Monografia Infecciones Por Medicamentos Definitiva
Monografia Infecciones Por Medicamentos Definitiva
Monografia Infecciones Por Medicamentos Definitiva
www.sefap.org
ISBN: 978-84-09-27117-7
Diciembre 2020
Revisado por:
Mª Isabel Tofiño González. Farmacéutica de Atención Primaria. Gerencia de Atención Integrada de
Talavera de la Reina. (Servicio de Salud Castilla y La Mancha)
Yolanda Borrego Izquierdo. Farmacéutica de Atención Primaria. Gerencia Atención Primaria Cantabria
(Servicio Cántabro de Salud)
Natalia Alzueta Isturiz. Farmacéutica Servicio Gestión de la Prestación Farmacéutica, Subdirección de
Farmacia (Servicio Navarro de Salud)
Silvia Casado Casuso. Farmacéutica de Atención Primaria. Gerencia Atención Primaria Cantabria
(Servicio Cántabro de Salud)
Índice _______________________________________________________________________________ 3
Prólogo _____________________________________________________________________________ 4
Introducción _________________________________________________________________________ 6
Metodología ________________________________________________________________________ 11
Resultados __________________________________________________________________________________13
TABLA 2. Reacciones adversas según su presentación sindrómica y/o su localización tipográfica ___________ 15
TABLA 3. Reacciones adversas según frecuencia de aparición de infecciones _________________________ 31
TABLA 4. Reacciones adversas según su vía de administración _____________________________________ 42
TABLA 5. Medicamentos que afectan a la serie blanca ____________________________________________ 57
TABLA 6. Mecanismos de acción y recomendaciones específicas para cada fármaco ____________________ 58
Bibliografía _________________________________________________________________________________ 78
En el año 2018, el Comité Científico del 23 Congreso SEFAP celebrado en Valencia, invitó al GTIAP
a participar en las actividades científicas. Fruto de esta participación surgió una píldora formativa
cuya temática versaba sobre la capacidad de aumentar el riesgo de infecciones (como efecto no
deseado) de algunos medicamentos. Se trata de un aspecto de seguridad sobre el que existe un
bajo grado de concienciación. A pesar de ello, un número no despreciable de medicamentos de
uso habitual en la comunidad, tienen descrito en su Ficha Técnica esta asociación, con diferentes
frecuencias de aparición y por diferentes mecanismos de acción.
Esperamos que este trabajo sirva como documento técnico de consulta durante el proceso de
revisión farmacoterapéutica, y como referencia cara a aumentar la concienciación sobre el
aumento de la prevalencia de infecciones causada por medicamentos, esto es: la prevención
cuaternaria.
Evitar la prescripción de los medicamentos que presentan estas características en los casos donde
no sean estrictamente necesarios, o cuando existen alternativas más seguras, es una medida más
a considerar para prevenir las infecciones, y reducir el consumo de antimicrobianos.
Paradójicamente, uno de los ejemplos más claros de desarrollo de infecciones relacionadas con la
toma de medicamentos, son las infecciones secundarias producidas tras el tratamiento con
antibióticos, especialmente los de amplio espectro, debido a la eliminación de la flora comensal y
al sobrecrecimiento de otros microorganismos oportunistas como Clostridioides difficile 3. Los
inmunosupresores también son conocidos por el riesgo de infecciones 4, 5, 6, 7. A modo de ejemplo,
los corticoides aumentan este riesgo entre un 50% y un 60% en poblaciones específicas como los
receptores de trasplantes o pacientes con enfermedades autoinmunes 8. Por otro lado, se ha
descrito un aumento en la incidencia de neumonías secundarias a tratamientos crónicos con
corticoides por vía inhalatoria en pacientes con EPOC 9. De ahí la importancia de un correcto
diagnóstico de asma, EPOC o enfermedad mixta asma/EPOC con el fin de utilizar los corticoides
por vía inhalatoria en aquellos pacientes para los cuales el beneficio supere ampliamente el riesgo
de neumonía.
- los inhibidores del co-transportador sodio-glucosa tipo 2 (iSGLT2), están relacionados con un
aumento de infecciones urinarias y genitales. Este efecto puede ocurrir en el primer mes de
tratamiento y prevalecer durante toda la terapia 10. 11, 12. Los iSGLT2 multiplican por tres la
probabilidad de infección de orina10 . Así mismo, pueden producir otras infecciones de carácter
más grave, de baja frecuencia, pero potencialmente mortales, como la fascitis necrosante del
perineo 13.
- los inhibidores de la bomba de protones, cuyo uso crónico se asocia con un mayor riesgo de
colitis pseudomembranosa o infección por C. difficile 14, 15 y aumentan un 89% el riesgo de
neumonías en ancianos con demencia 16.
- los antipsicóticos 17, 18 y las benzodiacepinas 19, 20 asociados a un aumento del riesgo de neumonía
en personas mayores.
- las estatinas se relacionan con un mayor riesgo de infecciones de la piel y partes blandas 28.
Algunas infecciones, a pesar de su baja frecuencia, son de elevada gravedad e incluso pueden tener
un desenlace fatal, como la fascitis necrosante del perineo en pacientes tratados con iSGLT213 o el
desarrollo de fallo multiorgánico con resultado de muerte, tras inmunización con la vacuna contra
la fiebre amarilla 30.
Otros fármacos de uso más en el ámbito de la atención especializada, también se relacionan con
un mayor riesgo de infecciones. Este es el caso del idelalisib, antineoplásico empleado para la
leucemia linfática crónica y linfoma folicular con el que se ha visto un incremento de mortalidad
por infecciones graves (Pneumocystis jirovecii, citomegalovirus CMV), natalizumab, y
dimetilfumarato (ambos empleados para la esclerosis múltiple) con los que se han descrito casos
de leucoencefalopatía multifocal progresiva (LMP), fingolimod , con casos de LMP, infecciones
virales, fúngicas y bacterianas o rituximab y el riesgo incrementado de reactivación del virus de la
hepatitis B 31.
Algunas de estas asociaciones han sido objeto de Notas de Seguridad de la Agencia Española de
Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). Desde 2004 hasta Diciembre de 2020, la AEMPS
ha publicado 30 notas en las que se relaciona el uso de determinados medicamentos con el
aumento del riesgo de desarrollo de infecciones. De ellas, 13 corresponden a medicamentos o
grupos de medicamentos de prescripción en receta del Sistema Nacional de Salud (Tabla 1).
Por lo tanto, queda patente la importancia de notificar las infecciones o las sospechas de
infecciones asociadas al consumo de medicamentos por parte de los profesionales sanitarios o los
pacientes, ya que ello contribuye a generar señales, que llevarán a realizar estudios de seguridad
Finalmente, el elevado uso -sobre todo a largo plazo- de medicamentos que aumentan el riesgo
de infecciones, puede estar contribuyendo al aumento en la prevalencia de infecciones y por tanto,
a un mayor uso de antibióticos. En un momento de gran preocupación, debido a la disminución de
la eficacia de los antibióticos disponibles y al escaso desarrollo de nuevos tratamientos para las
enfermedades infecciosas, el hecho de que medicamentos de uso habitual en la población puedan
contribuir al desarrollo de infecciones supone un problema relevante en términos de Salud
Pública. La población especialmente sensible y expuesta a los fármacos con este perfil de
seguridad, como es el caso de los pacientes frágiles, polimedicados, con multimorbilidad o aquellos
con situaciones de base que los hacen más susceptibles a las infecciones y sus consecuencias
(EPOC, bronquiectasias, sondajes, inmunodeficiencias primarias, enfermedades autoinmunes, etc)
es cada vez más numerosa 47. Por otro lado, el consumo de algunos fármacos que aumentan el
riesgo de infecciones, como los iSGLT2, los corticoides y los opioides, presenta una preocupante
tendencia ascendente en nuestro país 48. Si existen tratamientos alternativos exentos de estas
propiedades, estas circunstancias tienen que ser tenidas en cuenta principalmente en aquellos
pacientes con elevada frecuencia de infecciones 49.
El objetivo de esta monografía es servir de ayuda para los diferentes profesionales sanitarios, de
cara a poder identificar durante el proceso de revisión farmacoterapéutica o ante la aparición de
una infección, la causa de dichas infecciones recurrentes, frecuentes y/o graves que aparecen en
determinados pacientes. Su finalidad también se dirige hacia el fomento de la prevención
cuaternaria y la seguridad del paciente, pudiéndose emplear como documento de referencia para
mejorar la toma de decisiones respecto la continuidad o la conveniencia, de ciertos tratamientos,
especialmente en aquellos pacientes susceptibles de sufrir infecciones graves o frecuentes.
Para la selección de los medicamentos a revisar, se empleó la relación de principios activos que
según BOT PLUS pueden producir diferentes tipos de infección como reacción adversa. Para ello
se realizó una búsqueda en BOT PLUS el 25 de abril de 2019, a partir de: ENFERMEDADES –
PATOLOGIAS - EN HUMANOS – P. ACTIVOS CUYA RAM INCLUYE LA PATOLOGÍA, de un total de 22
palabras clave que se correspondían con los tipos de infecciones más frecuentes, seleccionadas a
partir del manual de enfermedades infecciosas de la SEMFyC 2017 (Suplemento 1).
Para identificar las fichas técnicas a revisar de cada principio activo, se utilizó una relación de
medicamentos con su código nacional, según su volumen de dispensación en envases (17.192
especialidades farmacéuticas distintas, facturadas durante un año (01_05_2018 al 30_04_2019)
en una Comunidad Autónoma de España.
Se escogieron las fichas técnicas disponibles en CIMA de la AEMPS de los tres medicamentos más
dispensados (siempre que las hubiera), que contuviesen cada uno de los principios activos
seleccionados, formulados en diferentes formas farmacéuticas, para así poder recoger el posible
riesgo de infecciones inherente a la vía de administración. En caso de no localizar la Ficha técnica,
se contactó con el laboratorio para conseguirla o se utiliza el prospecto.
En el caso de que se especificase con el principio activo clasificado en BOT PLUS la vía de
administración (p.ej. salbutamol por vía inhalatoria), se escogieron las 3 especialidades
farmacéuticas de esa vía de administración concreta.
Para cumplimentar los datos, se elaboró un cuaderno de recogida de datos en formato Excel. Se
recogió como información: principio activo, vía de administración, posible mecanismo de acción
causante de la infección como Reacción Adversa a Medicamentos (RAM), clasificación de la RAM,
descripción de la RAM, frecuencia de la RAM, recomendaciones de ficha técnica y un apartado de
comentarios.
Los resultados se complementaron con los principios activos que, según notas previas de
seguridad de la AEMPS, se asociaban con riesgo de infecciones como RAM.
Al cruzarlos con los medicamentos dispensados a lo largo de un año, se redujeron los principios
activos a 239 (233, algunos de ellos catalogados en varios SGT), que se correspondían con 4.296
presentaciones de distintos medicamentos. Se excluyeron 36 principios activos dado que el
número de dispensaciones fue anecdótico en un año, quedando 203 principios activos, con sus
correspondientes medicamentos para revisar. Se adicionaron 16 principios activos que según
notas de seguridad de la AEMPS se podían asociar a riesgo de infecciones como RAM.
INFECCION PARASITARIA
Muy frecuentes
(≥ 1/10)
Frecuentes
(≥ 1/100 a < 1/10)
Poco frecuentes - RISPERIDONA (oral/parenteral): acarodermatitis
(≥ 1/1.000 a < 1/100)
Raras - PALIPERIDONA (parenteral): acarodermatitis.
(≥ 1/10.000 a < 1/1.000)
Muy raras
(< 1/10.000)
Frecuencia no conocida - CICLOFOSFAMIDA (oral): aumento del riesgo y la severidad de infecciones
(no se puede estimar en parasitarias; reactivación de infecciones latentes, incluyendo infecciones
función de los datos estrongyloides.
disponibles) - DEXAMETASONA (oral/parenteral): enmascaramiento de infecciones,
manifestación, exacerbación o reactivación de infecciones (bacterianas,
víricas, fúngicas, parasitarias e infecciones oportunistas), activación de
estrongiloidiasis. Infecciones oculares.
- PREDNISONA (oral): enmascaramiento de las infecciones, manifestación,
exacerbación o reactivación de las infecciones estrongiloides.
OJOS
Muy frecuentes no se ha encontrado ningún medicamento con esta frecuencia
(≥ 1/10)
Frecuentes - KETOROLACO (oftálmica): infección ocular, queratitis superficial y
(≥ 1/100 a < 1/10) queratitis ulcerosa.
VAGINAL
CLINDAMICINA Candidiasis vulvovaginal Muy frecuentes (≥1/10)
CLINDAMICINA Diarrea Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
CLINDAMICINA Infección del tracto respiratorio superior, Infección del tracto urinario, Infección Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
fúngica, infección por Candida, vulvovaginitis, trastorno vulvovaginal
CLINDAMICINA Infección bacteriana, pielonefritis, disuria, vulvovaginitis, trastorno vulvovaginal Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
ESTRIOL Candidiasis Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
CLINDAMICINA Candidiasis cutánea Frecuencia no conocida (no se puede estimar
en función de los datos disponibles)
CLINDAMICINA Colitis pseudomembranosa Frecuencia no conocida (no se puede estimar
en función de los datos disponibles)
INHALATORIA
BECLOMETASONA Candidiasis en la boca y garganta. En algunos pacientes se produce candidiasis de la Muy frecuentes (≥1/10)
boca y garganta (aftas), cuya incidencia es mayor con dosis superiores a 400
microgramos de dipropionato de beclometasona al día. Presentan un mayor riesgo
aquellos pacientes con altos niveles sanguíneos de Candida precipitins, como signo
de infección previa.
FLUTICASONA Candidiasis en la boca y garganta Muy frecuentes (≥1/10)
INDACATEROL Rinofaringitis, infección de vías respiratorias altas Muy frecuentes (≥1/10)
ACLIDINIO Sinusitis, nasofaringitis Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
BUDESONIDA Candidiasis orofaríngea, neumonía en pacientes con EPOC Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
FLUTICASONA Bronquitis (en pacientes con EPOC), Infecciones e infestaciones Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
GLICOPIRRONIO, Infección del tracto urinario (observado en pacientes de edad avanzada >75 años Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
BROMURO únicamente), rinofaringitis
INDACATEROL Sinusitis Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
MOMETASONA Candidiasis Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
NASAL
BECLOMETASONA Candidiasis nasofaríngea (placas blanquecinas de apariencia algodonosa en nariz y Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
garganta).
MOMETASONA Faringitis, Infección del tracto respiratorio superior Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
FENTANILO Neumonía, nasofaringitis, faringitis, rinitis Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
OFTÁLMICA
APRACLONIDINA Rinitis Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
KETOROLACO Infección ocular, queratitis superficial y queratitis ulcerosa Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
OLOPATADINA Rinitis Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
LATANOPROST Queratitis herpética Raras (≥1/10.000 a < 1/1.000)
MOXIFLOXACINO Conjuntivitis, blefaritis Raras (≥1/10.000 a < 1/1.000)
TRAVOPROST Herpes simple, queratitis herpética Raras (≥1/10.000 a < 1/1.000)
SOLIFENACINA Infección del tracto urinario, cistitis Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
SULPIRIDA Leucopenia Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
TELMISARTAN Infección del tracto urinario incluyendo cistitis, infección del tracto respiratorio Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
superior incluyendo faringitis y sinusitis
TIBOLONA Infección por hongos, micosis vaginal Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
TRANDOLAPRIL Infección del tracto respiratorio superior Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
TRIFUSAL Infección de las vías urinarias, infección respiratoria alta Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
ZONISAMIDA Neumonía, Infección en las vías urinarias Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
ASENAPINA Leucopenia Raras (≥1/10.000 a < 1/1.000)
ATORVASTATINA Trombocitopenia Raras (≥1/10.000 a < 1/1.000)
CEFDITORENO Blefaritis Raras (≥1/10.000 a < 1/1.000)
CEFDITORENO Estomatitis, úlceras bucales, colitis hemorrágica, colitis ulcerosa Raras (≥1/10.000 a < 1/1.000)
CEFDITORENO Herpes simple Raras (≥1/10.000 a < 1/1.000)
CEFDITORENO Infección del tracto urinario, diarrea asociada a Clostridium difficile Raras (≥1/10.000 a < 1/1.000)
CEFIXIMA Sobreinfecciones por hongos o bacterias resistentes tras la administración Raras (≥1/10.000 a < 1/1.000)
continuada (prurito vaginal, vaginitis y candidiasis)
TRANDOLAPRIL Agranulocitosis, pancitopenia, disminución del recuento de plaquetas, disminución Frecuencia no conocida (no se puede estimar
de hemoglobina, disminución de hematocrito, anemia hemolítica, eosinofilia y/o en función de los datos disponibles)
aumento de ANA (anticuerpos antinucleares)
TRANDOLAPRIL Sinusitis, rinitis, glositis Frecuencia no conocida (no se puede estimar
en función de los datos disponibles)
PARENTERAL
DENOSUMAB Infección del tracto urinario, infección del tracto respiratorio superior Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
RECTAL
BUDESONIDA Aumento del riesgo de infección Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
TOPICA
INGENOL MEBUTATO Pústulas en el lugar de aplicación: Cara y cuero cabelludo, tronco y extremidades Muy frecuentes (≥1/10)
ALPROSTADILO Balanitis; En las parejas femeninas: Sensación de escozor vulvovaginal, vaginitis Frecuentes (≥1/100 a < 1/10)
AMINOLEVULINATO DE En el lugar de aplicación: pústulas. Reacciones en lugares distintos al de la Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
METILO aplicación: Erupción pustular
CAPSAICINA Herpes zóster Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
CLOBETASONA Toxicidad local como atrofia cutánea, infección y telangiectasias de la piel. Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
ESTRADIOL Candidiasis genital Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
IMIQUIMOD Infección fúngica, candidiasis genital, vaginitis, infección bacteriana Poco frecuentes (≥1/1.000 a < 1/100)
ALOPURINOL (oral) Considerar la reducción de la dosis en pacientes con disfunción hepática o renal. Muy raramente se han recibido informes de
trombocitopenia, agranulocitosis y anemia aplásica, particularmente en individuos con la función renal y/o hepática
alterada, remarcando la necesidad de precaución especial en este grupo de pacientes.
ALPROSTADILO (tópica, La inserción incorrecta puede causar abrasión uretral y sangrado uretral leve. En pacientes infectados con enfermedades de
bastoncillo uretral) transmisión sanguínea, esto podría aumentar la transmisión de dichas enfermedades a la pareja.
AMOXICILINA (oral) El uso prolongado puede provocar un sobrecrecimiento de microorganismos no sensibles. Como con casi todos los agentes
antibacterianos, se ha notificado colitis asociada al uso de antibióticos cuya gravedad puede oscilar de leve a suponer una
amenaza para la vida. Por tanto, es importante considerar esta posibilidad en pacientes que presenten diarrea durante o
después de la administración de cualquier antibiótico. En caso de que tenga lugar colitis asociada a antibióticos, se debe
interrumpir inmediatamente el tratamiento con amoxicilina, consultar un médico e iniciar el tratamiento adecuado. En esta
situación están contraindicados los medicamentos antiperistálticos.
ATORVASTATINA (oral) Los pacientes pediátricos con edades comprendidas entre 10 y 17 años de edad tratados con atorvastatina tuvieron un perfil
de reacciones adversas en general similar al de los pacientes tratados con placebo, las reacciones adversas más frecuentes
observadas en ambos grupos, con independencia de la evaluación de la causalidad, fueron las infecciones.
AZATIOPRINA (oral) El efecto terapéutico para el que se utiliza la azatioprina es la inmunodepresión. Durante el tratamiento con azatioprina, se
produce linfocitopenia, que es el efecto terapéutico deseado. En combinación con otros inmunosupresores, la linfocitopenia
puede ser tan pronunciada que el número de células T-helper caiga por debajo de 200/μl lo cual produce inmunodeficiencia.
Por esa razón, se deben realizar recuentos sanguíneos ocasionales, que permitan estimar el número de células T-helper. El
número de leucocitos totales no resulta útil porque puede estar dentro del rango normal debido a una alta proporción de
neutrófilos, aun habiendo una linfocitopenia significativa. Los pacientes que reciben varios agentes inmunosupresores corren
el riesgo de una inmunodepresión exagerada y por eso, se debe mantener esta terapia en los niveles mínimos efectivos. Puede
aparecer leucopenia, trombocitopenia, anemia y pancitopenia. Se debe monitorizar la respuesta hematológica y reducir la dosis
de mantenimiento a la mínima requerida para obtener la respuesta clínica. Se recomienda que durante las primeras 8 semanas
de tratamiento, se hagan recuentos sanguíneos, incluyendo plaquetas, semanales o más frecuentemente. Se debe instruir a
los pacientes en comunicar cualquier evidencia de infección, úlceras en la garganta, hematomas inesperados o hemorragias o
CLOZAPINA (oral) Puede causar agranulocitosis. La incidencia de agranulocitosis y la tasa de mortalidad en aquellos pacientes que hayan
desarrollado agranulocitosis han disminuido de forma clara desde la instauración de los recuentos leucocitarios y de los
recuentos absolutos de neutrófilos. En cada visita debe recordarse al paciente que contacte con su médico de inmediato si
empieza a desarrollar cualquier tipo de infección. Debe prestarse especial atención a síntomas de tipo gripal tales como fiebre
o dolor de garganta y a cualquier otra evidencia de infección que pueda ser indicativa de neutropenia. Los pacientes y sus
cuidadores deberán ser informados de que en caso de que se produzcan estos síntomas, debe realizarse un análisis sanguíneo
inmediatamente.
DEFLAZACORT (oral) Los glucocorticoides disminuyen la respuesta inmunológica a vacunas y toxoides, y también pueden potenciar la replicación de
los gérmenes de las vacunas vivas atenuadas. El empleo de corticoides cuya duración supere la de un tratamiento de sustitución
o de emergencia de corto plazo está contraindicado en los siguientes casos: infecciones bacterianas y víricas como tuberculosis
activa, herpes simple ocular, herpes zóster (fase virémica), varicela, así como en las infecciones micóticas sistémicas y en el
período pre y post-vacunal. En los siguientes casos, debe tenerse especial precaución antes de decidirse a comenzar un
tratamiento glucocorticoide: Cardiopatías o insuficiencia cardíaca congestiva (excepto en el caso de que exista carditis
reumática activa), hipertensión, enfermedades tromboembólicas, infecciones (debe instituirse tratamiento
antiinfeccioso adecuado), gastritis o esofagitis, diverticulitis, colitis ulcerosa si existe riesgo de perforación o de infección
piógena, anastomosis intestinal reciente, diabetes mellitus, inestabilidad emocional o tendencia psicótica, epilepsia, glaucoma,
hipotiroidismo y cirrosis ( en estos dos últimos casos puede verse potenciado el efecto de los glucocorticoides).
DENOSUMAB Pueden presentar infecciones cutáneas (principalmente celulitis) que
(subcutánea) requieran hospitalización. Debe recomendarse a los pacientes que soliciten asistencia médica inmediata, si presentan signos o
síntomas de celulitis.
En ensayos clínicos de fase III controlados con placebo, la incidencia global de infecciones cutáneas fue similar en el grupo
placebo y en el de denosumab: en mujeres posmenopáusicas con osteoporosis(placebo [1,2%, 50 de 4.041] frente a
denosumab [1,5%, 59 de 4.050]); en varones con osteoporosis (placebo [0,8%, 1 de 120] frente a denosumab [0%, 0 de 120]);
en pacientes con cáncer de mama o próstata que recibían tratamiento de deprivación hormonal (placebo [1,7%, 14 de 845]
frente a denosumab [1,4%, 12 de 860]). Se notificaron infecciones cutáneas que provocaron la hospitalización en el 0,1% (3 de
4.041) de las mujeres posmenopáusicas con osteoporosis que recibían placebo, en comparación
con el 0,4% (16 de 4.050) de las mujeres que recibían denosumab. Estos casos fueron principalmente celulitis. Las infecciones
cutáneas notificadas como reacciones adversas graves fueron similares en el grupo placebo (0,6%, 5 de 845) y en el de
denosumab (0,6%, 5 de 860) en los estudios de cáncer de mama y
próstata. Diverticulitis: En un único ensayo clínico de fase III, controlado con placebo, en pacientes con cáncer de próstata
sometidos a tratamiento de deprivación androgénica, se observó una distribución desigual del número
de casos de diverticulitis como reacción adversa (1,2% denosumab, 0% placebo). La incidencia de diverticulitis fue comparable
entre ambos grupos de tratamiento en mujeres posmenopáusicas o varones con osteoporosis y en mujeres con cáncer de
mama no metastásico tratadas con inhibidores de la aromatasa.
LISINOPRIL (oral) Se ha comunicado neutropenia/agranulocitosis, trombocitopenia y anemia en pacientes que reciben inhibidores de la ECA. En
pacientes con función renal normal y sin otras complicaciones, la neutropenia aparece ocasionalmente. La neutropenia y la
agranulocitosis son reversibles tras la suspensión del inhibidor de la ECA. Lisinopril se utilizará con gran precaución en pacientes
con enfermedad vascular del colágeno, tratamiento inmunosupresor, tratamiento con alopurinol o procainamida o una
combinación de estos factores, sobre todo si hay una alteración de la función renal previa. Algunos de estos pacientes
desarrollan infecciones graves, que en escasas situaciones no responden al tratamiento antibiótico intensivo. Si se utiliza en
estos pacientes, se recomienda controlar de forma periódica los recuentos de leucocitos y deberá indicarse a los pacientes que
comuniquen cualquier signo de infección.
MEDROXIPROGESTERONA Al igual que ocurre con cualquier inyección intramuscular, especialmente si no se administra de forma correcta, hay riesgo de
(parenteral) formación de abscesos en el lugar de la inyección, que pueden requerir una intervención médica y/o quirúrgica.
METOTREXATO Durante el tratamiento (como mínimo una vez al mes durante los seis primeros meses y después cada tres meses) igualmente
(oral/parenteral) con cada aumento de dosis se deberá: 1. Exploración de la boca y la garganta para detectar alteraciones en las mucosas. 2.
Hemograma completo con fórmula leucocitaria y plaquetas. La supresión hematopoyética causada por el metotrexato puede
presentarse de forma súbita y con dosis aparentemente seguras. Cualquier disminución marcada en el número de glóbulos
blancos o de plaquetas obliga a retirar inmediatamente el medicamento y aplicar un tratamiento complementario adecuado.
Se debe informar a los pacientes que comuniquen cualquier signo o síntoma indicativo de infección. A los pacientes que reciben
simultáneamente otros medicamentos hematotóxicos (p. ej., leflunomida) se les debe hacer un estrecho seguimiento con
hemogramas y número de plaquetas. Debido a su efecto en el sistema inmunitario, el metotrexato puede afectar a los
resultados de la respuesta a la vacunación y al resultado de las pruebas inmunológicas. Será necesario también actuar con
especial cautela en presencia de infecciones inactivas crónicas (p. ej., herpes zóster, tuberculosis, hepatitis B o C) ante la
posibilidad de que se produzca una activación. No se deben realizar vacunaciones con vacunas de microorganismos vivos
atenuados durante el tratamiento con metotrexato.
La aparición y el grado de severidad de las reacciones adversas dependerán de la dosis y de la frecuencia de administración.
Sin embargo, puesto que pueden ocurrir reacciones adversas severas incluso con las dosis más bajas, es indispensable que el
médico controle regularmente a los pacientes a intervalos cortos. La toxicidad del metotrexato afecta principalmente al sistema
hematopoyético. El folinato cálcico es el antídoto específico para neutralizar las reacciones adversas tóxicas del metotrexato.
CONTRAINDICADO EN: infecciones graves, agudas o crónicas tales como tuberculosis, VIH u otros síndromes de
inmunodeficiencia
METRONIDAZOL (vaginal) Trastornos de la sangre y del sistema linfático: agranulocitosis, neutropenia (frecuencia no conocida). Si resulta necesario
administrar el preparado más días de los inicialmente establecidos, se recomienda realizar determinaciones hematológicas de
forma regular, especialmente recuentos leucocitarios.
32 AEMPS. Nota de seguridad. Riesgo de reactivación del virus de la hepatitis B en pacientes tratados
con imatinib, dasatinib, nilotinib, bosutinib y ponatinib (medicamentos inhibidores de la tirosina quinasa
Bcr-Abl). Disponible en: https://www.aemps.gob.es/informa/notasinformativas/medicamentosusohumano-
3/seguridad-1/2016/ni-muh_fv_08-hepatitis-b/ (Consultada el 25 de noviembre de 2020).
33
Balk E, Adam GP, Kimmel H, et al. Nonsurgical Treatments for Urinary Incontinence in Women: A
Systematic Review Update. (Prepared by the Brown Evidence-based Practice Center under Contract No.
290-2015-00002-I for AHRQ (Agency for Healthcare Research and Quality U.S. Department of Health and
Human Services) and PCORI (Patient-Centered Outcomes Research Institute)). AHRQ Publication No. 18-
EHC016-EF. PCORI Publication No. 2018- SR-03. Rockville, MD: Agency for Healthcare Research and Quality;
August 2018. Páginas 32 y ss.