Técnica de Aceptación Radical

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 7

Técnica de Aceptación Radical

Si pudiera parar por un segundo y observar qué es aquello que ocurre en su vida,
que no ha podido aceptar, ¿qué sería? y ¿qué le impide aceptarlo? la aceptación es
un principio, un pilar del mindfulness, porque justamente lo que enferma al ser
humano en muchas ocasiones es no aceptar su realidad, y no se trata de
resignación como lo veremos a continuación, sino de aceptar que algunas cosas no
pueden ser diferentes y que luchar contra ello solo trae insatisfacción e infelicidad.

Lo contrario a la aceptación es la evitación, muchas personas ni siquiera son


conscientes de que viven su vida con un estilo de afrontamiento evitativo, incluso
este miedo a enfrentar y aceptar la realidad y las situaciones adversas de la vida,
podría decirse que es parte de la naturaleza humana.

La evitación se contrarresta con la acción, pero incluso no actuar ya implica una


acción, solo que denota un estilo evitativo de afrontamiento frente a situaciones que
son percibidas como amenazantes, en definitiva “la evitación es un estilo de
afrontamiento frente a las diferentes circunstancias difíciles, incómodas o
adversas de la vida, en las que se decide no actuar por miedo o inseguridad”.

Tipos de evitación
Desde la psicología se han definido los siguientes 3 tipos de evitación:

1. La evitación conductual: Este es el tipo de evitación más fácil de identificar,


dado que corresponde a la inacción frente a las circunstancias consideradas
como amenazantes, por ejemplo, no subir a un avión, o no hablar en una
reunión de trabajo, o evitar opinar con el fin de no generar conflictos, etc.

1. La evitación Cognitiva: A través de este tipo de evitación se busca “no


pensar” en la situación conflicto, evitando hacer un análisis del problema y
las posibles soluciones, se entra entonces en la inacción cognitiva, no
Para más artículos y documentos visite: www.managementjournal.net
obstante, “no pensar” no es posible, por lo que se buscan entonces vías de
escape en las cuales concentrar la atención, por ejemplo, navegar en
internet, leer, ver televisión, algo que distraiga y ocupe la mente del
pensamiento considerado como amenazante.

1. La evitación experiencial o evitación emocional: Este tipo de evitación va


de la mano con la incapacidad de gestionar adecuadamente las emociones,
es tanto el temor a sentir el malestar de una emoción displacentera, como la
tristeza, el miedo, la desesperanza, que incluso el individuo puede caer en
conductas destructivas con tal de no experimentar el malestar de la emoción,
entre esas conductas se encuentran las adiciones, fumar, las compras
compulsivas, el juego patológico, etc.

En su nivel de expresión más alta este comportamiento está incluido en el manual


de diagnóstico DSM 5 como un “trastorno de la personalidad evasiva” también
puede encontrarse en otros manuales como, trastorno de la personalidad evitativa
o incluso solo trastorno evitativo.

Otras formas de afrontamiento negativo


La impotencia que generar ciertas situaciones que nos inmodificables, como la
muerte de un ser querido, o ser despedido del trabajo, incluso una separación o
ruptura afectiva, pueden generar respuestas desadaptativas contrarias a la
aceptación que tan solo traen dolor y sufrimiento, algunas son:

1. La confrontación violenta: La incapacidad de aceptación, sumada a una


incapacidad de gestionar correctamente emociones como la ira, el enojo, el
enfado, la rabia, la frustración pueden, traer como consecuencia un estilo de
afrontamiento violento y hostil frente a las diversas situaciones que le
generan impotencia al individuo.

Para más artículos y documentos visite: www.managementjournal.net


2. Búsqueda de solución en una fuente externa: Este estilo de afrontamiento
se caracteriza por buscar fuera de sí mismo las respuesta, quizás es un
doctrina o ideología religiosa, que puede llevar al individuo al conformismo
con determinada situación, anulando su autonomía y capacidad de intervenir
en la solución de sus problemas, también puede presentarse cuando la
persona acude al consejo o aprobación de otros, lo cual también es una
fuente de infelicidad, si se hace en exceso y con las personas equivocadas.
3. Autodestrucción: La resignación, la culpa y la victimización son otras
formas de hacer frente a los problemas, no obstante, pueden llevar a la
autodestrucción de la persona, como en el caso anterior, generando una
sensación de incapacidad para intervenir y resolver las diferentes situaciones
conflicto que se presentan en la vida.

En general “las personas que tienen un estilo de afrontamiento evitativo, se


caracterizan por tener un bajo nivel de inteligencia emocional, y una
incapacidad para hacer frente de manera adaptativa a las adversidades de la
vida”, incluso a pequeñas situaciones o problemas, lo que los predispone más al
estrés y a configurar trastornos como la ansiedad y la depresión.

En psicología para el tratamiento de este estilo de afrontamiento, existen diversos


enfoques psicológicos, terapias y técnicas, sin embargo, para esta clase hemos
elegido, la técnica de aceptación radical, veamos a continuación de qué se trata.

La técnica de aceptación radical


La técnica de aceptación radical no es propiamente un técnica del mindfulness, es
una técnica que forma parte de la Terapia Dialéctica Conductual, pero si fue
desarrolla por una de las más destacadas investigadoras del mindfulness Marsha
M. Linehan, psicóloga de la Universidad de Washington, y tiene como base los

Para más artículos y documentos visite: www.managementjournal.net


principios budistas. La técnica ha sido ampliamente difundida por Tara Brach,
psicóloga y profesora de meditación y budismo.

La técnica de aceptación radical se fundamenta en el hecho de que aceptar no


significa resignarse, tampoco significa aceptar el abuso de otros, o estar de acuerdo
con determinada situación o evento.

Practicar “la aceptación radical significa básicamente que se reconoce la


realidad” y que se acepta que luchar contra esa realidad tan solo traerá dolor,
sufrimiento y desgaste emocional.

La aceptación radical no significa resignación, ni tampoco sumisión, “significa en


realidad la posibilidad de evaluar una situación que está ocurriendo con
criterio y receptividad”, para plantear alternativas de solución, se sugiere
entonces abandonar las expectativas irreales que son las que generan sufrimiento
y hacer frente a la realidad con la mayor objetividad posible.

Para la Dra. Tara Brach, la aceptación radical se basa en el reconocimiento claro


que lo que se está sintiendo en el momento presente, de manera que sea posible
lidiar con esta experiencia de la forma más compasiva y amable posible, se trata
entonces de aceptar la vida, tal como es, sin embargo, lo que ocurre cuando surge
una situación adversa, la tendencia es juzgarla, calificarla, y en general luchar con
ella, al plantearse preguntas de ¿por qué ocurrió esto? ¿por qué a mí?, entre otras.

¿Cómo funciona la técnica?


Frente a cualquier situación adversa, inmodificable, difícil, conflictiva, el primer paso
es la aceptación de lo que está ocurriendo, la Dra. Brach propone para ello.

• Identificar la situación.
• Evaluar las posibles soluciones que tiene.

Para más artículos y documentos visite: www.managementjournal.net


• Si no hay oportunidad de solución, tal vez sea posible cambiar algunos
aspectos sobre la situación; la perspectiva, por ejemplo, intentando encontrar
los aprendizajes de la situación, renunciando a las expectativas que solo
alargan el sufrimiento, empieza entonces el trabajo de la aceptación radical.
• Es importante ante el impacto de una noticia o ante la situación misma,
retirarse un momento o recogerse en un lugar para elaborar la situación.
• Empiece por concentrarse en la respiración.
• Reciba los pensamientos que vienen a la mente sobre la situación, por
ejemplo, pensamiento como “Esto no puede ser” “no lo voy a poder
soportarlo” “es lo peor que me ha ocurrido en la vida” “es demasiado injusto”
etc.
• Observe cómo esos pensamientos exacerban o alteran más las emociones.
• Trate de identificar las emociones que están surgiendo; miedo, tristeza, rabia,
impotencia.
• Trate de no juzgar ni los pensamientos, ni las emociones.
• No se aferre ni a los pensamientos, ni a las emociones, déjelos ir con
tranquilidad, procurando concentrarse esta vez en la respiración.
• A continuación, puede repetir el siguiente mantra “es lo que es” repetirlo
varias veces, con esto se acepta que la situación ya es, ya ocurrió y que ya
no puede afectarle más, lo que le afecta ahora son sus propias emociones y
pensamientos acerca de lo que ocurrió.
• Se puede ir cerrando la meditación, concentrándose nuevamente en la
respiración.

Seguramente la persona se enfrentará nuevamente a la realidad una vez ha


finalizado la técnica y notará que tal vez aún no se da la aceptación del todo, esto
es, porque se trata de un proceso, es gradual y requiere entrenamiento, cuando
surjan los sentimientos de impotencia se puede volver a realizar el ejercicio, las
veces que sea necesario, poco a poco la aceptación irá emergiendo naturalmente,
casi que puede convertirse en un estilo de vida si se practica con perseverancia.
Para más artículos y documentos visite: www.managementjournal.net
Bibliografía:

• BRACH, T. (2003) Aceptación radical: Abrazando tu vida con el corazón de


un Buda. Madrid: Gaia Ediciones.
• BROWN, K., RYAN, R. (2003). The benefits of being present: Mindfulness
and its role in psychological well‐being. Journal of Personality and Social
Psychology, 84(4), 822‐ 848.
• GERMER, C. (2005). Mindfulness and Psychotherapy. In Germer, C. K.,
Siegel, R. D. y Fulton, P. R. (Eds). Mindfulness. What Is It? What Does It
Matter? (pp. 3‐27). New York: Guilford Press.
• LINEHAN, M. (1993) Cognitive-Behavioral Therapy of Borderline Personality
Disorder. Nueva York: The Guilford Press.
• PIET, J, HOUGAARD E. The effect of mindfulness-based cognitive therapy
for prevention of relapse in recurrent major depressive disorder: a systematic
review and meta-analysis. Clin Psychol Rev. 2011; 31(6):1032-40.
• SIMON V. Mindfulness y psicología: presente y futuro. Información
Psicológica. 2010; 100: 162-70. 7.
• PÉREZ, M. BOTELLA, L. Conciencia plena (mindfulness) y psicoterapia:
Concepto, evaluación y aplicaciones clínicas. Revista de Psicoterapia. 2006;
17 (66-67): 77-120. 8.
• RAUCH, S. L. (1996) A symptom provocation study of posttraumatic stress
disorder using positron emission tomography and script-driven imagery. Arch
Gen Psychiatry; 53(5): 380-387.
• SIMON, V. Aprender a practicar mindfulness. Décima edición. Barcelona:
Sello Editorial; 2014. p. 27
• WILLIAMS, J. ALATIQ, Y. CRANE, C. Mindfulness-based Cognitive Therapy
(MBCT) in bipolar disorder: Preliminary evaluation of immediate effects on
between-episode functioning. J Affect Disord. 2008; 107(1-3): 275–79.

Para más artículos y documentos visite: www.managementjournal.net


• KABAT – ZINN, J. (2003). Mindfulness‐based interventions in context: Past,
present, and future. Clinical Psychology: Science and Practice, 10(2), 144‐
156.

Para más artículos y documentos visite: www.managementjournal.net

También podría gustarte