Misión 1. Tecnología e Identidades de Aprendizaje

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Tecnología e identidades de aprendizaje en la educación del Siglo XXI

Presentado por:

Maricel Carranza Romero


Yency Mosquera Palacios
Katherine Restrepo Pérez

Presentado a:
Prof. Martha Isabel Flórez

Asignatura:
Currículo y Prácticas pedagógicas

Especialización en Didáctica y TIC


Universidad de Cartagena
2024
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Introducción
Las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) han pasado a ser pilares

fundamentales en diversos ámbitos del conocimiento y la práctica. Estas se asocian con la forma

en que las nuevas generaciones comprenden y participan en el mundo que les rodea, así como en

la configuración y el orden social.

Es fundamental comprender que las tecnologías no son herramientas que en sí mismas

determinan las formas de pensamiento y accionar humano, sino que reflejan y perpetúan

dinámicas sociales, culturales y políticas. Explorar la intrincada relación entre tecnología y

sociedad implica analizar no sólo los aspectos técnicos, sino también las implicaciones sociales y

éticas que se generan en la mutua incidencia que ejercen:

Tanto los dispositivos como los sistemas tecnológicos se moldean socialmente y

moldean la sociedad. Como productos de procesos intencionales de diseño, son

socialmente construidos e históricamente contingentes y, además, son el resultado de

conflictos y acuerdos entre diseñadores, desarrolladores, programadores, patrocinadores y

todo tipo de actores. (Loveless & Williamson, 2017, p. 19).

Como respuesta a su notable influencia socioeconómica, política y cultural, en el ámbito

educativo el cambio tecnológico ha significado un replanteamiento en las dinámicas de

enseñanza y aprendizaje, lo que ha dado lugar a modelos emergentes de enseñanza, currículos y

enfoques pedagógicos innovadores.

En el siguiente trabajo se plantea una breve reflexión a partir del libro de Avril Loveless, y

Ben Williamson: Nuevas identidades de aprendizaje en la era digital (2017). Este ejercicio se

orienta a responder dos preguntas: 1. ¿Cómo se está pensando y re-pensando el futuro de la

educación con relación a las nuevas tecnologías de acuerdo con el contexto educativo en que se
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desenvuelve? 2. ¿Qué tipo de identidades de aprendizaje se presuponen y se promueven por

efecto de la fusión entre las nuevas tecnologías y la educación?

Finalmente, para dar fundamento a lo expuesto por los autores, se presentan los resultados

de una encuesta aplicada a estudiantes de secundaria y media académica, en la que se busca

reconocer las identidades sobre sus creencias, valores, compromisos, patrones de consumo

digital, entre otros elementos, que puedan ser significativos para la consolidación del currículo y

la aplicación de estrategias pedagógicas con mayor pertinencia en el aula.

Link Google Form: https://forms.gle/qVGoqP5umqPXnuX57


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El futuro de la educación se encuentra intrínsecamente ligado a la integración de las

nuevas tecnologías en el contexto educativo. Estas tecnologías no sólo están siendo utilizadas

como herramientas auxiliares, sino que están transformando fundamentalmente la manera en que

concebimos el aprendizaje y la enseñanza.

La creciente articulación e integración de las nuevas tecnologías en diversas formas de

conocimiento, prácticas educativas y estructuras pedagógicas está dando lugar a modelos

emergentes de aprendizaje que desafían los paradigmas tradicionales y están empezando a

moldear las formas de percibir y actuar:

Las genealogías de los dispositivos tecnológicos avanzan en paralelo a las

genealogías de la identidad humana. A través de las tecnologías se han "moldeado"

diversas identidades en distintos momentos de la historia, y la gente ha llegado a

identificarse y a encajar con dichas identidades. (Loveless & Williamson, 2017, p. 26).

Las identidades de los jóvenes están intrínsecamente ligadas a su proceso de aprendizaje,

y es importante reconocer que estas no son estáticas, sino que están sujetas a un continuo proceso

de adaptación. En este sentido, las oportunidades pedagógicas activas y continuas, tanto dentro de

las instituciones formales de educación como en las pedagogías informales facilitadas por las

nuevas tecnologías, juegan un papel crucial en la construcción y reconfiguración de las

identidades de aprendizaje.

A través de la normalización de comportamientos y procedimientos, las tecnologías

influyen en la manera en que los aprendices se perciben a sí mismos y se relacionan con la

realidad. Por lo tanto, es fundamental estudiar los usos de las nuevas tecnologías en la educación,

no solo como herramientas pedagógicas, sino también como pedagogías materiales y virtuales

que encarnan dimensiones políticas y sociales.


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En un mundo cada vez más influenciado por la sociedad de la información, surge la figura

del aprendiz activo, autónomo y empoderado, capaz de resolver problemas, tomar decisiones y

colaborar en comunidades virtuales de aprendizaje. Esta identidad, denominada aprendiz digital,

se construye en respuesta a las demandas de un entorno digital en constante cambio:

La “cultura rápida, tecnoadicta y a corto plazo de la globalización (...) presiona a

las personas para ‘mejorar', 'transformarse' y 'reinventarse' a sí mismas (...), para ‘adoptar

un nuevo look' en tanto que eficientes, rápidos, austeros y autoactualizadores respecto a lo

que eran previamente" (Elliott y Lemert 2009: 60). (P. 87).

Basil Bernstein (2000) introduce el concepto de identidades prospectivas, estas

representan una ruptura con las identidades retrospectivas promovidas por el currículo

tradicional, y se centran en la adaptación a un mundo en evolución, al futuro. En este sentido, las

identidades pedagógicas prospectivas poseen un potencial híbrido, transferible y flexible, capaz

de ajustarse a las contingencias tecnológicas y organizativas del mercado actual.

Según Loveless & Williamson (2017) la promoción de la identidad de aprendiz digital se

realiza a través de diversas intervenciones, como la incorporación de videojuegos y software de

entretenimiento en la educación (p.82). Sin embargo, su éxito depende de la capacidad de los

jóvenes para identificarse y comprometerse con esta identidad en evolución (p. 95).

Como parte del análisis, en el siguiente trabajo se presenta una síntesis de las

observaciones obtenidas en la encuesta presentada a 25 estudiantes de secundaria y media

académica (VER ANEXO 1). Las 10 preguntas incluidas en el formulario están orientadas a

indagar en torno a las formas de percibir, acceder e interactuar con las tecnologías y a

comprender cómo estos acercamientos pueden impactar el diseño curricular para estimular el

aprendizaje en el aula.
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Síntesis de resultados “Encuesta sobre percepción y uso de la tecnología”

Los resultados del ejercicio evidencian la preferencia que tienen los jóvenes para

involucrar la tecnología en sus actividades diarias; en un 80% de los casos como una herramienta

complementaria que facilita la vida y en un 20% como un recurso indispensable. Asimismo, los

resultados arrojan que la red social más utilizada es Facebook, seguida de Youtube. Cabe resaltar

que un 20% de los encuestados consideran que sus redes hacen parte de lo que los define como

personas.

En el ámbito educativo, destacan páginas como Google académico, Youtube, Wikipedia y

el uso de inteligencias artificiales para la búsqueda de tareas escolares. Además, se contrasta la

utilidad de lo consultado entre un 48% que considera que “La mayoría de las veces” la

información es relevante y un 36% que sólo lo considera “A veces”.

Frente a los recursos más adecuados para presentar los contenidos en el aula, resalta el

uso de diapositivas con un 56% y en un 20% el uso de guías impresas, lo que permite deducir que

para este último grupo de estudiantes es importante estar en contacto con los materiales y

recursos de aula. Predomina también la concepción de que las tecnologías y el internet juegan un

papel facilitador en el aula, sin embargo, un 28% de los encuestados considera que son elementos

distractores.

El 80% de los encuestados consideran que las tecnologías no reemplazan o restan utilidad

a ciertos contenidos y actividades que se trabajan en clases, sin embargo, más de un 90%

considera de manera total o parcial que es poco ético utilizar inteligencias artificiales para la

realización de tareas.

La última pregunta de la encuesta indaga sobre las formas en las que la escuela debe

integrar el uso de tecnologías en el aula, donde un 44% considera que la escuela debe combinar
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métodos tradicionales con herramientas digitales para maximizar la comprensión de los temas y

el 40% considera que la escuela debe incorporar tecnologías como tabletas y aplicaciones

educativas para personalizar el aprendizaje.

Conclusiones

El futuro de la educación se encuentra íntimamente ligado a la integración de las nuevas

tecnologías y a la construcción de identidades de aprendizaje que se adapten a los desafíos y

oportunidades del mundo digital. Es fundamental comprender cómo las tecnologías están

moldeando las identidades de los jóvenes y cómo estas identidades influyen a su vez en su

proceso de aprendizaje. Solo así podremos aprovechar plenamente el potencial transformador de

las nuevas tecnologías en el ámbito educativo y promover una educación que prepare a los

estudiantes para el mundo en constante cambio del siglo XXI.

La encuesta aplicada permite evidenciar cómo, a pesar de las disparidades, las nuevas

generaciones conciben la tecnología como un recurso cotidiano y en ciertos casos indispensable

para la vida. Sin embargo, encontramos que dentro del grupo de personas encuestadas persiste la

necesidad de mantenerse en interacción con recursos físicos y entornos presenciales tecnificados.

En definitiva, cabe resaltar las consideraciones de Loveless & Williamson (2017), quienes

indican que la multiplicidad de identidades en los medios digitales puede interpretarse tanto de

manera positiva como negativa, permitiendo una expresión creativa y fluida, pero también

generando reflexiones fragmentadas y confusas de la persona (p. 89). En este contexto, la

identidad se concibe como un proceso dinámico de autopresentación y rendimiento, susceptible

de ser remezclado y renovado constantemente. Así, la educación no solo se trata de adquirir

conocimientos, sino también de desarrollar habilidades para adaptarse a un mundo digital en

constante cambio y construir identidades significativas y auténticas en este entorno.


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Referencia

Loveless, A. & Williamson, B. (2017). Nuevas identidades de aprendizaje en la era digital.


Narcea: Madrid.
https://books.google.com.co/books?id=VlslDwAAQBAJ&pg=PA13&hl=es&source=gbs_
toc_r&cad=2#v=onepage&q&f=false
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ANEXO 1. RESULTADOS DE LA ENCUESTA

Pregunta 1

Pregunta 2

Pregunta 3
10

Pregunta 4

Pregunta 5

Pregunta 6
11

Pregunta 7

Pregunta 8

Pregunta 9
12

Pregunta 10

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