Como Se Vive Por Fe

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COMO SE VIVE POR FE

Tema: El estilo de vida de los que viven por fe

Texto: Habacuc 2:4 He aquí que aquel cuya alma no es recta, se enorgullece;
mas el justo por su fe vivirá.

Introducción

Hace tiempo había un programa que se llamaba “el estilo de vida de los ricos y
famosos” por un canal internacional donde se mostraba como vivían los grandes
millonarios y los grandes artistas, sus casas, sus carros, su comida, etc…

Siempre ha despertado un gran interés en muchas personas saber cómo viven


los que tienen dinero, siempre han tenido interés por saber, que comen, cuanto
gastan en ropa, como serán sus casas, etc. el estilo de vida que el dinero les
puede pagar, pero el versículo que hemos leído nos habla de otro tipo de
personas, personas que no son ricas si no Justas y dice que el justo, es decir todo
cristiano que ha sido justificado por la sangre de Cristo, por su fe vivirá.

Es decir que hoy vamos a comprender por medio de la palabra de Dios cual es el
estilo de vida de aquellos que viven, no con grandes riquezas si no que viven por
fe, que viven dependiendo y confiando en su Dios, que viven creyendo en su
palabra.

Ahora, Tenemos que darnos cuenta de un detalle muy importante en este


versículo, pues no solamente dice que el justo vivirá por fe, pues nos hemos
saltado dos letras que marcan una gran diferencia, pues el versículo dice que el
justo por “su” fe vivirá.

Es muy importante que lo comprendamos bien, pues los ricos y famosos muchas
veces tienen ese estilo de vida por la herencia de sus padres, por la riqueza de su
familia, pero el justo tiene que vivir por su propia fe.

Muchos vivimos de la fe del pastor, o la fe del hermano en cristo, o de los padres,


pero el justo tiene que vivir por su fe.

Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y YA NO vivo yo, mas vive
Cristo en mí: y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el
cual me amó, y se entregó a sí mismo por mí.

¿Has pensado alguna vez en vivir por fe? ¿Qué es lo primero que viene a tu
mente cuando crees que algún día vivirás por fe?
La idea que muchos tienen de vivir por fe es la de una persona que no tiene
empleo, y que vive dependiendo de ofrendas y donativos provenientes de los
feligreses de alguna congregación. Vivir por fe no es un estilo de vida propio de
aquellos que ejercen un ministerio; aunque todos en algún momento tengamos
que enfrentarlas, vivir por fe no es, ni significa, una vida de escasez, de carencias,
de crisis, de altas y bajas.

Vivir por fe significa vivir en una dependencia directa del Señor; es la confianza
desarrollada por el Espíritu Santo de que todas las cosas, pensamientos,
decisiones, y acciones, que producimos diariamente están sujetas al Señorío de
Cristo, y que por nada seremos confundidos en cuanto a lo que esperamos de Él.

FILIPENSES 1:20 conforme a mi anhelo y esperanza de que en nada seré


avergonzado; antes bien con toda confianza, como siempre, ahora también será
magnificado Cristo en mi cuerpo, o por vida o por muerte.

Vivir por fe es perseverar sin desmayar en nuestros esfuerzos y convicciones


como si se tratase de una carrera que recibirá galardón al final. Pablo lo dijo:

Filipenses 3:14 prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en


Cristo Jesús.

Vivir por fe es entender que somos peregrinos y extranjeros en esta tierra, que
nuestra morada es celestial, que por lo tanto no podemos amar las cosas
materiales ni confiar en ellas como el recurso de nuestra existencia, el apóstol
pedro lo expreso en su carta 1ra. Pedro 2:11 Amados, yo os ruego como a
extranjeros y peregrinos, que se abstengáis de los deseos carnales que batallan
contra el alma

Vivir por fe es entender que nuestra vida se sustenta de lo que Dios dice de
nosotros, no de lo que el mundo pretende establecer sobre nuestra
existencia,

Vivir por fe amados oyentes, es decidir que no viviremos por las exigencias que el
mundo nos presenta, pese a estar en desventaja acerca de aquello que
desarrollamos ante los demás, los grandes científicos son capaces de hacer
grandes aviones, y se vanaglorian porque no creen que es Dios, quien les dio ese
conocimiento. Los grandes estudiosos en su afán de descubrir que hay en la luna,
sus inventos de grandes naves no creen en Dios, hacen grandes descubrimientos
en cuanto a la medicina, y dicen ser ellos y se ganan premios obviando la
existencia de Dios. PERO ELLOS DAN ACONOCER SUS INVENTOS, Y
NOSOTROS DAMOS A CONOCER AL DIOS QUE DA LA SABIDURIA…
MIRAD cuál amor nos ha dado el Padre, que seamos llamados hijos de Dios: por
esto el mundo no nos conoce, porque no le conoce a él. 2Muy amados, ahora
somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero
sabemos que cuando él apareciere, seremos semejantes a él, porque le veremos
como él es.

Vivir por fe es ser guiados por el Espíritu Santo,

Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, los tales son hijos de
Dios.

Romanos 8:14

Vivir por fe es juzgar todas las cosas espiritualmente, no por la carne, es


decir, no con base en los establecimientos humanos preestablecidos por las
sociedades en que vivimos,

1ra. Corintios 2:14-16

Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque
para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir
espiritualmente. 15 En cambio el espiritual juzga todas las cosas; pero él no es
juzgado de nadie.

Vivir por fe es preguntarle al Padre sobre cómo enfrentaremos un conflicto,

1ra. Corintios 2:10

Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo
escudriña, aun lo profundo de Dios.

HAY SITUACIONES O COMPORTAMIENTOS DIFERENTES CUANDO SE VIVE


DE UNA FORMA NATURAL, A COMO SE VIVE CON UNA FE ESPIRITUAL

EL QUE VIVE DE FORMA NATURAL: VIVE DESCONFIADO, INSEGURO, CON


TEMOR, CON ANGUSTIA. PREGUNTELE A LOS HIJOS DE UNOS
MILLONARIOS COMO VIVEN DE DIA Y NOCHE SIENDO RESGUARDADOS
POR GUALDAESPALDA? VIVEN EN ZOZOBRA…NO TIENEN LIBERTAD,
INTIMIDAD..
SABE COMO VIVEN LOS QUE TIENEN UNA FE ESPIRITUAL? CONFIADOS!!

El que vive por fe vive confiado


(Salmo 27:1-3) Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de
atemorizarme? Cuando se juntaron contra mí los malignos, mis
angustiadores y mis enemigos, Para comer mis carnes, ellos tropezaron y
cayeron. Aunque un ejército acampe contra mí, No temerá mi corazón;
Aunque contra mí se levante guerra, Yo estaré confiado.

Hoy en día por los por la violencia, por el estilo de vida peligroso que vivimos
muchas personas desarrollan un estilo de vida de paranoia, es decir un desajuste
mental de desconfianza, de no confiar en nada ni en nadie.

Son personas que tienen muchos síntomas que quizás muchos de nosotros
tenemos: Desconfiar de las intenciones de todos

Sentir que todo el mundo lo critica y espera que se equivoque. Siempre encuentra
significados ocultos en los comentarios que la gente hace.

Es desconfiado en dar información pues tiene temor de que sea usado en su


contra. Siente que están conspirando en su contra.

El que vive por fe vive confiado porque sabe que aunque hayan personas
que lo pueden o lo quieran dañar Dios ha prometido cuidarlo y defenderlo.

(Isaías 54:15-17). Si alguno conspirare contra ti, lo hará sin mí; el que contra
ti conspirare, delante de ti caerá. 16 He aquí que yo hice al herrero que sopla
las ascuas en el fuego, y que saca la herramienta para su obra; y yo he
creado al destruidor para destruir. 17 Ninguna arma forjada contra ti
prosperará, y condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta
es la herencia de los siervos de Jehová, y su salvación de mí vendrá, dijo
Jehová.

Cuando dos palabras se repiten varias veces en un mismo texto es porque el


señor quiere llamar nuestra atención, y esa palabra es CONSPIRAR, pero ¿qué es
CONSPIRAR?, CONSPIRAR es cuando dos o más personas se ponen de
acuerdo para actuar en contra de otra.

Muchas veces como creyentes no somos conscientes de la lucha espiritual


constante y permanente en la que nos encontramos. Al respecto el mismo Jesús
dijo en Mateo 11:12: “El reino de los cielos sufre violencia y solo los violentos lo
arrebatan”.
Esta palabra pone al descubierto una realidad espiritual irrefutable y es que existe
un enemigo en común que permanentemente está a nuestro asecho buscando la
manera de hacernos daño. El maquina, trama, confabula las 24 horas del día.
¿Imagínese el peligro que corre una persona que está siendo todo el tiempo
atacada por el enemigo y no se da cuenta?

Si usted no logra identificar de donde viene realmente el ataque, es posible que


termine culpando a su cónyuge, a sus hijos, a su vecino, a su jefe, incluso a usted
mismo, no siendo los verdaderos responsables de lo que le está pasando.

La buena noticia es que, aunque el enemigo haya planeado destruirte lo hace sin
el consentimiento de Dios, es decir, que lo usted hoy está padeciendo no es una
prueba de Dios, es el enemigo que quiere fastidiarlo, pero ninguna de sus
artimañas en su contra podrá prosperar.

Es posible que haya gente conspirando contra su vida en este momento,


haciéndole la vida imposible, queriendo el mal para usted. No se preocupe porque
el señor le dice hoy a través de esta verdad eterna: “El que contra ti conspire
delante de ti caerá”.

Así que no tema, más bien prepárese para ver con tus propios ojos como esos
planes de destrucción en tu contra se vienen al piso en el nombre poderoso de
Jesús y como los que esperaban su destrucción, no podrán evitar verlo resurgir.

“Aunque muchos se levanten en tu contra queriéndote aniquilar, de todos


esos enemigos Dios te defenderá y con su fuerza Él te va ayudar. No temas
por lo que pueda pasar, porque ningún arma forjada contra ti podrá
prosperar. No te angusties ni vayas a dejar de confiar, porque Dios cuida tu
vida y si alguien intenta dañarte, Dios no se lo permitirá”.

El que vive por fe está confiado porque sabe, en quien ha creído.


(2 Timoteo 1:12), Por lo cual asimismo padezco esto: mas no me avergüenzo;
porque yo sé á quien he creído, y estoy cierto que es poderoso para guardar
mi depósito para aquel día.

Cuando Pablo dijo yo sé a quién he creído, estaba hablando como alguien que se
había graduado en “la escuela de la fe”. Había pasado los “cursos”
correspondientes del creer, los cuales están entrelazados entre el conocimiento de
la Palabra y las vivencias cotidianas con Dios. Estos son algunos de los escalones
de su trayectoria como creyente:
Primero, Pablo sabía a quién había creído, porque había tenido un
encuentro personal con Cristo, el objeto de su fe (Hch 9:1-6).

Él se acercó a Damasco como perseguidor de la iglesia, y Cristo lo encontró para


salvarlo, lo derribó, y lo visitó con su gloria. En ese encuentro con Jesús, Pablo le
hizo al Señor las dos preguntas más importantes para el ministerio: ¿Quién eres,
Señor? Y, ¿Para qué me has llamado? Cada hombre de Dios debe saber las
respuestas a ambas interrogantes. Es imprescindible estar seguros que hemos
conocido a Cristo, que hemos nacido de nuevo, que el Espíritu Santo vive en
nosotros. Recordar el día cuando Cristo nos salvó, es vital para afianzar nuestra
fe.

Segundo, Pablo sabía a quién había creído, porque tenía un historial de


libramientos del Señor con él.

Por eso pudo decir a Timoteo:2 Timoteo 3:11 tribulaciones que he sufrido y de
todas me ha librado el Señor. Por ejemplo, él fue apedreado por una multitud en
Listra, luego arrastrado hasta fuera de la ciudad y dejado como muerto, pero los
discípulos le rodearon y revivió. Al día siguiente tuvo fuerzas para caminar hasta
Derbe y continuar allí predicando el evangelio (Hch 14:19,20). También, cuando
iba a Roma para comparecer ante César, y la tormenta fue terrible en alta mar, él
pudo decir a los hombres en el barco: Esta noche ha estado conmigo el ángel del
Dios de quien soy y a quien sirvo.

Hemos creído en un Dios que está por sobre todas las circunstancias del mundo,
él tiene el control y el cuida de nosotros. ENTONCES VIMOS QUE EL QUE VIVE
POR FE, VIVE CONFIADO

II El que vive por fe, vive en paz (2 Corintios 5:6-7-8)


Así que vivimos confiados siempre, y sabiendo que entre tanto que
estamos en el cuerpo, estamos ausentes del Señor 7 (porque por fe
andamos, no por vista); 8 pero confiamos, y más quisiéramos estar
ausentes del cuerpo, y presentes al Señor.

Cuanta intranquilidad da ver cómo está el mundo, ver como todo esta caro, ver
como hay tanta violencia, ver como el dinero no alcanza, las personas que viven
por vista viven sin paz, con intranquilidad, con angustia.

Pero el que vive o anda por fe, mira más allá de lo que a simple vista se ve, si
todo esta caro sabemos que Dios proveerá, si sube el pasaje Dios proveerá, si
sube la gasolina Dios proveerá, el que vive por fe vive en paz porque ve el mundo
desde otro punto de vista, desde el punto de vista de lo sobrenatural ..
Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante
de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias, y la paz de Dios, que
sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros
pensamientos en Cristo Jesús”.

La intención de Dios para con nosotros sus hijos es que vivamos en paz, que esta
sea una forma de vida y no que solo la tengamos en medio de un conflicto. En
Romanos 12:18 nos exhorta que, “En cuanto de vosotros dependa” y esto no
hace referencia a una posición de espectador, sino a hacer todo lo posible
por vivir en paz y aun cuando otro sea el que nos ha ofendido está en
nosotros el buscar la oportunidad de restablecer la paz.

Lo contrario a la paz es la ansiedad y esta no es más que exceso de futuro,


denotando de esta manera nuestra falta de confianza en la intervención de Dios
en nuestras vidas. Por lo que, es importante recordar que aun en medio de los
desaciertos, conflictos y decepciones que experimentamos a diario, el Espíritu
Santo está obrando conforme al propósito de Dios aunque nosotros no estemos
viendo con nuestros ojos naturales una manifestación palpable y teniendo la
convicción de que el trono de Dios permanece firme, obrando a nuestro favor, por
tanto debemos poner toda ansiedad a los pies de Cristo y confiar en su fidelidad.
Entonces si hay una manera de vivir en paz, cómo? Confiando en la palabra del
señor que nos dice: por nada estés afanoso. Entonces hasta acá hemos visto 2
manera de cómo se puede vivir con fe. De vivir la vida con Fe, y cuando vivimos
con fe nos trasmite confianza y paz. Lo tercero del que vive con fe es:

III El que vive con fe vive gozoso.


(Romanos 15:13) Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el
creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo.

Cuantas personas pretenden tener gozo y paz en el tener, es decir que si tienen
dinero están felices, si tienen salud están contentos, pero ¿qué pasa cuando todo
falta?

El que vive por fe, vive con gozo, porque sabe que al que cree todo le es posible y
Dios transforma toda circunstancia.
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Gálatas 2:20 Con Cristo estoy juntamente crucificado, y YA NO vivo yo, mas
vive Cristo en mí: y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de
Dios, el cual me amó, y se entregó a sí mismo por mí.

¿Has pensado alguna vez en vivir por fe? ¿Qué es lo primero que viene a tu
mente cuando crees que algún día vivirás por fe?

La idea que muchos tienen de vivir por fe es la de una persona que no tiene
empleo, y que vive dependiendo de ofrendas y donativos provenientes de los
feligreses de alguna congregación. Vivir por fe no es un estilo de vida propio de
aquellos que ejercen un ministerio; aunque todos en algún momento tengamos
que enfrentarlas, vivir por fe no es, ni significa, una vida de escasez, de carencias,
de crisis, de altas y bajas.

Vivir por fe significa vivir en una dependencia directa del Señor; es la


confianza desarrollada por el Espíritu Santo de que todas las cosas,
pensamientos, decisiones, y acciones, que producimos diariamente están
sujetas al Señorío de Cristo, y que por nada seremos confundidos en cuanto
a lo que esperamos de Él.

FILIPENSES 1:20 conforme a mi anhelo y esperanza de que en nada seré


avergonzado; antes bien con toda confianza, como siempre, ahora también será
magnificado Cristo en mi cuerpo, o por vida o por muerte.

Vivir por fe es perseverar sin desmayar en nuestros esfuerzos y convicciones


como si se tratase de una carrera que recibirá galardón al final.

Filipenses 3:14 prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de


Dios en Cristo Jesús.

Vivir por fe es entender que somos peregrinos y extranjeros en esta tierra, que
nuestra morada es celestial, que por lo tanto no podemos amar las cosas
materiales ni confiar en ellas como el recurso de nuestra existencia,

1ra. Pedro 2:11 Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que


se abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma

Vivir por fe es entender que nuestra vida se sustenta de lo que Dios dice de
nosotros, no de lo que el mundo pretende establecer sobre nuestra
existencia,

Vivir por fe es decidir que no viviremos por las exigencias que el mundo nos

presenta, pese a que ello signifique estar en desventaja acerca de aquello que
desarrollamos ante los demás,

MIRAD cuál amor nos ha dado el Padre, que seamos llamados hijos de Dios: por
esto el mundo no nos conoce, porque no le conoce a él. 2Muy amados, ahora
somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero
sabemos que cuando él apareciere, seremos semejantes a él, porque le veremos
como él es.
1ra. Juan 3:1-2

Vivir por fe es ser guiados por el Espíritu Santo,

Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, los tales son hijos de
Dios.

Romanos 8:14

Vivir por fe es juzgar todas las cosas espiritualmente, no por la carne, es decir, no
con base en los establecimientos humanos preestablecidos por las sociedades en
que vivimos,

1ra. Corintios 2:14-16

Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque
para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir
espiritualmente. 15 En cambio el espiritual juzga todas las cosas; pero él no es
juzgado de nadie.

Vivir por fe es preguntarle al Padre sobre cómo enfrentaremos un conflicto,

1ra. Corintios 2:10

Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo
escudriña, aun lo profundo de Dios.
Hemos presentado varias definiciones que nos amplían el panorama espiritual de
lo que significa vivir por fe; sin embargo, ¿hay alguna instrucción específica qué
debemos cuidar para aprender a vivir por fe?

Sí, las hay. La Biblia destaca entre sus páginas varias instrucciones que
promueven entre quienes las siguen, que puedan desarrollar la capacidad
espiritual de vivir por fe. Señalaremos las dos instrucciones principales.

Aprender a esperar y perseverar en el Señor.

El principal recurso para desarrollar una vida de fe es esperar y perseverar en el


Señor. Significa no solo esperar, es decir, dejar pasar el tiempo, sino sobre todo,
perseverar en la Palabra que hemos recibido del Señor, la Palabra que se ha
constituido en la promesa de vida.

He aquí, el ojo de Jehová sobre los que le temen, Sobre los que esperan en su
misericordia; … 22Sea tu misericordia, oh Jehová, sobre nosotros, Como
esperamos en ti.

Salmo 33:18-22

Espera en Jehová, y haz bien; Vivirás en la tierra, y en verdad serás alimentado.


… 5Encomienda a Jehová tu camino, Y espera en él; y él hará. … 7Calla a
Jehová, y espera en él: No te alteres con motivo del que prospera en su camino,
Por el hombre que hace maldades. … 9Porque los malignos serán talados, Mas
los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra. … 34Espera en Jehová, y
guarda su camino, Y él te ensalzará para heredar la tierra: Cuando serán talados
los pecadores, lo verás. … 40Y Jehová los ayudará, Y los librará: y libertarálos de
los impíos, y los salvará, Por cuanto en él esperaron.
Salmo 37:3-40

Tenemos en Saúl un buen ejemplo de lo que ocurre cuando una persona no


puede esperar en el Señor; Saúl fue desechado para no seguir siendo rey,

Y él esperó siete días, conforme al plazo que Samuel había dicho; pero Samuel no
venía a Gilgal, y el pueblo se le desertaba. … 13Entonces Samuel dijo a Saúl:
Locamente has hecho; no guardaste el mandamiento de Jehová tu Dios, que él te
había intimado; porque ahora Jehová hubiera confirmado tu reino sobre Israel para
siempre.

I Samuel 13:8-13

Aprender a no recurrir a recursos externos

El único recurso de uno que ha dispuesto a vivir por fe es el Señor. No podemos


recurrir a fuentes externos a Él pues esto trae maldición,

Así ha dicho Jehová: Maldito el varón que confía en el hombre, y pone carne por
su brazo, y su corazón se aparta de Jehová.

Jeremías 17:5

Tenemos el ejemplo de Abraham,

Que desde un hilo hasta la correa de un calzado, nada tomaré de todo lo que es
tuyo, porque no digas: Yo enriquecí a Abram:

Génesis 14:23

Y respondió Abraham: Dios se proveerá de cordero para el holocausto, hijo mío. E


iban juntos. … 14Y llamó Abraham el nombre de aquel lugar, Jehová proveerá.
Por tanto se dice hoy: En el monte de Jehová será provisto.
Génesis 22:8-14

Es el consejo de Dios dado por el Espíritu Santo,

Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en
Cristo Jesús.

Filipenses 4:19

Los recursos externos son equivalentes a una decisión de alejarnos de Dios,

Porque dos males ha hecho mi pueblo: dejáronme a mí, fuente de agua viva, por
cavar para sí cisternas, cisternas rotas que no detienen aguas.

Jeremías 2:13

Aprender a desarrollar una actitud dadivosa y generosa hacia los demás,


principalmente hacia los necesitados

Visto desde esta perspectiva, la demanda de Jesús al joven rico de que vendiera
todo lo que tenía y lo diera a los pobres,[1] no fue una demanda caprichosa e
injustificada, era más bien parte del protocolo divino que Dios ha establecido para
que el hombre y la mujer de fe aprendan a desarrollar un espíritu generoso y
dadivoso. Claramente leemos en el relato que Jesús le adelantó que tendría
tesoros en el cielo, así que no se trata de glorificar un estado de pobreza sino el
de que la persona aprenda a valorar adecuadamente a aquellos en esta tierra que
están desvalidos de los recursos para sobrevivir.

Este principio espiritual que de aquí lo llamaremos protocolo de vida por fe, está
contenido en todos los escritos apostólicos. Leemos por ejemplo las palabras del
apóstol Pablo que refiere la enseñanza de Jesús con respecto a la
bienaventuranza de que la persona aprenda dar a los necesitados,

En todo os he enseñado que, trabajando así, es necesario sobrellevar a los


enfermos, y tener presente las palabras del Señor Jesús, el cual dijo: Más
bienaventurada cosa es dar que recibir.
Hechos 20:35

El apóstol Pablo también escribe a la comunidad de fe de Éfeso y les exhorta a


aprender a ser benignos y misericordiosos,

Antes sed los unos con los otros benignos, misericordiosos, perdonándoos los
unos a los otros, como también Dios os perdonó en Cristo.

Efesios 4:32

En su epístola a la comunidad de fe de Filipos les recalca que todo lo que el


hombre siembra es lo que el hombre cosecha, por eso ninguna prosperidad surge
por sí sola, surge por el cultivo de una vida desprendida de los bienes materiales,
aprendiendo a ser generosos con los que necesitan, principalmente por aquellos
que trabajan en predicar la Palabra,

Y sabéis también vosotros, oh Filipenses, que al principio del evangelio, cuando


partí de Macedonia, ninguna iglesia me comunicó en razón de dar y recibir, sino
vosotros solos… 19 Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falt

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