La Educacion Durante El Periodo Colonial

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Centro Universitario de Peten –CUDEP-

Profesorado de Enseñanza Media en Pedagogía y

Ciencias de la Educación

Curso: Historia General de la Educación

Catedrático: Lic. Edy Josué Romero Tzin

Nombres: No. Control Académico:

 Daniel Eliezer Gómez Ramírez 202047595

 Randy Javier Maltez Garma 202245974

 Marilyn Esperanza Marcos Guzmán 202240213

 Keyrin Dayana Pablo Vásquez 202244912

Sección: “B”

Ciclo:2024
Santa Elena de la Cruz, Flores Petén

Introducción

En esta exposición, veremos un poco acerca de la educación durante el periodo colonial,


donde entra la conquista de Guatemala, los levantamientos y sublevaciones de los
indígenas, los primeros tiempos de la dominación española, los benefactores de los
indígenas y las limitaciones de la cultura y la inquisición. La educación colonial, por haber
sido condicionada y ligada a una situación socio racial y económica y por no haber sido una
actividad abstracta realizada en el vacío, sino determinada por una razón histórica, fue un
instrumento al servicio de las clases dominantes. Cuando se trata de analizar a la época
colonial desde la perspectiva de la educación, se hace obligante hacer referencias, acerca de
la estructura socio racial, las creencias religiosas, y las costumbres predominantes de la
época. La educación siempre ha sido y seguirá siendo uno de los pilares fundamentales del
desarrollo de toda sociedad humana. Durante todo el período colonial la formación de los
súbditos estuvo en manos de instituciones eclesiales. La educación no sólo trataba de
formar buenos cristianos sino también buenos súbditos. Los catecismos incluían
explicaciones para que los sectores populares aceptasen las condiciones en las que se
hallaban. Con esta instrucción básica se pudo mantener, no sin conflictos una dominación
durante dos siglos. La educación, de igual manera, es una presencia sociocultural que se
recrea y se afirma en la relación en la acción intencional, en el diálogo y la transmisividad,
en el encuentro y la conducción, en la convivencia y la dirección, en la participación y la
organizativita, en la interacción y la manifestabilidad. En este sentido se presentará a
continuación de manera sintética, como se desarrolló la educación durante el periodo
colonial.
LA EDUCACION DURANTE EL PERIODO COLONIAL

EL PERIODO colonial en Guatemala abarca casi trescientos años, incluyendo los primeros
tiempos de la conquista llevada a cabo por los españoles. Iniciase con la fundación del
primer asiento fijo de que dispusieron los conquistadores en Iximché y que denominaron
Santiago de los Caballeros de Guatemala. Esta villa fue fundada el 25 de julio de 1524, por
Pedro de Alvarado, quien aprovechó la hospitalidad ofrecida por los cakchiqueles en la que
era su ciudad más importante. La fundación de esta villa no significó la consumación de la
conquista ni mucho menos; era, como decía Alvarado en una de sus Cartas de Relación,
porque hay más y mejor aparejo para la dicha conquista y pacificación". En efecto, los
españoles habían logrado sojuzgar a los quiches no obstante el arrojo con que se habían
defendido; los conquistadores habían recibido la alianza de los cakchiqueles, quienes por
estar en guerra con los quichés brindaron su amistad a los castellanos, traicionando sus más
caros intereses de independencia; pero aún se mantenían en pie los grupos mames,
pocomames, tzutuhiles, lacandones, itzaes, etcétera. Por cierto, que estos últimos fueron
dominados hasta fines del siglo XVII. Los primeros colonizadores despojaron a los
indígenas de sus tierras y sus bienes, y no contentos con eso, los redujeron a la más vil
esclavitud. Las reales cédulas donde se pedía mejor trato para los indios eran letra muerta
para los encomenderos y explotadores de aquellos desamparados seres, quienes no
representaban para ellos más que medios de enriquecimiento y explotación inicua. El
propio Alvarado ofrecía los peores ejemplos: “poseía el conquistador cuarenta mil indios
esclavos que trabajaban en las minas de su pertenencia, para saciar su codicia y cubrir sus
cuantiosos gastos”.

Las misiones evangelizadoras, si bien llevaron a cabo una labor culturiza dora dentro de los
pueblos aborígenes, no se quedaron a la zaga en lo tocante a las encomiendas y
repartimientos. Los conventos tenían asignada un área de explotación en la que
desplegaban su actividad con similares métodos. La resistencia natural que oponían los
indios a admitir la nueva religión llevada por los conquistadores. era penada con la
reducción a la esclavitud, como lo manda la Real Cédula del 19 de marzo de 1532 que
establece "que los indios que se resistan a recibir a los evangelizadores sean sometidos a
esclavitud". "En nuestro país la encomienda tuvo en un principio, un carácter esclavista, los
indios encomendados eran herrados y vendidos y además de su trabajo personal forzado
para su encomendero éste los alquilaba a otras personas recibiendo a cambio cierta cantidad
en remuneración". Dentro de estas circunstancias, es natural que la preocupación educativa
distara mucho de ser de las más importantes. La castellanización y la evangelización eran
los únicos objetivos existentes para con las masas indígenas. La primera, porque era
necesaria para efectuar una más cómoda explotación, y la segunda. porque correspondía al
espíritu altamente religioso que privaba a la razón.

Las escuelas de primeras letras, las casas de recogimiento para doncellas y los hospicios y
hospitales, nacieron en primer lugar para beneficio de los peninsulares y en segundo para
"los pobres hijos de españoles". Estos últimos eran el resultado de las uniones irregulares de
españoles con mujeres indígenas, y que se convertían a menudo en vagabundos y sin hogar.
Era en estos seres en quienes se reflejaba la crisis producida por el choque de dos culturas
en que abundaba la crueldad y falta de equidad de los colonizadores. Los indígenas recibían
algunas veces educación en los conventos, la cual se reducía al aprendizaje de la doctrina y
los dogmas religios0s. Por esta razón, los frailes aprendieron con tesón las principales
lengas que se hablaban en lo que entonces era la Capitanía General de Guatemala. La
educación media fue suministrada en los colegios conventuales y colegios mayores.
Sobresalieron en esta obra las órdenes de los dominicos franciscanos y jesuitas. Estos
colegios funcionaron desde la segunda mitad del siglo XVI.

La Universidad de San Carlos fue creada por Real Cédula del 31 de enero de 1676. Antes
de que fuese fundada, la función de impartir la educación superior estuvo a cargo de los
colegios mayores de Santo Tomás, San Borja, San Buenaventura y San Lucas. Su fundación
abrió una nueva etapa para el desarrollo cultural de Guatemala, etapa que llegó a su apogeo
en la segunda mitad del siglo XVIII. Otro hecho de gran importancia del siglo XVII fue la
introducción de la imprenta. En 1663 sale a luz la primera obra editada en la imprenta de
José de Pineda Ibarra. Pronto habrían de imprimirse los primeros libros de texto para uso de
las escuelas. Otra realización de trascendencia, llevada a cabo en este periodo, fue la
fundación de la Sociedad Económica de Amigos del País, que impulsó el desarrollo
económico de Guatemala y creó los centros de estudio necesarios para contribuir a tal
desarrollo. Fue la educación un privilegio para la oligarquía feudal formada por los
peninsulares, sus descendientes los criollos y algunos mestizos. En general la educación
para el pueblo no nace todavía. Las escuelas de primeras letras dirigidas y sostenidas por
los Betlemitas, así como algunas otras anexas a los conventos no eran suficientes para
atender las necesidades escolares. Las masas indígenas estuvieron por lo general al margen
de toda acción educativa, como no fuera la emprendida por las órdenes religiosas. La cual
se reducía a la enseñanza de la doctrina, la castellanización y algunas industrias caseras.

LA CONQUISTA DE GUATEMALA

El 6 de diciembre de 1523 salió de México una expedición, cuyo objeto era la conquista de
Guatemala. Iba al frente de ella Pedro de Alvarado, que era uno de los más valerosos
capitanes de Cortés. La expedición estaba como puesta, según el cronista Bernal Díaz del
Castillo, de 300 soldados; 120 eso pateros y ballesteros, 135 de a caballo, l artillero, 200
indios tlaxcaltecas y cholutecas y 100 mexicanos.5 Figuraban entre los más destacados
capitanes que acompañaban a Alvarado, Pedro Portocarrero y Hernando de Chávez, y como
capellán el padre Juan Godínez. La expedición se dirigió al sur, pasando previamente a
Tehuantepec a cumplir el encargo de Cortés de pacificar aquella región. Luego se encaminó
hacia los antiguos reinos que ocupaban lo que hoy es Centro América. Todo hace suponer
que los cakchiqueles habían mandado a testimoniar su subordinación a Alvarado, pues
deseaban su apoyo por encontrarse a la sazón en guerra con los quichés. Lo cierto es que la
mayor resistencia que encontraron los españoles fue por parte de estos últimos.

El primer encuentro se llevó a cabo en Tonalá, en donde los reyes quichés Oxib-Qeh y
Beleheb-Tzi habían situado sus fuerzas en estrecha alianza con el cacique de Soconusco.
Aquí sufrieron los indígenas su primera derrota, explicada, por la desigualdad de armas,
pues mientras los castellanos peleaban con armas de fuego, aquéllos lo hacían con lanzas y
flechas. Los quichés habían logrado unir a todos los pueblos comarcanos para la defensa de
su libertad, a excepción de los cakchiqueles que como ya hemos dicho, se habían aliado a
los conquistadores.
El comando general de la resistencia indígena estuvo a cargo de Tecún Umán, elegido de la
Casa de Cagüek, quien dio la batalla hasta donde sus fuerzas lo permitieron. Muchas fueron
las bajas en el bando indígena en las sangrientas batallas de Tilapa, Samalá y Olintepec.
Finalmente muere el jefe indígena en una batalla que se libró en el lugar denominado
Pachah (Urbina).

EI espíritu sanguinario de Alvarado se desbordó con lujo de poder mandado quemar los
reyes quiches en abril de 1524. En una de sus castas de relación que dirige a cortes, se
expresa en los términos siguientes: `` y para bien y sosiego de esta tierra, yo los queme, y
mande a quemar la ciudad y poner los cimientos, porque es tan peligrosa y tan fuerte que
más parece casa de ladrones que no de pobladores; y para buscarlos envié a la ciudad de
Guatemala, que está a diez leguas de esta decirles y requerirles de parte de su majestad que
me enviasen gente de guerra, así para saber de ellos la voluntad que tenían como para
atemorizar la tierra`` Y más adelante agrega: “ Y cuando toca todo a esto de la guerra, no
hay más que decir al presente, sino que todos los que en la guerra se tomaron se herraron y
se hicieron esclavos, de los cuales se dio el quinto de su majestad al tesorero de Baltazar de
Mendoza”

Muertos los reyes de quiches y quemada la ciudad de Utatlán, Alvarado dirige sus pasos a
la capital de los cachiqueles y funda allí la ciudad de Santiago de los caballeros,
acontecimientos a que ya nos hemos referido en el espíritu anterior. Inmediatamente
procedió a la designación de Diego de Roxas y Baltazar, como alcaldes; de pedro
Portocarrero, Hernán carrillo, Juan Pérez Dardon y Domingo Zubirreta, regidores y
Gonzalo de Alvarado, alguacil mayor.

En diciembre de 1527, el emperador Carlos V confiere a don Pedro de Alvarado el titulo d


Adelanto de Guatemala y Gobernador de sus provincias.

La conquista no era un hecho concluido; se inicia un periodo de incursiones, ya para


sojuzgar nuevos pueblos, ya que para pacificar otros insurreccionados.

Progresivamente fueron sojuzgados los Tzutuhiles, pipiles, mames, pocomames, choles e


itzales. Los primeros grupos lo fueron por Alvarado con la ayuda de sus aliados los
cakchiqueles, como no todas dificultades.
La conquista de los pocomames y choles se confió a los misioneros de la orden de Santo
Domingo, por iniciativa de fray Bartolomé de las casas razón por la cual se declaraba que
los indios de Tezulutlan o Tecolotlan so serian dados en encomienda y se prohibía a los
españoles en aquellas tierras, para permitir que los misioneros desarrollaran sus palnes. Tal
concesión fue otorgada por don Alonso de Maldonado en mayo de 1537.

La conquista de los tizates fue intentada primero por los religiosos de la orden de San
Francisco de San José de Yucatán, sin que hayan podido, consumar Por parte de Guatemala
llegó fray José Delgado, de la orden de los dominicos, en el año de 1674. Posteriormente el
rey se dirige a los gobernadores de Guatemala y Yucatán por Real Cédula de l693 en
tándolos a que combinasen sus fuerzas a efecto de lograr reducir a los pueblos de Petén y
lacandón. El Jacinto Barrios Leal, que era el gobernador de Guatemala. Organizo una
expedición militar que bajo su mando penetro simultáneamente por tres puntos:
Huehuetenango, Verapaz y Ocosingo; pero no pudo alcanzar su objetivo. El propio Barrios
leal contrajo una enfermedad, a consecuencia de la cual murió a fines de 1695, once meses
después de haberse iniciado la expedición.

Fue hasta marzo de 1697, cuando logró conquistar El Petén el general Martín Ursúa y
Arismendi, cuya expedición fue organizada en Campeche. Tan pronto como fue
comunicado este hecho al presidente de la Audiencia de Guatemala, don Gabriel Sánchez
de Berrospe, envió como gobernador de esta Provincia, que por disposición del rey debía
formar parte de la Capitanía General de Guatemala, al capitán Melchor de Mencos, el cual
tomó posesión en 1699.

En una carta dirigida en l698 por el vicario de Itzá, informa a Ursúa y Arismendi que se ha
bautizado al rey de los itzaes Canek. Este hecho revela que en la sojuzgación de esta zona
intervinieron simultáneamente fuerzas militares y misiones evangelizadoras, y que no fue
poca la resistencia presentada por aquellos descendientes de los antiguos mayas.

LOS LEVANTAMIENTOS Y SUBLEVACIONES DE INDIOS

Comúnmente se suele entender que la conquista de Guatemala se reduce a la serie de


batallas llevadas a cabo por Pedro de Alvarado en su penetración a los reinos Quiché y
Cakchiquel; sin embargo, la conquista debe entenderse como la época durante la cual las
fuerzas españolas fueron dominando paulatinamente los otros reinos que integraban lo que
más tarde habría de llamarse Capitanía General de Guatemala.

Las insurrecciones y levantamientos de indígenas que registra la historia de Guatemala son


abundantes. Algunas veces contra las autoridades civiles y otras contra la dominación
ejercida por los religiosos. La causa fundamental de esos levantamientos fue el mal trato
que daban los enco menuderos a los indígenas. Entre las primeras de estas sublevaciones
figura la de los cakchiqueles, quienes asediados por las exigencias de que entregaran
grandes cantidades de oro a los españoles, se levantaron con sus reyes a la cabeza. Por esta
razón Jorge de Alvarado, hermano del Adelantado, trasladó la capital al valle de Almolonga
el 22 de noviembre de 1527.

Digna de mención es la rebelión de Petapa en 13520, dirigida contra el cacique por haberse
sujetado a los españoles. Cuatro años más tarde fue la violenta rebelión de Chiquimula que
se extendió a Zacapa y Esquipulas.

En l633 fue la sublevación de los indios Manché, los de Yoly Xocomo cerca de Cobán, que
estaban en el sector que conquistaban los religiosos la Orden de Santo Domingo: robaron al
convento de San Miguel Manché y se llevaron 3 campanas, cruz de plata, custodia, 5
cálices, jarras y vinajeras de plata. Hicieron pedazos los ornamentos, quemaron la iglesia.
convento y en él los libros, bienes y alhajas de los religiosos, que sólo Un cáliz escapó y un
recado para decir misa que estaba en otro pueblo". Con anterioridad habían dado muerte a
fray Domingo Vico los antepasados de estas gentes. En Los indios por lo general mantenían
con respecto a los religiosos actitud de aparente aceptación, aunque en el fondo
continuaban con sus antiguas creencias y practicaban los ritos propios de sus religiones
antiguas.

El padre Ximénez, que llegó a Guatemala en el año de l688, da cuenta a menudo de las
burlas que hacían los indios de los religiosos, ocultando ante ellos sus verdaderas creencias.
Desde el tiempo de la Conquista,

que entonces (como allí dicen) los redujeron de su modo de escribir al nuestro; pero fue con
todo sigilo que conservó entre ellos con tanto secreto, que ni memoria se hacía entre los
ministros antiguos de tal cosa, e indagando yo a este punto, estando en el cuarto de Santo
Tomás Chichicastenango.

hallé que era la doctrina que primero mamaban con la leche y que todos ellos casi lo tienen
de memoria y descubrí que de aquellos libros tenían muchos entre sí “Ximénez, que fue el
descubridor del Popol Vuh, como ya se dijo en otra parte de este trabajo, conoció varios de
esos libros que contenían la concepción cosmogónica y teogónica de los pueblos quichés.

Refiere asimismo Ximénez, que los indios en el tiempo que él estuvo en Chichicastenango
llevaban a cabo prácticas religiosas del tiempo he Su gentilidad; "cuando cortaban la
madera para hacer sus casas, hacía unos sacrificios al dios de casa por ellos suplicándole
que la casa para donde se cortaba aquella madera fuese dichosa y que en ella viviesen
muchos

días y con felicidad'". Tenían asimismo sus oratorios particulares donde acudían en sus
mayores trabajos que les sucedían, por la mayor parte los tenían en arboledas muy espesas
que la escritura sagrada llama Lucos, que también sacrificaban debajo de árboles muy
espesos y copados, debajo. Francisco Ximénez: Historia de la Provincia de San Vicente de
Chiapa. Otros levantamientos e insurrecciones que registra la historia tuvieron los de los
indios tzendales en Chiapas y la de los talamancas en la provincia de Costa Rica. La
sublevación de los tzendales se produjo por las mismas razones que se habían operado
todas las insurrecciones: la crueldad de las autoridades y la ambición desmedida de los
encomenderos, incluyendo a los religiosos. En el año de 1708 se inició el malestar en
Ciudad Real y pueblos cercanos, motivado por la codicia sin medida del obispo Juan
Bautista Álvarez de la Vega: la sublevación se generalizó en 1712 debido no sólo a las
tiranías que con los indios obraron el alcalde Mayor y otros españoles, sino que como se ha
dicho el mayor motivo fue el señor Obispo con su des medida codicia, porque con el ansia
de juntar dinero para sus pretensiones, no quedó medio por ilícito que fuese, de que no se
valiese.

Uno de ellos fue el de los maíces con que tanto se ha tiranizado siempre aquella Provincia y
pretextando para con el alcalde Mayor que no tenía renta de que pasar respecto de no estar
consagrado, les sacó la porción de maíz que tocaba a los pueblos de Tuxtla. San Bartolomé
y Yamaha, las coronas y otros a su Majestad al que importaría sobre cuatro mil fanegas y
pagándolo precio del remate, que es a cuatro reales, hizo que los indios se los pagasen a
doce reales fanega". Todas estas crueldades fueron la causa del levantamiento que cobró
grandes proporciones y la venganza estaba dirigida particularmente contra el obispo:
estuvieron los indios ya para matarlo y lo hubieran ejecutado a no haberlo llegado a
entender el Reverendo P. Fray Pedro Villena y alguna de su familia que entendía la lengua.

En la provincia de Costa Rica, los acontecimientos no fueron menos graves: Siendo


gobernador de esa provincia Lorenzo de Granada, se produjo el levantamiento de los
talamancas. Entre otras razones estaba él estado económico precario por que atravesaba la
población indígena. Al frente de la insurrección estaba-el cacique Pablo Prebere a quien se
logró dominar después de cruentos choques la insurrección se produjo en 1709.

Por lo apuntado se puede inferir que la situación de los indígenas desde la conquista se
tornó desesperante y que a menudo se producían sublevaciones y levantamientos, de los
cuales apenas hemos citado algunos de los muchos que registra nuestra historia.

 ¿Cuál fue el propósito de las rebeliones indígenas?

Es decir, los indígenas buscaban un cambio social, en el que los españoles serían
expulsados de sus territorios y en el que la sociedad indígena volvería a ser cómo antes.

 ¿Qué conclusión saca de los levantamientos indígenas?

Logra unir a una población marcada por la desigualdad y la desintegración étnica, social,
cultural, económica y política, contra un enemigo común, que se identifica con el gobierno
opresor de los españoles.

 ¿Como los españoles trataban a los indígenas?

Los españoles eran muy violentos y los obligaron a los indios a trabajar en las minas sin
descansar. Los indios en el campo cosechaban frutos para poder comer y mandar comida a
los que estaban en las minas. Algunos morían, por ejemplo, los chicos. Las madres los
cubrían para que los españoles no los golpearan.

 ¿Cuáles fueron las razones principales para el inicio de los movimientos


indígenas?
Las rebeliones indígenas del período colonial se producen por diversas motivaciones que se
pueden englobar en la imposición de un sistema económico y social que había quebrado las
antiguas estructuras nativas. La resistencia germina cuando el aborigen decide rechazar
dichas imposiciones por la fuerza de las armas.

LOS PRIMEROS TIEMPOS DE LA DOMINACIÓN ESPAÑOLA

Pedro de Alvarado fue el primer gobernante que tuvo Guatemala. Por su crueldad con los
indios fue carias veces acusado ante Hernán Cortés y ante el rey de España. De los 17 años
que tuvo a su cargo el gobierno de Guatemala, los primeros cuatro fueron por comisión de
Hernán Cortés y los otros 13 como Gobernador y Capitán General. Murió el 4 de julio de
1541, a consecuencia de los golpes que recibió cuando prestaba auxilio al gobernador de
Nueva Galicia, en el peñol de Nochistlán.

Tan pronto como se supo esta noticia en la ciudad de Santiago de los Caballeros, doña
Beatriz de la Cueva, esposa del Adelantado, asumió poder después del interinato de su
hermano Francisco de la Cueva. Gobernó solamente del 9 al 11 de septiembre en que murió
a consecuencia de la terrible inundación que sufrió la ciudad por las grandes avenidas que
descendían de las faldas del volcán de agua, principalmente la noche del 10 de septiembre.

Del 17 de septiembre de 1541, al 17 de mayo de 1542, el gobierno de Guatemala estuvo a


cargo del obispo Francisco Marroquín y el licenciado don Francisco de la Cueva. A partir
de esta fecha entro en funciones el nuevo gobernante Alonso de Maldonado.

Entretanto, la ciudad capital había sido trasladada al valle de Panchoy y por considerarse un
sitio más seguro frente a las amenazas que presentaba la proximidad del Volcán de Agua.

Las características de los primeros tiempos de la dominación española fue la crueldad y el


fanatismo religioso por parte de los conquistadores. Durante ese periodo surgían las más
grandes contradicciones: mientras las grandes mayorías de la población, compuesta por los
indios, dueños auténticos de las tierras y riquezas de la región, eran sujetos a la esclavitud y
despojados de sus bienes, una minoría invasora se adueñaba injustificadamente de aquellas
riquezas instaurando un régimen de arbitrariedad.
Los indígenas no habían alcanzado ciertamente el estadio de la civilización, pero su vida
económica y cultural se encontraba en pleno desarrollo; sin embargo, la conquista española
corto en redondo todo desenvolvimiento independiente. Poseían la tierra en común y vivían
generalmente en hogares comunales que reunían a los parientes, su base económica como
ya lo dijimos con anterioridad fue interrumpida con la llegada de los conquistadores
españoles. Los hombres de la conquista que no tenían protección ni por parte de los indios
ni por parte de los españoles. La primera escuela que crea el padre Francisco Marroquín es
dedicada a los hijos de españoles, que como el propio padre lo reconocía “va eran muchos”.

La dominación española en Guatemala comenzó con la llegada de los conquistadores a


principios del siglo XVI y continuó hasta principios del siglo XIX, cuando Guatemala se
independizó de España en 1821. Aquí hay un resumen de los principales aspectos de este
período:

1. Conquista: La conquista de Guatemala fue liderada por Pedro de Alvarado, uno de


los lugartenientes de Hernán Cortés. En 1524, Alvarado lideró una expedición que
sometió a los reinos indígenas de los altos y bajos de Guatemala, aprovechando las
divisiones entre los pueblos indígenas locales.
2. Colonización y Administración: Después de la conquista, Guatemala se convirtió
en parte del Virreinato de Nueva España, con sede en la Ciudad de México. La
región fue gobernada desde la capital guatemalteca de Santiago de los Caballeros de
Guatemala (hoy Antigua Guatemala) y más tarde desde la Ciudad de Guatemala,
fundada en 1776. Se establecieron instituciones coloniales, como la Iglesia Católica
y el sistema de encomiendas, para administrar y controlar la población indígena y
sus recursos.
3. Economía y Sociedad Colonial: La economía de Guatemala durante la dominación
española se basaba en la agricultura, especialmente en la producción de añil, cacao,
azúcar y café. Se establecieron grandes haciendas y plantaciones, que dependían en
gran medida del trabajo de los indígenas y de los esclavos africanos. La sociedad
colonial estaba estratificada, con los españoles en la cima, seguidos por los
mestizos, indígenas y africanos.
4. Impacto Cultural: La dominación española tuvo un profundo impacto en la cultura
de Guatemala. Se impuso el idioma español y la religión católica, aunque muchas
prácticas indígenas y tradiciones se mantuvieron y se mezclaron con las influencias
españolas. La arquitectura colonial, las artes y la literatura también dejaron una
huella significativa en el país.
5. Rebeliones y Resistencia: A lo largo del período colonial, hubo numerosos
levantamientos y resistencias por parte de los pueblos indígenas contra el dominio
español y las injusticias del sistema colonial. Uno de los más conocidos fue la
Rebelión de los Lencas en 1537, liderada por Lempira. Sin embargo, la mayoría de
estas rebeliones fueron aplastadas por las fuerzas coloniales.

La dominación española en Guatemala estuvo marcada por la conquista, colonización,


explotación económica y resistencia indígena, y dejó un legado duradero en la cultura, la
sociedad y la economía del país.

L0S BENEFACTORES DE LOS INDIGENAS

Dentro de aquel cuadro de crueldad para con los indígenas, que caracterizó al período
colonial en Guatemala, surgieron aisladamente algunos benefactores de los naturales
guiados por un espíritu justiciero o piadoso entre los que sobresalieron: fray Bartolomé de
las Casas, fray Juan Torres fray Matías de Paz y el hermano Pedro de San José de
Betancourt.

Bartolomé de las Casas: El primer lugar dentro de estos beneméritos hombres lo ocupa el
infatigable fray Bartolomé de las Casas. Nació este ilustre varón en la ciudad de Sevilla en
el año de 1474. y murió a la avanzada edad de 92 años, en Madrid en l566. Hasta los
últimos momentos de su vida tuvo en su mente a los desamparados indígenas, de los cuales
fue en los últimos 19 años de su existencia, procurador y abogado general

La obra de fray Bartolomé de las Casas la podemos dividir en dos partes:

 la que emprendió personalmente en defensa de los indios, como la llevada a cabo en


la conquista pacífica de Tezulutlán,
 Y la que se produjo de manera indirecta, por la presión ejercida por las cartas y
libros publicados por aquel fraile.

Sin restar méritos a la participación personal del padre Las Casas en la conquista pacífica
de los indios de Tezulutlán hasta convertirlos en núcleos civilizados y pacíficos,
reconocemos que el aspecto más admirable de su obra consiste en la denuncia que llevó a
cabo sobre el mal trato que daba a los indios, y las reiteradas peticiones al rey para que
promulgara leyes de protección en favor de aquellos seres.

Fray Juan Torres: Este fraile llegó a Guatemala procedente de Soconusco en compañía de
fray Pedro de Angulo. Ambos religiosos de la Orden de Santo Domingo fueron destinados a
fundar un convento en Quezaltenango en el año de 1544. En este lugar realizó el padre
Torres una labor de protección a los indios, enseñándoles a trabajar la tierra y oponiéndose
a las disposiciones que lesionaban los intereses de ese pueblo. Llegaron a Quezaltenango
"en persecución de la doctrina que desean los frailes dominicos en defensa de estas gentes
contra la tiranía de los españoles, que no fue menos en Guatemala que en otras partes”.

Fray Martin de Paz: La obra benefactora de este fraile consistió en el cuidado de los
indios enfermos y abandonados, pues era muy común en aquellos tiemp0s que los
encomenderos, después de haber explotado a los indios, a consecuencia de lo cual se
enfermaban o inutilizaban, los echaban de sus dominios a merced de las inclemencias, las
hambres y el frio. "La Caridad inefable con que el padre Fray Matías de Paz cuidaba de los
pobres indios, que aún hasta esta piedad faltaba a aquellos cristianos, que después que los
habían muerto con sus excesivos trabajos y tiranías, en viendo que estaban inútiles para el
servicio o por enfermedad o vejez, los arrojaban de sí como perros. Todos estos recogían el
bendito padre y curaba y regalaba según su pobreza alcanzaba, cargábalos en sus hombros
cuando los hallaba imposibilitados totalmente de tenerse en sus pies"

El hermano Pedro de San José de Betancourt: Este caritativo padre fue un protector de
los indios y mestizos pobres. Su vida la dedicó por completo al alivio de los menesterosos y
enfermos. AI igual que fray Matías de Paz cargaba sobre sus hombros a los enfermos que
no tenían cabida en los hospitales y les prodigaba todo género de alivio dentro de sus
limitadas posibilidades económicas. Fue fundador de la Orden de los Betlemitas, cuyo fin
primordial era el cuidado de los enfermos. El padre Pedro de San José de Betancourt era
originario de Tenerife y vino en su juventud a la ciudad de Santiago de los Caballeros de
Guatemala en donde le estaba reservada la misión de aliviar el dolor de los menesterosos.
Murió en abril de 1667.

Otros benefactores dignos de mención fueron los cronistas Remesal y Ximénez, de la orden
de Santo Domingo. La labor de estos cronistas fue indirecta, pues consistió en la denuncia
que hicieron desde las páginas de sus importantes publicaciones, del mal trato que se daba a
los naturales. El propio Remesal se vio perseguido por la Inquisición, por haber
considerado esta institución que su obra contenía datos relativos al régimen de encomiendas
y a la esclavitud de los indios, y cuya publicación consideraba peligrosa a sus intereses.

LAS LIMITACIONES DE LA CULTURA Y LA INQUISICION

La inquisición funcionaba en Europa desde principios del siglo XIII, y su objeto era la
vigilancia del clero y los seglares en el cumplimiento de los preceptos religioso. Por medio
de esta institución se persiguió a religiosos y seglares que profesaban ideología reformista
en lo tocante a la religión.

Pablo III fue el primero de los pontífices vinculados a la Contra reforma, después de la
crisis que había sufrido la Iglesia Católica con motivo de la reforma planteada inicialmente
por Martin Lutero y Calvino. El sucesor de Pablo III fue Pablo IV, quien se concreto a
continuar la obra de su antecesor. Entre las resoluciones mas trascendentales sobresale la
reorganización de la Inquisición.

La Inquisición se instauro en Lima en el año de 1570, y en México en 1571. Un año


después el Santo Oficio de este último, extiende su jurisdicción a la Capitana General de
Guatemala.

El primer comisario que llego a Guatemala fue el tristemente recordado Diego de Carbajal,
el cual presento su nombramiento ante el Cabildo el 18 de febrero de 1572.

Las autoridades españolas cuidaban con extremado celo las lecturas de los guatemaltecos,
tanto que por Real Cedula del 14 de agosto de 1560 se establece que “todo libro impreso
sin licencia respectiva y que se refiera a las Indias Occidentales deber ser confiscado”.
El auge cultural de la segunda mitad del siglo XVIII y primeros años del siglo XIX, ala
cabeza del cual se encontraba la Universidad de San Carlos se tuvo que abrir paso dentro de
penosas circunstancias va que ese movimiento abarcaba la gesta de la independencia, tan
duramente combatida por el clero y los encomenderos.

CONCLUSION

La educación durante el período colonial en Guatemala estuvo marcada por un


sistema opresivo y desigual que reflejaba la dinámica de dominación y explotación
impuesta por los colonizadores españoles. Durante casi trescientos años, desde la
fundación de Santiago de los Caballeros de Guatemala en 1524 hasta finales del siglo
XVIII, la educación estuvo principalmente orientada hacia la castellanización y la
evangelización de las poblaciones indígenas. Los colonizadores despojaron a los
indígenas de sus tierras y los sometieron a la esclavitud, utilizando la mano de obra
indígena para su propio beneficio económico. Aunque se emitieron reales cédulas que
abogaban por un trato más humano hacia los indígenas, en la práctica estas
disposiciones fueron ignoradas por los encomenderos y explotadores. Las misiones
evangelizadoras, a pesar de llevar a cabo una labor cultural dentro de las
comunidades indígenas, también participaron en la explotación y repartimiento de
tierras. La resistencia indígena a la conversión al cristianismo era castigada con la
esclavitud, perpetuando un ciclo de opresión. Las instituciones educativas, como las
escuelas de primeras letras y los colegios conventuales, principalmente servían a los
intereses de los peninsulares y criollos, mientras que las masas indígenas quedaban
marginadas de la educación formal. La Universidad de San Carlos, fundada en 1676,
marcó un hito en la educación superior, pero su acceso seguía siendo privilegio de una
élite selecta. En resumen, la educación durante el período colonial en Guatemala
estuvo caracterizada por la opresión, la desigualdad y la exclusión de las comunidades
indígenas, reflejando las relaciones de poder impuestas por el sistema colonial español.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

González Orellana, CA (1997) Historia General de la Educación de Guatemala,


Guatemala, Editorial Universitaria Universidad San Carlos de Guatemala.

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