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Tzeltzin Alejandra Lira Fuentes

Las líneas del desarrollo trazan el crecimiento gradual del niño desde las actitudes

dependientes, irracionales, determinadas por el ello y los objetos hacia un mayor control del

mundo interno y externo. Este desarrollo va desde la lactancia, el control de esfínteres, la

adolescencia, hasta la búsqueda de un empleo. Las líneas del desarrollo son realidades que

ejemplifican los logros alcanzados por el niño.

Desde la dependencia hasta la autosuficiencia emocional y las relaciones objétales adultas.

Esta secuencia va dese la absoluta dependencia del recién nacido con los cuidados de la

madre hasta llegar a ser autosuficiente tanto material como emocionalmente

Esta dependencia empieza con las interacciones del niño con la madre, poco a poco

empiezan a haber interferencias en el vínculo las cuales pueden causar ansiedad de separación.

Puede que en este proceso surjan trastornos en el proceso de individuación cuando la madre tenga

cierta incapacidad para cumplir con su rol de satisfacer necesidades y brindar confort. Es

importante que el niño alcance la constancia objetal para que la ausencia del objeto se pueda

sustituir con la presencia de una imagen interna que permanece estable. Esto esta relacionado a

que el niño debe alcanzar cierta maduración para poder soportar estar lejos de su madre. hay una

edad en la cual debe de ser más fácil esta separación, pero muchas veces se pueden tener

dificultades. Por ejemplo, con Sebastián de la familia Pérez el cual no logra soportar que sus

padres no estén con él en las sesiones en el centro, y le cuesta entrar al kínder.

El nivel necesario que necesita alcanzar el niño es que soporte la separación del hogar y de

la madre, por periodos cortos, debe ser capaz de establecer relaciones con gente nueva y aceptar

nuevos riego.

Desde la lactancia a la alimentación racional.

Los pasos para que el niño pueda de modo activo y racional la ingestión de alimentos son

los siguientes. Este proceso empieza con la lactancia, se tiene un horario fijado el cual depende

del apetito y ansiedades de la madre. De este proceso surge el placer del chupeteo, el cual se

vuelve un sustituto o interferencia con la alimentación. Se continua con el destete, el cual puede

ser iniciado pro el niño o la madre, se empiezan a tener problemas con los alimentos sólidos ya

que es algo nuevo. Se empiezan a utilizar utensilios y la comida se relaciona con la mamá. Se

presentan problemas como los modales en la mesa, el desagrado en los alimentos, hábitos en la

alimentación, y aversiones. Por ejemplo, recuerdo que muchas veces en las sesiones a los niños

les dan dulces o algo que les guste comer para calmarlos o convencerlos de entrar a la sesión. Los

dulces o las cosas dulces son los alimentos preferidos

De la incontinencia al control de los esfínteres.

El niño tiene la completa libertad sobre la evacuación, poco a poco las necesidades del

niño, las familiares, sociales y medicas interfieren para que haya un entrenamiento. Para que este

entrenamiento se consolide es necesaria el avance en la maduración. Los cuidadores en esta fase

puede que les cause mucho conflicto tener empatía ya que interfiere su propio control de

esfínteres, su disgusto, la tendencia al orden, la minuciosidad, y los elementos obsesivos de la

personalidad. Si se tiene empatía se establecerá el control de esfínteres de manera gradual, con

tranquilidad y sin trastornos, pero si no se tiene se impondrá de manera severa y sin concesiones.
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Se establece totalmente cuando el niño toma la responsabilidad completa de su cuidado y

regulación.

De la irresponsabilidad hacia la responsabilidad en el cuidado personal.

En los primeros meses de vida el niño por su maduración es propenso a autolastimarse,

rasguñarse y morderse. Poco a poco mientras avanza la maduración empieza a entender la causa

y el efecto y se empieza a orientar hacia el mundo, las funciones del yo protegen al niño. Se

finaliza con la aceptación voluntaria de las reglas de higiene y sanitarias.

Estas características hacen que muchas veces el cuidado del niño recaiga completamente

en la madre, haciendo que tenga mayor trabajo y responsabilidades en la casa. Esto se puede ver

muy claro con la familia Uribe, en su familia la señora es la quien tiene más responsabilidades de

cuidar a cris, mientras que el padre se deslinda de todas estas actividades. Es muy notoria la

diferencia cuando se es un adulto como sucede con su hija, la cual al tener la responsabilidad

total de su cuidado, los padres no se preocupan ni se responsabilizan de eso.

El nivel requerido es que el niño pueda alimentarse por sí mismo y que haya alcanzado el

control de esfínteres.

Desde el egocentrismo al compañerismo.

En un inicio el niño ve a otros niños como perturbadores y rivales que pueden entrar en la

relación con sus padres. Mas adelante, los niños se ven como objetos inanimados, los cuales

pueden ser manipulados, maltratados, buscados y descartados. Poco a poco, empiezan a ser

colaboradores para jugar, construir, destruir, hacer travesuras. Por último, los niños son vistos

como socios con derechos propios, a los cuales pueden admirar, temer o competir.
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Es un camino largo para que el niño pueda crear amistades y enemistades ya que antes de

eso es necesario que socialice. Esta socialización se puede ver cuando se aceptan a los hermanos,

o se entra al jardín de niños. En el centro esto se puede ver con la familia Ruiz, los hermanos

aunque tiene una diferencia de edad amplia se aceptan y cooperan para tener una buena relación,

al contario de los hermanos de la familia contreras, los cuales tienen muchos problemas y una

relación muy conflictiva.

El nivel requerido es que el niño pueda ver a los demás como colaboradores y socios con

derechos propios para así poder formar verdaderas amistades.

Desde el cuerpo hacia los juguetes y desde el juego hacia el trabajo.

El juego es una actividad que produce placer, este empieza desde el propio cuerpo o hasta

en la madre a la hora de comer. Después aparece el primer objeto de juego como un objeto de

transición, puede ser un pañal, una almohada, una alfombra, etc. Estos objetos le sirven al niño

para expresar su ambivalencia y le pueden ayudar a dormir. Poco a poco durante el día estos

objetos son remplazados con juguetes. Estos juguetes también van por secuencia, primero se

interesa por juguetes que ofrecen actividades como llenar y vaciar, abrir y cerrar, revolver, etc.

Después se prefieren los que pueden rodar o les permite su motricidad, se pasa a los juegos que

expresan lo masculino y lo femenino, como gimnasia y acrobacia. Todo esto resulta en que el

placer nace desde poder cumplir la tarea. Por último, se pasa de la capacidad lúdica a poder ser

capacidad laboral, para lo cual es necesario que la persona tenga control sobre sus impulsos y

capacidad de entender la ausencia del placer inmediato.

Esto se puede ver en el centro cuando los niños se ponen muy impacientes y traviesos

cuando tienen que estar en las sesiones y no hay juegos. Por ejemplo, con Sebastián de 5 años es
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importante que haya muchos juegos en la sesión para que pueda entender las cosas y pueda

mantener la atención en la sesión, si no hay juegos Sebastián se pone muy inquieto, interrumpe a

sus papás y se aburre de solo escuchar palabras.

Es necesario que los adultos y el material se adapten a las necesidades de los niños, para

así evitar el aburrimiento o el mal uso de estos materiales.

Por otra parte, existen 3 tipos de regresión: topográfica, temporal y formal. La topográfica

se refiere cuando la excitación tiene una dirección retrograda, es decir que se produce la

satisfacción de deseos alucinatorios en lugar de los procesos racionales. La temporal es un salto

atrás hacia estructuras psíquicas viejas. La formal son métodos primitivos de expresión que

reemplazan a los nuevos.

Las regresiones pueden afectar la elección de objetos y las relaciones que se tienen con

ellos. se pueden crear los puntos de fijación, los cuales se pueden determinar por alguna

experiencia traumática, frustraciones, o una gratificación excesiva. Estas fijaciones pueden ser

causantes de más regresiones sobre los impulsos y se presentan en las primeras etapas del

desarrollo y también en la madurez.

En los niños, las regresiones funcionales son una característica común de la conducta

infantil. Estas tendencias regresivas están relacionadas con los logros importantes de los niños,

como por ejemplo: la motricidad, el habla, el control de esfínteres, dominio de la ansiedad,

adaptación social, entre otros. Es decir que el rendimiento y capacidad de un niño no es estable o

continuo.
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Comentario

En lo personal este tipo de lecturas se me hacen complicadas de entender y de comprar

con los casos que se presentan en el servicio o en el centro. Sobre este tema en específico, que

son las líneas del desarrollo, no tenia conocimiento anterior por lo cual es un tema nuevo para mí.

Por lo que entendí es una forma de ordenar la manera en la cual se presentan el desarrollo

del niño, explicado desde un enfoque psicoanalítico ya que siempre están muy presentes

conceptos como impulsos, ello, yo, placer erótico, entre otros.

Mucha información que viene en la lectura me hizo sentido ya que independientemente

desde que enfoque se vea el desarrollo del niño, es innegable que necesitan un desarrollo anterior

para poder lograr ciertas características y que las regresiones son comunes en niños pequeños, por

lo cual su crecimiento y desarrollo nunca es lineal.

Esta lectura me hizo recordar a mi clase de psicopatología infantil, es esa clase veíamos el

desarrollo del niño desde una vista neurológica y cognitiva, pero varias características que

veíamos también se presentaron en la lectura, como las regresiones, los dominios de los niños, el

desarrollo social para poder llegar hacer amigos y poder prestar atención a sus clases sin aburrirse

y entendiendo que la satisfacciones su puede demorar y ellos deben ser capaces de controlarse.

Referencia.

Freud, A. (1973). El Concepto de las líneas del desarrollo. Normalidad y patología en la niñez.
(pp. 55- 96). Paidós. Buenos Aires.