Alimentacion en Vacas Lecheras

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INTRODUCCIÓN.

La ganadería bovina es una importante actividad económica que constituye el


sustento de miles de familias en diversas regiones del país, para promover su
desarrollo es fundamental incrementar la producción de leche y carne, lo cual, se
logra cuando los animales estan sanos y reciben una alimentación adecuada
durante todo el año.
La producción de ganado bovino lechero se basa en factores importantes
como: el manejo, alimentación, sanidad y reproducción (mejoramiento genético).
Estos factores a su vez están estrechamente relacionados y afectan la producción
en forma interdependiente.
Actualmente, la tendencia de las investigaciones en bovinos están orientadas
hacia la producción competitiva de leche y carne en base a la alimentación
con pastos y forrajes.
Con estas técnicas existe la posibilidad de mejorar genéticamente al ganado
bovino lechero, con el objeto de obtener animales de alta productividad. También
disponer de novedosas técnicas de alimentación, manejo de ganado y mejora de
la calidad de leche y carne.
La vaca lechera de alta producción requiere una dieta que le aporte los nutrientes
necesarios para que la glándula mamaria produzca leche en las cantidades que la
industria requiere. Para esto debemos conocer las necesidades nutricionales y tipos de
nutrientes, así como la cantidad de alimento necesario que nos ayudarán a cumplir
estos requerimientos. En el siguiente artículo encontrarás una guía detallada sobre la
alimentación para el ganado lechero
SISTEMA DIGESTIVO DE LOS ANIMALES POLIGÁSTRICOS.
Los poligástricos como el bovino tienen pre-estómagos (rumen, retículo, omaso) y un
estómago verdadero llamado abomaso donde se secretan enzimas digestivas. El primer
estómago llamado rumen, es el más grande y contiene la mayor cantidad de
microorganismos. Los alimentos digeridos se descomponen y fermentan bajo la acción
de los microorganismos en el rumen produciendo ácidos grasos volátiles que son
absorbidos posteriormente por los animales y son una fuente importante de energía.
A su vez los microorganismos crecen mediante la utilización de una fuente de
nitrógeno. Estos microorganismos al morirse forman una proteína microbiana que llega
hasta el abomaso (estómago glandular), donde se conforman los aminoácidos. También
estos microorganismos pueden producir vitamina del complejo B. En dependencia del
tipo de alimento suministrado a los rumiantes, concentrados y forrajes
La producción de ácidos grasos volátiles varía, por ejemplo, si le suministramos
una mayor cantidad de concentrado la proporción de ácido propiónico es mayor que el
acético lo cual incrementa la producción de leche, pero disminuye la proporción de
grasa en la leche, en caso contrario si le suministramos una mayor cantidad de forraje
la proporción de ácido acético es mayor disminuyendo la producción de leche e
incrementando la grasa en la misma.

MANEJO DE VACAS EN SECA


Una semana antes del parto deben ser conducidas a la maternidad donde
recibirán la misma alimentación. El periodo de descanso o seca debe ser de 45 a 60 días
y la vaca debe recuperar los nutrientes que utilizó en la secreción de leche, además
almacenar reservas para la lactación siguiente.
El manejo de vacas en seca es de 21 días, antes del parto se le ofrecerá en forma
gradual la cantidad necesaria de una dieta de vacas en producción para acostumbrar a
los animales al tipo de ración que consumirá al inicio de la lactación. De preferencia la
alimentación será a base de ración única.
MANEJO DE VACAS LECHERAS
Las vacas en producción generalmente deben agruparse en vacas de alta
producción, vacas de mediana producción y vacas de baja producción.
• Vacas de alta producción: son aquellos animales desde el parto hasta los
primeros 90 ó 120 días de lactación tienden a producir el 40% del total de leche
de la campaña de lactación.
• Vacas de mediana producción: son aquellas que tienen más de 90 ó 120 días de
producción hasta los 240 días de lactación.
• Vacas de baja producción: son aquellas con más de 240 días de lactación hasta
la fecha de seca.
CONSUMO DE AGUA
El agua es esencial para el bienestar animal y por lo tanto para lograr la
producción deseada. La mayor fuente de agua del ganado lechero es la ingesta libre de
agua, la cual incrementa a medida que aumenta la producción de leche y también
cuando la vaca se encuentra en un ambiente caluroso y con un índice de humedad
superior a 68%.
Por lo tanto, si se limita el consumo de agua afectará negativamente el
rendimiento de los animales. Una vaca adulta debe tener acceso a por lo menos 10 cm
de espacio lineal de agua, que le permita una ingesta de entre 56 a 132 litros de agua al
día en producción y de hasta 56 litros en seca.
PROTEÍNAS Y AMINOÁCIDOS
La proteína que se da normalmente en el alimento se mide como proteína cruda
(% de nitrógeno del alimento multiplicado por 6.25), la cual también contiene
aminoácidos, dipéptidos, ácidos nucleicos, etc. Las vacas usan los aminoácidos para la
producción de enzimas, proteínas de la leche, inmunoglobulinas, músculo y diferentes
órganos y tejidos de su organismo. Además, el excedente de aminoácidos se puede usar
en algunos casos para la gluconeogénesis y lipogénesis.
El maíz y la harina de soja son las principales fuentes de energía y proteína en la
dieta del ganado lechero. El maíz puede darse como ensilaje o como grano y es
deficiente en lisina; los coproductos de soja se usan como suplementos
complementados de maíz, aunque son deficientes en metionina.
CARBOHIDRATOS
Los carbohidratos son el componente más grande en la dieta del ganado lechero
ya que comprenden hasta el 70% de esta. Los carbohidratos más usados en la
alimentación del ganado lechero son la celulosa y glucosa. Las principales fuentes de
carbohidratos en la dieta son los forrajes, fibra, granos y azúcares. Los forrajes como el
heno, ensilado de heno y ensilado a base de granos como el maíz son digeridos por las
bacterias celulolíticas que dan como resultado la producción de ácido acético y
butírico.
Los forrajes se dan con un tamaño de partícula mayor a 1cm para permitir la
rumia. Esto trae como resultado la producción de saliva que ayuda a mantener el pH del
rumen, ya que de acidificarse el rumen la grasa de la leche disminuye. Además, esta
disminución del pH puede conllevar a patologías como la laminitis, producto de la
acción de las bacterias ruminales muertas en el casco.
Es recomendable que los carbohidratos representen más del 50% de la dieta. Las
vacas secas se alimentan con mayor proporción de forrajes por los menores
requerimientos de nutrientes en esta etapa.
LÍPIDOS
La grasa es el nutriente con más energía en la dieta con 2.25 veces más energía
que los carbohidratos o proteína. La grasa se puede dividir en glicerol y no glicerol,
aunque estos últimos tienen poco o ningún valor nutritivo mientras que las grasas tipo
glicerol incluyen triglicéridos, fosfolípidos y glicolípidos que si tienen valor nutritivo.
La recomendación normalmente es que no se alimente con más del 8% de grasa
en materia seca total. Las comidas proteicas tienen alrededor de 3% de grasa
dependiendo de su procesamiento, aunque algunos granos de destilería o cervecería
pueden contener 10% de grasa. Las semillas oleaginosas (soja, semilla de algodón,
canola y lino) tienen un 20% de grasa, otras semillas oleaginosas menos utilizadas como
girasol y calabaza pueden tener un contenido graso de 45%.
Si la grasa es administrada correctamente en la dieta, se tendría un incremento
en la producción de leche al inicio de la lactancia, a veces con un contenido mayor de
grasa en la leche, pero casi siempre con una concentración reducida de proteína. Sin
embargo, al final puede haber un incremento en la cantidad de proteína total debido al
aumento de la producción de leche.
También debería haber un aumento en la fertilidad debido a un mayor balance de
energía o a un aumento en la concentración de las hormonas involucradas en la
reproducción.
MINERALES
Los minerales son compuestos inorgánicos necesarios para muchas funciones
del organismo, desde la estructura y los impulsos nerviosos, hasta el equilibrio
osmótico. Algunos minerales son necesarios para la función enzimática.
Los minerales se pueden dividir en dos categorías, los macrominerales (Ca, P,
Mg, K, Cl, Na y S) que son necesarios en grandes cantidades y lo microminerales (Cu, I,
Fe, Mn, Zn, Se) que son requeridos en mg o µg.
Los minerales son muy importantes para el éxito de la producción lechera. Un
ejemplo sería la gran demanda de Ca debido a las altas cantidades de leche que las
vacas producen al parir. De no cumplirse con las demandas de calcio de la vaca en esta
etapa, la vaca puede sufrir de hipocalcemia o “fiebre de la leche”. En este estado la vaca
no puede ponerse de pie y de no corregirse la deficiencia llega a ser fatal.
VITAMINAS
Las vitaminas son necesarias para el metabolismo y al ser suplementadas en la
dieta aportan efectos beneficiosos.
ADITIVOS ALIMENTARIOS
Los aditivos alimentarios se añaden a la dieta del ganado lechero para mejorar el
rendimiento, como el crecimiento, la producción, el rendimiento de sus componentes,
la eficiencia alimentaria y la salud.
Ionóforos:
Se han utilizado por años en el ganado lechero para poder tener una mayor
eficiencia alimenticia, así como una menor incidencia de cetosis de vacas en lactación.
Los ionóforos se obtienen a partir de los productos finales de la fermentación bacteriana
de la monensina (Streptomyces cinnamonensis) y lasalocid (Streptomyces lasaliensis).
Reducen la cantidad de bacterias Gram+ y aumentan las Gram-, lo que aumenta la
producción de propionato el cual es usado para formar glucosa.
Probióticos:
Consisten en especies bacterianas y levaduras que mejoran la digestibilidad de
los alimentos, el balance microbiano y absorción de nutrientes. Tienen un efecto
beneficioso en terneros al estimular la inmunidad en el intestino delgado. Estos
beneficios permiten la diminución de la incidencia de enfermedades infecciosas y
diarreas.
Buffers ruminales:
Es un aditivo bastante común en las raciones de vacas lactantes y se utiliza como
bicarbonato de sodio. Incrementa el pH del rumen y mejora la ingesta de agua lo que
lleva a una mayor ingesta de alimento.
RACIONES PARA LA ALIMENTACIÓN DE GANADO LECHERO
Las vacas de producción láctea consumen principalmente forrajes de calidad, ya
que proveen de nutrientes de menor costo que el concentrado. Sin embargo, la
desventaja es que su contenido nutricional es muy variable ya que depende de la
especie de forraje, el clima y el estado de madurez durante la cosecha. Según lo anterior,
la estrategia para alimentar al ganado debe complementar el forraje de calidad con
alimento concentrado. La ración de alimento debe darse como ración única o
totalmente mezclada para optimizar su uso y consumo.
Las raciones fraccionadas (forraje y luego concentrado) son una opción viable
para muchos ganaderos que no tienen la posibilidad de darles raciones únicas a sus
vacas. Dentro de los insumos que normalmente se usan en la industria ganadera se
puede realizar un concentrado con la siguiente formulación:
Insumos: Porcentaje (%)
Subproducto de trigo 22
Pepa de algodón 18
Maíz grano molido 27
Pasto de algodón 14
Melaza de caña 7
Harina de pescado al 65% 10
Sal común 1
Carbonato de calcio 1
Premezcla de vitaminas y minerales 0,1

CONSIDERACIONES PARA TENER EN CUENTA PARA LA ALIMENTACIÓN DEL


GANADO LECHERO
Es importante conocer la cantidad de materia seca que se le dará a las vacas
debido a que en la mayoría de las raciones es el factor limitante más importante, por lo
que se busca mejorar su consumo o mejorar la concentración energética de su ración.
El consumo de materia seca en promedio es de 3kg por cada 100kg de peso vivo
o 3% del peso de la vaca. La cantidad de materia seca que consumen varía según su
nivel productivo o etapa, ya que una vaca de alto rendimiento consume más de 4kg de
materia seca por cada 100kg de peso corporal y las vacas en seca consumen de 2 a
2.25kg de materia seca por cada 100kg de peso corporal.
Dependiendo de la calidad del forraje, el porcentaje de concentrado de la dieta
también varía. Cuando el forraje es de buena calidad y el consumo de energía es mayor,
el concentrado de la dieta es aproximadamente 40 % del total. Si el forraje es de regular
calidad, el porcentaje de concentrado de la dieta se eleva al 60% de la materia seca
total.
Otras consideraciones para optimizar el consumo de materia seca son fraccionar
la ración total que se reparte en el día, dar una dieta más concentrada en verano y
primavera, alimentar a las vacas con raciones únicas o totalmente mezcladas y colocar
sombras en los comederos.
¿CUÁNTA MATERIA SECA DEBE CONSUMIR EL GANADO LECHERO?
Existe más de una forma de obtener la cantidad de materia seca que debe
consumir una vaca, algunas de las fórmulas para obtener este dato son:

• Consumo de materia seca (kg)=0.0185 (kg de peso vivo) + 0.305 (kg de leche
corregida al 4% de grasa)
Donde: Leche corregida al 4% de grasa (kg)= 0.4 x kg de leche + 15x kg de grasa
• Consumo de materia seca (kg) = 2% del peso corporal + 0.33 (kg de leche
corregida al 4% de grasa)
También se pueden usar datos más prácticos para conocer el consumo de
materia seca de las vacas según su estado de lactación, así como la producción de leche
esperada en la campaña (305 días).
MANEJO DE LA ALIMENTACIÓN A BASE DE PASTURAS
Es necesario un manejo intensivo de los pastos para obtener un rendimiento
óptimo del consumo de materia seca y nutrientes y poder cumplir con los
requerimientos nutricionales de las vacas de alta producción. Para esto, los pastos
deben rotarse con frecuencia para que los forrajes consumidos estén en una etapa de
crecimiento óptima y no se produzca un sobrepastoreo, por lo que los pastos se suelen
separar en parcelas mediante cercas de fácil retiro. Una vez los pastos estén en una
etapa de crecimiento óptima para el rendimiento de materia seca y nutrientes, se llevará
al ganado a la parcela para su consumo.
La desventaja de este sistema es que puede limitar la ingesta de nutrientes
debido a que las tasas máximas de consumo son menores que en los sistemas de
confinamiento. Por lo tanto, la ingesta de energía se verá limitada y serán necesarias
otras fuentes de energía suplementarias para lograr una alta producción de leche.
Los suplementos energéticos pueden incluir granos de cereal o fuentes de fibra
altamente fermentables como subproductos de granos. Puede que las proteínas,
especialmente las fuentes de proteína no degradable en el rumen, también se
suplementa porque las concentraciones de proteína en los pastos pueden ser altas,
pero son altamente degradables en el rumen.
CONCLUSIONES
Para poder maximizar la producción láctea de nuestro ganado es necesario darle
la cantidad de alimento necesario para cumplir la alta demanda de nutrientes de las
vacas. Dependiendo del estado de producción de la vaca, la concentración de los
nutrientes de la dieta va a variar para poder aprovechar al máximo la producción y
reducir los costos.
Se hace importante conocer las funciones de los nutrientes de la dieta, para así
poder suplementar según la característica productiva que se busca mejorar, o en casos
de deficiencias poderlas corregir.
Finalmente es importante resaltar que los suplementos deben ir acompañados
de una buena dieta para poder aprovechar sus beneficios. Suplementar con vitaminas y
minerales sin alimentar adecuadamente a la vaca no mejorará el rendimiento del
ganado.
Cuando los alimentos suministrados a los animales no satisfacen sus
necesidades, éstos no podrán expresar al máximo su potencial productivo. La
importancia de la nutrición animal es evidente y representa uno de los aspectos más
importantes que determina la rentabilidad de las explotaciones lecheras.
REFERENCIAS
1. Sutton A. Feed and animal management for dairy cattle. USDA: Natural resources
conservation service; 2020.
2. Erickson PS, Kalscheur KF. Nutrition and feeding of dairy cattle. Animal
Agriculture. 2020:157–80.
3. Almeyda J, Parreño J. Manejo integrado del ganado vacuno. UNALM Oficina
académica de extensión y proyección social Agrobanco. 2011: 46p
4. Araya J. Los minerales en la alimentación del ganado bovino. MAG Costa Rica,
Dirección Regional Pacífico Central. 2010; 28p

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