Semana 09
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Integrantes:
Indicaciones:
1. Luego de conocer la temática: las tarifas de las clínicas durante la crisis sanitaria por el
covid-19 y el papel protector de la salud por parte del Estado peruano, redacta tu punto de
vista al responder la siguiente controversia:
¿Desde tu perspectiva, el uso indiscriminado de las redes sociales influye
negativamente en la salud mental de los jóvenes y adolescentes en la sociedad?
Respuesta (TESIS): El uso indiscriminado de las redes sociales puede influir negativamente
en la salud de los jóvenes y adolescentes en la sociedad.
4. Ahora, revisa las fuentes de información brindadas en Canvas y otras que hayas
investigado por tu cuenta y elabora resúmenes que te ayuden a respaldar tu punto de
vista (recuerda aplicar de manera interna los pasos para la correcta aplicación de la
estrategia de resumen)
Guerra (2023) nos comenta acerca de la enfermedad del siglo 21 (Síndrome del
impostor). El síndrome del impostor es un trastorno psicológico en el que la persona se
siente incompetente y no inteligente, a pesar de tener pruebas de lo contrario. Se
considera un fraude y cree que nunca estará a la altura. Este síndrome está relacionado
con la incapacidad para atribuirse los propios logros y se ve agravado por las redes
sociales, que nos obligan constantemente a compararnos con los demás. Además, pasar
mucho tiempo en las redes sociales puede llevar a problemas de salud mental. La falta de
roles definidos y las desigualdades también pueden aumentar el síndrome del impostor.
El CDC de los Estados Unidos (2023) realizó un estudio sobre la salud de los
adolescentes de High School, mostrando que la proporción de aquellos que
experimentan tristeza y desesperanza ha aumentado del 28% al 42% entre el 2011 y
el 2021. Además, ha habido un aumento en el porcentaje de estudiantes que
consideran suicidarse, pasando del 16% al 22%.
Según Dávila Blázquez, las redes sociales podrían ser la causa de estos problemas de
salud mental en los jóvenes, ya que el uso de smartphones se ha vuelto omnipresente
en los últimos años. Un estudio del 2018 encontró una relación entre el tiempo
dedicado a las pantallas y la tristeza y consideraciones suicidas, mientras que el
contacto personal, el uso de prensa escrita, los deportes y la asistencia a servicios
religiosos se relacionan con una menor probabilidad de depresión.