La Etapa de Los Jueces
La Etapa de Los Jueces
La Etapa de Los Jueces
ASIGNATURA:
Antiguo Testamento 1
PROFESOR:
Jesús Gutiérrez
NOMBRE:
Olinda de Caballero
8-730-47
FECHA:
04/Julio/2022
Introducción
El libro de los JUECES nos presenta a Israel en una de las etapas más críticas de su historia.
Es el tiempo que transcurre entre la penetración de las tribus hebreas en Canaán y la
instauración de la monarquía, es decir, entre los años 1200 y 1020 a. C. El pueblo se
encuentra amenazado por todas partes. Algunos grupos cananeos, sólidamente
atrincherados en sus plazas fuertes, continúan oponiendo una tenaz resistencia. Otros
invasores –especialmente los filisteos, mucho mejor organizados y armados que Israel–
luchan por adueñarse de los mismos territorios. Las tribus israelitas se encuentran aisladas
unas de otras, sin un gobierno central que pueda asegurar una firme cohesión interna. Y la
única base de la unidad nacional –la fe en el Señor, el Dios de Israel– corre el peligro de
dejarse contaminar por los seductores cultos cananeos.
En este clima de inseguridad y anarquía, se ve surgir a los héroes llamados “Jueces”. Este
título tiene un sentido más amplio que el habitual entre nosotros. Los Jueces de Israel son
“caudillos”, que se constituyen en defensores de la “justicia” para hacer valer el derecho
conculcado. Bajo la presión de un grave peligro, se ponen al frente de una o varias tribus y
liberan a sus hermanos de la opresión a que estos han sido sometidos. Su autoridad no es
estable, sino transitoria y excepcional. Una vez concluida la acción militar, vuelven a su
vida ordinaria, aunque el prestigio adquirido con sus hazañas les asegura a veces una
cierta preeminencia sobre las tribus liberadas.
Por su origen, su carácter y su condición social, estos caudillos y libertadores difieren
considerablemente unos de otros. Pero tienen un rasgo común: todos actúan bajo el
impulso del “espíritu”. El espíritu del Señor se manifiesta siempre como una fuerza divina,
que irrumpe súbitamente, se posesiona de ellos y los mueve a realizar proezas que están
por encima de sus capacidades naturales. De allí que a los protagonistas de estas gestas
guerreras se los pueda llamar con razón líderes “carismáticos”.
Los héroes del libro de los Jueces viven en una época de costumbres rudas e incluso
bárbaras. La traición de Ejud, el asesinato de Sísara, la masacre de Abimélec, el sacrificio
de la hija de Jefté y las aventuras amorosas de Sansón reflejan una moral que no es la del
Evangelio. Pero estos viejos relatos no están exentos de grandeza. En ellos se vislumbra la
pujanza de un pueblo que lucha por sobrevivir y mantener su identidad en medio de
circunstancias adversas. Y se descubre, sobre todo, la acción del Señor, que guía y
defiende a Israel, a pesar de sus miserias y claudicaciones.
TRIBUS DE ISRAEL
Jacob tuvo doce hijos. Seis hijos y una hija de su primera esposa Lea: Rubén, Simeón, Leví,
Judá, Isacar y Zabulón. Y su única hija Dina.
Cada uno de sus doce hijos fue escogido como cabeza genealógica de alguna de las doce
Tribus de Israel.
Tras su regreso de Egipto. Josué repartió la Tierra Prometida en Canaán entre los doce
hijos de Jacob: Rubén, Simeón, Leví, Judá, Isacar, 5. Zabulón, Gad, Aser, Dan, Neftalí,
José y Benjamín. La tribu de Leví se dedicó al sacerdocio, por lo que no se le asignó tierra.
Como José estaba muerto, su parte en el reparto se la dio a sus dos hijos Efraín y
Manasés.
La mayor parte de las páginas de El libro de los Jueces son composiciones populares que
se refieren a hechos de personajes históricos o legendarios, a acontecimientos
tribales.
El pueblo hebreo:
Inició su etapa sedentaria con el gobierno de Josué y la continuó con los llamados
Jueces, que también fueron líderes político-religiosos. Durante esta etapa la gente
se dedicó a la agricultura y habitó en casas o chozas de piedra y barro o de adobe.
Dejó de ser nómada en su gran mayoría y se convirtió en sedentario, pero sin llegar
a constituir una nación única, sino un conjunto de tribus con una religión común,
que en cambio de ayudarse se dedicaron a guerrear entre ellas.
Durante el periodo de los jueces padeció una crisis permanente, debido a
frecuentes discordias de carácter tribal y religioso, y por los peligros militares que
les presentaban los filisteos.
Con el ejemplo de los filisteos acabó convencido de la necesidad de tener un rey
como lo tenían los pueblos vecinos, una sola persona que ejerciera el mando en lo
militar y en lo político.
En tiempos de los Jueces estuvo completamente desorganizado,
sus instituciones no habían sido definidas y numerosos pueblos vecinos los
hostigaban.
OTONIEL
Otoniel significa león de dios. Fue el primero de dieciocho Jueces. Hijo de Otoniel de
Cenaz, hermano más joven de Caleb. Se casó con una sobrina la hija de Caleb.
Otoniel venció a Cusán-risataim y los israelitas tuvieron reposo durante cuarenta años.
EHUD O AOD
Aod significa fuerte. Después de otra opresión de 18 años de los israelitas por el rey
Eglón de Moab o de los moabitas, fueron liberados por Aod.
Aod, fue el segundo juez de Israel, después de Otoniel, segundo hijo de Gera de la tribu de
Benjamín. Gobernó a Israel por 80 años.
El rey Eglón reunió consigo a los hijos de Amón y de Amalec, y derrotó a Israel. Y los hijos
de Israel sirvieron a Eglón, rey de Moab, durante dieciocho años.
Los hijos de Israel enviaron con Ehud un presente a Eglón, quien se ciñó debajo de su
ropa, sobre su muslo derecho un puñal de doble filo. Entregó el presente a Eglón,
un hombre muy obeso, y le dijo: Oh rey, tengo un mensaje secreto para ti. Entonces él
dijo: ¡Calla! Luego salieron de su presencia todos los que estaban con él. Ehud se Acercó a
Eglón, quien estaba sentado y se levantó de su silla. Ehud extendió su mano izquierda,
tomó el puñal de su muslo derecho y se lo hundió en el vientre. El mango entró tras la
hoja, y la gordura cubrió la hoja, que le salió por detrás.
Luego Ehud Salió al Pórtico, Cerró tras sí las puertas de la sala de verano y puso el
cerrojo. Cuando los siervos del rey lo vieron salir fueron y miraron. Las puertas de la sala
estaban cerradas con cerrojo. Ellos dijeron: Está haciendo sus necesidades en el
interior de la sala de verano. Esperaron hasta quedar desconcertados. Tomaron la llave y
abrieron. Su señor estaba caído sobre el suelo, muerto. Mientras ellos esperaban Ehud
Escapó hacia Seirat.
Después él les dijo: ¡Seguidme, porque Jehovah ha entregado a vuestras manos a nuestros
enemigos, los moabitas! Ellos fueron tras él, tomaron los vados del Jordán que conducen a
Moab y no dejaron pasar a nadie. Mataron como a 10.000 hombres de los moabitas,
todos hombres robustos y valientes. No Escapó ninguno.
SAMGAR
Samgar significa el que huye. Fue hijo de Anat de la tribu de Benjamín. Mató a 600
hombres filisteos con una quijada de buey y liberó a Israel.
No se le da el título de juez, y no hay indicación alguna de que los israelitas lo hayan
considerado así, a pesar de que los liberó de la opresión.
Después de la muerte de Ehud, los hijos de Israel fueron sometidos por Jabín, rey de
Canaán, que reinaba en Hazor. El jefe de su ejército era Sísara, y habitaba en Haroset-
Goím. Tenía 900 carros de hierro y había oprimido con crueldad a los hijos de Israel
durante veinte años.
En aquel tiempo gobernaba a Israel Débora, profetisa, esposa de Lapidot. Ella Solía
sentarse debajo de una palmera, entre Ramá y Betel, en la región montañosa de Efraín. Y
los hijos de Israel Acudían a ella para juicios.
Mandó llamar a Barac hijo de Abinoam, y le dijo: Ve, toma contigo a 10.000 hombres de
los hijos de Neftalí y de los hijos de Zabulón, y reúnelos en el monte Tabor. Yo atraeré
hacia ti, a Sísara al arroyo de Quisón, con sus carros y sus escuadrones, y se lo entregaré.
Cuando comunicaron a Sísara que Barac había subido al monte Tabor, reunió todos sus
900 carros de hierro, y todo el pueblo que estaba con él, desde Haroset-Goím hasta el
arroyo de Quisón.
Barac Descendió del monte Tabor con los 10.000 hombres Detrás de él y desbarató a filo
de espada a Sísara con todos sus carros y todo su ejército. Sísara mismo se bajó del carro y
huyó a pie. Barac Persiguió los carros y al ejército hasta Haroset-Goím. Todo el ejército de
Sísara cayó a filo de espada hasta no quedar ninguno.
Sísara Huyó a pie a la tienda de Jael, mujer de Heber el queneo. Jael Salió recibió a
Sísara y le dijo: ¡Ven, señor Mío! Ven a Mí, no tengas temor. El entró en la tienda con
ella, y ella lo cubrió con una manta. Y él le dijo: Por favor, dame un poco de agua, porque
tengo sed. Ella abrió un odre de leche y le dio de beber, y lo volvió a cubrir. Entonces él le
dijo: Quédate a la entrada de la tienda, y si alguien viene y te pregunta: ¿Hay alguno
Aquí?, responderás que no.
Mientras Sísara estaba profundamente dormido y agotado, Jael, mujer de Heber, tomó
una estaca y un mazo en su mano, fue a él silenciosamente y le metió la estaca por las
sienes, clavándola en la tierra.
Cuando Barac venía persiguiendo a Sísara, Jael Salió a su encuentro y le dijo: Ven, y te
mostraré al hombre que buscas. El entró con ella, y Sísara yacía muerto con la estaca
clavada a través de sus sienes.
Así Sometió Yahvé aquel día a Jabín, rey de Canaán, ante los hijos de Israel.
GEDEÓN
Juez de Israel de 1191 – 1151 a.C., 40 años. Significa fe, victoria milagrosa. Hijo del gran
guerrero Joash. Tuvo muchas esposas y 70 hijos.
El ángel de Jehovah fue y se Sentó debajo de la encina en Ofra, que Pertenecía a Joás el
abiezerita. Su hijo Gedeón estaba desgranando el trigo en el lagar, para esconderlo de los
madianitas. El ángel de Jehovah, dijo a Gedeón: – ¡Jehovah Está contigo, oh valiente
guerrero! Gedeón le Respondió: Jehovah nos ha desamparado y nos ha entregado en
mano de los madianitas.
ABIMELEC
Hijo de Gedeón con una concubina en Shechem. Reinó durante tres años 1151-1149 a. C...
Abimelec significa: Padre del Rey. Este Abimelec no fue el rey de Gerar.
Abimelec hijo de Jerobaal fue a Siquem, a ver a los hermanos de su madre, habló con
ellos, con toda la familia de su madre y todos los señores de Siquem y les preguntó: ¿Qué
es mejor para vosotros: que todos los setenta hijos de Jerobaal, mis hermanos, os
gobiernen, o que solo yo os gobierne? Acordaos de que yo soy de los vuestros.
Le dieron 70 piezas de plata del templo de Baal-berit, con ellas Abimelec contrató a
hombres sicarios que le siguieron a la casa de su padre en Ofra y mató a sus 70 hombres
hermanos, hijos de Jerobaal, sobre una misma piedra. Pero quedó Jotam, el hijo menor de
Jerobaal, porque se escondió.
Entonces se reunieron todos los señores de Siquem con todos los de Bet-milo y
proclamaron a Abimelec como rey, junto a la encina que está al lado de la piedra ritual en
Siquem.
Jotam, fue a la cumbre del monte Gerizim. Y alzando su voz gritó diciéndoles:
¡Escuchadme, oh señores de Siquem!:
Los árboles del bosque querían elegir un rey y dijeron al olivo: ¡Reina sobre nosotros! Pero
el olivo respondió: ¡No renunciaré a mi aceite con el cual son honrados Dios y los
hombres, para ir a colocarme por encima de los árboles!
Luego dijeron los árboles a la higuera: ¡Ven Tú, y reina sobre nosotros! Pero la higuera
respondió: ¡No renunciaré a la dulzura de mi buen fruto, para ir a colocarme por encima
de los árboles! Luego dijeron los árboles a la vid: ¡Ven Tú, y reina sobre nosotros! Pero la
vid respondió: ¡No renunciaré a mi vino que alegra a Dios y a los hombres, para ir a
colocarme por encima de los árboles! Entonces todos los árboles dijeron a la zarza: ¡Ven
Tú, y reina sobre nosotros!
La zarza respondió a los árboles: ¡Si me ungís como reina, venid y refugiaos a mi sombra
para que no salga fuego de ella y os devore! Jotám continuó:
¡Pero vosotros os habéis levantado hoy contra la casa de mi padre, habéis matado a sus
hijos, a setenta hombres sobre una misma piedra, y habéis puesto por rey sobre los
señores de Siquem a Abimelec, el hijo de su criada, porque él es vuestro hermano!
¡Si habéis procedido de buna fe y con integridad con Jerobaal y con su casa, entonces
gozad de Abimelec, y que él también goce de vosotros! Y si no, ¡que salga fuego de
Abimelec, y consuma a los señores de Siquem y a Bet-milo! ¡Y que salga fuego de los
señores de Siquem y de Bet-milo, y consuma a Abimelec!
Jotam huyó, a Beer, donde continuó viviendo. Abimelec gobernó a Israel tres años,
Jehovah envió un mal espíritu y los señores de Siquem traicionaron a Abimelec, los
señores de Siquem sin dar aviso a Abimelec, colocaron en las cumbres de los montes,
hombres al acecho, para que despojaran a todos los que pasaban junto a ellos por aquel
camino.
Gaal hijo de Ebed con sus hermanos se pasaron a los señores de Siquem, quienes pusieron
su confianza en él. Salieron al campo, vendimiaron sus viñas, pisaron la uva e hicieron
vino. Luego entraron en el templo de sus dioses, comieron y bebieron, y maldijeron a
Abimelec.
Gaal hijo de Ebed les dijo: ¿Quién es Abimelec para que nosotros le sirvamos? ¡El hijo de
Jerobaal y Zebul, su oficial, deberían servir a los hombres de Hamor, padre de Siquem!
¿Por qué, pues, hemos de servirle nosotros a él?
¡Si este pueblo se pusiera bajo mi mando, yo echaría a Abimelec! Le diría a Abimelec:
¡Reúne tu ejército y sal de aquí!
Cuando Zebul, alcalde de la ciudad, oyó las palabras de Gaal, se encendió en ira y envió
astutamente mensajeros a Abimelec para decirle: Gaal hijo de Ebed y sus hermanos han
venido a Siquem, y están sublevando la ciudad contra ti. Por tanto, ven de noche con la
gente que está contigo, y pon emboscadas en el campo. Por la mañana, al salir el sol,
levántate y ataca la ciudad. Cuando Gaal y la gente que está con él salgan contra ti, tú
actuarás según se te ofrezcan.
Abimelec y toda la gente que estaba con él se levantaron de noche y montaron una
emboscada contra Siquem con cuatro escuadrones.
Entonces Zebul le Respondió: Dónde Está aquel hablar tuyo, cuando decías "¿Quién es
Abimelec, para que le sirvamos?" ¿No es ésa la gente que tenías en poco? ¡Sal, pues,
ahora y lucha contra él! Gaal Salió al frente de los señores de Siquem y luchó contra
Abimelec. Pero Abimelec lo venció y persiguió hasta la entrada a la ciudad. Y muchos
cayeron
muertos.
Abimelec se quedó en Aruma, y Zebul echó fuera de Siquem a Gaal y a sus hermanos.
Los señores que estaban en la torre de Siquem, entraron en la fortaleza del templo del
dios Berit.
Entonces subió Abimelec al monte Salmón con toda su gente y ordenó que cada uno
cortase una rama seca de los árboles y le siguieran.
Las pusieron junto a la fortaleza y les prendieron fuego. Murieron todos los que estaban
en la torre de Siquem, como unos mil hombres y sus mujeres.
Después Abimelec fue a Tebes y la tomó. En medio de aquella ciudad había una torre
fortificada en la cual se refugiaron todos los hombres y mujeres de la ciudad. Cerraron tras
de sí las puertas, y subieron a la azotea de la torre.
Abimelec fue a la torre, se acercó a la puerta para prenderle fuego, pero una mujer dejó
caer una piedra de molino sobre su cabeza y se la destrozó.
Llamó apresuradamente a su joven escudero, y le dijo: Saca tu espada y Mátame, para que
no se diga que una mujer me mató. Su escudero lo atravesó, y Abimelec murió.
Así Jehovah castigó todo el mal que Abimelec había hecho al matar a sus setenta
hermanos.
TOLA
Tola era de la tribu de Isacar. Reinó 23 años, 1149 – 1129 a.C. Tola significa: carmesí.
Después de Abimelec se levantó, para liberar a Israel Tola, hijo de Fúa. Habitó en Samir, en
la región montañosa de Efraín. Murió y fue sepultado en Samir.
JAÍR
Jaír un galadita Juez de Israel durante veintidós años. 1126 – 1104 a.C. Jaír significa aquel
que alaba. En este período Booz se casó con Rut en 1120 a.C. Tuvo treinta hijos que
montaban sobre treinta asnos, y tenían treinta villas, que se llamaban Havot-Jaír en la
tierra de Galaad. Murió y fue sepultado en Camón. Galaad tenía grandes bosques y
praderas donde se podía criar ganado y levantar abundantes cosechas.
APORTE PERSONAL
El libro describe las acciones de muchos de esos líderes, algunos de los cuales ayudaron a
librar a los israelitas de los efectos de su comportamiento pecaminoso. A medida que los
alumnos estudian el libro de los Jueces, pueden aprender que el Señor permite que Su
pueblo sufra las consecuencias de ser infieles a Él. Los alumnos también verán que el
Señor está dispuesto a librar a Su pueblo tantas veces como se arrepientan de sus
pecados.
Loa Jueces procedían de todos los estratos de la sociedad, Pero tenían en común dos
cosas:
1. Eran escogidos por Dios
2. Eran dirigidos por el Espíritu de Dios
No hicieron milagros, pero sus victorias acreditaban que eran guiados por Dios.
Tenían defectos morales pero aun así fueron usados por Dios.
No debemos juzgarlos por sus hechos a la luz del Nuevo Testamento, Vivian en una época
oscura.
Varios aparecen entre los héroes de la fe de hebreos.
BIBLIOGRAFIA
https://www.sanpablo.es/libro-pueblo-de-dios/la-biblia/los-profetas/jueces
https://www.monografias.com/trabajos91/primeros-jueces/primeros-jueces