ELISEO

Tema: El propósito de tu llamado
Contenido
 Abraham, Génesis 12.1 al 5; el principio de la fe

 Moisés, Éxodo 3,4: el principio del liderazgo
 Gedeón, Jueces 6.16; el principio de la dirección
 Eliseo, 1 Reyes 19.19 al 21; el principio del discipulado
Título: Eliseo; el principio del discipulado

Texto: 1 reyes 19:19 al 21 y 2 reyes
Contexto Histórico:
Si el libro de Jueces es la época oscura de la teocracia, el período de Elías y Eliseo es la época oscura
de la monarquía en Israel.
Cincuenta y ocho años habían pasado desde la división del reino bajo Jeroboam. En este lapso breve
Judá contó con cinco reyes reformadores. Israel, con el gobierno central en Samaria, contó con
siete, todos ellos hombres impíos. El mal culminante vino con Acab y su consorte impía Jezabel. Este
era hombre débil, dominado por la peor mujer en la historia de Israel. Ella introdujo la prostitución
religiosa y la persecución política. Baal y Astarot eran deidades masculinas y femeninas,
respectivamente, representando una mezcla entre la religión y la crasa inmoralidad.
Dios empleó el rey para la reforma y avivamiento en Judá, pero en Israel empleó el profeta. Elías y
Eliseo eran de personalidades diferentes. Elías era de la planicie, un hombre del campo de Galaad
que parecía tosco. Su ministerio se caracterizó por fuego, agua y denunciación. En contraste, el
ministerio de Eliseo, su sucesor, se caracterizó por alimento, aceite y sal, los ingredientes de la
población. Juan el Bautista sería el Elías del Nuevo Testamento, mientras que Eliseo tipifica el
ministerio consolador y fragante del Señor Jesús.
Su vida:
El nombre de este hombre quiere decir “Dios es salvación”. Profeta del siglo IX a.C. en Israel, ungido
por Elías. Era hijo de Safat y vivía en Abel-mehola, al extremo norte del valle de Jordán y un poco al
sur de mar de Galilea. Veintinueve veces se habla de él como un varón de Dios y una vez como un
santo varón de Dios. Sirvió a Jehová por sesenta y seis años, desde su llamamiento en 1 Reyes 19.19
al 21 hasta su muerte en 2 Reyes 13.20. Este hombre pasó diez años con Elías como aprendiz y
luego cincuenta y seis trabajando solo. El suyo fue un período de servicio mayor que el de cualquier
otro profeta del Antiguo Testamento.
Su carrera abarca los reinados de Jeroboam, Jehú, Joacaz y Joás. Tuvo la responsabilidad de llevar a
cabo las órdenes que Elías había recibido en Horeb. Su larga vida y servicio uniforme puso de
manifiesto que había aprendido la lección que Elías escuchó en la cumbre del monte; el mensaje de
Dios no está en el fuego ni la tempestad, sino la voz apacible que se oye en la presencia de Dios.
Su llamamiento:
1. Sentía su llamado
Dios le había dicho a Elías que ungiera a Eliseo para que fuera profeta en lugar de él I R.19:16b;
“y a Eliseo hijo de Safat, de Abel-mehola, ungirás para que sea profeta en tu lugar”. Cuando
Dios decide llamar a alguien para el ministerio, pone un fuerte deseo en el corazón del que es
llamado, y aunque quiera resistirse no lo podrá hacer. Eliseo sentía en su corazón el llamado de
Dios.
2. Tenía una visión.

Definitivamente Eliseo soñaba con ser un siervo de Dios, ya que por su actitud demuestra que
quiere aprovechar la oportunidad que le está dando. I R.19:20; “Entonces dejando él los
bueyes, vino corriendo en pos de Elías, y dijo: Te ruego que me dejes besar a mi padre y a mi
madre, y luego te seguiré.”
Note la gran diferencia entre Eliseo y aquel que quiso seguir al Señor Jesús; Lc. 9:59; “Y dijo a
otro: Sígueme. Él le dijo: Señor, déjame que primero vaya y entierre a mi padre” Eliseo no iba
a perder más tiempo para comenzar a caminar en pos de lo que él anhelaba, mientras el otro
hombre, todavía estaba pensando en esperar que su padre muriera y luego seguiría a Jesús.
3. Reconoció las oportunidades.

Cuando una persona tiene una visión sabe reconocer cuando se le presenta las oportunidades.
Eliseo supo ver que en Elías estaba su gran oportunidad Vr.20; “Entonces dejando él los
bueyes, vino corriendo en pos de Elías,” las personas que no tienen una visión no saben
reconocer las oportunidades, aunque las tenga en frente. El pueblo de Israel no reconoció que
Jesús era el Mesías que habría de bendecirlos, pero ellos estaban encerrados en sus antiguos
esquemas que no supieron reconocer la Gran oportunidad de cambio. Lc. 19:42; “42diciendo:
¡Oh, si también tú conocieses, a lo menos en este tu día, lo que es para tu paz! Mas ahora
está encubierto de tus ojos.” Debemos estar conscientes que Dios quiere bendecirnos por tal
razón debemos aprovechar las oportunidades que Él nos da. Ef. 5:14-17; “14Por lo cual dice:
Despiértate, tú que duermes, Y levántate de los muertos, Y te alumbrará Cristo. 15Mirad,
pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, 16aprovechando bien el
tiempo, porque los días son malos. 17Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál
sea la voluntad del Señor.”
4. Estuvo dispuesto a sacrificar lo que tenía para lograr su objetivo.

Los que están definidos en una visión están dispuestos a sacrificar su comodidad y seguridad,
para lograr aquello que les dará mayor beneficio. Eliseo sabía que lo que le esperaba más
adelante era mayor que sus bueyes y sus arados, por eso valía la pena dejarlos atrás. I R. 19:
21a; “Y se volvió, y tomó un par de bueyes y los mató, y con el arado de los bueyes coció la
carne, y la dio al pueblo para que comiesen.” Algunos ejemplos
· Pablo: Fil. 3:13-14; “Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa
hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está
delante, 14prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.”
· Abraham: He.11:8; “Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que
había de recibir como herencia; y salió sin saber a dónde iba”
5. Pagó el precio para lograr cristalizar su ministerio.

No basta tener un llamado o una visión, ya que esto solo es el principio para comenzar a
caminar en pos de lo que se espera. Eliseo sabía que tendría que pagar el precio para ser
profeta, y esto era aprender del profeta, para esto tendría que servirlo y así conocer como
Elías tenía el respaldo de Dios. I R.19:21b; “Después se levantó y fue tras Elías, y le servía.”
Se puede tener una gran visión, pero para lograr que se materialice tiene que pagarse el precio.
Ejemplo:
· Si tiene un llamado, usted debe sentarse primero para aprender para que su ministerio sea
exitoso.
· Si se desea ser médico, abogado, ingeniero aviador, etc. El precio es desvelarse durante largas
noche estudiando, sacrificando privilegios entre otras cosas, hasta lograrlo.
· Si usted piensa poner una empresa, no basta tener el dinero y el entusiasmo, sino usted debe
saber sobre la clase de negocio que va a poner. Otra cosa no piense que si hoy pone su
empresa mañana obtendrá los resultados que esperaba. Recuerde en el proceso se va
madurando.
· Si usted quiere ser maestro de obra se debe comenzar por ser un buen ayudante de albañil.
Su ministerio nuevo
Acaecido todo esto, nuestro protagonista vuelve a su obra de reformación. Traza la circunvalación
en el sentido contrario, encontrando en Jericó agua mala, en Bet-el muchachos malos y en Gilgal
alimento malo.
Al cruzar el Jordán:
- Su primera dificultad fue el escepticismo de los hijos de los profetas, quienes negaron creer
que Elías había sido trasladado. 2 Reyes 2:15-17
- Para las aguas amargas de Jericó, el remedio fue echar en la fuente una vasija nueva. 2
reyes 2:18-22.
- Pero en Bet-el no había remedio sino juicio, ya que el profeta fue objeto de burla. 2 reyes
2:23-24.
- Para la viuda en bancarrota, su consejo fue traer vasos vacíos y echar en ellos aceite de la
insignificante reserva que quedaba. 2 reyes 4.
- Eliseo y la sunamita 2 reyes 4:8-37.
- En Gilgal había veneno en la olla que usaban los hijos de los profetas. El remedio ahora se
encuentra en un potaje sano, “y no hubo más mal en la olla”. 2 Reyes 4:38-44.
- En Jordán, Naamán tuvo que zambullirse siete veces en el río para ser sanado de su lepra. 2
Reyes 5.
- Eliseo hace flotar el hacha. 2 Reyes 6:1-7.
- Sal, hierbas, aceite y agua del río fueron los ingredientes que Eliseo empleó en su ministerio
de sanidad y consuelo.
Muerte de Eliseo 2 reyes 13:14-25.
CONCLUSION
La lección sobresaliente de la vida de este hombre es la del discipulado. Para él la escuela de Dios
había sido diez años de aprendizaje con Elías. Él echó agua sobre las manos de éste** pero más
adelante Dios derramó el agua del Espíritu sobre él, y él a su vez la derramó sobre un mundo
sediento y necesitado.
Encontramos este principio divino en la relación que había entre Moisés y Josué, Samuel y David,
Jeremías y Baruc, Pablo y Timoteo. Ninguno es apto para ser líder si no está dispuesto a seguir. La
verdadera humildad se aprende muchas veces fuera de la vista en tareas nada prestigiosas. Es
acertado el adagio de que se requiere gran gracia para tocar segundo violín.

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 Abraham, Génesis 12.1 al 5; el principio de la fe

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2. Tenía una visión.

3. Reconoció las oportunidades.

4. Estuvo dispuesto a sacrificar lo que tenía para lograr su objetivo.

5. Pagó el precio para lograr cristalizar su ministerio.

Muerte de Eliseo 2 reyes 13:14-25.

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