Monográfico Completo Huntington Cuadernos de Arte e Iconografía
Monográfico Completo Huntington Cuadernos de Arte e Iconografía
Monográfico Completo Huntington Cuadernos de Arte e Iconografía
ARTE e
ICONOGRAFÍA
[CAIFUE]
Tomo XXIV
Núm. 47
Primer semestre de 2015
MONOGRÁFICO
DIRECTOR
Alfonso Rodríguez Gutiérrez de Ceballos
SECRETARIO
Carlos Pérez Montoya
SECRETARIO
Carlos Pérez Montoya
CONSEJO CIENTIFICO
Leticia Azcue (Museo Nacional del Prado)
Bonaventura Bassegoda i Hugas (Universidad Autónoma de Barcelona)
Jesús González de Zárate (Universidad del Pais Vasco)
Javier Jordán de Urríes y de la Colina (Patrimonio Nacional)
Rosa López Torrijos (Universidad de Alcalá de Henares)
Jose Manuel de la Mano (Doctor en Historia del Arte)
Consuelo Maquivar (Universidad Nacional Autónoma de Mexico)
Isabel Mateo Gómez (ex CSIC)
Javier Portús Pérez (Museo Nacional del Prado)
Elena Santiago Páez (ex Biblioteca Nacional de España)
CONSEJO DE REDACCIÓN
Gloria Martínez Leiva
Carlos Pérez Montoya
Consuelo Pizarroso Corchero
Alfonso Rodríguez G. de Ceballos
Ángel Rodríguez Rebollo
Cubierta: Miquel Viladrich: Mis funerales. 1910. Colección The Hispanic Society of America.
(nº inv. A 1983)
COORDINADORES CIENTÍFICOS
***
Colaboradoras en el proyecto
Universidad de Barcelona
SEMBLANZA DEL HISPANISTA ARCHER MILTON
HUNTINGTON, FUNDADOR DE LA HISPANIC
SOCIETY OF AMERICA
E
n la segunda mitad del siglo XIX los Estados Unidos de América del
Norte se convirtieron en una nueva y gran nación. A la primera y
utópica idea romántica de que el Nuevo Mundo era una virginal tie-
rra de promisión, se añadió entonces el paradigma de que Norteamérica era
el dechado del progreso material y a la vez la implantación democrática de
la libertad política. Los pioneros y primitivos colonos occidentales pasaron
a ser los constructores de una activa y emprendedora sociedad. La prosperi-
dad económica y la intensa industrialización de las ciudades del noroeste,
junto con la victoria yanqui con la Guerra de Secesión, la marcha y expan-
sión territorial hacia el lejano Oeste y la consiguiente consolidación del Es-
tado Federal, a finales de la decimonónica centuria, Norteamérica se elevó a
la categoría de una primera potencia internacional. En el siglo XX, con la
intervención armada, primero en la Gran Guerra Mundial de 1914 y después
en la Guerra Universal de 1939, los Estados Unidos finalmente lograron ser
el indiscutible árbitro de la política de un mundo cada vez más globalizado.
De sobra es conocida la influencia que Norteamérica ha ejercido, en el
siglo pasado, tanto en Europa como en el resto de los demás países del globo
terráqueo. Las formas de vivir y las costumbres de los habitantes del Nuevo
Mundo han constituido la moda de marcada modernidad. Las películas de
cine, el jazz y el charleston hicieron furor en los locos años del siglo XX.
También las Universidades, las Fundaciones benéficas, Centros de investi-
gación científica y los Museos, gracias a la acción filantrópica de los mag-
nates norteamericanos, han sido factores decisivos para la difusión del saber
y de la gestión cultural a nivel internacional. Tanto los Campus Universita-
rios y los rascacielos son ejemplos palmarios de nuestro aserto. También el
8 ANTONIO BONET CORREA
NOTAS
1
TAYLOR, Joshua C.: Las Bellas Artes en América. México, Noema Ediciones S.A., 1979.
2
Historia de un anticuario. Memorias de Duveen, Rey de los Anticuarios. Selecciones del Reader´s
Digest-Madrid, 1962. Reedición del libro “Duveen” de S. N Belirman. Versión castellana de Rafael
Santos Torroella.
3
Importante es señalar que Henry Edwards Huntington (1850-1927), sobrino de Collins P. Huntington,
fue quien se ocupó de los negocios familiares en California. Como se sabe este otro Huntington fue
un gran coleccionista, cuya casa, jardines y museo en San Marino (Pasadena) alcanzan un alto lugar
artístico, con piezas fundamentales en especial del arte inglés del siglo XVIII.
4
El nortemericano Sylvester Baxter fue el primero que publicó en 1901 una historia en 12 volúmenes
de la arquitectura mexicana de los siglos XVI al XVIII. Si libro Spanish-colonial architecture in
Mexico. Traducida al español fue editada en 1934 en México por el historiador del Arte Manuel
Toussaint.
5
MORENO LUZÓN, Javier: “Condensar el alma de España. Archer M. Huntington y la internalización
de la cultura española” en el volúmen Redes Internacionales de la Cultura Española 1914-1939.
Edición de José García-Velasco. Residencia de Estudiantes y Fundación de Ciencias de la Salud,
Madrid, 2014.
6
MONTERO JIMÉNEZ, José Antonio: El despertar de la gran potencia. Las relaciones entre Espa-
ña y los Estados Unidos (1898-1930). Madrid, Biblioteca Nueva, 2011.
7
BONET CORREA, Antonio: “Cajal: dibujante y fotógrafo” en el volúmen Historia, Medicina y
Ciencia en tiempos de Ramón y Cajal. Residencia de Estudiantes y Fundación de Ciencias de la
Salud. Madrid, 2006.
8
RODRÍGUEZ NIÑO, A.: “Las relaciones culturales como punto de encuentro
hispanoestadounidense” en GÓMEZ-ESCALONILLA, Lorenzo DELGADO y ELIZALDE, María
Dolores: España y Estados Unidos en el siglo XX. Consejo Superior de Investigaciones Científicas,
Madrid, 2005.
12 ANTONIO BONET CORREA
9
La Modernización Científica de España (De la Junta para Ampliación de estudios a la Apertura de
Nuevos Horizontes). Coordinado por Salustiano del Campo Urbano y Pedro Cerezo Galán. Madrid,
Instituto de España, Madrid, 2009.
10
SÁNCHEZ CANTÓN, Francisco: Catálogo de las pinturas del Instituto de Valencia de Don Juan.
Madrid, 1923, pp. 98-100. Véase el Apéndice Documental con la correspondencia de Guillermo de
Osma y Javier García Leániz.
11
RUIZ-MANJÓN, Octavio: “Federico de Onis, Cónsul de las Españas”; NARANJO OSORIO, Con-
suelo: “Compromiso y voluntad: Federico de Onís y la creación del Instituto de las Españas, Nueva
York, 1920-1936". Ambos capítulos figuran en el libro Redes Internacionales de la cultura española
1914-1936. Edición de José García-Velasco. Residencia de Estudiantes, 2014.
ARCHER MILTON HUNTINGTON (1875-1955): MECE-
NAZGO, COLECCIONISMO Y COMERCIO DEL ARTE
U
n día, ya lejano, descubrí en el Monasterio de Pedralbes en Barce-
lona el monument o 1 que la ciudad erigió a Archer Milton
Huntington en 1954 (fig. 1), sin duda el coleccionista de arte hispá-
nico más importante de América, el cual, cuando tenía 34 años, fundó en
1904 la Hispanic Society of America en Nueva York (fig. 2).
Ciertamente, en aquellos momentos no podía intuir que años más tarde
me pasaría muchas horas en esta benemérita institución investigando a este
fino coleccionista, bibliófilo, amante del conocimiento y generoso mecenas
que levanto en Audubon Terrace, en Nueva York, un conglomerado de edifi-
cios en estilo Beaux Arts/American Renaissance, proyectados la mayoría de
ellos por su primo, el arquitecto Charles Pratt Huntington (1871-1919)2 : la
Hispanic Society, 1904-1906, American Numismatic Society, 1906-1907,
American Geographical Society, 1909-1911, Church of Our Lady of Hope,
1909-1912, Museum of the American Indian (1915-22). Mientras que otro
importante arquitecto, William M. Kendall, erigió, entre 1921-1930, la
American Academy of Arts and Letters y el National Institute of Arts and
Letters (fig. 3).
otra con la atracción por la Edad Media promovida principalmente por las
universidades americanas de Princeton y Harvard. Kathryn Brush17 en un
interesantísimo artículo refiere que a principios del siglo XX la mayoría de
las tesis que se leían en estas dos universidades trataban de arte medieval,
interés que continuo intensivamente en la década de los años 20 y 30 del
siglo pasado. Cabe subrayar que esta pasión por la historia medieval se re-
flejó también en las primeras grandes exposiciones de objetos de arte me-
dievales llevadas a cabo en los museos americanos18. Así en 1914 el
Metropolitan Museum of Art presento una exposición muy celebrada de
obras de arte medievales de la colección de John Pierpont Morgan (1837-
1913), mientras que el escultor y coleccionista George Grey Barnard19 (1863-
1938) daba a conocer su colección de fragmentos arquitectónicos y
escultóricos medievales, los cuales posteriormente fueron uno de los nú-
cleos de los Cloisters, museo inaugurado en 1938 gracias a la munificencia
de John D. Rockefeller (1874–1960), actuaciones que, sin duda, fomenta-
ron la apreciación del arte medieval por parte de los coleccionistas20 y del
público en general.
Si la primera elección afectiva de Archer Milton Huntington fue la Es-
paña medieval, la segunda era la del esplendor imperial, la del Siglo de Oro,
la de Miguel de Cervantes (1547-1616), de Félix Lope de Vega (1562-1635),
de Diego Velázquez (1599-1660), de Francisco de Zurbarán (1598-1664), a
la que tantos esfuerzos dedicaron para ensalzarla o denostarla George Ticknor
o William Prescott. La tercera era la romántica y castiza, celebrada por Was-
hington Irving (1783-1859) y Prosper Merimée (1803-1870) para los cuales
el reloj se había parado en un tiempo mitológico y percibían España a
través de la nostalgia romántica cultivada, entre otros, por Teophile Gautier
(1811-1872). La cuarta era la de la generación del 98, la de Miguel de
Unamuno (1864-1936) o Azorín (1873-1967), con los cuales Huntington
compartió algunos de los presupuestos. No obstante, la España real, la que
en estos años luchaba agónicamente por su supervivencia política y social,
esta interesaba poco a Huntington, el cual prefería observar sus costumbres,
su indumentaria, sus canciones, sus fiestas, sus toros, sus peleas de gallos,
tal como dejo plasmado en uno de sus interesantes cuadernos de viaje21 y
que tan bien reflejo su amigo Joaquín Sorolla en los magníficos lienzos de
las provincias de España en la Hispanic Society.
Otro aspecto clave y fundamental es la valoración de su colección y en
este sentido hay que subrayar que Archer Milton Huntington también parti-
cipó de los nuevos planteamientos que emergían del campo de las humani-
dades, los cuales le convirtieron en uno de los más destacados y originales
coleccionistas de arte hispánico de los Estados Unidos. Y un aspecto funda-
mental es que Huntington aplico parámetros antropológicos en la construc-
ARCHER M ILTON H UNTINGTON (1875-1955): MECENAZGO , COLECCIONISMO Y COMERCIO ... 19
5. Valdés Leal: Viacrucis. Hispanic Society of America. Cortesía de The Hispanic Society
of America.
hasta los Estados Unidos atraídos por su emergente mercado artístico. Cruset
se formó en Girona40 y Barcelona y más tarde trabajo en el taller de Raimundo
de Madrazo y Garreta (1841-1920), el cual le abrió las puertas de Paris y
quizás también las de Archer Huntington en Nueva York. Cruset se quedó
definitivamente en Nueva York y se estableció en el Queensboro Bridge,
especializándose sobre todo en vistas panorámicas41, pudiendo citarse el
View Queensboro Bridge, 1910 (fig.6) View of Manhattan in Winter, 1911
(fig. 7), o Panoramic views of new Rochelle, 1936.
Sebastian Cruset, como los Madrazo o el mismo Sorolla, trabajo para
Archer Milton Huntington en una doble dirección, como agente de arte y
24 INMACULADA SOCIAS BATET
8. Sebastián Cruset: Joaquín Sorolla. The Hispanic Society of America. Cortesía de The
Hispanic Society of America.
10. Carta de Cruset a Hutington. 1909. The Hispanic Society of America. Cortesía de The
Hispanic Society of America.
12. Escudo de la Republica Española. 1931. Nueva York. The Hispanic Society of America.
Cortesía de The Hispanic Society of America.
14 . El Greco: Sagrada Familia. Nueva York. The Hispanic Society of America. Cortesía
de The Hispanic Society of America.
30 INMACULADA SOCIAS BATET
16. Acuarela de una vista ideal, del patio antes de su traslado en 1904. Cortesía de The
Hispanic Society of America.
17. Patio central de The Hispanic Society of America. Cortesía de The Hispanic Society of
America.
34 INMACULADA SOCIAS BATET
de Madrid. Por este retrato piden 600.000 pesetas y se pueden dar documen-
tos que acreditan su autenticidad. Si Ud. no quisiera comprarlo y me pudiera
dar la dirección de alguna persona que se alegrara de tener esta ocasión de
poderlo adquirir, se lo agradecería infinito". Además, también le proponía
que comprara la bandera usada en el sitio de Gibraltar.
En la Hispanic Society se conserva una nutrida correspondencia entre
Archer Huntington y José Gestoso Pérez, escrita entre 1898 y 1915, que
pone en relevancia numerosos aspectos del mundo de la cultura, del comer-
cio del arte y del abundante trasiego de objetos de arte en Andalucía: foto-
grafías de la colección Abreu, azulejos del siglo XVI, restos escultóricos
romanos, numerosos florones de madera mudéjares, muebles españoles de
los siglos XVI, XVII y XVIII, etc.
José Gestoso,63 cuya trayectoria merecería un estudio monográfico,
ocupo una larga lista de cargos en Sevilla, ya que fue jefe del archivo muni-
cipal, trabajo en el museo arqueológico, fue vicepresidente de la Real Aca-
demia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría y miembro de la Real
Academia de la Historia (fig. 18). Desde estas importantes atalayas José
Gestoso informaba puntualmente a Huntington de los hallazgos o de los
diversos avatares de las excavaciones arqueológicas de Santiponce, de los
hallazgos de Arthur Engel y en general sobre la dinámica del comercio de
ARCHER M ILTON H UNTINGTON (1875-1955): MECENAZGO , COLECCIONISMO Y COMERCIO ... 35
arte en Sevilla. Así, y tras la muerte en 1903 del pintor sevillano José Jiménez
Aranda (1837-1903), le proponía la compra de sus pinturas y de una mag-
nífica colección de dibujos del Quijote64. Huntington acepto el sugirimiento
de Gestoso y compro el cuadro, Consummatum est, de Jiménez Aranda65.
Gestoso66 a primeros de febrero de 1905 le escribió diciéndole que la
salud le flaqueaba, pero que no descuidaría sus asuntos, anunciándole que
ya se habían embarcado los capiteles en el vapor Ulriken y que pronto
llegarian a New York. También le comentaba que miraría si todavía no se
había vendido la corona de plata que le comento en días pasados, así como
otras cosas que pudieran interesarle. Y seguidamente le decía:
"La colección de objetos cerámicos cuyas fotografías le mande, como
interesantes ejemplares mudéjares, las posee un señor, el cual me ha mani-
festado que no quiere venderla porque su señora tiene el capricho de conser-
varla. Esta razón que da me parece que no es la verdadera, pues me extraña
que su señora que no entiende, ni tiene afición a los objetos antiguos se
preocupe poco ni mucho de que se vendan. Me inclino a creer que su marido
quiere que pase algún tiempo para mientras tanto oír opiniones de unos y de
otros e ir formando juicio de su verdadero valor para decidirse a pedir. Si
Ud. viniese por esta los vería y tal vez pudiesen entenderse. Supongo que a
estas horas habrá Ud. recibido las fotografías que me dio para Ud. el señor
Abreu, las cuales vistas formara Ud. un juicio muy aproximado. Con mu-
cho gusto he visto que algunos periódicos de Madrid y de provincias han
publicado artículos muy honrosos para Ud. enalteciendo el valor de sus ges-
tiones en pro de la historia y del arte español. En algunos de los ilustrados he
visto reproducida la vista del hermoso monumento construido tan generosa-
mente por U. para museo y biblioteca de la Sociedad Hispanica…"
En febrero de 1905 Gestoso67 le daba las gracias por el envío de unas
fotografías de arte egipcio para su cátedra de Historia de las Bellas Artes en
la Escuela Superior de Artes e Industrias de Sevilla diciéndole:
"Cuando tengamos el gusto de ver a Ud. por aquí, procurare por mi
parte, que su visita a Sevilla no sea infructuosa para los intereses del Museo
de la Sociedad Hispánica y V. pueda formarse un concepto de la importan-
cia de la colección Abreu… Me parece que las gestiones que vengo practi-
cando para que nuestro Gobierno señale una cantidad de relativa importan-
cia con destino a las exploraciones de Itálica tendra favorable éxito al
aprobarse los presupuestos generales del estado y mucho me complacería
que cuando llegase V. a esta se encontrara con alguna grata sorpresa por
descubrimientos de interés. Por mi parte no dejo de la mano un asunto de
tanto interés y he de hacer lo posible por conseguirlo. Ayer he ido con el Sr.
Bonsor a una finca de campo cercana al pueblecito de Alcalá de Guadaira
donde a flor de tierra aparecen grandes vestigios de construcciones romanas
36 INMACULADA SOCIAS BATET
19. Albarán de envío a Nueva York. 1906. The Hispanic Society of America. Cortesía de
The Hispanic Society of America.
y cuyo sitio van a explorar nuestros amigos Bonsor y Engel: yo creo que con
éxito a juzgar por la importancia de los restos que aparecen…."
En julio del mismo año68 Gestoso le comentaba su extrañeza de que
todavía no hubiera recibido la caja con sus 100 libros de los Barros vidria-
dos sevillanos y las 17 cajas de azulejos que le había enviado, según sus
instrucciones, a la compañía Kronfield Saunders de New York (figs. 19 y
20). Asimismo le preguntaba si había recibido las otras cajas que conte-
nían una estatua romana, el libro de las genealogías de la familia de los
Delgado y los dos cuadros de azulejos del siglo XVI, de reflejos metálicos,
los cuales eran donación del propio Gestoso para la Hispanic Society. Tam-
bién le comunicaba que le enviaba por carta certificada una hoja de perga-
mino de un libro de canto de iglesia del siglo XVI, el cual formaba parte de
dos grandes volúmenes que estaban a la venta, los cuales contenían varias
letras capitales muy finamente decoradas con trazos de tintas de colores.
Y en agosto de 1911 le proponía la compra69 de una escultura de Santa
Clara por el precio de 3000 pesetas, diciéndole que era genuina, y que si no
ARCHER M ILTON H UNTINGTON (1875-1955): MECENAZGO , COLECCIONISMO Y COMERCIO ... 37
20. Carta de Jose Gestoso a Archer Milton Huntington. The Hispanic Society of America.
Cortesía de The Hispanic Society of America.
NOTAS
1
SOCIAS BATET, Immaculada: "El memorial de Barcelona a Archer Milton Huntington, el funda-
dor de la Hispanic Society of America, y a su esposa la escultora Anna Hyatt Huntington» en SO-
CIAS, Immaculada (ed.): Conflictes bèl·lics, espoliacions i col·leccions. Barcelona, Publicacions de
la Universitat de Barcelona, 2009, pp. 205-218.
2
El arquitecto Charles Pratt Huntington se educó en Harvard University y en la École Nationale
Supérieure des Beaux-Arts de Paris.
3
WINIFRED E., Howe: A History of the Metropolitan Museum Art, 1905-1941. New York,
Metropolitan Museum of Art & Columbia University Press, 1946; TOMKINS, Calvin: Merchants
and Masterpieces. The History of the Metropolitan Museum of Art, New York, E.P. Dutton & Co.
inc, 1970.
4
Algunas de las piezas de Collis Potter Huntington expuestas en "The Hudson-Fulton Celebration"
fueron las siguientes: Johannes Vermeer Mujer con laud; Rembrandt El sabio; Rembrandt Hendrickje
Stoffels; Frans Hals Retrato de Dorothea Berck y retrato de un hombre; Aelbert Cuyp, Pastores;
Jacob van Ruysdael Paisaje, Bulletin of the Metropolitan Museum of Art. New York, Mayo, 1909,
vol. IV.
5
VALENTINER, W.R.: The Hudson-Fulton Celebration. The Metropolitan Museum of Art Exhibition.
1909, 2 vols.
6
Hispanic Society of America (HSA), Archer Milton Huntington (AMH) Archives, Correspondence,
21 enero, 1909.
7
Henry Wolf (1852-1916) fue un grabador de reproducción francés que en 1871 se trasladó definiti-
vamente a Nueva York. Hizo grabados de la obra de Gilbert Stuart, Enrique Serra, Frank Weston
Benson, Howard Pyle, Henry Salem Hubbell, John Singer Sargent, A. B. Frost, Jan Vermeer, Jean-
Léon Gérôme, Aimé Morot y Édouard Manet. Muchos de estos grabados fueron publicados en
Scribner’s Magazine, Harper’s Monthly y Century Magazine y se pueden consultar en la colección
del Smithsonian American Art Museum y del Metropolitan Museum of Art de Nueva York.
8
Winifred (1946), p. 82.
9
HSA, AMH Archives, Correspondence, 2 octubre, 1907.
10
HSA, AMH Archives, Correspondence, 4 noviembre, 1909.
11
Dikran Garabed Kelekian (1868-1951) actuó como asesor de grandes coleccionistas americanos,
entre ellos, Henry Walters; George Blumenthal, y Louisine y Henry Havemeyer. Kelekian nació en
Turquía y era el hijo de un banquero armenio. En 1892, conjuntamente con su hermano, abrieron una
ARCHER M ILTON H UNTINGTON (1875-1955): MECENAZGO , COLECCIONISMO Y COMERCIO ... 41
tienda de antigüedades en Constantinopla. Kelekian pronto obtuvo una gran reputación como exper-
to en arte islámico, cerámica y textiles en particular. Llego a Estados Unidos en 1893 para la exposi-
ción colombina en Chicago, en calidad de comisionado para el pabellón persa. No mucho tiempo
después, Kelekian abrió su primera galería de Nueva York, conocida como Le Musée de Bósforo, así
como otras en París y El Cairo.
12
HSA, AMH Archives, Correspondence, 4 abril 1910.
13
HSA, AMH Archives, Correspondence, 19 marzo, 1910.
14
Tomkins (1989), p. 236.
15
The Hispanic Society of America: Tesoros, New York: The Society, 2000; CODDING, Mitchell: "A
legacy of Spanish Art for America: Archer M. Huntington and the Hispanic Society of America" en
TINTEROW, Gary y LACAMBRE, Geneviève: Manet, Velázquez: The Taste for Spanish Painting.
New Haven, London, Yale University Press, The Metropolitan Museum of Art, 2003; MAIER, Jorge:
Jorge Bonsor (1855-1930). Un académico correspondiente de la Real Academia de la Historia y de
la arqueología española. Madrid, Real Academia de la Historia, 1999.
16
BORROW, George: The Zincali an account of the Gypsies of Spain. London, John Murray, 1846.
17
BRUSH, Kathryn: "German Kunstwissenschaft and the practice of Art History in America after
World War I. Interrelationships, Exchanges, Contexts", Marburger Jahrbuch fur Kunstwissenschaft,
1999.
18
Existe una amplia y fundamental bibliografía que analiza la recepción del arte medieval en Estados
Unidos. Algunos nombres que se pueden citar son: LEARS, T.J. Jackson: No place of Grace.
Antimodernism and the Transformation of American Culture, 1880-1920. New York, 1981;
COURTENAY, William J.: Medieval Studies in North America. Past, Present and Future. Francis G.
Gentry y Christopher Kleinhenz (Eds.). Kalamazoo, 1982.
19
George Grey Barnard, a menudo escrito George Gray Barnard, fue un escultor y coleccionista
estadounidense. El marchante de arte francés René Gimpel escribió en su Diary of an art dealer
(1966) que Barnard pretendía conseguir una fortuna con el comercio de obras de arte.
20
ROTTER, Aaron: "J.P. Morgan and the Middle Ages"; BRADFORD SMITH, Elizabeth: "George
Grey Barnard: artist/Collector/Dealer/Curator". Ambos ensayos están dentro de Medieval Art in
America Patterns of Collecting, 1800-1940. Exh. Cat. Palmer Museum of Art, The Pennsylvania
State University, Elizabeth Bradford Smith (Ed.). University Park, Penn. 1996.
21
HSA. AMH Archive. "Rough Notes" es un interesante cuaderno de viaje de Archer Milton
Huntington, que relata sus viajes a lo largo de la costa mediterránea en 1893.
22
LENAGHAN, Patrick: "La formación del archivo fotográfico de la Hispanic Society of America:
Un ‘experimento’ de Archer Milton Huntington y Ruth Matilda Anderson" en LENAGHAN, Patrick
y MATA PÉREZ, Luis Miguel: Salamanca en los fondos fotográficos de la Hispanic Society of
America. Valladolid, Junta de Castilla León, Consejería de Educación y Cultura, 2003.
23
SOCIAS BATET, Immaculada: La correspondencia entre Isidre Bonsoms Sicart y Archer Milton
Huntington: una colección de libros antiguos y objetos de arte. Barcelona, Reial Acadèmia de Bones
Lletres de Barcelona, 2010.
42 INMACULADA SOCIAS BATET
24
SOCIAS BATET, Immaculada y GKOZGKOU, Dimitra: Agentes, marchantes y traficantes de
objetos de arte, 1850-1950. Gijón, Trea, 2012.
25
CAMPS TRIAY, Marta: Exposicions d’artistes catalans a New York, 1900-1950. Barcelona,
Universitat de Barcelona, 2012 <http://hdl.handle.net/2445/53707>.
26
SOCIAS BATET, Immaculada: "Més noticies a l’entorn del període americà de Josep Pijoan Soteras
(1881-1963)". Butlletí de la Societat Catalana d’Estudis Històrics, Núm. XXIV, 2013, pp. 549-568.
De la misma autora Socias Batet (2010), p. 113 y ss.
27
Maier (1999).
28
HSA, AMH Archives, Diaries (1898), p. 214.
29
Véase, Socias Batet (2010), p. 106. Especialmente importante es la consulta del archivo de los
Duveen en The Getty Research Institute de Los Angeles, documentos que se pueden consultar tam-
bién microfilmados en la Arthur K. Watson Library del Metropolitan Museum of Art. Asimismo, en
The Getty Research Institute se conserva otra importantísima fuente para la historia del coleccionismo,
como es la de Knoedler Gallery Archive.
30
HSA, AMH Archives, Correspondence, 1 junio 1910.
31
Los archivos de los Seligmann se pueden consultar online en Archives of American Art, Smithsonian
Institute. Washington. Sobre esta dinastía ver también Socias Batet (2010), p. 108; Socias Batet y
Gkozgkou (2012), pp. 39 y ss.
32
Colección que en 1925 fue comprada por John D. Rockefeller Jr. constituyendo uno de los núcleos
de los Cloisters, museo inaugurado en 1938, el mismo año de la muerte de Barnard.
33
Archives of American Art, el 27 de febrero de 1909.
34
Archives of American Art, 7 de enero de 1913.
35
Archives of American Art, 21 de marzo de 1921.
36
Archives of American Art, 23 noviembre, 1921.
37
CODDING, Mitchell: "A legacy of Spanish Art for America: Archer M. Huntington and the Hispanic
Society of America" en Tinterow; LACAMBRE, Geneviève (2003); Socias Batet (2010), pp. 98 y ss.
38
Socias Batet (2010), pp. 104 y ss.
39
Socias Batet (2010), p. 142; Camps Triay (2012), p. 79.
40
RÀFOLS, Josep Francesc: Diccionario de artistas de Cataluña, Valencia y Baleares. Barcelona,
Edicions Catalanes, S.A., 1980; PLA CARGOL, Joaquim: Biografias de Gerundenses. Gerona y sus
comarcas. Girona: Dalmau Carles Pla, 1960.
41
PIERSON, Lonnie (ed): The Artist Bluebook. Dunbier, 2005, documenta a Cruset com a paisajista.
42
HSA, AMH Archives, Correspondence, 19 diciembre, 1904.
43
HSA, AMH Archives, Correspondence, 1909.
44
CRUSET, Sebastián: "La Exposición Zuloaga en Nueva York", La Ilustración Artística. Barcelona
(14-VI-1909). Y la de Sorolla también la publicó en esta misma publicación.
ARCHER M ILTON H UNTINGTON (1875-1955): MECENAZGO , COLECCIONISMO Y COMERCIO ... 43
45
Josep Montllor i Pujal (1883-1960) fue un marchante catalán que llego a los Estados Unidos en
1905. Conjuntamente con sus hermanos Jaume y Salvador Montllor i Pujal fundó un establecimiento
de objetos de arte, la denominada Spanish Antique Shop, con tiendas en Barcelona, Nueva York,
Palm Beach, Tampa i Barcelona <http://www.enciclopedia.cat>.
46
HSA, AMH Archives, Correspondence, 1909.
47
HSA, AMH Archives, Correspondence, 13 de Julio, 1909.
48
Carta de Sebastián Cruset a Joaquín Sorolla Bastida del 27 de febrero de 1911. Archivo del Museo
Sorolla, Correspondencia, Invº CS1513.
49
HSA, AMH Archives, Correspondence, 24 febrero 1919.
50
HSA, AMH Archives, Correspondence, 6 de junio 1919.
51
Quiero hacer constar mi agradecimiento a Marcus B. Burke, conservador de pinturas de la Hispanic
Society por su ayuda y finos sugerimientos.
52
Socias Batet (2010), pp. 113 y ss.
53
TACHARD, Paul: Catalogue des anciennes Faiences Hispano-Mauresque, Plats importants reflets
métalliques en faïences de Manisses, XVI° siècle. Vente, Drouot, 1912, in-4°; COLL, Jaume: "Ma-
nuel Gonzales Marti (1877-1972)", Revista de la Subdirección General de Museos Estatales, nº 1
(2005), pp. 170-181.
54
Arxiu Família Gudiol (Barcelona). Correspondència de Walter W.S. Cook a José Gudiol Ricart, 26
d’agost, 1935.
55
Véase, Camps (2012).
56
Aureliano de Beruete y Moret, historiador y crítico de arte, hijo del pintor Aureliano de Beruete.
Fue director del Museo del Prado entre 1918 y 1922 y miembro de la Hispanic Society of America.
57
HSA, AMH Archives, Diaries, 1898, p. 138.
58
Vid. MAIER, Jorge, op. cit., 1999.
59
HSA, AMH Archives, Correspondence, 15 enero, 1902.
60
HSA, AMH Archives, Correspondence, 6 de marzo, 1902.
61
Socias Batet (2010), pp. 129 y ss.
62
HSA, AMH Archives, Correspondence, 31 diciembre, 1905.
63
Socias Batet (2010), pp. 131 y ss.
64
HSA, AMH Archives, Correspondence, 1903.
65
Gué Trapier, Elisabeth du, Catalogue of Paintings (19th and 20th centuries) in the collection of the
Hispanic society of America. New York: Printed by Order of the Trustees, 1932, p. 106.
66
HSA, AMH Archives, Correspondence, 1 febrero 1905.
67
HSA, AMH Archives, Correspondence, 28 febrero 1905.
68
HSA, AMH Archives, Correspondence, 8 julio 1905.
44 INMACULADA SOCIAS BATET
69
HSA, AMH Archives, Correspondence, 1911.
70
HSA, AMH Archives, Correspondence, 15 juliol, 1913.
71
HSA, AMH Archives, Correspondence, 1923.
72
HSA, AMH Archives, Correspondence, 12 febrero, 1924.
73
HSA, AMH Archives, Correspondence, Consulado americano de Bilbao, 2 agosto, 1917.
74
HSA, AMH Archives, Correspondence, Embajada americana en Madrid, 17 julio, 1919.
75
HSA, AMH Archives, Correspondence, 11 de noviembre 1919.
76
HSA, AMH Archives, Correspondence, 6 junio, 1919.
77
SOCIAS BATET, Immaculada: "Valores e ideología en las exposiciones de la Hispanic Society of
America" en SOCIAS, Immaculada y GKOZGKOU, Dimitra (Eds.): El arte hispánico en las exposi-
ciones internacionales: circulación, valores y representatividad. Milán, Hugony, 2014.
LA ARQUEOLOGÍA EN EL COLECCIONISMO
DE ARCHER M. HUNTINGTON
A
nadie le es hoy en día desconocido que Archer Milton Huntington
fue uno de los hispanistas más destacados y que reunió la mejor co-
lección sobre la cultura española que ha existido y existe en los
Estados Unidos1. Sin embargo, el Museo-Biblioteca de la Hispanic Society
of America2, creado en 1904, y las colecciones que lo componen3 es aún
bastante desconocido, así como el que reúne ciertas características en su
génesis y configuración que han sido poco tratadas en la bibliografía sobre
esta gran institución norteamericana de la cultura española, que considera-
mos del mayor interés.
Uno de estos aspectos, que ya hemos abordado en alguna otra ocasión4,
es el criterio arqueológico con el que Huntington afrontó la formación de su
particular Museo Español, que le imprime ese especial carácter a la institu-
ción y a sus colecciones y por extensión al coleccionismo o, mejor dicho, a
la praxis coleccionista que Huntington desarrolló, que no tiene paralelo en
los Estados Unidos e incluso en Europa. Es decir, que el Museo fue concebi-
do, de acuerdo con sus objetivos, como un gran conjunto de la cultura mate-
rial y documental española. Es decir, algo así como formar el gran legado
histórico que constituyen la Biblioteca y el Museo Arqueológico Nacionales
en España, pero a escala reducida. Llamamos la atención sobre el hecho,
que con frecuencia pasa desapercibido, que el que ambas instituciones al-
berguen conjunta pero independientemente en un mismo edificio construi-
do expresamente al efecto, no es fruto de la casualidad.
46 JORGE MAIER ALLENDE
Por otra parte, está además el interés que Huntington demostró por la Ar-
queología y la incorporación de abundantes materiales arqueológicos a la
colección –discurso expositivo-, que es una cuestión también sumamente
novedosa en un hispanista a caballo entre los siglos XIX y XX, como lo era
Huntington, y que es fruto además de la consolidación de la Arqueología
como disciplina científica en la España y Europa finisecular5.
Es preciso ahora remontarse a las razones que atrajeron a Huntington
hacia el mundo español y hacer algunas precisiones y observaciones:
El interés de Huntington va mucho más allá que el de sus lecturas in-
fantiles de Geroge Borrow, como normalmente se ha expuesto desde hace
tiempo6 .
En primer lugar hay que sopesar su entorno familiar inmediato que fue
también un decisivo acicate en su atracción por la cultura hispánica, ya que
su padre Collis Potter Huntington se trasladó a California, un estado que
conservaba aun un gran peso de lo hispánico, en 1849 y allí aprendió a ha-
blar bastante bien el español. En segundo lugar hay que tener en cuenta
también la emergencia del interés por lo español, al ser uno de los compo-
nentes culturales importantes en los que se asentaban la cultura de los Esta-
dos Unidos7 . En tercer lugar no se puede tampoco pasar por alto que tanto
su padre como su madre fueron coleccionistas de arte.
Por estas razones principalmente, Archer M. Huntington empezó a los
14 años a estudiar español con una profesora de Valladolid, que muy proba-
blemente añadió nuevos estímulos a un joven adolescente, ya que inició
pronto su formación como hispanista, que completó con el Profesor espe-
cialista en literatura española del Siglo de Oro William Irland Knapp (1835-
1908).
Su progresiva y atípica formación en el campo de los estudios hispáni-
cos y su decisión de incorporar la arqueología, lo vinculan en gran medida
con el hispanismo francés, con el que ciertamente mantuvo siempre estre-
chos contactos. Detrás de ello puede intuirse la influencia de su madre, gran
admiradora de lo francés.
Paralelamente hay que tener en cuenta otros componentes de relevan-
tes en la configuración de su propio concepto del coleccionismo o más bien
del acerbo común en el coleccionismo de su tiempo:
Por un lado, sus visitas al Victoria and Albert Museum de Londres (fig.
1) y el conocimiento del movimiento de Arts and Crafts inglés, tan impor-
tante también en Alemania y, especialmente, en Austria a comienzos del
siglo XX, fueron muy significativos. En este sentido es conveniente llamar
la atención sobre Jorge Bonsor, su futuro proveedor de antigüedades espa-
ñolas en Sevilla, estudió y acabó su formación como artista en el Art Training
School of South Kensington, casi por las mismas fechas en que Huntington
la visitó. Este movimiento tuvo en cambio poco desarrollo en España.
LA ARQUEOLOGÍA EN EL COLECCIONISMO DE ARCHER M. H UNTINGTON 47
Creo que los aspectos que acabamos de describir son bajo los que se
comprenden mejor el coleccionismo que Huntington desarrolló que se po-
dría calificar en cierta medida como neorromántico, y que quedarían
ejemplificadas, como ya hemos avanzado, en la formación de colecciones
atípicas o muy poco frecuentes en el coleccionismo hasta esos momentos:
cerámica popular (antigua y moderna), los textiles, la artesanía del hierro
fundido y el corpus fotográfico sobre vida y tradiciones populares, además
por supuesto de la colección arqueológica.
50 JORGE MAIER ALLENDE
cualquier parte del mundo, sin sacar nada de España". Por otra, establece
profundos lazos de amistad con J. Bonsor, A. Engel y J. Gestoso que tanto
contribuyeron en la formación de la colección arqueológica de la Hispanic
Society.
La guerra entre los Estados Unidos y España obligó a Huntington a
abandonar el país y la arqueología, momentáneamente.
Por otra parte es interesante señalar que Huntington fue nombrado en
1898 correspondiente de la Société de Correspondance Hispanique16, se-
gún se desprende de la correspondencia que se conserva, a propuesta de
Arthur Engel (carta de Arthur Engel, 13 de marzo de 1898). Dicha institu-
ción fue fundada por el arqueólogo francés Pierre Paris (1859-1931) como
primer paso para crear un organismo de colaboración franco-español, y no
deja de ser una idea sumamente original que París aprovechara la corriente
del hispanismo universitario para incluir en ella a la Arqueología, que no era
precisamente un campo tratado por los hispanistas17, circunstancia que tam-
bién aprovechó Huntington, como hemos advertido. Las relaciones de
Huntington con el hispanismo francés fueron muy estrechas e incluso fue el
principal patrocinador de la Revue Hispanique que dirigía Raymond Foulche
Delbosc (1864-1929).
Otros objetos
La mayor parte de los objetos adquiridos a Antonio María de Ariza son
de época romana, y consisten principalmente en cerámica de la necrópolis
romana de Carmona aunque también de Extremadura.
A todo ello debemos de añadir cuatro estatuas romanas de mármol de
excelente factura en su mayor parte procedentes de Itálica, una Artemis ad-
quirida a Manuel Almonte en 1898, un busto de joven de la colección Warneck
en 1905 y un Hermes y una cabeza de Drusila adquirido a José Gestoso en
1905 también.
La colección arqueológica de la Hispanic Society se compone, final-
mente, de otro conjunto de materiales romanos (inscripciones, cerámica,
vidrio y algunos bronces) producto de las excavaciones que Huntington lle-
vó a cabo en Itálica en 1898.
Junto a las colecciones también existe un importante fondo documen-
tal en el que se conservan informes, dibujos, fotografías y correspondencia
relacionados con las colecciones arqueológicas que es de un gran interés.
Algunas de las piezas de la colección arqueológica de la Hispanic Society
fueron publicadas aún en vida de Huntington. José Pijoán publicó las escul-
turas de mármol (1917),27 Jorge Bonsor los marfiles fenicios (1928),28 Werner
Caskel las inscripciones árabes (1936)29 y Alice Wilson Frothingham la terra
sigillata procedente de las excavaciones de Huntington en Itálica (1937)30,
así como los vasos calcolíticos de El Acebuchal (1953)31. Tras el falleci-
miento de Huntington y el auge de los estudios sobre el orientalizante en la
Península Ibérica los investigadores no han dejado de interesarse por los
materiales de la colección de la Hispanic Society sobre los que ahora no
vamos a insistir.
mismo año por Ernest Babelon (1854-1924), y tenía como objetivo empren-
der y fomentar excavaciones y exploraciones arqueológicas a través de sub-
venciones particulares en Francia, en sus colonias y protectorados, así como
en el extranjero33. Sabemos que esta sociedad financió las campañas de
excavaciones que Bonsor llevó a cabo en varias necrópolis tartésicas de Los
Alcores (Santa Lucía y Cruz del Negro) en 1904. Los materiales y algunos
dibujos se expusieron en una exposición que organizó la sociedad en el Petit
Palais des Champs Elysées, que se inauguró el 7 de junio de 190534 . Al
parecer las excavaciones de Engel en Osuna también fueron financiados en
parte por la Societé française des Fouilles Archéologiques35. No obstante, la
relación de Huntington con estos trabajos es bastante improbable, como
parece desprenderse de una carta de Bonsor a Huntington en la que le habla
de dicha iniciativa,36 pero no deja lugar a dudas del interés que el hispanista
norteamericano mantuvo por promover las investigaciones arqueológicas.
La ley de Excavaciones y Antigüedades de 1911 y la Primera Guerra
Mundial cortaron el flujo de adquisiciones de antigüedades españolas por
parte de Huntington. Pero ello no fue obstáculo para seguir apoyando las
investigaciones arqueológicas españolas. En 1916 financió la publicación
de la traducción del Hombre Fósil en España de Hugo Obermaier y en 1919
creó la serie Hispanic Notes and monographs en la que aparecieron varios
estudios sobre arqueología española como el Tartessos de Bonsor (1921) y
The greeks in Spain (1929) del arqueólogo norteamericano Rhys Carpenter
(1889-1980), director de la American School of Classical Studies de Atenas
entre 1927 y 1932 y profesor de Arqueología clásica en el Bryn Mawr College
(1913-1955). También financió la espléndida edición de The Cave of Altamira
at Santillana del Mar, Spain (1935) de Henri Breuil y Hugo Obermaier, en
colaboración con la Junta de las Cuevas de Altamira y la Real Academia de
la Historia.
Huntington también apoyó a la Escuela Anglo-Hispano-Americana de
Arqueología fundada por la hispanista inglesa Ellen Mary Williams Windsor,
más conocida por Elena Whishaw que tuvo su sede primero en Sevilla y
luego en Niebla (Huelva) donde fundó un museo37.
Otro de los proyectos financiados y apoyados por Huntington fue la
creación de la Anglo American School of Archaeology in Spain, iniciativa
hasta ahora desconocida38. La idea se debe a Jorge Bonsor. En efecto, hacia
1918, durante las excavaciones de Bolonia –que Huntington financiaba-,
Bonsor decidió emprender la localización de Tartessos para lo que realizó
unos estudios topográficos preliminares y se formó la idea de que sus ruinas
pudieran encontrarse enterradas bajo las sedosas dunas del Coto de Doña.
En principio le expuso el plan a Huntington y le solicitó el apoyo de la
58 JORGE MAIER ALLENDE
NOTAS
1
CODDING, Mitchell A.: "Archer Milton Huntington, Champion of Spain in the United States" en
KAGAN, Richard L. (ed.): Spain in America. The origins of Hispanism in the United States. Urbana
(etc.), University of Illinois Press, 2002, pp. 142-170; JIMÉNEZ BLANCO, Mª Dolores: "Spanish
Art and American Collections" en When Spain fascinated America. Madrid, Fundación Zuloaga,
2010; STIMSON, Frederick S.: Orígenes del hispanismo norteamericano. México, Ed. De Andrea,
1961.
2
The Hispanic Society of America (founded 1904) [Constitution and By-Laws], New York, 1904.
3
CODDING, Mitchell A.; FIGUEROA, Mencía y O´NEILL, John (eds.): The Hispanic Society of
America, Tesoros, New York: The Hispanic Society of America, 2000.
4
BENDALA, Manuel; DEL ÁLAMO, C. y MAIER ALLENDE, Jorge: "Archer Milton Huntington
coleccionista e hispanista" en El tesoro arqueológico de la Hispanic Society of America, catálogo de
exposición (12/2008-04/2009). Madrid, Museo Arqueológico Regional, 2008, pp. 21-36.
5
BENDALA, Manuel, et al.: "Archer Milton Huntington y la arqueología española" en BELTRÁN,
José; CACCIOTTI, Beatrice y PALMA, Beatrice (eds.): Coleccionismo, Arqueología y Antigüedad:
España e Italia siglo XIX. Actas del Congreso Internacional Hispano-Italiano, celebrado en Sevilla
en Noviembre de 2004. Sevilla, Universidad de Sevilla, Secretariado de Publicaciones, 2006, pp. 65-
81; BENDALA, Manuel, et al.: "Archer M. Huntington, The Hispanic Society of America y la Ar-
queología Española", História, Teoria e Método da Arqueologia. Actas del IV Congresso de
Arqueologia Peninsular, celebrado en Faro en septiembre de 2004. Faro: Universidade do Algarve,
Faculdade de Ciências Humanas e Sociais, Núcleo de Arqueologia e Paleoecologia, 2011, pp. 271-
280.
6
PROSKE, Beatrice Gilman: Archer Milton Huntington. Nueva York, The Hispanic Society of America,
1963; CODDING, Mitchell A.: "Escribir un poema con un museo: Archer M. Huntington y The
Hispanic Society of America", Goya, nº 273, 1999.
7
JIMÉNEZ BLANCO, Mª Dolores y MACK, Cindy: Arte español en Nueva York. Madrid: Asocia-
ción de Amigos de la Hispanic Society of America, 2004.
8
HUNTINGTON, Archer Milton: A Note-Book in Northern Spain. New York, Putnam’s Sons, 1898.
9
Bendala et al (2006); ver también Bendala, del Álamo y Maier Allende (2008).
10
MAIER ALLENDE, Jorge: "Arqueología sevillana finisecular" en DEAMOS, Mª Belén y BELTRÁN,
José (eds.): Arqueología fin de siglo. La arqueología española de la segunda mitad del siglo XIX.
Sevilla, Fundación El Monte, Universidad de Sevilla, 2002, pp. 61-87.
11
MAIER ALLENDE, Jorge: Jorge Bonsor (1855-1930): un Académico correspondiente de la Real
Academia de la Historia y la Arqueología española. Madrid, Real Academia de la Historia, 1999a;
60 JORGE MAIER ALLENDE
MAIER ALLENDE, Jorge: Epistolario de Jorge Bonsor (1886-1930). Madrid, Real Academia de la
Historia, 1999b.
12
Maier Allende (1999a), pp. 128-132 y 204-206; Maier Allende (1999b), pp. 139-194.
13
Coleccionista y numismático sevillano, nació en Osuna el 4 de noviembre de 1820. Fue Secretario
de la Diputación Arqueológica de Sevilla de la Academia Española de Arqueología, luego Academia
Real de Geografía y Arqueología del Príncipe Alfonso. Fue miembro fundador y secretario de la
Sociedad Arqueológica de Sevilla, fundada en 1871. Fue nombrado correspondiente en Osuna por la
Real Academia de la Historia en 1877 y Secretario de la Comisión de Monumentos de Sevilla, desde
1885. Miembro honorario de la Sociedad Arqueológica de Carmona, fundada en 1885. Miembro del
Ateneo y Sociedad de Excursiones de Sevilla desde su fundación en 1887. Ariza había llevado a cabo
excavaciones, junto a Francisco Mateos Gago y Juan Fernández López, en la necrópolis romana de
Carmona en 1881, donde años más tarde Bonsor lo conoció: Por otra parte Arthur Engel y Antonio
Ariza habían coincidido al parecer en Itálica en 1889. Sobre la colección de Ariza y de otros eruditos
sevillanos véase Engel (1893), p. 34.
14
José Gestoso nació en Sevilla, ciudad en la que se licenció en Derecho. Posteriormente cursó
estudios en la Escuela Superior de Diplomática en Madrid, por lo que obtuvo el título de Archivero,
Bibliotecario y Anticuario. A su iniciativa se debe la fundación del Museo Arqueológico Municipal
de Sevilla. Fue profesor numerario de Historia del Arte, Vicedirector de la Real Academia Sevillana
de Buenas Letras, Secretario General de la de Bellas Artes y Vicepresidente de la Comisión Provin-
cial de Monumentos de Sevilla.
15
GARCÍA MAZAS, José: El poeta y la escultura: la España que Huntington conoció. Madrid,
Revista de Occidente, 1962, p. 389.
16
La institución fue fundada por Pierre Paris. Utilizaba como órgano de difusión la Revue des
Universités du Midi, que un año más tarde pasó a denominarse Bulletin Hispanique. Jorge Bonsor y
Arthur Engel eran también miembros de la Société de Correspondance Hispanique.
17
MAIER ALLENDE, Jorge: "En torno a la génesis de la arqueología protohistórica en España:
correspondencia entre Pierre Paris y Jorge Bonsor" en Mélanges de la Casa de Velázquez, XXXII,
Madrid, Casa de Velázquez, 1996a, pp. 1-34.
18
GARCÍA-BELLIDO, Mª Paz y METCALF, William E.: La colección Cervera Moneda antigua de
Hispania. Madrid, CSIC, Polifemo, 2014.
19
Maier Allende (1999a); MAIER ALLENDE, Jorge: "Archer M. Huntington, Jorge Bonsor y la
arqueología andaluza" en Bendala, Del Álamo y Maier Allende (2008), pp. 111-132.
20
MAIER ALLENDE, Jorge: "La necrópolis tartésica de Bencarrón (Mairena del Alcor/Alcalá de
Guadaira, Sevilla) y algunas reflexiones sobre las necrópolis tartésicas de Los Alcores", Zephyrus,
Salamanca: Universidad de Salamanca, nº 49, 1996, pp. 147-168.
21
MAIER ALLENDE, Jorge: "La necrópolis de la Cruz del Negro (Carmona, Sevilla): excavaciones
de 1900 a 1905", Cuadernos de Prehistoria y Arqueología de la Universidad Autónoma de Madrid.
Madrid, Universidad Autónoma de Madrid, nº 19, 1992, pp. 95-141.
LA ARQUEOLOGÍA EN EL COLECCIONISMO DE ARCHER M. H UNTINGTON 61
22
Maier Allende (1999a).
23
MAIER ALLENDE, Jorge y BENDALA, Manuel: "La necrópolis romana de la Cañada Honda
(Alcalá de Guadaira, Sevilla)" en Bendala, Del Álamo y Maier Allende (2008), pp. 359-368.
24
Maier Allende (1992); Maier Allende (1996); Maier Allende (1999a).
25
MÉLIDA, José Ramón: "La Colección de bronces antiguos de Don Antonio Vives", Revista de
Archivos, Bibliotecas y Museos, Madrid, 1900, pp. 27, 70, 154, 351, 404, 541, 624 y 649.
26
Otra parte de esta colección fue adquirida por el Museo Arqueológico Nacional por suscripción
popular, en la que incluso llegó a participar A. H. Huntington. Existe un álbum de dibujos de la
colección Vives que ha sido recientemente publicado por GARCÍA-BELLIDO, Mª Paz: "Álbum de
dibujos de la colección de bronces antiguos de Antonio Vives Escudero", Anejos de Archivo Español
de Arqueología, XIII, Madrid: CSIC, 1993. Al que precede un interesante estudio sobre esta colec-
ción con los pormenores de su venta.
27
PIJOÁN, José: Antique marbles in the collection of The Hispanic Society of America. New York,
The Hispanic Society of America, 1917.
28
BONSOR, George E.: Early Engraved Ivories in the Collection of The Hispanic Society of America.
New Yor,: Printed by order of the Trustees, 1928.
29
CASKEL, Werner: Arabic Inscriptions in the Collection. New York: Printed by order of the
Trustees, The Hispanic Society of America, 1936.
30
FROTHINGHAM, Alice Wilson: Sigillate Pottery of the Roman Empire: from excavations in Spain
made by the President of The Hispanic Society of America at Italica. New York, Printed by order of
the Trustees, Hispanic Society of America, 1937.
31
FROTHINGHAM, Alice Wilson: Prehistoric pottery in the collection from El Acebuchal, site near
Carmona province of Sevilla. New York, The Hispanic Society of America, 1953.
32
Maier Allende (1999b), pp. 143-144.
33
GRAN-AYMERICH, Ève: Naissance de l´Archéologie moderne, 1798-1945. París, CNRS éditions,
1998, p. 335.
34
Maier Allende (1996a), pp. 8-9.
35
Gran-Aymerich (1998), p. 335.
36
Maier Allende (1999b), pp. 143-144 y 148.
37
ACOSTA, Juan María: Elena Whishaw: entre la le leyenda y la realidad. Huelva, Diputación de
Huelva, Servicio de Publicaciones, 2003.
38
Maier Allende (2008).
39
Carta de J. Bonsor a Huntington, Archivo de The Hispanic Society of America, Nueva York.
40
Maier Allende (1999a), pp. 257-271.
.
HUNTINGTON, ZULOAGA Y LA DIVULGACIÓN DE
ESPAÑA EN LOS ESTADOS UNIDOS
Ignacio Suárez-Zuloaga
Presidente de la Fundación Zuloaga
INTRODUCCIÓN
N
acidos el mismo año en opuestas orillas del Atlántico, el museólogo
e hispanista Archer Huntington y el pintor y museólogo Ignacio
Zuloaga colaboraron en la divulgación en los EE.UU. del arte espa-
ñol. Cual caballeros quijotescos, los dos optaron desde muy jóvenes por
caminos de vida considerados como trasnochados por buena parte de sus
coetáneos; a uno le ridiculizaron por fijarse en un país decadente, en tanto
que al otro le acusaron de denigrar a su país ante los extranjeros. Sorprende
que, dada su educación y valores cosmopolitas, dedicaran sus vidas a salvar
para la posteridad esa España que desaparecía a causa de los cambios socia-
les y económicos. Pues conociendo de primer mano las radicales innovacio-
nes estilísticas y técnicas que tuvieron lugar en París y Nueva York, optaron
por poner su talento y patrimonio al servicio de la puesta en valor del imagi-
nario histórico.
El norteamericano en las primeras décadas del siglo XX llegó a donar a
distintas causas más de cincuenta millones de dólares1, fundando la Hispanic
Society of America y convirtiéndose en uno de los hispanistas más eminen-
tes. El vasco estableció en Zumaia el primer museo privado de España, con-
tinuó su tradición familiar de ser un abanderado del arte español en el ex-
tranjero, y tuvo un papel protagonista en el desencadenamiento de la llama-
da Spanish craze2 de 1925. Significativamente, ninguno de los dos coleccio-
naron el arte español no figurativo que ambos conocieron en París; optando
por los grandes maestros de la Escuela Española; también coincidieron en
actuar como museólogos por cuenta propia. En lo personal, su amistad ini-
cial se iría enfriando, optando por colaboradores y círculos ideológicos dife-
64 IGNACIO SUÁREZ-ZULOAGA
rentes. ¿Qué ocurrió para que unas personas con unas sensibilidades tan
parecidas y una misión compartida tuvieron una colaboración tan limitada?
(figs. 1 y 2).
3. Dorothy Rice.
Toledo. Tal fue la impresión que le causó España que pintaría a su esposa
vestida de española y llamó a su quinta hija "Helen Velázquez". Su afición
la trasladó a sus estudiantes trayéndolos a España para pintar. Alumna suya
fue Dorothy Rice, que primero estudió con Joaquín Sorolla y posteriormen-
te se pasó junto con su marido, el también pintor Waldo Peirce al estudio
segoviano de Ignacio Zuloaga3 (fig. 3).
CIRCUNSTANCIAS Y PERSONALIDADES DE
HUNTINGTON Y ZULOAGA
Ambos nacieron en 1870 con físicos llamativos: muy altos, bien pare-
cidos y corpulentos. El americano vivió diez años más que el vasco. Pero
ambos personajes conformaron sus caracteres en unos contextos muy dis-
tintos, que propiciaron sus vocaciones, valores individuales, formas de ac-
tuación, amistades y gustos.
Ambientes familiares
Tanto Ignacio como Archer crecieron en familias desestructuradas, bajo
la autoridad de un progenitor con fuerte personalidad y apasionada trayecto-
ria sentimental. Circunstancias que - a dos personas tan observadoras e inte-
ligentes- les marcó desde niños. A continuación trato sucesivamente las re-
laciones inter-generacionales, las estructuras familiares y las relaciones de
pareja de ambos.
La madre del artista Lucía Zamora Zabaleta (1840-1902) había nacido
en Pau (Francia) donde estaba exiliado su padre, el capitán carlista José
Zamora. Éste resultó ser un bígamo, por lo que fue expulsado del ejército
carlista y retornó a Andalucía con su primera esposa; por eso Lucía creció
sin padre, con muy poco dinero y el estigma de pertenecer al bando perde-
dor. El casarse con Plácido Zuloaga (1834-1910) hijo de un empleado de la
Familia Real y propietario de un próspero negocio de objetos artísticos no
acabó con el trauma familiar; tanto es así que muchas décadas después sus
cinco hijos se tomaron la molestia de acudir al Registro Civil para eliminar
de su documentación el apellido Zamora, condenando al abuelo bígamo al
olvido. Además, el padre de Ignacio resultó ser un seductor que provocó una
mala relación conyugal con su muy devota esposa. Tras morir ésta en 1902,
las tres hermanas de Ignacio expulsaron de la casa al padre; éste no volvió
por el pueblo y se casó de nuevo tres años después, a la edad de 72 años.
Ignacio fue el hijo que mantuvo mejor relación con su padre en esta etapa
(figs. 4 y 5).
70 IGNACIO SUÁREZ-ZULOAGA
Situación económica
Los Zuloaga ascendieron social y económicamente a lo largo de tres
generaciones. Desde que Ramón y Blas emigraran a Madrid a comienzos
del siglo XIX y comenzaran a trabajar para la Corona, su bisnieto Ignacio
alcanzó la fama internacional y una importante fortuna. Eusebio Zuloaga,
abuelo de Ignacio, además de su empleo en Palacio tenía un taller propio en
la madrileña calle de Conde Duque y - desde 1848 - una fábrica en su pueblo
de Eibar21. La economía familiar mejoró; permitiéndoles comprar en 1861
la casa-torre Kontadorekua22 (fig. 10). La prosperidad continuó hasta la re-
volución de 1868, cuando la armería y casa madrileña fueron saqueadas;
además de las pérdidas, el exilio de la Familia Real supuso que los Zuloaga
dejaron de cobrar las cantidades que ésta les adeudaba por encargos anterio-
res.
La situación de la familia se agravó por la decisión de Eusebio Zuloaga
de dimitir de su puesto y de no reincorporarse al mismo durante el reinado
74 IGNACIO SUÁREZ-ZULOAGA
11. Ignacio celebra en Roma su cuadro el Forjador Herido con esta fotografía dedicada
a mis queridos padres. 1890. Archivo Fundacion Zuloaga Zumaia.
cés con él; en París madre e hijo acudían al Louvre y allí él perfeccionó su
francés43 . El castellano y el árabe -lengua que también juzgó necesario para
entender por completo el Medievo hispano- los aprendió con profesores
particulares. Cuando - y mayor trató de forzar su entrada en unos cursos de
la Universidad de Columbia, el propio presidente de la institución le dijo
personalmente que no le iban a admitir por no haber cursado los cursos
previos y por exceder la edad44. El acceso al mejor talento universitario lo
compró contratando al profesor de español de la Universidad de Yale William
Knapp; éste le preparó en su casa y le acompañó en el viaje que realizó con
veintidós años de edad45 y que daría lugar a la publicación en 1898 del
primer libro de Archer: A note-book in northern Spain. A lo largo de los
años, el estudioso Archer adquiriría conocimientos enciclopédicos de cultu-
ra hispánica, hasta el punto de hacer una traducción comentada del Cantar
del Mio Cid, escribir poesía en castellano e inglés y dominar los más varia-
dos ámbitos de las artes y las letras hispanas. Huntington llegaría a fundar
dieciséis museos y fundaciones y a recibir doctorados honoríficos de las
universidades de Harvard, Yale y Columbia (la universidad que le rechazó
como alumno temporal), todos los honores y membrecías honoríficas de las
instituciones culturales españolas, como reconocimiento no solo de su ex-
traordinaria labor filantrópica, sino también por sus aportaciones académi-
cas.
78 IGNACIO SUÁREZ-ZULOAGA
rente a la que les tratan de inculcar sus padres, definiéndola por cuenta pro-
pia a lo largo de los años. Ese fue el caso de Huntington y Zuloaga, que se
enfrentaron a su padre y padrastro, recibiendo el apoyo de sus madres para
ser lo que fueron.
Huntington se planteó desde su adolescencia el deseo de ser museólogo
y dedicarse a promover el conocimiento de la cultura hispánica en los Esta-
dos Unidos, facilitando que en su país se tuviera conocimiento de unas de
las raíces históricas. Dicha decisión fue pionera y tuvo el mérito añadido de
producirse en medio del intenso ambiente anti-español que se describe al
comienzo de éste texto. El joven sufrió la ridiculizaciones de sus amigos y
familia por haber elegido España como asunto, especialmente de Henri E.
Huntington (su "primo", que se convertiría en su padrastro veinte años des-
pués) y del prestigioso director del Museo Americano de Historia Natural,
que calificó a la civilización española de muerta y desaparecida51. Su deci-
sión de promover la cultura española no fue frenada por las crecientes ten-
80 IGNACIO SUÁREZ-ZULOAGA
13. Museo Historico tal y como lo concibio Ignacio con las principales piezas colecciona-
das por los Zuloaga durante mas de 100 años. Archivo Fundacion Zuloaga, Zumaia.
siones entre Estados Unidos y España durante los años noventa, hasta el
punto de que Archer estuvo viajando por España hasta pocos meses antes de
comenzar la guerra de 189852. El joven se dio cuenta de la dificultad de
destacar en los negocios tras una trayectoria como la de Collis Huntington;
era casi imposible superarle en ese ámbito. Además, disponiendo de un exor-
bitante patrimonio obtenido mediante las actuaciones inmorales que habían
asociado el apellido Huntington a la falta de escrúpulos y el arribismo al
igual que otras sagas familiares de robber barons trató de restañar su ima-
gen pública mediante la filantropía.
Ignacio fue el primero de los Zuloagas en dedicarse a la pintura; todos
sus ascendientes se dedicaron a las artes decorativas y la armería de lujo. Su
decisión supuso que el próspero negocio de creación de damasquinado
Zuloaga quedaría interrumpido. En contra de la opinión de la opinión pater-
na ?que deseaba que fuera comerciante o arquitecto?53 se empeñó en ser
pintor. Ignacio si continuó la vocación museológica de Plácido Zuloaga;
éste había reunido en la casa-torre Kontadorekua una extraordinaria colec-
ción museográfica abierta al visitante y a la que acudían a copiar los estu-
diantes de la escuela de dibujo de Eibar; e Ignacio comenzó a reunir a fina-
les del siglo XIX su propia colección en un pabellón en el huerto de
Kontadorekua; piezas que instaló en 1914 en su casa de Zumaia y que tras-
ladó unos años después al nuevo edificio que erigió en su jardín, y al que
denominó Museo Zuloaga. El pintor también siguió la tradición familiar de
H UNTINGTON , ZULOAGA Y LA DIVULGACIÓN DE E SPAÑA EN LOS ESTADOS U NIDOS 81
14. La bailarina Tortola Valencia y el pintor Ignacio Zuloaga y una gitana. Segovia 1912.
Archivo Fundacion Zuloaga, Zumaia.
persona interesada por los más desfavorecidos, como es el caso de los gita-
nos. Un humanismo que Archer confirmaría durante su edad adulta selec-
cionando al personal de su Hispanic Society teniendo en cuenta a las perso-
nas de género femenino, a las que formó y ofreció una autoridad pionera en
su época70.
En los ambientes madrileños Huntington se posicionó preferentemente
con los ambientes artísticos académicos a los que Zuloaga y su grupo se
enfrentó durante toda su carrera. Además, Huntington mantuvo una gran
amistad con el marqués de Vega Inclán y el rey Alfonso XIII con los que
Zuloaga mantuvo importantes diferencias. Huntigton mantuvo relaciones
cordiales con varios de los intelectuales de las generaciones del 98 y del 14
amigos de Zuloaga, como Unamuno, Ortega y Marañón.
PREFERENCIAS PERSONALES,
RELACIONES Y ACTUACIONES EN EE.UU.
Preferencias personales
Huntington y Zuloaga desarrollaron tempranamente unas marcadas pre-
ferencias por los aspectos más tradicionales y épicos de España. Huntington
recorrió la zona norte de España en diligencia durante su viaje iniciático
(algunos puntos de Castilla y León, Galicia, Extremadura, Aragón, Navarra
y Madrid) así como en carro el camino de El Cid entre Castilla y Levante.
Ignacio recorrió en automóvil casi toda España, pero se decidió a pintar
personajes y paisajes del País Vasco, Castilla y León, Navarra, Aragón, La
Rioja y los alrededores de Sevilla; a pesar de ser copropietario del molino
Burleta en Campo de Criptana (Ciudad Real) no pinta Castilla la Mancha.
Ambos pasaron largas temporadas en Sevilla, Huntington excavando en Itá-
lica e Ignacio pintando, toreando y como empleado de una compañía mine-
ra.
Resulta muy revelador que tanto Zuloaga como Huntington, que coin-
cidieron en París con la revolución del arte moderno que tuvo lugar en la
capital francesa desde finales del siglo XIX no coleccionaran más activa-
mente las nuevas propuestas artísticas, concentrándose en los maestros anti-
guos. Huntington compró a los principales pintores y escultores figurativos
españoles del momento; en tanto que Zuloaga compró e intercambió obras
con sus amigos incluido Pablo Picasso así como con algunos rivales ?como
es el caso de Sorolla?. Ni Zuloaga ni Huntington coleccionaron arte abstrac-
to o arte no objetivo, a pesar de que lo conocieron de primera mano.
H UNTINGTON , ZULOAGA Y LA DIVULGACIÓN DE E SPAÑA EN LOS ESTADOS U NIDOS 85
16. Boceto del Greco realizado por Ignacio Zuloaga con veintidos años en Paris.
17. Autorretrato, 1908 en The Hispanic Society of America. Este oleo abría el catalogo
de la exposición de 1909.
bien tratado, que él se ocuparía de colgar sus cuadros y que el célebre crítico
Cristian Brinton hará la introducción de su catálogo. Para hacer tiempo mien-
tras se celebra la exposición Sorolla en Nueva York, Archer envió las obras
de Zuloaga al Museo de Buffalo77. Durante el mes de febrero de 1909 insis-
tió en el envío de más cuadros, recibiendo doce más (fig. 17).
En la intensa correspondencia que mantuvieron durante aquel invierno
y la primavera tratan de toda clase de asuntos sobre la exposición: coloca-
ción, enmarcación y precios. Huntington le advirtió que sus obras eran muy
grandes, difíciles de colgar por los particulares en sus casa, por lo que los
museos eran los candidatos más plausibles y debería de ser flexible en los
precios. Le menciona también la posibilidad que la Hispanic Society se qui-
siera quedar con alguno de ellos, como el de Lucienne Breval. Ante la pre-
ocupación del artista de que su obra no fuera entendida por los norteameri-
canos como tampoco había sido comprendida por muchos españoles, que le
acusaban de deshonrar a su país78, el mecenas le informó que el público y la
prensa no han sido tan entusiastas como en el caso de Sorolla, pero que han
hecho "completa justicia su arte". Argumentó que sus cuadros no pueden
interesar a muchos visitantes "más atraídos por la luz del sol y el carácter
popular de la obra de Sorolla". También le menciona que los artistas ameri-
canos se han entusiasmado y que se suscitaron discusiones acerca de la com-
paración de su obra con la de Sorolla; los críticos de todo el país han habla-
88 IGNACIO SUÁREZ-ZULOAGA
18. Fotografia de la mecenas Rita Lydig, gran amiga de Ignacio y que organizo su exposicion
de 1916-1917. De ascendencia asturiana siempre llevaba encajes. Archivo Fundacion
Zuloaga. Zumaia.
que Zuloaga pintó el retrato de Unamuno. También le pide que le envíe una
foto del cuadro y se pregunta si no sería conveniente que ese cuadro se ins-
talara en la Hispanic Society. Tras la exposición de 1909 Huntington esco-
gió a Sorolla como pintor favorito, encargándole retratos de numerosos in-
telectuales españoles contemporáneos para que figuraran en la Hispanic
Society. Incluso de aquellos que eran conocidos partidarios de Zuloaga en la
disputa con los "sorollistas"; por ejemplo, Pío Baroja, Ortega y Gasset y
Unamuno. Como ya hemos explicado, éste último se había destacado en sus
escritos contra Sorolla, lo que provocó que su retrato lo ejecutase el valen-
ciano en tan pocas horas y que quedó abocetado e inconcluso. Por la impor-
tancia de Unamuno en la cultura Huntington deseaba contar con un retrato
en condiciones. El retrato fue vendido por Ignacio a Archer y ahora está en
la Hispanic Society.
Cuando el matrimonio Huntington realizó su breve viaje por España
entre finales de marzo y el 19 de abril de 1929, pasando por Algeciras, Sevi-
lla y Madrid86. Estuvieron unos días en la capital y vieron a varios miembros
del círculo de amigos de Zuloaga, pero no hay un contacto documentado
con el artista, que por entonces estaba en París. Tampoco hay noticia de que
se vieran en la capital francesa de vuelta a los Estados Unidos. La relación
debía de ser buena, pues el 18 de junio Huntington le escribe a Zuloaga
preguntándole su opinión acerca de una pintura que está a la venta en los
EE.UU87.
En plena Guerra Civil, el 3 de noviembre de 1937 una carta oficial le
comunica que ha sido elegido miembro del comité asesor de la sociedad y le
ruega manifieste si acepta el nombramiento. Llama la atención que en la
carta, encima de la escueta dirección “Zumaya Guipúzcoa España” figure el
nombre de Ignacio Zuloaga y Zamora, con el que el artista debió de ser
inscrito en 1912 como miembro de la Sociedad; pues los cinco hermanos
Zuloaga habían dejado de usar ese apellido empleando en su lugar el de
Zabaleta.
También resulta relevante que Huntington encargase a Sorolla -un ar-
tista que no se había caracterizado por su trabajo en el campo paisajístico, ni
en la realización de retratos de tipos populares con profundidad psicológica
- para realizar la extraordinaria serie de cuadros sobre representaciones
etnológicas y paisajísticas de España. Las diferencias de sensibilidad y gus-
to no impidieron que Huntington comprara y promocionara a Zuloaga con
auténtico interés, demostrando ser un museólogo que antepuso la necesidad
de presentar en EE.UU. el conjunto arte del español; más allá de sus gustos
personales. Posiblemente, la ética y la coherencia sean los dos principales
denominadores comunes del carácter de ambos personajes.
H UNTINGTON , ZULOAGA Y LA DIVULGACIÓN DE E SPAÑA EN LOS ESTADOS U NIDOS 91
19. Zuloaga en Fuendetodos frente monumento que levanto a Goya. Archivo Fundacion
Zuloaga, Zumaia.
20. Condecoraciones de Ignacio, en el libro, Los zuloaga una dinastia de artistas vascos.
21. Miss Cameron posa con Ignacio en Sevilla en 1904. Archivo Fundacion Zuloaga, Zumaia.
22. Catalogo de la exposicion de Ignacio por Estados Unidos 1916-17. Archivo Fundacion
Zuloaga, Zumaia.
a la divulgación de la cultura del país que eligió como asunto. Sus decisio-
nes acerca de cómo presentar a los norteamericanos el arte y la cultura espa-
ñola fueron considerablemente avanzadas teniendo en cuenta el escaso de-
sarrollo de la museología como disciplina profesional y académica (fig. 22).
Ignacio Zuloaga fue un artista de muy fuerte temperamento; que reflejó
en su obra plástica. Transmitió su visión esencialista de España con
tremendista expresividad; suscitando el rechazo de los ambientes académi-
cos y políticamente conservadores de España. Trabajó en una época caracte-
rizada por las dudas acerca de la identidad de España acuciada por los nacio-
nalismos catalán y vasco y el desprestigio internacional motivado por la
derrota en la guerra de 1898 contra EE.UU. Esto explica que la "cuestión
Zuloaga" con unos treinta años de duración se haya convertido en la polémi-
ca periodística sobre la significación de unas obras de arte más duradera de
la historia. En ella participaron la gran mayoría de los grandes personajes
españoles; en su gran mayoría apoyando al artista (fig. 23).
Ambos personajes se enamoraron de la España arcaica que desaparecía
a causa de la emigración del campo a la ciudad, del progreso material y de la
modernización de costumbres. Archer la conoció de primera mano, la colec-
cionó y recogió en su museo con la mayor fidelidad posible, y la divulgó con
la publicación de facsímiles e investigaciones. Ignacio fue uno de los prime-
ros españoles que dispuso de un automóvil, recorriendo exhaustivamente su
país desde 1903 hasta su muerte; su empatía y estilo llano le permitieron
conectar con los más humildes, reflejando el espíritu de personas y lugares;
siempre en busca del "carácter". A pesar de que ambos fueron muy amantes
H UNTINGTON , ZULOAGA Y LA DIVULGACIÓN DE E SPAÑA EN LOS ESTADOS U NIDOS 97
NOTAS
1
SegúnUPHAM POPE, Arthur (editor): Archer Milton Huntington: last of titans. Edición del Comité
Interamericano de Bibliografía, ARNykl. Reimpresión sin fecha en forma de facsímil del libro origi-
nal, ¿1955?., p. 6.
2
La "locura española" fue un fenómeno sociológico de pasión por todo lo español, que dominó la
moda y los artículos de prensa durante algunos meses.
3
Rice y Peirce fueron unos de los pocos artistas a los que Zuloaga autorizó a acompañarle mientras
trabajaba, pues el vasco no daba clases.
4
No resulta sencillo desentrañar el ambiente de los Huntington pues la mayor parte de los textos son
editados por la propia sociedad hispánica durante la vida del fundador o poco después, en un tono
abiertamente hagiográfico, y los textos posteriores son muy resumidos. El texto más reciente, de
MITCHELL, Mary y GOODRICH, Albert: The remarkable Huntingtons. Newtown, Connecticut,
The Budd Drive Press, 2004.e , trata este asunto en las pp. 26 a 28. Los autores concluyen taxativamente
en la p. 27 "...Archer’s paternity will undoubtedly never be certified".
5
Ficha de Collis Potter Huntington en www.geni.com. http://www.geni.com/people/Collis-Potter-
Huntington/6000000010675490302?through=6000000000624587200
H UNTINGTON , ZULOAGA Y LA DIVULGACIÓN DE E SPAÑA EN LOS ESTADOS U NIDOS 99
6
Ficha de Elizabeth C. Huntington en www.geni.com. http://www.geni.com/people/Elizabeth-
Huntington/6000000003410540577
7
Mitchell y Goodrich (2004), p. 27.
8
En su ficha personal (http://www.geni.com/people/Arabella-Huntington/6000000003409836683)
se manifiesta que se casó con John A. Worsham en 1869.
9
En la que, como es costumbre, deberían de incluirse sus datos familiares.
10
Se conoce como "Barones ladrones" a una treintena de emprendedores sin escrúpulos que amasa-
ron gigantescas fortunas entre la segunda mitad del siglo XIX y la crisis de 1929.
11
Lo afirma SECREST, Meryle: Duveen. A life in art. Chicago, The University of Chicago Press,
2004., en su biografía de Duveen (marchante preferido de Collis, Arabella y Archer) en la p.119.
12
Se desconoce la fecha y lugar de nacimiento de Arabella, esta es una estimación en función de las
propias declaraciones de esta y lo escrito por los biógrafos Mitchell y Goodrich (2004), p. 28.
13
Secrest (2004) lo menciona en la p. 120. Sorprende que tan relevante asunto no lo mencionen los
biógrafos Mary Mitchell y Albert Goodrich en su capítulo.
14
El autor que más se dedica el ambiente familiar e infancia de Ignacio es el médico J. Rodríguez del
Castillo en su biografía novelada del artista. Una fuente muy poco empleada por biógrafos posterio-
res, y un libro del que hay pocos ejemplares en circulación. Rodríguez del Castillo recogió de vecinos
de la familia y de parientes de segundo grado comentarios que circulaban por el pueblo sobre los
Zuloaga. A pesar de que éste autor incurre en varias páginas de su libro en errores respecto a datos
documentados, doy alguna credibilidad a la imagen que ofrece del ambiente familiar, siendo los
primeros capítulos de su obra la fuente principal de la niñez y juventud del artista. Por la naturaleza
mixta - histórica y novelada - del texto doy más credibilidad al conjunto de lo afirmado que a la
literalidad de lo redactado.
15
Según David Lavender en The Great Persuader (1998), Niwot, Colorado: TheUniversityPress of
Colorado, p. 346, citado por Mitchell y Goodrich (2004), p. 27.
16
Mitchell y Goodrich (2004), p. 28.
17
Mitchell y Goodrich (2004), p. 18.
18
PROSKE, Beatrice Gilman: Archer Milton Huntington. New York, Trustees of the Hispanic Society
of América, 1963., pp.4-5.
19
Testimonio del sobrino de ella recogido en Mitchell y Goodrich (2004), pp. 18 - 19.
20
Mitchell y Goodrich (2004), p. 15.
21
Empleo como fuente principal el libro colectivo Los Zuloaga. El dato de la casa lo menciona
Ramiro Larrañaga en su ensayo "Armeros, grabadores, damasquinadores...", p. 70.
22
Juan San Martín y Endika de Mogrobejo redactaron el último texto biográfico comprehensivo del
artista, "El pintor Ignacio Zuloaga" incorporado en Los Zuloaga; ese dato aparece en la p. 198.
23
Ibidem.
24
Ibidem.
25
Secrest (2004), p. 142
100 IGNACIO SUÁREZ-ZULOAGA
26
Mitchell y Goodrich (2004), p. 28.
27
La capacidad directiva es comentada por Upham Hope (¿1955?), p. 6.
28
Según el testimonio de Brantz Mayer (UncleArcher 5f) recogido por Mitchell y Goodrich (2004),
p. 49.
29
Ramiro Larrañaga en Los Zuloaga p. 67.
30
Según escribió UTRILLO, Miguel: Five Essays on the art of Ignacio Zuloaga. New York, Hispanic
Society of America, 1909., p. 7 y Los Zuloaga pp. 91 - 93.
31
María Jesús Quesada "Daniel Zuloaga ceramista" en Los Zuloaga p. 130.
32
Afirmación de Ramiro Larrañaga en Los Zuloaga p. 70.
33
Rodríguez del Castillo p. 41.
34
Rodríguez del Castillo pp. 62 y siguientes.
35
San Martín y Mogrobejo en Los Zuloaga p. 198.
36
Lafuente Ferrari afirma que a los catorce años fue a estudiar a París, donde estudió en el colegio de
los jesuitas de la calle Vaugirard y en un liceo de Neuilly (p. 38 de La vida y el arte de Ignacio
Zuloaga), en tanto que Juan San Martín y Endika de Mogrobejo consideran que fue en el verano de
1885 (Los Zuloaga p. 201) y Rodriguez del Castillo retrasa el viaje a octubre de 1885; según éste
último en el colegio de Vaugirard coincidió con Don Jaime de Borbón cabeza del partido para el que
luchó su abuelo y contra el que estaba su familia; se conocieron y llevaron bien (Ignacio Zuloaga, p.
110).
37
Rodríguez del Castillo p. 118.
38
LAFUENTE FERRARI, Enrique: La vida y el arte de Ignacio Zuloaga. Barcelona, Planeta, 1972.,
p. 44.
39
Lafuente Ferrari (1972), p. 49.
40
Sus íntimos le llamaban bato (que significa "padre" en lenguaje caló).
41
Mitchell y Goodrich (2004), p. 28.
42
Mitchell y Goodrich (2004), p.21.
43
Proske (1963), pág.2
44
Upham Hope (ed.) (¿1955?), p. 5.
45
Según el ensayo de Henry Grattan Doyle, Huntington and his contribution to Hispanic Scholarship,
recogido en la p. 27 del libro de Arthur Upham Pope.
46
Según cita a N. Bustinduy (La industria guipuzcoana en fin de siglo, San Sebastián, 1894, pp. 12 -
130) citado por Ramiro de Larrañaga en Armeros, grabadores, damasquinadores... en Los Zuloaga
pp. 97 -100.
47
Ramiro de Larrañaga en Armeros, grabadores, damasquinadores... en Los Zuloaga, pp. 102 -103,
cita como fuente un reportaje de Vicente Arana publicado en 1888 en la Revista de Vizcaya del que
no ofrece cita bibliográfica en su apartado de fuentes.
48
Mitchell y Goodrich (2004), p.28
H UNTINGTON , ZULOAGA Y LA DIVULGACIÓN DE E SPAÑA EN LOS ESTADOS U NIDOS 101
49
Secrest (2004), p. 120.
50
Secrest (2004), p. 106.
51
Mitchell en VV.AA.:The Hispanic Society of America Handbook Museum and Library Collections.
New York, Trustees of the Hispanic Society of America, 1938., p. 9.
52
Archer se hizo eco de los sentimientos anti-americanos que se encontró en su viaje, al mencionar
una conversación en Extremadura, en A Notebook in Northern Spain, pp. 61 - 62.
53
Según escribió el propio Zuloaga a su amigo Miguel Utrillo en 1907. Reproducida por Arozamena
pp. 148 y 149.
54
Entrevista publicada en 1917 en "Caras y Caretas" de Buenos Aires y recogida por Arozamena p.
18.
55
AROZAMENA, Jesús María: Ignacio Zuloaga. El pintor, el hombre. San Sebastián, Sociedad
Guipuzcoana de Ediciones y publicaciones, 1970. da algunos ejemplos en la p. 41.
56
René Maizeroi, p. 72 "je sens quelque chose se déchirer en moi chaque fois que je m’eloigne de ce
bourg d’Eibar, où tous les mien sont vécu et sont venus mourir, ou notre maison ancestrale s’aperçoit
de si loindans la montagne...", en Utrillo (1909).
57
Arozamena (1970), p. 31 cita las donaciones económicas del pintor con su pueblo en 1904 y 1917.
58
Arozamena (1970), p. 119
59
Los desarrolla Lafuente Ferrari (1972), en su capítulo dedicado a tal asunto, pp. 301 - 324.
60
El Padre M. Gil fue un crítico de arte que tuvo la curiosidad de viajar a Segovia para ver por si
mismo esos cuadros que tanto se atacaba en su círculo y que nadie había visto expuestos en Madrid.
Ofreció una opinión disidente dentro del ámbito conservador. Su "En el estudio de Zuloaga" debió de
ser aportado por el propio artista para publicarse sin traducir en Utrillo (1909) pp. 83- 85.
61
Arsène Alexandre, el célebre crítico del suplemento de arte de Le Figaró, lo trata en su artículo
"Zuloaga" publicado en Utrillo (1909), p. 41.
62
Eso opina Miguel Utrillo ?amigo de Zuloaga? en "Zuloaga" publicado en Utrillo (1909), p.7.
63
Un ejemplo es la defensa que de Zuloaga hace el periodista y escritor liberal y republicano Prudencio
Iglesias Hermida (1884 - 1919) en su libro Hombres y cosas de mi patria y de mi tiempo (1914) en la
que denuncia la ignorancia de Zuloaga en Madrid y el significativo hecho de que el álbum de repro-
ducciones de cuadros de Zuloaga realizado por el conocido fotógrafo Juan Vandel no recibió ni un
solo pedido "de ninguna casa española, ni de un solo millonario español. Hoy la propiedad de la obra
[el album] es de una casa extranjera, que se propone hacer una espléndida edición" (pp. 37 - 38).
64
TOMÁS, Facundo: Las culturas periféricas y el síndrome del 98. Barcelona, Anthropos, 2000., p.
76, ha estudiado estos ataques contra Sorolla y su círculo; los casos de Juan de la Encina, Maeztu y
Unamuno en la páginas 82 a 85; de Valle-Inclán en las pp. 90-110 y de Unamuno en las pp. 110-125.
65
La evolución ideológica de Zuloaga aparece en los trabajos de QUERCI, Eugenia: “La correspon-
dencia Zuloaga - Garrett. treinta años de amistad en el emblema del arte”, Arte y Parte, nº 51, junio -
julio, 2004b, pp. 45 -61. p. 57, y QUERCI, Eugenia: Conocimiento y difusión del arte español en
102 IGNACIO SUÁREZ-ZULOAGA
América: Sorolla, Zuloaga y Anglada Camarasa. Trabajo de suficiencia investigadora del doctorado
en historia del arte contemporáneo de la Universidad Complutense de Madrid, 2004a. p. 36.
66
Querci (2001b), p.58, reproduce una carta de 23 de noviembre de 1937: "trabajo mucho y todo lo
que gano es para obras de asistencia social. No quiero guardar nada para mi mientras esta tragedia
dure".
67
El profesor de Yale W.I. Knapp, según Codding p. 9.
68
Véase Mitchell y Goodrich (2004), pp. 39-41.
69
Codding, p. 8.
70
Véase su promoción de mujeres en Proske (1963), p.18.
71
LAFUENTE FERRARI, Enrique: La vida y el arte de Ignacio Zuloaga. Barcelona, Planeta, 1972.,
p.55.
72
Carta en la que el malagueño se dirige en esos términos a Zuloaga para hacer una introducciónpara
un encuentro. Carpeta Picasso del Archivo Zuloaga.
73
Lafuente Ferrari (1972), p. 39.
74
Priscilla Muller (1998), p. 84, en Sorolla Zuloaga cita un encuentro personal Huntigton-Zuloaga
en París en junio de ese año; el 23 de ese mes los abogados de Huntington escribieron a la galería de
Londres que representaba a Sorolla. Zuloaga vivía allí y Huntington iba a esa ciudad casi todos los
años, por lo que pudieron haber encuentros anteriores no documentados. El ensayo de Muller es la
principal fuente que manejo sobre la relación Huntington-Zuloaga durante la exposición de 1909.
75
Un telegrama escrito en francés por el matrimonio Huntington (pues está redactado en primera
persona del plural) fue enviado el 17 de agosto desde la localidad balnearia de Bagnères de Luchon;
lo recibió el artista en la villa Meriquenia de Sant Jean de Luz, proponiendo un encuentro el próximo
jueves. Carpeta Huntington del Archivo de la Fundación Zuloaga.
76
Según expresa Muller en su cita bibliográfica nº 58, p.102
77
Importante ciudad industrial situada al norte del Estado de Nueva York.
78
Priscilla Muller (1998), p. 89, en VV.AA.: Sorolla Zuloaga. Dos visiones para un cambio de siglo.
Madrid, Fundación Cultural Mapfre, 1998. cita frases del artista acerca de las acusaciones que reci-
bió Zuloaga en España, su amor a su país y su lucha "desde hace 14 años" (en 1897) para que se le
entendiera.
79
Zuloaga no pintó ninguna figura de Cristo como motivo principal, por lo que éste cuadro solo
podría ser “Los flagelantes” adquirido posteriormente por la Hispanic Society.
80
Sorprende la velocidad a la que ambos se intercambiaron correspondencia en 1909, teniendo en
cuenta que los trasatlánticos más rápidos (los de la Cunard) tardaban 5 días con buena mar en hacer
la travesía entre Le Havre y Nueva York y que al menos tardaban dos días en llegar las cartas desde
París a Le Havre (más el tiempo que tardasen en clasificar y distribuir las cartas en Nueva York.
81
"...you are Spain to me in more senses than (illegible) for your will save that real Spain which is
departing" carta autógrafa sin fechar. Carpeta Huntington del Archivo epistolar de la Fundación Zuloaga
82
Resolverían el desencuentro, pues la obra está en la colección de la Society.
H UNTINGTON , ZULOAGA Y LA DIVULGACIÓN DE E SPAÑA EN LOS ESTADOS U NIDOS 103
83
Carpeta Huntington en el Archivo de la Fundación Zuloaga.
84
El autor ha manejado la literatura sobre el viaje de 1925 citada en la bibliografía y los archivos
epistolar y fotográfico, así como la hemeroteca de la Fundación Zuloaga; pero no ha trabajado la
correspondencia de Zuloaga a Huntington que se conserva en el archivo epistolar de la Hispanic
Society of America. Las menciones basadas en esa fuente se corresponden a la investigación de Priscilla
Muller en el [Catálogo] (1998), Sorolla Zuloaga.
85
Mitchell y Goodrich (2004), p. 28.
86
Mitchell y Goodrich (2004), pp. 45 -48.
87
Carpeta Huntington del Archivo Zuloaga.
88
Tan importante trabajo puede encontrarse en la tesis de Noemi Espinosa Fernández "La Fotografía
en los fondos de la Hispanic society of America. Ruth Matilda Anderson" disponible en https://
www.educacion.gob.es/teseo/imprimirFicheroTesis.do?fichero=25187
89
VV.AA.: A History of the Hispanic Society of America. Museum and Library 1904 - 1954. New
York, Trustees of the Hispanic Society of America, 1954, p. IX.
90
VV.AA. (1954), pp. 5-8.
91
Carpeta Huntington del Archivo epistolar de la Fundación Zuloaga.
92
Margarita Zabala, "Compendio biográfco de los principales autores de esta obra", Los Zuloaga,
dinastía de artistas vascos p. 52.
93
Querci en VV.AA.: When Spain fascinated America. Madrid, Fundación Zuloaga, 2010., p. 143.
94
Stratton-Pruitt en VV.AA. (2010), p. 163.
95
Ignacio Suárez- Zuloaga, "A Spanish saga of international artists", en VV.AA. (2010), p. 81.
Recorte disponible en el volúmen de 1930 de la hemeroteca de la Fundación Zuloaga.
96
Stratton-Pruitt hace un relato pormenorizado en VV.AA. (2010), pp. 169-173.
97
Stratton-Pruitt hace un relato pormenorizado en VV.AA. (2010), pp. 175-182
98
Una descripción de dicha exposición aparece en el sitio web de la misma: http://
www.vosegalleries.com/articles/the-spanish-craze-of-the-1920s-ignacio-zuloaga-1870-1945
99
Esta ha sido estudiada por Richard Kagan en el capítulo que le dedica en VV.AA. (2010), pp. 25-
45.
100
Utrillo (1909), Alexandre p. 47.
101
Esta última en el molina Burleta, de campo de Criptana, copropiedad del escultor Juan Cristobal y
el empresario local Minguijón.
.
EL GRECO, VEGA INCLÁN Y HUNTINGTON
E
l hecho de que este encuentro se celebre en la ciudad de Toledo,
cuando se conmemora el cuarto centenario del fallecimiento del
Greco, es una buena ocasión para centrar la atención en el proceso
de recuperación de su figura acometido desde la casa y museo que en Toledo
le erige el Marqués de la Vega Inclán, con el apoyo del hispanista estadouni-
dense. Por este motivo vamos a recorrer las conexiones entre ambos mece-
nas teniendo como nexo principal al pintor candiota. Sobre la importancia
de este vínculo, visible a propósito de la creación del Museo del Greco, ya
reparó en su día Gregorio Marañón cuando publicó en "ABC" del 2 de julio
de 1958 el artículo "Benigno Vega y Huntington". Señala allí el doctor que
el amigo entrañable del Marqués protegió la realización de una obra que los
hombres de aquí consideraban como alocada fantasía: "Yo sé que a Vega
Inclán nada podría complacerle como el asociar a la glorificación de su nom-
bre el recuerdo del gran patricio americano, que tanto hizo por honrar a
España, especialmente en la casa de El Greco y su museo, que han contri-
buido, en medida de la que no nos damos cuenta, a extender por el mundo el
prestigio de nuestro arte y la gloriosa popularidad del pintor…".
Vega Inclán era un concitador de voluntades que le permiten materiali-
zar los proyectos que él inicia, con el respaldo entre otros del monarca Al-
fonso XIII y de los miembros más señalados de su cuarto real, como el Mar-
qués de Viana o Emilio María de Torres, secretario particular del rey. Busca
la participación de Huntington en sus iniciativas culturales y trata de contri-
buir él mismo a las del hispanista, aunque modestamente, habida cuenta de
sus escasos recursos económicos. Una vez superadas ciertas reticencias ini-
ciales en la casa del rey hacia el mecenas americano que adquiría patrimonio
español para trasladarlo a los Estados Unidos, Vega Inclán le incluirá en
106 MARÍA LUISA MENÉNDEZ ROBLES
PROYECTOS CONJUNTOS
Muchas son las diferencias que separan a ambos mecenas, principalmen-
te la económica. La desahogada posición del primero contrasta con la escasez
de recursos del segundo lo que le obliga a generar ingeniosos mecanismos de
financiación para sus proyectos. Esa ingeniería financiera se basa en la venta
de obras de arte para sufragarlos, en la concitación de voluntades, como la del
hispanista americano que incluye la aportación de recursos, y sobre todo es
notorio y conocido por todos que cuenta con el respaldo del monarca a sus
iniciativas que la corona asume como propias. El rey Alfonso XIII llega a
E L GRECO , V EGA INCLÁN Y H UNTINGTON . 109
1. Doña Mariana de Austria de Martínez del Mazo. Montaje antiguo debido a Vega Inclán,
en una sala del Museo del Greco con la cartela enmarcada donde él mismo informa sobre la
adquisición del cuadro.
qués de la Vega Inclán". Es decir, que Casa Torres que era íntimo amigo de
Vega Inclán, miembro también del Patronato de la pinacoteca, menciona
que la compra fue hecha en 1912 por el Estado siendo ya en enero de 1913
propiedad de Vega Inclán. Para terminar de complicar aún más las cosas, al
exponer su dueño la obra en el Museo del Greco sitúa a su lado una cartela
enmarcada en la que explica la compra en los términos que reproduce Gómez
Moreno, es decir, a cargo de Huntington. En consecuencia, todo apunta a
que el cuadro lo adquirió el Marqués a su propietario para evitar que saliera
de España y aunque hace saber que la compra la ha hecho el Estado, cuando
lo expone asigna su adquisición a Huntington. Este aportaría en algún mo-
mento de la operación el importe total o parcial del lienzo, cuyo propietario
final es el hispanista, según indica el propio Marqués en la citada cartela.
Priscilla Muller publica una lista, procedente del archivo de la institución
neoyorquina, en la que se detallan las cantidades adeudadas por la Hispanic,
al parecer redactada por Huntington a finales de 1913 o 1914. Allí se anota
"cuadro de Vega Inclán para la casa del Greco" y al margen "Sorolla" así
como el precio de 75.000 francos y "pagado". Dicho asiento lleva a esta
investigadora a ponerlo en relación con el cuadro El Patronato del Museo
del Greco, que hoy está en la Hispanic Society de Nueva York, añadiendo
que según parece el hispanista lo encargó y pagó su importe total o una parte
del mismo. Sin embargo, es imposible que tal anotación aluda a una obra
que no fue pintada hasta el año 1919, correspondiendo más bien al retrato de
la viuda de Felipe IV, lo que deja abierta la puerta a la participación de
Joaquín Sorolla en una operación que se fraguó ante todo para evitar su
salida de España. En definitiva, este episodio ilustra muy bien cómo eran las
operaciones de ingeniería económica y de marketing que articulará Vega
Inclán como procedimiento de trabajo habitual para lograr sus objetivos.
El cuadro El Patronato del Museo del Greco, que muestra en una se-
sión del mismo a sus integrantes bajo la presidencia del monarca, es una
obra de larga gestación (Fig. 2). Se trata de un cuadro inconcluso que con-
memora la fundación de dicho Patronato, que fue pintado para figurar en ese
museo toledano. Manuel Bartolomé Cossío, que era uno de sus miembros,
escribe a Sorolla en enero de 1918 felicitándole por la iniciación del cuadro
y le confirma que se acercará a su estudio para posar, lo que nos aporta la
fecha de comienzo de la obra. El pintor tenía que concluirla en marzo de
1919 ya que, según le recuerda Vega Inclán en otra epístola, el monarca
desea que figure en la exposición de Arte Español que se celebrará en mayo
de dicho año en el Petit Palais de París. El cuadro llega a Nueva York en
1933 por deseo del Marqués. Se registra en los archivos de la Hispanic Society
el 8 de diciembre de 1933 como un regalo de Vega Inclán. Y efectivamente
así fue, según consta expresamente en la documentación generada para au-
112 MARÍA LUISA MENÉNDEZ ROBLES
2. Joaquín Sorolla: El patronato del Museo del Greco (1919-1920). Óleo sobre lienzo. 251
x 293 cm. Nueva York. The Hispanic Society of America. Cortesía de The Hispanic Society
of America.
torizar la exportación del lienzo, conservada en el Museo Romántico sede
del archivo de las Fundaciones Vega Inclán. Allí se indica un mes antes de la
llegada a EEUU, que el Marqués en calidad de propietario, donador del
cuadro y Director perpetuo de las Fundaciones que llevan su nombre hace
entrega a Huntington del lienzo «graciosa y gratuitamente» por su meritísima
labor. Abunda en ello la carta publicada por Muller, fechada el 1 de octubre
de 1933, es decir solo un mes más tarde, que dirige Vega Inclán al hispanista
donándole "el hermoso cuadro del inmortal Sorolla, que generosamente me
dedicó y ofreció con la misma generosidad y desinterés con que me fue
dedicado y ofrecido por Sorolla y entregado por sus herederos… hoy le ofrez-
co a mi querido amigo…". En consecuencia, todo apunta a que el cuadro fue
un obsequio del pintor y miembro de ese Patronato al Marqués de la Vega
Inclán, quien a su vez decide regalárselo a Huntington. La obra había queda-
do sin concluir cuando fallece su autor en 1923 por lo que no llega al museo
toledano hasta noviembre de 1928 donde permaneció expuesta hasta su tras-
lado a América. Fue presentada al público en un solemne acto al que asistie-
ron la hija y el nieto del pintor. Poco después hizo otra presentación a la que
asistieron el monarca y la viuda de Sorolla. Antes de colocarlo en Toledo
E L GRECO , V EGA INCLÁN Y H UNTINGTON . 113
envía una fotografía al rey para que conociera el cuadro siendo esta imagen
la que le sustituya en el Museo del Greco, cuando decida regalárselo a
Huntington. El vacío dejado es tan evidente que en 1941 el Marqués encar-
ga a López Mezquita que haga una copia de tamaño natural para exponerla
en Toledo, encargo que no llegó a ser ejecutado.
Es así como en torno a la figura del Greco se fragua un punto de en-
cuentro donde confluyen las trayectorias de ambos mecenas. Y en concreto
cristaliza ese vínculo en el museo y casa del cretense, creados por Vega
Inclán. Si analizamos la gestación de dicha institución, que nace entre 1905
y 1910, en su contexto en sentido amplio, hay que reconocer que nos halla-
mos ante una auténtica proeza. La compra del inmueble de los siglos XV y
XVI por un particular para dedicarlo a museo con la intención de donarlo al
Estado, es algo extraordinario por lo inusual en la España de la época. Las
prácticas restauradoras que allí acuña su propietario para acometer la reha-
bilitación del edificio, marcan el camino futuro, quebrando la manera de
enfrentarse al patrimonio monumental incuestionable hasta entonces. La
decisión de establecer en el edificio una casa-museo ambientada en la época
del cretense, supone la implantación en nuestro país de esta tipología
museística por lo que hay que hablar de la Casa del Greco como un prototi-
po que establece el modelo para las que van a nacer a continuación siguien-
do su estela tanto en territorio español como latinoamericano. Son estos tan
solo algunos aspectos que convierten a esta creación del marqués de la Vega
Inclán en una obra trascendental e irrepetible. A lo largo de cien años de
vida, ha pervivido abierta al público sin grandes cambios hasta la última
remodelación, finalizada con la apertura de sus puertas nuevamente en mar-
zo de 2011.
7. Aspecto actual del patio tras su reforma al que se abren las estancias de la casa.
E L GRECO , V EGA INCLÁN Y H UNTINGTON . 117
8. Patio de la casa.
Dimitra Gkozgkou
Universitat de Barcelona
N
uestro contacto con la figura de los norteamericanos hispanistas
Arthur Byne (1884-1935) y Mildred Stapley (1879-1941) (figs. 1 y
2), conocidos popularmente como los Byne, surgió hace unos años
en los archivos de la Hispanic Society of America, donde se conserva la
documentación que relata la compleja relación que nuestro matrimonio
mantuvo con su fundador, Archer Milton Huntington (1870-1955) (fig. 3),
durante esos años que nos ocupan1. El estudio de este material ha sido fun-
damental para comprender como se transforma a partir de 1921, una pareja
de estudiosos hispanistas en exitosos marchantes de arte, actividad que ha
sido tratada por Merino de Cáceres, Rodríguez Thiessen y Martínez Ruiz2.
Fue la gran cantidad de fragmentos arquitectónicos y escultóricos, así
como otros elementos decorativos (mobiliario, artesonados, rejería, textiles,
cerámica, etc.), que los Byne se llevaron al otro lado del Atlántico trabajan-
do como agentes, lo que nos ha hecho reflexionar sobre lo bien que cono-
cían ya desde fechas muy tempranas, los rincones de relevancia artística y
cultural del país. Y si a todo ello venimos a sumar la amplia y muy variada
gama de contactos que establecieron y que les permitieron realizar esas tur-
bias actividades, lógicamente nos preguntaríamos ¿Que hacían los Byne antes
de convertirse en marchantes de arte hispánico?.
La respuesta sería justificada en las líneas que vienen a continuación,
ya que trabajaban para Archer Milton Huntington, que como todos sabe-
mos, destaca como el coleccionista más importante de arte hispánico fuera
de España. Cabe destacar, que dicho mecenas quiso construir una colección
que fuera un exponente de la cultura hispánica en su sentido más amplio3.
Seguramente, y como destaca Immaculada Socias4, uno de los principales
objetivos de la Hispanic Society al fundarse en el año 1904, fue el de esta-
124 DIMITRA GKOZGKOU
que estaban buscando quien en 1914 les publicó la Rejería of the Spanish
Rennaisance7 en gran formato, la cual incluía un rico material gráfico y un
año después, en 1915, editaron el Spanish Ironwork8 en formato libro que
además recogía entre sus páginas piezas de la propia colección del museo.
Sin lugar a dudas, esas dos publicaciones resultaron para el matrimonio
una inmejorable tarjeta de presentación que les aseguró una continuidad
colaborativa y financiera con nuestro coleccionista. ¿Por qué? Cabe subra-
yar que la formación académica de ambos, que incluía las dotes literarias de
Mildred, combinadas con las de Arthur como arquitecto, dibujante y fotó-
grafo, hacían de ellos un tándem profesional muy eficiente9. Además, el
hecho que se interesaran sin distinción por el rico tejido artístico que había
florecido en España y su relación con el innovador uso de la fotografía para
documentarlo, hizo de los Byne un matrimonio muy atractivo para las nece-
sidades de Huntington y de su relativamente joven Sociedad Hispánica10.
Dado que Huntington estaba todavía en proceso de ordenación y cata-
logación de su gigantesca colección de colecciones, contrató a los Byne des-
de 1916 a 1918 como Curators of Architecture and Allied Arts11, encargán-
dose el matrimonio de labores tanto administrativas como también
museísticas. Además, no fueron pocas las veces que tuvieron que realizar
investigaciones monográficas, para suplir la en ocasiones escasa e insufi-
ciente documentación que poseían a la hora de realizar las fichas de las
piezas que estaban expuestas en el museo. Un ejemplo representativo de lo
que venimos diciendo fueron las dos tumbas renacentistas de los duques de
Alburquerque provenientes del convento de San Francisco de Cuellar en
Segovia, la de Doña Mencía Enríquez de Toledo, segunda esposa de don
Beltrán de la Cueva y la del hermano de éste, el obispo de Palencia Gutiérrez
de la Cueva (figs. 4 y 5). Al respecto, cabe señalar que Arthur realizó los
dibujos preparatorios que ayudaron al montaje de dichos sepulcros en las
salas de la Hispanic Society (fig. 6), mientras que Mildred se encargó de
averiguar el árbol genealógico y la historia de los personajes enterrados, ya
que cuando Huntington los adquirió, parece ser que disponía solamente de
una fotografía. El resultado del estudio de los Byne fue ampliado a lo largo
de los años y finalmente publicado por la institución en 1927 en un pequeño
volumen12.
Además, en relación a esas dos tumbas sería interesante resaltar el va-
lor de la fotografía como fuente documental, ya que al observar dos de las
imágenes que disponemos con respecto a esas tumbas, advertimos como la
primera le sirvió a Huntington como documento gráfico a la hora de adqui-
rir el sepulcro de Gutiérrez de la Cueva, y la segunda, refleja el espacio que
ocupaba el monumento funerario de Dª Mencía en el Convento de Cuellar y
las marcas de éste tras ser arrancado del muro (figs. 7 y 8).
EL MATRIMONIO B YNE : DOS HISPANISTAS AL SERVICIO DE ARCHER M ILTON H UNTINGTON ... 127
6. Dibujo del monumento funerario de Dª Mencía Enríquez de Toledo, realizado por Arthur
Byne.
cieron en cada núcleo y las dificultades que afrontaron teniendo que cruzar
el Atlántico en años de guerra.
Merece la pena tener en cuenta que, en este periodo, los Byne, atravesa-
ron el país de norte a sur y de este a oeste muchas veces viajando, en burro o
a caballo, para examinar los monumentos, medirlos, dibujarlos, fotografiar-
los y contextualizarlos dentro de sus parámetros históricos, políticos y so-
ciales. En este sentido y sin desdeñar ningún estilo o temática, realizaron
estudios vinculados a la arquitectura renacentista, el arte románico y gótico,
la escultura, los artesonados, el mobiliario, los jardines y los patios así como
también trataron los tejidos y bordados. Incluso, durante sus rutas por el
país, recopilaron material para editar en un futuro, monografías dirigidas a
los forasteros en las que se describían posibles rutas por los rincones más
bellos y olvidados de España14.
El resultado de sus dos primeras expediciones fue bastante fructífero
ya que Huntington en 1917 les publicó Spanish Architecture of the Sixteenth
Century y, en 1920 dio salida a Decorated Wooden Ceilings in Spain15, obras
que tuvieron un considerable éxito tanto en España como en los Estados
Unidos y que de alguna manera consolidaron la fama de los Byne en los
círculos culturales coetáneos. Además, hay que pensar que tras cada viaje, el
matrimonio entregaba, junto a los manuscritos para publicar, todo el mate-
rial gráfico que serviría para el montaje de exposiciones fotográficas en las
salas de la Hispanic Society16, En este sentido, el interés generado hacia
estas muestras fue destacable ya que las más de 2.500 fotografías que los
Byne habían tomado en España, se convirtieron en fuente indispensable de
estudio para los arquitectos estadounidenses que estaban influenciados por
la ola del Spanish Craze y del Spanish Colonial Revival Style17.
Retomando el hilo de las expediciones del matrimonio, otro objeto de
investigación que ocupó un lugar señalado en sus intereses, fue sin duda, el
mobiliario español, ámbito de estudio que habían iniciado unos años atrás
pero que desarrollaron con profundidad durante su tercer viaje por España
en 1918. La pareja, que por aquel entonces gozaba de un reconocimiento
destacado como hispanistas en ambas orillas del Atlántico, supo desde el
principio como aprovecharse de su condición de acreditados investigadores
de la Hispanic Society y del conocidísimo Huntington para estrechar lazos
con las élites españolas y sobre todo las madrileñas, ya que la capital solía
ser el epicentro de sus operaciones y el lugar donde mantenían su residencia
permanente durante sus visitas por el país.
También debemos tener presente, que las nuevas amistades en España
les ofrecían posibilidades profesionales mucho más prometedoras una vez
tomada conciencia de las oportunidades del patrimonio español en el mer-
cado de arte. En esta línea, cabe mencionar los contactos que mantuvieron
EL MATRIMONIO B YNE : DOS HISPANISTAS AL SERVICIO DE ARCHER M ILTON H UNTINGTON ... 131
NOTAS
1
GKOZGKOU, Dimitra: "Los Byne y la difusion del arte hispánico en Estados Unidos a principios
del siglo XX" en Allegro con brio. I Encuentro "Aula Música Poética» de Jóvenes Humanistas. (Bar-
celona, 9 y 10 de octubre de 2012). JOSA, Lola y LAMBEA, Mariano (eds): Digital CSIC, 2013: http:/
/hdl.handle.net/10261/86681. SOCIAS, Immaculada y GKOZGKOU, Dimitra: Agentes, marchantes
y traficantes de objetos de arte (1850-1950). Gijón, Ed. Trea, 2012, pp. 96-110.
2
Acerca de los Byne y su actividad comercial con el patrimonio artístico español, así como su rela-
ción con magnates americanos de la talla de William Randolph Hearst (1863-1951) y George Fox
Steedman (1871-1940) entre otros, véase: MERINO DE CÁCERES, José Miguel, Arthur Byne y los
monasterios extrañados: Óvila y Sacramenia. Tesis Doctoral. Madrid: E. T. S. de Arquitectura, 1984;
"El techo de ‘la casa del judío’ en Norteamérica", Teruel. Revista del Instituto de Estudios Turolenses,
74 (1985), pp. 142-165; "Siete techos aragoneses en Norteamérica", Aragón Cultural, 5 marzo de
1987, 2ª época, pp. 101-108; "La Reja de la catedral de Valladolid en Norteamérica", Boletín del
Seminario de Estudios de Arte y Arqueología, 53, 1987, pp. 446-454; "Algunos datos sobre el trasla-
do a Estados Unidos de determinadas piezas arquitectónicas del castillo de Benavente Brigecio",
Brigecio: Revista de estudios de Benavente y sus tierras (1993), pp. 211-228; "Arthur Byne, el sa-
queador", Descubrir el Arte, 32 (X-2001), pp. 102-104; "Palacios y castillos expoliados", Descubrir
el arte, 33 (XI-2001), pp. 118-120; "Expolios de arte religioso", Descubrir el arte, 34 (2001), pp.
112-115; "El exilio del Monasterio de Óvila", Descubrir el arte, 36 (2002), pp. 106-108; MERINO
DE CÁCERES, José Miguel y MARTÍNEZ RUIZ, María José: La destrucción del patrimonio artís-
tico español. W. R. Hearst: “el gran acaparador”. Madrid, Ed. Cátedra, 2012. MARTÍNEZ RUIZ,
María José: La enajenación del Patrimonio en Castilla y León (1900-1936). Salamanca, Europa
Artes Gráficas, Junta de Castilla y León, Consejería de Cultura y Turismo, 2008, 2 vols. RODRÍGUEZ
THIESSEN, Victoria: Byne and Stapley: Scholars, Dealers and Collectors of Spanish Decorative
Arts, Submitted in partial fulfillment of the requirements for the degree Master of Arts in the History
of the Decorative Arts. Master Program in the History of the Decorative Arts Cooper-Hewitt, National
Design Museum and Parsons School of Design, 1998, etc.
3
Sin lugar a dudas, la proximidad de Huntington con las emergentes disciplinas antropológicas y al
movimiento de las Arts & Crafts a finales de siglo XIX, fueron aspectos que influyeron decisivamen-
te en el carácter de la Hispanic Society.
4
SOCIAS BATET, Immaculada: La correspondencia entre Isidre Bonsoms Sicart (1840-1922) y
Archer Milton Huntington (1870-1955): una colección de libros antiguos y objetos de arte. Barcelo-
na, Reial Acadèmia de Bones Lletres, 2010, p.145.
5
Christina Morton (1891-1957), era una pintora americana, cuyo contacto con Mildred surgió
probablemnte a partir de 1931, a través The Society of Woman Geographers. [SWG, The Society of
Woman Geographers: Selective list of Membership Files (1925-2010), en: Smithsonian American
Art Museum Photograph Archives/ Library of Congress Copyright Deposit Collection].
136 DIMITRA GKOZGKOU
6
HSA Huntington Archives. Carta de Arthur Byne a Archer M. Huntington, 13 de diciembre de 1913.
7
BYNE, Arthur y STAPLEY, Mildred: Rejería of the Spanish Renaissance. Nueva York, De Vinne
Press, 1914.
8
BYNE, Arthur y STAPLEY, Mildred: Spanish Ironwork. Nueva York, The Hispanic Society of
America, 1915.
9
Arthur, recibió una esmerada educación entre la Eaton School y la Booth Preparatory School,
complementada posteriormente con estudios de licenciatura en Arquitectura por el University of
Pennsylvania y la American Academy of Rome. [HSA Huntington Archives. Memoranda Membership
Data of Arthur Byne, 27 de enero de 1916]. Por otra parte, Mildred, que venía de una familia bastante
liberal para la época, recibió una educación general en el campo de las artes y las letras. Algunos
aspectos a destacar en cuanto a su variopinto Curriculum, fueron sus viajes a África y el aprendizaje
de la lengua zulú, así como su formación pictórica en París donde conoció a la futura arquitecta de W.
R. Hearst, Julia Morgan (1872-1957), y por último, sus dotes literarias explotadas en el campo de la
historia y la política, siendo Cristóbal Colón o la propaganda alemana en España durante la Primera
Guerra Mundial, algunos de los temas tratados. [HSA Huntington Archives. Memoranda Membership
Data of Mildred Stapley; Rodríguez Thiessen (1998), pp. 4-5].
10
Como mencionamos anteriormente, la fundación de la Hispanic Society of America se remota en el
año 1904, pero no fue hasta el 1908 cuando abrió sus puertas por primera vez al público.
11
HSA Huntington Archives. Carta de Archer M. Huntington a Arthur Byne, 24 de agosto de 1916.
12
The Tombs of Don Gutierrez de la Cueva and Doña Mencia Enriquez de Toledo in the Hispanic
Society of America. En Hispanic notes & monographs; essays, studies and brief biographies issued.
Catalogue series, Nueva York: Trustees of the Hispanic Society of América, 1927.
13
LENAGHAN, Patrick: En tierras de Extremadura: Las fotos de Ruth Matilda Anderson para la
Hispanic Society. Catálogo de exposición, Nueva York – Badajoz: The Hispanic Society of America
– Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo, 2004, p. 22.
14
BYNE, Arthur y STAPLEY, Mildred: Forgotten Shrines of Spain. Filadélfia - Londres, J. B.
Lipincott, 1926.
15
BYNE, Artur y STAPLEY, Mildred: Spanish Architecture of the Sixteenth Century. General View
of the Plateresque and Herrera Styles. Nueva York - Londres: G. P. Putnam’s Sons, 1917; Decorated
Wooden Ceilingns in Spain, Nueva York - Londres: G. P. Putnam’s Sons, 1920.
16
Las exposiciones duraban unos tres meses y el material expuesto estaba catalogado en la institución
bajo el nombre Byne-Stapley Expedition y el respectivo año de cada expedición [HSA Huntington
Archives. Carta de Arthur Byne a Archer M. Huntington, octubre de 1916; Carta de Archer M.
Huntington a Arthur Byne, 22 de octubre de 1916; Carta de Macdermott, curator de publicaciones de
la HSA, a Arthur Byne y Mildred Stapley, 29 de diciembre de 1917; Carta de Arthur Byne a Archer
M. Huntington, 8 de abril de 1917; Carta de la oficina del presidente de la HSA a Arthur Byne y
Mildred Stapley, 30 de diciembre de 1918].
17
"The Spanish Craze" es el referente a un período particular en la historia de Estados Unidos,
cuando todo lo español (arte, música, lengua, literatura, arquitectura, etc.) estaba de moda. Afines a
ésta, se mostraron también diversas tendencias arquitectónicas como el Mission Style o el Spanish
EL MATRIMONIO B YNE : DOS HISPANISTAS AL SERVICIO DE ARCHER M ILTON H UNTINGTON ... 137
Colonial Revival Style, que mezclaban modelos de arquitectura colonial española, imponiendo un
regusto hispánico en los edificios estadounidenses, tanto en el exterior como en el interior, ofrecien-
do un resultado ecléctico, elegante y muy popular a finales del XIX y principios del XX. KAGAN,
Richard: "The Spanish Craze: The Discover of Spanish Art and Culture in the United States" en
SUÁREZ ZULOAGA, Ignacio: When Spain fascinated America. Madrid, Fundación Zuloaga, Mi-
nisterio de Cultura, 2010, p. 25.
18
GKOZGKOU, Dimitra: Los Amigos del Arte: "¿Una Sociedad de ambiguos intereses?" en SO-
CIAS BATET, Immaculada y GKOZGKOU, Dimitra: Nuevas contribuciones en torno al mundo del
coleccionismo de arte hispánico en los siglos XIX y XX. Gijón, Ed. Trea, 2013, pp. 99-124.
19
BYNE, Arthur y STAPLEY, Mildred: Spanish Interiors and Furnitures. Nueva York, William
Helburn, 1921-1925, 3 Vols.
20
Los Byne intentaron en repetidas ocasiones ofrecerle a Huntington "oportunidades" que se vendían
en España. Se trataba más de objetos y documentos pensados sobre todo para la biblioteca de la
institución que para el museo. Entre ellos, destaca una colección de mapas de Abraham Ortellius de
Amberes del siglo XVI que actualmente se conserva en la Biblioteca de Cataluña, así como un con-
junto de documentos históricos pertenecientes a García Joaquín Muñoz Jalón, Conde de Castilfalé,
cuya venta gestionaba la embajada americana en Madrid. Asimismo, le propusieron la adquisición de
un juego antiguo de indumentaria religiosa de origen español, cuya venta promovían las hermanas
del convento español en Tampa de Florida. Propuestas que fueron rechazadas por Huntington quien
pretendía que los Byne se concentrasen únicamente en los estudios, ya que para eso les financiaba.
21
En enero de 1921 fue cuando el matrimonio decidió desvincularse de manera oficial pero no tajan-
te, de la Hispanic Society of America. No obstante, tuvieron que esperar unos cuantos meses antes de
anunciar a su nuevo oficio de "anticuarios", dado que primero querían acabar con todos los compro-
misos contractuales que les unían con Huntington, como fue el caso del multideseado Romanesque
Book que la pareja llevaba preparando durante los últimos cuatro años en España.
22
Entre los títulos publicados por los Byne, destacan: Spanish Gardens and Patios, Filadelfia, J. B.
Lippincott, 1924; Popular Weaving and Embroidery in Spain. Nueva York, W. Helburn, 1924 (este
título también se editó en castellano: Tejidos y bordados populares españoles. Madrid, Voluntad,
1924; The Sculptured Capital in Spain. Nueva York, W. Helburn, 1925 (edición en castellano: La
escultura en los capiteles españoles. Madrid, Voluntad, 1926); Provincial Houses in Spain. Nueva
York, W. Helburn, 1925; Forgotten Shrines of Spain, Filadelfia - Londres: J. B. Lipincott, 1926; y
Majorcan Houses and Gardens. Nueva York, William Helburn, 1928 (edición en castellano: Casas y
Jardines de Mallorca, Palma de Mallorca. José J. de Olañeta, 1982. En 1987 se reeditó el mismo
título en una versión bilingüe en catalán y castellano). Asimismo, su participación en revistas anglófonas
fue destacable tal y como muestran las numerosas entradas en The Arquitectural League of New York,
The American Architect, The Architectural Record, Good Furniture, The Brickbuilder, The Art Bulletin,
Arts and Decoration, Times (London), New York Tribune y American Architect and Building News,
entre otras.
23
El coleccionismo de los Byne se remonta probablemente a partir de 1921, cuando algunas de sus
piezas de mobiliario empiezan a figurar entre las láminas del primer volumen de su Spanish Interiors
138 DIMITRA GKOZGKOU
& Furnitures. Con el paso del tiempo y a medida que iban trabajando de manera ferviente como art
dealers, su colección empezó a enriquecerse notablemente. Estaba formada sobre todo con objetos
de artes decorativas y fragmentos arquitectónicos y escultóricos que con pintura. En este sentido,
cabe subrayar que para albergarla de una manera coherente, los Byne tuvieron que remodelar la que
fue su última morada en la capital en Don Ramón de la Cruz, 3, transformando los espacios interiores
decimonónicos en estancias con aire del siglo XVII, espíritu que sigue visible hoy en día.
24
Don Ramón de la Cruz, 3. La residencia oficial del Ministro Consejero de la Embajada de los
Estados Unidos en Madrid. Madrid.
25
En el verano de 1935, la prensa española se hacía eco de la muerte del "ilustre hispanófilo" Arthur
Byne tras un accidente de coche, mientras que Mildred, falleció en la capital durante las navidades de
1941.
LA COLECCIÓN DE PINTURA CATALANA EN LA
HISPANIC SOCIETY OF AMERICA DE NUEVA YORK
D
entro de las colecciones artísticas de la Hispanic Society of America,
de Nueva York, formadas por su creador Archer Milton Huntington,
hay un conjunto notable que pertenece a la escuela catalana moder-
na de pintura.
Como se verá más adelante no parece haber habido en su formación
una intención especial de coleccionar sistemáticamente pintura catalana, pero
después de las distintas compras de pintura moderna que Huntington hizo
resultó una cantidad bastante representativa de pintura de esta procedencia
que merece ser analizado con cierto detenimiento.
La primera pintura catalana moderna en ingresar en la colección es el
retrato del financiero y coleccionista Pablo Bosch Barrau, pintado el 1910
por su primo el destacado pintor Laureà Barrau (nº inv. A32), compañero de
Ramon Casas en su juventud e intermediario en la incorporación de dos
óleos del Greco, que en París Rusiñol compró precisamente a Bosch. En
este caso, sin embargo, seguramente el móvil de Huntington no había sido
incorporar una pintura de un buen pintor –de hecho consta como un presen-
te del retratado- sino más bien el retrato de un colega importante.
Ya que la colección en cuestión no tiene un carácter sistemático voy a
exponer las piezas por orden de adquisición, siguiendo el estudio que hizo
de este fondo la profesora Priscilla Muller1. Según esta fuente, de toda sol-
vencia pues la Dra. Muller fue muchos años la conservadora –y luego con-
servadora emérita- del museo, la primera pintura catalana moderna que en-
tró en la colección de Huntington fue un óleo magnífico de Lluís Graner. Se
140 FRANCESC FONTBONA DE VALLESCAR
1. Lluís Graner: Vista de Peñíscola. Óleo sobre lienzo. Obra de datación imprecisa. Colec-
ción The Hispanic Society of America, nº inv. A1756. Fue adquirida en una galería de
Nueva York, la Edward Brandus Galleries, en 1911,
Estas obras de Peñíscola no están entre las pinturas más típicas de Graner,
más conocido por sus temas obscuros contrastados con fuertes puntos de
luz, pero se trata sin duda, especialmente la primera, de un gran paisaje,
insólito por su factura en el paisajismo catalán, pero de una gran fuerza y
ambición, dentro de su pormenorizado realismo.
La siguiente pintura catalana que ingresó en la Hispanic Society, en
1912, fue un importante óleo de Hermen Anglada-Camarasa, Jóvenes de
Borriana, de hacia 1908 (nº inv. 295). Si en el caso de Graner la compra
pudo deberse más al tema de los cuadros que a la personalidad de su autor,
en el caso de Anglada, sin duda, el éxito internacional fulgurante del pintor
lo convertía en objetivo prioritario para incorporar obra suya a la colección.
El óleo ingresado acababa de encabezar la aportación de Anglada en la gran
Exposizione Internazionale delle Belle Arti de Roma, que supuso para el
artista una nueva consagración internacional, de las muchas que estaba co-
sechando en aquellos tiempos, al llevarse un gran premio, compartido con
figuras como Gustav Klimt, Anders Zorn, Wilhelm Hammershoi o el espa-
ñol Ignacio Zuloaga, decisión salomónica que por cierto Anglada impugnó
amparándose en haber obtenido él el mayor número de votos del jurado5.
Poco después de la incorporación de su óleo en la Hispanic Society, en
Enero de 1913, Anglada fue nombrado miembro correspondiente de la enti-
dad, y tuvo un breve período de influencia en ella, que por motivos que
desconozco se diluiría poco más tarde pese a que en 1917 fue nombrado
miembro numerario. Tal vez habría que leer este cambio de preponderancia
de Anglada ahí en el contexto de la rivalidad que el pintor catalán mantenía
con Joaquín Sorolla, que precisamente en aquellos años consolidaba su pre-
sencia omnímoda en la entidad fundada por Huntington (fig. 2).
Las Jóvenes de Borriana es un obra ambiciosa de las que representan la
evolución entonces predominante de Anglada, desde el decadentismo ruti-
lante y difuminado de sus primeras obras de éxito en París hasta un estilo
personal, hijo de la estética nabí pero entroncado con un colorismo vivo y
contrastado relacionado con la de los Ballets Rusos de Diaghilev, con los
que el pintor, muy admirado entonces en la Rusia culturalmente más moder-
na, tuvo notable relación personal.
Igual que los Ballets Rusos se inspiraban a menudo en el folklore de su
país –algo que también venían haciendo los compositores del grupo de los
Cinco-, estilizándolo y poniéndolo al servicio de la modernidad, Anglada
hacía lo mismo, especialmente desde que en 1904 había conocido en un
viaje estival a Valencia la brillantez colorista de su indumentaria popular, de
la que por otra parte se convirtió en coleccionista6.
Muy poco después, la colección pictórica catalana de la HSA se am-
pliaría con una serie de pinturas de Mariano Fortuny, el más famoso
142 FRANCESC FONTBONA DE VALLESCAR
fondo del patio en este cuadrito es el propio Raimundo, que aparte de cuña-
do había sido frecuentemente compañero del pintor catalán en sus viajes.
Otro Fortuny, esta vez el apunte al óleo de un refugio obscuro visto
bajo un cielo azul, aparece también en la colección (nº inv. 243)14, así como
una acuarela que representa unos árabes agachados a la puerta de una espe-
cie de túnel, desde el interior del cual están pintados (nº inv. A544)15. Del
mismo Fortuny también forman parte de la colección el óleo El circasiano
de hacia 1869 (A3334)16 –incorporación tardía, procedente de la colección
del artista Ismael Smith- y un Torso de anciano de hacia 1871 (A258)17.
El 17 de Enero de 1922 se añadieron a la colección de pintura catalana
nuevas obras de Lluís Graner. La más difundida de ellas es el óleo Las dos
hermanas (nº inv. A218), pieza más típica de su autor que las que ya existían
en la colección. Jugaba con el contraste lumínico que gustaba al pintor, por
puntos de luz intensa, que en este caso son los faros del automóvil y el
resplandor que proviene del vestíbulo del teatro o sala de fiestas del que
salen las elegantes y enjoyadas figuras que centran la composición.
Es una pintura extraña, pues por una parte se ha despojado del
naturalismo habitual en la factura de la obra del Graner de su etapa central,
pero por otra el tema del óleo es "social", con la presencia de otro contraste,
éste no lumínico sino de fondo: opulencia y miseria juntas en mitad de una
calle, pues asisten a esta brillante salida de espectáculo una madre con dos
niños, pobre i encorvada ella como pidiendo limosna sin atreverse. Y es que
pese a que este cuadro, que se adquirió en las Lawlor Galleries de Nueva
York –aunque provenía de origen de las mismas Edward Brandus Arts
LA COLECCIÓN DE PINTURA CATALANA EN LA H ISPANIC SOCIETY OF AMERICA... 145
4. Miquel Viladrich: Mis funerales. 1910. Colección The Hispanic Society of America, (nº
inv. A1983).
1915 (nº inv. A1979); Xanet de Balances, de hacia 1915 (nº inv. A2005); los
tres óleos titulados Frutos de Fraga de hacia 1914-23 (nº inv. A1980, A1981
y A1982); El chico del halcón (nº inv. A1976), La niña del cestito (nº inv.
A1986), La niña con el gallo (nº inv. 1987), La chica de los tomates (nº inv.
A1988), Pentinetas (nº inv. A1998) y El platero, de hacia 1915-18 (nº inv.
A2001); Ana Morera (nº inv. A1996), La novia (nº inv. A1997) y El pastor,
de hacia 1920 (nº inv. A2000); Pastoret (nº inv. A1989), Las 5 muchachas
del cántaro (nº inv. A1985) y Las hilanderas, de hacia 1920-21 (nº inv.
A2003); La nena del càntir, Fraga, del 1920-22 (nº inv. A1984); María de
la Esclavitud Reino de Andrade, de hacia 1922-25 (nº inv. A2002); El negro
de Montevideo (nº inv. A1991) y La negra de Montevideo, de hacia 1923-25
(nº inv. A1990); y Las seis herederas de Fraga, de hacia 1925 (nº inv. A1999).
Otro óleo de Viladrich, bien peculiar, Las hijas del Cid, de hacia 1912
(nº inv. A2030) concebido con un personal ingenuismo, se adquirió algo
más tarde, el 28 de Julio de 1928, mientras Dafne transformada en laurel,
del 1910 y Desnudo frente al mar, de 1914 no ingresaron hasta el 28 de
Mayo de 193421 .
Después de esta masiva compra de obras de Viladrich, la siguiente ad-
quisición de pintura catalana moderna de Huntington tiene un cariz que de-
nota, ahora sí, una voluntad de completar la escuela catalana de la colec-
ción, ya que se adquieren conjuntamente tres óleos importantes de sendos
pintores muy representativos catalanes que hasta entonces no figuraban en
la HSA: Rusiñol, Casas y Mir.
De Santiago Rusiñol entró Calvari de Sagunt, de 1901 (nº inv. A2034)22,
de Ramon Casas, La santera, de 1915-16? (nº inv. A2035)23 (fig. 5), y de
Joaquim Mir, Llanterna de la catedral de Tarragona, (nº inv. A2033)24 (fig,
6), entonces recién pintada ya que la triple compra se materializó en Di-
ciembre de 1928 y el encargado de canalizarla fue el pintor José Maria López
Mezquita, nuevo hombre de confianza de Huntington en lo que atañía a la
pintura moderna, tras la desaparición de Joaquín Sorolla. Se trataba de tres
piezas de envergadura, sobre todo las dos primeras, pero no de las más re-
presentativas de lo que los tres pintores habían aportado a la historia de la
pintura de su tiempo. La de Casas es posible que sea algo anterior, ya que
parece que podría haber sido pintada en una estancia del pintor en Moià
hacia 1908-10; de hecho más que una santera el personaje retratado era una
recaudadora de limosnas para la parroquia25.
Completan la colección catalana de pinturas de la HSA unas obras del
gerundense Sebastià Cruset, pintor todavía ochocentista26.
Tras la muerte de Huntington ingresarían en la colección sendas obras
de dos otros pintores catalanes de primera línea ausentes hasta entonces,
Victòria (1938) de Joaquim Sunyer (nº inv. LA326) y La Roser (1909) de
148 FRANCESC FONTBONA DE VALLESCAR
5. Ramon Casas: La santera. 1915-191616?. Óleo sobre lienzo. Colección The Hispanic
Society of America, (nº inv. A2035).
Isidre Nonell (nº inv. LA1065). La primera fue una donación de Mildred
Adams de 1977, y es una obra menor de Sunyer pese a tratarse de un retrato
de su hija, pintado en plena guerra civil; mientras la segunda –adquirida en
una subasta de Sotheby’s en Madrid el 1985, es una paradigmática figura
femenina de Nonell de la época en que ya había dejado de pintar gitanas y su
dramatismo congénito parecía dar paso a un nuevo optimismo concordante
con el inminente Noucentisme, al que el Nonell final estuvo fugazmente
vinculado justo antes de su prematura muerte. El destino de este cuadro a
una colección hispánica tan destacada evitó tentaciones de la Junta de Ex-
portación de impedir su salida hacia los Estados Unidos.
La colección de pintura catalana moderna de la Hispanic Society of
America es interesante pero irregular. Es evidente que no fue fruto de una
campaña sistemática de adquisiciones, sino de la suma de aportaciones fruto
de la oportunidad o el interés momentáneo de adquirir determinadas piezas.
Sólo la adquisición en bloque de Rusiñol, Casas y Mir, ya en 1928, denotan
la voluntad de completar vacíos flagrantes en la colección de pintura catala-
na, y aún en este caso no se buscaron tampoco las piezas más representati-
vas de sus respectivos autores.
Si algún denominador común hemos de hallar en esta colección, tal vez
sea una preferencia por los temas folklóricos con fuerte atención a
indumentarias atávicas. El Anglada es de valencianas, la amplia serie de
LA COLECCIÓN DE PINTURA CATALANA EN LA H ISPANIC SOCIETY OF AMERICA... 149
6. Joaquim Mir: Llanterna de la catedral de Tarragona. Óleo sobre lienzo. Colección The
Hispanic Society of America, (nº inv. A2033).
o el joven pero ya líder intelectual Eugeni d’Ors, por decir solamente los
más flagrantes. Tampoco desentonarían allí poetas mallorquines como Miquel
Costa i Llobera o Joan Alcover, y ya no digo valencianos, tal vez algo meno-
res, como Teodor Llorente o Vicent Wenceslau Querol. Pero lo cierto es que
ninguno de ellos está en la serie.
¿A qué puede ser debido que una colección como la Hispanic, que se
preocupa de tener obras de pintores catalanes, en cambio en su galería de
retratos no tenga ni un escritor catalán? Pues creo que es fácil de adivinar el
motivo: lo más sustancial de la producción de todos estos escritores tiene el
estigma de no pertenecer a la literatura castellana. Es un hecho constatable
que la imagen de la España literaria se transmitía y se sigue transmitiendo
exclusivamente en castellano, y el resto de la literatura "española" parece no
existir incluso cuando se propone homenajear a los "hombres que han hecho
la España actual".
Cuando López Mezquita toma el relevo de Sorolla en la elaboración de
la galería de forjadores de la España moderna, a partir de 1926, tampoco
corrige el criterio, suponiendo que fueran los pintores y no el comitente los
que marcaban las pautas de contenidos. En estos años, nuevos escritores
catalanes habían brillado con fuerza: Josep Carner, Carles Riba, Josep Maria
de Sagarra, Josep Pla…, pero a ojos de la hispanidad resultaban del todo
invisibles. Del pincel de López Mezquita serán los retratos de Palacio Valdés
(1926), los hermanos Quintero y Concha Espina (1928), así como los de
literatos sudamericanos tales como Pedro Henríquez Ureña, Enrique Larreta
o Zorrilla San Martín (1927). Es decir que se homenajea antes a extranjeros
que escriben en castellano que a "españoles" que escriben en catalán. Queda
claro que la unidad de España que proclamaban y siguen proclamando hoy
los políticos españoles hegemónicos –de derecha y de izquierda, da igual- se
pretende que tenga también unidad de lengua: es una España que no quiere
tener más que un idioma, teniendo como tiene otro de gran relieve, literario
y también demográficamente hablando, éste es visto no como un patrimonio
cultural propio sino como un estorbo, por lo que el foco no se posa nunca
sobre él29.
Hasta en la galería de retratos se añadirán algunos brasileños, llegándo-
se así al contrasentido de incorporar bajo el adjetivo hispánico lo portugués,
pero en ningún caso lo catalán. Y es que lo portugués se toleraba porque la
historia había consolidado a Portugal y al Brasil como estados propios, pero
en el estado español en lugar de aceptarse el plurilingüismo incontrovertible
que lo conforma constitutivamente se había apostado desde el siglo XVIII
por la ficción de la España una. En tres siglos no se han apeado de ahí.
Pintores catalanes sí que interesan en la colección, porque su idioma no
se hace evidente, pero escritores en catalán de ninguna manera. Si alguien
quiere achacar esta parcialidad a Huntington se equivocará, pues él era un
152 FRANCESC FONTBONA DE VALLESCAR
extranjero y lo único que hacía era reproducir al pie de la letra el modelo que
la España oficial daba de sí misma, y es un hecho incontrovertible que en el
banquete de la cultura española la lengua catalana –ni sola y todavía menos
en toda su complejidad: valenciana, balear y aragonesa- ni está ni se la espe-
ra. Y esta obviedad es uno de los secretos mejor guardados de la esencia
misma de la España oficial. Es evidente pero no se menciona. Los que lo
conocen lo callan, pero muchos más lo ignoran porque jamás en el diseño
pedagógico con que se ha formado el imaginario de los españoles, ni tan
sólo en sus clases más cultas, un acervo cultural tan sólido, denso y rico
como el que ofrece la lengua catalana –que debería ser conocida y reveren-
ciada por todos los españoles como un tesoro propio sin discusión- ha sido
mínimamente atendido.
Lamentablemente se trata de una constante. En otra ocasión ya subrayé
cómo el gran templo de las letras de España, su Biblioteca Nacional en
Madrid, se adornó a fines del siglo XIX en su fachada con cantidad de esta-
tuas y medallones de escritores propios, y casualmente ninguno de ellos
pertenecía tampoco a la literatura catalana. La mayoría de los homenajeados
en la fachada de la Biblioteca escribieron en castellano, pero algunos lo
hicieron en latín; éstos todavía tenían cierta cabida en el diseño conceptual
de lo español, pero los que brillaron en catalán en las mismas épocas no
fueron considerados dignos de representar a las letras españolas en la facha-
da de su biblioteca emblemática30.
Y esto no responde a excepciones puntuales, antes al contrario es la
manifestación canónica de lo que la España hegemónica considera como
cultura española. Lo triste pues es que no estoy refiriendo excepciones sino
la mismísima norma. Y viene de muy atrás, pues el estado español, desde su
formación a principios del siglo XVIII, con la nueva dinastía de los Borbón,
trató sin desmayo de erradicar el catalán, por obra y omisión, de aquellos
territorios del nuevo reino único en los que era el idioma propio. El catalán,
como si fuera algo extraño, fue eliminado de la administración del estado,
de la enseñanza pública, del mundo judicial, hasta muy a menudo del teatro
y de las publicaciones; llegaba a irritar a los gobernantes que a pesar de sus
esfuerzos se mantuviera por ejemplo en el catecismo, lo que en más de una
ocasión lo consideraron hasta punible!, y esta contumacia contra un bien
cultural que paradójicamente era sobre el papel propio del país no menguó
en todo el siglo XVIII, ni en todo el siglo XIX, y tan sólo en el XX tuvo
momentos de reaparición trabajosa, nunca patrocinados por el estado cen-
tral, como hubiera sido de desear, sino por etapas en las que la tendencia
natural de la personalidad catalana halló ciertas facilidades para aflorar de
nuevo: con la Mancomunitat de Catalunya, con la Generalitat republicana y
con la Generalitat restaurada tras el franquismo.
LA COLECCIÓN DE PINTURA CATALANA EN LA H ISPANIC SOCIETY OF AMERICA... 153
NOTAS
1
MULLER, Priscilla E.: La España amada de Huntington en América. Los tipos, los trajes y el
pueblo, en De Goya a Zuloaga. La pintura española de los siglos XIX y XX en The Hispanic Society
of America. Madrid, BBVA, 2000, pp. 15-25. Pese a la existencia del catálogo de E. DU GUE
TRAPIER, Catalogue of paintings (…). Nueva York, Hispanic Society of America, 1932, lógicamen-
te también consultado por mí en esta ocasión, utilizaré como referencia el trabajo citado de MULLER,
más reciente.
2
SALA TUBERT, Lluïsa: "Lluís Graner i l’espectacle total" en FONTBONA, Francesc (dir.): El
Modernisme. Pintura i dibuix. Barcelona, Edicions L’Isard, 2002, pp. 123-132.
3
Citada por DU GUE TRAPIER y por el The Hispanic Society of America Handbook. Museum and
Library Collections, New York, Printed by order of the trustees, 1938, p 41.
4
Sobre la amistad de Gaudí con artistas me remito a FONTBONA, Francesc (ed.): Pintores y escul-
tores amigos de Gaudí. Barcelona, Fundación Francisco Godia, 2002.
5
FONTBONA, Francesc y MIRALLES, Francesc: Anglada-Camarasa. Barcelona, La Polígrafa,
1981. La pintura de la Hispanic Society figura en el catálogo razonado de esta monografía con el
número C25, pp. 259-260 y reproducido en la p. 85.
6
Aún hoy la colección de indumentaria valenciana de Anglada se conserva repartida entre los fondos
de sus herederos y el de la Fundació “la Caixa” en Palma de Mallorca.
7
En la monografía de referencia sobre el pintor, GONZÁLEZ LÓPEZ, Carlos y MARTÍ AYXELÀ,
Montserrat: Mariano Fortuny Marsal. Barcelona, Diccionari Ràfols, 1989, vol. II, p. 26, se cataloga
esta obra con el número CP-1.01.67/68.
8
González y Martí (1989), cat. nº OR-2.03.62/65, vol. II, p. 39, reproducido en el vol. I, p. 199.
9
González y Martí (1989), cat. nº CT-0.02.68, vol. II, p. 88, reproducido en el vol. I, p. 266.
10
Catalogado en González y Martí (1989), cat. nº VA-2.01.64, vol. II, p. 29, reproducido en el vol. I,
p. 255.
11
González y Martí (1989), cat. nº OR-2.01.60/62, vol. II, p. 37, reproducido en el vol. I, p. 181.
12
SUCRE, José María de: Memorias. I. Del romanticismo al modernismo. Barcelona, Editorial Bar-
na, 1963, pp. 112-113.
13
González y Martí (1989), cat. nº RT-1.01.72, vol. II, p. 55, reproducido en el vol. I, p. 310.
14
Citado en Handbook, p. 37, donde se le da el número de referencia A544, aunque en el texto ya
aludido de Priscilla Muller no está mencionado. Catalogado en González y Martí (1989), cat. nº OR-
1.05.71, vol. II, p. 46, reproducido en el vol. I, p. 322, con el título Casa en Tanger.
15
González y Martí (1989), pp. 37-38. Esta pieza tampoco la menciona la Dra. Muller en el estudio
que sigo en mi exposición. Catalogado en González y Martí (1989), cat. nº OR-2.01.67, vol. II, p. 43,
reproducido en el vol. I, p. 210.
LA COLECCIÓN DE PINTURA CATALANA EN LA H ISPANIC SOCIETY OF AMERICA... 155
16
Catalogado en González y Martí (1989), cat. nº OR-2.01.69, vol. II, p. 44, reproducido en el vol. I,
p. 290.
17
Catalogado en González y Martí (1989), cat. nº CT-0.01.71, vol. II, p. 91, reproducido en el vol. I,
p. 321.
18
Figuró, con el número 36 del catálogo, en la exposición Señor Luís Graner and His Art, Edward
Brandus Arts Galleries, Nueva York 1910, catálogo consultable por internet <http://images.frick.org/
PORTAL/STREAMFILE.php?filetype=application/pdf&path=/Volumes/digitallab_xinet_7/Book/
Gilded_Age_2/Public/PDF/31072001443557.pdf&server=MTkyLjE2OC4xMC43Mg==&siteurl=>.
19
Sobre la etapa americana del pintor véase ALCOLEA, Fernando, El pintor Luis Graner en Ámerica.
Gloria y decadencia (1910 -1928), <http://www.academia.edu/5710748/
El_pintor_Lluis_Graner_en_America._Gloria_y_decadencia_1910_-_1928_>.
20
Donde se había expuesto, con el número 10, en la exposición antes citada.
21
Por ello ya no aparecen en el catálogo de DU GUE TRAPIER, editado en 1932.
22
El catálogo razonado de la obra del artista se contiene en LAPLANA, Josep de C. y PALAU-
RIBES O’CALLAGHAN, Mercedes: La pintura de Santiago Rusiñol, Obra Completa. Barcelona,
Editorial Mediterrània, 2004, en el que esta pintura está catalogada en el vol. 3, nº 12.2, p. 100.
23
MULLER por error da el número de catálogo A2034. El catálogo razonado de la obra del artista se
contiene en COLL, Isabel: Ramon Casas, una vida dedicada a l’art. Barcelona, El Centaure Groc,
1999, catálogo nº 607 (como La andadora), p. 385 y reproducida entre las pp. 240 y 241.
24
Catalogada en MIRALLES, Francesc: Joaquim Mir al Camp de Tarragona. Segona edició revisa-
da i ampliada. Tarragona-Barcelona, Diputació de Tarragona – Viena Edicions, 2008, catálogo 225,
p. 219.
25
Lo aclara Isabel Coll en la edición castellana de la citada monografía, Murcia: De la Cierva Edito-
res, 2002, p. 402, donde da el nombre de la retratada: Dolors Ginestós.
26
DU GUE TRAPIER (1932), vol. II, p. 833, sólo se refiere sumariamente a estas obras sin describir-
las ni catalogarlas.
27
Muller (2000), p. 15.
28
Muller (2000), p. 22.
29
Tanto en la serie de Sorolla como en la de López Mezquita se incorporaban a la galeria de retratos
los de eruditos en lengua y literatura (Menéndez y Pelayo, Rodríguez Marín, el ya citado Menéndez
Pidal, Asín Palacios, Cejador, Cotarelo) y tampoco ninguno de ellos era estudioso de la lengua cata-
lana, de los varios filólogos de primer orden que destacaron en esta especialidad (Milà i Fontanals,
Rubió i Lluch, Antoni M. Alcover, Pompeu Fabra).
30
Véase mi intervención en el Congreso Internacional Miradas sobre España, Universidad de Valen-
cia-Bancaja, Centro Cultural Bancaja, Valencia, recogida en FONTBONA, Francesc: "Algunas mira-
das artísticas –parciales- sobre España" en TOMÁS, Facundo; JUSTO, Isabel y BARRÓN, Sofía:
Mirada sobre España. Barcelona, Anthropos, 2011, pp. 184-204.
.
EL COLECCIONISMO DE CERÁMICA ESPAÑOLA EN
LA HISPANIC SOCIETY OF AMERICA1
A
finales del XIX y principios del siglo XX muchos extranjeros se
apasionaron por las artes decorativas españolas, entre las que bri-
llaba la cerámica. El fenómeno venía de mucho atrás, ya que desde
mediados del siglo XIX, España era una de las paradas obligadas en la ruta
turística que los europeos fundamentalmente hacían por el mediterráneo,
buscando el exotismo del orientalismo. En las ciudades de Córdoba, Sevilla
y Granada veían cubiertas todas sus expectativas sobre su idea romántica.
Aquí descubrían las azulejerías de los palacios sevillanos y granadinos, y
los famosos jarrones de la Alhambra.
Huntington fue uno de esos extranjeros a los que España y su arte fasci-
naron, empezando muy pronto a coleccionar todo tipo de obras, entre las
que las artes decorativas ocuparon un puesto importante.
No es ajeno a este gusto por las cerámicas antiguas, la afición que algu-
nos pintores de la época sintieron por decorar sus estudios con estos objetos,
como el pintor Mariano Fortuny, que no sólo las coleccionó sino que expe-
rimentó con la técnica del reflejo metálico, consiguiendo buenos resultados:
"El otro día estuve haciendo cerámica en una alfarería, probando con los
reflejos metálicos…"2. Además de un importante pintor del siglo XIX, fue
también un gran coleccionista, llegando a poseer dos de las piezas de refle-
jos metálicos nazaríes más excepcionales actualmente: por un lado el jarrón
de la Alhambra del Museo Hermitage en San Petersburgo, que adquirió en
Granada al marqués del Salar en 1871, y por otro, el azulejo Fortuny del
Instituto Valencia de Don Juan en Madrid, que revestía el dintel de una casa
del Albaicín de Granada y que adquirió en dicha ciudad. Junto a otras anti-
güedades de su colección, las cerámicas de reflejos metálicos fueron subas-
tadas en 1875, tras su muerte, en el Hotel Drouot de París.
En esta afición por las lozas doradas de Fortuny, tuvo mucho que ver el
coleccionista y estudioso del tema, el barón Jean Charles Davillier, que pu-
blicó Histoire des faiences hispano-moresques à réflets métalliques en 1861,
y que consiguió reunir una buena colección.
El interés por las llamadas lozas hispano-moriscas en Francia, venía ya
de años antes, y en 1838, Debruge Dumenil había reunido un gran número
de ellas, publicadas en el catálogo que editó en 1847 su yerno J. Labarte.
También en Sèvres se habían interesado por la técnica de este tipo de
cerámicas, y en 1845, el director de la manufactura de Sèvres Alexandre
Brongniart, las estudió dentro de su Tratado de las artes cerámicas. En la
misma fábrica se reprodujo en porcelana el jarrón de la Alhambra.
El Museo Nacional de la Edad Media de Cluny cuenta actualmente con
una colección de alrededor de cien cerámicas de reflejos metálicos, reunidas
muy tempranamente, tal como consta en los archivos. Las primeras piezas
fueron compradas en 1847 y 1848, y gran parte del resto en la década si-
guiente. El ideólogo fue el coleccionista Alexandre du Sommerad, quien
instaló sus objetos artísticos en 1832 en el palacio de Cluny en París.
En España, las grandes colecciones de cerámica se formaron a finales
del XIX y principios del siglo XX. Entre ellas, destaca la colección del Ins-
tituto Valencia de Don Juan en Madrid, formada por Joaquín Guillermo de
Osma y Scull, diplomático y político, y con enorme interés por el
coleccionismo, la arqueología y la historia. Gracias a su casamiento con
Adelaida Crooke y Guzmán, XXIV condesa de Valencia de Don Juan, here-
dó un rico y cuantioso patrimonio, compuesto por miles de manuscritos,
libros, pinturas, esculturas y objetos decorativos. Entre todo ello destacan
más de cuatrocientas cerámicas históricas, muchas de ellas medievales del
tipo de reflejos metálicos, entre las que se encuentra el azulejo Fortuny cita-
EL COLECCIONISMO DE CERÁMICA ESPAÑOLA EN LA HISPANIC SOCIETY OF AMERICA 159
4. Taller de los Zuloaga en la iglesia de San Juan de los Caballeros en Segovia. Fotografía
de Anna M. Christian, 1916.
tóricas de Ruiz de Luna, algunas de las cuales utilizó como modelos a repro-
ducir en la fábrica de Nuestra Señora del Prado.
9. Pila bautismal toledana. Nueva York. The Hispanic Society of America. Cortesía de The
Hispanic Society of America.
10. Mural de azulejos atribuido a Fernando de Valladares. Nueva York. The Hispanic
Society of America. Cortesía de The Hispanic Society of America.
11. Orza. Nueva York. The Hispanic Society of America. Cortesía de The Hispanic Society
of America.
12. Salvilla. Nueva York. The Hispanic Society of America. Cortesía de The Hispanic Society
of America.
13. Fragmento de boca de jarrón de la Alhambra. Granada. Nueva York. The Hispanic
Society of America. Cortesía de The Hispanic Society of America.
14. Cuenco. Nueva York. The Hispanic Society of America. Cortesía de The Hispanic Society
of America.
15. Plato y bote de la serie de la brionía. Nueva York. The Hispanic Society of America.
Siglo XV. Cortesía de la The Hispanic Society of America.
EL COLECCIONISMO DE CERÁMICA ESPAÑOLA EN LA HISPANIC SOCIETY OF AMERICA 177
16. Cuenco de Manises, serie de los claveles. Nueva York. The Hispanic Society of America.
Siglo XVIII.
ARAGÓN
En Aragón se desarrolló especialmente durante los siglos XVI y XVII
la loza dorada. Atribuida a Muel se conserva en la Hispanic un gran plato de
principios del siglo XVI (E601), con umbo en el centro y decoración de
grandes flores con pétalos de reserva en azul35.
De la cerámica verde y morada de Teruel, Álvaro Zamora publica un
plato o salsera del siglo XIV con decoración en compartimentos de tipo
geométrica36. La pieza más importante de Teruel que se conserva en la
Hispanic es una orza del siglo XV (fig. 17), con una decoración en registros
paralelos. El más importante, en la parte superior, con un escudo con un
castillo en un frente, rodeado de motivos vegetales diminutos en manganeso
178 ABRAHAM RUBIO CELADA
17. Orza. Nueva York. The Hispanic Society of America. Siglo XV. Cortesía de The Hispanic
Society of America.
y otras hojas más grandes en verde, y en la parte inferior otros dos registros,
uno con roleos en reserva sobre fondo de manganeso, y otro junto a la base,
de espirales en manganeso. Álvaro Zamora publica a toda página esta im-
presionante pieza y la fecha en la segunda mitad del siglo XV, y considera
excepcional su decoración con la nueza blanca o brionía, que rodea el escu-
do con el castillo37.
SEVILLA
En Sevilla se desarrolló especialmente la azulejería de estilo mudéjar a
partir del siglo XV, hecha a cuerda seca, y posteriormente en el siglo XVI se
pasaría a decorar los azulejos en la técnica de cuenca y arista, y también
sobre cubierta estannífera imitando el lenguaje pictórico, gracias a la llega-
da del italiano Francisco Niculoso, conocido como el Pisano. También se
realizaron unos platos con la técnica de la cuerda seca, de los que se conser-
van algunos significativos en el Instituto Valencia de Don Juan, y también
en la Hispanic, como uno que representa una arpía con la iconografía de la
antigüedad clásica u otro que representa un dragón (fig. 18), ocupando todo
el espacio, rodeado de motivos vegetales estilizados sobre fondo blanco.
EL COLECCIONISMO DE CERÁMICA ESPAÑOLA EN LA HISPANIC SOCIETY OF AMERICA 179
18. Plato realizado con la técnica de la cuerda seca. Nueva York. The Hispanic Society of
America. Cortesía de The Hispanic Society of America.
ALCORA (CASTELLÓN)
En el siglo XVIII aparece una nueva forma de hacer cerámica en Euro-
pa, y se crean las fábricas que producen porcelana y loza industrial. Las
primeras surgieron con la intención de imitar la porcelana china, como la
fábrica de porcelana de Buen Retiro, instalada en Madrid con la llegada del
rey Carlos III. Entre las fábricas de carácter industrial, la primera en produ-
cir loza fina en España fue la de Alcora, fundada en este pueblo de Castellón
por el conde de Aranda. De esta fábrica se conserva en la Hispanic Society
una buena colección de piezas38, como la fuente circular que representa
unaescena de batalla de Alejandro contra Porus (fig. 19),39 bien estudiadas
por Margaret Connors40.
LA AZULEJERÍA EN LA PUBLICACIÓN DE LA
HISPANIC DE FROTHINGHAM CON FOTOGRAFÍAS DE
RUTH MATILDA ANDERSON
Dentro de la historiografía sobre la azulejería histórica aplicada a la
arquitectura, una obra de referencia es la publicación Tile panels of Spain
1500-1650 de Alice Wilson Frothingham (fig. 20)41, ilustrada con fotogra-
fías de Ruth Matilda Anderson, tomadas durante un viaje a España entre los
180 ABRAHAM RUBIO CELADA
19. Fuente circular, escena de batalla de Alejandro contra Porus. Nueva York. The Hispanic
Society of America. Cortesía de The Hispanic Society of America.
años de 1967 y 1969. El libro fue editado por la Hispanic Society, siguiendo
el espíritu de Huntington de ayudar al estudio y catalogación de las obras del
arte español.
En una entrevista concedida a The Society of Woman Geographers,
Anderson relató algunas dificultades en la realización de esas fotografías,
como ocurrió en la visita en 1967 a una iglesia de Talavera, que estaba en
ruinas, acompañada de un joven arqueólogo, que vigilaba el techo que ame-
nazaba con desmoronarse mientras ella tomaba las fotografías42. El resulta-
do es una buena conjugación de textos científicos de Frothingham y foto-
grafías en color, intercaladas en el texto de azulejerías sevillanas primero y
talaveranas después, entre ellas el mural de Alberto Magno conservado en la
Hispanic. En una segunda parte se hace un catálogo de 178 láminas fotográ-
ficas en blanco y negro.
EL COLECCIONISMO DE CERÁMICA ESPAÑOLA EN LA HISPANIC SOCIETY OF AMERICA 181
20. Portada del libro Tile panels of Spain 1500-1650 de Alice Wilson Frothingham.
182 ABRAHAM RUBIO CELADA
21. Jarra para servir vino. País Vasco. Siglo XX. Nueva York. The Hispanic Society of
America.
NOTAS
1
Agradezco a Margaret Connors McQuade la ayuda prestada para que este texto haya llegado a
término, así como el que me proporcionara las fotografías de las figuras 8, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15,
17, 18 y 19.
2
Carta enviada al pintor Raimundo de Madrazo en 1870. Tomado de CASANOVAS, Mª Antonia:
"La cerámica de reflejo dorado en la pintura de la segunda mitad del siglo XIX" en El reflejo de
Manises. Cerámica hispano-morisca del Museo de Cluny de París, Madrid, 1996, p. 32.
3
Agradezco a Cristina Partarroyo el que me proporcionara la fotografía del Bací gran.
4
RUBIO CELADA, Abraham: Los Zuloaga artistas de la cerámica. Segovia, Caja Segovia, Obra
Social y Cultural, 2007, p. 174.
5
Margaret Connors McQuade me informa que el pintor Sorolla donó a la Hispanic varias piezas de
cerámica, entre las que se encuentran una pila benditera de Valencia y un cuenco grande de Talavera
de principios del siglo XVIII.
6
Fotografía tomada, al igual que las figuras 21, 22 y 23, de las publicaciones de la Hispanic de 1930
en: Anónimo, Modern pottery from the Basque provinces in the collection of the Hispanic Society of
America, New York, 1930; Anónimo, Modern pottery from Muel in the collection of the Hispanic
Society of America, New York, 1930; Anónimo, Modern Sevillian pottery in the collection of the
Hispanic Society of America, New York, 1930; Anónimo, Lead-glazed pottery from Valencia in the
collection of the Hispanic Society of America, New York, 1930; Anónimo, Modern pottery from
Manises in the collection of the Hispanic Society of America, New York, 1930.
7
RUBIO CELADA, Abraham: De la tradición a la modernidad. Los Zuloaga ceramistas. Madrid,
UCM, 2004. Doc. L. 3. Carta fechada el 29 de diciembre de 1915.
8
Agradezco a Margaret Connors McQuade la información de que algunos de los azulejos de la
colección de la Hispanic proceden de anticuarios, José Gestoso, Guillermo de Osma, José Bargalló y
otros.
9
Fotografía tomada de CONNORS McQUADE, Margaret: "Las cerámicas españolas de la Hispanic
Society of America: Archer Milton Huntington y su museo". Boletín de la Sociedad Española de
Cerámica y Vidrio, Nº 38 - 4, 1999, Madrid, p. 357, fig. 8.
10
MAIER ALLENDE, Jorge: Jorge Bonsor (1855-1930). Un académico correspondiente de la Real
Academia de la Historia y la Arqueología Española. Madrid, Gabinete de Antigüedades de la Real
Academia de la Historia, 1999a.; MAIER ALLENDE, Jorge: Epistolario de Jorge Bonsor (1886-
1930). Comisión de Antigüedades. Real Academia de la Historia, Madrid, 1999b. Carta nº 39.
11
Maier Allende Carta nº 47.
12
Maier Allende Carta nº 71.
EL COLECCIONISMO DE CERÁMICA ESPAÑOLA EN LA HISPANIC SOCIETY OF AMERICA 187
13
Maier Allende Carta nº 53.
14
Maier Allende Carta nº 54.
15
Maier Allende Carta nº 73.
16
Maier Allende Carta nº 72.
17
Maier Allende Carta nº 74.
18
Maier Allende
19
Maier Allende Carta nº 81.
20
Tanto la figura 5 como la 6 me fueron proporcionadas por Margaret Connors McQuade cuando
hacía mi tesis doctoral en 1995.
21
Rubio Celada (2004). Doc. U. 11. 1. Fechado el 23 de febrero de 1931. El 14 de marzo Huntington
les contesta dándoles las gracias (doc. U. 11. 2.).
22
Rubio Celada (2004), doc. U. 11. 3. Fechado el 6 de abril de 1931.
23
Publicado en SÁNCHEZ-CABEZUDO, Ángel: "El primer Quijote en la cerámica de Talavera", La
cerámica española y Don Quijote. Talavera de la Reina (2005), pp. 60-67. Agradezco a Ángel Sánchez-
Cabezudo el que me proporcionara la imagen de la figura 7.
24
Sánchez-Cabezudo (2005), p. 61.
25
Connors McQuade (1999), p. 356, fig. 10.
26
Agradezco a Philippe Avila la información sobre esta subasta y las piezas españolas que se subasta-
ban en ella.
27
SESEÑA, Natacha (Comisaria): Las lozas de Talavera y Puente. Madrid, 1989, p. 99, ficha 59.
28
Connors McQuade (1999), p. 354.
29
Connors McQuade (1999), p. 356, fig. 6.
30
Connors McQuade (1999), p. 356, fig. 7.
31
CONNORS MCQUADE, Margaret: "Gollete" en Los jarrones de la Alhambra Simbología y Po-
der, Granada, Patronato de la Alhambra y Generalife, 2006, p. 172.
32
MARTÍNEZ CAVIRÓ, Balbina: Cerámica Hispanomusulmana. Madrid, El Viso, 1991, p. 137.
33
COLL CONESA, Jaume: La cerámica valenciana. Apuntes para una síntesis. Valencia, AVEC-
Gremio, 2009, cap. IX, p. 83.
34
Agradezco a Ángel Sánchez-Cabezudo el que me proporcionara la imagen de la figura 16.
35
Connors McQuade (1999), p. 355, fig. 5.
36
ÁLVARO ZAMORA, Mª. Isabel: Cerámica aragonesa, Vol. II, Zaragoza, 1999, p. 60, fig. 69.
37
Álvaro Zamora (1999), p. 94, fig. 112.
38
La mayor parte de las piezas fueron adquiridas en 1999, según me informa Margaret Connors
McQuade.
39
CONNORS McQUADE, Margaret: Splendor of Alcora: Spanish Ceramics of the Eighteenth Century
in the Collection of the Hispanic Society of America, New York, 2001, p. 7.
188 ABRAHAM RUBIO CELADA
40
CONNORS McQUADE, Margaret: "Catálogo", Alcora en New York: la colección de cerámica de
Alcora, The Hispanic Society of America. Castellón de la Plana, 2005.
41
WILSON FROTHINGAM, Alice: Tile panels of Spain 1500-1650. New Yor, The Hispanic Society
of America, 1969.
42
La entrevista fue realizada en 1977 en New York. Tomado de ESPINOSA FERNÁNDEZ, Noemí:
La fotografía en los fondos de la Hispanic Society of America: Ruth Matilda Anderson. Toledo,
Universidad de Castilla La Mancha, 2010, p. 243.
43
Maier Allende (1999), Carta nº 81.
44
Maier Allende (1999), Carta nº 87.
45
Anónimo, Modern pottery from the Basque (1930).
46
Anónimo, Modern Sevillian pottery (1930).
47
Anónimo, Lead-glazed pottery from Valencia (1930).
EL COLECCIONISMO DE TEJIDOS
Y HUNTINGTON
E
l siglo XIX fue un momento en que el coleccionismo tuvo un gran
auge, relacionado con varios factores, la guerra de Independencia y,
en general, el conflicto de las guerras napoleónicas que provocó que
el patrimonio fuera saqueado como botín de guerra; la venta de las grandes
colecciones nobiliarias debido al declive de las grandes familias aristocráti-
cas y, en el caso español, las sucesivas desamortizaciones de los bienes de la
Iglesia2.
Todo ello dio nuevas alas a los nacientes museos y a los coleccionistas
de arte, procedentes de la pujante burguesía que harán acopio de estas colec-
ciones. Los tejidos serán una de las piezas más apreciadas por su rareza,
pero también darán lugar a un coleccionismo especializado tanto en España
como Europa y Estados Unidos que derivará en alguno de los museos y
colecciones textiles más importante en la actualidad3.
El coleccionismo textil tiene su origen en el atesoramiento de los teji-
dos, vestiduras, tapices, alfombras y paramentos murales por parte de las
grandes casas solariegas e instituciones eclesiásticas como parte de su ri-
queza. Estos tesoros, muchos de ellos iniciados en la Edad Media, empeza-
ron a ser conocidos y reconocidos en el siglo XIX, gracias en parte a las
exposiciones internacionales, la primera celebrada en Londres en 1851. En
estas grandes exposiciones, las Exposiciones Universales actuales, cada país
mostraba tanto su patrimonio histórico como sus novedades industriales (fig. 1).
En el caso de España, su pabellón reunía desde productos procedentes
de sus colonias de Filipinas o Cuba, como a una maqueta en yeso una de las
paredes de La Alhambra4, el éxito de esta pieza hizo que en cada una de las
siguientes exposiciones, siempre hubiera una maqueta de este monumento.
190 ANA CABRERA LAFUENTE
COLECCIONISMO DE TEJIDOS
Los tejidos son por su fragilidad, derivada de la materia prima orgánica
con la que están hechos, uno de los bienes culturales más delicados y que
menos han sobrevivido al paso del tiempo, en comparación con otros obje-
tos en cerámica, metal, etc.
Este hecho junto con el importante papel que los tejidos han jugado en
el desarrollo económico de España, y Europa8 en general, desde la Edad
Media hasta finales del siglo XIX y principios del siglo XX9 y la abundancia
de referencias a los tejidos en las fuentes escritas10, hace que su compra por
coleccionistas sea casi una especialidad.
Su especificidad es tal que también nos encontramos con marchantes
especializados en el comercio de tejidos antiguos. El papel que los coleccio-
nistas y marchantes especializados jugaron en la dispersión de tejidos de
procedencia española está todavía por estudiar, pero a la vista de las colec-
ciones en museos europeos y americanos debió de ser importante11 .
¿Qué coleccionistas de tejidos había a finales del siglo XIX y princi-
pios del siglo XX? En España nos encontramos con que la gran mayoría se
encuentran radicados en Cataluña, las razones de ello se relacionan con su
importante industria textil y patrimonio textil acumulado, en instituciones
eclesiásticas mayoritariamente. En el resto de España será Madrid otro de
los centros de coleccionismo de tejidos12.
Entre los coleccionistas catalanes13 había artistas como Josep Pascó y
Gaspar Homar14, industriales como Cabot o Bosch i Catarineu15, o personas
con un amplio conocimiento en arte como Miquel i Badia, Rocamora, etc.
Estos coleccionistas ayudaron a desarrollar los museos catalanes y sus co-
lecciones gracias a su participación en las distintas exposiciones que dieron
a conocer este importante patrimonio catalán. Un aspecto que destaca es que
se conocían entre ellos y que eran rivales en la adquisición de piezas. Ade-
más se ha documentado el intercambio de tejidos entre como Gaspar Homar
con el Museo Episcopal de Vic y, a nivel internacional, está documentado el
intercambio entre Emili Cabot y la Chambre du Commerce de Lyon (em-
brión del actual Musée des Tissus de esta ciudad)16 .
Sus colecciones eran conocidas y apreciadas, de hecho a la muerte de
Miquel i Badia su importante colección17 fue puesta a la venta; el conjunto
de tejidos fue inventariada y publicada por Pascó para su venta en 1900 (fig.
2). La colección fue comprada por J. P. Morgan18 y en la actualidad los
tejidos se encuentran el Copper Hewitt de Nueva York19. Esta venta y su
salida del país fue muy sonada y discutida y, cuando Josep Pascó falleció y
192 ANA CABRERA LAFUENTE
2. Portada del libro con el inventario de la colección de tejidos de Miquel i Badia (Biblio-
teca del Museo Nacional de Artes Decorativas, Madrid, G-279).
EL COLECCIONISMO DE TEJIDOS Y H UNTINGTON 193
Este listado es un buen resumen del tipo de tejidos que estaban en boga
en el mercado del arte desde mediados del siglo XIX hasta mediados del XX
y de los precios que estas piezas tenían, realmente altos, lo que indica por un
lado su aprecio por los coleccionistas y, por otro, su escasez. Varias cosas
llaman la atención:
- La precisión en la descripción técnica de los tejidos con el uso de los
términos bouclé y lamé (subrayados en el listado original). Estás palabras
francesas describen que el hilo metálico está bucleado y lamé identifica que
el fondo del tejido es de hilo metálico. Estas características eran comunes en
los terciopelos y brocateles españoles e italianos del XV y XVI.
- La adquisición de tejidos no españoles, descritos como venecianos o
italianos, alguno con interrogante.
- La precisión de la procedencia de algunos, como el primero proceden-
te de la tumba de la mujer del hijo de Fernando III, el infante D. Felipe
enterrado en Villalcázar de Sirga. Varios proceden de iglesias o conventos
desconocidos pero uno de ellos fue visto por el barón Davillier en su viaje
por España.
La adquisición a través de Madrazo, uno de los personajes más intere-
santes en relación con la compra-venta de arte español, muestra las relacio-
nes de Huntington con un círculo de personas vinculadas al mundo del arte
y a la élite intelectual española.
EL COLECCIONISMO DE TEJIDOS Y H UNTINGTON 197
4. Tejido de la colección del Museo Nacional de Artes Decorativas publicado por Stapley
en 1924 (lám.71).
6. Alfombra con los escudos de María de Castilla, manufactura de Letur, posterior a 1416.
Cortesía de The Hispanic Society of America (H928).
202 ANA CABRERA LAFUENTE
NOTAS
1
Este artículo forma parte del proyecto I+D: Las manufacturas textiles andalusíes: caracterización y
estudio interdisciplinar (HAR2014-54918-p) dirigido por la Dra. L. Rodríguez Peinado.
2
Para un resumen del patrimonio español fuera de España a consecuencia de estos factores ver:
GAYA NUÑO, Juan Antonio: La Pintura Española fuera de España: Historia y Catálogo. Madrid:
Espasa-Calpe, 1958.
3
Musée des Tissus de Lyon, Abegg-Stiftung de Berna, Textile Museum de Washington, Museo Episcopal
de Vic, Museu Tèxtil i d’Indumentaria de Barcelona (ahora Museu de Disseny). Otras instituciones
con importante colección de tejidos son Victoria and Albert Museum, Metropolitan Museum de Nue-
va York, Musée des Tissus de Lyon, Royal Ontario Museum de Toronto, etc.
4
MÉNDEZ RODRÍGUEZ, L. R.: "La Gran Exposición de Londres de 1851. Un nuevo público para
el mundo", Artigrama, 21, 2006, p. 38.
5
Sobre el origen de los museos de artes decorativas, y en concreto el caso español véase: CABRE-
RA LAFUENTE, A.y VILLALBA SALVADOR, M.: "Museo Nacional de Artes Decorativas (Ma-
drid). De Museo Industrial a Museo Nacional de Artes Industriales (1850-1912)", Revista de
Museología, 30-31, pp. 81-88.
6
Son aquellas manufacturas realizadas en al-Andalus entre los siglos X-XIII, los de la etapa posterior
son conocidos como nazaríes.
7
Sobre el gusto por los tapices, MÉNDEZ RODRÍGUEZ, L. R.: "La Gran Exposición de Londres de
1851. Un nuevo público para el mundo", Artigrama, 21, 2006, pp. 23-42.
8
Siguiendo a Lombard (1978) que considera a la industria textil en la Edad Media a un nivel de
desarrollo superior en comparación con otras producciones. En el caso de los tejidos además está el
nivel de desarrollo que conlleva su producción con el cultivo de fibras y tintes, la tintura de fibras,
tejeduría, su comercio y venta, acabando con el corte y confección de prendas derivadas de estas
telas.
9
A mediados del siglo XIX se produce la invención de los tintes artificiales que supuso para Francia
la perdida de una importante fuente de ingresos derivados del cultivo de planta pastel (o glasto) con
el que se obtenía el color azul para los Tejidos. CARDON, D.: Le monde des teintures naturelles,
París: 2003, p. 101.
10
Baste como ejemplo: MICHEL, Francisque: Recherche sus le commerce, la fabrication et l’usage
des e´ttofes de soi, d’or et d’argent et autres tissus précieux en Occident, pricipalement en France
pendant le Moyen Âge, París: 1854 para Francia o ALFAU DE SOLINUNDE, J.,: Nomenclatura de
los tejidos españoles del siglo XIII, Madrid: Real Academia Española, 1969.
11
Un buen ejemplo puede verse en AGUILÓ ALONSO, Mª P.: "La fortuna de las colecciones de Artes
Decorativas españolas en Europa y América: estudios comparativos", El Arte español fuera de Espa-
ña, 2003, pp. 276-289.
EL COLECCIONISMO DE TEJIDOS Y H UNTINGTON 203
12
LÓPEZ REDONDO, A.: "Procedencia catalana de algunas piezas hispano-musulmanas de la co-
lección Lázaro Galdiano", Datatèxtil, 22 (2010), pp. 6-10.
13
Un resumen del coleccionismo textil catalán se puede ver en CARBONELL, S., 2009: "Los inicios
del coleccionismo textil en Cataluña", DataTextil, 20 2010, pp. 6-27 y en el discurso de ingreso de
Torrella a la Reial Acadèmia Catalana de Belles Arts de Sant Jordi. TORRELLA NIUBÓ, F.: El
col·leccionisme tèxtil a Catalunya, discurso de ingreso a la Reial Acadèmia Catalana de Belles Arts
de Sant Jordi, Barcelona: Reial Acadèmia Catalana de Belles Arts de Sant Jordi, 1988.
14
Sobre Homar, véase: FONDEVILA, M. Àngels: Gaspar Homar, Moblista i dissenyador del
modernisme, catálogo de la exposición, Barcelona:, Fundació “La Caixa”, 1998.
15
Para una breve semblanza de este importante coleccionista, véase: FOLCH I TORRES, Joaquim:
"Ròmul Bosch i Catarineu", Butlletí dels Museus d’Art de Barcelona, 61, VI-1936, p. 187. Fondevila
(1998).
16
CABRERA LAFUENTE, Ana: "La colección de tejidos egipcios de la Antigüedad tardía y Edad
Media del Museu Tèxtil y d’Indumentària de Barcelona" en RODRÍGUEZ, L. y CABRERA, A.,
(eds.): La investigación textil y nuevos métodos de estudio, Madrid, Instituto del Patrimonio Cultural
de España, 2014, pp. 146-158. Forma parte de la tesis doctoral de la autora.
17
ALSINA COSTABELLA, Laia: "La colección de artes decorativas de Francisco Miquel y Badia
(1840-1899)" en PÉREZ MULET, Fernando y SOCIAS BATET, Immaculada, (eds.): La dispersión
de objetos de arte fuera de España en los siglos XIX y XX, Barcelona: Universitat de Barcelona;
Cádiz: Universidad de Cádiz, 2011, pp. 17-34.
18
Destaca Morgan por comprar a colecciones completas, más que obras sueltas.
19
Muchas piezas, si no todas, están accesibles ahora a través de la web del museo norteamericano.
20
CABRERA LAFUENTE, Ana: La industria textil copta: la colección de tejidos de la Antigüedad
Tardía y Edad Media del Museu Textil i d'Indumentaria de Barcelona, 2015, pp. 55-56 y nota 194.
Madrid (tesis doctoral inédita),
21
Para conocer su colección que se vendió en Nueva York véase: Catalogue of the collection of the
conde de las Almenas, Nueva York: American Art Association, 1927.
22
No sólo con un importante apartado en tejidos
23
A. López ha destacado el importante papel de Lázaro en relación con el coleccionismo de tejidos
(véase. LÓPEZ REDONDO, A.: "Procedencia catalana de algunas piezas hispano-musulmanas de la
colección Lázaro Galdiano", Datatèxtil, 22, 2010, pp. 6-29.; LÓPEZ REDONDO, A.: "José Lázaro y
su colección de tejidos hispanomusulmanes" en RODRÍGUEZ PEINADO, L. y CABRERA
LAFUENTE, A. (eds.): La investigación textil y los nuevos métodos de estudio, pp. 161-169, 2014.
[http://www.flg.es/images/publicaciones/investigacion-textil-nuevos-metodos.pdf].
24
En un comentario recogido por LÓPEZ REDONDO, A.: "José Lázaro y su colección de tejidos
hispanomusulmanes" en Rodríguez Peinado y Cabrera Lafuente (2014), nota 36, p. 165, "El señor
Lázaro tiene como coleccionista un terrible rival: la señora Lázaro.... Mi señora es propietaria de los
libros miniados, las telas, los abanicos". Según López Redondo por la documentación conservada es
Lázaro quien selecciona las piezas, incluidos los tejidos.
25
[Catálogo] (1916); [Catálogo] (1917) y FERRANDIS, J.: Catálogo de la exposición de alfombras
antiguas españolas. Madrid: Sociedad de Amigos del Arte, 1933.
26
Weissberger aparece como la fuente para la salida de obras tan importante como la Madonna Khan
en la National Gallery de Washington <http://www.nga.gov/content/ngaweb/Collection/art-
objectpage.37004.html>, [última consulta 10 de enero de 2015]. Vid. AGUILÓ, ALONSO, Mª P.,
"La fortuna de las colecciones de Artes Decorativas españolas en Europa y América: estudios compa-
rativos" en El Arte español fuera de España (2003), pp. 275-290, nota 10, p. 278, y notas 22-23, p.
282. Su colección fue vendida en Nueva York en 1921 (véase. Spanish Art Treasures (1921), catálo-
go de la venta de la colección H. P. Weissberger, Nueva York. El Museo Nacional de Artes Decorati-
vas conserva en su biblioteca un ejemplar con los precios de remate de esta venta.
27
Entre los coleccionistas de tejidos destacan Werner Abegg, Robert Lehman, entre otros.
28
W. Abegg fundó un museo en Berna, su centro de conservación es pionero en la conservación de
tejidos.<http://www.abegg-stiftung.ch/e/museum/museum_d.html>
29
R. Lehman banquero norteamericano, legó su colección al Metropolitan Museum de Nueva York
<http://www.metmuseum.org/about-the-museum/museum-departments/curatorial-departments/the-
robert-lehman-collection>. Su colección de tejidos europeos esta publicada. MAYER, C.: The Robert
Lehman Collection. European Textiles. Nueva York, 2001.
30
Su archivo anterior a la II Guerra Mundial fue quemado, pero se conservan en el Los Angeles
County Museum su archivo entre 1939 y 1988 documentación recogida en http://research.frick.org/
directoryweb/browserecord.php?-action=browse&-recid=6104 [ última consulta 10 de enero de 2015].
31
Sobre Harris y su Spanish Gallery, véase. GLENDINNING, N. y MACARTNEY, H.: "Spanish Art
in Britain and Ireland 1750-1920" en Studies in Memory of Enriqueta Harris, Woodbridge, 2010, pp.
XV-XVI, con un capítulo dedicado a los vendedores y marchantes en relación con la pintura españo-
la.
32
HERRERA, Isabell: Catalogue d’ettofes anciennes et modernes. Bruselas: Vramont, 1907.
33
ROSSER-OWEN, M.: "Andalusi and Mudéjar silks textiles in the Victoria And Albert Museum: A
scholl of design in this beautiful class of Sumptuary Art" en RODRÍGUEZ PEINADO, L.y CABRE-
RA LAFUENTE, A., (eds.): La investigación textil y los nuevos métodos de estudio. Madrid, Funda-
ción Lázaro Galdiano, 2014, pp. 170-184.
34
La información sobre la colección de tejidos atesorada por Huntington y conservada en la Hispanic
Society procede de las siguientes obras DEL ALAMO MARTÍNEZ, C.: "La colección de tejidos de la
Hispanic Society of America" en L´Art des Velluters. Sedería de los siglos XV-XVI, catálogo de la
exposición, 2011, pp. LXXXV-XCVI; F. May, 1936: Catalogue of Laces and Embroideries in the
collection of the Hispanic Society of America, Nueva york; F. May, 1938: "Textiles, laces and
embroideries" en The Hispanic Society Handbook Museum and Library collections, pp. 273-310.
F. May, 1957: Silk textiles of Spain, Eighth to Fifteenth centuries, Nueva York.
F. May, 1977: Rugs of Spain and Morocco, The University Chicago Press.
35
Véanse los textos de J. Maier y J. Mª Luzón en este mismo volumen.
36
Del Alamo Martínez (2011), p. LXXXVII. En la página web de la institución data la adquisición de
este conjunto en ca. 1904. <http://www.hispanicsociety.org/hispanic/textiles.htm>.
37
Conviene recordar que hasta 1914 no se promulga la primera Ley sobre Patrimonio que impone
restricciones a la salida de arte y patrimonio pero que no evita la salida y venta en el extranjero de la
colección del Conde de las Almenas o de Weissberger en 1921.
38
RODRÍGUEZ BERNIS: "Coleccionismo e historicismo: gusto y comercio" en ANTIGÜEDAD
DEL CASTILLO-OLIVARES, María Dolores: ALZAGA RUIZ, Amaya (coords.): Colecciones, ex-
polio, museos y mercado artístico en España en los siglos XVIII y XIX. Madrid, Centro de Estudios
Ramón Areces, 2011, pp. 85-91.
39
Del Alamo Martínez (2011), pp. LXXXV-XCVI.
40
Para ver un resumen de la colección véase. Art dels Velluters (2011).
41
Del Alamo Martínez (2011), p. XC.
42
Las hojas del listado fueron publicadas en Del Alamo (2011), p. LXXXVIII, fig. 4.
43
De la primera pieza hay fragmentos dispersos por varios museos como Instituto Valencia de Don
Juan, Musées Royaux de Bruselas, Copper Hewitt de Nueva York, Rijksmuseum, entre otros.Rosser-
Owen (2014), p. 172, nota 15. Igual de dispersas están los fragmentos del Terno de San Valero.
Ambos conjuntos se conservan en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid y en el Museu de
Disseny de Barcelona, respectivamente.
44
Rosser-Owen (2014), p. 173, notas 20 y 21.
45
CABRERA LAFUENTE, Ana: "La colección de tejidos egipcios de la Antigüedad tardía y Edad
Media del Museu Tèxtil y d’Indumentària de Barcelona" en Rodríguez y Cabrera (2014), pp. 140-
141.
46
HEIMAN, M.: "Terciopelos en la colección de la Hispanic Society of America" en L´Art des Velluters.
Sedería de los siglos XV-XVI, catálogo de la exposición en el Centro Cultural del Carmen de Valencia
y en el Museo de Bellas Artes de Castellón (2011-2012), pp. XCVII-CIV.
47
NAVARRO ESPINACH, G.: "Las ordenanzas más antiguas de Veluuters, 1479-1491. Auge del
comercio sedero y edificación de la lonja", L´Art des Velluters. Sedería de los siglos XV-XVI, catálo-
go de la exposición, 2011, pp. XXIII-XLIX.
48
Heiman (2011-2012), pp. XCVII-CIV.
49
MAY, F.: Catalogue of Laces and Embroideries in the collection of the Hispanic Society of America.
Nueva York, Hispanic Society of America, 1936.
50
Del Alamo Martínez (2011), p. XCII.
51
STAPLEY BYNE, M.: Tejidos y bordados populares españoles, Madrid: Voluntad, 1924.
52
Véase el texto de Dimitra GKOZGKOU en este mismo volumen sobre este tema.
53
Su archivo se guarda en la Residencia de Estudiantes de Madrid <http://www.residencia.csic.es/
bol/num8/mpedagogico.htm> [última consulta 10 de enero de 2015].
54
Los trabajos en español al respecto y de la misma época son los publicados por C. BERNIS,
solamente sobre los tejidos andalusíes (hispanomusulmanes). BERNIS, C.: "Tapicería hispano-mu-
sulmana (ss. IX-XI)". Archivo español de Artes, 27, nº 107, 1954, pp. 108-211; BERNIS, C.: "Tapi-
cería hispano-musulmana (ss. XIII-XIV)". Archivo español de Artes, 29, 1956, pp. 95-115.
.
APENDICE DOCUMENTAL
.
.
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE
ARCHER M. HUNTINGTON CON GUILLERMO DE
OSMA Y JAVIER GARCÍA DE LEANIZ*
E
l Instituto de Valencia de Don Juan custodia un importante patri-
monio documental que ha llegado hasta nuestros días gracias a
donaciones y compras.
Entre este legado documental que incluye libros impresos, documentos
medievales en pergamino, manuscritos encuadernados en forma de libro1,
destaca por su gran interés para los historiadores de la España del XVI, el
archivo de la cancillería del secretario de Felipe II, Mateo Vázquez, proce-
dente de la casa de Altamira2.
Además de esta documentación, existe en el Instituto de Valencia de
Don Juan, un fondo muy importante y de gran interés histórico; se trata de la
correspondencia cruzada entre Archer M. Huntington, fundador de la Hispanic
Society of America, con Guillermo de Osma, fundador del Instituto de Va-
lencia de Don Juan y con Javier García de Leaniz, Secretario de este Institu-
to, que está formada aproximadamente por 96 cartas, manuscritas y meca-
nografiadas con una extensión cronológica que abarca desde los años 1914
hasta 1934 y que constituye por si misma un fondo digno de conocimiento y
de consulta.
En este estudio se analiza el intercambio epistolar entre Archer M.
Huntington con Guillermo de Osma y con Javier García de Leaniz desde
1914 a 1934 y desde el punto de vista del coleccionismo.
Esta correspondencia se engloba dentro del fondo documental que he-
mos denominado Hispanic Society of America. De estas cartas cruzadas se
conservan 33 de Archer M. Huntignton a Guillermo de Osma, 11 de Guillermo
de Osma a Archer M. Huntingon, 15 de Archer M. Huntington a Javier García
de Leaniz, 8 de Javier García de Leaniz a Archer M. Huntington y 12 que
hemos denominado Correspondencia varia.
210 MªÁNGELES SANTOS QUER
PERFIL BIOGRÁFICO DE
GUILLERMO DE OSMA Y JAVIER GARCÍA DE LEANIZ
a finales del siglo XVIII emigró a Perú donde desempeñó "altos cargos en la
Audiencia de Lima". Huérfano de madre desde los cinco años, Guillermo
tuvo dos hermanos: Emilia y Juan Ignacio4.
Guillermo de Osma cursó los bachilleratos de Letras y Ciencias en la
Sorbona, donde recibió una excelente educación francesa. A los 18 años se
trasladó a Oxford donde se matriculó en el Pembroke College en 1871. En
1874 era Bachelor in Arts y en 1879 Magister Artium, adquiriendo una for-
mación británica permanente en su vida.
En el año 1879 ingresó en la carrera diplomática española, desempe-
ñando diversos puestos en Madrid, París y Londres.
En el año 1884 comenzaron sus "dolencias" físicas y psicológicas que
ya no le abandonarían de por vida, que describiría detalladamente en cartas
y pequeños diários y que le llevaron a frecuentar, con cierta exagerada asi-
duidad, los medicos y balnearios mas reputados de Europa y a dimitir o
rehusar cargos políticos con no menor frecuencia5…
Desde su matrimonio el 1 de mayo de 1888 con Doña Adelaida Crooke
y Guzmán, hija de Don Juan Bautista Crooke y Navarrot y de Doña Adelaida
de Guzmán, vigésimo cuarta condesa de Valencia de don Juan, dama de una
gran cultura y exquisita sensibilidad, cesó en su cargo diplomático, se esta-
bleció en Madrid y se inició en la carrera política gracias a su amistad y
parentesco con Antonio Cánovas, casado con su prima Joaquina de Osma y
Zavala.
En 1891 fue elegido diputado por el distrito de Monforte de Lemos, en
calidad de conservador, manteniendo este cargo ininterrumpidamente hasta
1919. Canovista por convicción, desempeñó cargos de cierta envergadura
relacionados con la economía pública : delegado oficial en la Conferencia
Internacional Monetaria de Bruselas, subsecretario del Ministerio de Ultra-
mar, del último Gobierno de Cánovas en 1895 (cargo del que dimitió en
1897 alegando motivos de salud) y subsecretario de Hacienda, en 1899, del
primer Gobierno de Silvela, con Villaverde.
Bajo la presidencia de Antonio Maura fue dos veces Ministro de Ha-
cienda en los años 1903-1904 y 1907-1908. Promulgó la ley de Alcoholes y
la de Azúcares.
Su actividad se centra en la política monetaria –“saneamiento de la
moneda” – y después, en la reforma de los aranceles de aduanas y de los
impuestos al consumo. Reguló el ingreso y ascenso de los funcionarios con
principios de profesionalidad contra el favoritismo, por lo que fue nombra-
do en 1907 Protector de la Asociación Nacional de Funcionarios del Esta-
do6.
Pasó por la política de forma breve pero intensa y conflictiva, se retiró
en febrero de 1908 por “imperiosos motivos de salud”, aunque continuó
212 MªÁNGELES SANTOS QUER
siendo miembro del Consejo de Estado desde 1916 (llegando a ser su Presi-
dente en 1919, aunque dimitió a los pocos meses… por motivos de salud)7.
Estuvo condecorado con la Gran Cruz de Carlos III, la Gran Cruz del
Mérito Naval y la Legión de Honor Francesa (fig. 1).
Siguió manteniendo una correspondencia regular con Maura y más tar-
de con Dato.
La escisión definitiva del Partido Conservador le produjo un gran des-
engaño político y personal, dedicándose desde entonces por completo al
arte y al coleccionismo, que hasta entonces habían ocupado todo su tiempo
libre de la política (lo que incrementó el número de sus viajes internaciona-
les… entre balneario y balneario)8.
Fue miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas
(1906), académico de Bellas Artes de San Fernando (1908), de la de las
Buenas Letras de Barcelona, de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo
(1917), de la de Nobles Artes de Córdoba, miembro del Patronato de la
Alhambra, socio de la Society of Antiquaries of London y en 1918 de la
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 213
Hispanic Society of America de Nueva York, así como doctor honoris causa
por la Universidad de Gales.
Fue realmente un gentleman apasionado del arte, perfeccionista e hipo-
condriaco9.
Experto en cerámica medieval y azabaches compostelanos. Temas de
los que publicó varios estudios. Cuando murió estaba preparando la biogra-
fía del Secretario de Felipe II, Mateo Vázquez, la historia de la colección
documental del conde de Altamira y el catálogo de cerámica de reflejo me-
tálico del Instituto de Valencia de Don Juan10.
Don Guillermo de Osma y su esposa, Doña Adelaida Crooke hereda-
ron, a la muerte del vigésimo tercer conde de Valencia de Don Juan, en
1904, Don Juan Bautista Crooke, una valiosa colección de piezas artísticas
y el importante archivo histórico (del que ya hicimos alusión al principio de
este estudio) – procedentes en parte de las casas de Oñate y Altamira.
El matrimonio fue ampliando la colección con gran variedad de piezas,
sobre todo de cerámica española, su gran afición.
Nunca se trató de un coleccionismo obsesivo el de estos mecenas, pri-
maba sobre todo la calidad, que fue lo que les hizo reunir un conjunto de
obras tan singulares11.
Como Guillermo de Osma y Adelaida Crooke no tuvieron descenden-
cia directa, decidieron de mutuo acuerdo, hacer una Fundación que conser-
vara en un futuro este conjunto de gran valor – encargando al arquitecto
Vicente García Cabrera el proyecto de un museo unido a su vivienda, en la
madrileña calle Fortuny.
En 1916 dieron el paso decisivo en la creación del Instituto de Valencia
de Don Juan, fundación formalizada jurídicamente el día 15 de marzo ante
el notario don Modesto Conde Caballero, quedando instituido legalmente
con el fin de que sirviera para "conservar reunidas las colecciones, acrecen-
tarlas y promover las relaciones arqueológicas de España con otros países".
A medio camino entre el museo de "exhibición" y el centro de investi-
gación, no pasaría a depender del Estado, quedó vinculado a la Universidad
de Oxford, al British Museum y a la Hispanic Society de Nueva York.
La fundación del Instituto llevaría el título de la condesa de Valencia de
Don Juan, en memoria de sus padres, encargando a un Patronato la custodia
de su patrimonio y mantenimiento12.
Para Osma los patronos debían ser “personas de carácter que integren
el concepto de hombres de conciencia”. El primer patronato estuvo forma-
do, entre otras importantes figuras de la cultura, por Don Antonio Maura,
Don Miguel Asín y Palacios, el duque de Alba, sir Hercules Read, director
del British Museum y el gran hispanista Archer Milton Huntington, presi-
dente y fundador de la Hispanic Society of America, en Nueva York.
214 MªÁNGELES SANTOS QUER
NOTAS
*
Agradecemos a Antonio Bonet Correa su interés y generosidad por haber considerado
oportuno publicar este trabajo.
1
Estos fondos proceden de las casas de Oñate, Montealegre y Villaumbrosa.
2
Sobre la historia de esta colección documental, véase ANDRÉS, Gregorio de: La funda-
ción del Instituto y museo de Valencia de Don Juan. Ayuntamiento de Madrid. Aula de
Cultura. Instituto de Estudios Madrileños. Madrid, 1984, pp. 21-24.
3
Los asuntos personales aunque ocupan un lugar pequeño y poco prominente, no dejan al
mismo tiempo de aparecer en algunas de las cartas.
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 223
4
Los datos biográficos pueden verse en GONZÁLEZ HERNÁNDEZ, María Jesús:
“Guillermo de Osma o los avatares de un proteccionista preocupado”, en La Hacienda
desde sus ministros. Del 98 a la guerra civil. Zaragoza : Prensas Universitarias de Zarago-
za, 2000, pp. 69 y ss.
5
González Hernández (2000), p. 65.
6
Véase GARCÍA ORMAECHEA ROMERO, Rafael: Diccionario Biográfico español.
T.XXXIX, Real Academia de la Historia, Madrid 2009-2013, p. 217.
7
González Hernández (2000), pp. 86-87.
8
González Hernández (2000), p. 88.
9
Véase PARTEARROYO LACABA, Cristina: Mecenazgo en una casa-museo de colec-
cionista. El Instituto de Valencia de Don Juan. Museos y Mecenazgo. Nuevas aportaciones
(17-19 octubre de 2007), p. 116.
10
Andrés (1984), p. 18.
11
Partearroyo Lacaba (2007), p. 120.
12
Partearroyo Lacaba (2007), p. 121.
13
A history of the Hispanic Society of America Museum and library 1904-1954. With a
survey of the selection by members of the staff. Printed by order of the Trustees. New York,
1954, p. 7.
14
Sánchez Canton, F.J.: Catálogo de las pinturas del Instituto de Valencia de Don Juan.
Madrid, 1923, p. 98.
15
Sánchez Cantón (1923), núm. 43, pp. 98-100.
16
Partearroyo Lacaba (2007), p. 128.
17
BARRIO MOYA, José Luis: “Un coleccionista atípico : Don Guillermo Joaquín de Osma”.
Goya núm. 267 (1998), pp. 369-370.
18
La mayoría de esta correspondencia son cartas, pero también se han conservado algunas
minutas (borradores), escritos muchos de ellos en un papel de color beige, muy frágiles.
19
Conforme a su visión de que la Hispanic Society fuera lo más completa posible, Huntington
determinó que incluiría un archivo fotográfico de costumbres españolas, así como de arte.
Él sabía desde muy joven lo útil que estas imágenes podrían se para el investigador, al
reunir una colección impresionante para sus estudios de la pintura española. En 1913 y de
nuevo en 1920, reconoció la necesidad de reunir un extenso archivo fotográfico.
LENAGHAN Patrick: “Archer M. Huntington y las fotografías sobre arqueología españo-
la” en El Tesoro arqueológico de la Hispanic Society of America. Catálogo de la exposi-
ción celebrada en el Museo Arqueológico Regional, Alcalá de Henares, Madrid (Diciem-
bre 2008 – Abril 2009), Madrid, 2008, pp. 218 y 220.
20
Arthur Byne fue un hispanista y fotógrafo de reconocido prestigio, casado con la fotógra-
fa Mildred Stapley. El matrimonio trabajó incansablemente en la difusión y conocimiento
224 MªÁNGELES SANTOS QUER
de la cultura española a través de sus numerosas publicaciones ilustradas con sus magnífi-
cas fotografías, llegando a ser grandes marchantes de arte. Acerca de los Byne, puede ver-
se, MERINO DE CÁCERES, José Miguel: Arthur Byne y los monasterios extrañados:
Óvila y Sacramenia. Tesis Doctoral. Madrid. E.T.S. de Arquitectura, 1984.
21
Cuadro que representa las instalaciones de la Hispanic Society, expuesto en la biblioteca
del Instituto de Valencia de Don Juan. Donativo de Archer M. Huntington al Instituto de
Valencia de Don Juan. Aparece citado en el libro negro de la biblioteca: Relación de las
adquisiciones de objetos de arte y monedas realizadas por el Instituto de Valencia de Don
Juan. Septiembre, año 1926. 47 (a).
EPISTOLARIO TEXTUAL
Se ha incluido la transcripción original de toda la correspondencia. Así
pues aparece el texto completo de las aproximadamente 96 cartas, con los
huecos y dudas que se muestran. La carta de Guillermo de Osma a Archer
M. Huntington, que aparece con el nº 42 con fecha del 22 de mayo de 1921
está incompleta, debido a las dudas que teníamos con las letras a la hora de
hacer la transcripción. Hemos dejado la deletreación, tal y como la pusieron
los corresponsales, modificando a veces la acentuación.
Se han incluido los epistolarios de forma independiente, no intercalan-
do las cartas entre sí, según una ordenación cronológica, ya que las cartas de
Guillermo de Osma (la gran mayoría) y las de García de Leaniz están escri-
tas en castellano, mientras que las de Archer M. Huntington lo están en
inglés. Todas las cartas, (excepto dos), como se dijo más arriba están fecha-
das y con su correspondiente lugar de emisión.
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 225
Nº 1
January 3, 1915
Recibida 23, 1916
Dear Osma:-
Before I forget it, and apart from all other things which to you
and myself are important, I want to write to ask your advice regarding the
possibility of securing for Columbia University a man as Professor of Spanish
literature. He need not speak English, though that would be an advantage,
but must be a first class scholar, a gentleman and a teacher. The salary is
$4000 to $5000 and I feel that such a man woul find the work agreable.
Perhaps you could let me know soon:- best wishes!
Yours always
Archer M. Huntington
Exmo. Sr.
Don Guillermo de Osma
17 Fortuny,
Madrid,
Spain
Nº 2
15 WEST 81 ST STREET
March 23!16.
Dear Guillermo :
President Butler is away a cenior? yet? during? the mater often
professor of Spanish to his attention. He returns . on the 3rd or 4 rd of April. In
the meantmin? I send you a thousand thanks and hope that you are well and
tahing? the best q care of yourself. I only wish you had come over this writen?.
Yours Archer
226 MªÁNGELES SANTOS QUER
Nº 3
15 WEST EIGHTY FIRST STREET
NEW YORK
May 24, 1916
Querido Amigo :
Regarding the matter of Mr. Onís, you no doubt have been
wondering what decisión was reached finally by Columbia University. I have
had one or two talks with Mr. Butler, President of the University, and from
what the told me, I am under the impress that they have decided to invite
him, and that he has already been telegraphed to, and that a definite offer has
been made. Of course I am most anxious that this should be the case, for I
am sure that Mr. Onís is just the man who would fill the requirements at
Columbia, and be able to use influence for the bettering of educational
conditions regarding Spanish, and Spanish Literature in this country. We are
badly in need of this influence. I hope that Mr. Onís will not feel any doubt
about the work or the position, as it is entirely in his hands, and the can
return to Spain should the matter not prove to be a satisfactory one. In any
event he would not thouble to take the position for any but a short time, all
which is in the right direction, and I earnestly hope that it may be a first step
towards the development of more facilities in this country for Spanish
educational development.
I am very disappointed not to have had an opportunity of seeing
you again. The time slips by and the War continues. We do not seem to see
any light on the horizon. There will be no doubt soon some change which
will make it possible for human relations to be resumed on a reasonable
basis, but at this time travel is uninviting. I more than ever regret that you
did not make up your mind to come to America this winter, for surely you
would not have regretted it.
What a disaster was that of the Granados family. I am glad to
know that they have raised a sum of money in this country which will be in
some measure adequate to the requirements of the family, but of course I do
not Know how far the income from this source will go.
Always yours
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 227
The papers q which you alphone? died not come and I am most interested in
your plans.
Do take care q yourself-
Your always.
Nº 4
OFFICE OF THE PRESIDENT
(A lápiz : Clla 25 Junio 1920)
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, June 7, 1920.
Yours faithfully,
Archer M. Huntington
Exmo. Sr.,
D. Guillermo Osma,
228 MªÁNGELES SANTOS QUER
Fortuny 17,
Madrid,
Spain
Nº 5
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, June 17, 1920..
Archer M. Huntington
Excmo. Sr.,
D. Guillermo Osma,
Fortuny 17,
Madrid, Spain.
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 229
TRADUCCION
Nº 6
OFFICE OF THE PRESIDENT
(A lápiz : Consultas nº 73)
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, July 21, 1920.
Your letter gives me some idea of what you will do for a month or
more, but I shall send this to Madrid and it will find you later. I am delighted
with your health, and hope Miss Tome had an influence for the good. I was
sure you would like her, and I believe her knowledge of her subject is unusual.
Though of that I really know Little as music is not form me:
PABLO BOSCH PHOTOGRAPHS:
230 MªÁNGELES SANTOS QUER
Nº 7
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, September 27, 1920
Dear Osma:-
I have received from Asín today a brief note stating that he has
discovered the fact that his manuscript has been concealed in your house,
and has been so concealed for a considerable time, and that in ypur absence
he was unable to do anything with it, but that he hopes on your return to find
it less difficult to solve the problema of its publication. I am still certain that
the worst posible place to publish this manuscript with its Arabic notes and
references is in New York. It should certainly be somewhere within reach of
the author, who, being an Arabist himself, can solve any problema of the
printer which may arise. Poor Mrs. Jordan’s strength would not be sufficient
to attack the problem. I do not say her intelligence, because I leave that to
your intelligence to infer. As to whether she has made a translation satisfactory
to Asín and yourself I shall know when you read it over. Probably not, -
which will give you an opportunity to insert blue pencil marks in the margin,
and generally improve the English construction, - which you are quite
competent to do and Mrs. Jordan possibly was not. I am anxiously awaiting
your verdict, - and I am also anxiously awaiting news of your return and
activities. There must be a great deal to do, and many things of which you
have not told me.
Oh, by the way, Riaño tells me that he has received from the
Academy or from the Secretary of the Academy, I forget which he said, a
statement that I did not acknowledge the set of Resolutions which you recall
you brought to me in Paris. I told him that it was in my memory very clearly
that you and I had worked up a letter to Maura together, and that I had given
the letter to you to take to Maura. Am I wrong in this? And does my memory
in this, as in other ways, show the approach of old age and fail me; In any
event, I am certain that an acknowledgment was sent, though I am not positive
whether it went by your hand or was placed in the mail box. Anyhow, you
saw it and can vouch that it was sent, - and will you please communicate
with whoever in Secretary and inform him that I have not neglected to send
an acknowledgment of the very extraordinary honor tendered to me by the
Academy on that occasion, - an honor I am not likely to forget and certainly
not likely to forget to acknowledge at that time. I am horrified to think that
anyone in the Academy could suppose such an omission had been made.
232 MªÁNGELES SANTOS QUER
Nº 8
OFFICE OF THE PRESIDENT
A lápiz : Cda 2 de Novbre/20)
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW
YORK, November 1, 1920.
I return to my first words in this letter and the impression which the
doorway has made upon me. It is really very charming.
Always faithfully yours,
Archer
Excmo. Sr.,
D. Guillermo Osma,
Fortuny, 17,
Madrid, Spain
Nº 9
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, November 15, 1920.
Nº 10
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, November 29, 1920.
the hope that the workmen will be out by February. Workmen in museums
drive one to distraction.
Your cables reached me duly and filled me with a true sense of
humiliation. Will you do me the great favor of presenting the expressions of
my profound appreciation of this honor, to the Authorities at the University?
I have no oficial notice from the University.
It was delightful to get a telegram from Maura, for whom I have so
great an admiration. The King, with wonderful courtesy and graciousness,
has seen fit to cable me kind words on the occasion, and I am more than ever
overwhelmed. Were it not for a lame foot, which is giving me some rather
bad hous, nothing could keep me from your fair land.
By the way, I had forgotten to tell you about that foot, though you
may have heard me talk of it. An old break in the ankle and toe bones,- I
turned it badly, - it swelled, - I refused to go to bed – and nature took its
course. Now a life of no exercise has seized this opportunity to fill the ankle
with rheumatic squeeks and twinges and my amiable nature is being ruined.
Otherwise, all to the good!
But here I am chattering away about myself when I should be
answering your words. I will look up the Becerril mark on the Custodia, and
do the best I can at a rubbing. You have a photograph I think, but I will send
another.
The suggestion that you might get prints of the Barna prhotographs
fills me with enthusiasm. The call for photographs at the Hispanic Society
grows with leaps and bounds. I would also suggest that if any are sent you
tell someone to indicate whether we have the right to print them, or, if not, to
whom we should refer those wishing to make use of them.
We must have photographs and photographs and more photographs.
It is the very things which reaches the general public and instructs it regarding
Spain, and is of course of the greatest value to the real worker. We have
28,000 and should have 100,000 at least.
A mark on any print will be all that is needed to indicate that it must
not be reproduced.
I am delighted with the photographs of the vitrines. Splendid – and
most useful. Perhaps if the matter of uniform scale, as you suggest, is to be
regretted you might put a metre measure in the case at the centre of focal
incidence, or at some convenient point, and we should then know the size of
a given piece by consulting the scale thus rendered.
Really, I am staggered by the amazing record your camera gives me
of the collection. Seeing it scattered, in a way, when I was there, did not
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 235
P. S.
The 3 “microphotographs” are inmensely interesting. I see by them
just what is wanted.
Excmo. Sr.
D. Guillermo Osma,
Fortuny, 17,
Madrid, Spain.
Nº 11
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, December 6, 1920.
Nº 12
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
Cda 7.1/21
With infinite thanks for your kindness in this, and all matters,
Faithfully yours,
Archer Huntington
Excmo. Sr.,
D. Guillermo Osma,
Fortuny, 17,
Madrid, Spain.
Nº 13
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, January 5, 1921.
Nº 14
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, January 10, 1921.
238 MªÁNGELES SANTOS QUER
I have just seem Mrs. Tirnllerd? and …? Is emblematic in your praise. Every
one 8…….? you.
Archer
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 239
Nº 15
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, January 11, 1921.
Nº 16
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
Retratos de
Eminencias Expañolas
gallery of this kind is of the greatest necessity in this country, and that the
sooner it is collected the better. Information regarding living Spaniards is a
matter which attracts the attention of many who would never enquire
regarding the literature, art, or the past in general. Moreover, these portraits
will become documents for the future and in turn take their place in the
historical collection of the future. I should be glad if the collection could be
made permanent in some way so that we would never fail to be in touch with
the living forces of the nation as expressed in intellectuals of all departments.
Again with many thanks,
Always faithfully yours,
Archer M. Huntington
Excmo. Sr.
D. Guillermo Osma,
Fortuny 17, Madrid.
Nº 17
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, March 1, 1921.
Nº 18
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 241
Nº 19
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
arLibros para ciegos NEW YORK, March 11, 1921.
Almt? expte.
Nº 20
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, March 16, 1921.
Excmo. Sr.
D. Guillermo de Osma,
Fortuny, 17,
242 MªÁNGELES SANTOS QUER
Madrid, Spain.
Dear Sir.:-
I am in receipt of your letter of February 15th, with enclosures as
stated therein.
Yours very sincerely,
Archer M. Huntington
Al de rec? en la
Carta, con cuentas, de
19 Febrero/21
Nº 21
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, March 21, 1921.
Nº 22
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Soceiety of America)
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 243
Prohombres españoles
Nº 23
OFFICE OF THE PRESIDENT
Dante
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, April 28, 1921.
Fortuny, 17,
Madrid, Spain.
Nº 24
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, May 3, 1921.
Querido Osma:-
I begin to feel more and more guilty when I consider the amount of
work heaped upon you by your generous response to my enquiries regarding
photographs. The letter which you sent me on the 14th of April, enclosing
that of Arxiv Mas, enlightens me as to the situation. Were it posible to obtain
the 50,000 photographs referred to in his letter, and to receive them with
proper labels, I should not hesitate a moment in saying – Let us proceed to
get this collection. But I judge from the tenor of his own letter that he is in a
measure in the situation of a person overwhelmed with a mass of material
accumulated at random and through a period y years. The matter must,
therefore rest “on the kness of the gods” unless you care to select someone
to obtain the collection as a whole or in part. It seems, however, a pity that
we cannot avail ourselves of this large mass of photographs bust must
continue to send people into the field to obtain what has already been done.
No doubt at the end of twenty-five or thirty years we shall have obtained a
collection not unlike that which Mr. Mas has already assembled, but at an
expense far greater in the end than his whole collection would cost us, several
times over. The sending of an expert to Spain costs about $5,000. a year. The
publication of the material they acquire, seldom less than that sum. Miss
King’s book, expedition, etc. has exceded this total considerably. We are at
every posible disadvantage, as far as expenditure goes, in sending out these
expeditions, one of whose chief objects is to add to our photographs. Our
collection now, as I think I have already said, amounts to about 30,000 pieces;
we have recently added 2,000 from Portugal, and are about to add 10,000 –
which represents the collection of a museum near by. I am in hopes that we
shall get a small collection from England and Italy, but when we have reached
50,000 we must thereafter rely upon other sources. These photographs are
used constantly by students. They give the best posible information regarding
monuments, types, customs, etc. which is available concerning Spain, and
the extensión of the collection is most desirable. However, the letter of our
friend, Mr. Mas, does not encourage me to hope, and, moreover, I am deeply
conscious of the burden which I may be placing upon you, and which is not
right or just. My only excuse is that, as a Spaniard, you will agree with me
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 245
that your own country should have the greaters posible representation in the
files of the Society, for the use of American students.
I am very much worried about your health, and your feet. I suppose
that you are deprived of golf, which must be a very serious matter. However,
your last letter gives me hope that you are getting about again, and are in
better shape. I look forward to a report from Miss Tone when she sees you
again, as she leaves shortly for Spain. I think, on the whole, her interest in
Spain has very much increased, from what I hear, and I suspect that you are
at the bottom of it.
Always faithfully yours,
Archer
Excmo. Sr.
D. Guillermo Osma,
Fortuny, 17,
Madrid,
Spain.
Nº 25
Exp Sorolla
(Sello de la Hispanic Society of America) Recda.
24 Mayo/21
Nº 26
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, May 17, 1921.
Faithfully yours,
Archer
Excmo. Sr.
D. Guillermo Osma,
Madrid, Spain.
Nº 27
OFFICE OF THE PRESIDENT
Exp. Sorolla
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, May 18, 1921.
My dear Sir: -
May I ask that you will be good enough to convey the enclosed
letter to the Director General of Bellas Artes, Sr. Leaniz, in response to that
which he has forwarded to me through your kindness, and which I have just
received.
Faithfully yours,
Archer M. Huntington
Excmo. Sr,
D. Guillermo Osma,
Fortuny, 17,
Madrid,
Spain.
Nº 28
OFFICE OF THE PRESIDENT
Exp. Sorolla
(Sello de la Hispanic Society of America)
know what exhibitions are, and how much trouble they cause to those who
initiate them, so please do not let the details of this one get hold of you in
any way, but, rather, shift them to other shoulders. Your own work is too
valuable to have it broken in upon by such a cataclysmic matter as a Sorolla
exhibition.
Many thanks, also, for the collection of 120 protographs, which I
have no doubt will arrive shortly. They will be a valuable addition to our
collection, and very enlightening in some quarters.
I hope your next letter will give me good news of a perfectly released
and flexible foot.
Faithfully yours,
Archer M. Huntington
P. S.
I hope you got a Consular Invoice for the photographs. If not, I
think it would be well to do so, as I have had a great deal of trouble in getting
photographs passed through the Custom House without it.
I have just read the list, which came in your second letter, and am
surprised and delighted with it. It is most admirably selected and will be of
the greastest value.
Excmo. Sr.
D. Guillermo Osma,
Fortuny, 17,
Madrid, Spain.
Nº 29
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, May 23, 1921.
and thereby stopping work in the Library for nearly a year, I have now returned
the Reading Room to something of its former shape and reopened it, so that
the Hispanic Society is going along in the old way, and will not make any
further preparations for the pictures until they land in New Yor, whether it is
this year or later.
In thanking you for all you have done, it is a real pleasure to know
that I have been in touch with a man who has been able to express definite
views, has a real conscience and a sense of the exigencies of the case. You
are always that, and it is a confort.
Do not, however, let them open the case again, for heaven’s sake,
as wind of it will get out and I shall be swallowed up in an avalanche of
letters and telegrams for information.
Always faithfully and affectionately yours,
Archer
Excmo. Sr.
D. Guillermo Osma,
Fortuny, 17,
Madrid,
Spain.
Nº 30
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, June 7, 1921.
more or less in reaching this conclusión. The details of the picture, of course,
do not show properly in the photographs. In No. 1, the shadowy headdress is
not properly shown. It is much clearer in the painting, and is the well-known
form of hat of this type. The picture is painted in sombre colors, - the eyes
are brown, and the background is green. In the cleaning, the date on the
scroll under the device to the right, disappeared, after having been read by
Mr. Biadene. His argument in defense of this date must rest upon his own
statement, as there is no photograph of the original,- or, at least, he did not
show me one.
No. 2 and No. 3 perhaps give less information than No. 1, in most
regards.
No. 4, a larger reproduction of the face, to about actual size, is also
enclosed, - together with an enlargement of the jewel upon the right breast
(No. 5), and I enclose also an actual size photograph of the device in the
upper corner (No. 6), and a photograph of the back, with the seal of the
dealer from whom the picture apparently came, in Paris. Bruner is located
on the rue Royal, and is related to Seidlemeyer in Paris.
I hope this information may be of some value. That the picture is of
Cervantes, in my opinion there is not the slightest possible evidence; that it
is not a Pantoja de la Cruz, seems also equally certain. However, all judgments
of this kind are open to criticism, as you very well know.
Always faithfully yours,
Archer M. Huntington
Excmo. Sr.
D. Guillermo Osma,
Fortuny, 17,
Madrid,
Spain.
Nº 31
OFFICE OF THE PRESIDENT Exp. Sorolla
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, June 8, 1921.
on having progressed so far, and am highly pleased that the suggestion has
been put through to this extent with such good intent.
Always faithfully and
cordially yours,
Archer
Excmo. Sr.
D. Guillermo Osma,
Fortuny, 17,
Madrid,
Spain.
Nº 32
OFFICE OF THE PRESIDENT
Dante
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, June 14, 1921.
Nº 33
OFFICE OF THE PRESIDENT Consultas
e
Informes 87
da
C en 19 Octe/21
Nº 34
INSTITUTO Carta á Read
DE Tho for De Guillermo 21 Junio/19
VALENCIA DE DON JUAN
MADRID 19 de Junio 1919.
Excmo. Sr.
Don Archer M. Huntington.
Querido amigo:
Conviniendo organizar la Secretaría del Instituto, acordamos Maura,
Asín, Alba y yo consultar a Vd. Y a Read el nombramiento de Secretario
General y Administrador a favor de Don Javier García de Leaníz: asignando
al cargo haber anual de 2.000 pesetas.
El Sr. Leaníz, a quien Vd. Conoce, estuvo encargado de mi Secre-
taría particular, y más tarde de mi Secretaría política, en todos los cargos que
he ejercido, desde Subsecretario de Ultramar hasta Ministro de Hacienda.
Ha sido, él mismo, Diputado a Cortes y Director General de Comercio. Fué
luego Apoderado general de mi mujer (q.e.p.d.), y es hoy su Albacea testa-
mentario. Es decir su constante y absoluta identificación conmigo.
Como necesito, antes de salir a tomar las aguas de Vittel, dejar a
alguien al frente de la Secretaría del Instituto, haremos el nombramiento, si
bien con expreso carácter interino, hasta tanto conozcamos la conformidad
de Vd. y de Read con nuestra propuesta.
Asimismo, sometemos a la conformidad de Vds. el acuerdo de de-
signar como Director del Museo y Monetario del Instituto, encargado de la
instalación y organización de los mismos, al Sr. Vives, en la actualidad Pa-
trono suplente, proponiéndonos asignar a este cargo haber anual de 2.500
pesetas.
La salud del Sr. Vives le ha consentido y le consiente, por fortuna,
prestarme su eficaz y cuasi insustituible colaboración.
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 253
Nº 35
Traducción de párrafos de la carta de Osma á Huntington, de 12 Octubre
1920. (Manuscrito)
Nº 36
Madrid, 24 de Noviembre 1920.
Querido Archer:
Recibo su carta fecha 1º., y le escribo en castellano dictado,
que para V.d es igual, y gano tiempo. Acostándome a las 9 de la noche, estoy
escribiendo desde las 4 de la mañana, y al comenzar el día, ya no puedo más.
Me preocupa mucho la traducción del Dante, para que en la
obra literaria no desmerezca de las publicaciones de la H.S.A. Al Sr.
Sunderland le encargué intente una versión, trayéndome a consulta, aunque
sea a diario, las dudas que se le ofrezcan. Desde luego resulta bastante mejor
que la versión de Mrs. Jordan ; y para guardar toda consideración a dicha
Sra. Digo a Sunderland que siempre que pueda tome las palabras de ella ;
pero sin perjuicio de continuar, desearía con V.d sobre la marcha, y al efecto
le acompaño para que pueda compararlas, las primeras cuartillas de
Sunderland y copia de las correspondientes de Mrs. Jordan. Dígame V.d si le
parece suficientemente literario el giro actual, pues acaso propenda yo a
exceso de exigencia en el particular. La dificultad en obra de esta clase es
máxima ; del traductor precisamente, siendo concienzudo, no se atreve a
tomar sobre sí licencia de parafasis ; y así es muy difícil que no se refleje en
el texto inglés la circunstancia de ser traducción de otro idioma.
Asín, desde luego, podría correr con todo lo de la impresión – y Mr.
Sunderland se brinda á ser corrector de pruebas, pretendiendo para ello un
pequeño suplemento que no me parece excesivo sobre lo que desea que le
valga la labor de traducción – pero para lo de la traducción no me puede
ayudar pues precisa y naturalmente cuanto más literal y menos literaria sea
la traducción, más fácilmente la comprende él, que no habla inglés.
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 255
Nº 37
COPIA DE CARTA DE DON GUILLERMO AL SR. HUNTINGTON,
Querido Archer :
El interés excepcional de su deseo en relación con el Catálogo
fotográfico de las riquezas artísticas y monumentales de España que en es-
tos últimos años se ha ido formando bajo los auspicios del Comité Central
de la non nata Exposición de Barcelona, me mueve a enviarle a V.d este
informe preliminar, rogándole nos aclare uno ó dos puntos esenciales : para
el mejor acierto eventual de nuestras negociaciones con aquel Comité y con
los editores fotográficos.
El origen de la importante acumulación de fotografías de mo-
numentos y objetos artísticos de que se trata, fue la Exposición de Industrias
Eléctricas, planeada en Barcelona de diez años a esta parte.
Desde el comienzo se pensó que las industrias eléctricas loca-
les, aunque dieran nombre á la Exposición, no obtsaba para que ésta tuviera
carácter general español y artístico. Así es que las obras de explanación de
los terrenos donde ha de situarse la Exposición, han tenido el alcance no
menos que de transformar en parque una montaña vecina de la ciudad ; y no
es del caso decir aquí que así como en dicho parque se han desarrollado 7 ú
8 kilómetros de hermosas alamedas, también es el hecho que se ha gastado
en esa transformación topográfica muchísimos millones de pesetas, en las
256 MªÁNGELES SANTOS QUER
P.D. – La casa del fotógrafo Sr. Moreno nos llevó demasiado caro
por la colección de las Cantigas, so pretexto de que las imprimía sobre car-
tulina. Por cierto que soy de parecer de que en lo sucesivo no se consienta
que los fotógrafos recorten las pruebas. Más vale que quede ese pequeño
trabajo por cuenta del comprador, para que se haga á conciencia y con buen
gusto.
Nº 38
Dante
Nº 39
Remitido 22 Abril/21
Archer Huntington
15 West 81. st Street
New York
INSTITUTO
DE
VALENCIA DE DON JUAN
Nº 40
Exp. Sorolla. Minuta
6 Mayo/21
Archer M. Huntington
15 West 81. St Street
New York
Please cable to Sorolla junior authorizing him to hand the pictures to Direc-
tor General Bellas Artes for Exhibition at Prado Stop. He wishes the
instruction to come directly from you
Osma
Nº 41
INSTITUTO
DE Transmitido 21 Mayo/21
VALENCIA DE DON JUAN
262 MªÁNGELES SANTOS QUER
MEMORANDUM A. Huntington
15 West 81.st Street
New York
Nº 42
INSTITUTO
DE
VALENCIA DE DON JUAN
Madrid 22 May/21
My dear Archer.
My cable, last night, will have told you that 1 junio my self unable
to carry out ¿ generous idea of having your Sorolla pictures exhibited here
before you take than Zone. The enclosures will tell their own tela. There has
only been one difficulty : but it has sufficad? into itself. Sorolla’s family –
c.e. Sorolla junior – have not been disposed to hand the pictures to the
Direccion general de Bellas Artes, for the exhibition at the Prado on June 1.
They were officially, is in writing, invited (May Gta. : see nº.) / to do so as
soon as they considered themselves authorized by you to quet? effect (They
wished information? to com from you). From the Gta. to the 25 they made
formal rapey? No to Leaniz, only saying in on vuein), that they thought it
Wd. be better to fort oft the estubir? till? October.
The Director general has therefore had to May 25 comité (Vª. )
that the here lapor? Of this makes in now inprosible to Zola? The Exhibition
on the Prado on June 1 : ¿ two days 2 enero And for to first is has been born
upon? In that after most. From the hear ? the ? : the Prado just
do ?
coloring, on April 26, they the exhibition ? earlier the June 1, if
posible? ?
The not? result is that your Sorolla ?
Passin resistence, is sucessful. It is a fifty for you was a ?ofter
a circunstances ? - the Direccion General de Bellas Artes ? to take
? charge, in the new Salas on the Prado mometarily? Available?, - seen ?
x formata?.
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 263
Nº 43
En la casa
Archer Huntington Central
15 West 81 st Street
New York
Envío otro, omitiendo
La fecha que se citaba.
INSTITUTO
DE
VALENCIA DE DON JUAN.
Centro
S 170
Nº 44
Suggested form
(Sello)
El Diputado á Cortes
por
Monforte (Date, New York)
Minuta Propuesta
To
Masters? Anty. Gibbs & Sons
22 Bistpagate E.C.
London
Gentleman,
In reference to the letter addressed to you by Señores Don Antonio
Maura, Don Miguel Asín and D. G. J. de Osma under date Madrid 6.th March
{instª last, I shall be obliged if, until further instructed by us you will art
upon the sole instructións of Don G. J. de Osma in reference to securities or
264 MªÁNGELES SANTOS QUER
Cash for the tunia? being held by you on our joint? Account “Osma & Others”.
Yours. V. sincerely.
pª Huntington
Nº 45
(Copy)
September 23, 1921.
Nº 46
(Copy)
Mi querido Amigo :
Hace tiempo le mandé á Vd. una carta contestación á la que Ud. me
decía que la Hispanic Society no puede correr con el seguro de la decoración
en el caso de que esta fuese expuesta en Madrid. Nosotros no estábamos en
antecedentes de nada, y su telegrama pidiendo permiso para hacer dicha
exposición fue una gran sorpresa y creímos que Ud. tenía mucho gusto en
que se hiciera, y que la idea había nacido en Ud.; ahora yo le agradeceré
mucho me diga Ud. con entera franqueza si Ud. desea dicha exposición, y
en ese caso mande Ud. su formal conformidad.
Siento mucho tener que decirle que la salud de mi padre sigue en
igual estado de inseguridad y que no hace ninguna mejoría.
Mi madre y hermanas me encargan sus cariñosos saludos.
Con un abrazo suyo affmo.
Joaquín Sorolla
Nº 47
Exposición Sorolla.
Antecedentes.
remitidas por Javier de los que se entresacaron algunos que figuran en lega-
jo apartado para remitir sus copias al Sr. Huntington
INSTITUTO
DE
VALENCIA DE DON JUAN
1) 2
Instituto de Valencia de Don Juan.=Madrid 23 de abril de 1921.=
Iltmo. Sr. Director general de Bellas Artes.= El Excmo. Sr. D. Archer M.
Huntington, fundador y Presidente de la Hispanic Society of América, en-
cargó años ha al insigne artista D. Joaquín Sorolla una obra pictórica monu-
mental, con destino a salas de la Biblioteca de aquella Sociedad en New
266 MªÁNGELES SANTOS QUER
2./ 3
Sección 22
Iltmo Sr: En atención al propósito y deseo del Sr. Huntington, y á los efectos
del encargo por él conferido al Sr. Osma, S. M. el Rey (q. D.g.) ha tenido á
bien disponer que se remita al Excmo Sr. Presidente del Patronato del Mu-
seo Nacional del Prado la adjunta moción ó instancia del Excmo. Sr. Don
Guillermo J. de Osma á V.I. dirigida, rogándole conceda en salas que sean
disponibles del Museo la hospitalidad que merece obra como la del insigne
Sorolla= -De Real Orden lo digo á V.I. cuya vida guarde Dios muchos años,=
Madrid 26 de Abril de 1921 de 1921= Aparicio= Sr. Director general de
Bellas Artes.
Es copia
2 bis./
Dirección general de Bellas Artes = Sección 22 =
Al Excmo Sr. Don Archer M. Huntington, Presidente de la Hispanic Society
of América.=Madrid 29 de Abril de 1921. =
Excmo Sr: Acreditando una vez más V. E. su amor á España, al
desear que no salga de nuestro país sin ser admirada por su pueblo, la monu-
mental obra del insigne Sorolla destinada á la Hispanic Society of America
S. M. el Rey (q.D.g.) ha tenido á bien disponer se dén á V.E. las gracias en su
Real nombre por esta nueva demostración de su interés por cuanto con Es-
paña se relaciona= De Real Orden, comunicada por el Excmo Sr. Ministro
de Instrucción pública y Bellas Artes, me cumple participárselo á V. E., te-
niendo en hacerlo honor señaladísimo.Dios guarde etc =
3./ 5
Patronato del Museo Nacional del Prado= Iltmo Sr: Vista la instancia firma-
da por el Excmo. Sr. Don Guillermo J. de Osma, en la que manifiesta que el
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 267
Exposición Sorolla.
Miércoles 4 de
Mayo : 9 ½ mañana
268 MªÁNGELES SANTOS QUER
Mucho deseo que haya V.d regresado a Madrid esta mañana, porque
siguen las indicaciones veladas y me hacen arrepentirme mucho de haber
sido parte a la Exposición de lienzos de Sorolla.
Nos pareció que delegando en el Director general de Bellas Artes
todo sería llano, pero me parece que la gente no se ha enterado de esa Dele-
gación o afecta no conocerla, para poder con más libertad opinar cada cual
según le parezca y disponerse a criticarse y censurarse unos a otros, según
costumbre.
Ayer se me han hecho dos indicaciones : una por teléfono y otra de
palabra, de que en ningún caso debería retrasarse la Exposición más allá del
día 1.º de Junio.
Como algo se me indicaba de que aquellas Salas del Museo del
Prado son muy cálidas, hube de preguntar si había peligro de que el calor
perjudicase a los lienzos de Sorolla, para desistir, en tal supuesto, de expo-
nerlos ahí. Entendí que no, pero por otro conducto, se me hizo la misma
advertencia más tarde, de que en ningún caso convenía aplazar la Exposi-
ción. Y aparejadas ambas indicaciones, venía alusión a que V.d está ausente
: que ya se ve que, traducido al castellano, quiere decir que yo he delegado
en quien no está aquí, y por consiguiente, que se está perdiendo tiempo, y
que puede correrse, por tanto, peligro en exponer los cuadros por echarse
encima el calor del verano. Todo ello tiende a obtener de mi que sea yo
quien hable a la gente y diga algo, de ayer a hoy, para hacer que hacemos, y
en todo caso, para proceder al desorden que consistiría en delegar en V.d y
enseguida tramitar yo directamente las cosas, entre inquietudes de hoy, chis-
mes de mañana y vistas siempre a fruición catastrófica.
No deja también de ser interesante, advertir que al mismo tiempo
que reiteradamente se me da a entender que se está perdiendo el día sin
hacer nada, se me participa que Cossío quedó gustoso en el encargo de escri-
bir la noticia que valga como de Catálogo, pero que no hay que pensar en
que lo tenga hecho para el día 15, pues necesita ver los cuadros mientras los
cuelgan y tomar informes de la familia acerca de detalles que no puede su-
ministrar Sorolla, por su estado de salud. Indico este detalle por ser gráfico
que a la vez en el mismo día se me inste, por Dios, a que sea la Exposición
antes de 1.º de Junio, si pudiera ser, y se me haga saber que para el 15 de
Mayo no se puede contar con las cuartillas del Catálogo.
Respecto de esto último, dejó consignado que he hablado con Re-
yes, de la imprenta editorial Reus, que se me ofrece, al parecer sinceramen-
te, para ponerse a imprimir tan pronto se le entreguen cuartillas. Le volveré
a ver para decirle que no puede ser para el día 15 y tomarle palabra de que en
ocho días se compromete a entregar el folleto. Desde ahora considero vero-
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 269
símil que no está impreso para el día que se abra la Exposición y en tal caso
habrá que prescindir de él, pues en ningún caso (en vista de las advertencias
veladas que corren) autorizo que la Exposición se abra después del día 1.º de
Junio, pero sentiría muchísimo que V.d no vuelva hoy para hacerse presente
y encauzar las cosas, porque desde ahora veo nacer el argumento de que lo
que salga mal es por haber estado V.d ausente la semana pasada y esta.
Exposición Sorolla
(Sello en seco del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes)
Dirección general
De
Bellas Artes.
Excmo. Sr.:
Recibido el oficio de V. E. de 23 de Abril ppdo., esta Dirección
general procuró organizar la exposición de los cuadros del insigne Sorolla
en las salas del Museo Nacional del Prado; más haciendo el transcurso del
tiempo que sea materialmente imposible el instalar y realizar la exposición
para la fecha de la de Junio, según se deseaba, se ve esta Dirección general
270 MªÁNGELES SANTOS QUER
Exp. Sorolla
3 bis./ 6
Excmo. Sr.:
El Excmo. Sr. Ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes me
dice con esta fecha lo siguiente:
“Iltmo. Sr.: En atención al propósito y deseo del Sr. Huntington, y a
los efectos del encargo por él conferido al Sr. Osma. S. M. el Rey (q.D.g.) ha
tenido a bien disponer que se remita al Excmo. Sr. Presidente del Patronato
del Museo Nacional del Prado la adjunta moción o instancia del Excmo. Sr.
Don Guillermo J. de Osma a V. I. dirigida, rogándole que en salas que sean
disponibles del Museo se conceda la hospitalidad que merece obra maestra
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 271
como la del insigne Sorolla.- De Real orden lo digo a V. I. cuya vida guarde
Dios muchos años.”
En consecuencia, ruego a V. E, que, tan pronto se considere
competentemente autorizado para entregar los lienzos, tenga la bondad de
avisarme, a fin de hacerme cargo de ellos y entregarlos en el Museo del
Prado.
Dios guarde a V. E. largos años. – Madrid 26 de Abril de 1921 –
Excmo Sr. D. Joaquín Sorolla.
(Poner al pie de la copia (Entregada día 6 de Mayo))
5./ 7
Dirección general de Bellas Artes.
Al Excmo. Sr. Don Joaquín Sorolla.
Madrid, 20 de Mayo de 1921.
Exp. Sorolla
El Director general de Bellas Artes al Excmo. Sr. Presidente del
Patronato del Museo Nacional del Prado.
Madrid, 23 de Mayo de 1921.
Excmo.Sr: Como el transcurso del tiempo hace ya imposible orga-
nizar la exposición de los lienzos del insigne Sorolla, a la Hispanic Society
of América de New York destinados, para la fecha designada de 1º de Junio
próximo, y habiendo el Sr. Osma, en su consecuencia, renunciado el encar-
go que le confirió dicha Sociedad; esta Dirección general se ve en el caso de
manifestarlo así al Patronato de su digna presidencia, por si este tuviese
necesidad de disponer de las Salas que tuvo la bondad de ofrecerme con tal
objeto.- Dios guarde etc. etc.
ES COPIA.
272 MªÁNGELES SANTOS QUER
Nº 48
Office of the Secretary
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK,
June 28, 1917
My dear Sir:
Permit me to inform you that by registered post I am sending you
today, for El Instituto de Valencia de Don Juan, an engrossed certificate of
honorary membership in The Hispanic Society of America, also a bronze
medal. These I trust will reach you promptly and in good condition.
I have the honor to be,
Very sincerely yours,
Charles M. Huntington
Secretary.
To:
The Secretary
El Instituto de Valencia de Don Juan
Care Guillermo J. de Osma, Esq.
Calle de Fortuny, 17
Madrid
Spain
Nº 49
OFFICE OF THE PRESIDENT Cta H.S. de 1920
(Sello de la Hispanic Society of America)
Dear Sir:-
I am in receipt of account of The Hispanic Society of America with
the Instituto de Valencia de Don Juan, showing a credit to the Hispanic Society
of 4078.20 Pesetas. The same has been transferred to the Assistant Treasurer
of the Hispanic Society to be entered upon the books.
I have the honor to be, Sir,
Yours very truly,
Archer M. Huntington
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 273
Nº 50
OFFICE OF THE PRESIDENTE
(Sello de la Hispanic Society of America) Visto
11
My dear Friend:-
Your letter of April 23rd is at hand, regarding the sum of 2,643.4
ptas. now to the credit of The Hispanic Society of America in Madrid, and I
am most pleased at the arrangements made.
Thanking you very cordially, and with kind regards,
Yours faithfully,
Archer M. Huntington
Javier García de Leaniz, Esquire,
Fortuny, 43 Moderno,
Madrid,
Spain
Nº 51
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, August 25,
1922.
Recibida el 12 Septe
My dear Friend:-
I have received your letter of the 31st July, together with the
document which you enclosed, and it gives me great pleasure to send you
my full aprobation of the resolutions adopted at the meeting of June 10th.
Trusting that this may meet your requirements in this matter, and
with cordial regard,
Always very faithfully yours,
Archer M. Huntington
274 MªÁNGELES SANTOS QUER
Excmo Sr.
D. Javier García de Leaniz.
Secretario General y Administrador
del Instituto de Valencia de Don Juan,
Fortuny, 43 Moderno,
Madrid,
Spain.
Nº 52
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, June 26, 1923.
My dear Friend:-
Your letter of June 4th is at hand, with the enclosed copy of Minutes
of the Board Meeting of the Instituto de Valencia de Don Juan held on May
14th, and I hereby approve the action of the Board as set forth therein.
With kindest regards, I am
Yours faithfully
Archer M. Huntington
Excmo. Sr.
D. Javier García de Leaniz.
Secretario general y Administrador
del Instituto de Valencia de don Juan,
Fortuny, 43 moderno,
Madrid,
Spain.
Nº 53
Aprobada del acta de 15 Novbre/23
OFFICE OF THE PRESIDENTE
NEW YORK, December 12, 1923.
My dear Friend:-
I an receipt of your letter, and it gives me great pleasure to send my
approbation of the Acta de la Sesión Celebrada por la Junta de Patronato del
Instituto de Valencia de Don Juan, en 15 de Noviembre de 1923.
With kindest regards believe me
Very sincerely yours,
Archer M. Huntington.
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 275
Excmo. Sr.
D. Javier García de Leaniz,
Secretario General y Administrador
del Instituto de Valencia de Don Jua,
Fortuny, 43, moderno,
Madrid,
Spain.
Nº 54
Para Patronato
(En seco : 1083 FIFTH AVENUE)
28/26
July 9, 1926.
Echada el 25
Recibida 9 Agosto
Nº 55
OFFICE OF THE PRESIDENT Aprobación del
(Sello de la Hispanic Society of America) Acta de 21 Octe/26
276 MªÁNGELES SANTOS QUER
My dear Friend :
I am delighted to get your letter and send you my hearty approbation
of the Minutes of the Meeting of the Junta on the 21st of October.
I am very glad that the little picture was pleasing to the Trustees.
Yours faithfully,
Archer M. Huntington
Javier García de Leaniz, Esquire,
Patrono, Secretario general y Administrador
del Instituto de Valencia de Don Juan,
Fortuny, 43, Moderno,
Madrid,
Spain.
Nº 56
Aprobación Acta 10 junio/27
Ada nº 19
CAMP ARBUTUS
NEWCOMB, ESSEX COUNTY
NEW YORK
My dear Mr Leaniz:
I am in recepit of a copy of the Minutes of a meeting of the Trustees
of the Instituto de Valencia de Don Juan held on the I0th of June I927 and
hasten to express my concurrence in the resolutions adopted.
I have the honor to be, Sir,
Yours very truly
Archer M. Huntington
Nº 57
(En seco : I EAST 89TH STREET 4
NEW YORK CITY)
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 277
My dear Leaniz :
I have just received two very interesting and valuable volumns,
“Disertaciones y Opúsculos”, and hasten to express to you my appreciation
and admiration for what you have done. The Instituto is indeed to be
congratulated upon this work by one of its members.
With cordial regards to you and all the others, believe me,
Sincerely yours,
Archer M. Huntington
Excmo. Sr.
D. Javier García de Leaniz,
Secretario General y Administrador,
Instituto de Valencia de Don Juan,
Calle de Fortuny, Núm. 43, Moderno,
Madrid, Spain.
Dear Fiend:
I congratulate you upon the publication of La Musica de la Jota
Aragonesa, and am not quite sure whether the publicación bears the seal of
the Hispanic Society or not. If it does, we should be very glad to receive a
hundred copies of it here for distribution to our Members.
With congratulations on this addition to the distinguished series of
your publications,
Always faithfully yours,
Archer M. Huntington
Excmo. Sr.
D. Javier García de Leaniz,
El Patronato, Secretario General,
Instituto de Valencia de Don Juan,
Fortuny, 43 Moderno,
Madrid,
Spain
278 MªÁNGELES SANTOS QUER
Nº 59
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK, April 14, 1930.
My dear Friend :
I am most appreciative of your courtesy in forwarding the clipping
from the Gaceta de Madrid relating to the Instituto de Valencia de Don Juan.
I send you most cordial regard and best wishes.
Yours
faithfully,
Archer M. Huntington
Excmo. Sr.
D. Javier García de Leaniz,
El Patrono,
Secretario General y Administrador,
Instituto de Valencia de Don Juan,
Fortuny, 43 moderno,
Madrid, Spain.
Nº 60
OFFICE OF THE PRESIDENT Acta nº 26
(Sello de la Hispanic Society of America) (21 Febro/30
Aprobación
Dear Friend:
Your letter has only just reached me, and I hasten to send you my
approbation of the matters referred to in connection with meeting or the 4th
of March.
With cordial regard,
Yours faithfully,
Archer M. Huntington
Excmo. Sr.
D. Javier García de Leaniz,
Patrono, Secretario general y
Administrador del Instituto
de Valencia de Don Juan,
Fortuny, 43 moderno,
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 279
Madrid,
Spain.
Nº 62
OFFICE OF THE PRESIDENT
(Sello de la Hispanic Society of America)
Dear Sir:
I have your letter of November 23rd, and am most appreciative of
your courtesy in sending me a copy of the work of Rd. P. Fr. Justo Pérez de
Urbel, O. S. B. entitled Los Monjes Españoles en la Edad Media,- in two
volumes,- and the catalogue of Documentos relativos a España existentes en
los Archivos Nacionales de París, of Dn. Julián Paz y Espeso.
I will take great pleasure in instructing The Hispanic Society of
America as to the distribution of the volumes you are good enough to forward,
and I beg that you will express to the other members of your Council our
appreciation and thanks.
With kindest regards,
Faithfully yours,
Archer M. Huntington
Excmo. Sr. Don Javier García de Leaniz,
El Patrono, Secretario General,
Instituto de Valencia de Don Juan,
Fortuny, 43 moderno,
Madrid,
Spain.
Nº 63
INSTITUTO
DE
VALENCIA DE DON JUAN MADRID 23 de Abril de 1922
cursada el 24
Mi querido amigo:
Al examinar la contabilidad del Instituto, veo que en la Cuenta que
tenía abierta á su nombre nuestro malogrado amigo D. Guillermo en el Ban-
co Español de Crédito de esta Corte, por delegación de los Sres. Patronos
del Instituto, figura un saldo a favor de la Hispanic Society of America, en
31 de Diciembre de 1921, de 2.643’40 ptas.
Según me informan, dicho saldo es para atender gastos que puedan
ocasionarse con motivo de encargos que dicha Asociación haga al Instituto,
y como esta entidad continúa siendo la misma, sin otras alteraciones en cuanto
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 281
Minuta
Nº 64
28/26
Madrid 24 de Septiembre de 1926.
Cursada el 25 ag
Mi querido amigo:
Ha pocos días se ha recibido en este Instituto, reexpedida por la
Agencia de Aduanas de Barcelona, “J. Jalibert y Cª.”, una caja conteniendo
el cuadro cuyo envío me anunció Vd. En su estimada del 9 de Julio último.
La pintura, por el hecho de representar una de las instalaciones de
esa benemérita Corporación, tiene para este Instituto el interés que Vd. pue-
de suponer; y aunque de este donativo he de dar cuenta a mis compañeros de
Patronato en la primera Junta que celebramos, creo, no obstante, de mi de-
ber, el dirigirle esta carta, como acuse de recibo, a la vez que sirva para
testimoniar a Vd. nuestro agradecimiento por su atención.
Se reitera suyo afmo. amigo
q. b. s. m.
Minuta
282 MªÁNGELES SANTOS QUER
Nº 65
I. de V. de D. Juan Catálogo y otras publicaciones
De P. Sario Madrid I9 de Octubre 1928.
Cursada el 24
Excmo. Sr. D. Archer M. Huntington,
New- York.
Mi querido amigo:
Tengo el gusto de participarle que está a punto de terminar la im-
presión y tirada de mil ejemplares de la obra “La Música de la Jota Aragone-
sa”, original de nuestro muy querido amigo y compañero de Patronato, D.
Julián Ribera y Tarragó. Y teniendo en cuenta no solamente la circunstancia
de ser editado ese interesante estudio histórico con cargo al espléndido do-
nativo hecho por Vd. para publicaciones del Instituto, sino la doble persona-
lidad que Vd. Ostenta como Patrono de esta Fundación y como Presidente
de la benemérita Institución “Hispanic Society of America”, me permito
consultarle el número de ejemplares que desea se le remitan para su biblio-
teca y para la de la Asociación de su presidencia.
Al propio tiempo, me complazco en anunciarle que se haya en prensa
y muy en breve verá la luz pública, la obra titulada “Compendio de Teología
dogmática de Algazel” de nuestro amigo y compañero de Patronato, D. Mi-
guel Asín y Palacios, que, asimismo, edita esta Fundación con los fondos
cedidos generosamente por Vd., de cuya obra han de tirarse 500 ejemplares,
y hago a Vd. respecto de ella igual consulta que la referente a la del Sr.
Ribera, para remitirle en su día los ejemplares que me indique.
En espera de su contestación, se reitera de Vd. Afmo. amigo q. e.
s.
P.D. Dentro de breves días remitiré a Vd. el ejemplar nº 1, encua-
dernado en tela. Minuta
Omitido el párrafo citado, conforme a acordado por los Sres Asín y Ribe-
ra.
(Someterla á aprobación de D. Julian y D. Miguel) Lo aprobó D. Miguel
Enviado el ejemplar el 4 de Nobre/25
Nº 66
Madrid 10
de Diciembre de 1928.
Mi querido amigo:
De conformidad con la indicación que se sirve hacerme en su grata
del 13 de Noviembre, tengo el gusto de participarle que con esta fecha envío
a Vd., por conducto de nuestros Agentes de Aduanas en Irún, Sres. Echeandía
y Cia., un cajón que contiene cien ejemplares de “La Música de la Jota Ara-
gonesa”, nºs. 301 al 400, ambos inclusive.
Se reitera de Vd. afcmo. amigo
q. e. s. m.
Minuta
Nº 67
Mi querido amigo:
Confirmo mi anterior del 10 Diciembre, por la que le participaba el
envío de 100 ejemplares de “La Música de la Jota Aragonesa” para los Sres.
que forman la Sociedad Hispánica de América, de conformidad con la peti-
ción hecha por Vd. en 13 de Noviembre anterior.
Enterado, por carta que ha dirigido Vd. al Sr. Duque de Alba, de
que desea 10 ejemplares más de la citada obra, con destino a la Hispanic
Society, tengo el gusto de comunicarle que por correo de esta fecha se los
envío, en dos paquetes certificados .
Y deseándole un próspero año 1929, se reitera suyo afcmo. amigo.
q. e. s. m.
Minuta
Nº 68
Mi querido amigo:
Tengo la satisfacción de participarle que muy en breve verá la luz
pública la obra de nuestro compañero de Patronato D. Miguel Asín y Pala-
cios, titulada “El justo medio en la creencia” (Compendio de Teología dog-
284 MªÁNGELES SANTOS QUER
mática de Algazel), editada por este Instituto a expensas del donativo hecho
por Vd. para publicaciones del mismo. Se ha acordado la tirada de 500 ejem-
plares, y de ellos recibirá Vd., tan pronto esté encuadernado, en nº. 1, sin
perjuicio de enviarle cuantos necesite para la Biblioteca de la Hispanic Society
y miembros que forman tan honorable Institución.
Esperando verme pronto favorecido con su contestación, indicán-
dome el número de ejemplares que desee, se reitera de Vd. afcmo. amigo.
q. e. s. m.
Minuta
Nº 69
De Patrono Sario
Saluda
Y de D. Miguel Asín
Nº 70
INSTITUTO Dirección Telegráfica : “VAJUAN”
DE Teléfono N.º 30.415
VALENCIA DE DON JUAN Correpª FORTUNY, 43 MODERNO
EL PATRONO, SECRETARIO GENERAL MADRID
6/32 30 de Mayo de 1932.
Mi distinguido amigo:
Saludo a V. afectuosamente y tengo el gusto de dirigirle esta carta
de la que será portador mi amigo D. Andrés García Cabezón por el motivo
siguiente.
Este joven es Ingeniero Agrónomo y va a los Estados Unidos pen-
sionado para ampliar sus estudios. Es persona inteligente y de toda solven-
cia moral. No conoce a nadie en ese país, y el ruego que me permito hacer a
V. es que le guíe o ampare con su buen consejo para el éxito de la noble
misión que ahí le lleva.
Perdone esta libertad que me tomo y de antemano le doy gracias
por este favor que le pido y una vez más me reitero de V. afmo. amigo
q. e. s. m.
Minuta
Nº 71
OFFICE OF THE PRESIDENT
Sr. Gómez Moreno
(Sello de la Hispanic Society of America)
9 ENE. 1929
My dear Friend :
I am in receipt of the copy of La Música de la Jota Aragonesa,
which you have so kindly sent to me, and hasten to express my appreciation
and thanks.
Would it be convenient to let us have ten copies of this volumen for
the Hispanic Society?
With congratulations on this new example of the excellent
publications of the Instituto, and with best wishes for the coming year,
Yours faihfully,
Archer M. Huntington
286 MªÁNGELES SANTOS QUER
Excmo. Sr.
El Duque de Alba,
Palacio de Liria,
Madrid,
Spain.
Nº 72
OFFICE OF THE SECRETARY
156 th Street
West of Broadway Cda 5 Abril/15
(Sello de la Hispanic Society of America)
My dear Sir:
I have the honor to send you, with the compliments of the President
and Board of Trustees of the Hispanic Society of America, a copy of its
latest publication:
World Map 1605, Willem Janszoon Blaeu,
1571-1638, Facsimile of the unique
copy belonging to the Hispanic Society
of America. Eighteen sheets with key
plate and Text, by Edward Luther
Stevenson, Ph. D.
Very truly yours,
E. L. Stevenson
Secretary.
To:
Excmo.
Señor D. Guillermo de Osma
17 Calle Fortuny
Madrid, Spain
Nº 73
OFFICE OF THE ACTING DIRECTOR
156TH STREET
WEST OF BROADWAY
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK,
February 23, 1916
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 287
My dear Sir:
I have pleasure in sending you, with the compliments of Mr. Archer
M. Huntington, three copies each of the following publications recently issued
by the Hispanic Society of America:
Barber, E. A. Mexican Maiolica
“ “ “ Spanish Maiolica
“ “ “ Hipano-Moresque Pottery
“ “ “ Spanish Porcelains and Terra Cottas
Very truly yours,
E. L. Stvenson
Acting Director.
To:
Excmo.
Señor D. Guillermo J, de Osma
Calle Fortuny, 17
Madrid, Spain
Nº 74
OFFICE OF THE LIBRARIAN
Audubon Park, West 156th Strett
(Sello de la Hispanic Society of America)
NEW YORK.
Dec. 20, 1917.
Dear Sir:-
Your note of November 15th has just been received as well as the
collection of the review Archivo de Investigaciones Históricas which you
were kind enough to send to The Hispanic Society of America. Permit me to
thank you in the name of the President and Trustees of the Society.
It is a greatly to be regretted that so important a review should have
ceased to exist. The numbers that were published are recognized as of
importance, and we are especially glad to have them here.
With best regards, I am,
Very sincerely yours,
E.C.Hills
Librarian.
To
Excmo. Sr. D. Guillermo J. De Osma.
Calle de Fortuny, 17
Madrid, Spain.
288 MªÁNGELES SANTOS QUER
Nº 75
RECORDS 26/27
(Sello de la Hispanic Society of America)
Caja árabe
Retrato de Felipe IV y Ana Mauricia (Nº 11)
Dear Sir:
We are writing to as if there are photographs available of an ivory
box and a portrait painting by Bartolomé González in the colletion of the
Instituto de Valencia de Don Juan about which we inquired some time ago.
Would it be possible for us to obtain photographs of the ivory box and painting
from photographers in Madrid?
Any information that you are able to give us will be greatly
appreciated.
Nº 76
Correspª
RECORDS 26/27
(Sello de la Hispanic Society of America)
November 8th,
1927
Dear Sir:
We have been instructed by the President and Trustees of The
Hispanic Society of America to thank you on behalf of the Society for the
kind gifts mentioned below.
Yours very truly,
THE HISPANIC SOCIETY OF AMERICA
Department of Records
2 photograhs
Rectangular ivory box
González, Bartolomé – Portrait of Philip the Fourth of Spain and Ana
Mauricia, Queen of
Spain
Nº 77
Publicaciones
EL PATRONO Correspª 5/29
SECRETARIO GENERAL Y ADMINISTRADOR
DEL
INSTITUTO DE VALENCIA DE DON JUAN
SALU DA
Nº 78
1878 FINS Y DOTRES.
FINS Y JALIBERT,
JALIBERT Y Cº
TRANSPORTES INTERNACIONALES
AGENCIA DE ADUANAS J. Jalibert
TRÁNSITO
BARCELONA, Paseo Aduana, 19 pral. Barcelona 11 Agosto
1926
TELÉFONO NUM. A. 573
PORT-BOU
TELÉFONO Nº 10 INSTITUTO DE VALENCIA DE
CERBÈRE DON JUAN,
TELÉFONO N.º 24 FORTUNY, 43
DIRECCIÓN TELEGRÁFICA MADRID.
JALIBERT
AGENTES GENERALES PARA ESPAÑA
DE WELTIFURRER. S.A.
ZURICH-BALE
BUHS-SCHAFFHOUSE
RASTATT
B/MV
B/484
Nº 79
EL SECRETARIO GENERAL Y ADMINISTRADOR
DEL
INSTITUTO DE VALENCIA DE DON JUAN
SAL U DA
Nº 80
EL SECRETARIO GENERAL Y ADMINISTRADOR
DEL
INSTITUTO DE VALENCIA DE DON JUAN
SAL U DA
caja con una pintura artística, remitida desde Nueva York por el Sr. Presi-
dente de la Hispanic Society of America; no siendo de suponer que la con-
testación de Vd haya sido dirigida nuevamente a Valencia, como ocurrió con
su carta de 28 de Julio último; puesto que en las mías del 12 y 13 de Agosto,
le daba la dirección de Fortuny, 43, moderno, Madrid que es la de este Insti-
tuto.
JAV I E R G A R C I A DE LEAN I Z
etc. etc.
Nº 81
JOAQUIN GIBERT S. C.
____
TELÉFONO: 1442
_______
DIRECCIÓN TELEGRÁFICA:"JOABER"
BARCELONA 13 Marzo 1915
GRAN-VÍA LAYETANA, 7
Q. S. M. E.
P.P. JOAQUIN GIBERT S.C
LA CORRESPONDENCIA EPISTOLAR DE ARCHER M. H UNTINGTON ... 293
Nº 82
JOAQUIN GIBERT S. C.
_____
TELÉFONO: 1442
_______
A
principios del año 1907 el director de la Academia, Elías Martín
Riesgo, recibe una carta de Raimundo de Madrazo desde París, apo-
yando las gestiones que se estaban haciendo para nombrar acadé-
mico correspondiente en Nueva York a Archer Milton Huntington. Destaca
en él “un gran y acendrado amor a España como lo prueba la idea que está
realizando espléndidamente de crear un Museo Español”; y añade que, como
ya lo es de otras academias, le “parece que esta designación será justa y
oportuna” (fig. 1).
Efectivamente, pocos días después, el 28 de enero, se presentaba la
propuesta oficial, firmada por los académicos de número José Ramón Mélida,
Jacinto Octavio Picón, y Antonio García Alix. A su favor, mencionan que ya
lo era en igual categoría de las Reales Academias Española y de la Historia,
era fundador de la Sociedad Hispánica de América, y “entusiasta hispanófi-
lo, fervoroso admirador de nuestras glorias nacionales, a quien se debe la
reproducción de gran parte de nuestros tesoros bibliográficos y que ha con-
sagrado desde hace años su actividad, su inteligencia y gran parte de su
fortuna al enaltecimiento de nuestra Patria y la conservación de sus monu-
mentos literarios y artísticos”(fig. 2).
Siguiendo el protocolo estatutario, la propuesta habría de presentarse
hasta en cuatro sesiones ordinarias, lo que ocurrió en las del mismo 28 de
enero, 4, 18 y 25 de febrero, para finalmente verificar la votación en la se-
296 ESPERANZA NAVARRETE MARTÍNEZ
NOTAS
1
Libro de actas de las sesiones ordinarias, extraordinarias, etc. 1906-1910. RABASF. Archivo,
signatura 3-106, pp. 128, 134, 138, 143-144.
2
Expedientes de propuestas y nombramientos de académicos correspondientes. 1898-1907. RABASF.
Archivo, signatura 5-101-1.
3
Expedientes de propuestas y nombramientos de académicos de honor. 1919-1984. RABASF. Ar-
chivo, signatura 6-98-5.
4
Libro de actas de las sesiones ordinarias, extraordinarias, etc. 1940-1951. RABASF. Archivo,
signatura 3-540, pp. 75-76.
5
Libro de actas de las sesiones ordinarias, extraordinarias, etc. 1955-1957. RABASF. Archivo,
signatura 3-543, pp. 72-74.
6
Libro de actas de las sesiones ordinarias, extraordinarias, etc. 1955-1957. RABASF. Archivo,
signatura 3-543., pp. 141-142. Véase Francisco Javier SÁNCHEZ CANTÓN, “Necrología. Mr. Archer
Milton Huntington († el 12 de diciembre de 1955). Academia. Anales y boletín de la Real Academia
de Bellas Artes de San Fernando (Madrid), nº 5 (1955-1957), pp. 9-20, donde se incluye una ilustra-
ción del retrato que el difunto había encargado al artista ruso Paul Troubetzkoy en 1919, y posterior-
mente regalado al Instituto Valencia de don Juan.
7
Libro de actas de las sesiones ordinarias, extraordinarias, etc. 1929-1931. RABASF. Archivo,
signatura 3-113, pp. 431, 439, 442, 454, y 458
8
Expedientes de propuestas y nombramientos de académicos correspondientes fuera de España.
1920-1996. RABASF. Archivo, signatura 7-60-1
ARCHER M ILTON H UNTINGTON Y ANNA HYATT H UNTINGTON ... 299
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ción, reproducción, modificación o descompilación, sin previa autorización
de los legítimos propietarios.
Las imágenes se reproducen en baja resolución, aptas para su estudio
pero no para ser impresas.
Revista semestral publicada desde 1988. Cada tomo contiene dos nú-
meros, algunos con trabajos de carácter monográfico. Los tomos II (1989),
IV (1991) y VI (1993), de mayor extensión, recogen las comunicaciones y
ponencias desarrolladas, respectivamente, en los I, II y III Coloquios de Arte
e Iconografía que tuvieron lugar el año anterior a su impresión. Precio de
cada número normal, 10 i Los correspondientes a los Coloquios, 15 i.
ANEJOS
I
Tras el Centenario de Felipe IV. Jornadas de Iconografía y
Coleccionismo. Dedicadas al Profesor Alfonso E. Pérez Sánchez. Madrid,
2006, 444 pp. 257 ilustr. Color. Rústica. 30 i.
II
La Guerra de la Independencia. Actas de las Jornadas de Arte e
Iconografía. Madrid, 2009, 402 pp., 117 ilustr. Rústica. 75 €.
III
Actas de las Jornadas sobre Carlos IV y el arte de su reinado. Madrid,
2011, 366 páginas, ilustr. Rústica. 75 €.
13. MARÍA LUZ MARTÍN CUBERO: Alejo Fernández. Madrid, 1988, 66 pp.,
13. DOLORES MARÍA DEL MAR MÁRMOL MARÍN: Joyas en las co-
lecciones reales de Isabel la Católica a Felipe II. Madrid, 2001, 588 pp.,
ilustr. Rúst. 20 i.
34. PABLO CANO SAINZ: Fray Antonio de San José Pontones arquitecto,
ingeniero y tratadista en España (1710-1774). Madrid, 2010, 508pp., 222
ilustr. Rúst., 40 i.
PUBLICACIONES DE ARTE 319
I
Qvadros y otras cosas que tiene su Majestad Felipe IV en este Alcázar
de Madrid. Año de 1636. Documentación, transcripción y estudio: Gloria
Martínez Leiva y Ángel Rodríguez Rebollo. Madrid, 2007, 260 pp., 219 ilust.,
color, 36i.
OTRAS PUBLICACIONES
JOSÉ MARÍA RUIZ MANERO: Pintura italiana del siglo XVI en España:
I Leonardo y los leonardescos. Madrid, 1992, volumen I, 125 pp., Agotado.
JOSÉ MARíA RUIZ MANERO: Pintura italiana del siglo XVI en España:
II Rafael y su escuela. Madrid, 1992, volumen II, 263 pp., Agotado.
DAVID GARCÍA LÓPEZ: Lázaro Díaz del Valle y las vidas de pintores en
España. Madrid, 2008, 502 pp., 34 ilustr. Rústica. 30i.
Volumen II: Escritos sobre la Edad Moderna. Madrid, 2010, 614pp., 55ilustr.
Rústica. 80 i. (obra completa).