2.1 Percepción 1ra Parte
2.1 Percepción 1ra Parte
2.1 Percepción 1ra Parte
Desde el comienzo de nuestra historia como especie, los seres humanos hemos tenido la
inquietud de conocer, de ahí la etimología de los llamados procesos cognitivos:
“cognoscere”, raíz latina que significa “conocer” o “saber”, y esto es justo porque los
llamados procesos cognitivos en su conjunto nos permiten “conocer”, ¿conocer qué? el
mundo que nos rodea, el funcionamiento interno de nuestro organismo y el de otros seres
vivos, el reino microscópico e incluso hasta otros planetas; sin embargo nuestro
conocimiento del mundo tanto externo como interno no es otra cosa que una serie de
interpretaciones subjetivas que hacemos de los distintos estímulos que vamos
interceptando, y aun cuando tanto los objetos como los seres vivos existen
independientemente de que nosotros los detectemos o no, podemos dar cuenta de ellos
sólo hasta que nos percatamos de su existencia y de sus características a través de nuestros
sentidos, que captan información físico-química sobre ellos que posteriormente nuestro
cerebro organizará e interpretará, con la finalidad de asignarle un determinado significado
mediado por factores socioculturales provenientes del ambiente de referencia del sujeto.
Para poder entender el proceso de la Percepción y cómo se lleva a cabo, antes es necesario
hablar de los sentidos y de su papel en el proceso perceptual.
Los sentidos
Los órganos de los sentidos son los encargados de captar la información del medio
ambiente, tanto interior como exterior del organismo, de transformarla en mensajes
electroquímicos y de enviarla al cerebro para que éste le asigne un significado determinado.
Como consecuencia del funcionamiento de los sentidos se generan las sensaciones, las
cuáles son impresiones producidas por los sentidos que registran las cualidades físico-
químicas de los diferentes estímulos tanto externos como internos, los cuáles pueden ser:
intensidad de luz, sabores, temperaturas, texturas, olores, colores, posiciones en el espacio,
dolor, presión, rapidez y dirección de los movimientos, etc.
Hasta hace algún tiempo la comunidad científica consideraba que los seres humanos
teníamos sólo cinco sentidos diferentes, pero en la actualidad el consenso científico
reconoce siete, y todos los sentidos sin excepción funcionan a través de células receptoras
que se encuentran en los órganos sensoriales asociados con ellos.
Existen diversas clasificaciones para los sentidos, pero funcionalmente hablando podemos
decir que se encuentran repartidos en dos grandes grupos principales: los Exteroceptores y
los Interoceptores.
Los sentidos exteroceptores son aquellos que permiten recibir información proveniente del
mundo exterior.
Los sentidos interoceptores por su parte son aquellos que permiten recibir información
proveniente del interior del propio organismo. Estos sentidos tienen receptores de dos tipos
diferentes:
-Los interoceptivos (se encuentran principalmente en los vasos sanguíneos y en las vísceras)
que transmiten sensaciones como el hambre, la sed o el dolor proveniente de los órganos
del cuerpo; y
A continuación aparece un cuadro que muestra los sentidos que integran cada grupo:
Vista Cinestésico
Gusto Vestibular
Tacto
Oído
Olfato
Enseguida iremos revisando lo más relevante que debes saber acerca de los 7 sentidos
humanos:
Sentido de la vista
Es el sentido del que más dependemos los seres humanos. Permite captar las ondas
luminosas que los objetos reflejan. Existen muchas longitudes de onda lumínica que van
desde las de muy baja frecuencia a las de muy alta, pero los seres humanos sólo somos
capaces de captar un rango muy pequeño de longitudes de onda lumínica que conocemos
como “de la luz visible” que van de los 400 a los 700 nanómetros.
Los estímulos lumínicos se detectan a través de dos tipos de células fotoreceptoras que se
encuentran en la retina: los conos, que están relacionados con la agudeza visual y la visión
del color; y los bastones, que están relacionados con la intensidad de luz y la visión
periférica.
A través de este sentido podemos detectar diversos atributos de la luz y de los objetos como
son:
-Intensidad de la luz
-Colores (Matices, saturación, brillantez)
-Formas
-Tamaños
-Proximidad
-Distancia
-Profundidad
Es uno de los sentidos que más llegamos a desarrollar los seres humanos en comparación
con otras especies debido a la cultura. Permite captar la huella química que deja el paso de
los alimentos en la boca conocida como sabor.
A lo largo de la lengua se localiza una gran cantidad de células receptoras llamadas papilas
gustativas que captan las diferentes cualidades del sabor, dichas cualidades pueden ser:
-Dulce
-Salado
-Amargo
-Agrio
-Umami (Sabor delicioso que fue identificado en 1908 por el científico japonés Kikunae
Ikeda)
Permite captar tres diferentes tipos de información sensorial: Presión ejercida, temperatura
y dolor.
La presión “ligera” se capta a través de células receptoras conocidas como corpúsculos de
Meissner que se localizan en la capa superficial de la piel conocida como epidermis, y gracias
a ellos es que podemos interpretar que ciertos contactos físicos superficiales constituyen
una caricia o un beso. Por su parte, la presión “profunda” se capta a través de las células
receptoras conocidas como corpúsculos de Pacini que básicamente se encuentran en la
capa profunda de la piel conocida como dermis, y a través de ellas es que podemos
interpretar que ciertos contactos físicos intensos constituyen un apretón de manos o un
golpe.
Con respecto a la temperatura, el calor se capta a través de las células receptoras conocidas
como corpúsculos de Ruffini y el frío gracias a las células receptoras llamadas corpúsculos o
bulbos de Krause.
Por su parte el dolor, que es una señal de alarma interna que nos permite saber que en el
ambiente o dentro del propio organismo existe alguna fuente de peligro que hay que
eliminar, se puede experimentar gracias a receptores conocidos como terminaciones
nerviosas libres que se encuentran distribuidos a lo largo de toda la piel, tanto en la parte
profunda (dermis) como en la parte superficial (epidermis).
A través de las células receptoras conocidas como células ciliadas internas y externas del
oído, se captan las vibraciones de las ondas sonoras que viajan a través del aire que
conocemos como sonidos.
Los sonidos varían entre sí por su longitud o por su frecuencia de onda, los seres humanos
sólo somos capaces de detectar los sonidos comprendidos entre los 20 y los 20 mil hercios.
Gracias a este sentido podemos detectar diversos atributos del sonido como son:
-Tono
-Timbre
-Frecuencia audible
-Intensidad
-Duración
Además de resultar muy útiles para la supervivencia, los olores también son importantes a
nivel afectivo porque nos permiten evocar con mucha intensidad emociones y recuerdos
muy significativos de nuestro pasado que estuvieron acompañados de un olor determinado.
Aunque aún no existe una clasificación universalmente aceptada de los olores debido a que
por su número sería prácticamente imposible abarcarlos todos en ella, se han hecho
algunos intentos por clasificar al menos los olores básicos como la propuesta por Henning
en 1916 conocida como Prisma de olores, que incluye 6 olores básicos y ejemplos de
sustancias que los despiden, la cual se muestra a continuación:
Sentido cinestésico
Los estímulos que permite captar son la velocidad y dirección de los movimientos del cuerpo
en el espacio, así como la postura que éste adopta a cada momento.
Sentido vestibular
Umbrales sensoriales
Como ya vimos, para producir una sensación los órganos de los sentidos transforman una
determinada forma de estimulación en otra distinta, pero no todas las estimulaciones que
llegan a nuestros sentidos llegan a ser detectados y por lo tanto no todas las estimulaciones
producen sensaciones; para que las sensaciones se produzcan es necesario que el sujeto
tome conciencia de los estímulos, y para que eso ocurra éstos deben sobrepasar el umbral
sensorial correspondiente.
Un umbral sensorial es una especie de límite o frontera que tiene que ser rebasado para
que un estímulo pueda ser detectado y produzca una sensación, y se define como “la
cantidad de estimulación necesaria para ser detectada por un individuo el 50% de las veces
que el estímulo se le presenta”. Los umbrales sensoriales varían de persona a persona y
también en función del nivel y de la naturaleza de la estimulación sensorial en curso. Existen
dos tipos de umbrales sensoriales, los cuáles se describen a continuación:
La flama de una vela vista a 48 kilómetros en una noche oscura y sin nubes.
Luz
Adaptabilidad sensorial
Percepción
Una vez generada la información sensorial, ésta se debe organizar de determinada manera
con la finalidad de que se le pueda dar una interpretación adecuada que derive en un
significado congruente con la experiencia que le dio origen y acorde con las pautas
socioculturales relevantes para el individuo; esto se lleva a cabo a través del proceso
psicológico conocido como percepción, que está encargado de organizar la información
sensorial que llega al cerebro en forma de mensajes electroquímicos y de transformarla en
significados concretos.
Existen diversos factores que influyen en la percepción que pueden estar relacionados ya
sea con el estímulo mismo o con el individuo que percibe, dichos factores se clasifican en
internos (los que se relacionan con las características del individuo) y en externos (los que
tienen que ver con el estímulo), los cuáles se describen a continuación:
Internos Externos
Atención. A mayor atención prestada a un estímulo mayor es la Tamaño. Los objetos grandes atraen más la atención que los
capacidad de generar una percepción a partir de él. objetos pequeños.
Motivos e Intereses. Mientras más interés y motivación genere Repetición. Mientras más veces se presente un mismo estímulo
un estímulo mayor será la atención que se le preste. la percepción resultante será más definida y poderosa.
Características del individuo. Las actitudes, personalidad, edad Novedad. Los estímulos novedosos se perciben más fácilmente
y situación afectiva del individuo influyen en su percepción. que los estímulos habituales.
Cultura. La cultura a la que pertenece el individuo ejerce una Intensidad. A mayor intensidad del estímulo mayor es su
gran influencia en su percepción, ya que cada cultura determina capacidad de captar la atención.
ciertas pautas de percepción que son enseñadas y se espera
que éstas sean seguidas por todos los miembros de dicha
cultura.
Efecto Halo
Se trata de un sesgo cognitivo a través del cual en una secuencia de interpretaciones, una
percepción favorable acerca de un atributo determinado influirá en la percepción de los
atributos posteriores, lo que produce que si nos gustó algo de una cosa, persona o situación,
tenderemos a considerar el resto de sus atributos como favorables; y lo mismo ocurre en el
sentido inverso.
El nombre de este sesgo cognitivo fue acuñado por el psicólogo Edward L. Thorndike, quien
fue el primero en identificarlo y corroborarlo a través de investigaciones empíricas.
Teoría Asociacionista