrá de modo defi-
nitivo después.

¿Cómo podemos estar tristes si Jesucristo ha resucitado? ¿Te ima-


ginas a una mamá triste porque su hijo revivió? La resurrección
es una fuente de alegría. Una fuente que llevó a san Pablo a decir

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PR Ó LO G O

muy claramente a los filipenses: "Estén alegres en el Señor. Se los


repito: estén alegres" (Filipenses 4, 4).

La alegría del cristiano nace de saber que Dios no está muerto. Y


si Dios está vivo, ¿podemos realmente temer algo o estar tristes
de modo permanente? La verdadera alegría nace de la conciencia
de la resurrección. Por eso subraya san Pablo cuál es la fuente del
Niños
gozo: es el Señor, el Señor resucitado.

La alegría también nos abre paso al humorismo. O en otras pala-


bras, nos posibilita ver la vida con simpatía.

Muchas personas han canalizado esa alegría que dejan las dife-
rentes situaciones de vida recogiendo de forma narrativa, sim-
pática y risueña, chascarrillos que la literatura especializada ha
venido a denominar con el título de "chistes" y a enmarcarlo
na señora va por la calle con su pequeño hijo tomado de
dentro del género jocoso.
U la mano, esperan al autobús y la mamá dice al niño: 'Mira
hijo, al subirnos al autobús, dices al conductor que tienes cuatro
La finalidad del chiste es suscitar risa, endulzar la vida con son-
años, para que no te cobren boleto'. Suben y el conductor le pide su
risas y muchas veces también, indirectamente, dejar lecciones de
boleto. El niño dice que tiene cuatro años. El conductor no lo cree
vida valiéndose de cuestiones graciosas. Cuando se trata de un
y le pregunta: '¿Cuándo cumples cinco?'. Él responde: '[Cuando me
sano humor el chiste se convierte en una forma de caridad porque
baje del autobús!'.
busca aderezar la existencia del próximo al dibujar esa línea curva
que ilumina y transforma un rostro en un rostro alegre.
n niño va por la calle, encuentra a un paletero y le pregunta:
U '¿Tiene paletas de coco?'. 'Sí. Sí tengo'. El niño añade: '¿Y no
le da miedo?'.

n niño le dice a su papá: 'Oye, papá. Mi mamá dice que


U descendemos del chango'. 'Mira, hijo: dice el papá: 'Con la
familia de tu mamá yo no me meto:

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JUMAR Chispazos de Humor

• Mamá, rnamál, dice un niño a su madre: '¿Por qué no me lle-


ivas al zoológico a ver al gorila que acaban de traer?'. '¿Cómo C enaba Pepito en la casa de su abuelita y, al final de la cena,
le pregunta que si quiere más. Él contesta: 'No abuelita. Ya
estoy lleno'. Ella le dice: 'No seas mal educado: se dice estoy salís
puedes pedir eso, teniendo aquí a tu tío Javier?'.
fecho'. Terminan de cenar y se van a la sala. Abren la ventana y se
ve la Luna llena, hermosa. La abuelita comenta a Pepito: 'Mira,
nieto, qué bonita Luna llena'. El cual le reclamó: '¡Ay, abuelita! Eres
L e preguntan a_ Pepito en clase de religión: '¿Cuántos sacra-
mentos hay?'. El responde: 'Ninguno'. '¿Cómo que níngunor;
aclara, a maestra. Pepito responde: 'Es que antier, antes que mu-
un poco mal educada, porque no se dice Luna llena, sino Luna
satisfecha'.
riese mi abuelita, le dijeron que le daban los últimos sacramentos'.

reguntan a Pepito: '¿Cuándo instituyó Jesucristo el sacra- U n niño y su madre visitan la tumba de su padre. El niño
pregunta a la mamá: 'Oye mamá, ¿está mi papá en la glo-
P mento del matrimonio?'. 'Ya sé', dice Pepito. 'Cuando dijo
¡Perdónalos Señor, pues no saben lo que hacen!'.
ria?'. Ella responde: 'No hijo. Él está en el cielo ... Somos nosotros
quienes gozamos de la gloria'.

U na niña dice a su mamá: 'En el colegio, me llaman Azafa-


ta'. '¿Quiénes, hija? Ella señala con las manos atrás, junto y P epito pasea por al bosque con sus amigos y le pica una
serpiente. Regresa a su casa asustado, corriendo, y dice a
hacia delante: 'Los situados en las primeras filas, en las del medio su mamá: '[Me ha picado una víbora!'. Ella le pregunta: '¿Cobra,
y en las de atrás'. hijo?'. 'No mamá. ¡Gratis!'.

H ace muchos años, hubo un boxeador campeón mundial,


llamado Rubén Olivares el púas. Un niño le preguntó, E n tiempo de Navidad, va santa Claus en su trineo cargado
de regalos, sobrevolando un pueblo del África. En la pla-
pues, al papá: '¿Sabes papá quién es Ruben Olivares?' No se acor- za principal, varios niños negritos, desnutridos, juegan futbol y
daba y el papá dijo: 'Me suena, me suena ...'. Y el niño replicó: 'No ven que el trineo aterriza. Rodean a santa Claus, expectantes, a la
te suena, papá. ¡Te rompe los dientes!'. espera de algunos regalos. Santa Claus les pregunta: 'Niños, ¿ya
comieron?'. 'No: le responden. Y él arruga la frente, agita un dedo
de la mano y dice muy serio: '[Pues se quedan sin regalos!'.
laticaban dos comadres fuera del mercado y una llevaba de
P la mano a su hijo, de ocho años. La comadre comenta: 'Tu
hijo tiene tu nariz y los ojos de su papá'. El niño abrió mucho los
ojos, miró hacia abajo y añadió: '¡Y los pantalones de mi hermano!'. E rase un niño que le llamaban la campana porque era tan
tontín, tan tontón ...

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JUMAR Chispazos del lumor

epito está en clase de religión y le preguntan: '¿Con qué mías, Joel, Nehemías ...'. La maestra señala: 'Te falta uno'. Pepito le
P mató David a Goliat?'. 'Con una moto', responde Pepito.
'No; dice la maestra. 'Fue con una honda: 'Bueno', aclara Pepito,
pide una ayudadita y ella dice: 'Hay uno que se lo tragó la ballena'.
Y Pepito grita: '[Pinocho!'
'la verdad es que no sé la marca exacta!'.

U n día una señora le pregunta a Pepito: 'Oye, Pepito. ¿En tu


casa suelen bendecir los alimentos antes de cada comida?'.
U n niño padecía de complejo de ventilador de pedestal.
Sentado en un sofá al lado de su papá, soplaba fuerte-
mente hacia delante. El papá enfadado le da un manotazo en la
'No, no hace falta. Mi mamá ya aprendió a cocinar'. cabeza y le dice: '[Deja de hacer eso!'. El niño continúa soplando,
pero girando la cabeza a la derecha y a la izquierda.

n niño dice a su mamá: 'En la escuela, me pegaron unos


U niños'. La mamá le consulta: 'Y ¿no te vengaste?'. Él grita
entre sollozos: '¡Si no me vengo, me matan!'. P epito pregunta a su mamá: '¿Cómo nacen los niños?'. Ella
responde: 'Primero sale la cabeza, después los brazos y al
final los pies'. Pepito queda pensativo, levanta luego las cejas y con-
sulta: 'Y luego, ¿cómo los arman?'.
na mamá aconseja al niño: '¡Por favor, hijo mío, no te
U aficiones jamás a la bebida!'. '¡No mamá!, le asegura
él. Ella insiste: 'Porque, ¿sabes a dónde van a p.arar los bo-
rrachos?'. Y él asiente con la cabeza diciendo: 'Sí, mamá. A la
cantina'.
P epito pregunta a su mamá: '¿Qué alimento cocinaste hoy?'.
La mamá responde: 'Rajas, hijo'. Y él añade: 'No, mamá. Te
lo prometo. No diré'.

abía un niño que era tan goloso, tan goloso, que al pasar
H frente a una pastelería se le hizo agua la boca y se ahogó. E l papá de Pepito dice a su hijo: 'Pepito, la cigüeña te aca-
ba de traer un nuevo hermanito. ¿Quieres conocerlo?'.
'No .. .', responde Pepito 'Mejor muéstrame a la cigüeña'.

reguntan a Pepito en la clase de religión: '¿Qué son las epís-


P tolas?'. Y el responde: 'Las esposas de los apóstoles'.
S e acerca la Navidad y la mamá dice a Pepito: 'Pepito, haz
una carta al niño Dios para que te traiga regalos'. Pepito se
sienta frente a su escritorio, teniendo enfrente una imagen de
n clase de religión, la maestra pregunta a Pepito: 'Dime el
E nombre de cinco profetas'. Pepito responde: 'Isaías, Jere-
la Virgen de Guadalupe y comienza a escribir: 'Querido niño
Dios. Este año me he portado muy bien. Quiero que me traigas

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JUMAR

una bicicleta y una patineta'. Voltea a ver a la Virgen y comprende


que no se ha portado muy bien. Coge el papel, lo hace bola y lo
tira a la basura. Inicia de nuevo la carta: 'Querido niño Dios, este
año me he portado bien. Quiero que me traigas una bici y una
patineta'. Ve otra vez a la Virgen y entiende que no se ha portado
bien. Coge el papel y lo tira a la basura. Entonces enojado, escribe:
'Niño Dios. ¡Tengo secuestrada a tu mamá y, si no me traes una Compadres y comadres
bici y una patineta, no te la regreso!'.

., rase un joven que consumía mariguana. Un día dijo a su


E hermanito de diez años: 'Carnal, dale una fumadita a ver
qué sientes'. El niño la dio y el otro preguntó: '¿Qué sientes, carnal?
¿Qué sientes?'. 'Nada', contestó el pequeño. 'Dale otra vez', propu-
so el grande. La dio y otra vez le preguntó: '¿Qué sientes, carnal?
¿Qué Sientes?'. 'Nada', respondió de nuevo el niño. A la tercera
n señor le dice a su compadre: 'Quiero abrir un comercio'.
vez, aspira el humo y el mayor le vuelve a preguntar, a lo que res-
ponde el niño: 'Nada. Ni los pies, ni las manos, ni la cabeza'. U El otro le comenta: '¿Cuánto dinero tienes para comenzar?'.
'Nada', responde, 'pero tengo una llave ganzúa'.

n la playa de Cancún, jugaban tres niños morenos cuando


E vieron pasar a un niño rubio. Y comenzaron a tirarle pedra-
das. Un señor lo vio, se puso furibundo y los regañó: Uno de ellos H abía dos amigos a quienes gustaba mucho el beisbol y ju-
gaban en el mismo equipo. Un día hicieron un trato: el
responde: 'Cálmese, señor. ¡Solo jugamos el tiro al blanco!'. primero que se muriera le comunicaría al otro si había beisbol
en el cielo. Se murió uno de ellos y, a los dos meses, se apareció al
otro para darle dos noticias: 'Tengo una buena y otra mala'. 'Dime
laman por tel~fono ª,un hogar y la niña_ ~ontesta. E,scucha primero la buena', propuso el segundo. 'La buena es que sí hay
L que le dicen: ¿Es ahí la casa de la familia Porras?. Y ella
contesta: '¡Sí, sí, sí! ¡Familia Porras, Porras! ¡Sí, sí, sí!'.
beisbol en el cielo'. '¿Y cuál es la mala?'. 'Que te toca pichar dentro
de dos semanas'.

P laticaban ~res señore~ de la tercera edad. U~o dijo: 'Yo tengo


sesenta anos y me siento como de treinta. Otro comentó:

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JUMA R
Chispazos de I Iumor

'Yo tengo setenta y me siento como de treinta y cinco'. Y el tercero


añadió: 'Yo tengo ochenta y me siento que ya no levanto'.
•.
Dos comfadres se encuentran en un restaurante. Uno pre-
~unt~: .},Cómo estás, c?mpad;e?'. '¡Estoy preocupado!'.
¿ ~º:
que razon .. Consulta el primero. Porque mi suegra está es-
~nb1endo una nov~l~'. 'N~ t~ preocupes por eso'. 'Sí. Es muy preo-
ntre compadres, uno pregunta a otro: '¿Quieres mucho a
E tu suegra?'. 'Sí', contesta el segundo. 'La quiero tanto como
a una cerveza'. '¿Y por qué como a cerveza? Demanda el primero.
cupante. Porque, s1 tiene éxito, se va a inmortalizar'.

'Porque la quiero fría y espumosa'.

n señor se da cuenta que su compadre está perdiendo la


U memoria y decide preocuparse por él. Una semana des-
pués se lo encuentra y le pregunta: '¿Cómo va el problema de tu
memoria?'. El interesado responde: 'Bastante mejor, pues hace
tres días ví a un doctor especialista en estos casos y me recetó una
medicina muy buena'. 'Y ¿cómo se llama el doctor?'. '¡Ay! ¿Cómo
se llama? ¿Cómo se llama ... ?'. Estaba junto a su esposa Guadalupe
y le pregunta: '¿Cómo se llama ese lugar famoso en México don-
de va mucha gente de peregrinación?'. Ella contesta: 'La Villa de
Guadalupe'. Entonces él responde: '¡Guadalupe, mi vida! ¿Cómo
se llama el doctor?'.

os compadres conversaban y uno preguntó al otro: '¿Qué


D es de tu suegra?'. Éste respondió: '¿No sabías? Ya murió'.
'Y ¿cómo murió la pobre señora?'. 'De cataratas'. Explicó el amigo.
'Hombre, de eso no se mueren las personas'. 'Sí contesta' el otro.
'La invité a las cataratas del Niágara ... y le di un empujoncito'.

ncuentra un señor a un amigo y le dice: 'Oye: de nuevo me


E han dado ganas de ir a Europa'. '¿Qué? ¿Ya fuiste una vez?'.
'No', aclara el amigo, 'pero otra vez me dieron ganas'.

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Rancheritos

staban dos ingenieros de caminos a la orilla de pueblo, viendo


E por dónde trazar una nueva carretera. Llega un rancherito y
les pregunta: '¿Qué están haciendo, señores?'. 'Mira, le dice uno. 'So-
mos ingenieros y estamos viendo cuál será el lugar para la nueva
carretera. A ver si tú nos das una idea. Platícanos: cando ustedes van a
trazar un nuevo camino, ¿cómo le hacen?'. 'Pues: responde el ranche-
rito, 'soltamos un burro y, por donde va, ése es el nuevo camino'. 'Y ¿si
no hay burro?'. 'Pues entonces llamamos a ingenieros como ustedes'.

a una señorita de rancho a la ciudad a sacarse una foto-


V grafía. Al posar para la foto, el fotógrafo piensa: 'Pobre
señorita. No está fea, pero tiene la boca muy grande. Veamos ...
Voy a arreglarlo'. Y dijo a la joven: 'Mire, señorita. Cuando yo diga
chis, usted diga rojo: pensando que así saldría con la boca más
chica. Se prepara para tomar la foto y le dice chis. La señorita abre
la bocota y dice: 'Colorado'.

•1
Chispazos del lurnor
JUM AR

l paciente va al médico y dice: Ando muy preocupado


U
n hombre culto le pregunta a un rancherito: '¿Se dice pos
o pues?'. Y el rancherito responde: '[Pos ... pues!'. E Doctor, pues estoy perdiendo la memoria. ¿Qué puedo ha-
cer?'. '¡Je, je!, responde el doctor: 'Primero págueme la consulta'.

laticaban Pancho y María en su pueblo por la noche, bajo


P un albortante de luz. Él le dice: 'María, vente un ratito pa
lo oscurito. Ella comentó: '¡No! ¿Cómo crees? Eso sería inde- U n hombre acude al doctor y le dice: 'Doctor, me preocupa
que estoy perdiendo la memoria'. El doctor le pregunta:
cente. Él insiste. Y María se negó. A la tercera vez, ella accede y '¿Desde cuándo le pasa?'. 'Pues ... ¿Desde cuándo qué?'.
se va con Pancho palo oscurito. Entonces Pancho le dice: '¡Mira
María! ¡Mi reloj se ve aquí con lucecitas!'.
n presidente municipal en un pueblo era poco letrado y
U dice a su secretaria: 'Ponga un aviso para todos los em-
pleados del ayuntamiento que diga: El próximo viernes, tendre-
n otra ocasión, María pidió a Pancho: 'Dime cosas boni-
E tas, como los novios curros le dicen a sus novias'. 'Pan-
cho entonces se fue a expiar a unos novios curros. Él decía a la
mos una junta a las 10 a.m; La secretaria le pregunta:'¿ Viernes se
escribe con v o con b?'. El presidente se lleva una mano al mentón
joven: 'Tienes ojos de rubí, la boca de coral, te bajaron del cielo y responde: 'Mejor escriba martes'.
por bella y angelical'. Pancho regresa corriendo junto a María
y le dice.: '¡Ahora sí, María! Te voy a decir cosas mu bonitas:
n señor camina por el campo y ve a un pastor cuidando
'¡Tienes ojos de becerra, boca de corral y te bajaron del cerro
por bruta y animal!'.
U sus ovejas. Se acerca y le pregunta: 'Oiga, buen hombre,
¿cuántas son sus ovejas?'. El pastor responde: '¿Cuáles? ¿Las blan-
cas o las negras?'. El caminante dice: 'Las blancas'. 'Son cien', con-
n cierta ocasión, un rancherito fue a París. Estuvo tres testa el pastor. '¿Y las negras?'. 'Pos también'. El caminante añade:
E días conociendo la ciudad. Regresó a su rancho y encon-
tró a su compadre, quien le pregunto: '¿Qué fue lo que más te
'Oiga, ¿cuánta lana dan sus ovejas?'. '¿Cuáles?', replica el pastor,
'¿Las blancas o las negras?'. 'Las negras', consulta el caminante.
impresionó de París?'. 'Dos cosas compadre: la torre infiel y el 'Como tres kilos anualmente, cada una'.'¿ Y las blancas?'. 'Pos tam-
bién', explica el pastor. '¿Pero por qué cada vez que le pregunto me
palacio de la ubre'.
responde que si las blancas o las negras?', consulta el caminante.
'Es que las blancas son mías, aclara el pastor. '¿Y las negrast, de-
n doctor pregunta al paciente: 'Dígame: ¿qué tiene?'. El manda el caminante. 'Pos también'.
U
le pago'.
paciente responde: 'Pues dígamelo usted, porque para eso

, ,
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Eclesiásticos

n una parroquia, el cura va a bautizar un niño y pregunta al


E papá: '¿Qué nombre le vamos a poner?'. 'Pues póngale Tigre
Quinto'. 'No' dice el cura. 'Ese no es un nombre católico'. '¿Cómo
que no?: añade el papá. '¿No que hubo un Papa que se llamó León
Décimo?'.

na señora tenía la buena costumbre de confesarse siempre


U con el Padre Villalobos, a quien le decían padre lobo. En la
iglesia, había tres confesionarios y los padres los usaban indistin-
tamente. La señora se arrodilló frente a uno y dentro no sabía cuál
sacerdote estaba. Preguntó por la rejilla: ¿Es usted el padre loboj "
'No', contesta una voz. 'Soy el padre León'. Y la señora añadió: '¡Per-
dón! ¡Me equivoqué de jaula!'.

onfesaba un sacerdote anciano bastante sordo en la misa


C dominical. Una señora recitaba sus pecados y, como no
escuchaba, le dice: 'Más fuerte, hija, más fuerte'. Así sucedió tres

,,
JUMA R Chispazos de I lumor

veces. A la cuarta vez, la señora dice uno de sus pecados, casi es para mí y lo del lado izquierdo es para Dios'. Consultan al pastor
gritando, y añadió: '¡Y aprovecho para dar un saludo a todos los protestante y dice: 'Yo trazo un círculo de dos metros de diámetro
feligreses!'. y tiro al aire la limosna. Lo que cae dentro del círculo es para Dios
y lo que cae fuera es para mí'. Toca el turno al rabino judío y les
expone: 'Al final del rito, me voy con todas las limosnas a un cuarto
n un convento de monjas de Irlanda, estaba m~riendo la contiguo a la sinagoga y tiro hacia arriba toda la limosna. Lo que se
E madre superiora, rodeada de todas sus campaneras, con
los ojos cerrados, como dormida. Una de las monjas le toca los
queda en el aire es para Dios y lo que cae a tierra es para mí'.

labios con un dedo, por lo que reacciona, abre los ojos y con voz
n judío agonizaba en el lecho de muerte, rodeado de sus
entrecortada dice: 'Tráiganme algo caliente para beber'. Una mon-
ja corre a la cocina y calienta leche, la pone en una taza y añade
una buena porción de whisky. Se la lleva a la superiora y le pide
U hijos que iban a recibir la herencia. En un momento, el
moribundo comienza a hacer cuentas en voz alta: 5342, 6207,
que la tome con calma. La enferma bebe ante la mirada de todas y 7045 ... Uno de sus hijos le dice: '¿Deliras, padre?'. Y él contesta:
luego dice con seguridad: 'Hijas, ¡Nunca maten esa vaca!'. '[No, hijo! ¡De dólares!'.

n judío moría lentamente y pregunta a sus hijos: '¿Dónde


U
n cura de pueblo predicaba sobre la resurrección de Lá-
zaro y advirtió antes a su sacristán, diciéndole: 'Voy a
dejar colgando un cordón de la banda de mi sotana. Si me equi-
U estás, Jacob?'. 'Aquí estoy papá, respondió Jacob. '¿Dónde
estás, David?'. 'Aquí junto, papá', respondió David. '¿Dónde estás,
voco, en algo, me jalas el cordón'. En un momento de la homilía Benjamín?'. 'Aquí cerca, papá'. El moribundo arruga la boca, se
el predicador dice: 'Jesucristo, dijo: ¡Lázaro, sal fuera! Lázaro endreza enojado y dice: '¿ Y quién diablos está en la tienda?'.
salió y ancló'. El sacristán le jala el cordón y en voz baja le dice:
'Se dice anduvo, tarugo". El sacerdote rectifica entonces: 'Bueno,
n ateo letrado le dice a un católico analfabeta: 'Oye: ¿cómo
anduvo tarugo un rato, pero luego se compuso'.
U es que los católicos dicen que la Virgen María es la madre
de Dios, si la Virgen es una creatura de Dios? No puede serlo'. Y el
analfabeta responde: '[Pa que vea cómo están las cosas!'.
staban reunidos un sacerdote, un rabino judío y un pastor
E protestante. Se suscitó entre ellos una discusión sobre el
n un bautizo, el padre pregunta el nombre que pondrán
tema de las limosnas y le preguntan al sacerdote: '¿Qué haces tú
con las limosnas?'. 'Yo', explica él, 'al terminar el día, junto toda la E al niño y el padrino dice: 'Póngale Inrique'. El sacerdote
contesta: 'Es con E'. Papás y padrinos asintieron y el niño quedó
limosna, billetes y monedas, me voy a la sacristía y trazo una línea
en el suelo. Arrojo la limosna al aire. Lo que cae del lado derecho bautizado como Coné.

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JUM AR

n señor oraba a Dios, diciendo: 'Señor, dame paciencia.


U ¡Pero ya!'.

ue a confesarse un joven y s~. pu,so ~l frente del confesio-


F nario. Vio al sacerdote y le dijo: Acúsorne, padre, que soy
pirómano. El confesor echó el cuerpo hacia atrás y respondió:
Animales
'¡Órale! ¡No me quemes la sotana!'.

J ugaban el elefante y la hormiga al beisbol. Al elefante tocaba


pichar y a la hormiga batear. 'Píchame, píchame, grita la hor-
miga. Y el elefante replica: '[No, no!' La hormiga insiste. El elefante
picha ... Y colorín colorado.

,,.
rase un gallo que cada mañana al salir el sol cantaba: ¡Ki-
E quíriqui, kiquiriqui! Un día le dio alzheimer y, al siguiente
amanecer, cantó: '¡Kiquiri ... ! ¿Qué?:

n pollito miraba una rosticería, lo ve un joven y le pregunta:


U '¿Qué haces?'. El pollito responde: 'Estoy esperando que mi
mamá se baje de esa rueda de la fortuna.

an por la selva dos cazadores con su rifle en las manos y


V ven un letrero que avisa: '¡Peligro! Aquí cerca está el león

28
JUMAR
Chispazos de 1 Iumor

vegetariano'. Uno de los cazadores comenta al otro: 'Despreocu-


pémonos. Si es vegetariano, no nos hará daño'. Siguen caminan?º
y ven a un individuo que llega sangrando de las manos, de los pies
U na borreguita le dice a su mamá: '¿Me permites ir a jugar
con mi amiga?'. Ella le responde: 'Veeeee'

y de la cabeza que les dice: '[Corran! ahí viene el león vegetariano'.


'No importa', responden ellos: 'No come carne'. '¡Sí!', les dice el
herido. 'Pero le gustan las palmas de las manos, las plantas de los
pies y las raíces del pelo'.
H abía ~n~ granja de ~erdos blancos. Un día, uno dice a los
<lemas: Les comunico que mañana vamos a tener fiesta'.
¿Cómo lo sabesr; pregunta otro. 'Es que la patrona ha dicho que
mañana va a dar chicharrón a los cerdos'.

n señor fue al palen~ue a ver l~,s peleas de gallos. L~e-


U vaba consigo un penco. También estaba un gallo giro
que había ganado todas las peleas. Al perico, le entra envidia
y dice: '[Yo peleo contra ese gallo giro, para matarlo!'. El amo
V a un pollito a la casa blanca y toca el timbre. Le abre un
sirviente y le dice: '¿Qué se te ofrece, pollito?'. Él responde:
¿Está Bush?'. 'No está; responde el empleado. 'Y ¿dónde está?;
del perico, le dice: '[Cállate!' Como el perico insistió, el dueño
pregunta el pollito. El empleado contesta: 'En Ojaio'. Y el pollito,
del gallo decide enfrentar su gallo contra el perico. Comienza desconcertado, cuestiona: ¿Conmigo' ¿Por qué?'.
la pelea y, en el primer encontronazo, salen volando plumas del
perico. Éste, asustado, sale corriendo del redondel y va a donde
está su amo y le dice: '!Rápido, amo! ¡Présteme su pistola porque
él trae navaja!'.

n perro grande bebía agua en un estanque de la selva.


U Vio acercarse un león con intención de ataque. El perro
dijo al león tocándose el estómago: '¡Ay! ¡Qué mal me hizo el
león que me tragué ayer!'. Al oírlo, el león escapó corriendo. Un
changuito lo vio correr y le dijo: '¿A dónde vas tan de prisa?'.
Escapo de un perro que se tragó un león ayer'. El changuito le
comenta: '¡No es cierto! Es un mentiroso. Vente conmigo y te lo
tragas'. El león subió encima de sí al changuito y se dirigieron al
estanque. Los ve venir el perro y cuando llegan, le dice al chan-
guito: '¡Te dije que me trajeras dos leones! ¡Con uno no tengo ni
para el aperitivo!'. Al oír esto, el león huyó y el changuito cayó al
piso con el entrecejo arrugado.

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Médicos, hospitales
y enfermeras

n señor va a urgencias al hospital y le dice al doctor: 'Vengo


U porque me tragué una aguja del tocadiscos, pero no siento
nada, no siento nada, no siento nada ...'.

n paciente explica al doctor: 'Usted me dice que me voy


U a morir dentro de diez. Pero ¿diez qué? Años, meses, se-
manas, días ...'. 'No, no: dice el doctor: 'Diez, nueve, ocho, siete ...'.

L e di_ce ~n p~ci~n~e?~l,doctor: '¿~ué m~ dijo que tenía? ¿Piscis,


sagítano, gemm1s .. No, no. ¡Cancer ..

lega un turista hambriento a un pueblo. Ve a un joven y le


L pregunta: '¿Hay aquí un Kentucky?'. 'Sí', responde el joven:
'Hay quien habla, quien canta, quien baila, quien cacarea .. .'.

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JUMAR
Chispazos de I lumor

na señora se siente muy mal, va al doctor y, tras decirle los


U síntomas que siente, le pregunta: '¿Tendré cura, doctor?'.
quien le responde: '¡Sí! ¡Cómo no! Tendrá cura, féretro, misa de
y ~odos trataban de abrirla. A sus espaldas, un loco se reía a car-
cajadas, por _I? ~ue otro le pregunta: 'Y tú ¿por qué te ríes?'. A lo
que respondío. Porque yo tengo la llave!'.
exequias y un buen lugar en el panteón'.

os señores fueron a visitar un hospital de enfermos men-


D tales y oyeron a una paciente que decía incoherencias.
Así que uno comentó en voz alta: 'Se ve que esa señora es una
dementa'. Ella lo escucha y dice: 'No soy de menta, señor. ¡Soy de
fresa!'.

n una operación, un gangoso era el asistente del cirujano


E que le pasaba los instrumentos. El doctor le dice: 'Bisturí'.
Y se lo pasa. 'Aguja, hilo y tijeras'. Y se los pasa. Al final, le dice:
'Gasas'. Y el gangoso le responde: 'De nada'.

na señora va al dentista. Se sienta en el sillón reclinable y


U el doctor le dice: 'Abra la boca'. Ella contesta: '¿Para qué?'.

os señores visitan un manicomio y encuentran personas


D raras de todo tipo. Y observan a un niño de unos doce
años que tiene complejo de reloj, el cual decía lentamente: 'Tic ...
tac, tic ... tac'. Uno de los señores comenta al otro en voz alta: 'Ese
niño está retrasado'. El niño le oye y acelera la velocidad, casi atra-
gantándose, para decir más rápido: 'Tic tac, tic tac, tic tac'.

n el jardín de un manicomio, unos locos trataban de esca-


E parse. Sobre la pared del fondo, había dibujada una puerta
En la ciudad

n tenedor va por la calle, ve pasar una cuchara y le grita:


U '[Cuchara, cuchara!'. Ésta no le hace caso y sigue cami-
nando. El tenedor comenta: '[Quizás no escuchara!'.

n señor toma un taxi y le indica al taxista el destino. Se aco-


U moda en el asiento trasero, el chofer pone la música en volu-
men alto, el cliente quiere decirle algo, se inclina sobre él y le toca el
hombro. El taxista pierde el control del volante y se estrella contra
otro coche. Minutos después, el cliente le pregunta. '¿Por qué nos
accidentamos?'. 'Porque es la primera semana que trabajo de taxis-
ta, responde el infortunado, a lo que el cliente comenta con des-
dén: 'Entiendo. Yo fui veinte años chofer de una carroza funeraria'.

na pera camina por una acera de la calle a toda prisa. La ve


U pasar una manzana y le grita: '[Pera, pera, pera!', quien no
parece escucharle y se va de largo. La manzana exclama: 'No espera'

1'7
JUMAR Chispazos del Iumor

n gangoso va a una tienda de abarrotes y pide una lata niño?'. 'Es mi hijo', contesta la señora'. '¡Ay, señora! Su hijo es tan
U de chícharos. La empleada le dice: '¿Herdez?'. El gangoso
responde: '¡Pos claro! ¡Ni modo que amarillos!'.
feo que está para llorar'. La señora se rompe a sollozar descon-
soladamente. Llega otro joven de buenos sentimientos y le dice:
'¿Qué le pasa señora, por qué llora? Estoy dispuesto a ayudarla'.
La señora sigue gimoteando a pesar de las motivaciones que
os jóvenes ven pasar un cortejo fúnebre y uno pregunta le daba el joven. Él traía una concha y un plátano y le dijo a la
D al compañero: '¿Quién será el muerto?'. El otro responde:
'Pues yo creo que es el que va en la caja'.
señora: 'No insistiré pero, para que se consuele le doy la concha
para usted y el plátano para su changuito'.

n automovilista esperaba ante el semáforo e iba a girar a la n joven va por la calle y ve a una chica con el pelo pintado
U izquierda, no respetó la flecha roja y arrancó. Chocó con-
tra un automóvil y un agente de tránsito que presenció el accidente
U de rubio y le dice: '¡Adiós, rubia artificial!'. Ella le contesta:
'[Adiós tonto natural!'.
se acercó al conductor imprudente y le preguntó: '¿Qué? ¿No vio la
flecha?'. '¡Uy!, respondió: 'No vi al indio. ¡Y menos la flecha!'.

n cliente come en el restaurante y tiene un filete de res


U en el platillo. Un mesero pasa cerca de él, constata que el
cliente habla al filete algo en voz baja, se acera y le pregunta: '¿Qué
dice, señor?'. Él responde: 'Le susurro palabras tiernas ... ¡para que
se ablande!'.

n la tienda de muebles, llega una señora y dice al encargado:


E 'Buenos días. Venimos a realizar el último pago de la cunita
del niño'. '¡Bravo!', felicita el vendedor. 'Y ¿cómo está?'. 'Muy bien',
responde la señora. 'Acaba de enrolarse en el servicio militar'.

na señora de Torreón esperaba el transporte público en


U una esquina y tenía de la mano a un niño de escasos seis
años, bastante feito. Llega un joven y le pregunta. '¿Quién es este

.lH ,,,
En la escuela

a maestra dice a Pepito en la clase de español: 'Conjuga en


L voz alta el presente del verbo caminar'. Pepito comienza a
decir lentamente: 'Yo camino, tu caminas, él camina .. :. La maestra
le interrumpe: '[Más rápido, Pepito!'. Él contesta jadeando: '¡Yo
corro! ¡Tú corres! ¡Él corre ... !'.

e preguntan a un alumno en clase de literatura universal:


L '¿Cuál es la obra cumbre de Dante Alighieri?'. 'No sé ...:
dice el alumno. El profesor aclara: 'Te voy a ayudar. La ...'. El niño
propone: 'Dígame más'. El profesor añade: 'La di .. .'. 'Dígame más',
insiste el niño. 'La divi ...'. Y el niño concluye: 'No. No la adivino'.

stá Pepito en la clase de español y la maestra le dice: 'Pepito,


E conjuga el verbo nadar en presente'. Y Pepito comienza a
conjugarlo gritando: 'Yo nado, tú nadas, él nada ...'. La maestra, lo
interrumpe y le dice: 'Pepito, Pepito, más bajo' Y Pepito continúa:
'Yo buceo, tú buceas, él bucea ...'.
JUMAR

epito está redactando un ejercicio en clase de español y


P pregunta a la maestra: '¿Cómo se escribe bala?'. Ella con-
testa: 'Pues como suena'. Pepito escribió en su cuaderno: '¡Pum!'.

n tercero de primaria de un colegio para niños de color en


E Estados Unidos, el maestro les enseña a distinguir los colo-
res. Saca un cuadrito color amarillo y pregunta a un niño llamado
Gallegos y similares
Jorge: '¿Qué color es éste?'. 'Amarillo, profesor: responde el alumno.
El docente se acerca y le da una cachetada, diciendo: '[Especifica,
Iorgítol, quien llorando aclara: 'Amarillo canario, profesor'. Des-
pués saca un cuadrito de color azul y pregunta a Juanito: '¿Qué
color es éste?'. 'Azul, profesor'. También él recibe una cachetada y la
frase conocida del profesor: '¡Especifica, Juanito!', quien adolorido
del cachete reponde: 'Azul marino, profesor'. Finalmente el profe
saca un cuadrado de color negro y pregunta a Pepito: '¿Qué color
es éste?'. 'Negro', contesta Pepito. El maestro le dice: '¡Especifica,
Pepítol, y le da la cachetada. Pepito responde: '¡Negro desgracia-
do, profesor!'.
C aminan dos gallegos por una avenida de la Ciudad de
México y ven un anuncio grande que dice: 'Aceros inoxi-
dables'. Manolo dice: '[Qué, Venancio! ¿Nos hacemos?'.

E staba Pepito en ~a clase de ~uímic~ y el pr?f~so~ le dice: 'V_oy


a escribir una formula y tú me dices que significa. Escnbe
en el pizarrón: H2S04'. Pepito casi se acuerda y le dice al profesor:
M anolo dice a Venancio: '¿Qué horas tienes?'. 'Tengo
diez menos diez'. Entonces replica Manolo. '[Pues no
tienes nada!'.
'Lo tengo en la punta de la lengua: El profesor le contesta: '¡Escú-
pelo rápido, que es ácido sulfúrico!'.

M anolo comenta a Venancio: 'He comprado mil palomas'.


'¿Mensajeras?'. 'No, Venancio. ¡No exagero!'.

U~ ancian~ gallego llegó a vivir a la Ciudad de México y por


ignorancia se fue a dar un paseo en bicicleta por Tepito.
Desplazándose lentamente llegó un cholo, cogió la bicicleta por

42
11
JUMAR Chispazos del lumor

los cuernos y dijo al gallego: 'Carnal, cáite con la bicicleta'. Y el silan. Toca turno al cubano. Se forma otro pelotón y se escucha:
gallego se dejó caer. 'Preparen. Apunten'. El cubano dice: '[Maremoto, maremoto!'. Los
soldados huyen y no lo fusilan. Por último, toca el turno al gallego.
Los soldados que lo van a matar escuchan: 'Preparen. Apunten .. :.
Y el gallego grita: '¡Fuego!'.
L lega un gallego a una farmacia y pide un cepillo de dientes.
La empleada le dice: '¿Cómo lo quiere?'. 'Grande y fuerte',
contesta el gallego, 'porque tengo ocho hijos'.

lega un gallego a un partido de tenis vestido de negro. Y un


L espectador sentado junto a él le pregunta: '¿Por qué viene
vestido de negro?'. Y él responde: 'Por si hay muerte súbita'.

• Por qué las casas de los gallegos en México tienen un hoyo


l circular en el techo? Para ver el canal de las estrellas.
staba el famoso James Bond en la plaza de toros de Ma-
E drid entre los muchos espectadores. Después de un rato,
se sienta junto a él un gallego. El espía famoso se presenta: 'Bond.
James Bond'. Y el gallego le responde: 'Nancio. Be nancio'.

; Por qué los gallegos ponen ajos en las esquinas de las calles?
C.. Para favorecer la circulación.

n la segunda guerra mundial, apresaron a un mexicano, a


E un cubano y a un gallego. Deciden fusilarlos de uno por
uno. Inician con el mexicano. Se forma el pelotón y quien dirige
el fusilamiento, dice: 'Preparen. Apunten'. El mexicano exclama:
'j'Icrremoto, terremoto!'. Sale corriendo el pelotón y ya no le fu-

11 1,
Hogareños y familiares

n señor espera en el hospital el nacimiento de su nuevo


U hijo. Sale el doctor, quien le dice: 'Su esposa está bien,
pero a su hijo tuvimos que ponerle oxígeno'. '[Qué pena!'. añade el
señor. 'Yo quería ponerle Eugenio como a su abuelo!'.

C Mi vida', dijo una señora a su esposo. 'Corre al chofer de casa


porque ha estado a punto de matar a mi mamá'. El esposo se
lleva la mano al mentón y propone: 'Será bueno darle otra opor-
tunidad .. .'.

na señora española estaba es su casa y su esposo jugaba


U una cascarita de futbol en el parque de enfrente. La mujer
recibe el aviso de que se sacó el premio mayor de la lotería. Sale al
balcón y grita al esposo: '[Mi vida! [Nos sacamos la lotería! ¡ Ven
para darte más detalles!'. El esposo deja a los amigos deportistas
JUM AR Chispazos de I lumor

y corre a la casa. Al cruzar la calle apresuradament,e, un vehícul~ me tardo: adelántate a ver cómo está'. El señor se va rápidamente,
lo atropella y muere al instante. Su esposa exclama: De que se esta llega al hospital y le informan que está en terapia intensiva. Ve
de suerte, se está de suerte'. que entran y salen doctores y enfermeras, y a él no le permiten
entrar. Sale una enfermera, quien le dice: 'Prepárese para lo peor'.
Él se regresa a la casa, llega y pregunta a su esposa si ya llegó su
ba Jesucristo camino al calvario, muy maltrecho, débil y ado- mamá. Ella, extrañada, le dice: '¿Por qué me preguntas eso?'. Él
I lorido. Ya le faltaban como veinte metros para llegar al lugar
de la crucifixión y llega un señor corriendo y le dice a Jesús: '¡Señor:
responde: 'Es que una enfermera me dijo que me preparase para
lo peor'.
•Te cambio mi cruz!'. 'Y ¿cuál es tu cruzt, pregunta el Señor. '[Es m1
~uegra!', responde el recién llegado, a lo que Jesús replica: 'Mira, no
I' lega un señor a una capilla ardiente donde velan a un ami-
te preocupes. ¡A mí solo me C-1
L
·
talta tantito ..
go. Se dirige a donde está la viuda y le dice con tristeza: 'Lo
siento'. Ella le responde arrugando los labios: 'No, mejor déjelo
na señora sumamente delgada quedó embarazada. Cuando como está'.
U le llegó el momento del alumbramiento, en lugar de dar a
luz ... dio una chispita.
n señor tenía una familia numerosa, se quedó sin trabajo y

n un país donde existía la poligamia, cuando un hombre


U fue a pedir empleo a un zoológico. En la administración,
le dicen: Aquí necesitamos un empleado porque se ha muerto un
E moría enterraban con él a sus esposas. Un hombre pre-
guntó: '¿A sus suegras también?'. A lo que le respondieron: 'No.
gorila. Le quitamos la piel, usted se la pone, hace como si fuera el
gorila y la gente no se va a enterar. Le pagaremos buen sueldo'. El
Sería demasiado cruel'. señor acepta, se viste de gorila y se va a una jaula con un columpio
que pasa por encima de la jaula de un león y comienza a balan-
cearse. En una de esas, pierde el equilibrio y cae en la jaula del
n la Ciudad de México, una pareja de esposos camina por león. Lleno de miedo, ve que el león se acerca hacia él, desea gritar
E una calle solitaria. Aparece un ladrón pistola en mano y los
amenaza diciéndoles: '¡El dinero o la vida!'. El esposo dice: 'Vida,
para pedir auxilio, pero no lo hace. El león se acerca lentamente,
abre sus fauces y, cuando parece que lo va a engullir, dice: 'Ni se te
vete con el señor'. ocurra gritar idiota, porque nos descubren'.

n señor va por el mar junto a su hijo, que le grita: '[Papá, ya


U
na señora dice a su :spos?: '_f~1i vida, acaban de _infor-
marme que mi mama se sintió mal y fue al hospital de
urgencia, para ver qué le pasa. Pero tengo un pendiente. Mira, no
U no quiero ir a Europa!'. El papá le dice: '[Cállate, huerco, y
sigue nadando!'.

48
11
JUMAR

na señora dice a su esposo: 'Si un león atacara a mi mamá


U y a mí, ¿a quién salvarías primero?'. Y el esposo responde:
'¡Al león!'.

n señor camina a toda prisa por la calle y un amigo le dice:


U '·Adónde vas con tanta prisaj" 'A que me hagan el acta de
defunción de mi suegra'. '¿Cómo, si todavía no ha muerto i, aclara el
Borrachos
amigo. 'Es verdad', explica el primero, 'Pero el doctor ha dicho que
no le quedan más de dos horas de vida y no quiero que se escape la
oportunidad'.

amina por la calle un hombre ahogado de borracho. Lo


C ve una señora mal parecida y le dice: '[Viejo borrachol,
el cual le responde: '[Vieja fea!' Ella insiste: '¡Viejo borracho!' Él,
enfadado, repite más fuerte: '[Vieja fea, que no es tan malo!' '¿Por
qué?', pregunta ella intrigada. 'Porque lo de borracho se me pasa
y lo de fea a usted no'.

n borracho camina como que cae pero no cae y sintiendo


U que no puede detenerse. Un policía lo ve, comprueba su
incapacidad para avanzar en línea recta y le dice: '[Queda usted
detenido!' Y el borracho replica: '[Muchas gracias!'

n cuate dice a su amigo: '¿Por qué bebes tanto?'. 'Para


U olvidar...: responde el borrachito. 'Pero ¿para olvidar qué?'.
Y el borrachito sonríe, diciendo: 'Pos ... ¡se me ha olvidado!'.

51
so
JUMAR

e detiene un caminante y pregunta a otro: '¿Sabe dónde vive
1
S Juan Pérez?'. 'Pues ... Pero si tú eres Juan Pérez, dice admirado
el consultado, a lo que responde Juan: 'Sí, soy yo. Pero es que estoy
11
tan borracho que no sé ni dónde vivo'.

ntra un~ niñ~ a c_omprar en 1: p~s;elería, y el d:pendiente De todo un poco


E le dice: ¿Que quieres, pequena?. Un borracho, responde
ella, a lo que el vendedor comenta: 'Espera un momento, que aho-
ra sale el dueño'.

I¡ n tartamudo, aprendiz de paracaidista, estaba en un avión


U con varios compañeros que se iban a lanzar por primera
vez. El instructor les dice: 'Pongan atención antes de lanzarse. Se
lanzan con el paracaídas puesto, cuentan hasta diez, jalan el cor-
dón del paracaídas y comienzan a flotar en el aire'. El tartamudo
estaba distraído y pregunta: ¿Ha ha ha hasta ta cu cuanto te te
tengo que con contar?' 'Tú solo hasta dos'.

ntra un individuo con tono amenazante a una cantina y


E grita: '¿Quién es Al Capone?'. Nadie contesta. Por segunda
ocasión, interpela: '¿Quién es Alcapone?'. Tampoco contestan. A
la tercera ocasión que pregunta, se levanta un fortachón y dice:
'¡Yo soy!'. A lo que el primero responde: 'Mucho gusto. ¡Yo son
alkasetser!'.

52
JUMAR Chispazos de Humor

.;

A la semana siguiente, otro individuo entra a la misma canti-


na y pregunta en tono enfadado: '¿Quién es Pancho Pante- E ranse una vez tres árabes que iban a pasar la frontera de
México con Estados Unidos y querían hacerse pasar por
ra?'. Silencio. Otra vez pregunta: '¿Quién es Pancho Pantera?'. Nadie mexicanos. Le dijeron al agente aduanal: 'Somos mexicanos'. 'No;
responde. Por tercera ocasión, pregunta. Y un hombre musculoso rujo el agente. 'Ustedes son árabes, pues su manera de hablar y su na-
dice: '¡Yo soy!'. Y el primero le responde: 'Te llama tu mamá para riz los delata. Ellos insistieron y el agente añadió: 'Si me cantan los
que te tomes tu chocomílk' tres al unísono una canción mexicana, los dejo pasar. Ellos se pusie-
ron de acuerdo y comenzaron a cantar: '¡Camello, prieto azabache ... !'.
1 1

H ubo un baile de frutas organizado por la fresa. Asistieron


todas, menos la piña, que no fue invitada. A las once de
la noche, en lo mejor del baile, se presentó de improviso la piña. C amina un hombre de color por la playa de Mazatlán y se
encuentra en la arena una lámpara maravillosa. La fro-
La fresa, sumamente enojada, afrontó a la piña y le dijo: '¿Por qué ta y aparece_ un genio que le dice: 'Pídeme dos deseos y te los
viniste, si no te invite?'. 'Porque soy una piña colada'. concederé'. El dice: 'Primero que sea blanco y luego que tenga
mucha lana'. Un humo le rodea, siente un cosquilleo en la piel,
se mira ... y se ve convertido en borrego.
n señor acude a una empresa para solicitar un empleo. Se en-
U trevista con el gerente y le mee: 'Deme, por favor, un trabajo,
pues andan tras de mi tres empresas. '¿Cuáles soni; replica el gerente. E l sargento le dice al cabo: '[Cabo!' El cabo responde. El sar-
gento insiste: '¡Cabo!'. Y éste añade sin levantar la cabeza:
El interesado responde: '¡Las empresas de la luz, del agua y Telmex!'. 'No se dice Cabo. Se dice quepo'.

S e encuentran por primera vez dos comerciantes. Se saludan


y uno pregunta al otro: '¿Tú qué vendes?'. 'Yo vendo pro-
ductos de primera necesidad: tortillas y frijoles'. El segundo dice:
C orren dos globos por el desierto arrastrados por el viento y
uno le dice al otro: '[Cuidado con el cactusssss!'.

'Yo me dedico a vender productos de última necesidad: ¡ataúdes!'.

n joven acude a una empresa a solicitar empleo. Le entre-


U n joven, c,hofer de ~ransportes nort~ños, se quería casar
y pregunto a un amigo ya casado cuál era el trámite para
contraer matrimonio. Éste le informó: 'Primero tienes que pedir a
U vistan y le preguntan cuál es su nivel de inglés, a lo que res-
ponde que bueno. Añaden: '¿Cómo se pronuncia fiesta en inglés?'.
la novia. Después haces el asentamiento en la parroquia, consigues
los documentos que te pidan y, un día antes de la boda te confiesas'.
Responde: 'Party' El entrevistador añade: 'Ahora, diga una frase El novio replica: 'Eso va a estar difícil, pues hace mucho que no lo
uLilizando esa palabra'. Él responde: 'Hace dos semanas me party la hago y no me acuerdo cómo es'. 'No te preocupes: aclara el amigo.
cara al caer de una bicicleta. 'El Padre te ayuda'. Llegado el día de la confesión, un jueves, se for
JUMAR

mó ante el confesionario. Cuando le llegó su turno, se arrodillo


- Chispazos del lurnor

curo. Pasa media hora y... nada. Después, se oye una voz que dice:
frente a la rejilla y el padre le dijo: 'Yo pecador'. Él contestó: 'Yo '¡ El gas!'. Se abre una compuerta encima del condenado y... ¡un
chofer de transportes'. tanque enorme cae de lo alto!

uando aún vivía Don Mario Moreno Cantinflas, un se- n avión lleno de pasajeros de diversas nacionalidades se
C ñor le preguntó: 'Don Mario, ¿qué edad tiene?', quien
le respondió: 'Cincuenta años'. Una semana después, le hizo la
U desploma en una selva y el piloto, con mucha habilidad,
alerriza en un lugar sin árboles. Como no pueden emprender el
misma pregunta y Don Mario dijo: 'Cuarenta años'. 'No puede vuelo, comienzan a consumir los alimentos que llevan. Se les ter-
ser', aclaró el preguntón, pues hace una semana me dijo que minan y convencen a un valiente mexicano para que vaya de cace-
cincuenta. 'Déjeme que le explico', repuso Cantinflas. 'Un día ría y proveerlos de carne. Se interna en la selva y, al poco tiempo,
después de que Usted me hizo la pregunta, vino otro señor y encara a un fiero león, que comienza a perseguirlo. El mexicano
me consultó lo mismo. Yo le respondí que cincuenta, pero el corre hacia el avión y pasa debajo de la puerta. El león lo alcanza y
señor me dijo que era mayor que yo y que me llevaba diez. Y se introduce al avión. Entonces, el mexicano grita a los pasajeros:
¿sabe qué le dije? ¡Pues lléveselos!'. '[Vayan pelando este animalucho, que ahorita les traigo otro!'.

aminaba un hippy de Silao a León a medio día y con mucho l iniciar el vuelo, un avión se desploma en el aeropuerto
C calor, maloliente, harapiento y sudoroso. A medio camino,
preguntó a un joven. '¿Cuánto me falta para llegar a León?'. El jo-
A y acuden rápido las ambulancias para auxiliar a los ac-
cidentados, sacando a muertos y sobrevivientes del avión. Los
ven lo miró de arriba a abajo y contestó: '[Pues solo la cola, mano!'. socorristas de la Cruz Roja participan en la operación y, al final,
revisan el baño del avión, que encuentran cerrado. Un socorrista
grita: '¿Hay alguien ahí dentro?'. ¿Sí', responde una voz de varón.
n asesino va a ser ejecutado en la silla eléctrica y, antes 'Estoy herido'. '¡Ábrenos, por favor'. '¿Quiénes son ustedes?', deman-
U de la descarga, los dos verdugos le preguntan: '¿Cuál es tu
último deseo?'. Él responde: 'Que los tres nos estemos agarrados
da el varón. 'Somos de la Cruz Roja'. El que está dentro contesta:
'[No tengo monedas! Además, ya contribuí anteayer'.
de las manos al accionar el contacto'.

abía un tartamudo que tenía una gallina. Y comentó a

U n individuo va a recibir la pena de muerte y le dan a es-


coger entre la silla eléctrica, la inyección letal y la cámara
H un amigo: 'Tengo una gallina que hace cua, cua, cua ...'.
'¡Hombre!', responde el amigo. Eso no es una gallina, sino un palo'.
de gas. Él, tras pensarlo, escoge la cámara de gas. Lo llevan a un 'Sí, sí, sí e, e, es ga, ga, gallina. Hace, cua, cua, cua, cuarenla días
cuarto circular de un metro de diámetro, sin techo y bastante os- que no pone huevos'.

56
JUMAR Chispazos de Humor

n niño mira frente el agua profunda de un pozo de y grita:


U '[Mesa!' El eco responde: 'Mesa, mesa, esa, sa, sa' Grita de
nuevo: '¡Tabla!'. Y el eco responde: 'Tabla, tabla, abla, bla, bal. Y el
S uena el teléfono y un joven va a contestar y le dicen: ~Está
Armando?'. Y responde: 'No. Apenas estoy leyendo el ins-
tructivo'.
niño piensa: 'Se la voy a poner difícil y grita: '¡Parangaracutirimí-
cuaro!. Y el eco responde: 'Para, para ... ¿qué?'.
n señor llama por teléfono a una tintorería y dice: 'Bueno,

n mago cura~dero, frente ~ un,a multitud de personas,


U ¿es ahí la tintorería El chino?'. 'Sí: le responde una voz.
'Aquí la tintorería El chinito'. Y el primero añade: 'Habla Melesio'.
U tomó el microfono y comuruca: Yo puedo curar a los en-
fermos. Quién quiere ser curad?'. Y la multitud aclama: '¡Al cojo!
Y la voz repite, casi gritando: '¡Sí, es aquí la tintorería El chino!'.

¡Al gangoso!'. Ambos suben al estrado y el mago coloca una cor-


tina que oculta a los dos en el momento de la curación. Un poco n señor y su familia terminan la comida en el restaurante.
después, sale volando una muleta del cojo tras la cortina, hacia
el público. Después, la otra. Y la multitud exclama: '¿Qué pasó?
U Se acerca el mesero y pregunta al señor: '¿Se le ofrece algo
más?'. El señor contesta: 'Sí. .. Que no me cobres la cuenta'.
¿Qué pasó? Y el gangoso con su voz nasal: 'Se cayó el cojo'.

n señor se ahoga en el río y comienza a gritar: '¡Auxilio!


U ¡Socorro! ¡Me ahogo!'. Otro señor presencia el suceso desde
la orilla y, ante los gritos, dice al que se está ahogando: 'Cálmese,
U n joven llamado Juan compra una flamante motocicleta
Honda. Se encuentra por la calle a su amigo Manuel y le
invita a probarla. Éste acepta, ambos se suben a la moto y salen de
buen hombre. ¿A qué tanto grito? Yo no sé nadar y no armo tanto la ciudad a toda velocidad. En el recorrido ya alcanzan los ciento
relajo'. sesenta kilómetros por hora, mientras Manuel repetía: 'Pío, pío,
pío'. Al regresar a la ciudad y estacionar la moto, Juan pregunta
a Manuel: '¿Por qué todo el tiempo decías pío, pío, pío'. El amigo
n mago, desde el estrado, dice a la multitud: 'Yo desapa- responde: 'Es que el otro día un amigo se fue a dar un paseo fuera
U rezco a las personas. Por favor, suba un voluntario'. Un
hombre del público: '¿A todo tipo de personas?'. '¡Claro!', respon-
de la ciudad, se accidentó y se murió sin decir ni pío'.

de el mago. Entonces, agarra a su suegra y le dice: '¡órale suegra!


n un baile, organizado por los panes de repostería, conver-
¡Es su oportunidad para hacerse famosa!'.
E saban la concha, la campechana, el terrón, el bolillo y otros
panes. Durante el baile, la concha muy presumida dijo: 'Soy una
abía un señor que tenía un espíritu tan contradictorio, tan concha, soy una concha', una y otra vez. El bolillo, que cargaba una
H contradictorio, que un día se desmayó y, al recobrar la con-
ciencia, en lugar de volver en sí. .. volvió en no.
pistola, le dijo enfadado: 'Si vuelves a decirlo, te disparo'. Ella no
hizo caso y gritó más fuerte: '[Soy una concha, soy una concha!'.

58
,,,
JU M AR Chispazos de Humor

El bolillo le dispara, le hace un agujero en el centro y entonces la una hoja para máquina de escribir se le acerca, se monta sobre ella y la
concha grita: '¡Soy una dona, soy una dona!'. desarma. Los papeles sobrevivientes van, le agradecen y le preguntan:
¿Cómo te llamas?'. Y la hoja les responde: 'Bond. Papel bond'.

etienen a un tipo rr;uy taca~o por robar ~n una, joyería.


D Alguien pregunta: Pero, ¿como te detuvieroni" Él res-
ponde: '¡Oh! Es que rompí el escaparate con un martillo y, al día V a un gangoso en un autobús urbano y grita: '¡Equina ba-
jan!'. Pero el autobús no se detiene. A la tercera vez que
siguiente, fui a recogerlo'. repite el mismo aviso, el chofer estalla, enojado: '¡Si me sigue
arremedando, no lo bajo!'.

os gangosos llegan a una finca para robar unos patos. Uno


D se sube a la barda y el otro lo espera fuera. El primero cae
de la barda sobre un pato y el de fuera oye el grito de un pato que V arios hombres esperaban la entrada al cielo. San Pedro pre-
gunta a uno: '¿De dónde eres?'. Él contesta: 'De Jalisco'. 'En-
dice: '¡Cuá!', a lo que responde: 'É que sea'. tra, le dice San Pedro y pregunta al siguiente: '¿De dónde eres?'. 'De
Yucatán'. 'Espérate ahí, le dice, San Pedro, que continúa interrogando
a los otros. Solo que, a todos los que eran de Yucatán, los deja fuera
na pera estaba esperando, en una esquina, el transporte y pasaba a los demás. Los yucatecos quisieron hacer una manifesta-
U colectivo. Llega alguien y le pregunta: '¿Desde cuándo es-
pera? '. Y ella contesta: 'Desde que nací:
ción, pero no tenían ningún cabecilla y comenzaron a gritar. Jesu-
cristo se enteró, llamó a San Pedro y le preguntó: ¿Qué pasa?'. Son
unos yucatecos que están gritando en protesta porque no los he de-
jado entrar al cielo. 'Y ¿por qué no los dejas entrar? ¿Se han portado
n un pueblo del estado de Jalisco, un político llegó durante mal?'. San Pedro explica: 'Pues han hecho méritos. Pero, ¡ay, señor!
E la campaña electoral. En su discurso, en un momento deter-
minado, dijo: 'Si me escogen para presidente, les prometo hacer un
¿Te has olvidado que se agotaron las aureolas de talla superextra?'.

puente'. Su secretario le susurra al oído: 'Señor candidato, es que no


ay un dicho que dice: tanto va el cántaro al agua, hasta que
hay río'. Y el candidato añadió: 'Incluso, si es necesario, también, les
prometo poner el río'. H se rompe. Eva en el paraíso, todos los días por la tarde, le
decía a Adán: vamos a darle una vuelta a la manzana.

n un baile de puros papeles participaban el papel china, el cre-


E pé, la opalina ... Como a las once de la noche, aparecen unas
tijeras que envisten a los papeles y los destrozan. Desaparecen las tije- U n ladrón sale tras un árbol y asalta a un señor: 'Deme todo
lo que trae encima'. El señor reflexiona, sube los ojos hacia
ras y se hace la calma. Un rato después, las tijeras vuelven a aparecer y arriba y le da el sombrero.

(,I
JUMA R Chispazos de Humor

n caníbal vestido de traje viaja en primera clase de un piensa: 'Quizás el aragonés ya aprendió la lección'. Ve una rana,
U avión. Llega la azafata y le consulta: 'Es la hora de comer,
señor. ¿Le presento el menú?'. Él responde: 'Mejor ... presénteme la
mueve un dedo y le pregunta: '¿Eres tú el aragonés que se con-
virtió en rana por tener la cabeza terca?'. La rana asiente con la
lista de los pasajeros'. cabeza y Santiago le pregunta: '¿A dónde vas?'. El aragonés responde:
'A Zaragoza ... o al charco'.

n cliente llega a una librería y pregunta: '¿ Tiene un libro


U para descansar?'. 'No', responde el dependiente. 'Está
agotado'. D os amigos ancianos, uno invidente, caminaban bajo el sol
implacable del verano. El que veía dice: '¡Qué calor! Ojalá
lloviera'. Y el invidente contesta: '[Yo también!'.

laman por teléfono a una t~rn~ería y ?regun~an: '¿~avan


L ahí la ropa?'. Y responden: No. Y el cliente anade: ¡Pues
qué cochinos!'. U n joven regiomontano, muy codo, caminaba por la calle
y encontró en el piso un curita. Le dio pena desaprove-
charla. Reflexionó un momento, se hizo una cortadita en el brazo
y se la pegó.
na señora va a una zapatería y pregunta: '¿Hay zapatos
U de cocodrilo?'. 'Lo sentimos, pero no', le responden. Y
n señor de la tercera edad canta en un autobús urbano,
ella añade: 'Vámonos, cocodrilo: no tienen zapatos para ti:
U acompañándose con una guitarra para recoger algunas
propinas. En un momento determinado, el autobús frena y él
n España, va un aragonés de cabeza muy dura y terca ca- se coge de donde puede, pero se le caen los dientes postizos. Un
E mino de Zaragoza. Al pasar un río, sobre el puente, se le
aparece Santiago Apóstol y le pregunta: '¿A dónde vas buen hom-
joven muy acomedido y miope, los recoge y se los da diciéndole:
'Tenga señor, se le cayó su cassette'.
bre?'. 'A Zaragoza', responde el aragonés. 'Mira', le dice Santiago:
'Aquí todo buen cristiano diría: A Zaragoza, si Dios lo permite'. El
abía un señor tan rico, tan rico, que se lo comieron de
aragonés asiente. Y Santiago le pregunta: '¿A dónde vas?'. Y él res-
ponde: 'A Zaragoza'. 'Parece: le dice Santiago, 'que tienes un poco H postre.
dura la cabeza. Pero puedes aprender, así que si no añades las pa-
labras si Dios lo permite, te convierto en rana por dos semanas
laticaban un árbol y un ventarrón, quien dice al árbol:
como lección'. El aragonés no cede y Santiago lo convierte en rana
y queda en un charco. Santiago regresa a los dos semanas, pasa P '¿Te acuerdas de aquel huracán, que pasó por aquí y que
casi te arranca de raíz?'. 'Sf responde el árbol. 'Ya me andaba'.
otra vez por allí y se acuerda del hombre que convirtió en rana y

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JUMAR Chispazos de I lumor

El viento le comenta: 'Pues debes saber que ese huracán es mi mamá y le dice: '¡Mamá, mamá! ¡Ya soy blanco!'. Y ella le dice lo
primó. 'Sí. ..: le dice el árbol: 'Se dan un aire'. mismo. Finalmente va con uno de sus hermanos a darle la nueva
noticia, quien tampoco le hace caso. El muchacho levanta las ma-
nos y exclama: '[Canijos negros! ¡Por eso, nadie los quiere!'.
reguntan a un señor: '¿En qué trabaja?'. 'Trabajo', dice él,
P 'en una empacadora de carnes frías'. '¿Cómo se llama la
empresa?', le consultan y él responde: 'Funerales Gayoso'.
S e incendia el quinto piso de un edificio. Acuden los bomberos
para apagarlo y rescatar a las personas que allí se encuentran.
Logran rescatar a varias. Al final, quedaba una víejecita en el balcón
D obín Hood camina por el campo y encuentra tres ji~~t,es. del departamento, al que ya llegaban las llamas. Un bombero le grita
1'.Los detiene y les amenaza con el arco y la flecha, dicién- por el altavoz: '[Tírate, viejita! Aquí te cachamos y salvarás tu vida'.
doles: '[Esto es un asalto! ¡Yo soy Robín Hood, que roba a los ri- Ella les grita: '[Ahí voy!'. Hace un gesto y dice sonriendo: '[Finta!'
cos para darle a los pobres! ¡Denme todo el dinero que traigan!'. Pero no se tira. Le insisten y, haciendo que se tira, dice entre carca-
Se lo dan y se despide. A los diez minutos, aparece una diligencia jadas: '¡Finta!'. Y tampoco se tira. Le insisten otras tres veces y, tras
y actúa igual. Roba todas las cosas de valor que traen las perso- otras fintas, ella se tira finalmente. Cae y los bomberos quitan la lona,
nas, asegurando que roba a los ricos para dárselo a los pobres. dejan que se estampe en el pavimento y gritan juntos: '[Fínnnnta¡'
Un momento después aparecen dos jinetes, los para y con el
arco y la flecha apuntándoles les amenaza, repitiendo las mismas
frases: '[Denme todo lo que traigan! ¡Soy Robin Hood, que roba
a los ricos para darle a los pobres'. Ellos responden: 'No puedes
D espués·de graves desastres naturales ocurridos, una volun-
taria de la Cruz Roja se acercó a dar una despensa a una
señora que tenía varios niños. Antes de dársela, le pregunta: '¿Fue
robarnos, porque somos pobres'. Él les da un costalito lleno de usted afectada por el terremoto o por el huracán?'. Y ella responde
monedas y ellos exclaman: '[Qué bien! ¡Ya somos ricos!'. Enton- llorosa: 'Ni por uno ni por otro, sino por el sexenio'.
ces les dice: '¡Esto es un asalto! ¡Yo soy Robín Hood, que ... !'.

E n un juicio, dan quince años de cárcel a un acusado, que dice


al policía: 'Avísele, por favor, a mi esposa, no sea que vaya a
U n señor comenta a un amigo: 'Soy un tipo saludable'. Y el
amigo le dice: '¿No tomas? ¿No fumas? ¿Te alimentas bien?'.
Y él explica: 'Lo sé porque, simplemente, todos me saludan'.
pensar mal'.

n día un muchacho de color negro se pinta de blanco. Va E n Europa, un señor va a comprar una cocina en una tienda
de electrodomésticos. Pregunta por el precio de una y le
U con su papá y le dice: '¡Papá, papá! ¡Ya soy blanco!'. El papá
le contesta: 'Ahora no puedo atenderte: estoy trabajando'. Va con la
dicen: 'Cuesta 5,000 euros'. Él exclama: '¡Esto es una estafa!'. 'No',
le responden. '¡Es una estufa!'.

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Acertijos

¿Cuál es la santa incompleta y por qué?


¿Qué hacen doce pájaros un sábado por la tarde arriba del
campanario de-la parroquia?
¿Por qué los diabéticos no pueden vengarse?
¿Cuál es el santo de los farmaceutas?
¿Cuál es el santo de los gimnastas?
¿Qué es lo que sube y nunca baja?
¿Cuántos peces caben en una ballena?
¿Por qué el ar no se seca?
¿Cuál es el animal que es dos veces animal?
¿Por qué los gallegos tienen un obispo en cada aeropuerto?
¿Por qué los gallegos ponen una bañera encima de cada am-
bulancia?
¿Por qué el mar muerto tiene ese nombre?
No soy el hombre del futuro, ni soy el hombre del pasado,
¿quién soy?

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Respuestas mezcladas Más acertijos

¿En qué se parecen un elefante y una cama?


Porque no tiene toalla. ¿Cuál fue el primer torero de la humanidad?
Ninguna, porque ya va llena. ¿Por qué ponen una tina encima de cada ambulancia?
Para meter dentro la sirena.· ¿En qué se parecen el 111 y los doctores?
El gato. ¿Por qué los changos no van a las fiestas?
Para confirmar los vuelos. Cuando se enoja un pollito contra otro, ¿cómo lo maldice?
Porque lo atravesó un pez espada. ¿Cómo mataron a Jack Sparrou?
San frasquito de Sales. ¿Quiénes son los niños más humildes?
San gimnasio de Loyola. ¿En qué se parecen un árbol y un borracho?
La edad. ¿Cuál es el colmo de un futbolista?
Santa Clara porque no tiene yema. Y ¿cuál el de un panadero?
Porque la venganza es dulce. ¿Qué le dice un cable eléctrico a otro cable?
Hacen media docena de pájaros ¿Qué le dice un jaguar a otro?
Soy Eloy. ¿A dónde se van las pulgas cuando se mueren?
¿Cuál es la fruta que desayunan los cardenales, después de
haber elegido Papa?
¿Por qué los perros les ladran a los vehículos?
¿Cuántas patas tiene un pato?

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Respuestas

En que el elefante es paquidermo y la cama pa que duermas.


Fue San Pedro porque cortó una oreja.
Para colocar dentro de ella a la sirena.
En que comienzan con uno, siguen con uno y terminan con Este libro se terminó de imprimir el 8 de febrero 2019 en los Talleres DDC
Antonio García Cubas 118, Col. Obrera, CDMX.
uno.
Porque son pachangas.
Le dice ¡Caldito seas!
Lo mataron con un disparrou.
Son los hijos de Supermán porque son supermancitos.
Se parecen en que el borracho comienza por la copa y ter-
mina por el suelo y el árbol comienza por el suelo y termina
por la copa.
El colmo de un futbolista es vivir de la patada.
El de un panadero es tener una hija Concha y no podérsela
comer.
Le dijo: Nos dicen los intocables.
Le dijo: How are you?
Se van al pulgatorio.
Desayuna papaya, porque papa ya.
Les ladran porque dentro llevan un gato en la cajuela.
Tiene tres. Sus dos patas y su esposa la pata.

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