Síndrome de Reabsorción Post-Resección Transuretral (R.T.U.) de Próstata: Revisión de Aspectos Fisiopatológicos, Diagnósticos Y Terapéuticos
Síndrome de Reabsorción Post-Resección Transuretral (R.T.U.) de Próstata: Revisión de Aspectos Fisiopatológicos, Diagnósticos Y Terapéuticos
Síndrome de Reabsorción Post-Resección Transuretral (R.T.U.) de Próstata: Revisión de Aspectos Fisiopatológicos, Diagnósticos Y Terapéuticos
KEY WORDS:
Benign prostatic hyperplasia. Hyponatremia. TURP syndrome.
RESUMEN
A pesar del desarrollo de técnicas no invasivas para el tratamiento de la hiperplasia benigna pros-
tática (HBP), el tratamiento quirúrgico que, en muchas ocasiones es la resección transuretral (R.T.U.),
constituye la opción terapéutica más eficaz para aquellos pacientes que no responden favorablemen-
te a la farmacoterapia. La absorción de líquidos hipotónicos utilizados para la irrigación vesical duran-
te el procedimiento pueden causar alteraciones hemodinámicas y del sistema nervioso central (S.N.C.)
que, en su conjunto o por separado, se conocen como “Síndrome de reabsorción o de resección tran-
suretral” (Síndrome R.T.U.).
A pesar de que la descripción de este síndrome se produjo hace más de medio siglo, permanecen
aún en debate a múltiples aspectos, tanto de su fisiopatología como de su tratamiento. Hemos lleva-
do a cabo una revisión bibliográfica de este tema, actualizando aspectos diagnósticos y terapéuticos.
ABSTRACT
In spite of the development of non-invasive strategies, surgical treatment of the prostate (TURP)
and, mostly transurethral resection, is the most effective choice for patients suffering from benign
prostatic hyperplasia who do not respond properly to pharmacological treatment. Absorption of hypo-
tonic fluids used during TURP may cause hemodynamic and central nervous system disturbances.
These symptoms, both taken separately or as a whole, are best known as “Transurethral prostatic
resection syndrome” or “TURP syndrome”.
The original description of this syndrome dates from half a century ago; however, a number of items
regarding its physiopathology and treatment remain unclear. We present a review of this pathological
entity, compiling diagnostic and therapeutical approaches.
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SÍNDROME DE REABSORCIÓN POST-RESECCIÓN TRANSURETRAL (R.T.U.) DE PRÓSTATA: REVISIÓN DE ASPECTOS FISIOPATOLÓGICOS
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L.M. CLEMENTE RAMOS, F. RAMASCO RUEDA, A. PLATAS SANCHO, Y COLS.
partir de los 50 años y, en algunos, incluso antes. El tratamiento quirúrgico se indica en aquellos
Con el paso de los años, la prevalencia de HBP his- pacientes con HBP que presentan una obstrucción
tológicamente identificable aumenta, de manera urinaria sintomática. Algunos autores recomien-
que hacia los 60 años es más del 50% y hacia los dan emplear la técnica transuretral en caso de
85 alcanza un 90% de los varones17. próstatas menores de 60 gramos21. Es un proce-
La próstata del adulto tiene una forma similar dimiento quirúrgico cerrado, que se realiza a tra-
a una castaña, con la base a nivel del cuello vesi- vés de un tubo (generalmente de 24 a 27F de diá-
cal y el ápex situado inmediatamente craneal a la metro), al que se incorporan una lente de visión,
uretra membranosa. Sus dimensiones suelen ser una fuente de luz y un asa metálica conectada a
de 3 cm. de longitud, anchura y espesor. Está for- una fuente de energía eléctrica con la posibilidad
mada por tejido glandular y estroma fibromus- de cortar y coagular el tejido prostático. Además,
cular. Microscópicamente se aprecian múltiples permite la irrigación continua para facilitar la
acinis revestidos por un epitelio columnar, sepa- visión quirúrgica. A veces es inevitable que esas
rados por abundante estroma. En un determina- venas prostáticas comprimidas (sinusoides) sean
do momento de la vida del individuo, próximo a abiertos durante la resección y que los líquidos
los 50 años (e incluso antes), en el interior de la hipotónicos utilizados para la irrigación sean
glándula prostática se inicia un crecimiento sin- absorbidos en el compartimento intravascular. La
gular que se traduce en la formación de nódulos integridad de esa “cápsula quirúrgica”, por lo
de tamaño variable, constituyendo lo que cono- menos hasta el final de la resección, disminuye la
cemos con el nombre de hiperplasia, hipertrofia absorción extravascular.
o adenoma prostático. Este proceso entraña una A pesar de que se ha postulado que el sd. R.T.U.
multiplicación de las células epiteliales y del es causado por toxinas procedentes del tejido
músculo liso, así como un desarrollo exagerado prostático liberadas durante el procedimiento22,
del tejido conjuntivo en las glándulas que tapizan existen numerosos datos que evidencian que el
la uretra prostática proximal (Fig. 1). Este creci- líquido de irrigación es el verdadero causante de
miento hiperplásico está estimulado por hormo- esta complicación5-11, por lo que debemos conocer
nas testiculares y comprime el resto del tejido los diferentes tipos que se utilizan, así como sus
prostático normal contra la cápsula fibrosa, for- características para entender las potenciales con-
mando todo ello una “cápsula quirúrgica”, con- secuencias de su utilización.
sistente en tejido prostático normal comprimido El líquido ideal para la irrigación de la vejiga
y vasos venosos18-20. debería reunir las siguientes características23,24:
– No producir hemólisis.
– Apirógeno.
– Isotónico y no tóxico (por sí mismo ni al meta-
bolizarse), cualidades fundamentales en la
medida que puede introducirse en el organis-
mo a través de las vías intra y extravasculares.
– Eléctricamente inerte (no conductor).
– Transparente, lo cual posibilita una adecua-
Tejido HPB da visión endoscópica.
– Fácil de esterilizar.
– No alergénico.
Uretra Prostática
estrechada por – Barato.
el crecimiento
de la HPB
• Agua destilada: Eléctricamente inerte, buenas
propiedades ópticas y barata. Extremadamente
hipotónica, por lo que puede producir hemólisis,
FIGURA 1. Esquema anatómico básico del área vésico-ure-
shock y fracaso renal. Se utiliza más frecuente-
tro-prostática (corte transversal). mente en algunas cistoscopias diagnósticas.
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SÍNDROME DE REABSORCIÓN POST-RESECCIÓN TRANSURETRAL (R.T.U.) DE PRÓSTATA: REVISIÓN DE ASPECTOS FISIOPATOLÓGICOS
• Suero salino: Es isotónico, pero tiene los Los pacientes sometidos a R.T.U. (Tablas II y III),
grandes inconvenientes de ser hemolítico y de no dada su edad, genera mente elevada respecto de
poder usarse con los resectores porque dispersa otros procesos quirúrgicos, son particularmente
la corriente eléctrica. Se utiliza fundamentalmen- vulnerables a sufrir complicaciones perioperatorias
te en endoscopias diagnósticas y lavados quirúr- ante la elevada incidencia de patologías asociadas
gicos. (enfermedades cardiovasculares, pulmonares, dia-
betes, etc.). Teniendo en cuenta este contexto, es
• Glicina al 2,5%: Es el medio más utilizado preceptivo un adecuado conocimiento de la fisio-
desde inicios de los años 80. Es casi isotónica, no patología del sd. R.T.U. en la medida en que nos
es hemolítica ni conductora, pero puede producir permita minimizar su incidencia y aplicar un tra-
hemodilución (con sus problemas asociados) e tamiento adecuado.
hiperamonemia. Se la considera responsable de
los cuadros de ceguera transitoria asociados al sd.
R.T.U. TABLAS II y III
CARACTERÍSTICAS DE LOS PACIENTES SOMETIDOS
• Soluciones de manitol o sorbitol/manitol A RTU Y PARÁMETROS ASOCIADOS
– Manitol al 5%: Es una solución ligeramente
hipertónica, no conductora, y que se ha compro- Media Máximo
bado que produce mayor hipervolemia que las Edad paciente 63-73 años > 90 años
soluciones que contienen glicina y sorbitol25. Se Tº de resección (h) < 1,2 h 3,5 h
elimina de forma directa por el riñón (98-100%);
Masa resecada (gr) 22-24 110
en caso de insuficiencia renal puede llegar a pro-
ducir edema agudo de pulmón26. % absorción (ml/min) 10-30 200
– Cytal: Es una mezcla de sorbitol 2,7% y mani- Volumen absorbido (litr.) 1 8,8
tol al 0,54%. El sorbitol es metabolizado en el híga- Sangrado (litr.) 0,176-0,534 3
do, inicialmente a fructosa y posteriormente a glu-
cógeno, teniendo una vida media de 30-50 minu- Gravenstein D. Transurethral resection of the prostate (TURP) syn-
drome: a review of the pathophysiology and management. Anesth
tos, y por ello tiene el riesgo potencial de producir Analg 1997; 84: 438-446
acidosis láctica en pacientes diabéticos, aunque
ésto no ha sido confirmado en la práctica clínica26.
Ofrecen ciertas ventajas teóricas sobre la solu-
Nº de pacientes 100
ción de glicina, sin presentar desventajas aparen-
Edad (años) 66,76 (6,50)
tes. En caso de que ocurra la absorción del líqui-
do de irrigación, al producirse ésta a la vez que la Tº de resección (min) 40,17 (22,61)
del diurético osmótico, éste evitaría que la absor- Masa resecada (gr) 29,20 (13,93)
ción fuese manifiesta y diera lugar a la clínica Descenso de natremia (meq/l) 5,48 (5,88)
correspondiente 25 . No se utilizan apenas en
Volumen glicina (litr.) 31,19 (13,17)
España pero sí en países anglosajones, en los cua-
les ya se ha publicado algún estudio con excelen-
Vesga F, Blasco M, Llarena R, et al. ¿Predice la hiponatremia el sín-
tes resultados en cuanto a morbilidad23 (Tabla I). drome post-RTU? Arch Esp Urol 1994; 47: 782-784
TABLA I
CARACTERÍSTICAS DE LOS LÍQUIDOS DE LAVADO EN R.T.U.
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SÍNDROME DE REABSORCIÓN POST-RESECCIÓN TRANSURETRAL (R.T.U.) DE PRÓSTATA: REVISIÓN DE ASPECTOS FISIOPATOLÓGICOS
El bloqueo simpático que produce la anestesia dependientes del volumen. Así, la hiponatremia
regional puede contribuir a simular este aspecto aguda que puede ser causada por la rápida absor-
de la patofisiología del síndrome. Además, una ción de una gran cantidad de volumen de irriga-
endotoxemia intraoperatoria puede ocurrir en un ción libre de sodio (similar a una intoxicación
porcentaje significativo de pacientes a pesar de la hídrica aguda) ha sido invocada clásicamente
profilaxis antibiótica, remedando o favoreciendo el como causa de las múltiples alteraciones del
proceso expuesto. Por ello, sobre todo los pacien- S.N.C. que constituyen el complejo sindrómico:
tes portadores de sonda urinaria o con uroculti- alteraciones visuales, encefalopatía, convulsiones
vos positivos, se debe insistir en proporcionar una y también otras como colapso cardiovascular y
adecuada cobertura antibiótica31. edema pulmonar, llegando incluso a la muerte.
El sodio (Na+) es un electrolito distribuido por
3.2.3. La absorción de agua destilada puede ser
todo el organismo, siendo su papel particular-
la causante de una hipoosmolaridad aguda con
mente importante en la despolarización celular y
hemólisis masiva y sangrado abundante, lo cual
en la transmisión de los potenciales de acción. Su
va a disminuir aún más el volumen intravascular.
función sobre las células excitatorias del cerebro
La hemoglobinuria puede provocar fallo renal
y el corazón es imprescindible, de modo que su
agudo e incluso puede producirse una hiperpota-
reducción en el plasma produce tanto síntomas
semia y una fibrilación ventricular secundaria.
neurológicos (irritación, convulsiones, coma)
La glicina, el sorbitol y el manitol son eléctri-
como alteraciones del ritmo cardíaco (taquicardia,
camente no conductores pero osmóticamente
fibrilación ventricular, asistolia)34.
activos. Estos solutos son añadidos a los fluidos
de irrigación para evitar la hipoosmolaridad
3.3.1. Hiponatremia
extrema (Tabla IV), que provocaría una hemólisis
La incidencia de concentraciones séricas de
intravascular masiva e hipovolemia extrema. Su
sodio inferiores a 125 mmol/l después de la R.T.U.
uso en las soluciones de irrigación ha reducido la
puede alcanzarse hasta en el 15% de dichos pro-
aparición de hemólisis significativa y muerte en
cedimientos, con una mortalidad de hasta el 25-
más del 50%32. Por el contrario, algunos urólo-
40% cuando es sintomática. Las concentraciones
gos siguen utilizando el agua destilada pues, aún
de sodio descienden de 6 a 54 mmol/l (media 10
asumiendo que se produce cierto grado de reab-
mmol/l) en un porcentaje no despreciable de las
sorción, no documentan una incidencia signifi-
intervenciones (7 al 20%), siendo descritos, inclu-
cativa de alteraciones hidroelectrolíticas o hemó-
so, descensos desde un nivel preoperatorio normal
lisis. El ahorro medio por cada tratamiento utili-
a 113 ó 104 nmol/l en el post-operatorio inme-
zando este líquido de irrigación se ha estimado
diato35.
en 162,6 USD33.
Tres son las causas fundamentales de que ésto
ocurra36:
3.3. ALTERACIONES EN LOS SOLUTOS
– Dilución del Na+ por el líquido absorbido.
PLASMÁTICOS: HIPONATREMIA E HIPO-
– Pérdida del Na+ en el líquido de lavado intra-
OSMOLARIDAD
vesical.
Los cambios en los solutos plasmáticos pueden
– Difusión del Na+ al espacio intersticial con el
alterar la función neurológica además de los efectos
líquido lavador.
TABLA IV Pero la explicación del proceso no es tan sen-
PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DE LAS cilla y surgen varias incógnitas. Por un lado, los
SOLUCIONES DE IRRIGACIÓN cambios intraoperatorios de la natremia no están
Tipo de solución Concentración Osmolaridad determinados claramente tanto por la altura del
solutos (mmol/l) líquido de irrigación37 como por el uso de un sis-
Glicina 1,5% 220 tema de irrigación continuo o intermitente38, pese
Cytal mezcla 178 a lo cual no existe duda en cuanto que la dilución
Glucosa 2,5% 139 del Na+ plasmático se acrecienta cuando el volu-
Agua destilada 0% 0 men irrigante absorbido es alto y, sobre todo, si la
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SÍNDROME DE REABSORCIÓN POST-RESECCIÓN TRANSURETRAL (R.T.U.) DE PRÓSTATA: REVISIÓN DE ASPECTOS FISIOPATOLÓGICOS
relacionados con el sd. R.T.U. Se metaboliza par- como son los efectos secundarios de una sedación
cialmente en el hígado a glioxilato, dando lugar profunda, la liberación de sustancias por el tejido
finalmente a oxalato, que es eliminado finalmente prostático, un sangrado mayor de 500 cc., etc.
en orina. También se produce su deaminación, lo Algunas de las complicaciones de las R.T.U.
cual se ha podido detectar hasta en el 46% de los también pueden producir una sintomatología
pacientes sometidos a RTU, lo cual podría contri- parecida al sd. R.T.U.21,24:
buir a los cambios neurológicos que se pueden
– Perforación vesical: su incidencia es del 1% en
producir en el síndrome RTU. La tasa de metabo-
esta intervención, y puede deberse a un problema
lismo de ambas vías es dosis-dependiente, predo-
instrumental, a la distensión excesiva de la vejiga
minando la deaminación si los niveles de glicina
por el líquido lavador o tras un estímulo directo
son más altos26.
del nervio obturador. La mayor parte de las perfo-
La glicina puede producir encefalopatía y con-
raciones suelen ser extraperitoneales, y el primer
vulsiones vía N-metil D aspartato (NMDA), un neu-
signo clínico suele ser la salida deficiente del líqui-
rotransmisor excitatorio. La actividad del receptor
do de lavado. Los pacientes pueden referir tam-
NMDA es potenciada por la glicina, de modo que
bién náuseas, diaforesis y/o dolor hipogástrico.
a pesar de su actividad inhibitoria sobre otras vías,
Las perforaciones extraperitoneales importan-
puede facilitar la transmisión excitatoria en el
tes y la mayoría de las intraperitoneales se pre-
cerebro a través de una activación alostérica del
sentan como una repentina e inexplicada hipo-
receptor NMDA.
tensión o a veces hipertensión, asociada a un dolor
Entre los signos de intoxicación aguda debidos a
abdominal generalizado, si el paciente está cons-
la glicina se incluyen náuseas, vómitos, cefalea y
ciente. Independientemente de la técnica anesté-
debilidad muscular. Éstos aparecen ante un ritmo de
sica, la perforación debe ser sospechada en todo
infusión de 3,5 mgr/ml, lo cual representa una
paciente con hipotensión o hipertensión repenti-
absorción intravascular de glicina al 1,5% de 54
na, especialmente asociada a bradicardia, duran-
ml/min. Se han publicado niveles séricos de glicina
te el periodo perioperatorio.
de hasta 14300 µmol/ml, o sea 17 veces mayores
que las halladas en los niños que mueren de encefa- – Hemorragia: la hemorragia intraoperatoria
lopatía glicínica (congénita) y 65 veces mayores que puede ser debida a causas meramente “quirúrgi-
los niveles normales de 219 µmol/ml. Las alteracio- cas”, como la cantidad de tejido resecado, la dura-
nes visuales en el síndrome R.T.U. varían en severi- ción de la intervención, la experiencia del ciruja-
dad, y abarcan desde visión borrosa a la ceguera no o una cauterización deficiente. En general, se
completa, considerándose a la glicina como la prin- considera como aceptable una pérdida media de
cipal causante de las mismas44. A pesar de que un sangre de 15 ml/gr de próstata resecada.
rango amplio de niveles séricos de glicina ha sido La cantidad de líquido lavador absorbido puede
documentado en pacientes con cambios visuales, se causar una hemorragia “dilucional” provocada por
ha llegado a la conclusión de que la concentración de la afectación de la función plaquetaria, no en tanto
glicina que inicia las alteraciones visuales es de más sus cualidades como su cantidad relativa; lo
de 4000 µmol/ml, y la ceguera más de 13734 µmol/l. mismo ocurre con los factores de la coagulación y
La glicina es probablemente un neurotransmisor el fibrinógeno.
inhibidor mayor de la retina, afectando a concentra- Los factores mecánicos que afectan al vacia-
ciones altas, el normal funcionamiento de la misma, miento de la vejiga (sondas obstruidas, coágulos)
de forma independiente del posible edema cerebral provocarán, a su vez, la distensión vesical y la
secundario a la hipoosmolaridad46-48. apertura de lechos vasculares inicialmente coa-
gulados, produciendo hemorragia. Para evitar este
3.6. OTROS FACTORES; DIAGNÓSTICO problema es fundamental un cuidado postopera-
DIFERENCIAL torio extremo del drenaje vesical para evitar el
Es importante tener en cuenta otros factores taponamiento por coágulos o restos tisulares, lo
que, aunque no guardan relación con el síndrome, que provocaría un circulo vicioso: coágulo-obs-
pueden originar una sintomatología parecida, trucción-distensión-hemorragia.
21
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TABLA VI
SIGNOS Y SÍNTOMAS ATRIBUIDOS AL SD. R.T.U., CLASIFICADOS POR SISTEMAS FISIOLÓGICOS
Y EN ORDEN DE INCREMENTO DE SEVERIDAD
Muerte
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SÍNDROME DE REABSORCIÓN POST-RESECCIÓN TRANSURETRAL (R.T.U.) DE PRÓSTATA: REVISIÓN DE ASPECTOS FISIOPATOLÓGICOS
la natremia cae por debajo de 120 mEq/dl, encon- – Ceguera transitoria: este síntoma ocurre en
trándose entonces con alteraciones tales como algunos pacientes durante o al final de la R.T.U.,
bradicardia, pérdida de la onda P, ritmos nodales, cuando la glicina es usada como líquido de irriga-
taquicardia ventricular, ensanchamiento del QRS, ción. El primer signo es una visión borrosa, dete-
depresión del ST o inversión de la onda T. Si la bra- riorándose en los siguientes 10 min. hasta una
dicardia se asocia a hipotensión, aumenta el ries- ceguera completa. Las alteraciones visuales pue-
go de parada cardiaca intraoperatoria51. den aparecer como el único síntoma del sd. R.T.U.
o uno de los primeros signos de severidad del
– Dolor torácico: algunos pacientes pueden refe- mismo. Algunos pacientes presentan pupilas
rir dolor torácico, generalmente a los 20-25 min. perezosas, fijas o dilatadas, y una pérdida total de
del comienzo de la absorción, cuando la P.V.C. y la discriminación luz-oscuridad.
la presión arterial sistólica (P.A.S.) están elevadas, Aunque la glicina está considerada desde hace
así que pude constituirse en el primer síntoma del unos años como la causa principal de este cuadro,
síndrome. Cede en 10-15 min. o tan pronto como la atropina y la hiponatremia, así como el edema
disminuye la P.A.S.52. cerebral por sobrehidratación, también pueden
contribuir a provocar estas alteraciones visuales.
– Sistema respiratorio: la disnea es un síntoma Aún así, aunque es difícil separar los efectos de las
común en el sd. R.T.U.; ésto probablemente puede concentraciones séricos de Na+ de aquellos de
explicarse por la tendencia del fluido de irrigación transmisión retiniana (glicina), el sodio parece
a acumularse en el tejido pulmonar. Algunas desempeñar tan sólo un pequeño papel en las alte-
veces, la taquipnea precede a la cianosis y al raciones visuales.
edema pulmonar intersticial que se produce unos La visión normal se recupera espontáneamen-
minutos más tarde. El edema manifiesto se desa- te después de 4 a 12 horas de la finalización del
rrolla intraoperatoriamente y ocurre típicamente procedimiento44,55.
al final de la primera fase (hipervolémica), siendo
a veces más tardío y una vez que la hipotensión – Encefalopatía: náuseas, comportamiento
aparece. El edema pulmonar se va a asociar con irracional y confusión, entre otros, pueden ser
un peor pronóstico, incluso cuando se adoptan las observados como el primer signo del sd. R.T.U.
medidas terapéuticas adecuadas53. La mayoría de las alteraciones del S.N.C. están
Los síntomas respiratorios en el sd. R.T.U. son asociadas a niveles séricos de Na+ inferiores a
agravados frecuentemente por una acidosis meta- 120 mmol/l, aunque como ya hemos visto, la
bólica moderada-severa, pero el pH sólo cae dra- hipoosmolaridad más que la hiponatremia en sí
máticamente si el edema pulmonar o la encefalo- misma, parece ser el principal responsable de
patía impiden una función respiratoria normal54. las alteraciones a este nivel. Puede apreciarse
falta de coordinación de los movimientos de las
– Anuria: después de los síntomas iniciales del extremidades, calambres musculares, e incluso,
sd. R.T.U., el paciente puede desarrollar oliguria y alteración del nivel de conciencia. Si el paciente
anuria, sobre todo en aquellos que han sufrido llega a un estado de coma, normalmente éste se
una hipotensión marcada. La producción de orina resuelve después de 15 a 24 horas con un tra-
puede ser fácilmente infraestimada si la vejiga es tamiento adecuado, y si desgraciadamente lleva
lavada con alguna solución una vez que el proce- a la muerte, usualmente se producirá tras 24
dimiento quirúrgico ha concluido. horas26,56. Un reciente estudio pone de relieve la
posibilidad de que estas alteraciones no se
4.2. SISTEMA NERVIOSO deban únicamente a la absorción del fluido de
– Clínica sensitiva: las parestesias o disestesias irrigación y las alteraciones en el medio interno
en los brazos, cara y cuello se presentan rápida- que éste comporta, sino que la disminución de
mente después de una absorción importante de la perfusión cerebral durante la anestesia regio-
glicina, no ocurriendo cuando se emplean otras nal desempeñaría también un papel en su ori-
soluciones de irrigación50. gen57.
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L.M. CLEMENTE RAMOS, F. RAMASCO RUEDA, A. PLATAS SANCHO, Y COLS.
– Convulsiones: las convulsiones son tipo “gran no se superen los 60 cm. de altura respecto a la
mal” y normalmente coinciden con el comienzo de aurícula izquierda a la hora de colocar las bolsas
la encefalopatía, después que el paciente haya de fluido de irrigación (la absorción del líquido
experimentado síntomas más “leves” del sd. R.T.U. puede ser más del doble únicamente modificando
Se postula que las convulsiones están más rela- la altura de 60 a 70 cm.)61,62. Además, se debe faci-
cionadas con la hiponatremia que con la hipoos- litar la salida del líquido de irrigación, evitando los
molaridad58. tubos colectores sinuosos y de poca sección, e
La absorción extravascular produce típica- incluso realizar una aspiración continua (más fre-
mente un disconfort o dolor hipogástrico durante cuente), colocar un tubo suprapúbico63 o incluso,
la R.T.U. La distensión abdominal es aparente e utilizar un dispositivo que mida la presión intra-
incluso puede ser necesario un drenaje suprapú- vesical64. Se ha propuesto sistemas mediante irri-
bico para evacuar el fluido de irrigación, aunque gación continua de baja presión, sin mucho éxito,
lo esencial en esta situación es la vigilancia para y es que las medidas orientadas a disminuir la pre-
evitar que solapadamente se desarrolle el sd. sión hidrostática no garantizan la disminución de
R.T.U. La bioquímica sanguínea y los síntomas la absorción por vía extravascular65, aunque la
son similares a los descritos para la absorción mayoría de los estudios relacionan baja presión de
intravascular, pero el comienzo puede ser retar- irrigación y absorción más baja66.
dado y su curso prolongado59. Parece lógico también que la cantidad de suero
lavador empleada durante el acto quirúrgico sea
5. MÉTODOS DE PREVENCIÓN Y otro de los factores a tener en cuenta. Sin embar-
DIAGNÓSTICO EN EL SÍNDROME DE go, en la serie de Vesga y cols.67, en que el volu-
RESECCIÓN TRANSURETRAL men medio de glicina empleado fue de 31,19 litros,
5.1. REDUCCIÓN DE LA ABSORCIÓN DEL FLUI- sólo se documentó un caso (1%) en el que el sd.
DO DE IRRIGACIÓN R.T.U. tuvo lugar.
– El tiempo de resección es uno de los factores
que más se relacionan con la incidencia del sd. 5.2. MONITORIZACIÓN DE LA ABSORCIÓN
R.T.U. Se recomienda no sobrepasar los 60 min. DEL LÍQUIDO DE IRRIGACIÓN
de duración del procedimiento, ya que la absor- La absorción del líquido de irrigación es extre-
ción aumenta exponencialmente a partir de ese madamente variable e imposible de predecir. Una
momento. De hecho, se ha comprobado que la adecuada monitorización nos puede ayudar a
incidencia del síndrome es significativamente detener su infusión antes de que se produzcan los
mayor cuando el tiempo de intervención es supe- síntomas y a calcular las necesidades reales de
rior a 90 min.2,5. De todos modos, es preciso tener fluidoterapia.
en cuenta que se han descrito absorciones masi- El método volumétrico es el más sencillo, pero
vas en menos tiempo de resección2,4,36,60. es poco exacto, y consiste en calcular la diferen-
cia entre el líquido infundido y el recogido por el
– El aumento de tamaño de la glándula puede
aspirador. Otros métodos, como el pesaje del
hacer necesario incrementar el área de resección
paciente antes y después de la cirugía68, el empleo
y, por tanto, provocar la apertura de más senos
de radioisótopos69 o la estimación de la concen-
venosos y la posibilidad de lesión de la cápsula
tración de los solutos (fluoresceína) añadidos al
prostática, lo cual permitirá el paso de líquido
líquido de irrigación70, no han resultado ser muy
lavador por la vía intra o extravascular, respecti-
eficaces. La medición de la presión intravesical a
vamente. El riesgo de que el sd. R.T.U. tenga lugar
través de la vía suprapúbica constituye un proce-
aumenta cuando la glándula prostática pesa más
dimiento interesante, pero no permite cuantificar
de 45 gramos. Por ello se recomienda no utilizar
la extravasación o el volumen que ha pasado al
esta técnica en próstatas de más de 60 gramos4,49.
territorio intravascular64.
– La presión hidrostática sobre el lecho prostáti-
co depende de manera directa de la altura a la que – Concentración de Na+ sérico: el descenso total
se encuentre el líquido lavador. Se recomienda que en el Na+ sérico durante una R.T.U. es frecuente-
24
SÍNDROME DE REABSORCIÓN POST-RESECCIÓN TRANSURETRAL (R.T.U.) DE PRÓSTATA: REVISIÓN DE ASPECTOS FISIOPATOLÓGICOS
mente utilizado como un índice del volumen de supera 0,2 mgr/ml77. Además, el patrón de dicha
solución irrigante absorbido por la ruta intravas- concentración indica si la absorción se produce de
cular. Es un método útil pero impreciso, ya que forma predominante por la vía intravascular o por
dicha solución está siendo continuamente elimi- la extravascular; en la absorción intravascular se
nada del espacio extracelular en virtud de su difu- produce un ascenso de la concentración de etanol
sión intracelular y gracias a la diuresis osmótica y, al finalizar la intervención, tiene lugar una rápi-
que genera. Así, el Na+ sérico debería ser corregi- da caída de ésta, debido a la transferencia del eta-
do en virtud del tiempo de absorción, recogiéndo- nol de la sangre al agua corporal total (25 min.),
se muestras a intervalos regulares durante la mientras que en la absorción extravascular, el
intervención (cada 10-15 min.), de modo que un incremento de la concentración durante la inter-
descenso del nivel de la natremia sería un indica- vención es más lento78. Por otro lado, si detenemos
dor muy sensible de absorción. Pero sin embargo, la resección 5 min. y repetimos la prueba, la con-
el problema reside en que las determinaciones centración desciende si la absorción es intravascu-
repetidas de forma urgente son costosas71-73. lar pura, y será superior o se mantendrá si tiene un
componente significativo extravascular (ésto impli-
El líquido absorbido se puede calcular a par- caría mayor vigilancia postoperatoria si cabe).
tir del Na+, mediante la siguiente fórmula: Diversos estudios que han utilizado concen-
Líquido absorbido = (Na+ previo / Na+ traciones de etanol del 0,5-2% en la solución de
actual) x V.E.C. - V.E.C. irrigación han objetivado que la concentración en
V.E.C. (volumen extracelular) = 20% del el aire espirado de éste se relaciona bien con la
peso corporal. cantidad de líquido absorbido74,79-81 (Tabla VI).
Más aún, algunos autores indican que también
– Presión venosa central (P.V.C.): se recomienda ocurre lo mismo con el grado de hiponatremia. No
su monitorización para evitar la sobrecarga vas- obstante, se recomienda determinaciones adicio-
cular en pacientes de alto riesgo sometidos a R. nales de Na+ cuando la concentración de etanol
T.V. Aunque la P.V.C. se eleva antes de que apa- supera 0,2 mgr/ml82.
rezcan los síntomas severos, no es un signo cons- La concentración de etanol al 1% se considera
tante ni específico de la cantidad de líquido absor- la más apropiada para el uso rutinario, no habién-
bido. Algunos autores recurren a la monitoriza- dose descrito ningún caso de intoxicación a esta
ción de presión capilar pulmonar y del gasto car- proporción81,83. La adición de etanol no varía la
díaco en pacientes de muy alto riesgo mediante distribución en la farmacocinética de eliminación
catéter de Swan-Ganz74,75. de la glicina84.
25
L.M. CLEMENTE RAMOS, F. RAMASCO RUEDA, A. PLATAS SANCHO, Y COLS.
cantidad variable de solución iso-osmolar (Ringer- tensión debida al sd. R.T.U., el espacio intersticial
Lactato) durante el acto quirúrgico para minimi- está hiperhidratado, pero el volumen plasmático,
zar el riesgo de esta complicación67. No obstante, la P.V.C. y el gasto cardíaco son bajos. Así, un tra-
parece necesario individualizar los principios tera- tamiento racional incluiría una juiciosa adminis-
péuticos. tración de coloides y vasopresores. Sin embargo,
éstos no se deberían aplicar precozmente para no
6.1. ALTERACIONES CARDIOVASCULARES precipitar un fallo cardíaco debido a una mayor
Aquellos pacientes que presentan un compro- absorción de la solución irrigante. La reposición
miso cardiovascular severo en el seno del sd. de volumen debería ser guiada por la monitoriza-
R.T.U. deben ser monitorizados estrechamente en ción de P.V.C. para evitar empeorar el cuadro.
la unidad de cuidados intensivos. La intubación Aunque se ha demostrado que la expansión
endotraqueal debe tenerse en cuenta si el pacien- liberal de volumen no resuelve la hipotensión, se
te presenta disnea y tiende a la hipoxemia; la ha constatado la utilidad del suero salino hipertó-
hiperventilación puede utilizarse temporalmente nico, el calcio y el isoproterenol en esta situación,
para descender la presión intracraneal en los así como la ausencia de efectividad de la reposi-
casos que presenten edema cerebral o alteracio- ción con cristaloides, la transfusión sanguínea, el
nes neurológicas. La colocación de un catéter de plasma, la atropina, la efedrina y la dopamina4. El
Swan-Ganz contribuye a un control más preciso74. mejor tratamiento de la hipotensión consiste en
Ya hemos comentado los métodos para valorar resolver la hiponatremia y la hipoosmolaridad,
el estado del volumen intravascular, guía funda- pero hasta entonces las medidas terapéuticas
mental en el manejo de estos pacientes, sobre todo siguen estando confusas.
en casos moderados-severos. Actitudes tales como
el tratamiento empírico con diuréticos en pacien- 6.2. HIPONATREMIA E HIPOOSMOLARIDAD
tes con compromiso cardiopulmonar deben ser Se han propuesto varios enfoques terapéuticos
evitadas, máxime cuando el volumen circulante basados en la natremia o en la osmolaridad.
suele ser bajo en estos casos. Fijémonos ahora en Dentro de las terapias basadas únicamente en la
aspectos concretos: corrección de la natremia, hay dos tendencias36:
– La hipertensión es generalmente de corta
duración y escasas consecuencias, pero asociada • Si la hiponatremia es leve o moderada (> 120
a la absorción extravascular puede suponer un mmol/l):
problema significativo, requiriendo incluso el 1. Se instaura tratamiento i.v. con diuréticos
empleo de vasodilatadores i.v. de asa (furosemida 10 mg; una dosis mayor puede
requerirse en pacientes con antecedente de trata-
– El dolor torácico se resuelve espontáneamen- miento crónico con estos agentes) y una infusión
te (generalmente a los 15 min.), siendo una buena concomitante de suero salino (0,9%) a ritmo lento.
medida la administración de oxigenoterapia y la Los diuréticos de asa actúan en minutos sobre la
analgesia con mórficos. rama ascendente del asa de Henle, inhibiendo el
transporte de cloro y produciendo pérdida de Na+.
– El edema pulmonar es un síntoma secunda- Por ello, cuando se han empleado rutinariamente
rio, y debe aplicarse el tratamiento de soporte vital en R.T.U., han sido implicados en el comienzo
adecuado. rápido de la hiponatremia. Ello hace que se deba
ser cauteloso en su aplicación ante la situación de
– La hipotensión que aparece en el síndrome hipervolemia tras la intervención, ya que puede
R.T.U. debe ser tratada precozmente para preve- empeorar el sd. R.T.U.
nir un shock irreversible y fallo renal, aunque es 2. La utilización de diuréticos osmóticos (mani-
difícil tener éxito. Hay que fijarse un objetivo razo- tol) produce la perdida de Na+ durante las prime-
nable, tal como alcanzar un nivel de P.A.S. ≈100 ras 12 horas después de la R.T.U., pero no dismi-
mmHg., más que insistir en retornar a los valores nuye los niveles séricos durante las primeras
basales de la misma. En los pacientes con hipo- horas (3-5 h.) del post-operatorio, aunque puede
26
SÍNDROME DE REABSORCIÓN POST-RESECCIÓN TRANSURETRAL (R.T.U.) DE PRÓSTATA: REVISIÓN DE ASPECTOS FISIOPATOLÓGICOS
ésta debería constatarse cuando el líquido de irri- 0,05-0,25 200-1000 Reducir la administración
gación contenga solutos osmóticamente activos, de líquidos i.v.
circunstancia que sucede habitualmente (glicina,
0,25-0,50 1000-2000 Riesgo de síntomas moderados.
manitol, sorbitol). De modo que, si la osmolaridad Informar al cirujano. Reducir
está cercana a la normalidad, no se recomienda la duración de la R.T.U.
Disminuir la presión vesical.
ninguna intervención para corregir el Na + en
pacientes asintomáticos, incluso en el caso de que > 0,50 > 2000 Riesgo de síntomas severos.
Finalizar la intervención.
su concentración esté disminuida86.
La presencia de sintomatología es el factor más
importante que determina la morbimortalidad del
cuadro. Así el tratamiento de la hiponatremia y la • Como resumen de este apartado cabría recor-
hipoosmolaridad está plenamente indicado cuan- dar que:
do éstas producen clínica evidente en el paciente. – La terapia más aceptada consiste en aportar
La instauración de una terapia en ausencia de sín- suero salino hipertónico cuando la hiponatremia
tomas presenta el riesgo de una corrección dema- coexista con hipoosmolaridad.
siado rápida, ya que el grado de ajuste es de difí- – En casos leves, puede ser suficiente la admi-
cil control. En cambio, cuando el paciente esté sin- nistración de 500 cc de suero salino al 0,9% para
tomático, la osmolaridad deberá ser monitorizada conseguir niveles de sodio cercanos a la norma-
y corregida agresivamente (> 1,5 mmol de Na+ lidad.
/l/h) sólo hasta que los síntomas sean sustan- – Caso de utilizarse, el ritmo de infusión del suero
cialmente resueltos y, entonces, ya de forma más salino hipertónico será no superior a 100 ml/h.
lenta (< 0,7 mmol de sodio/l/h)87. La complicación – De forma inicial, es recomendable pautar la
más temida de la corrección de la hiponatremia es restricción hídrica e indicar la monitorización del
la mielinolisis central pontina (sd. de desmielini- Na+ cada 2 horas.
27
L.M. CLEMENTE RAMOS, F. RAMASCO RUEDA, A. PLATAS SANCHO, Y COLS.
TABLA VIII
PRINCIPALES CONSIDERACIONES TERAPÉUTICAS ANTE EL SD. R.T.U.
28
SÍNDROME DE REABSORCIÓN POST-RESECCIÓN TRANSURETRAL (R.T.U.) DE PRÓSTATA: REVISIÓN DE ASPECTOS FISIOPATOLÓGICOS
7. CONCLUSIONES REFERENCIAS
En el sd. R.T.U., los complejos cambios neuro- 11. HOLTGREWE HL, MEBUST WK, DOWD JB, et al.:
Transurethral prostatectomy: practical aspects of
fisiológicos, en el volumen intravascular y la con- the dominant operation in American Urology. J Urol
centración de solutos pueden ocurrir simultánea- 1989; 141: 248-253.
mente, lo cual hace difícil su prevención, diag- 12. MEBUST WK, HOLTGREWE HL, COCKETT AT, et
al.: Transurethral prostatectomy: immediate and
nóstico y tratamiento, pudiendo incluso instau- postoperative complications. A cooperative study of
rarse terapias específicas para alguno de dichos 13 participating institutions evaluating 3885
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podría ser un complemento adecuado en la com- gland. Surgery 1947; 21: 56-66.
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que la hipoosmolaridad aparece como el princi- rison of mortality and morbidity after irrigation with
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Dilutional hyponatremic shock: another concept of
Es prioritaria una adecuada valoración preopera-
the transurethral prostatic resection reaction. J Urol
toria de los pacientes, especialmente en estos 1956; 75: 95-109.
aspectos, y tomar las medidas preventivas nece- 19. BERNSTEIN GT, LOUGHLIN KR, GITTES RF: The
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sobre todo en pacientes con patología a ese nivel89. 10. CECCARELLI FE, MANTELL LK: Studies on fluid
Los tratamientos más específicos para la hipona- and electrolyte alterations during transurethral
tremia, la hiperglicinemia etc., ya los hemos prostatectomy I. J Urol 1961; 85: 75-82.
11. CECCARELLI FE, SMITH PC: Studies on fluid and
comentado anteriormente. electrolyte alterations during transurethral prosta-
Aunque el descenso en la incidencia del sín- tectomy II. J Urol 1961; 86: 434-441.
drome en los últimos 50 años refleja un mejor 12. RADAL M, BERA AP, LEISNER C, et al.: Adverse
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conocimiento de su patofisiología y un progreso 54: 233-236.
notable en su prevención y tratamiento, el riesgo 13. RHYMER JC, BELL TJ, PERR Y KC, et al.:
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29
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SÍNDROME DE REABSORCIÓN POST-RESECCIÓN TRANSURETRAL (R.T.U.) DE PRÓSTATA: REVISIÓN DE ASPECTOS FISIOPATOLÓGICOS
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