Curso Liderazgo en Tacones

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LIDERAZGO EN TACONES

1. SOY LÍDER Y ESTOY MOTIVADA

1.1 SOY LÍDER

¿Qué es el liderazgo?

Liderazgo se puede definir como el conjunto de cualidades y hábitos positivos


que motivan y permiten a un individuo conducir a un grupo de personas
al logro de fines superiores por caminos acotados por principios y valores
de alto contenido moral.

Luis Castañeda “Naciste para ser Líder”, 2007.

"Liderazgo es la influencia interpersonal ejercida en una situación, dirigida


a través del proceso de comunicación humana con el propósito de cumplir
uno o diversos objetivos específicos".

Chiavenato, Idalberto (2008)

Entonces podemos definir el liderazgo como:

LA CUALIDAD DE MOTIVAR E INFLUIR, DE MANERA POSITIVA, EN UN


GRUPO DE PERSONAS, CON EL OBJETIVO DE CUMPLIR UNO O
VARIOS OBJETIVOS EN COMÚN.

Si bien el liderazgo se considera como una cualidad, debeos trabajar en ella


para mejorarla y construir un liderazgo que nos permita cumplir ese objetivo
grupal, apoyándose de nuestros conocimientos, habilidades, valores y
experiencias y con ello persuadir a los demás en el cumplimiento de ese bien
común.

Pero ¿cómo ser una buena líder?

Parte fundamental de ser un líder es el compartir nuestro conocimientos y


experiencias a aquellas personas que nos rodean, ya sea en el trabajo, en la
escuela, en casa o con nuestros amigos; todo ello servirá para la dirección
de nuestro circulo, pero cómo bien lo mencionamos anteriormente, el
liderazgo también se rige por nuestros principios y valores, ya que son ellos
quienes marcaran la pauta y limitante para ser un buen líder y no un tirano.

Es por ello que el conocimiento de uno mismo es esencial para un buen líder;
conocerse a uno mismo significa tener un profundo conocimiento de las
emociones propias, de sus puntos fuertes, sus debilidades, sus necesidades
y sus impulsos.
Las personas con un intenso conocimiento de sí mismas no son ni demasiado
críticas ni exageradamente optimistas. Al contrario, son honestas consigo
mismas y con otros. Las personas con un alto grado de conocimiento de sí
mismas reconocen cómo sus sentimientos les afectan a ellas y a otras
personas, y también cómo afectan a su rendimiento en el trabajo. Por tanto,
una persona que se conoce a sí misma y sabe que los plazos ajustados
sacan lo peor de ella planifica su tiempo con sumo cuidado y realiza su
trabajo por adelantado. Otra persona con un alto conocimiento de sí misma
será capaz de trabajar con un cliente exigente; entenderá el impacto de dicho
cliente en su estado de ánimo y las razones subyacentes de su frustración.

De ese modo el conocernos a profundidad, saber realmente nuestras


fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas nos catapultaran al
desarrollo de un “ser líder”, ya que al conocernos sabremos de nuestras
capacidades para motivar e influir en los demás.

Por ejemplo, si yo sé que soy una persona organizada con mis actividades,
podré compartir con los demás hábitos que les permitan tener sus espacios
organizados, y así con mis acciones influir en ellos para que repitan dichos
hábitos; pero si pienso que soy una persona organizada, pero realmente no
es así, será difícil transmitir ello a los demás porque yo no lo soy. De ahí la
importancia de conocernos, para saber cuáles son mis puntos fuertes que
puedo compartir, transmitir y con ello influir en los demás; y todo ello guiado
por mis valores.

Para descubrir que me rige como persona para ser una buena líder, debo
conocer que valores son los que me definen.
Hagamos el siguiente ejercicio…

A continuación escribe 5 valores que te definan:

 ________________________________
 ________________________________
 ________________________________
 ________________________________
 ________________________________

Ahora elige 3 de ellos que sean los que regularmente guíen tus decisiones y
acciones y explica por qué:
 ___________________
 ___________________
 ___________________
____________________________________________________________
____________________________________________________________
____________________________________________________________
____________________________________________________________
____________________________________________________________

Ahora que conoces cuales son valores más importantes para ti, estos serán
los que guíen tu camino para ser un líder.
¿Por qué quiero ser una líder?
Esta pregunta es muy interesante, la mayoría de las personas en un puesto
directivo o gerencial te dirán que son líderes, incluso nosotras mismas nos
podemos definir así, o seguramente en este momento viene a tu cabeza
algún familiar, amigo o conocido que consideres como un líder, y muchos de
ellos son líderes por las circunstancias o su personalidad, y muchos otros
porque realmente han trabajado en construirse como un líder.
Pero nosotras como mujeres enfocadas al liderazgo, pensemos, ¿Por qué
quiero ser líder? ¿Cuál es mi motivación?

 ¿Tener poder?
 ¿Tener beneficio económico?
 ¿Tener reconocimiento?
 ¿Tener prestigio?
 ¿Tener a otros a tu servicio?

Hagamos este ejercicio, piensa realmente cuál es tu motivación para ser una
líder y escríbela.
____________________________________________________________
____________________________________________________________
____________________________________________________________

Ahora que ya conoces tu razón por la cual quieres ser una líder. Debo decirte
que sólo existe una verdadera razón para ser una líder:

“SERVIR A LOS DEMÁS MEDIANTE EL LOGRO DE UN PROPÓSITO


TRASCENDENTE”

El objetivo principal y primordial de una líder será: servir, motivar,


acompañar y dirigir a la gente que me rodea para lograr propósitos u
objetivos trascendentes en común.

CUALIDADES DE UNA LÍDER


Ya tenemos conocimiento de lo que es ser una líder, de que marcará la pauta
para nuestras acciones como líder; pero ¿cuáles son esas cualidades que
debe tener una líder?
1. Carácter

Para una líder el carácter deber ser una parte esencial, y hablamos de
carácter en el sentido de tener el temple, las agallas y la fuerza para salir
avante en cualquier situación; bajo presión, bajo euforia o éxtasis, una
líder tendrá la capacidad de conducir su carácter de una forma positiva
para resolver sus adversidades y convertirlas en oportunidades.

2. Carisma
El carisma puede definirse como la habilidad de atraer a la gente así
mismo. Si quieres atraer a los demás, tienes que ser cómo la gente con
la que te gusta estar; ser la persona alegre, optimista, apasionada con la
vida, esa persona con la que los demás quieren compartir su tiempo. En
ello también podemos incluir nuestra disposición con los demás, las
líderes que piensan en otros y en sus intereses antes de pensar en ellos
mismos, muestran carisma.

3. Compromiso

El compromiso es algo subjetivo para cada persona, para algunas será


despertarse todos los días a la misma hora para llegar a tiempo al trabajo,
para otras será levantarse a hacerle de desayunar a su familia, para otras
será ir al gimnasio sin falta todos los días aunque este más cansada que
nuca; pero para una líder deberá ser todo eso y más, porque cada uno de
los que diriges está dependiendo de ti. El verdadero compromiso inspira
y atrae a la gente. Les muestra que tienes convicciones. Ellos creerán en
ti solo si tú crees en tu causa. Por eso jamás encontraras a una líder que
carezca de compromiso, porque el compromiso nos da fuerza, no importa
lo que pueda venir, enfermedad, pobreza, o desastre, nunca quitemos la
vista del objetivo.

4. Comunicación
Una líder tiene que ser capaz de compartir conocimientos e ideas para
trasmitir un sentido de urgencia y entusiasmo a otros. Si no puede hacer
comprender un mensaje claramente y motivar a otros a actuar, entonces
no tiene sentido tener un mensaje. La comunicación es la base de un
liderazgo efectivo, por ello una líder tendrá la capacidad de comunicar sus
ideas, objetivos a cumplir, metas, etc. de la mejor manera posible.
5. Capacidad

La capacidad va más allá de las palabras. Es la habilidad de una líder de


decirlo, planearlo, y hacerlo de tal forma que otros sepan que tú sabes
cómo, y sepan que te quieren seguir. Todos admiramos a las personas
que muestran gran capacidad, conviértete en ello. Mejora
constantemente, busca la excelencia, si eres buena poniendo uñas,
trabaja por ser la mejor, si tienes talento para bailar, esmérate por ser la
mejor. Las mujeres competentes siempre dan más de sí mismas,
esfuérzate por dar siempre un poco más, un poco más cada día, y con
todo ello te convertirás en esa mujer que inspiré, que motive a los demás
a lograr sus objetivos.

6. Valentía
La posición de líder no le da a la mujer valentía, pero la valentía le puede
dar una posición de líder. Seamos mujeres valientes al tomar las
decisiones correctas; y no se trata de que por carecer de temor somos
valientes, sino más bien, de hacer aquello que le tenemos temor; eso es
lo que nos hace valientes. Y ¿cómo logramos eso?, saliendo de nuestra
zona de confort, haciendo aquello que nos paraliza; enfrenta el temor,
háblale a esa persona, da ese paso grande, se valiente.

7. Concentración

Lo que la gente dice, lo que la gente hace, y lo que la gente dice que hace,
son cosas completamente diferentes.
Una líder que conoce sus prioridades pero carece de concentración sabe
qué hacer pero nunca lo termina. Si tiene concentración pero no
prioridades, tiene excelencia sin progreso. Por ello es importante
concentrarnos en nuestro fuerte, una mujer líder ocupa el 70% de su
tiempo concentrada en lo que hace bien que en lo que hace mal; para
tener éxito concéntrate en tus habilidades y desarróllalas, en eso es en lo
que debes invertir tu tiempo, energía y recursos.
Concéntrate un 25% en cosas nuevas, el crecimiento implica cambio, si
quieres ser mejor debes mantenerte cambiando y mejorando.
Concéntrate un 5% en tus áreas débiles, no vas a poder evitar trabajar en
sus áreas débiles, pero puedes delegarlas, así enfocaras tu energía en
tus puntos fuertes.

8. Generosidad
Una líder efectiva, a esa líder que le gusta a la gente seguir, no hace
cosas para sí, hace cosas para los demás. Siempre se agradecida con lo
que tienes, tu trabajo, tu familia, tu hogar, tu vida; la mujer satisfecha con
lo que tiene será una líder generosa. Siempre ten en mente que la calidad
de una líder no se mide por la cantidad de personas que la sirven, sino
por el número de personas a las que ella sirve.

9. Iniciativa

Una líder entaconada siempre sabrá lo que quiere y hacia dónde va, ya
que es la única forma de reconocer las oportunidades cuándo se
presentan. Una líder con iniciativa no espera a que otros la motiven; ella
sabe que es su responsabilidad esforzarse más allá de su zona de
comodidad y hace de esto una práctica regular, se esfuerza por actuar.
Una líder que sabe lo que quiere y se decide a actuar, todavía tiene un
obstáculo más, y por ende estas mujeres activas corren riesgos, y esto
más que nada porque saben que hay un precio mayor que pagar por no
hacer nada.

10. Pasión
Cuando una líder se expresa con pasión, generalmente encuentra pasión
como respuesta. Los expertos pasan mucho tiempo tratando de averiguar
lo que hace a las mujeres exitosas. Casi siempre buscan su inteligencia,
educación, y otros factores. Pero más que cualquiera otra cosa, la
diferencia la hace la pasión. La pasión es el primer paso para la
realización, deseos débiles traen resultados flojos. La pasión será el
motor de todo aquello que hagas, será el punto de motivación para que
aun cansada o desganada logres tus objetivos; la pasión nos cambia,
hace posible lo imposible; si te dejas llevar por la pasión serás una mujer
más dedicada y productiva.

11. Actitud positiva


Una mujer de éxito es aquella que puede construir su imperio con los
ladrillos que otros le han arrojado.
Tu actitud la decides tú, no dejes que las circunstancias cambien tu
actitud, por muy abrumador que sea todo, una actitud positiva podrá con
eso y más. Tu actitud determina tus acciones, y tu respuesta frente a lo
que se te presente, si tienes una mala actitud, ten pon seguro que tus
acciones no serán las mejores. La gente que te rodea es un espejo de tu
actitud, según seas tú: así será la gente que atraigas; quieres gente
optimista, se optimista. Y recuerda, siempre es mejor mantener una
buena actitud que recuperarla; si tú ya tienes una actitud positiva, quiero
estimularte a que la mantengas.

12. Escuchar
Una buen líder estimula a los demás a que le digan lo que necesita saber,
no lo que quiere oír.
Cuando nos damos a la tarea de escuchar a los demás debemos tener
presente que estamos buscando dos propósitos: relacionarme con las
personas y aprender de ellas. Una líder exitosa tiene la capacidad de
escuchar a la gente que la rodea, a prestar atención a sus necesidades o
comentarios para tomar de ellos lo mejor y con esa información pueda
trabajar para esos objetivos en común.

13. Solución de problemas

No puedes dejar que tus problemas sean un problema. En cualquier


ámbito las mujeres nos presentaremos frente a problemas; en casa, con
la pareja, en el trabajo, en el mundo que nos rodea, porque los problemas
existen y siempre será así; es por ello que una líder debe anticipar sus
problemas, siempre debemos tener presente que algo malo podría pasar
y por ende cuales serían las posibles soluciones a esos problemas;
debemos aceptar la verdad bajo las dificultades, puedes ser esa mujer
que rechaza aceptar los problemas, la que los acepta y soporta y la que
los acepta y trata de resolverlos, siempre trata de ser esta última.
Continuamente visualiza el panorama completo, no te encierres en el
problema, porque regularmente la solución estará fuera del contexto.
Trabaja una cosa a la vez; el mundo no se hizo en 1 día. Siempre realiza
aquellas actividades que ayuden a resolver el conflicto de un paso a otro.
Y jamás abandones una meta importante cuándo estas deprimida, porque
en ese momento no tenemos la mente clara ni pensamos objetivamente,
la mujer líder toma decisiones cuando está pasando por una etapa
positiva en su liderazgo, no durante las etapas oscuras.

14. Responsabilidad
El éxito en cualquiera escala requiere que asumas la responsabilidad; la
única cualidad que toda mujer de éxito tiene es la capacidad de asumir su
responsabilidad.
No seamos la victima de las circunstancias, ni de nuestro trabajo, pareja
o padres, esa mentalidad no nos llevará a un buen liderazgo; la mujer líder
asume sus responsabilidades y ve oportunidades en la adversidad.
Para que esto sea posible una mujer líder siempre deberá terminar lo que
comience, cada actividad que realicemos, por muy sencilla que parezca
debe tener una fecha de inicio y una fecha límite para culminarla, si nos
guiamos sobre ello, siempre terminaremos cada proyecto que iniciemos,
y bajo esa mentalidad podremos contagiar a los demás para hacer lo
mismo.
Las mujeres responsables jamás dirán “ese no es mi trabajo”, ellas están
dispuestas a hacer lo que sea necesario para completar el trabajo que
necesita la organización o el espacio dónde se encuentren.
La excelencia siempre será un motivador, la mujer líder que desea la
excelencia, y trabaja duro por alcanzarla, regularmente será una mujer
responsable.
15. Seguridad
Una mujer líder siempre confía en sí misma, en sus habilidades,
conocimientos, decisiones y talento; y si se mira insegura se prepara para
modificar ese sentimiento. Una mujer que carece de talento no puede
proyectar talento a los demás, y eso mismo sucede con la seguridad, todo
lo que somos es lo que proyectamos, por ende es importante ser una
mujer segura, y si carecemos de ello trabajar para que eso cambie.

16. Autodisciplina
A la primera persona que debes dirigir, es a ti misma.
Ahora como una mujer líder lo que menos tienes es tiempo, entonces lo
que realmente necesitas es un plan; si puedes determinar lo que es
realmente una prioridad y liberarte de todo lo demás es mucho más fácil
continuar con lo que es importante, esa es la esencia de la autodisciplina.
Incorpora la disciplina como una meta en todo lo que hagas, si tienes
actividades que debes cumplir todos los días sin falta, ten determinación
para hacerlas, evita las excusas y concéntrate en cumplir esas tareas que
te harán lograr el objetivo final, motívate para no rendirte y cumplir el esas
metas. Permanece concentrada en los resultados, fija tu energía y
pensamientos en la recompensa final y no en el proceso, para que tu
mente y tu cuerpo se enfoquen en llegar a la meta.

17. Servicio
La verdadera líder sirve. Sirve a la gente. Sirve a sus mejores intereses y
al hacerlo no siempre será popular, y quizás no siempre logre impresionar.
Pero debido a que las verdaderas líderes están motivadas por el interés
positivo en común, más que por un deseo de gloria personal, están
dispuestas a pagar el precio.
Una buena líder pensará primero en las personas que la rodean y como
servir para apoyarles que en ella mima. Y con ello recibirá una respuesta
positiva de sus seguidores, ya que ellos sentirán que no están sólo para
apoyar a su líder, si no que ella también está para ellos.
18. Aprender
Tu crecimiento determina quién eres.
Quien eres determina a quién atraes.
A quién atraes determina el éxito de tu organización.
Si quieres que tu organización crezca tienes que mantenerte
aprendiendo.

Para que esto sea posibles es importante recalcar que una buena liíder al
cumplir una meta u objetivo no se queda ahí, goza y disfruta el momento
pero siempre tendrá más retos en mente que superar para seguir
creciendo como líder. El éxito siempre debe superarse, si ya estás en el
escalón 9 de 10 sigue trabajando y luchando por llegar a ese escalón 10,
y una vez que estés ahí avanza, da un brinco al siguiente edificio, al
siguiente reto, a la siguiente travesía, lo peor que puedes hacer es
estancarte.
Siempre condúcete por el camino correcto, no tomes atajos que puedan
jugar en tu contra más adelante, no importa cuánto tarde e proceso, lo
importante es cumplirlo.
Una mujer líder siempre debe quitarse de encima el orgullo, una mujer
exitosa debe quitarse el orgullo para trabajar en el crecimiento constante
e ir aprendiendo en el camino.
Aprende de tus fallas y errores para que no vuelvas a cometerlos; una
líder aprende de todo lo que ha vivido, sus experiencias le dan el
conocimiento suficiente para dirigirse en la vida y trabajar por una mejora
continua.

19. Visión
Para una líder, la visión es todo. Es absolutamente indispensable; la visión
es lo que guía todo. Es ella la que marca la meta. Enciende y alimenta el
fuego dentro de él, y lo lleva hacia adelante. También es el encendedor para
otros que siguen a ese líder. Muéstrame un líder sin visión, y te mostraré
alguien que no va a ningún lugar.
La visión de una líder debe ser creada desde sí misma, desde su historia; la
visión nace desde nuestro pasado, de dónde estuvimos y lo que vivimos.
Nuestra visión debe ser de largo alcance, debe abarcar más allá de nuestros
objetivos, debe ir más allá de lo que un individuo puede lograr y debe incluir
a otros.
Uno de los más valiosos beneficios de la visión es que actúa como un imán;
atrae, reta y une a la gente. También reúne dinero y otros recursos. Mientras
más grande sea la visión, mayor el potencial de atraer a más ganadoras.
Mientras más desafiante sea la visión, más duro lucharán sus participantes
por lograrla.
Con todo lo anterior hemos rediseñado nuestro camino e identificación como
líder, ya sabemos que implica ser una líder, como piensa, como actúa, que
cualidades debe tener y cómo podemos ir desarrollando un liderazgo en
tacones de manera efectiva.
Sin embargo, nada de esto puede funcionar si no contamos con una
motivación de por medio, debo ser una líder motivada para poder cumplir mis
metas y objetivos, recuerda que somos reflejo de todo lo que somos y
pensamos, y la motivación también se contagia, por ende debemos estar
motivadas para transmitirlo a la gente que nos rodea.

1.2 ESTOY MOTIVADA

Motor, fuerza, energía, combustible, la motivación es lo que mueve e impulsa a


una mujer líder a lograr sus objetivos y metas. Y por más que al hablar de
motivación parezca que hablamos de un bien escaso, o de algo difícil de lograr,
en realidad TODAS tenemos la capacidad de estar y sentirnos motivadas, de
automotivarnos. La motivación está en todas, el ser humano es la única especie
capaz de automotivarse, depende de los intereses de cada persona en que
enfoca su motivación.

Cuándo enfocas todos tus recursos y pasiones en un solo objetivo, la motivación


será mayor que cuando divides tu atención en varios objetivos; puedes enfocarte
en varias metas u objetivos, pero aquel que sea el más importante y apasionante
será el que nos motive para cumplirlo.
Existen muchas teorías en cuanto a la motivación; sin embargo vamos a revisar
cómo se divide o determina la motivación.
La motivación se puede clasificar en dos tipos, de acuerdo a la ubicación de
aquello que nos motiva.

Existe la motivación extrínseca, esta hace referencia a que los estímulos


motivacionales vienen de fuera del individuo y del exterior de la actividad. Por
tanto, los factores motivadores son recompensas externas como el dinero o el
reconocimiento por parte de los demás. Un ejemplo de ello serian cuando un
individuo trabaja mucho para ganar más dinero.
Por otro lado, la motivación intrínseca hace referencia a la motivación que viene
del interior del individuo más que de cualquier recompensa externa. Se asocia a
los deseos de autorrealización y crecimiento personal, y está relacionada con el
placer que siente la persona al realizar esa actividad. Por ejemplo: un individuo
que asiste a los entrenamientos de su equipo de fútbol simplemente por el placer
que le supone practicar su deporte favorito.
La motivación intrínseca es el tipo de motivación más vinculado a una buena
productividad, ya que allí donde se da el individuo no se limita a cumplir los
mínimos necesarios para obtener la recompensa, sino que se involucra
personalmente en lo que hace y decide poner en ello gran parte de su empeño.
Es por ello que la motivación dependerá de lo que nos estimule, puede ser algo
externo a nosotros como el dinero o algo de manera más personal, como
practicar un deporte, cualquiera de esos escenarios nos producen placer o
alimentan nuestro sentido de satisfacción, por ende nos sentimos tan bien al
realizarlos.
Es importante que aprendamos a automotivarnos, por que la mujer líder no
requiere que otros la motiven, ella misma se hace responsable de ello.
A continuación les presentaré algunas estrategias que nos permitirán sentirnos
motivadas.
a) Ponte objetivos realistas
Al principio cuando establecemos los objetivos, solemos sobrestimar
nuestras posibilidades y tendemos a ponernos objetivos que
desgraciadamente no vamos a poder mantener y si fallamos en nuestros
objetivos la probabilidad de que nos desmotivemos aumenta por lo
que para mantener la motivación necesitamos establecer objetivos de
manera racional y adecuada.
Nuestros objetivos deben ser realistas, pero al mismo tiempo retadores,
para no aburrirnos en el proceso de cumplirlos; deben ser concretos y
medibles, específicos y medibles en cuanto a la fecha en que los vamos
a cumplir, y deben estar bien organizados a corto, mediano y largo plazo;
esto nos permitirá que sea más fácil cumplir nuestros objetivos.

b) Registra tus progresos


Nuestra memoria juega en contra de la motivación porque cuando
estamos en el proceso de conseguir un objetivo a veces no recordamos
de donde partimos y solo vemos lo que nos queda por hacer.
Así que si registras tus progresos desde el principio te darás cuenta de
cuáles son tus avances en el día a día y te ayudará ver cuáles son los
progresos que estás consiguiendo.

c) Date pequeñas recompensas


Una de las cosas que más nos ayuda a mantenernos motivados, es
recompensarnos cada vez que nos enfrentamos a nuestros objetivos y
más si nos enfrentamos a fases difíciles del objetivo.
Podemos darnos pequeñas recompensas ya sean materiales o
premiarnos con actividades que sean agradables para nosotros, por
ejemplo puede ser un paseo, una comida que nos guste o un baño
relajante.
Todo eso ayudará a mantenernos motivadas y enfocadas en el logro del
objetivo final.

d) Recuérdate tus motivos


Hay veces que cuando nos saturamos o nos frustramos con el objetivo,
corremos el riesgo de tirar la toalla.
En ese momento es importantísimo recordarnos porqué decidimos
ponernos ese objetivo. Por eso en cuanto te plantees el objetivo haz una
lista de cuáles son los motivos que te llevan a querer emprender ese
objetivo.
Sin importar cuál sea el objetivo o meta a cumplir, es importante tener
presente la razón por la cual queremos lograrlo, eso nos ayudará a estar
motivadas; el resultado que esperamos obtener de ello es nuestro motor
para hacerlo realidad.

e) Comparte tus objetivos con otros


Lo ideal sería que alguien tuviera el mismo objetivo que tú y así se
acompañarían en el camino. De esa manera podrían motivarse
mutuamente haciendo de ese objetivo una competencia sana.
Si no tienes a nadie con quien compartir el objetivo, no pasa nada, puedes
contarle a alguien cuáles son tus objetivos y que cosas estás haciendo
para llegar a ellos. Cuando hacemos nuestros objetivos públicos nos da
más reparo abandonarlos.
Puedes compartir tus objetivos y metas con tu familia, tu pareja, tus
amigos, etc. y al habar de ellos te sentirás más motivada a cumplirlos; el
externar nuestros planes muchas veces ayuda para continuar en el
proceso de cumplirlos.

f) Se constante aunque falles


Si en el proceso tiras la toalla y te desvías del objetivo, no pasa
nada. Tómalo como una señal de que tienes que revisar tu objetivo.
Si al revisar el objetivo te das cuenta de que no es muy realista, ajústalo.
Si al revisarlo ves que está ajustado entonces no te juzgues, no te lo
reproches y vuelve al objetivo. Es ahí donde pondremos a prueba nuestra
automotivación, ninguna mujer líder se motiva cuándo está en la cúspide
de sus emociones o logros, lo hace justo en este punto, dónde ha
flaqueado, es ahí donde debes motivarte a continuar.

g) Pide ayuda cuando flaquees


Si llega un momento crítico y estás al borde del abandono total, entonces
pide ayuda.
Puedes pedir ayuda a alguien en quien confíes para que supervise tu
objetivo y que cosas estás haciendo o dejando de hacer para conseguirlo,
o puedes pedir ayuda profesional para que te acompañe durante todo el
proceso. El pedir ayuda en el proceso no es malo, no quiere decir que no
tienes las habilidades, conocimientos o el talento para cumplir tu objetivo;
se trata de que una persona externa pueda apoyarte a ver algo que quizá
estas ignorando, que desde otra perspectiva pueda aconsejarte para que
llegues al logro de tus objetivos.

h) Refuérzate y no te critiques.
De la misma manera que recompensarte te va a ayudar a mantener la
motivación. Reforzarte y ser consciente de tus logros te ayudará a seguir
en el objetivo.
Evita criticarte cuando hagas algo mal o cuando las cosas no estén yendo
bien, eso lo que hará será restarte motivación. Entonces tu tarea será que
alabes tu labor y tu esfuerzo en la consecución del objetivo.

2. PLANEACIÓN, CONSTANCIA Y ORGANIZACIÓN

2.1 PLANEACIÓN

“La planeación es un proceso que comienza con el establecimiento de objetivos;


define estrategias, políticas y planes detallados para lograrlos, es lo que
establece una entidad para poner en práctica las decisiones, e incluye una
revisión del desempeño y retroalimentación para introducir un nuevo ciclo de
planeación”.

¿Por qué es importante tener una planeación?

 Nos ayuda a la prevención de alguna situación problemática o de crisis


 Nos ayuda a la priorización de ciertas actividades o tareas
 Nos permite gestionar nuestro tiempo
 Nos ayuda a la optimización de recursos
 Nos permite el desempeño eficaz de las personas que colaboran con
nosotros
 Nos permite la consecución de los objetivos y metas organizacionales
 Nos ayuda a afrontar adecuadamente los cambios
 Nos ayuda a disminuir la incertidumbre en la toma de decisiones

Es por ello que la planeación es una etapa de toma de decisiones


fundamentales para poder trazar el camino deseado hacia los objetivos que
deseamos cumplir. Para ello se toman en cuenta factores internos y externos
capaces de influir en el logro de las metas trazadas, los elementos de la
situación actual.
Para poder realizar una buena planeación es importante tener presente los
siguientes pasos fundamentales:

 Exploración de las oportunidades. Implica una evaluación del contexto y


de los recursos poseídos, como punto de partida para poder iniciar la
planificación de cualquier tipo de proceso.
 Establecimiento de los objetivos. No se puede planificar nada sin saber
primero cuáles son las metas que debemos alcanzar, lo cual es quizá el
punto más importante de toda la planificación, pues de ello dependerá lo
siguiente.
 Establecimiento de las premisas. Esto significa la evaluación de los
recursos disponibles, los caminos posibles y los eventuales mecanismos
a emplear para obtener los objetivos ya trazados. En esta etapa es
fundamental tomar nota de los posibles contratiempos y eventualidades.
 Evaluación de alternativas. Una vez considerados los caminos a tomar y
los recursos a emplear, es importante evaluar las posibles alternativas,
incluso aquellas que a primera vista no se vengan a la mente, para tener
un panorama lo más completo y amplio posible.
 Selección del camino a seguir. Luego de una evaluación total de las
posibilidades, llega el momento de la toma de decisiones, es decir, de
adoptar el plan establecido en los pasos previos y comenzar a ponerlo
en marcha, tomando nota de los imprevistos y retroalimentando la toma
de decisiones para poder contar con mecanismos de control.
 Formulación de planes derivados. El plan elaborado inevitablemente
requerirá de otros planes menores o paralelos, que se desprenderán de
la actividad misma y que deberán ser evaluados de manera individual,
repitiendo el esquema hasta aquí detallado y cuya resolución nos
acercará a los objetivos de nuestro plan principal.

2.2 CONSTANCIA

La constancia es la virtud de ser persistente en el intento de alcanzar una meta,


un objetivo o un cometido que deseen. Así, alguien persistente no descansa, no
cambia de rumbo y no deja de intentarlo hasta que, finalmente, lo consigue.
Demuestra determinación, compromiso, certeza.
La constancia es muy valorada entre las mujeres líderes, porque a menudo es
garantía del éxito. No porque las mujeres constantes no tengan tropiezos, o no se
enfrenten a obstáculos, sino porque su capacidad de mantenerse en el mismo carril,
sin cambiar de objetivos, eventualmente las hace sobreponerse a todas las
dificultades y conseguir lo que inicialmente se habían propuesto.
Lo contrario de una mujer constante, en este sentido, es una mujer inconstante, o
sea, inestable, voluble, incierta, inconsecuente.
Ya que sabes lo que quieres y a donde deseas llegar, lo único que queda es trabajar
hasta conseguirlo, ahí es donde la constancia entra como clave del éxito. Esas
pequeñas acciones que hacemos cada día, determinan comportamientos que se
quedarán en nosotras de manera casi automática y se convertirán en hábitos. ¡Y
esos hábitos serán tu destino!
No importa si hablamos de tu destino laboral o personal. Si eres constante tendrás
éxito.

-Si quieres tener éxito en ventas, se constante con tus llamadas o mensajes, en tus
cursos, con tus publicaciones, con tus clientes.
¡La clave está en durar 30 días seguidos haciendo algo y verás grandes cambios!
No hay otro secreto para el éxito, solo tienes que ser constante en todo lo que te
propongas.
2.3 ORGANIZACIÓN

Para una mujer líder la organización debe ser la capacidad de ordenar las cosas en
función al significado que tienen para ellas. Si tienes un conjunto de materiales de
construcción apilados en un lugar concreto, es porque has decidido que tiene
sentido para ti y has concluido que deben estar ahí, eres organizada.
Todas podemos decir en cierto sentido que somos organizadas, sin embargo es
importante que poner en práctica los siguientes tips para fomentar y ampliar nuestro
nivel de organización.

 Reduce antes de organizar. Si tienes el armario lleno de ropa, por ejemplo,


por muchos organizadores que pongas seguirás teniendo el armario lleno de
ropa. Igual pasa con tu tiempo, tus tareas o tus proyectos. La
solución: reducir, eliminar y simplificar. Si tienes un armario con 100 prendas
y te quedas con 33 y tiras las que ya no usas, ya no necesitarás un
organizador. Lo mismo pasa con la organización del tiempo: si tienes 20
cosas para hacer hoy y las reduces a solo las tres tareas más importantes,
ya no necesitarás un horario. Así que saca todo de tu armario o cajón o
cualquier otro contenedor (incluso tu horario), límpialo y vuelve a poner,
únicamente, aquellos artículos que realmente te encantan y usas
regularmente. Deshazte de todo lo demás.

 Usa listas de tareas. Usa alguna aplicación o libreta para apuntar todas las
tareas que tienes pendientes, separadas por contextos. Libera tu mente y no
olvidarás nada.

 Escríbelo, siempre. Nuestras mentes son algo maravilloso, pero dejan pasar
cosas como un filtro. No recordamos las cosas cuando las necesitamos
recordar y continuamente las recordamos cuando no las necesitamos. En
lugar de usar tu mente como un depósito de cosas que necesitas
recordar, escríbelas.

 Ten un lugar para todo. Procura tener un lugar para cada cosa en tu vida.
¿Dónde van tus llaves? Deberías tener un lugar para ellas (cerca de la puerta
es el mejor sitio) y nunca las perderás de nuevo. ¿Dónde van tus lapiceros?
¿Y las revistas? Enseña a tus hijos a tener un lugar para cada juguete o
cualquier otro artículo en sus habitaciones, cada cosa debe tener un lugar, y
si no lo tiene, necesitamos escogerle uno. Así, si encuentras algo en tu mesa,
en tu cama o en tu escritorio, sabrás que no pertenece allí. El mismo concepto
aplica para la información: ¿Tienes un lugar dónde poner toda tu
información? Si no, usa alguna aplicación o herramienta donde puedas crear
páginas para cada tipo de información de tu vida – horarios, metas, tareas,
películas para ver, libros para leer, notas sobre proyectos, etc.

 Escribe tus tres tareas más importantes y hazlas. Escribe diariamente las tres
tareas más importantes del día, y comprométete a hacerlas. Al cabo de un
año habrás hecho una gran cantidad de tareas, créeme.

 Haz una cosa a la vez. La multitarea es antiproductividad (me costó tiempo


comprender esto). Focalízate en lo que haces y cuando termines, empieza
con otra actividad.

 Hazlo ahora. La procrastinación es uno de nuestros mayores problemas a la


hora de sacar trabajo adelante y organizarnos.

 Aprende a decir no. Si tenemos la agenda apretada y seguimos diciendo sí


a eventos, reuniones, cumpleaños… nuestra vida será de todo menos
organizada.

 Limpia sobre la marcha. Este hábito es efectivo porque es mucho más fácil
limpiar las cosas mientras trabajas o mientras avanza el día que dejarlas
apilar y luego hacer una sesión de limpieza después. Por ejemplo, si estás
cocinando, trata de lavar los platos al irlos usando, luego limpia todo, en vez
de dejar un gran desorden. El mismo principio se aplica a todo lo que
hacemos. Si es más fácil hacerlo en pequeños pasos, más probablemente lo
haremos. Si hay un gran desorden por limpiar, más fácilmente nos intimidará
o abrumará la tarea y la dejaremos para después.
 Establece rutinas y sistemas. Si ya tienes todo limpio y organizado, te podrás
sentar y disfrutar del placer que ello brinda. Ser organizado y tener un
ambiente de trabajo o un hogar simplificado es tremendamente satisfactorio.
Pero el problema es que al cabo de un tiempo, las cosas tienden a
desorganizarse y revolverse otra vez. La solución: necesitas establecer
sistemas para mantener el orden. Por ejemplo, el procesamiento de la
bandeja de entrada mencionada antes es un sistema: tienes procedimientos
específicos para procesar todos los papeles entrantes, y tienes una rutina
para hacerlo (una vez al día). Todos los sistemas siguen el mismo esquema
– procedimientos específicos y una rutina que se hace a intervalos
determinados (tres veces al día, una vez al día, una vez a la semana, una
vez al mes, etc.). Es importante que identifiques los sistemas que tienes en
tu vida y los escribas para que así los puedas hacer eficientes, simples y
organizados. Desarrolla sistemas para tratar con el papeleo y el email, con
los niños, con tus horarios, con la compra, la colada, las tareas, el ejercicio y
todo lo demás. Una vez que esos sistemas están implementados, necesitarás
estar pendiente de mantenerlos en marcha, y así tus cosas se mantendrán
organizadas.

 Simplifica, simplifica, simplifica. Muchas de las tareas, cosas y eventos que


hay en nuestra vida no son necesarias, y no nos acercan a lo que es más
importante para nosotros. Simplifica todo lo que puedas tu vida y será mucho
más fácil organizarte.

Estos son los consejos más utilices jamás proporcionados para ser una mujer
líder y organizada, ponlos en práctica y después me cuentas si estos conceptos
cambiaron tu vida tanto como la mía.
3. IMAGEN Y MARCA PERSONAL

3.1 IMAGEN

Nuestra imagen personal es una parte esencial de lo que somos. Es una forma
de comunicar al mundo quiénes somos y qué pensamos de nosotras mismas.
De hecho, es mucho más que nuestro aspecto: nuestra imagen personal también
se refiere a cómo nos comportamos y cómo nos desenvolvemos en situaciones
sociales.

La imagen personal que transmites a través del lenguaje verbal y no verbal


revela muchos de tus atributos: personalidad, estilo de vida, edad, autoestima,
grado de exposición a las redes sociales, complejos, seguridad,
autoconocimiento, gusto estético, comportamiento y comunicación.

La imagen personal es el conjunto de características físicas, atributos y actitudes


que proyecta una persona y que los demás perciben. Es una carta de
presentación que expresa la manera como cada persona pretende comunicarse
y lo que transmite su presencia. Inevitablemente, la imagen personal es un
mensaje que termina siendo percibido por el interlocutor silenciosamente.

Todas tenemos una imagen que refleja individualidad, personalidad; perceptible


a través de los sentidos, por lo que posee un componente subjetivo, emocional
que genera actitudes y opiniones. De allí, la importancia de la huella que deje la
primera impresión.

Además, identidad e imagen personal se relacionan a través de un lenguaje no


verbal, expresando atributos que particularizan a una persona y evidenciando
aspectos como: cuidado de su imagen, personalidad, estilo de vida, edad y
aceptación de sí misma, grado de exposición a las redes sociales, complejos,
seguridad, autoconocimiento, gusto estético, comportamiento y comunicación,
sentido del protocolo. Por ello, constituye un aspecto importante al relacionarse
con los demás, ya que una imagen personal descuidada revela poco aprecio por
sí mismo.

La imagen personal es el punto de partida en los conceptos de identidad y marca


personal. Por ello, si estás pensando en fortalecer tu proyección como mujer
líder, es importante que tu imagen personal vaya de la mano con lo que piensas
y quieres lograr; el proyectar una imagen positiva y enfocarte en la creación de
tu propia marca personal, te catapultarán a ser una mujer líder de éxito.
3.2 MARCA PERSONAL

Desarrollar una marca personal consiste en identificar y comunicar las


características que nos hacen sobresalir, ser relevantes, diferentes y visibles en
un entorno homogéneo, competitivo y cambiante

El poder de la marca está relacionado con la capacidad de influir, no de ejercer


la fuerza. Las marcas personales más poderosas son aquellas que quedan en
los caminos poco transitados, por eso descubrir y desarrollar una marca personal
requiere tiempo, esfuerzo, paciencia y método. Por lo tanto, es la gestión
adecuada y consciente de las percepciones, los recuerdos y las expectativas
que queremos generar en los demás. Se podría decir que, en definitiva, es la
huella que dejamos en la mente de los demás.

¿Por qué es importante crear nuestra marca personal?

Porque logra diferenciarnos, incluso quizás posicionarnos entre los líderes en tu


nicho, pasas de formar parte de la excesiva oferta (que son los CVs tipo “uno
más”, incluso aquellos llenos de excelentes títulos y credenciales) a formar parte
de un club mucho más apetecible que es el lado de la demanda.

¿Cómo construir tu marca personal?

Desde el primer momento en el que un usuario crea su primera cuenta en Twitter,


Instragram, Facebook u otra red social, pasamos a crear nuestra marca
personal, ¿Por qué no utilizarla de forma efectiva para obtener beneficios
positivos? Debemos posicionarnos nosotros mismos, así como estar en los
canales adecuados, crear una imagen propia y fiel que muestre nuestros valores
y creencias.

 Conócete a ti misma
Antes de crear tu propia marca personal debes de conocerte a ti mismo,
¿en qué soy bueno?, ¿Qué me hace diferente al resto de las personas?
¿Qué habilidades poseo? ¿En qué medio me siento más a gusto? Una
vez respondidas estas preguntas podemos pasar al siguiente punto.

 Cuál es tu nicho de mercado


Debes posicionarte, especializarte, cuanto más estrecho sea tu nicho más
fácil será diferenciarte del resto y poder destacar de los demás. Sin
embargo cuanto más abarque tu nicho más competencia tendrás y más
difícil es destacar.

 Cuál es tu objetivo
Debes definir tus objetivos, colocarte en la casilla de salida no sirve de
nada si no sabes dónde está la meta, tus objetivos dependerán de la
situación en la que te encuentres, puede ser conseguir un empleo,
promocionar en tu trabajo, o introducirte en un nuevo sector profesional.

 Nombre
Es el paso por el cual se desarrolla y crea el nombre para una marca. Es
necesario que este nombre que le demos a la marca logre despertar el
deseo de nuestro público y que resulte eficaz a la hora de posicionarnos.
Debemos conseguir que nuestro nombre sea único, ser diferentes, breve,
por supuesto que sea pronunciable y si pudiera ser que tenga algo que
ver con las características de nuestro servicio

 Necesitamos un centro de operaciones


Se necesita tener una página web donde todo el mundo consiga
encontrarte y saber más de ti, tus productos o servicios…Debemos utilizar
un dominio claro, un diseño sencillo y atractivo donde los clientes
potenciales puedan estar cómodos y encontrar el producto deseado sin
que les lleve demasiado tiempo navegando, tener actualizada la web.

 Estar presente en los canales de Social Media


Los canales más importantes en los que se debe estar presente pueden
ser Twitter, Facebook, Youtube, Instagram o bien plataformas dónde
encuentren publiques tu CV… también se debe estar al día en los blogs
de tu nicho, poner comentarios, responder preguntas…
Dichas redes sociales representan un espacio donde expresar todo
aquello que un curriculum no puede reflejar.
Además los buscadores, valoran mucho las primeras posiciones de los
resultados al ejecutar una búsqueda simple.
Sea cual sea la red social, estas son algunas recomendaciones a tener
en cuenta:
 Debes tener claro el objetivo: Debes saber por qué y para qué
participas en la red social en cuestión.
 Incluye una foto de perfil: Siempre da más confianza tener una foto
de perfil, hay que cuidar la vestimenta y el fondo.
 Completar al máximo tu información de perfil: Rellenando esta
información tienes la oportunidad de presentarte, de darte a
conocer, tus gustos, conocimientos, logros…
 Compartir contenido de forma inteligente, constante.
 Debes ser proactivo, llevar la iniciativa.

 Construir una red de contactos


Construir relaciones con personas de tu entorno profesional con las
cuales puedas hacer negocios ahora o bien en un futuro, o aquellas
personas que puedan apoyarte o impulsarte en el cumplimiento de tus
metas y objetivos. Por esto es muy importante el networking a la hora de
la construcción de nuestra marca personal, es una herramienta que cada
vez va ganando más peso en las empresas y dando mayor valor a los
profesionales que poseen una buena red de contactos.

El crear tu propia marca personal será trabajar en todo aquello que te identifica, que
te hace diferente al resto de personas que te rodean, y para ser una mujer líder
debes sentirte esa líder, trabajar en construir tu imagen como una mujer líder,
apoyarte de la planeación, organización y constancia para lograr tus objetivos;
plantearte la imagen que quieres representar y construirla en base a tu confianza, a
tus experiencias y conocimientos; recuerda que reflejamos lo que somos, y la
imagen de una mujer líder debe coincidir con lo que piensa, con lo que siente, en lo
que cree y hacia donde va.
Con todas estas herramientas y conocimientos puedes iniciar con la creación de
una mujer líder, con la certeza que lograra todo lo que se proponga porque ya sabe
el camino que debe tomar, se conoce a sí misma y sabe cuáles son sus cartas
fuertes, trabaja en mejorar aquello que necesita modificar, pero no se estanca en
eso, planea cada uno de sus pasos para poder cumplir sus objetivos y metas a
corto, mediano y largo plazo.

Ahora que tienes todos estos conocimientos, te doy la bienvenida al mundo del
liderazgo en tacones.

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