Capítulo 3. Literatura y Psicología
Capítulo 3. Literatura y Psicología
Capítulo 3. Literatura y Psicología
Literatura y psicología
1. La inspiración poética
El carácter de la creación poética ha merecido la atención de quienes han
reflexionado sobre la literatura desde antiguo. Platón dio forma a una postu
ra que se hará tópica en la teoría literaria.
La teoría sobre la inspiración parece anterior a la de la mimesis en el pen
samiento de Platón. En la Apología de Sócrates se lee que la creación poéti
El manual de René Wellek y Austin Warren ofrece una útil guía para orga
nizar una buena comprensión de estas cuestiones. Cuatro son los apartados en
que se reparten los problemas que la psicología estudia en relación con la lite
ratura, según Wellek y Warren (1949: cap. vm):
- Estudio psicológico del escritor, como tipo y como individuo.
- Estudio del proceso creador.
- Reflejo, en la obra, de tipos y leyes psicológicas.
- Efectos de la literatura sobre los lectores.
La utilidad de esta clasificación de asuntos psicológicos relacionados con
la literatura es confirmada por la organización similar que, bastantes años des
pués, sigue haciendo Carlos Castilla del Pino (1983: 252):
“Desde entonces [desde Freud], la bibliografía acerca de la incidencia del
psicoanálisis en el universo literario, [...] es muy abundante, y aunque en mane
ra alguna está sistematizada, podemos reconocer ahora que ha procedido sobre
2.2. Freud
Póngase todo esto en paralelo con los tipos de carácter que Freud des
cubre en la labor psicoanalítica y que ilustra con ejemplos literarios, como
hace en su artículo Varios tipos de carácter descubiertos en la labor analíti
ca (1915-1916). En la literatura, pues, se pueden encontrar tipos diferencia
dos por el psicoanálisis. ¿Pueden todos los tipos literarios interpretarse tam
bién psicoanalíticamente? Los que Freud diferencia en este trabajo son: el que
se cree “excepción”; los que fracasan al triunfar; el delincuente por senti
miento de culpabilidad. Ejemplo del primer tipo es Glocester, de Ricardo
III, de Shakespeare; del segundo, Lady Macbeth; y del tercero, el “pálido cri
minal”, del que habla el Zaratustra de la obra de Nietzsche.
La influencia de la literatura en la teoría de Freud es evidente en las frecuen
tes alusiones, y ha sido comentada por los estudiosos de su obra. Véase, por ejem
plo, el trabajo del crítico norteamericano Lionel Trilling, “Freud y la literatura”
(en H. M. Ruitenbeek, ed., 1964: 358-396). El conocido cervantista Edward C.
Riley toma pie en la noticia de la lectura del C o lo q u io d e lo s p e r r o s por Freud
para comparar la situación de comunicación novelística y la psicoanalítica para
afirmar: “E l m é to d o p s ic o a n lític o d e F re u d c o in c id e c o n la n o v e la d e C e r v a n te s
(la cu a l, p o r lo v is to , le y ó en su ju v e n tu d ) en q u e a m b o s r e c o n o c e n la n a tu r a le z a
d ia ló g ic a d e la c o m u n ic a c ió n n a r r a tiv a ” (Riley, 2001: 276).
3.1. Freud
Por todo lo anterior, puede decirse que la referencia a las relaciones entre
literatura y psicología es ya una constante en todos los tratados y manuales de
teoría literaria.
Aparte del libro clásico de Anne Clancier (1973) y los artículos de Jean-
Louis Baudry (1968) y Jeffrey Mehlman (1970), pueden citarse, como trabajos
que tienen carácter general o de síntesis, los de Jean Bellemin-Noél (1978, 1979),
Elizabeth Wright (1982, 1984, 1988), Paraíso (1995, 1999), sobre psicoanálisis y
literatura; las muy interesantes colecciones de trabajos -teóricos o aplicaciones-
de H. M. Ruitenbeek (ed., 1964) y Azpilitarte Almagro (ed., 1981); o los de
Michel Grimaud (1981) y María G. Profeti (1985). Estos dos últimos ofrecen
ejemplos de análisis -Grimaud sobre el soneto “La Géante” de Baudelaire, María
G. Profeti sobre el soneto de Quevedo “A una nariz”- y el de María G. Profeti