Tesis Esther Domingo Rodiguez
Tesis Esther Domingo Rodiguez
Tesis Esther Domingo Rodiguez
Tesis Doctoral
Esther Domingo Rodríguez
Pamplona 2011
Servicio de Publicaciones de la Universidad de Navarra
ISBN 84-8081-125-0
Desarrollo de una Técnica de Citometría de Flujo Multiparamétrica que Permite Detectar
Enfermedad Mínima Residual por Debajo del Límite Establecido
Memoria presentada por Dª Esther Domingo Rodríguez para aspirar al grado de Doctor por la
Universidad de Navarra.
A mi hermana, mi mitad
A mi abuelo, mi corazón
AGRADECIMIENTOS
a la Dra. Juana Merino, por darme la oportunidad de realizar este trabajo bajo su dirección, por
enseñarme la importancia del rigor en el trabajo y aconsejarme profesional y personalmente.
al Dr. Alfonso Sánchez-Ibarrola, por haberme dado la posibilidad de formar parte del Servicio de
Inmunología y por transmitirme su sentido de la responsabilidad y disciplina.
a la Dra. Cristina Moreno, por su paciencia y dedicación; por ayudarme y guiarme durante estos
años.
a los pacientes y controles que han participado en el estudio haciendo posible este trabajo.
a las chicas, “mis chicas”, compañeras y amigas, por facilitarme el trabajo diario, escucharme y
aconsejarme durante todo este tiempo.
a Carmen y Jose, por su ayuda; por aprender tan rápido, siempre con una sonrisa.
a mi compañero, por llenar mi vida y estar siempre a mi lado, en lo bueno y en lo malo; por
quererme y recibirme siempre con la mejor “sonrisa”; por hacer que mi vida sea mejor.
a mis padres, a quienes debo todo lo que soy, por ser lo más importante de mi vida, por
enseñarme el valor del trabajo y la humildad; por su respeto, confianza y apoyo; por su amor
incondicional.
a mi hermana, por ser ella, por ser tal y como es; por ser una parte de mi, mi mitad. Por darme a
Julia.
a mi abuelo, por su buen humor y sus valiosos consejos; por ser mi cómplice, mi gran amigo, el
pilar de mi vida, mi corazón.
Índice
Esther Domingo Rodríguez Índice
INTRODUCCIÓN ......................................................................................................................... 15
PLANTEAMIENTO ..................................................................................................................... 37
1. HIPÓTESIS .............................................................................................................................. 39
2. OBJETIVOS ............................................................................................................................. 39
SENSIBILIDAD ............................................................................................................................ 40
5.1. Adquisición estándar (muestras con una infiltración entorno a 10-4) .......................... 53
5.2. Adquisición para alta sensibilidad (muestras con una infiltración entorno a 10 -5) ....... 53
RESULTADOS ............................................................................................................................ 63
1. ANÁLISIS DE EXACTITUD...................................................................................................... 65
4. TIEMPO DE ADQUISICIÓN..................................................................................................... 75
Las técnicas que se utilizan para el análisis de EMR deben ser cuantitativas, sensibles y
específicas. En la actualidad, dos técnicas cumplen estos requisitos, las técnicas moleculares y
la citometría de flujo (Béné y Kaeda, 2009).
Un ejemplo de alteración rastreable son los genes de fusión. Surgen como resultado de una
alteración en el reordenamiento de fragmentos cromosómicos que involucran a las secuencias
de dos genes diferentes, de manera que su unión origina un único gen. Estos genes de fusión se
encuentran en algunos tipos de leucemias y sirven como marcadores moleculares para el
seguimiento de EMR. Este es el caso del gen BCR-ABL resultado de la t(9;22)(q34;q11) que
origina un nuevo cromosoma, más pequeño, denominado Cromosoma Philadelphia que está
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
ABL BCR-ABL
BCR
La mayor parte de los análisis a nivel molecular son cualitativos, indicando sólo la presencia o
ausencia de células patológicas, con una sensibilidad entre 10-4 y 10-5. Para la monitorización de
EMR, en la que es muy importante cuantificar la carga tumoral, se emplea la reacción en cadena
de la polimerasa a tiempo real (RQ-PCR). Esta técnica detecta el producto específico de la
alteración genética a medida que se produce, de manera que al compararlo con los estándares
adecuados, proporciona una medida cuantitativa del grado de enfermedad, con una sensibilidad
entre 10-5 y 10-6 (van der Velden y col., 2007a).
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
En resumen, las técnicas moleculares gozan de un alto consenso internacional pero son
laboriosas, requieren de más tiempo para la obtención de resultados y sobre todo, su
aplicabilidad es baja (Szczepanski, 2007; van der Velden y col., 2007b).
La citometría de flujo es una técnica cuantitativa, específica, con una sensibilidad de 10-4,
aplicable a más del 90% de los pacientes con neoplasias hematológicas y que proporciona
resultados rápidos, siendo muy útil en la toma de decisiones terapéuticas en tiempo real. Por
todo ello, se considera indispensable en el diagnóstico, clasificación y monitorización de las
neoplasias hematológicas, estando presente en la práctica totalidad de los centros hospitalarios
(Craig y Foon, 2008; Campana, 2009a-b).
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
2011). Las discrepancias observadas se deben, en gran medida, a las diferencias de sensibilidad
y aplicabilidad existentes entre ambas técnicas (Tabla 1).
CF RQ-PCR
Sensibilidad 10-4 10-5-10-6
Aplicabilidad >90% 10-50%
Disponibilidad de resultados Horas Días
Grado de implantación Mayor Menor
CF, citometría de flujo; RQ-PCR, PCR a tiempo real
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
El valor pronóstico del grado de EMR en LLA, tanto infantil como de adultos, ha sido evaluado
por múltiples estudios. Todos ellos establecen que la detección de EMR tiene mayor valor
pronóstico en las fases iniciales del tratamiento, especialmente después de la inducción (Basso y
col., 2009; Ratei y col., 2009; Campana, 2010; Stow y col., 2010).
En LLA la citometría de flujo es aplicable virtualmente a todos los pacientes (>95%), mientras
que tan sólo un 15-45% de los pacientes presentan genes de fusión y otras alteraciones
citogenéticas rastreables por las técnicas moleculares estándar. Por eso, la técnica de elección
para la cuantificación de EMR en LLA es la citometría de flujo, alcanzándose por tanto una
sensibilidad de 10-4 (Szczepanski, 2007; Campana, 2009a-b; Irving y col., 2009; Coustan-Smith y
Campana, 2010; Cazzaniga y col., 2011).
Hay que destacar que existen datos en la bibliografía de persistencia de EMR detectada con
técnicas moleculares al final del tratamiento, que predicen mayor riesgo de recaída en pacientes
con LLA tanto B como T, tanto adultos como niños. En 2004, se publicaron dos estudios sobre
LLA infantil que comparaban el análisis de EMR por citometría y PCR Ig/TCR. Ambos estudios
sugerían que un nivel de EMR 0.001% podría ser relevante (Malec y col. en 2004; Neale y col.,
2004). Paganin y col., estudiaron EMR en LLA infantil mediante RQ-PCR Ig/TCR y determinaron
un grupo de pacientes con EMR+ no cuantificable, por tener un nivel de enfermedad próximo al
límite de detección de la técnica (<10-4). El 27% de estos pacientes recayeron por lo que
proponen la necesidad de nuevos ensayos para poder predecir de forma más precisa las
recaídas (Paganin y col., 2008). Bassan y col., estudiaron la utilidad del análisis de EMR a nivel
molecular para establecer una clasificación según el riesgo de recaída, con el objetivo de
individualizar el tratamiento. Analizaron pacientes adultos diagnosticados de LLA-B o T, en los
que realizaron el estudio de EMR mediante RQ-PCR las semanas 10, 16 y 22, correspondientes
a los ciclos 4, 6 y 8 del tratamiento de inducción/consolidación. Observaron que la supervivencia
a los 5 años fue superior en los pacientes EMR- que en los EMR+ (p=0.001), siendo la presencia
de EMR el factor de riesgo más significativo. El nivel de EMR en las semanas 16 y 22 se
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
correlacionó estrechamente con la recaída, con una sensibilidad de 10-4 o mayor. Concluyen
que el nivel de EMR durante la terapia de inducción/consolidación define el grado de riesgo y
permite establecer la mejor estrategia terapéutica en función de dicho riesgo (Bassan y col.,
2009). Para Stow y col. el riesgo de recaída es directamente proporcional al nivel de EMR. En
este trabajo, la incidencia de recaída a los 5 años en niños diagnosticados de LLA-B con EMR
post-inducción entre 0.01 y 0.001% es significativamente superior a la observada en pacientes
con EMR <0.001% (12.7% vs 5%; p<0.047), por lo que proponen realizar un estrecho
seguimiento de dichos pacientes (Stow y col., 2010).
En resumen, existen datos que parecen indicar que merece la pena detectar EMR por debajo de
0.01% en LLA.
En LMA, el momento del tratamiento en el que la detección de EMR tiene mayor valor pronóstico
ha sido ampliamente discutido sin llegarse a alcanzar un claro consenso. En 2008, Kern y col.
realizaron una revisión sobre la monitorización de EMR en LMA en la que compararon estudios
realizados por citometría y por biología molecular. En esta revisión, los estudios basados en
citometría sugieren que los momentos con mayor valor informativo son, después de la inducción
y después de la consolidación. A nivel molecular, destacan una gran heterogeneidad de
resultados y proponen una monitorización continuada durante 3 meses en los que cualquier
aumento de la carga tumoral puede considerarse predictivo de recaída (Kern y col., 2008). Para
Al-Mawali y col. los momentos para la detección de EMR que mejor definen el riesgo de recaída
también son tras la inducción o después de la consolidación, dependiendo del tipo de leucemia y
de la técnica utilizada (Al-Mawali y col., 2009a-b). Shook y col., realizaron una revisión sobre la
cuantificación de EMR en LMA en la que reflejaban la gran variabilidad presente en la bibliografía
publicada hasta la fecha (Shook y col., 2009). Kröger y col. refieren que es tras la consolidación
cuando los estudios a nivel molecular se correlacionan significativamente con el pronóstico,
mientras que por citometría la detección de EMR muestra una mayor correlación con el
pronóstico tras la inducción (Kröger y col., 2010a). En una revisión realizada por Kern y col. en
2010, se muestran diversos estudios que reflejan la falta de consenso en cuanto a qué momento
tiene mayor valor pronóstico: tras la inducción o después de la consolidación (Kern y col., 2010).
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
Más recientemente, Peters y Ansari, proponen que el nivel de EMR tras la inducción puede
utilizarse para personalizar la estrategia de tratamiento post-inducción, ya que la probabilidad de
recaída en pacientes con EMR puede ser hasta 5 veces mayor. Por otra parte consideran que el
momento con mayor valor predictivo es el final de la consolidación (Peters y Ansari, 2011). En
relación al trasplante, Diez-Campelo y col. proponen el día +100 post-trasplante como el
momento que mejor predice el pronóstico (Diez-Campelo y col., 2009) y un estudio multivariante
reciente realizado por Walter y col. concluye que la presencia de EMR pre-trasplante es el único
factor que se asocia con mayor riesgo de recaída y muerte en pacientes con LMA (Walter y col.,
2011).
En los pacientes con leucemia promielocítica aguda (LPA) el momento para la detección de EMR
que ha mostrado mayor valor pronóstico ha sido después de la consolidación (Cazzaniga y col.,
2006).
Dentro de los criterios convencionales que definen la remisión completa en pacientes con MM se
incluye, de manera indispensable, la ausencia de paraproteína en suero y/u orina mediante la
técnica de inmunofijación (IF) (Chanan-Kahn y Giralt, 2010). La determinación del cociente de
cadenas ligeras libres en suero (sFLC, serum Free Light Chains) es un criterio de incorporación
más reciente, que define el concepto de “remisión completa estricta” cuando dicho cociente se
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
encuentra dentro de la normalidad (Durie y col., 2006). Sin embargo, este criterio está siendo
muy cuestionado y aún no ha sido validado (de Larrea y col., 2009; Kröger y col., 2010c).
Además de los criterios convencionales, otros métodos ayudan al estudio de EMR en MM. La
hibridación in situ con fluorescencia (FISH), la citometría de flujo y los métodos moleculares son,
junto con el análisis del quimerismo donante-receptor en pacientes alotrasplantados, los métodos
más sensibles para la detección de EMR en MM (Harousseau y col., 2009; Kröger y col., 2010b).
De entre todos ellos destaca la citometría por ser aplicable a todos los pacientes y proporcionar
una sensibilidad clínicamente relevante (10-4). Kumar y col. en un artículo publicado en 2010
afirman que la citometría de flujo es una técnica sencilla, rápida y más sensible que la
inmunofijación y que se correlaciona mejor con el resultado. Otros estudios también avalan la
utilidad de la citometría para detectar EMR en MM y proponen el análisis post-trasplante como
punto de chequeo más relevante (Sarasquete y col., 2005; Owen y Rawstron, 2005; Rawstron y
col., 2008; Paiva y col., 2008 y 2011).
Actualmente son varios los autores que apoyan la necesidad de revisar los criterios
convencionales que definen la remisión completa, para establecer una nueva definición de dicho
concepto que incluya criterios más sensibles, entre los que destaca principalmente el análisis por
citometría de flujo. En una revisión realizada por Harousseau y col. en 2009 sobre el papel de la
remisión completa en MM, afirman que es necesaria una evaluación más precisa del estado del
paciente que incluya entre otros, criterios como el inmunofenotípico. Para Ladetto y col. las
técnicas moleculares tienen un mayor valor predictivo por su mayor sensibilidad, pero la
citometría es una técnica más sencilla y goza de una mayor aplicabilidad, por lo que consideran
que se debe realizar un esfuerzo internacional para estandarizar, tanto los criterios moleculares
como los citométricos (Ladetto y col., 2010). En la revisión realizada por Chanan-Kahn y Giralt
observan que, gracias a las nuevas estrategias terapéuticas, el nivel de remisión alcanzado en
los pacientes con MM es cada vez más profundo, por lo que consideran necesario el desarrollo y
validación de nuevas técnicas más sensibles, como la citometría y la PCR, para su aplicación
rutinaria en MM (Chanan-Kahn y Giralt, 2010). Un estudio más reciente realizado por Paiva y col.
en pacientes con MM post-inducción, afirma que la remisión inmunofenotípica se traduce en una
mayor supervivencia y un mayor tiempo libre de progresión por lo que debe hacerse un esfuerzo
para incorporar la citometría de flujo en la evaluación rutinaria de pacientes con MM (Paiva y col.,
2011). Yuan y Stetler-Setevenson afirman que, aunque el uso de la citometría en rutina para
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
Con respecto al análisis molecular de EMR en pacientes con MM, hasta hace poco tiempo la
remisión molecular se alcanzaba en muy pocos pacientes, casi exclusivamente en el contexto
post-alotrasplante. Pero, con la aplicación de las nuevas terapias más intensas y eficaces, este
nivel de remisión profundo será alcanzado por un mayor número de pacientes, por lo que serán
necesarios futuros estudios que evalúen su relevancia clínica (Harousseau y col., 2009). En este
sentido, Ladetto y col. realizaron un estudio de EMR a nivel molecular en pacientes con MM a los
que se les administró un intenso tratamiento de consolidación. Observaron que el nivel de
respuesta tras el tratamiento fue superior al logrado por pacientes autotrasplantados. La remisión
molecular tras el tratamiento fue alcanzada por el 18% de los pacientes (vs 3% en
autotrasplantados) y permaneció estable durante los 42 meses que duró el estudio, definiendo
un grupo de pacientes con buen pronóstico (Ladetto y col., 2010).
En 2008 el grupo de trabajo para la LLC del Instituto Nacional del Cáncer (NCI-WG, National
Cancer Institute-sponsored working group on chronic lymphocytic leukemia) publicó la última
guía para el diagnóstico y tratamiento de la LLC. Es una actualización de las guías anteriormente
publicadas, en la que se detallan las recomendaciones para el manejo de pacientes con LLC y
que incluye, por primera vez, el concepto de remisión clínica en ausencia de EMR, definido como
la presencia de menos de 1 célula leucémica por cada 10000 leucocitos, en SP y/o MO. Según
esta guía, los estudios que pretendan alcanzar remisiones completas duraderas deberán incluir
técnicas con la sensibilidad suficiente como para detectar EMR, ya que la ausencia de células
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
leucémicas residuales al final del tratamiento parece tener un potente valor pronóstico positivo
(Hallek y col., 2008).
En LLC, las técnicas empleadas para el análisis de EMR son la citometría de flujo y la ASO-PCR.
La citometría es la técnica que se usa de forma general en rutina, por ser aplicable a todos los
pacientes y por su mayor implantación en los hospitales. La ASO-PCR es una técnica
personalizada, muy laboriosa y tan sólo se aplica en centros altamente especializados (Rawstron
y col., 2007; Kröger y col., 2010b; Böttcher y col., 2011).
Por tanto, según todo lo expuesto, la técnica de elección para la detección de EMR en
neoplasias hematológicas es, en general, la citometría de flujo, por su mayor aplicabilidad (Tabla
2), rapidez y por su mayor implantación en los centros hospitalarios. Este hecho hace que el
umbral establecido para la EMR con valor clínico sea 10-4, simplemente por ser el límite de
detección de la citometría. Así lo refleja Campana en una revisión publicada en 2009 en la que
afirma que el nivel típicamente usado para definir EMR+ es 0.01%, simplemente porque
representa el límite de detección de la citometría de flujo estándar (Campana, 2009a).
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
Sin embargo, algunos datos expuestos anteriormente reflejan que un nivel de EMR por debajo
del umbral establecido podría tener mayor valor pronóstico, tanto en LLA (Bassan y col., 2009;
Stow y col., 2010) como en MM (Harousseau y col., 2009; Ladetto y col., 2010) o en linfoma del
manto. En esta última entidad, Pott y col. realizaron un estudio al final del tratamiento de
inducción y observaron que los pacientes que alcanzaban la remisión molecular tenían una
mayor duración de la respuesta. Además, la remisión molecular sostenida durante el periodo
post-inducción, predice el resultado del trasplante autólogo en pacientes jóvenes o el de la
terapia de mantenimiento en pacientes de edad avanzada (Pott y col., 2010). Este nivel de
sensibilidad sólo es alcanzado actualmente por las técnicas moleculares, que como ya hemos
explicado, son aplicables a un menor porcentaje de pacientes. Merecería la pena, por tanto,
intentar desarrollar una técnica de citometría de flujo de alta sensibilidad.
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
La mayor parte de los autores consideran que deben detectarse entre 10 y 20 células tumorales
para considerar que una muestra es EMR+ (Cazzaniga y col., 2006; Krampera y col., 2006;
Damm-Welk y col., 2007; de Tute y col., 2007; Dworzak y col., 2008; Al-Mawali y col., 2009b;
Björklund y col., 2009; Ratei y col., 2009; Kröger y col., 2010a).
Sin embargo, cuando se trata de cuantificar EMR, suele afirmarse que es necesario detectar al
menos 100 células tumorales (CLSI., 2007a; Rawstron y col., 2008; Yuan y Stetler-Stevenson,
2011). Esto se basa en el hecho de que las células tumorales residuales son consideradas
eventos raros por lo que, teóricamente, siguen una distribución de Poisson. En esta distribución
el coeficiente de variación (CV) es igual a 100/√n, siendo “n” el número de eventos del cluster
tumoral. De modo que un cluster de 100 eventos tendrá un CV del 10% (Harvey Motulsky, 2010),
lo que se considera una precisión adecuada. Sin embargo, hay autores que reducen a 50 el
número mínimo de células tumorales que deben ser detectadas para realizar un análisis preciso
de EMR (Rawstron y col., 2007; Craig y Foon, 2008; Irving y col., 2009; Wilson col., 2010).
Incluso existen estudios que cuantifican EMR detectando tan sólo 20 (Ritgen y col., 2008;
Böttcher y col., 2009), 15 (Thörn y col., 2009) ó 10 células tumorales (Stark y col., 2009). Otros
autores no mencionan el número de eventos tumorales detectados en que basan su
cuantificación (Borowitz y col., 2008; Ryan y col., 2008; Stow y col., 2010).
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
pacientes trasplantados con dosis de células CD34+ por debajo del umbral se debían
fundamentalmente a imprecisión en la cuantificación de dichas células por citometría. Se
analizaron dos estrategias citométricas distintas: por una parte, se realizaron 3 réplicas de cada
determinación, adquiriéndose 50000 leucocitos totales en cada una y calculándose el coeficiente
de variación (CV) del porcentaje de células CD34+ obtenido. En esta estrategia el número de
células CD34+ detectadas era variable de unas muestras a otras. En la segunda estrategia, se
realizaron 3 réplicas de cada determinación, adquiriéndose en cada caso el número de
leucocitos suficiente como para obtener un cluster de células CD34+ de 250 eventos. Observaron
que el CV era significativamente menor con esta estrategia, además de que en la primera
dependía del número de leucocitos adquiridos. Pero realmente, no analizaron el CV para
distintos tamaños de cluster tumoral ni comprobaron que fuera necesario detectar 100 eventos
para que la precisión fuera suficiente. Como hemos explicado anteriormente, esta afirmación es
una suposición teórica basada en la distribución de Poisson.
Los autores que pretenden cuantificar EMR adquieren entre 500000 y (Rawstron y col., 2007;
Borowitz y col., 2008; Irving y col., 2009; Thörn y col., 2009; Kröger y col., 2010a; Wilson y col.,
2010; Peters y Ansari, 2011) y 1 millón de leucocitos totales (San Miguel y col., 2001; Craig y
Foon, 2008; Böttcher y col., 2011; Rajkumar y col., 2011; Walter y col., 2011; Yuan y Stetler-
Stevenson., 2011), siendo todavía una minoría los autores que adquieren 2 millones de
leucocitos para cuantificar EMR (San Miguel y col., 2002; Sarasquete y col., 2005; Paiva y col.,
2011).
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
Sin embargo, como hemos explicado anteriormente, no está demostrado que sea realmente
imprescindible cuantificar 100 células tumorales para que el análisis sea preciso. Si la
cuantificación de 50 eventos fuera suficiente para alcanzar una precisión razonable, el número
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
de leucocitos totales a analizar para alcanzar una sensibilidad de 10-5 se reduciría a 5 millones
(Figura 3).
100 10 millones
10-5
50 5 millones
Figura 3: Número de leucocitos totales que deben ser analizados para alcanzar una sensibilidad
de 10-5 en función del número de células tumorales detectadas.
Cinco millones de leucocitos sigue siendo una cantidad de células varias veces superior a la que
se suele adquirir en citometría de flujo estándar, y sobre todo, superior al número de leucocitos
que se suelen marcar en un solo tubo. Esto significa que plantearse realizar un estudio de
citometría de alta sensibilidad implica marcar varios tubos con una misma combinación de
anticuerpos y adquirirlos conjuntamente.
Con los citómetros analógicos, realizar una adquisición conjunta de varios tubos implicaba
asumir que en el fichero de los datos iban a quedar registradas todas las fluctuaciones que
sufrieran las fluorescencias al cambiar de un tubo a otro. Cuando se inicia la adquisición de un
tubo, inevitablemente se producen turbulencias que afectan a la estabilidad de la fluorescencia, y
que influyen significativamente en los resultados. En un citómetro analógico, cuando se detiene
la adquisición, cesa definitivamente el grabado de datos en el fichero. Por este motivo, hay que
cambiar de tubo sin parar la adquisición, lo que conlleva registrar todos los datos, incluso los
generados durante las turbulencias derivadas del cambio de tubo.
31
Esther Domingo Rodríguez Introducción
a. b.
La segunda ventaja de los citómetros actuales a la hora de adquirir cantidades muy elevadas de
células es la rapidez que proporciona la electrónica digital. Esto permite que el tiempo total de
adquisición se mantenga en un marco razonable para la práctica clínica.
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
Además de estas dos ventajas fundamentales, la citometría digital ofrece otras de enorme
importancia, como son el hecho de que mide la cantidad total de fluorescencia que emite la
célula (parámetro área, A), en vez de la intensidad máxima de fluorescencia emitida, que es lo
que se evaluaba en los citómetros analógicos con el parámetro altura (H). La fluorescencia se
cuantificaba en una escala de 1024 unidades (llamadas canales de fluorescencia), mientras que
actualmente la escala se divide en 262144 canales (Figura 5). Esto aumenta la resolución de los
citómetros digitales, especialmente para señales débiles de fluorescencia. A ello se añade el
hecho de que los citómetros actuales permiten analizar de seis a ocho fluorescencias
simultáneamente, además de que cuentan con óptica de reflexión en vez de transmisión (Figura
6). En la Tabla 3 se resumen las ventajas de los citómetros disponibles actualmente en los
laboratorios de ámbito hospitalario, con respecto a los que utilizábamos hasta hace muy poco
tiempo.
H A
33
Esther Domingo Rodríguez Introducción
a.
APC
PE-Cy7
SSC
PE
b.
PMT4
PMT3
PMT2
PMT1
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Esther Domingo Rodríguez Introducción
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Planteamiento del Trabajo
Esther Domingo Rodríguez Planteamiento
1. HIPÓTESIS
2. OBJETIVOS
2.1. Desarrollar una técnica de citometría de alta sensibilidad para la cuantificación de EMR
en neoplasias hematológicas por medio de la adquisición y análisis de 6 millones de
leucocitos:
2.1.4. Validar la técnica comparándola con los resultados obtenidos mediante biología
molecular.
2.2. Aplicar dicha técnica a pacientes con leucemia aguda y mieloma múltiple cuyo
seguimiento se realice en la Clínica Universidad de Navarra durante el periodo de
tiempo que dure el trabajo.
2.2.1. Comparar los resultados de citometría con los obtenidos mediante técnica
molecular, o por inmunofijación en el caso del mieloma.
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Esther Domingo Rodríguez Planteamiento
×5 ×5 ×5
Dilución 1/10
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Material y Métodos
Esther Domingo Rodríguez Material y Métodos
1. PACIENTES Y CONTROLES
1.1. Pacientes
Se utilizaron muestras EMR+ de 23 pacientes con diferentes neoplasias hematológicas (Tabla 4):
- Ocho muestras de sangre periférica de pacientes con Leucemia Linfática Crónica B (LLC-B)
- Dos muestras de médula ósea de pacientes con Leucemia Linfoblástica Aguda (LLA) BII, una de
ellas Phi+
1.2. Controles
Todas las muestras, tanto de MO como de SP, se extrajeron en tubos con EDTA. Las muestras
presentaban una infiltración en torno a 10-4, es decir, en el umbral de detección actualmente
establecido para la citometría de flujo. Todas ellas se diluyeron 1:10 con leucocitos de SP de
individuos sanos, con el fin de generar muestras con EMR en torno a 10-5.
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Esther Domingo Rodríguez Material y Métodos
2. ANTICUERPOS MONOCLONALES
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Esther Domingo Rodríguez Material y Métodos
Las células de LLC-B se identificaron según el fenotipo consenso (CLSI., 2007b; Rawstron y
col., 2007). Son células CD19+, con baja intensidad de CD20 y CD22. Muestran además
positividad para otros marcadores como CD5 y CD23. Se incluyó en el análisis CD3 para excluir
linfocitos T del cluster tumoral (Tabla 6).
Con respecto a los SLPC-T, los casos 1 y 2 (SS) se caracterizaron por ser negativos para CD3
y CD8 a la vez que expresaban CD4+, CD2++, CD7+d y CD25+ (Willemze y col., 2005). El caso 3
(LLGG-T) expresaba CD3+d, CD8++, CD16+, CD56+ y CD57++ siendo negativo para CD4 (O'Malley,
2007). Por último, el caso 4 (SLP post-Tx) fue positivo para CD3+, TCR+, CD8+d, CD16+d y
CD57+ y negativo para CD5 (Taylor y col., 2005) (Tabla 6).
Las muestras con Leucemias Agudas (LA) se clasificaron de acuerdo a los criterios del Grupo
Europeo para la Caracterización Inmunológica de Leucemias (EGIL) (Bené y col., 1995).
Las células blásticas de LLA1 (LLA BII) presentaban el siguiente inmunofenotipo: CD45d+, CD34++,
CD38-, CD19+, CD10-/+ (40%), CD20+ (60%), CD22cito+, TdT+, µcito-, HLA-DR++, CD123+d, CD15-/+
(34%). El resto de marcadores mieloides y los marcadores T fueron negativos. Además, dicha
muestra se caracterizaba por la presencia del Cromosoma Philadelphia (Phi+), resultado de la
translocación t(9;22).
LLA2 (LLA BII) se caracterizaba por la presencia de células blásticas CD45+d, CD34+, CD38-,
CD19+, CD10++, CD20+het (75%), CD22+, CD22cito+, TdT+, µcito-, CD33+ (49%). Esta muestra fue
negativa para el resto de marcadores mieloides y para marcadores T.
Por otro lado, la muestra LMA1 presentaba el siguiente inmunofenotipo: CD34+, CD38+, CD33++,
CD117+, CD56++, CD7+d, HLA-DR-, MPO+/- (59%), Lisozima+d. El resto de marcadores mieloides y
los marcadores T fueron negativos. Este fenotipo planteaba el diagnóstico diferencial entre
Leucemia Aguda Mieloblástica/NK y Leucemia Mieloblástica Aguda HLA-DR- no monocítica
“cuplike” (Kussick y col., 2004).
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Esther Domingo Rodríguez Material y Métodos
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Inmunofenotipo
3. PROTOCOLO DE MARCAJE
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escala para todos los voltajes utilizados y se analizó su MFI (intensidad media de fluorescencia).
Al pico con menor intensidad se le denominó M1 y al de mayor intensidad M2. Los tres
parámetros que se analizaron fueron:
La Figura 7 muestra las gráficas con los resultados de linealidad, ratio señal-ruido y CV para
cada detector. La zona sombreada marca el rango de voltajes elegido inicialmente, es decir,
aquel en el que la ratio señal/ruido es mayor, el CV de M1 es menor y el detector se comporta de
forma lineal.
Finalmente, se compararon los voltajes elegidos con los adjudicados por el módulo CS-T del
aparato, utilizando las microesferas CS-T. Como se puede observar en la Tabla 7, CS-T adjudica
voltajes más altos que los elegidos según el método de Perfetto.
Tabla 7: Comparación de los voltajes elegidos según el método de Perfetto con los voltajes
adjudicados por el módulo CS-T.
Voltajes Voltajes
PMT
definitivos CS-T
FL1 500 538
FL2 450 477
FL3 580 611
FL4 650 735
FL5 520 610
FL6 600 595
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a. FL1 500V
4 1000 15
800
M2-M1/M1
3
10
M1/B
600
CV
2
400
5
1 200
0 0 0
300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800
b. FL2 450V
2.0 700 15
600
M2-M1/M1
1.5 500
10
M1/B 400
CV
1.0
300
200 5
0.5
100
0.0 0 0
300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800
c. FL3 580V
2.5 700 15
2.0 600
M2-M1/M1
10
M1/B
1.5 500
CV
1.0 400 5
0.5 300
0.0 200 0
300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800
d. FL4 650V
5 700 15
4
M2-M1/M1
600 10
M1/B
3
CV
2
500 5
1
0 400 0
300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800
e. FL5 520V
4 3000 20
2500
M2-M1/M1
15
3 2000
M1/B
CV
1500 10
2 1000
5
500
1 0 0
300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800
f. FL6 600V
4 3000 25
2500 20
M2-M1/M1
3
2000
M1/B
15
CV
2 1500
10
1000
1
500 5
0 0 0
300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800 300 400 500 600 700 800
Figura 7 (a-f): Representación gráfica de linealidad (izquierda), ratio señal-ruido (centro) y CV (derecha),
para cada uno de los detectores a diferentes voltajes (Eje X). La zona sombreada marca el rango de
voltajes elegido inicialmente. El voltaje finalmente elegido para cada PMT está indicado en verde.
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a. b.
Figura 8: Adquisición de leucocitos de SP sin marcar (a) y marcados con anti-CD8 (b) a tres
voltajes distintos dentro del rango previamente definido con microesferas.
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a. b. c.
580V 600V 600V 630V 500V 520V
Figura 9: Leucocitos sin marcar (1ª fila, gris) y marcados con diferentes anticuerpos
monoclonales conjugados con PCP-Cy5.5 (a), PE-Cy7 (b) y APC (c), adquiridos a dos voltajes
diferentes en cada detector. La tabla muestra la ratio M1/B para cada marcador y voltaje.
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5. ADQUISICIÓN DE MUESTRAS
Las muestras se adquirieron en un citómetro FACSCanto con el software FACSDiva v6.1.3 (BD).
El protocolo de adquisición varió en función de la sensibilidad que se pretendía alcanzar.
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. CD38++ en MM
. CD19+ en LLC-B
. CD4+ en SS
. CD8+ en LLGG-T
. TCR+ en SLP post-Tx
. CD34+ en LLA
5.1.2. Una vez seleccionada la región de gateo, se adquirieron 3105 leucocitos para
obtener un cluster tumoral de unos 30 eventos tumorales, 5105 leucocitos para
50 eventos y 1106 para 100 eventos.
5.2. Adquisición para alta sensibilidad (muestras con una infiltración en torno a 10-5)
5.2.1. Tras adquirir los primeros 30000 eventos y seleccionar la región de gateo, se
adquirió el tubo entero.
De este modo, se fueron agregando más tubos al mismo fichero, hasta adquirir un total
de 6 millones de leucocitos.
Es importante destacar que la grabación de los datos de cada tubo en el fichero se inició
pasados unos 10 segundos de adquisición, con el fin de evitar las turbulencias del frente de la
muestra.
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En la Figura 10a se muestra la intensidad de fluorescencia del marcador CD38 frente al tiempo
total de adquisición de 6 millones de leucocitos de una muestra de médula ósea del paciente
MM1 en que se ha realizado gateo CD38. Se observa cómo se mantiene estable a lo largo de la
adquisición de los diferentes tubos, sin fluctuaciones entre tubo y tubo. Lo mismo se observa en
la Figura 10b, que representa la intensidad de fluorescencia de CD19 a lo largo del tiempo total
de adquisición de 6 millones de leucocitos en el paciente LLC-B1.
a. b.
Figura 10: Estabilidad de la intensidad de fluorescencia del marcador CD38 frente al tiempo total
de adquisición de 6 millones de leucocitos del paciente MM1 (a) y del CD19 frente al tiempo total
de adquisición de 6 millones de leucocitos del paciente LLC-B1 (b).
54
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Las muestras se analizaron con el software Paint-A-Gate 3.0.2 PPC (BD), tras la exportación del
fichero “.fcs” en versión 2.0, excluyendo el parámetro “tiempo”.
La técnica se validó comparando el estudio de citometría de la muestra LLA1 (LLA-BII Phi+) con
RQ-PCR de BCR-ABL.
Para ello se utilizó la muestra con una infiltración en torno a 10-2 y se hicieron tres diluciones
sucesivas 1:10 con sangre periférica normal, de manera que se generaron muestras con
infiltraciones en torno a 10-3, 10-4 y 10-5. La muestra original y las tres diluciones resultantes se
analizaron en paralelo por citometría de flujo y RQ-PCR.
La cuantificación de EMR por RQ-PCR de BCR-ABLp190 fue realizada por la Unidad de Biología
Molecular/HLA del Servicio de Hematología del Hospital Clínico Universitario de Salamanca.
Entre Enero del 2006 y Mayo del 2011 se diagnosticaron en la Clínica Universidad de Navarra
(CUN) 82 pacientes de linfoma folicular (39 mujeres y 43 hombres con edades comprendidas
entre 33 y 78 años; media de edad 58 años. Tabla 9) procediéndose a buscar infiltración en MO
por la técnica de citometría de flujo estándar (CFe) y por biología molecular.
55
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9. ANÁLISIS ESTADÍSTICO
El análisis estadístico se llevó a cabo con los programas SPSS versión 15.0 y GraphPad Prism
4.
Para calcular el intervalo de confianza del 95% (IC95) del número de eventos del cluster se aplicó
la fórmula:
Cada medición se realizó 5 veces, “n” correspondía a la suma total de eventos tumorales
detectados en las 5 determinaciones. El resultado final se dividió entre 5 (Harvey Motulsky,
2010).
Para el cálculo del IC95 del porcentaje de EMR detectado en cada caso, se dividió el IC95 del
número de eventos del cluster calculado anteriormente, entre la media de leucocitos analizados
en las 5 determinaciones y se multiplicó el resultado por 100.
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1. LEUCEMIA AGUDA
De los 53 pacientes diagnosticados de leucemia aguda en este periodo (29 varones y 24 mujeres
con edades comprendidas entre los 9 y 85 años), sólo 17 realizaron el seguimiento en la CUN
(Tabla 10).
- La hibridación in situ con fluorescencia (FISH) para estudiar la reordenación del gen MLL.
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2. MIELOMA MÚLTIPLE
Con respecto a los pacientes con mieloma múltiple, se diagnosticaron 93 pacientes (60 varones
y 33 mujeres; edad media, 64 años; rango de edad, 34-85 años), de los cuales 37 realizaron
seguimiento en la CUN (Tabla 11).
La técnica de cadenas libres en suero (sFLC), incorporada en Febrero de 2009, se realizó con el
kit Freelite (The Binding Site Ltd, Birmingham, Reino Unido), también en el laboratorio de
Proteínas.
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Tabla 10: Descripción del grupo de pacientes diagnosticados de Leucemia Aguda (LA).
Identificación Seguimiento
Sexo Edad Diagnóstico
del paciente en CUN
LA-1 M 19 LLA pre-B (B-III)
LA-2 M 46 LLA pre-B (B-III) Si
LA-3 M 56 LLA común (B-II) Si
LA-4 V 60 LLA pre-B (B-III)
LA-5 V 49 LLA pre-B (B-III)
LA-6 V 72 LLA común (B-II)
LA-7 V 9 LLA común (B-II) Si
LA-8 M 43 LLA pre-B (B-III)
LA-9 V 11 LLA común (B-II) Si
LA-10 M 13 LLA común (B-II) Si
LA-11 V 59 LLA pro-B (B-I)
LA-12 M 53 LLA B madura (B-IV)
LA-13 V 46 LLA común (B-II) Si
LA-14 V 48 LLA pre-B (B-III)
LA-15 M 18 LLA pre-T (T-II)
LA-16 M 30 LLA pre-T (T-II) Si
LA-17 V 69 LA Bifenotípica T-Mieloide Si
LA-18 M 15 LA Bifenotípica T-Mieloide Si
LA-19 V 69 LA Bifenotípica T-Mieloide
LA-20 V 72 LMA M2 Si
LA-21 M 9 LMA M2
LA-22 V 69 LMA M5
LA-23 V 70 LMA M2
LA-24 M 19 LMA M4
LA-25 V 45 LMA M2
LA-26 V 79 LMA M0
LA-27 V 49 LMA M1
LA-28 M 70 LMA secundaria a SMD
LA-29 M 58 LMA M2 Si
LA-30 V 81 LMA M2
LA-31 V 51 LMA M2 Si
LA-32 M 31 LMA secundaria a SMD Si
LA-33 M 79 LMA M2
LA-34 M 71 LMA M1
LA-35 V 68 LMA M2
LA-36 V 74 LMA M4
LA-37 M 78 LMA M5
LA-38 M 85 LMA M1
LA-39 M 69 LMA M2
LA-40 M 75 LMA M0
LA-41 V 21 LMA M2 Si
LA-42 V 75 LMA secundaria a SMD
LA-43 V 77 LMA M5 secundaria a SMD
LA-44 V 80 LMA M2 Si
LA-45 V 55 LMA M3
LA-46 M 69 LMA M4
LA-47 V 16 LMA M3
LA-48 M 53 LMA M1 Si
LA-49 V 68 LMA M2
LA-50 V 22 LMA M5
LA-51 V 76 LMA M7 secundaria a SMD
LA-52 M 55 LMA M4
LA-53 M 45 LMA M1 Si
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Esther Domingo Rodríguez Material y Métodos
Tabla 11: Descripción del grupo de pacientes diagnosticados de Mieloma Múltiple (MM).
61
Esther Domingo Rodríguez Material y Métodos
62
Resultados
Esther Domingo Rodríguez Resultados
1. ANÁLISIS DE EXACTITUD
Se analizaron cuatro muestras de MO de pacientes con MM, con EMR en torno a 10-4 y cuatro
muestras de SP de pacientes con LLC-B también con EMR en torno a 10-4. Cada una de estas
muestras se analizó cinco veces, en cinco procedimientos independientes de marcaje,
adquisición y análisis, considerándose como valor real de infiltración de la muestra la media de
las cinco determinaciones (Tabla 12a). En cada procedimiento se adquirieron 500000 leucocitos
y se detectaron alrededor de 100 células tumorales.
Las ocho muestras se diluyeron 1:10 con leucocitos de SP de individuos sanos, con el fin de
generar muestras con EMR en torno a 10-5. Se analizó la EMR en las muestras diluidas por
medio de la adquisición de 3 y 6 millones de leucocitos.
Como muestra la Tabla 12b, los resultados obtenidos en las muestras diluidas son los esperados
±10%, tanto para clusters en torno a 100 eventos como para clusters menores.
65
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Tabla 12b: Cuantificación de EMR en dichas muestras, diluidas 1:10 con leucocitos de SP de
individuos sanos.
66
Esther Domingo Rodríguez Resultados
2. ANÁLISIS DE ESPECIFICIDAD
Los resultados se muestran en las Figuras 11-14. Como se puede observar, en ningún caso
identificamos un cluster de eventos con fenotipo patológico.
a. b.
CD103
CD103
3
CD20 CD20
Figura 11: Análisis de EMR en una muestra de SP de un paciente con tricoleucemia (a) y en una
muestra de SP control (b). En rojo están representadas las células tumorales (CD20 + CD103+) y
en gris los leucocitos normales. No se observan células con fenotipo de tricoleucemia en la
muestra control.
67
Esther Domingo Rodríguez Resultados
a. b.
CD38
CD38
8
8
CD10 CD34
Figura 12: Análisis de EMR en una muestra de MO de un paciente con linfoma folicular (a) y en
una muestra de MO control (b). En rojo están representadas las células tumorales (CD38-
CD10d+) y en gris los leucocitos normales. No se observan células con fenotipo de linfoma
folicular en la muestra control.
a. b.
Figura 13: Análisis de EMR en una muestra de SP del paciente LLC-B3 (a) y en una muestra de
SP de un control sano (b). En rojo están representadas las células LLC-B (CD20d+ CD22d+ CD5+
CD23+) y en gris los linfocitos B normales. No se observan células con fenotipo de LLC-B en la
muestra control.
68
Esther Domingo Rodríguez Resultados
a. b.
Figura 14: Análisis de EMR en una muestra de MO del paciente MM2 (a) y en una muestra de
MO de un control sano (b). En rojo están representados los eventos mielomatosos (CD38 ++
CD138++ CD56++ CD19- CD117+ CD45-). En verde observamos las células plasmáticas normales
(CD38+++ CD138++ CD56- CD19+ CD117- CD45+). No se observan células con fenotipo de la
enfermedad en la muestra control.
69
Esther Domingo Rodríguez Resultados
3. ANÁLISIS DE PRECISIÓN
Como muestran los resultados de la Tabla 13, tanto las muestras de LLC-B como los SLPC-T
parecen seguir la distribución de Poisson. El CV disminuye a medida que aumenta el número de
eventos del cluster. En general basta con 50 eventos para que el CV sea aceptable, en torno al
15%. Sin embargo, no ocurre lo mismo con las muestras de MM, en las que el CV es siempre
≤10% independientemente del tamaño del cluster.
Una posible explicación a este hecho son las características inmunofenotípicas de las células
plasmáticas mielomatosas. Su alta intensidad de expresión de CD38, su negatividad para CD45
y su homogeneidad en la expresión de marcadores, hacen que se sitúen en un espacio
especialmente vacío, libre de ruido de fondo y que se identifiquen y diferencien del resto de
células de la MO de una manera más inequívoca que el resto de hemopatías estudiadas. Esto
podría implicar que se requirieran menores tamaños de cluster para conseguir una misma
precisión.
70
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Tabla 13: Coeficiente de variación (CV) del porcentaje de EMR de muestras de MO de cinco
pacientes con mieloma múltiple (MM) y de SP de cinco pacientes con leucemia linfática crónica B
(LLC-B) y cuatro con síndrome linfoproliferativo crónico T (SLPC-T), en relación al número de
eventos del cluster.
Nº eventos del EMR CV CV Poisson
cluster (%) (%) (%)
MM Caso 1 19 0,0127 9 23
43 0,013 10 15
94 0,0127 10 10
Caso 2 30 0,018 10 18
44 0,017 10 15
87 0,017 9 11
Caso 3 25 0,012 10 20
38 0,011 10 16
82 0,012 10 10
Caso 4 39 0,021 8 16
54 0,02 10 14
107 0,02 10 10
Caso 5 22 0,0027 9 21
42 0,003 10 15
91 0,003 8 10
LLC-B Caso 1 26 0,016 20 20
36 0,014 19 17
78 0,015 11 11
Caso 2 37 0,023 18 16
60 0,023 14 13
124 0,024 7 9
Caso 3 37 0,022 13 16
55 0,023 9 13
139 0,025 10 9
Caso 4 36 0,021 9 17
62 0,023 12 13
122 0,022 10 10
Caso 5 31 0,049 3 18
55 0,051 7 13
130 0,05 9 9
SLPC-T Caso 1 30 0,04 12 18
50 0,038 12 14
272 0,04 4 6
Caso 2 25 0,025 20 20
47 0,024 13 15
79 0,026 11 11
Caso 3 48 0,031 12 14
86 0,032 8 11
186 0,032 8 7
Caso 4 57 0,031 12 13
106 0,031 8 10
193 0,03 2 7
CV corresponde al coeficiente de variación del grado de EMR observado, calculado como (desvío
estándar/media)×100. CV Poisson es el CV predicho por la distribución de Poisson en función del número de
eventos del cluster (n): CV=100/√n.
71
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Con el objetivo de testar esta hipótesis, se eligieron dos muestras de LA (LLA1 Y LMA1) con
EMR en torno a 10-4 con características fenotípicas similares en cuanto a homogeneidad del
cluster y colocación en espacios libres de ruido de fondo (Figura 15; Material y Métodos,
apartado A.2).
Se diluyeron 1:10 con leucocitos de SP de controles sanos para generar infiltración en torno a
10-5. Las muestras diluidas se analizaron por triplicado para tamaños diferentes de cluster
tumoral, calculando el CV del porcentaje de EMR obtenido. Como se puede observar en la Tabla
14, ambas muestras se comportaron según lo predicho por la distribución de Poisson, y por tanto
de manera diferente al MM.
Figura 15: Características inmunofenotípicas de las células tumorales de LMA1 que las sitúan
en un espacio totalmente vacío (izquierda) y homogeneidad del cluster tumoral de LLA1
(derecha).
72
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Tabla 14: Coeficiente de variación (CV) del porcentaje de EMR en dos muestras de LA, en
relación al número de eventos del cluster.
Nº eventos CV CV Poisson
EMR (%)
cluster (n) (%) (%)
LLA2 0,002 28 21 18,9
45 14 14,9
78 14 11,3
LMA1 0,001 23 25 21
35 14 17
CV corresponde al coeficiente de variación del grado de EMR observado, calculado como (desvío estándar/media)×100. CV
Poisson es el CV predicho por la distribución de Poisson en función del número de eventos del cluster (n): CV=100/√n.
Como cabría esperar, la amplitud del IC disminuye al aumentar el número de eventos del cluster
tumoral. Sin embargo, se observa que a partir de un tamaño de cluster de aproximadamente 50
células tumorales, la ganancia de precisión que se produce al aumentar el tamaño del cluster no
es significativa.
73
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Tabla 15: Intervalo de confianza del 95% del número de eventos del cluster y del porcentaje de
EMR en muestras de cinco pacientes con mieloma múltiple (MM), cinco con leucemia linfática
crónica B y cuatro con síndrome linfoproliferativo crónico T (SLPC-T).
Nº eventos del cluster (n) IC95 IC95
D1 D2 D3 D4 D5 de n del % EMR
MM Caso 1 19 18 18 21 21 19 16 - 23 0,0101 - 0,0152
43 48 35 57 33 43 37 - 49 0,0149 - 0,0195
91 99 94 98 87 94 85- 102 0,0167 - 0,0200
Caso 2 25 28 36 32 29 30 25 - 35 0,0187 - 0,0259
54 41 37 46 42 44 38 - 50 0,0152 - 0,0199
90 84 85 88 86 87 78 - 95 0,0158 - 0,0191
Caso 3 27 23 21 28 26 25 21 - 29 0,0100 - 0,0142
45 34 45 36 32 38 33 - 44 0,0096 - 0,0128
87 88 89 70 74 82 74- 90 0,0111 - 0,0135
Caso 4 37 43 37 41 37 39 33- 44 0,0221 - 0,0294
59 56 48 47 61 54 45 - 61 0,0191 - 0,0243
114 102 104 105 110 107 98- 116 0,0205 - 0,0242
Caso 5 24 22 20 21 25 22 18 - 26 0,0022 - 0,0032
49 35 43 45 38 42 36- 48 0,0026 - 0,0034
82 95 98 83 97 91 83 - 99 0,0030 - 0,0036
LLC-B Caso 1 30 30 19 30 19 26 21- 30 0,0135 - 0,0191
45 38 40 32 27 36 31 - 42 0,0120 - 0,0160
68 77 70 93 83 78 70 - 86 0,0136 - 0,0166
Caso 2 36 32 26 41 48 37 31- 42 0,0197 - 0,0263
71 65 53 51 60 60 53 - 67 0,0204 - 0,0257
124 113 130 135 119 124 114 - 134 0,0221 - 0,0259
Caso 3 40 30 38 42 34 37 31 - 42 0,0188 - 0,0251
60 53 47 56 57 55 48 - 61 0,0177 - 0,0225
141 138 136 140 141 139 129– 149 0,0234 – 0,0272
Caso 4 36 38 30 38 36 36 30- 41 0,0179 - 0,0241
53 66 59 60 73 62 55- 69 0,0201 - 0,0252
144 108 129 121 108 122 112 - 132 0,0205 - 0,0241
Caso 5 32 32 30 32 28 31 26 - 36 0,0742 - 0,1020
54 58 49 58 55 55 48- 61 0,0740 - 0,0939
131 141 106 126 148 130 120 - 140 0,0927 - 0,1081
SLPC-T Caso 1 32 27 25 34 30 30 25- 34 0,2531 - 0,3503
47 57 43 46 59 50 44- 57 0,2321 - 0,2975
284 271 280 269 259 273 258- 287 0,2743 - 0,3051
Caso 2 34 31 23 17 21 25 21- 30 0,0210 - 0,0299
53 38 46 47 52 47 41- 53 0,0209 - 0,0271
76 73 72 93 80 79 71 - 87 0,0240 - 0,0292
Caso 3 52 45 51 40 53 48 42- 54 0,0274 - 0,0353
83 98 86 82 80 86 78 - 94 0,0288 - 0,0349
185 202 184 149 210 186 174- 198 0,0330 - 0,0375
Caso 4 48 54 62 64 58 57 51 - 64 0,0281 - 0,0355
113 97 106 103 113 106 97- 115 0,0335 - 0,0397
187 192 189 203 193 193 181- 205 0,0570 - 0,0646
Cada muestra se sometió a 5 procedimientos independientes de marcaje, adquisición y análisis. IC 95 del número de
eventos del cluster se calculó según la fórmula IC= [(n-1,96n)/5] - [(n+1,96n)/5], siendo n la suma del número de
eventos del cluster de las 5 determinaciones. IC95 del porcentaje de EMR se calculó dividiendo cada término del
intervalo anterior entre la media de leucocitos adquiridos en las 5 determinaciones y multiplicando el resultado por
100.
74
Esther Domingo Rodríguez Resultados
4. TIEMPO DE ADQUISICIÓN
A la vista de los resultados, consideramos que 4000 eventos/seg podría ser una tasa de
adquisición razonable, ya que el porcentaje de abortos electrónicos fue tan sólo del 2,6%.
Con el fin de determinar si una tasa de adquisición de 4000 eventos/seg pudiera afectar al
porcentaje de EMR obtenido, analizamos muestras de MO de tres pacientes con mieloma
múltiple (MM) y tres de SP de pacientes con leucemia linfática crónica B (LLC-B) y cuantificamos
su porcentaje de EMR adquiriendo las muestras a 2000 y 4000 eventos/seg. Como se puede
observar en la Figura 16, los resultados obtenidos fueron similares con ambas tasas de flujo
(r=0,99).
Por tanto, se puede aumentar la tasa de flujo a 4000 eventos/seg, lo que reduce el tiempo de
adquisición aproximadamente a media hora por cada 6 millones de leucocitos, haciendo
aplicable la técnica de alta sensibilidad a la práctica diaria.
75
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Tabla 16: Medida del porcentaje de abortos electrónicos para tasas de flujo crecientes en la
adquisición de las muestras.
Concentración Tasa de Abortos
celular * adquisición electrónicos
(millones /mL) (eventos/seg) (%)
0,25 600 0,4
0,5 1200 0,8
1 2250 1,5
2 3800 2,6
4 6300 4,3
5 7500 5,3
* en el tubo de adquisición.
0.05
0.04
0.03
0.015
EMR (%)
0.010
0.005
0.000
MM 6 MM 7 MM 8 LLC 6 LLC 7 LLC 8
Tasa de adquisición
EMR (%) 2000 4000
(eventos/seg) (eventos/seg)
MM6 0,001 0,00098
MM7 0,01 0,01
MM8 0,04 0,04
LLC-B6 0,01 0,0097
LLC-B7 0,01 0,0087
LLC-B8 0,006 0,006
76
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Tal y como se explica en Material y Métodos, se comparó el análisis de EMR realizado por
citometría de flujo de alta sensibilidad y PCR cuantitativa a tiempo real (RQ-PCR).
Se utilizó una muestra de médula ósea, del paciente LLA1 (LLA-BII Phi+) (ver Material y
Métodos, apartado A.2, pag. 44).
La muestra original, que mostraba una infiltración de 1,5% (10-2) y sus tres diluciones sucesivas
1:10 con leucocitos de SP de un control sano, se analizaron por citometría de flujo (CF) y RQ-
PCR de BCR-ABLp190 (Figura 17 y Tabla 17).
Como se puede observar, con ambas técnicas se obtienen resultados similares (r=0,99).
Muestra original
1,5%
Figura 17: Porcentaje de infiltración de la muestra LLA1 (arriba) y de sus tres diluciones
sucesivas 1:10 (abajo), detectado por citometría de flujo.
77
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Tabla 17: Cuantificación de EMR por CF (□) y RQ-PCR () en una muestra de MO del paciente
LLA1 y en sus tres diluciones sucesivas 1:10.
5
4
3
2
1
0.31
EMR (%)
0.26
0.21
0.16
0.11
0.06
0.01
0.001
0.000
M 10-3 10-4 10-5
Diluciones sucesivas
Muestra
1:10 1:100 1:1000
% EMR por CF 1.5 0.16 0.016 0.001
% EMR por RQ-PCR 4.9 0.33 0.025 0.001
78
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Tabla 18: Infiltración en MO de pacientes con linfoma folicular en el momento del diagnóstico,
detectado por CF estándar.
79
Esther Domingo Rodríguez Resultados
En 36 pacientes que presentaban la t(14;18) se comparó el resultado obtenido por CFe con el
análisis molecular del gen de fusión BCL2-JH. Como se observa en la Tabla 19, la concordancia
entre citometría de flujo estándar y PCR fue del 55,5%. La CFe presentó 39% de falsos
negativos, y el PCR 5,5%.
Tabla 19: Comparación de la infiltración detectada en MO de pacientes con linfoma folicular por
CF estándar y por PCR de BCL2-JH.
ID CFe (%) BCL2-JH
Concordancias F6 5,5 +
F10 36 +
F14 0,11 +
F18 1,6 +
F20 3,4 +
F24 0,17 +
F40 6,5 +
F49 0,017 +
F56 6 +
F59 0,28 +
F61 36 +
F63 0,11 +
F70 0,04 +
F74 0,07 +
F75 0,14 +
F28 - -
F35 - -
F48 - -
F52 - -
F71 - -
Discordancias F3 - +
F9 - +
F16 - +
F19 - +
F22 - +
F26 - +
F29 - +
F41 - +
F46 - +
F53 - +
F55 - +
F64 - +
F78 - +
F81 - +
F21 0,053 -
F45 0,01 -
80
Esther Domingo Rodríguez Resultados
81
Esther Domingo Rodríguez Resultados
- Fenotipo: CD45-, CD34+d, CD38+d, CD19+, CD10++, CD20+, CD22cito+, TdT+, µcito+, HLA-DR++,
resto de marcadores T y mieloides negativos.
- Ventana de adquisición: CD19+/SSC
- Análisis molecular: presencia del transcrito quimérico BCR-ABLp210 (Phi+).
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 2 LLA pre-B (B-III) Diagnóstico 1. 76 Phi+
Inducción
2. Post-Ind 0,005 nd
Reinducción
3. Post-Reind NEG 10-4-10-5 +
S, Sensibilidad; nd, no determinado
82
Esther Domingo Rodríguez Resultados
- Fenotipo: CD45++, CD34++, CD38-, CD19+, CD10-/+, CD20+ (60%), CD22cito+, TdT+d, µcito-, HLA-
DR+++, CD15-/+ (34%), CD123+d, resto de marcadores T y mieloides negativos.
- Ventana de adquisición: CD19+/SSC
- Análisis molecular: presencia del transcrito BCR-ABLp190 (Phi+).
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 3 LLA común (B-II) Diagnóstico 1. 44 Phi+
Inducción
2. +14d 0,02 nv
3. Post-Ind NEG 10-4-10-5 NEG
Consolidación
4. +28d NEG 10-4-10-5 NEG
5. +2m NEG 10-5 NEG
Mantenimiento
6. +3m NEG 10-5 NEG
Alo-Tx (+8m)
7. +16d NEG 10-4-10-5 NEG
8. +89d NEG 10-5 NEG
9. +167d NEG 10-5 NEG
10. +347d NEG 10-5-10-6 NEG
nv, no valorable; d, día; m, mes; Alo-Tx, trasplante alogénico
- Fenotipo: CD45-, CD34+, CD38+, CD19+, CD10++, CD20-, CD22cito+, TdT+d, µcito-, HLA-DR+++,
CD123+, CD33+, CD13+ y CD117+d, resto de marcadores T y mieloides negativos.
- Ventana de adquisición: CD19+/SSC
- Análisis molecular: presencia del transcrito quimérico TEL-AML1.
83
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 7 LLA común (B-II) Diagnóstico 1. 59 TEL-AML1+
Inducción
2. +14d 8,5 +
3. +28d 0,26 nd
4. Post-Ind 0,0017 nd
Consolidación
5. Post-Cons NEG 10-5-10-6 NEG
Reind/Cons
6. +35d NEG 10-4-10-5 NEG
Mantenimiento
7. +6s NEG 10-4-10-5 NEG
8. +7m NEG 10-5 NEG
9. Post-Mant NEG 10-4-10-5 NEG
s, semana.
- Fenotipo: CD45-, CD34-, CD38++, CD19+, CD10+, CD20-, CD22cito+d, TdT+d, µcito-, resto de
marcadores T y mieloides negativos.
- Fenotipo recaída: CD45+d (84%), CD34+ (38%), CD38- , CD22cito+d, CD19+, CD10-, CD20-,
TdT+, µcito-, MPO+ (66%), resto de marcadores T y mieloides negativos.
-
Ventana de adquisición: CD19+/SSC
- Análisis molecular: ausencia de los transcritos quiméricos rastreados.
84
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 9 LLA común (B-II) Diagnóstico 1. 78 NEG
Inducción
2. +14d 5,4
3. Post-Ind 0,001
Consolidación
4. Post- Cons NEG 10-5-10-6
Reind/Mant
5. Post-Mant NEG 10-4-10-5
Mantenimiento
6. Post- Mant NEG 10-4-10-5
7. +30m NEG 10-5
Recaída (+4a) 89
Inducción
8. +21d 2
9. Post-Ind 0,015
Consolidación
10. +28d NEG 10-5
11. +10s NEG 10-4-10-5
12. +4m NEG 10-5
Mantenimiento
13. +7d NEG 10-5-10-6
14. +10m NEG 10-4-10-5
15. +14m NEG 10-5
a, años. En rojo se muestra el fenotipo al diagnóstico y en azul el fenotipo de la recaída.
- Fenotipo: CD45+d, CD34-, CD38++, CD19+, CD10-, CD20+het (81%), CD22+d, CD22cito+, TdT-/d,
µcito-, CD33+d (41%), CD25+, resto de marcadores T y mieloides negativos.
-
Ventana de adquisición: CD19+/SSC
- Análisis molecular: ausencia de los transcritos quiméricos analizados.
85
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 10 LLA común (B-II) Diagnóstico 1. 96 NEG
Inducción
2. +14d 15,4
3. +35d 0,04
4. Post-Ind 0,02
Consolidación
5. Post-bloque 1 NEG 10-5
6. Post-bloque 2 NEG 10-5
Reind/Mant
7. Post-Mant NEG 10-4-10-5
Mantenimiento
8. Post-Mant NEG 10-5
- Fenotipo: CD45+d, CD34+, CD38-/d, CD19+, CD10++, CD20+het (75%), CD22+d, CD22cito+, TdT+,
µcito-, CD33+d (49%), resto de marcadores T y mieloides negativos.
- Ventana de adquisición: CD34+/SSC (El tratamiento incluía Rituximab)
- Análisis molecular: ausencia de los transcritos quiméricos analizados.
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 13 LLA común (B-II) Diagnóstico 1. 84,5 NEG
Inducción
2. +14d 59
Inducción
3. +28d 1,5
4. Post-Ind NEG 10-5-10-6
Consolidación
5. +6s NEG 10-5
6. Post-Cons NEG 10-5
Alo-Tx
7. +28d NEG 10-5
86
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 16 LLA pre-T (T-II) Diagnóstico 1. 24 NEG
Inducción
2. Post-Ind 0,03
Alo-Tx (+4m)
3. +28d NEG 10-4-10-5
4. +92d NEG 10-5
5. +185d 0,01
6. +311d NEG 10-5
7. +16m NEG 10-5-10-6
8. +22m NEG 10-4-10-5
Recaída 1(+2a) 9. 69
Inducción
10. Post-bloque 1 0,55
11. Post-bloque 2 0,06
Mantenimiento
12. Post-Mant 0,89
Consolidación
13. +21d 0,16
14. +2m 0,23
Recaída 2 (+9m) 15. 90 C+
Inducción
16. +14d 19,7
17. +28d NEG 10-5
En rojo se muestra el fenotipo al diagnóstico y en azul el fenotipo de la recaída. C+, presencia de alteraciones citogenéticas (ver
texto).
87
Esther Domingo Rodríguez Resultados
- Fenotipo: CD45+d, CD34+, TdT+ (79%), CD3cito+ (77%), CD7+, CD4+d (74%), HLA-DR-, MPO-/+
(24%), CD33+, CD13+d, CD117+, CD11b-/+ (34%), resto de marcadores estudiados negativos.
Es decir, tres puntos del score EGIL para linaje mieloide (CD13, CD33 y CD117) y 3 para linaje
T (CD3cito, CD7 y TdT) (Béné y col., 1995).
- Ventana de adquisición: CD34+/SSC
- No se observaron alteraciones genéticas rastreables por biología molecular.
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 17 LA Bifenotípica T-Mieloide Diagnóstico 1. 42 NEG
Inducción
2. Post-Ind 0,05
Consolidación
3. +14d NEG 10-5
4. +6s NEG 10-4-10-5
Mantenimiento
5. +1m NEG 10-5
- Fenotipo: CD45+d, CD34+, CD38++, CD3cito+d, CD3-, CD7+, CD2+, HLA-DR+, TdT+d, CD13+
(71%), CD117+, CD15+d/- (63%), CD11b-/+ (50%), resto de marcadores estudiados negativos.
Es decir, cuatro puntos del score EGIL para linaje T (CD3cito, CD7 y CD2) y 2,5 puntos para
linaje mieloide (CD13, CD117 y CD15) (Béné y col., 1995).
- Ventana de adquisición: CD34+/SSC
- No se observaron alteraciones genéticas rastreables por biología molecular.
88
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 18 LA Bifenotípica T-Mieloide Diagnóstico 1. 49 NEG
Inducción
2. +14d 8
3. +35d 0,7
4. +6s 0,08
5. +2m 0,007
Intensificación
6. +14d NEG 10-5
7. Post-Int 0,006
Reinducción
8. +28d 0,02
9. +6s 0,006
10. +3m NEG 10-4-10-5
11. Post-Reind 0,002
Mantenimiento
12. +2m NEG 10-5
13. +3m NEG 10-4-10-5
14. +5m NEG 10-5
15. Post-Mant NEG 10-5
Reinducción
16. +2m NEG 10-4-10-5
17. +4m NEG 10-5
18. +7m NEG 10-4-10-5
Fin Tratamiento
19. +1m NEG 10-4-10-5
20. +4m NEG 10-5
21. +6m NEG 10-4-10-5
22. +10m NEG 10-5
23. +14m NEG 10-5
- Fenotipo: CD45+d, CD34-, HLA-DR-, MPO+, CD33++, CD117+ (62%), CD13+d, CD15-, CD14-,
CD11a+d, CD11b-, CD11c+d, CD4-/+, CD65-, CD64-, CD36-, el resto de marcadores B y T
negativos.
- Ventana de adquisición: CD45+d/SSC
89
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 20 LMA M2 Diagnóstico 1. 93 NEG
Inducción
2. +28d 0,13
Consolidación
3. +28d 0,04
4. Post-Cons 0,01
Recaída (+3m) 5. 50 NEG
Inducción
6. Post-Ind NEG 10-4
7. +2m NEG 10-4
Alo-Tx (+2m)
Recaída 8. +28d 18
- Fenotipo: CD45+, CD34++, HLA-DR+, MPO-, CD33+, CD117+, CD13+, CD15- (15%), CD14-,
CD11b-, CD64-, CD65-, CD36-, CD38+, CD22+ (49%), CD2+ (71%), resto de marcadores B y T
negativos.
- Ventana de adquisición: CD34+/SSC
- No se observaron alteraciones genéticas rastreables por biología molecular. Los estudios
citogenéticos revelaron la presencia de un clon con el siguiente cariotipo:
45,XX,t(3;3)(q22;q29),-7.
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) molecular
LA 29 LMA M2 Diagnóstico 1. 24 C+
Inducción
2. +28d 12,5 C+
3. Post-Ind 3,7 C+
Progresión 4. +4m 10,2 C+
2ª Línea
5. +5m 60
nv, no valorable; C+, presencia de alteraciones citogenéticas (ver texto).
90
Esther Domingo Rodríguez Resultados
- Fenotipo: CD45+d, CD34-, HLA-DR-/+ (46%), MPO+, CD33+, CD117+ (72%), CD13-, CD15+d,
CD14-, CD11b-, CD65-, CD64-/+ (25%), CD36-, CD2-/+ (19%), CD4+/- (54%), resto de
marcadores B y T negativos.
- Ventana de adquisición: CD45+d/SSC
- No se observaron alteraciones genéticas rastreables por biología molecular.
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 31 LMA M2 Diagnóstico 1. 27 NEG
Inducción
2. Post-Ind NEG 10-4-10-5
Consolidación
3. +15d *NEG 10-4
4. +21d 0,04
Alo-Tx (+3m)
5. +21d NEG 10-4
6. +97d NEG 10-4
7. +180d NEG 10-4
8. +385d NEG 10-4-10-5
* muestra contaminada con SP.
- Fenotipo: CD45+d, CD34+, CD33+d, HLA-DR+, MPO-/+ (40%), CD117+, CD13+, CD15-, CD14-,
CD11b-, Lisozima-/d, CD65-, CD64-, CD36-, el resto de marcadores B y T negativos.
- Ventana de adquisición: CD34+/SSC
- No se observaron alteraciones genéticas rastreables por biología molecular.
91
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 32 LMA secundaria a SMD Diagnóstico 1. 18 NEG
Inducción
2. +21d 4
Consolidación
3. Post-Cons NEG 10-4-10-5
Alo-Tx (+3m)
4. +28d NEG 10-4-10-5
5. +105d NEG 10-4-10-5
6. +180d NEG 10-4
7. +279d NEG 10-4-10-5
8. +391d NEG 10-5
9. +2,5a NEG 10 -10-5
-4
- Fenotipo: CD45+d, CD34+, HLA-DR+, CD33+d, CD13+, CD117+, CD15-/+ (22%), CD14-, CD11b-,
CD11c+d (65%), CD65+, CD64-, CD36-, CD7+, CD56-/+d (48%), CD38+het, el resto de marcadores
B y T fueron negativos.
- Ventana de adquisición: CD34+/SSC
- No se observaron alteraciones genéticas rastreables por biología molecular.
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 41 LMA M2 Diagnóstico 1. 14 NEG
Inducción
2. Post-Ind 0,04
Consolidación 1
3. Post-Cons1 NEG 10-5
Consolidación 2
4. Post-Cons2 NEG 10-4-10-5
92
Esther Domingo Rodríguez Resultados
- Fenotipo: CD45+d, CD34+d, HLA-DR+, MPO-/+ (18%), CD33-/+d (40%), CD13+, CD117+, CD14-,
CD11b-, CD11c- (19%), CD65+, CD64-, CD36-, CD38++, resto de marcadores B y T negativos.
- Ventana de adquisición: CD34+/SSC
- El análisis citogenético de la MO al diagnóstico desveló la existencia de un 4% de células con
del(11)q(23). El análisis mediante hibridación in situ con fluorescencia (FISH), confirmó la
reordenación del gen MLL en el 5% de las células. En las determinaciones siguientes no se
observaron alteraciones en el cariotipo.
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 44 LMA M2 Diagnóstico 1. 21 NEG
Inducción
2. +2m 28
3. +4m 0,5
4. +5m 15
5. +7m 16
6. +9m 6,7
7. +12m NEG 10-5
8. +15m NEG 10-4-10-5
9. +24m NEG 10-4-10-5
- Fenotipo: CD45+d, CD34-, HLA-DR- (9%), MPO+, CD33++, CD13+d (47%), CD117+/- (63%),
CD15+/- (51%), CD14-, CD11b-, CD11c+ (60%), CD123+d, Lisozima+d, CD65-, CD64-, CD36-,
CD4+d (81%), resto de marcadores T y B negativos.
- Ventana de adquisición: CD45+d/SSC
- No se observaron alteraciones genéticas rastreables por biología molecular.
93
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 48 LMA M1 Diagnóstico 1. 92 NEG
Inducción
2. Post-Ind NEG 10-4
- Fenotipo: CD45+d, CD34-, HLA-DR-, MPO+, CD33+, CD117+, CD13-, CD15-, CD14-, CD11b-,
CD11c-/+ (47%), Lisozima+, CD65-, CD64-, CD36-, CD4+d, resto de marcadores T y B negativos.
- Ventana de adquisición: CD117+/SSC
- Análisis molecular: presencia de duplicaciones internas en tándem (ITD) del gen FLT3.
Citometría Análisis
ID Diagnóstico Determinación
(%) S molecular
LA 53 LMA M1 Diagnóstico 1. 43 FLT3/ITD
Inducción
2. Post-Ind 0,014 NEG
Consolidación
3. +28d 0,009 NEG
4. Post-Cons NEG 10-4-10-5 NEG
5. +4m NEG 10-4-10-5 NEG
6. +6m NEG 10-5 NEG
94
Esther Domingo Rodríguez Resultados
En nuestra serie de pacientes con leucemia aguda, la citometría fue aplicable al seguimiento del
100% de los casos, mientras que la biología molecular sólo pudo aplicarse al 23% (Tabla 21).
Por este motivo, sólo se realizaron 20 análisis de EMR de forma paralela por citometría y
biología molecular. Como muestra la Tabla 22, en 17 de ellas se obtuvo el mismo resultado
(concordancia del 85%).
Con respecto a las 3 discordancias, dos de ellas se produjeron en el paciente LA53, que
presentaba la mutación FLT3/ITD. En ambas, la citometría detectó EMR (0,014 y 0,009%,
respectivamente), mientras que el análisis molecular fue negativo.
La tercera discordancia se produjo en el paciente LA2, en que la citometría no alcanzó la
sensibilidad suficiente por falta de muestra.
95
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Citometría Análisis
ID Determinación
(%) S molecular
LA 2 3. Post-Reind NEG 10-4-10-5 +
LA 3 3. Post-Ind NEG 10-4-10-5 NEG
4. Cons +28d NEG 10-4-10-5 NEG
5. Cons +2m NEG 10-5 NEG
6. Cons +3m NEG 10-5 NEG
7. AloTx +16d NEG 10-4-10-5 NEG
8. AloTx +89d NEG 10-5 NEG
9. AloTx +167d NEG 10-5 NEG
10. AloTx +1347d NEG 10-5-10-6 NEG
LA 7 2. Ind +14d 8,5 +
5. Post-Cons NEG 10-5-10-6 NEG
6. Reind/Cons +35d NEG 10-4-10-5 NEG
7. Mant +6s NEG 10-4-10-5 NEG
8. Mant +7m NEG 10-5 NEG
9. Post-Mant NEG 10-4-10-5 NEG
LA 53 2. Post-Ind 0,014 NEG
3. Cons +28d 0,009 NEG
4. Post-Cons NEG 10-4-10-5 NEG
5. Post-Cons +4m NEG 10-4-10-5 NEG
6. Post-Cons +6m NEG 10-5 NEG
Se señalan en rojo las discordancias entre ambas técnicas.
96
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Tabla 23: Determinaciones EMR+ en pacientes con leucemia aguda en que no se pudo realizar
análisis molecular.
CFa
ID Determinación
(%)
LA2 2. Post-Ind 0,005
LA3 2. Post-Ind 0,02
LA7 4. Post-Ind 0,0017
LA9 3. Post-Ind 0,001
10. Post-Ind 0,015
LA10 3. Ind +35d 0,04
4. Post-Ind 0,02
LA16 2. Post-Ind 0,03
5. Post-AloTx +185d 0,01
11. Post-Ind 0,06
LA17 2. Post-Ind 0,05
LA18 4. Ind +6s 0,08
5. Ind +2m 0,007
7. Post-Int 0,006
8. Reind +28d 0,02
9. Reind +6s 0,006
11. Post-Reind 0,002
LA20 3. Cons +28d 0,04
4. Post-Cons 0,01
LA31 4. Cons +21d 0,04
LA41 2. Post-Ind 0,04
Se muestran en rojo aquellas determinaciones con EMR por debajo del límite de detección estándar de la citometría.
97
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Se aplicó la técnica de citometría de alta sensibilidad a los pacientes con MM cuyo seguimiento
se realizó en la CUN, entre Enero 2006 y Mayo 2011. Sus datos demográficos, su diagnóstico y
estadío se detallaron en Material y Métodos.
Identificación MG PG IF CF
Determinación
del Paciente (%) (gr/dL) s/o (%)
98
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Identificación MG PG IF CF
Determinación
del Paciente (%) (gr/dL) s/o (%)
99
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Identificación MG PG IF CF
Determinación
del Paciente (%) (gr/dL) s/o (%)
100
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Identificación MG PG IF CF
Determinación
del Paciente (%) (gr/dL) s/o (%)
101
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Identificación MG PG IF CF
Determinación
del Paciente (%) (gr/dL) s/o (%)
102
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Identificación MG PG IF CF
Determinación
del Paciente (%) (gr/dL) s/o (%)
103
Esther Domingo Rodríguez Resultados
104
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Se observaron 5 resultados discrepantes en los que la citometría detectó EMR mientras que la IF
fue negativa (Tabla 24b). Dos de ellos corresponden a las dos primeras determinaciones post-
AutoTx (+3m y +6m) del paciente MM-3, en que se detectó 0.002% y 0.05% de EMR
respectivamente. El paciente recayó 4 meses después, en el décimo mes post-Tx (det. 5).
Las dos últimas discrepancias corresponden a los pacientes MM-11 (det. 2) y MM-20 (det. 2), en
que se detectó 0.015 y 0.005% de EMR, respectivamente. En ambos casos los pacientes
progresaron poco tiempo después (Tabla 24b).
En cuanto a las discordancias en las que la IF fue positiva y la CF de alta sensibilidad negativa,
la determinación 2 del paciente MM-7 no puede considerarse una discrepancia verdadera, ya
que la IF se negativizó 2 meses después. Presumiblemente la positividad de la IF se debía a
persistencia de las inmunoglobulinas debido a su mayor vida media, y no a EMR. Un caso similar
sería el paciente MM-25, cuya IF también se negativizó 2 meses después, permaneciendo
105
Esther Domingo Rodríguez Resultados
La determinación 3 del paciente MM-81 se realizó a los 2 meses del AutoTx. Cabe la posibilidad
de que se trate de bandas oligoclonales comúnmente observadas durante la recuperación de la
producción de inmunoglobulinas tras el trasplante, y no propiamente de persistencia de la
enfermedad (Mitus y col., 1989).
106
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Hay que destacar que de las 38 determinaciones en que se detectó EMR, 7 presentaban
enfermedad <0,01%, no detectable por CF estándar. Esto significa que con la técnica estándar el
grado de concordancia entre ambas técnicas hubiera sido del 80% y el porcentaje de falsos
negativos para la CF pasaría de un 4% a un 14% (Tabla 26).
107
Esther Domingo Rodríguez Resultados
Como se puede observar en la Figura 18, el porcentaje de CD10 en los granulocitos de MO fue
significativamente mayor en muestras de MM que en muestras de SLPC-B (55,18 ±21,97 y
46,29 ±21,29 respectivamente; p=0,01).
100
80
60
%CD10
p=0,01
40
20
0
MM SLPC-B
Podemos concluir, por tanto, que la contaminación con sangre periférica es significativamente
mayor en muestras de MO de pacientes con MM que de pacientes con SLPC-B.
Cabe plantearse que esto influya en las discrepancias que habitualmente se observan entre el
porcentaje de células plasmáticas cuantificado en el medulograma y por citometría. Como
muestra la Tabla 27, en nuestra serie se cuantificó un porcentaje de células plasmáticas totales
4,4 veces superior (media; SD±2,9) en el medulograma que por citometría (ratio MG/CF). Para
establecer si existía algún tipo de relación entre la infraestimación de células plasmáticas en MO
por citometría y el grado de contaminación de las muestras con SP, estudiamos la correlación
existente entre la ratio MG/CF y el porcentaje de CD10 en granulocitos de MO (Figura 19).
Observamos una correlación significativa entre ambos parámetros (p = 0,02), con una R de 0,42.
Es decir, a mayor contaminación de la muestra con sangre periférica, mayor discrepancia entre
la cuantificación realizada en el medulograma y por citometría.
En resumen, la contaminación con sangre periférica es un problema que afecta más a las
muestras de MM que a las de otras neoplasias hematológicas, y puede ser causa de falsos
negativos en citometría.
108
Esther Domingo Rodríguez Resultados
109
Esther Domingo Rodríguez Resultados
100
80
% CD10 en Granulocitos
60
40 R=0,42
20
0
0 2 4 6 8 10 20 30 40
Ratio M G/CF
Nos llamó la atención que en las muestras MM-62 y MM-63 la ratio MG/CF fue 18,2 y 25,6
respectivamente, es decir más de 3SD por encima de la media, no siendo muestras
especialmente contaminadas con SP (29% y 30% de CD10 en los granulocitos, respectivamente;
Tabla 27). Comprobamos que en ambos casos se produjo un retraso de más de 12 horas entre
la extracción de la muestra y su procesamiento y marcaje.
Está descrito que las células plasmáticas son frágiles y se ven especialmente afectadas por el
retraso en el procesamiento (Craig y Foon., 2008). Con el fin de evaluar exactamente cuánto
influye este tipo de factores en el porcentaje de células plasmáticas detectado por citometría, se
analizó una muestra de MO del paciente MM-92 recién extraída, al día siguiente y a los dos días.
Como se puede observar en la Figura 20, el porcentaje de células plasmáticas disminuye un
37% con un día de almacenamiento de la muestra, y un 52% con dos días. Este efecto no se
observa en otros tipos celulares, como los linfocitos B o las células CD34+, cuyo porcentaje se
mantiene estable a lo largo del tiempo (Figura 20).
110
Esther Domingo Rodríguez Resultados
b.
Día 0 Día 1 Día 2
(4,34%) (4,39%) (4,55%)
c.
Día 0 Día 1 Día 2
(1,21%) (1,21%) (1,36%)
Figura 20: Porcentaje de células plasmáticas (CD38++ CD138+) en una muestra de MO del
paciente MM-92 (a), y de células CD19+ (b) y CD34+ (c) en una muestra de MO control,
inmediatamente tras la extracción de la muestra (día 0) y 1 ó 2 días después.
111
Discusión
Esther Domingo Rodríguez Discusión
115
Esther Domingo Rodríguez Discusión
Para realizar el estudio de especificidad, analizamos un número aún más elevado de leucocitos
(10 millones) de MO o SP control y procedimos a buscar células con fenotipo de diversas
neoplasias hematológicas. Pacientes y controles se codificaron durante la adquisición, de modo
que el análisis se realizó siempre de forma ciega. Hay que destacar que en ningún caso
detectamos el más mínimo cluster con fenotipo neoplásico, para ninguna de las entidades
analizadas (Figuras 11-14). Esto es importante porque algunos autores establecen un umbral en
el número de eventos del cluster tumoral a partir del cual la muestra debe considerarse EMR+
(Krampera y col, 2006; Damm-Welk y col, 2007; Dworzak y col, 2008; Irving y col, 2009; Thörn y
col 2009). Como subraya Mario Roederer, es un criterio erróneo (Roederer, 2008). Si se observa
un cluster de eventos con características compatibles con células tumorales, por mínimo que
sea, la muestra debe considerarse positiva. Bastaría con adquirir más células para que el cluster
alcanzara un tamaño significativo, como demostraron Dworzak y col. (Dworzak y col., 2008). Por
eso es importante resaltar que en ninguno de los controles que realizamos observamos ningún
cluster tumoral, ni siquiera inferior a 10 eventos.
En este trabajo nos propusimos analizar el CV de la medición de EMR en función del número de
células tumorales detectadas, para determinar cuál es realmente el tamaño mínimo que debe
tener el cluster tumoral para que su cuantificación sea precisa. Analizamos el CV para clusters
de aproximadamente 30, 50 y 100 eventos tumorales en tres tipos de entidades diferentes, MM,
LLC-B y SLPC-T. Tanto las muestras de LLC-B como los SLPC-T se comportaron según la
116
Esther Domingo Rodríguez Discusión
No ocurrió lo mismo con las muestras de MM. El CV fue siempre ≤10%, incluso para clusters de
30 eventos. Inicialmente pensamos que esto podría deberse a las particulares características
fenotípicas de las células plasmáticas mielomatosas, en cuanto a homogeneidad y a colocación
en un espacio especialmente vacío en varios histogramas. Para testar esta hipótesis, elegimos
dos muestras de leucemia aguda en que los blastos se comportaban de modo análogo en las
dos características comentadas. En ambos casos los resultados fueron similares a los predichos
por Poisson y distintos a lo observado en el mieloma. A un cluster de 30 eventos le correspondía
un CV de aproximadamente 20%.
No es posible averiguar con certeza la razón por la que la EMR del MM no sigue la distribución
de Poisson, teniendo en cuenta que se trata de eventos igual de raros que en las otras
neoplasias hematológicas. Si repasamos las tres condiciones que deben cumplirse para que una
distribución de eventos raros se ajuste a Poisson - cada evento debe contarse una sola vez,
cada evento debe identificarse de manera inequívoca, y los eventos deben dispersarse al azar,
es decir, no deben formar agregados -, cabe plantearse que las células mielomatosas no
cumplan exactamente esta tercera condición. En esta enfermedad la infiltración se produce de
forma parcheada, acumulándose las células tumorales en nichos enriquecidos en lípidos (Nadav
y col, 2006).
Además del CV, calculamos en todos los casos el intervalo de confianza del 95% (IC 95) del
porcentaje de EMR, ya que es el estadístico que mejor define la precisión en la distribución de
Poisson (Harvey Motulsky, 2010). Como era de esperar, la amplitud del IC disminuyó al
aumentar el número de eventos del cluster tumoral. Sin embargo, a partir de 50 eventos, la
ganancia de precisión que se conseguía aumentando el tamaño del cluster tumoral no era
relevante.
117
Esther Domingo Rodríguez Discusión
Si sólo hace falta detectar 50 células tumorales para alcanzar una precisión suficiente, basta con
adquirir 5 millones de leucocitos para alcanzar una sensibilidad de 10 -5. El siguiente problema
que esto plantea es su aplicabilidad a la práctica clínica en términos de tiempo total de
adquisición. En un intento de mantenerlo dentro de un marco razonable, probamos a aumentar la
tasa de flujo por encima de lo que hasta ahora es habitual en este tipo de análisis (2000 ev/seg).
Comprobamos que esta tasa puede duplicarse sin que los resultados se afecten, de lo que se
deriva un tiempo de adquisición razonable para la rutina diaria.
Validamos la técnica comparándola con RQ-PCR en un paciente con LLA BII Phi+. Asimismo,
comparamos los resultados de la CF de alta sensibilidad con los obtenidos por PCR de BCL2-JH
en muestras de médula ósea de pacientes con linfoma folicular después de recibir tratamiento.
La concordancia entre ambas técnicas fue del 91%, mientras que la de la CF estándar con el
PCR fue del 55%.
118
Esther Domingo Rodríguez Discusión
Todos los casos presentados en este trabajo se analizaron con el máximo número de colores
disponibles en cada momento (4 en la etapa inicial y 6 en el resto). Con el objetivo de comprobar
si un aumento en el número de colores mejora la sensibilidad de la técnica, seleccionamos una
serie de casos de características diferentes y reflexionamos sobre la influencia del número de
marcadores analizados simultáneamente sobre el resultado del análisis de EMR.
En primer lugar analizamos el paciente LA16. Sus blastos (CD34+) se caracterizaban por
expresar en su totalidad CD56 con alta intensidad, lo que los colocaba en lo que se denomina un
“espacio vacío”, es decir, un espacio en el que no existen células normales en médula ósea
(Figura 21).
LA16 MO control
Figura 21: Células tumorales del paciente LA16 (rojo) (izquierda), frente a una muestra de MO
control (derecha). Se observa que los blastos tumorales se sitúan en un espacio vacío.
119
Esther Domingo Rodríguez Discusión
Comprobamos que utilizando tan sólo 3 marcadores (CD34, CD45 y CD56) se identificaban con
total precisión las células blásticas del paciente (CD34+, CD56++, CD45+/d), de modo que añadir
marcadores servía solamente para comprobar el resto del fenotipo de los blastos (HLA-DR-
CD13- CD33+), pero no añadía precisión a la medición.
Obtuvimos el mismo resultado cuando analizamos LA13: sus células blásticas eran CD19+
CD10++ CD38-/d CD34+ CD45+/d. Solamente con los marcadores CD38, CD10 y CD45 se
cuantificaba con exactitud la enfermedad residual, por la misma razón que en el caso anterior, su
ubicación en un espacio vacío en el histograma CD38 vs CD10 (Figura 22).
LA13 MO control
Figura 22: Células tumorales del paciente LA13 (rojo) (izquierda) frente a una muestra de MO
control (derecha). Se observa que las células tumorales se sitúan en un espacio vacío.
120
Esther Domingo Rodríguez Discusión
casos de LMA, como por ejemplo el paciente LA45. Sus promielocitos al diagnóstico eran CD34-
CD33++ CD117+ CD13+ HLADR- CD15+/d CD11b- CD4+/d y no expresaban ninguna aberración que
permitiera identificarlos con facilidad. Un estudio óptimo de EMR requeriría analizar
simultáneamente los marcadores CD45, CD34, CD33, CD117, CD13, HLADR, CD15 y CD11b.
Ambas LMA se diferencian de las dos LLA anteriormente citadas en que no expresan
aberraciones que coloquen las células patológicas en espacios vacíos, por lo que es
imprescindible utilizar combinaciones con un amplio número de marcadores, que permitan
identificar inequívocamente las células patológicas de su equivalente normal en médula (Figura
23).
Figura 23: Células tumorales de los pacientes LA53 (arriba) y LA45 (abajo) respecto de una
muestra de MO control (centro). En ningún histograma las células tumorales de ambos pacientes
se sitúan en un espacio vacío.
121
Esther Domingo Rodríguez Discusión
Por lo que respecta a los mielomas, en la mayoría de los casos las células patológicas
sobreexpresan CD56, lo cual, unido a su intensa y homogénea expresión de CD38 y CD138
facilita mucho el estudio de EMR (Figura 24). De hecho, en muchos casos bastaría simplemente
con estos tres marcadores para cuantificar con exactitud las células mielomatosas. Otros casos,
sin embargo, no expresan CD56, por lo que es necesario añadir CD19, además de alguna otra
molécula que expresen aberrantemente para poder identificar las células mielomatosas con
exactitud.
Figura 24: Células mielomatosas (rojo) de los pacientes MM-9 (arriba) y MM-3 (abajo) respecto
de una muestra de MO control (centro) en la que se observan las células plasmáticas normales
(verde). La sobreexpresión de CD56 por parte de las células tumorales del paciente MM-9 hace
que se sitúen en un espacio totalmente vacío facilitando su detección. En el paciente MM-3 las
células mielomatosas no expresan CD56 y no se sitúan en un espacio vacío, pero la expresión
aberrante de CD33 ayuda a su identificación.
122
Esther Domingo Rodríguez Discusión
Por último, tenemos que referirnos al caso del linfoma folicular, ya que la búsqueda de infiltración
en médula constituye un ejemplo muy gráfico de la ventaja que supone disponer de 6 colores
con respecto a 4. Cuando sólo se disponía de 4 colores, la combinación que se utilizaba para
identificar células de linfoma folicular en médula ósea era CD38/CD10/CD19/CD45. Como se
observa en la Figura 25, existe una presencia mínima de linfocitos B normales en la región en la
que se colocan las células linfomatosas (CD38-/d CD10+ CD19+ CD45++). De este modo, la
infiltración por linfoma folicular se hace evidente cuando el cluster sospechoso tiene un cierto
tamaño, como es el caso del paciente F82 (1300 eventos; 0.26% de infiltración; 500000
leucocitos analizados), pero puede pasar desapercibida cuando es mínima (80 eventos en el
paciente F54). En la época de los 4 colores, en caso de sospecha se completaba el estudio
analizando en tubos adicionales la clonalidad de los linfocitos de esta región, pero como hemos
señalado anteriormente, una infiltración mínima podía confundirse con el ruido de fondo habitual
en esta región. Actualmente utilizamos de entrada Kappa/Lambda/CD38/CD19/CD10/CD45, de
modo que somos capaces de identificar poblaciones clonales, si están presentes.
123
Esther Domingo Rodríguez Discusión
F54
CD38 CD38 CD19 Kappa
Figura 25: Identificación de las células linfomatosas en muestras de MO de los pacientes F82
(arriba) y F54 (abajo) respecto de una muestra de MO control (centro). Se observa que un cluster
tumoral de pequeño tamaño, como el detectado en el paciente F54, podría pasar desapercibido
si no se dispusiera del estudio de clonalidad, ya que en la MO control existen linfocitos B
normales (azul) que ocupan la misma región.
124
Esther Domingo Rodríguez Discusión
Para poder analizar con comodidad un número muy elevado de leucocitos en un estudio de EMR
de alta sensibilidad, es necesario realizar lo que se denomina “doble adquisición”. Tal como se
explicó en Material y Métodos, consiste en almacenar únicamente en el fichero la parte de la
muestra que expresa un marcador presente en la totalidad de las células tumorales. El objetivo
es evitar el almacenamiento de células normales para no generar ficheros de gran tamaño, de
imposible manejo en la práctica.
La condición que deben cumplir las células patológicas para que podamos realizar doble
adquisición es la expresión de un marcador, o combinación de dos marcadores, no mayoritarios
en médula. De este modo, es posible adquirir muchos millones de leucocitos, almacenando sólo
la región seleccionada por dicho marcador. Por ejemplo, en las LLA de estirpe B la selección se
realiza por CD19+. En las de estirpe T, suele realizarse por CD7. En las LMA en que los blastos
expresan CD34, éste es el marcador que se utiliza para seleccionar la región a almacenar
(ejemplo, paciente LA29). En las LMA CD34- cuyas células blásticas expresan CD117 de forma
completa, se selecciona por CD117 para buscar EMR (ejemplo, paciente LA53). El problema lo
plantean las LMA CD34- con expresión parcial de CD117 o incluso CD117 -, que tampoco
expresan de forma completa ningún otro marcador no mayoritario por el que se pueda hacer la
selección. Los pacientes LA20 y LA31 constituyen un ejemplo. Ambos corresponden a LMA
CD34- que no expresaban de forma completa CD117, por lo que la ventana de selección tuvo
que hacerse por CD45/SSC, limitando el número total de leucocitos adquiridos. En ninguno de
los dos casos se alcanzó alta sensibilidad.
125
Esther Domingo Rodríguez Discusión
Se realizaron 100 análisis de EMR por citometría de flujo. En todos ellos se utilizaron, al menos,
dos combinaciones distintas de anticuerpos monoclonales. Para cada una de ellas se adquirió el
máximo número de leucocitos posible, siendo por tanto variable en función de la cantidad de
muestra recibida. En 37% de las determinaciones, el número de leucocitos adquirido permitió
alcanzar una sensibilidad superior a 10-4 pero inferior a 10-5. Una de ellas corresponde a la única
muestra en la que se detectó EMR por biología molecular y no por citometría (det. 3, paciente
LA2, pag.82). Esta discrepancia se debe, presumiblemente, a que la sensibilidad alcanzada por
la CF no fue suficiente para detectar enfermedad.
Sin embargo, en 25% de pacientes con LMA (LA20 y LA31) no fue posible alcanzar una
sensibilidad superior a 10-4, ya que las células blásticas eran CD34- y no expresaban CD117 de
126
Esther Domingo Rodríguez Discusión
forma completa. Esto limitó el número de leucocitos totales adquiridos, no pudiendo alcanzarse
los 5 millones necesarios.
De las determinaciones en que se alcanzó alta sensibilidad (10-5 o mayor), el 33% de las
muestras con enfermedad presentó un nivel de EMR entre 0.01% y 0.001%, es decir, hubieran
sido clasificadas como negativas por la técnica estándar (Tabla 23, pag. 97). Dichas muestras
incluyeron varias determinaciones de un paciente con LA bifenotípica (LA18), así como el
análisis realizado tras la inducción en tres pacientes con LLA-B (LA2, LA7 y LA9). Como se
explicó en la Introducción, hay datos en la bibliografía relativos a LLA que sugieren que la
persistencia de este nivel de EMR tras la inducción confiere peor pronóstico cuando se compara
con pacientes cuya EMR es <0.001% (Malec y col., 2004; Neale y col., 2004; Paganin y col.,
2008; Bassan y col., 2009; Stow y col., 2010). Teniendo en cuenta que en la mayoría de los
pacientes no es posible el seguimiento por biología molecular, parece recomendable realizar el
estudio de EMR post-inducción por citometría de flujo de alta sensibilidad.
Con respecto a los pacientes con LMA, hubo dos determinaciones en que se detectó EMR por
citometría (0.014% y 0.009%) pero no por biología molecular. Correspondían al mismo paciente
(LA53), cuyos blastos presentaban duplicaciones internas en tándem del gen de FLT3. Está
descrito que esta alteración es inestable y frecuentemente sufre cambios durante el transcurso
de la enfermedad. Varios estudios han observado que en algunos casos este marcador está
presente en las muestras al diagnóstico, pero se pierde en la recaída o viceversa, por lo que su
utilidad como marcador para la detección de EMR debe considerarse con cautela (Kottaridis y
col., 2002; Cloos y col., 2006).
En resumen, la citometría de flujo estándar fue aplicable al seguimiento del 100% de los
pacientes con leucemia aguda, frente al 23% para la biología molecular, por lo que en la mayoría
de los pacientes el seguimiento fue únicamente citométrico.
La aplicabilidad de la técnica de alta sensibilidad fue del 100% en pacientes con LLA y del 75%
en LMA. Una tercera parte de las muestras en que se detectó enfermedad hubieran sido
clasificadas como negativas por la técnica estándar.
127
Esther Domingo Rodríguez Discusión
Con respecto al seguimiento de pacientes con MM, la técnica de alta sensibilidad fue aplicable al
100% de los pacientes, ya que el CD138 es un marcador minoritario en MO y en todos los casos
se pudieron adquirir 6 millones de leucocitos, sin limitación.
Se observó que en el 20% de las muestras de médula ósea extraídas cuando la inmunofijación
(IF) en suero u orina era negativa, se detectaba enfermedad por citometría de flujo estándar.
Resultados similares han sido obtenidos por otros investigadores: San Miguel y col. observaron
que el 14% de los pacientes que alcanzaban la remisión completa presentaban EMR por
citometría (San Miguel y col., 2002). Sarasquete y col. detectaron un 21% de casos EMR+ por
citometría siendo la IF negativa. Observaron además, que un umbral de sensibilidad de 10-4 era
útil para estratificar a los pacientes según el riesgo de recaída, tanto por ASO-PCR como por
citometría, pero dicha estratificación no se lograba con la IF (Sarasquete y col., 2005). Paiva y
col. muestran resultados similares (Paiva y col., 2008).
Aplicando citometría de alta sensibilidad a nuestra serie, el porcentaje de pacientes CF+ IF-
aumentaba a un 33%. Los pacientes a los que correspondían estas determinaciones (MM-3,
MM-11 y MM-20) progresaron o recayeron entre 3 y 5 meses después. Es decir, la aplicación de
citometría de alta sensibilidad permite identificar, dentro de los pacientes con IF negativa, un
subgrupo que tienen enfermedad <0.01%. En un estudio reciente realizado por Paiva y col. en
pacientes ancianos no susceptibles de tratamiento a altas dosis, en que utilizaron CF con una
sensibilidad entre 10-4 y 10-5, comprobaron que la remisión inmunofenotípica se asocia a mayor
supervivencia libre de progresión que la remisión completa o la remisión completa estricta (Paiva
y col, 2011). La red italiana GIMEMA ha observado que la remisión molecular define un grupo de
pacientes con mejor pronóstico (Ladetto y col, 2010). Puesto que menos del 75% de los
pacientes son candidatos a estudio molecular (Sarasquete y col., 2005; Paiva y col., 2008 y
2011; Yuan y Stetler-Stevenson, 2011), es evidente que debe ser la CF la que proporcione alta
sensibilidad.
Observamos 4% de falsos negativos con la técnica de alta sensibilidad. En esta misma línea,
Paiva y col muestran un 7% de pacientes con IF+ y CF-. Sin embargo, en su caso todos los
pacientes negativizaron la IF en la siguiente determinación, atribuyéndose la discordancia inicial
128
Esther Domingo Rodríguez Discusión
La explicación más probable para un falso negativo verdadero es que la muestra analizada no
sea representativa. Teniendo en cuenta el patrón parcheado de la enfermedad, cabe la
posibilidad de que se realice la punción en un área no afectada (Paiva y col., 2008). Un
fenómeno que desde nuestro punto de vista afecta con mucha mayor frecuencia a la calidad de
las muestras de médula en pacientes con MM es el grado de contaminación con sangre
periférica que presentan. Para evaluarla, elegimos como indicador el porcentaje de neutrófilos de
la población granulocítica, y comprobamos que era significativamente superior en muestras de
pacientes con MM que de SLPC-B. Esto es lógico, teniendo en cuenta la naturaleza osteolítica
de la enfermedad (Kristinsson y col., 2010; Korde y Maric, 2011) y ha sido también sugerido por
otros autores (Batiníc y col., 1990; Gupta y col. 2009).
La contaminación significativa de una muestra de médula ósea con sangre periférica conduce
inevitablemente a la infraestimación del porcentaje de EMR detectado. Esto explicaría los
resultados obtenidos en 5 muestras, en las que detectamos enfermedad sólo con la técnica de
alta sensibilidad y no con la técnica estándar, siendo la IF+ (det. 3, 4 y 5 de MM-16; det. 8 de
MM-22 y det. 2 de MM-24). Teniendo en cuenta que la CF estándar es más sensible que la IF, tal
y como hemos explicado anteriormente (San Miguel y col., 2002; Sarasquete y col., 2005; Paiva
y col., 2008), hay que suponer que la infiltración detectada (<0.01) estaba significativamente
infraestimada. Parece lógico suponer que este mayor grado de contaminación con sangre
presente en el MM contribuirá de forma decisiva al conocido grado de discrepancia que suele
existir entre el porcentaje de células plasmáticas cuantificado en el medulograma y por
citometría, aunque se sabe que existen otros factores implicados. Nadav y col. consideran que
las células mielomatosas se alojan en nichos trabeculares ricos en lípidos. La extracción inicial
del copo medular, que es la muestra que se utiliza para el medulograma, es representativa, a
diferencia del fluido medular que se aspira para el estudio de citometría. Son necesarios
sucesivos pases a través de la aguja para que las células plasmáticas se liberen de su
alojamiento sólido a la fase fluida (Nadav y col., 2006).
129
Esther Domingo Rodríguez Discusión
130
Conclusiones
Esther Domingo Rodríguez Conclusiones
4. La cuantificación de EMR con alta sensibilidad requiere que la totalidad de las células
tumorales exprese un marcador minoritario en médula, para que pueda aplicarse sin
restricciones el protocolo de doble adquisición.
6. En pacientes con leucemia aguda, una tercera parte de las muestras EMR+ presentaron un
nivel de enfermedad indetectable con la técnica estándar.
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151
Esther Domingo Rodríguez Abreviaturas
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Anexo