Letanias de Las Ánimas Benditas
Letanias de Las Ánimas Benditas
Letanias de Las Ánimas Benditas
Cristo, óyenos.
Cristo escúchanos.
Santa María
San Miguel,
San José,
San Pedro,
San Pablo,
San Juan,
Ora por las almas de los fieles difuntos.
San Esteban,
San Lorenzo,
San Gregorio,
San Ambrosio,
San Augustín,
San Jerónimo,
Santa Catalina,
Santa Bárbara,
Oh Señor, libéralos.
De Tu furia,
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
De la pena perdurante,
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
De la horrible oscuridad,
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
A través de Tu admirable concepción,
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
Oh Señor, libéralos.
En el día del Juicio Final,
Oh Señor, libéralos.
Nosotros pecadores,
Te imploramos, escúchanos.
Te imploramos, escúchanos.
Te imploramos, escúchanos.
Tu a Quien te complacería liberar a las almas de nuestros padres, parientes, amigos y benefactores
de los dolores del infierno,
Te imploramos, escúchanos.
Que Te complacería tener misericordia por quienes no reciben ningun recuerdo en la tierra,
Te imploramos, escúchanos.
Te imploramos, escúchanos.
Te imploramos, escúchanos.
Que Te complacería recibirlos en la compañía de los beatos,
Te imploramos, escúchanos.
Te imploramos, escúchanos.
Hijo de Dios,
Te imploramos, escúchanos.
Otórgales descanso.
Otórgales descanso.
Cristo, óyenos.
Cristo, escúchanos.
Oremos.
Oh Señor, el Creador y Redentos de todos los fieles, otórga a las almas de Tus sirvientes difuntos la
remisión de todos sus pecados; que, por sus súplicas piadosas, puedan obtener ese perdón que
siempre han deseado. Otórga esto, Oh Señor, Quien vive y reina por los siglos de los siglos. Amén
On eterno Dios, Quien además del precepto general de caridad, Has mandado un respeto
particular a padres, parientes y benefactores; otorga, Te imploramos que, como fueron los
instrumentos a través de los cuales Tu Providencia nos otorgó nuestro nacimiento, educación e
otros inumerables bendiciones, para que nuestras oraciones sean el medio para obtener para ellos
una veloz liberación de sus excesivos sufrimientos, como así su admisión a Tus gozos infinitos. A
través de Jesucristo Nuestro Señor. Amén
Dadles etérno descanso, Oh Señor, y que Tu luz perpétua brille sobre ellos. Que descansen en paz.
Amén