Sesión Escuchamos Cuentos

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NIVEL: PRIMARIA V° V°

SESIÓN DE APRENDIZAJE N°01


TÍTULO DE LA SESIÓN: “ME ENCANTA ESCUCHAR CUENTOS” BIMESTRE: I – I UNIDAD

ÁREA CURRICULAR COMUNICACIÓN FECHA 06/03/24


GRADO y
DOCENTE BERTHA MARTIN MEDINA CABALLERO SECCIÓN
3ERO “B"

ARTICULACIÓN CON OTRA ÁREA Personal Social TIEMPO 45 MINUTOS


SE COMUNICA ORALMENTE EN SU LENGUA Identidad - Confía en sí mismo
COMPETENCIA VALOR / ACTITUD
MATERNA
Obtiene información de textos orales Explica el tema, el propósito comunicativo, las emociones y los
estados de ánimo de las personas y los personajes, así como las
DESEMPEÑO ANUAL
enseñanzas que se desprenden del texto, para ello recurre
a la información relevante del mismo.
CAPACIDAD(ES)
• Explica con sus propias palabras el tema, el propósito
comunicarivo, las emociones y los estados de ánimo de las
DESEMPEÑO PRECISADO
personas y personajes así como las enseñanzas que se
desprenden del texto.
PRODUCTO DE LA SESIÓN Participación oral (preguntas y respuestas). INSTRUMENTO DE LISTA DE COTEJO
(tangible o intangible) EVALUACIÓN
DISTRIBUCIÓN
SECUENCIA DIDÁCTICA ESTRATEGIAS / ACTIVIDADES RECURSOS
DEL TIEMPO
Recuerdan normas de convivencia.
INICIO Responden a preguntas: (Se presenta una imagen de un castor) ¿Qué observas en la imagen? ¿Qué animal es?
• Despertar el interés ¿Dónde vive? ¿Qué actividades hace?
Expresión
• Problematización ¿Te gusta los cuentos? ¿Has escuchado alguna vez el cuento de un castor? ¿Te gustaría escuchar uno? 10 MIN
• Recuperar saberes previos oral : palabra
¿Hará cosas importantes el castor? ¿Tu qué crees? ¿Serán necesarios los castores?
• Propósito
Se expresa el propósito de la clase: Escuchar con atención el cuento: “Juan el castorcito” y responder
oralmente a preguntas de comprensión.
DESARROLLO DEL PRODUCTO Escucha con atención indicaciones de trabajo. 30 MIN Cuaderno,
• Actividades que desarrollan los ANTES DE LA LECTURA : lápiz, colores,
desempeños
- Adquirir información ➢ Observa la ilustración y escuchan el título del cuento . borrador.
- Aplicar
- Transferir lo aprendido
➢ Responden a preguntas :¿Qué dice el título del texto?
*Tener presente el enfoque del área y ¿Qué has visto en la imagen?
enfoques transversales.
¿Qué tipo de texto vamos a escuchar? ¿De que tratará?
DURANTE LA LECTURA
Proceden a escuchar con atención la lectura oral que realiza la maestra en clase.
Realizan preguntas frente alguna inquietud que presenten sobre el texto que se les ha leído. Se realiza
una relectura la interiorizar el texto.
Buscan en el diccionario el significado de palabras desconocidas. Responden a
preguntas de comprensión en forma oral:
Sistema Educativo Escolar FAP
1- ¿Cuál es el título del cuento?
2- ¿Quiénes son los personajes del cuento?
3- ¿Cuál es el personaje principal?
4- ¿Qué actividad hacen los castores?
5- ¿Qué sintió Juan cuando su papá le encomendó el trabajo?
6- ¿Juan fue responsable? ¿Por qué?
7- ¿Qué lección aprendió Juan?
8- ¿Qué hubieras hecho si hubieras sido Juan?
9- ¿Demuestras responsabilidad en el cumplimiento de tus deberes? 10-¿En
qué crees que debes mejorar?
DESPUÉS DE LA LECTURA
Después de analizar oralmente el cuento escuchado.
Dibujan lo que más les impresionó del cuento escuchado y explican el mensaje del texto
➢ Participan socializando su trabajo.
Reflexionamos:
¿Qué aprendimos hoy?
CIERRE ¿Cómo lo aprendimos?
• Reflexionar sobre el proceso de ¿Te gustó el cuento escuchado?
Expresión
aprendizaje (Metacognición) ¿Tuviste alguna dificultad? ¿Cómo la solucionaste? 5 MIN
• Solución de problemas prácticos de la oral : palabra
¿Qué debemos hacer para mejorar?
vida diaria
¿Respetaste las normas de convivencia en clase?
¿Para qué te servirá lo aprendido?

https://www.youtube.com/watch?v=qBQo6Z1KVU0&t=342s
Sistema Educativo Escolar FAP

Juan, el castorcito
Había una vez un hermoso bosque lleno de grandes árboles, flores y un riachuelo que proporcionaba agua a todos los animalitos que vivían
en ese alegre lugar.
Juan era un pequeño castorcito a quien su papá castor le enseñaba con mucha técnica el oficio de la familia: fabricar diques.
Un día papá castor le dijo:
-Juan, ya es tiempo que hagas tu propio dique. Irás a la parte baja del río y trabajarás allí por las
mañanas, y por las tardes tendrás tiempo para jugar con tus amigos.
El pequeño castorcito se fue muy contento, ya que su padre le había confiado una gran responsabilidad.
Tan pronto llegó, empezó su obra recolectando pequeñas ramas de árboles, pero al poco rato se distrajo. Se
sumergió en el agua, vio a los peces nadar de un lugar a otro y eso le dio una idea. Rápidamente fue a buscar
a sus amigos.
-¡Hola, Rabito! ¡Qué linda mañana! ¿Vamos a jugar?
-¡Sí juguemos!, -le contestó el conejito-, pero tan pronto termine de ayudar a mi papá en la siembra de
zanahorias.
Luego, fue donde su amiga la ardillita.
-¡Qué buen día, Linda! ¿Quieres jugar conmigo?
-¡Me encantaría, Juan! -le contestó la ardilla-, pero en esta época caen muchas bellotas y debo ayudar a mamá a recogerlas.
Por la tarde jugaremos.
Juan fue a buscar a sus otros amigos, pero todos estaban ocupados. Entonces regresó al riachuelo y se puso a jugar con los peces. Se divertía
tanto que se olvidó por completo de la labor encomendada. De pronto se acordó y rápidamente comenzó a colocar rama tras rama muy a la ligera,
sin tener en cuenta lo que había aprendido de su padre. Hasta que escuchó una voz que lo llamaba:
Sistema Educativo Escolar FAP
-Juan, ven pronto es tiempo de almorzar. Debes estar agotado, disfruta tu almuerzo y luego ve a buscar a tus amigos.
Le pareció genial jugar, jugar y jugar. Esto se repitió todos los días. El castorcito no estaba cumpliendo con su responsabilidad. Un día
comenzó a llover con mayor intensidad.
Esto preocupó a los animales del bosque.
Poco a poco el cauce del río creció, por lo que aumentaba el peligro en los hogares y sembríos de
ellos. Los animales rogaban para que los diques de papá castor y Juan lograran desviar las aguas.
Juan se sentía muy nervioso, pues sabía que su dique no estaba bien hecho. Sentía culpabilidad al
imaginar las consecuencias de su irresponsabilidad.
El dique de papá castor no resistió. El agua pasó por encima, por abajo, por todos lados. Entonces las
esperanzas estaban en el dique de Juan. Este, al ver la avalancha, estalló en llanto.
-Papá, amigos, perdónenme, mi dique no está bien hecho, ya que en lugar de hacerlo me puse a jugar, sin pensar en lo importante que era
para todos el que yo haga mi trabajo correctamente. Perdónenme, buuu, buuu...
El tiempo transcurría y el dique de Juan resistía firmemente la fuerza del río y lo desviaba hacia otro lado. Por fin dejó de llover, y el nivel
del agua descendió.
El castorcito, sorprendido, no encontraba ninguna explicación. En eso se le acercaron todos los animales, y su papá le dijo:
-Sabíamos que optaste por jugar y no fuiste responsable. Así que, mientras tú dormías, tus amigos y yo arreglábamos lo que habías hecho mal.
-Quisimos darte una lección -dijo Linda.
-Evadir nuestra responsabilidad puede afectar a todos -continuó papá castor.
-¡Gracias, papá! ¡Gracias, amigos!-dijo Juan-. De ahora en adelante cumpliré con todas las responsabilidades que me encarguen.

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