Unidad 4 Estrés
Unidad 4 Estrés
Unidad 4 Estrés
El estrés no siempre es malo, todos siempre tenemos un poco de estrés pero su exceso
puede provocar un trastorno de ansiedad. Ya no es bueno cuando nos sobrepasa e
interfiere en varias áreas de nuestra vida cotidiana
OTRA CLASIFICACIÓN:
Estrés agudo. Surge de las exigencias y presiones del pasado reciente y las exigencias y
presiones anticipadas del futuro cercano. El estrés agudo es emocionante y fascinante en
pequeñas dosis, pero cuando es demasiado, resulta agotador. Del mismo modo, exagerar
con el estrés a corto plazo puede derivar en angustia, que puede manifestarse en una
combinación de enfado o irritabilidad, ansiedad y depresión; otros síntomas comunes son
dolores de cabeza tensionales, malestar estomacal y otros síntomas físicos como elevación
de la presión arterial, taquicardia, sudoración de la palma de las manos, dolor de pecho,
respiración corta y superficial, mareos, etc.
Estrés agudo episódico. Es común que las personas con reacciones de estrés agudo
estén demasiado agitadas, tengan mal carácter, sean irritables, ansiosas y estén tensas.
Suelen describirse como personas con “mucha energía nerviosa”. Siempre apuradas,
tienden a ser cortantes y a veces su irritabilidad se transmite como hostilidad. Las
relaciones interpersonales se deterioran con rapidez cuando otros responden con hostilidad
real y el trabajo se vuelve un lugar muy estresante para estas personas.
Los síntomas del estrés agudo episódico son los de una sobre agitación prolongada:
persistentes dolores de cabeza tensionales, migrañas, hipertensión, dolor en el pecho y
enfermedad cardíaca. Tratar el estrés agudo episódico requiere la intervención en varios
niveles, que por lo general implica ayuda profesional, la cual puede tomar varios meses.
Estrés crónico. Algunos tipos de estrés crónico provienen de experiencias traumáticas de
la niñez que se interiorizaron y se mantienen dolorosas y presentes constantemente.
Algunas experiencias afectan profundamente la personalidad. Se genera una visión del
mundo, o un sistema de creencias, que provoca un estrés interminable para la persona (por
ejemplo, el mundo es un lugar amenazante, los otros descubrirán que la persona finge lo
que no es, debe ser perfecto todo el tiempo). Cuando la personalidad o las convicciones y
creencias profundamente arraigadas deben reformularse, la recuperación exige el
autoexamen activo, a menudo con ayuda de un profesional.
El peor aspecto del estrés crónico es que las personas se acostumbran a él, se olvidan de
que está allí. Las personas toman conciencia de inmediato del estrés agudo porque es
nuevo; ignoran al estrés crónico porque es algo viejo, familiar y a veces hasta casi resulta
cómodo.
El estrés crónico mata a través del suicidio, la violencia, el ataque al corazón, la apoplejía e
incluso el cáncer. Las personas se desgastan hasta llegar a una crisis nerviosa final y fatal.
Debido a que los recursos físicos y mentales se ven consumidos por el desgaste a largo
plazo, los síntomas de estrés crónico son difíciles de tratar y pueden requerir tratamiento
médico, psicoterapia y ayuda para el manejo del estrés.
Es importante que cuando una persona detecta los síntomas antes mencionados en sí
misma o en quienes le rodean, haga un alto y observe. Tal vez sea necesaria una
intervención profesional y es muy probable que se beneficie de un tratamiento
psicoterapéutico.
Militares
Este colectivo desempeña uno de los trabajos con más estrés por diferentes motivos.
Entre ellos, se encuentran el hecho de permanecer constantemente en zonas de guerra
y lejos de la familia, el miedo a sufrir algún daño físico, los traumas que originan las
situaciones de conflicto, etc.
Bomberos
Al igual que en el caso anterior, los bomberos también ofrecen un servicio público y
están expuestos a riesgo continuo. Estos profesionales arriesgan sus propias vidas para
asegurar a otras personas y, además, deben hacerlo en unas circunstancias extremas
que muchas veces escapan de su control.
Policías
La pertenencia a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado tampoco está exenta
de sufrir momentos de tensión. En este caso, las causas son los requisitos físicos y
psíquicos que se exige a la plantilla, los continuos cambios de residencia, los conflictos
diarios a los que se deben enfrentar, las amenazas que sufren por parte de algunos
grupos, etc.
Relaciones públicas
Al igual que en el caso de los organizadores de eventos, los responsables de relaciones
públicas también tienen que desempeñar una de las profesiones más estresantes. En
ambos casos puede parecer que se trata de un trabajo interesante, pero lo cierto es que
están relacionados con situaciones de tensión máxima que provoca el contacto directo
con los clientes.
Altos directivos
Los altos responsables de las empresas están sometidos a un elevado nivel de estrés
constante que suele estar ligado al puesto. La explicación se encuentra en la gran
responsabilidad financiera que deben asumir, así como en la carga de trabajo que tienen
todos los días.
Periodistas
Los reporteros se enfrentan a diario a una de las profesiones más estresantes como
consecuencia de diferentes factores que caracterizan este trabajo. En periodismo no
existen horarios, sino que se debe estar en el lugar de los hechos cuando ocurran, los
cuales pueden implicar un riesgo en muchas ocasiones. Junto a ello, se debe tener en
cuenta la ingente cantidad de información que se debe manejar.
Docentes:
Se enfrentan diariamente a trabajar con niños con grupos que oscilan entre 25 y 45 a
enfrentarse a hablar toda la jornada educativa, escuchar a cada momento a los alumnos y
atender diversidad de preguntas y problemáticas que se dan cada hora escolar, atender a
padres de familia y dirección así como la carga administrativa que deriva de sus labores.
Estrés en la docencia
Introducción
La profesión docente, enfrenta una crisis silenciosa que afecta a educadores en todo el
mundo: el estrés y el síndrome de burnout. En la actualidad, los docentes están sometidos
a presiones significativas que ponen en peligro su salud, bienestar y calidad educativa.
Examinaremos sus causas y consecuencias, y destacaremos cómo la práctica de yoga
y mindfulness puede ser una poderosa herramienta para aliviar el estrés y mejorar la
calidad educativa. Citas célebres y evidencia de expertos respaldarán la importancia de
esta transformación en la educación.
Una de las causas principales del estrés en docentes es la carga de trabajo abrumadora.
Los docentes a menudo trabajan horas extras en su casa para programar, preparar
material, evaluar tareas y mantenerse al día con las expectativas académicas. El resultado
es una presión constante y una falta de tiempo para el autocuidado. La educación
contemporánea ha experimentado un aumento en las expectativas de rendimiento y los
exámenes estandarizados. Los docentes se enfrentan a la presión de asegurar que los
estudiantes alcancen resultados específicos en pruebas normalizadas, lo que puede ser
abrumador. Los comportamientos disruptivos y desafiantes de los estudiantes pueden ser
fuente de agotamiento emocional para los docentes. La gestión del aula se convierte en un
desafío adicional en un entorno ya estresante. Del mismo modo, el estrés prolongado
puede llevar a problemas significativos:
La propuesta es:
Organizar muy bien tus tiempos de actividades, sé que salen imprevistos en esa
organización dejar espacio para ello.
Realizar una actividad que te relaje por lo menos una vez a la semana
No dejar cosas para después. Ya que solo provocas acumulación de tareas
Disponer tiempos para la familia
Hacer ejercicio por lo menos 20 minutos 3 veces a la semana
Si el cansancio te vence duerme, solo en casos extremos.
Organiza tu carga administrativa, siempre tener a la mano información