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La Resistencia Peronista Perén, tras ser destituido, inicié su largo exilio: primero se refugié en Paraguay, luego ppasé a Venezuela, Santo Domingo, y finalmente decidié establecer su residencia en Espafia. Durante el periodo de dieciocho afios en que estuvo proscrito, los sectores peronistas actuaron de diferentes modos. En una primera etapa se vislumbraban tres posturas: la resistencia, el golpismo y la negociacién, Perén en un principio estuvo desconectado de los peronistas que, en forma esponta- nea y muy desorganizadamente, mostraron su repudio al golpe militar “libertador”. En enero de 1956 hizo llegar sus directivas para todos los peronistas, pidiéndoles que se organizaran secretamente bajo la forma de resistencia, Los diferentes lugares de resistencia Muchos peronistas sintieron que debian hacer algo contra la dictadua, y algunos em- prendieron pequetias acciones de sabotaje en sus trabajos o donde pudieran, aunque fuera en forma individual. Gran parte se organiz6 en las comisiones internas de las fbricas, o en grupos barriales que agrupaban gente de distintas ocupaciones, que pintaban consignas en paredes, distribuian volantes, difundian rumores falsos que desestabilizaran al gobierno, etcétera Con las medidas represivas del gobierno y el aumento de la explotacién por parte de Jas patronales, la resistencia peronista se refleé en los dafios a las maquinarias y la baja del nivel de produecion ‘Al mismo tiempo, dirigentes como john William Cooke contribuyeron a la organizacién de los comandos nacionales de resistencia: en abril de 1956 habia unos doscientos “comandos", con miles de hombres. Muchos de ellos estaban formados por obreros de una o mis fabricas, y sus jefes eran lideres sindicales. Se intensificé el empleo de bombas caseras contra objetivos militares, edificios publicos, ferrocartiles o plantas de electricidad, La mayoria de las bombas eran “caiios", rudimentarios artefactos hechos de sustancias quimicas bisicas alojadas en recipientes improvisados Algunos dirigentes peronistas presos -como Cooke (quien ya era el delegado de Perén), Héctor Campora, Jorge Antonio y Patricio Kelly- se escaparon en 1957 de la crcel de Rio Gallegos y se refugiaron en Chile. Desde alli montaron una radio clandestina que comen- zaba sus emisiones diciendo "Aqui Radio Justicialista desde algin lugar de la Patria"; su objetivo era fortalecer el espiritu de lucha de los peronistas, hablando de resistencia, movilizacién, sabotajes, huelgas, guerra de guerrillas e insurreccién armada. El levantamiento del general Valle Entre los resistentes estaban quienes propiciaban el golpismo. Oficiales y suboficiales peronistas del Ejército pensaban que, si se conectaban con los sindicatos, podian vol- ver a la situacién de 1943, Esta nea estaba apoyada por unos miles de sindicalistas proscriptos. Muchos resistentes centraron su actividad en la busqueda de figuras mi- litares peronistas que quisieran dirigir un golpe contra los “Libertadores”. £19 de junio de 1956 se levantaron el general Juan José Valle, el general RatilTanco y oficialidad del Fjército. Pero no eran suficientes, y actuaron desconectados de las masas populares y de Perdn. Esta linea golpista fracasé con la represién sangrienta del contralmirante Rojas (Aramburu no estaba en Buenos Aires en ese momento): se dictaron los decretos que establecian la ley marcial y los juicios sumarisimos para quienes “alteraran el orden” 0 se resistieran a las drdenes policiales. Pese asegurarle al general Valle que si se tentregaba no correria sangre, se procedié a los fusilamientos de militares y de civiles cen un basural, descriptos en los libros de Rodolfo Walsh, Operacién Masacre, y Salvador Ferla, Martires y Verdugos.

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