Capítulo # 2. Inyectores.
Capítulo # 2. Inyectores.
Capítulo # 2. Inyectores.
Los tipos de inyectores son varios, adaptándose cada uno de ellos al proceso de
combustión y a las características especiales de cada motor. Pero se distinguen dos
tipos principales:
Se observa también cómo se realiza la limpieza de los orificios en el caso de inyectores de orificios que, como
se dijo no hace mucho, no suelen ser los más corrientes en los motores Diesel de automóvil. Los orificios están,
por supuesto, calibrados, y deben ser desatascados con una herramienta porta-alambres en cuya punta hay
que colocar un alambre perfectamente calibrado, del diámetro correspondiente al orificio que se trata de
desatascar.
6. Control de inyectores
Después de esta limpieza, pasaremos primero a observar la punta de la espiga para ver si muestra
deformaciones, rayaduras o zonas azuladas que delaten recalentamientos que pudieran haber deformado la
punta. Cualquier irregularidad en este sentido será causa suficiente para tener que desechar el inyector.
En cuanto al asiento fijo que se halla en el cuerpo del inyector sobre el que se debe acoplar la espiga, hay
que observarlo también atentamente para ver si está abollado o coquizado. También se tendrá que observar
si el orificio de salida se halla ovalado como señal del deterioro de éste.
Si el inyector pasa todos estos controles visuales previos con satisfacción convendrá todavía hacer un nuevo
control del deslizamiento de la espiga por el interior de su guía en el cuerpo del inyector, el cual se efectuará
del siguiente modo: Se sumerge la aguja del inyector y el cuerpo del mismo por separado en una bandeja
con gasóleo muy limpio y se coloca la aguja o espiga en su canal en el cuerpo del inyector.
Luego se saca del líquido este conjunto así unido y sosteniendo el cuerpo del inyector en posición vertical
habiendo levantado la aguja como un tercio de su longitud, se observará si la aguja cae por su propio peso
hasta el fondo de su asiento. Esta operación deberá repetirse varias veces dándole a la aguja diversos giros
para ver si se comporta del mismo modo en todas las posiciones que se le impriman. Si la aguja no consigue
regresar por su propio peso hasta su asiento, en cualquiera de las posiciones, será señal de un mal
acoplamiento y en su consecuencia habrá que cambiar el conjunto.
6. Control de inyectores
Probador de inyectores o toberas
Prueba # 1. Presión de inyección
Esta prueba consiste en controlar a qué valor de presión el inyector inicia la
inyección, valor que viene proporcionado por los datos técnicos del constructor.
Prueba # 2. Patrón de atomización
Otra de las pruebas a que debe someterse el inyector es al control del chorro,
operación que se efectúa de la siguiente forma: Se acciona la palanca de la bomba de
una manera breve pero enérgica aproximadamente unas dos veces por segundo y,
por supuesto, desconectado el manómetro ya que la medición de los valores de
presión no es ahora de interés para esta prueba
Prueba # 3. Caída de presión
Se aumenta la presión casi hasta la de inyección y se deja de accionar la
palanca. Se observa el tiempo requerido para que caiga la presión. Por ejemplo,
una caída de 150 a 100 atmósferas puede requerir 6 segundos. Si la caída ocurre
en menos tiempo, indica holgura excesiva entre la aguja y la tobera o una posible
fuga entre la tobera y el portatobera.
Prueba # 4. Hermeticidad
E esta última prueba consiste en ver hasta qué punto el inyector cierra de modo que no
presenta fugas a valores de presión ligeramente por debajo de su presión de
funcionamiento. Se baja lentamente la palanca de accionamiento de la bomba
observando el valor que progresivamente va indicando el manómetro. Cuando este
valor es de entre 20 a 15 atm. menor que el valor de presión de funcionamiento, se
interrumpe la carrera de la palanca y se cierra la válvula de desconexión del
manómetro de modo que la presión se mantenga en el .circuito hidráulico interior del
inyector