Investigacion Hematotoxicidad
Investigacion Hematotoxicidad
Investigacion Hematotoxicidad
INVESTIGACIÓN: Hematotoxicidad.
García Montes Ricardo Aleck
GRUPO: 5AV1
La hematotoxicidad se refiere a la toxicidad que afecta a la sangre y a los órganos
hematopoyéticos, que son aquellos responsables de la formación de células sanguíneas. Aquí hay
una lista de algunos de los órganos, tejidos y sistemas relacionados con la hematotoxicidad en el
cuerpo humano:
1. Médula ósea: La médula ósea es el tejido esponjoso que se encuentra en el interior de los
huesos largos y es el principal sitio de producción de células sanguíneas, incluyendo los
glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.
2. Bazo: El bazo es un órgano situado en la parte superior izquierda del abdomen y
desempeña un papel importante en la filtración de la sangre y la destrucción de glóbulos
rojos viejos, así como en la producción y almacenamiento de algunas células sanguíneas.
3. Hígado: Aunque el hígado no está directamente involucrado en la hematopoyesis,
desempeña un papel importante en la síntesis de algunas proteínas sanguíneas y en la
eliminación de toxinas y productos de desecho de la sangre.
4. Sistema circulatorio: Incluye el corazón y los vasos sanguíneos. El corazón bombea la
sangre a través del sistema circulatorio, permitiendo que las células sanguíneas lleguen a
todos los tejidos y órganos del cuerpo.
5. Sistema linfático: Este sistema incluye los ganglios linfáticos, las amígdalas, el timo y la
médula ósea. Desempeña un papel crucial en la defensa inmunológica y la producción de
células sanguíneas.
6. Células sanguíneas: Los diferentes tipos de células sanguíneas, como los glóbulos rojos
(eritrocitos), glóbulos blancos (leucocitos) y plaquetas, son esenciales para la función
sanguínea normal. La toxicidad puede afectar la producción, función y supervivencia de
estas células.
7. Tejidos hematopoyéticos: Además de la médula ósea, existen tejidos hematopoyéticos
dispersos en el cuerpo, como el tejido linfoide asociado a la mucosa (MALT) y el tejido
linfoide asociado a la piel (SALT).
Los órganos, tejidos y sistemas mencionados pueden verse afectados por diversas patologías.
Algunas de estas con estos componentes del cuerpo humano son:
1. Médula ósea:
• Leucemia: Cáncer que afecta las células sanguíneas en la médula ósea.
• Mieloma múltiple: Cáncer que afecta las células plasmáticas en la médula ósea.
2. Bazo:
• Esplenomegalia: Agrandamiento del bazo, que puede ser causado por diversas
condiciones, como infecciones, enfermedades hematológicas o trastornos hepáticos.
• Ruptura esplénica: Rotura del bazo, a menudo como resultado de un traumatismo.
3. Hígado:
• Cirrosis: Cicatrización del hígado debido a daño crónico, comúnmente causado por
enfermedades hepáticas como la hepatitis crónica.
• Hepatitis: Inflamación del hígado, que puede ser causada por infecciones virales, consumo
excesivo de alcohol o trastornos autoinmunes.
4. Sistema circulatorio:
• Enfermedad cardiovascular: Incluye enfermedades del corazón y los vasos sanguíneos,
como la enfermedad coronaria, la hipertensión y los trastornos del ritmo cardíaco.
• Trombosis: Formación de coágulos sanguíneos que pueden obstruir los vasos sanguíneos.
5. Sistema linfático:
• Linfoma: Cáncer que afecta al sistema y los ganglios linfáticos.
• Enfermedad autoinmune: Puede afectar al sistema linfático y provocar trastornos como la
artritis reumatoide o el lupus.
6. Células sanguíneas:
• Anemia: Disminución de glóbulos rojos o hemoglobina en la sangre.
• Trombocitopenia: Reducción del número de plaquetas en la sangre.
• Leucopenia: Disminución de glóbulos blancos en la sangre.
7. Tejidos hematopoyéticos:
• Enfermedades linfoproliferativas: Trastornos que afectan el crecimiento excesivo de células
en el sistema linfático.
• Mucopolisacaridosis: Trastorno genético que puede afectar los tejidos hematopoyéticos y
otros órganos.
La hematotoxicidad puede ser causada por diversos factores, incluyendo la exposición a sustancias
tóxicas, radiación, ciertos medicamentos y condiciones médicas específicas. Sin embargo, algunos
ejemplos que podrían afectar algunos de estos órganos son:
Es importante destacar que la toxicidad de estos xenobióticos puede variar según la cantidad, la
duración y la vía de exposición. Además, la susceptibilidad individual puede influir en cómo una
persona responde a la exposición a estas sustancias. La prevención de la exposición y la
identificación temprana de posibles efectos adversos son fundamentales para mitigar los riesgos
asociados con estos xenobióticos.
Referencias
Farrel GC. Hepatopatía causada por fármacos, anestésicos y toxinas. En: Sleisenger y
1537.
De Abajo FJ, Montero D, Madurga M, García Rodríguez LA. Acute and clinically relevant
Lucena MI, Andrade RJ, Fernández MC, Pachkoria K, Peláez G, Duran JA, et al.