Fascismo y Nazismo 2020

Descargar como doc, pdf o txt
Descargar como doc, pdf o txt
Está en la página 1de 2

Los Regímenes Totalitarios entre las Guerras Mundiales: Estalinismo, Fascismo y Nazismo

El Estalinismo en la URSS
STALIN, José
*Biog. Hist. * Político ruso, cuyo verdadero nombre era José Vissarionovich Dzugashvili. Militante bolche -
vique desde 1903; después de la revolución de 1917, en la que participó activamente, fue colaborador de
Lenin. En 1922 se hizo cargo de la secretaría general del Partido Comunista y en 1924, muerto Lenin, asu-
mió el poder, aniquiló la oposición encabezada por Trotsky e inició sus planes económicos de industrializa -
ción y colectivización. En 1941, al ser atacada la U.R.S.S. por Alemania, asumió la jefatura suprema del
ejército y condujo la defensa de su país hasta infligir a los alemanes la gran derrota de Stalingrado. Escribió
Cuestiones del leninismo; La cuestión obrera y los problemas coloniales, y otras obras de teoría marxista
(1879-1953). Su gobierno se caracterizó por el culto a su persona, nacionalismo y un terror policíaco y
de represión implacable que llevó a la muerte a millones de opositores.

El ascenso del Fascismo en Italia

En este contexto, surgió la figura de Benito Mussolini, quien había


sido un importante militante del Partido Socialista Italiano y comba-
tiente en la guerra. En 1919, Mussolini creó una agrupación militar y
política, que fue denominada los fasci di combattimento. Veteranos
de guerra, estudiantes nacionalistas y algunos sindicalistas integraban
estos grupos, que atacaban violentamente a sus adversarios, ocupa-
ban las sedes de los gobiernos municipales y destruían los locales de
los sindicatos y del partido socialista. Entre 1920 y 1921, los fascistas
fueron aumentando en número y agresividad. Debieron su nombre a
la antigua insignia de cónsul romano que llevaban: fasces o haces.
En su intento por llegar al poder, Mussolini creó el Partido Nacional
Fascista que, en las elecciones de 1921, obtuvo algunas bancas en el
Parlamento. Tiempo después, Mussolini decidió la toma del poder por
la fuerza y organizó una gran movilización de sus partidarios hacia la capital del país. En octubre de 1922, se inició la "Mar-
cha sobre Roma", que culminó cuando el rey Víctor Manuel III nombró a Mussolini primer ministro.
En el período transcurrido entre 1922 y 1925, Mussolini logró asegurar la evolución hacia un Estado dictatorial y de
partido único, y obtener el control total del poder: clausuró el Parlamento, disolvió los partidos políticos, terminó con la li -
bertad de prensa e instauró la pena de muerte.

Estado, Iglesia y economía

Mussolini perseguía el ideal de un Estado corporativo. Este nuevo Estado se basaba en la


idea de que el trabajo conjunto de los representantes de los obreros y de los patrones, bajo la
tutela estatal, eliminaría la lucha entre capital y trabajo. Las corporaciones se constituían por
rama de actividad: metalúrgica, química, vitivinícola, etcétera, y -desde 1926- estaban controla-
das por un Consejo Nacional de Corporaciones y un Ministerio de Corporaciones. Sin embargo,
el corporativismo fascista no logró funcionar a pleno. Los industriales, por ejemplo, se oponían
a él porque pensaban que podría darles demasiada influencia a los trabajadores. De hecho, el
sistema sólo sirvió para que se suprimiera el derecho de huelga y para que la representatividad
obrera perdiera legitimidad, ya que sólo podían participar en él los miembros de los sindicatos
fascistas.
En un intento por ampliar la base de apoyo de su régimen, Mussolini buscó el entendimien -
to con la Iglesia Católica, que concretó en 1929 con la firma de los Pactos de Letrán, que otorgaban importantes conce-
siones a la Iglesia que permitió la creación del Estado Vaticano.
Hasta la crisis del '30, el gobierno fascista siguió una política liberal, en la que el Estado tuvo una escasa intervención.
En la concepción fascista, el éxito económico se alcanzaba básicamente por fuerza de voluntad. La vida económica era vista
como un campo de batalla en el que las fuerzas fascistas debían triunfar. Así, por ejemplo, los planes para que el país se au-
toabasteciera de trigo y para detener la caída del valor de la lira se denominaron la “batalla del trigo” o la “batalla de la lira”,
respectivamente.
Los efectos de la crisis del '30 hicieron que el Estado interviniera más activamente en la economía a través de la
implementación de políticas proteccionistas y del otorgamiento de créditos para la industria.
La caída del régimen fascista

En 1937, Mussolini viajó a Berlín y firmó una alianza con Hitler, hecho que embarcó a Italia
en la Segunda Guerra Mundial, al lado de los nazis. Pero la intervención italiana en la guerra
no fue exitosa y generó fuertes resistencias dentro del país. Con la mayor parte de la socie -
dad en contra de la participación italiana en la guerra, en 1942, el rey y el Gran Consejo Fas-
cista decidieron destituir y encarcelar a Mussolini y entablar conversaciones con los aliados.
Mussolini fue liberado de su prisión por los alemanes y, por poco tiempo, encabezó un régi-
men controlado por los alemanes en el norte de Italia, la República Social Italiana. En 1945,
Mussolini fue arrestado y ejecutado por un grupo de partisanos italianos.

2
La Alemania Nazi

En 1923, la débil república alemana debió enfrentar una grave crisis


económica. La inflación se aceleró de manera brutal –el precio del pan, por
ejemplo, aumentó de veinte mil marcos a cinco millones en un día- y empo-
breció a la mayoría de la población alemana. En la misma época Francia ocu-
pó los territorios alemanes de la región del Ruhr y provocó la reacción de los
nacionalistas alemanes.
En medio de la crisis, se produjeron intentos de derrocar al gobierno.
Los comunistas intentaron una revolución en Sajonia y los grupos militares de
la derecha intentaron dos golpes, uno en Berlín y otro en Munich. Este último
fue encabezado por Adolf Hitler, jefe del Partido Nacional-Socialista Ale-
mán (NAtional-SoZIalistische). Hitler no consiguió su objetivo y fue apre-
sado. Durante los meses que pasó en la cárcel, escribió el libro que condensa-
ba su ideología racista: Mi lucha.
A partir de 1925, luego de su detención por el intento de golpe de Estado
de 1923, Hitler se abocó a la reorganización del Partido. Sus adeptos provenían, básicamente, de la clase media baja urbana
y rural. Pronto consiguió incorporar también a algunos profesionales, a la clase media alta y, en menor medida, a los secto -
res obreros. En 1930, cuando la crisis económica mundial volvió a golpear con dureza a la economía alemana, Hitler estaba
preparado para actuar.
En las elecciones de julio de 1932, los nazis aumentaron el número de sus representantes en el Parlamento, lograron
ocupar el primer lugar en él y se constituyeron como el segundo partido de Alemania. Al mismo tiempo, crecían el desem -
pleo y la violencia callejera entre grupos paramilitares de derecha e izquierda. El Parlamento se hallaba totalmente bloquea -
do y los conflictos entre los dirigentes políticos de la socialdemocracia y el comunismo volvían imposible cualquier alianza
para frenar a los nazis. En estas circunstancias, en enero de 1933, el presidente Hindenburg nombró a Hitler canciller de
Alemania. Hitler llegó al poder de manera legal pero, una vez en el gobierno, estableció un nuevo régimen, cuya ley funda -
mental era su propia voluntad.
Las ideas nazis

El nacionalsocialismo llegó a representar a un amplio sector del pueblo alemán. Los nazis se pre -
sentaban como un “partido del pueblo”, situado por encima de las luchas entre facciones y los conflic -
tos de clase que se habían repetido durante el período anterior, y prometían terminar con las divisio -
nes que destruían la sociedad alemana. El hecho de ser conducido por un “hombre fuerte”, esperado
por muchos alemanes en el marco de la crisis política y social, le permitía al nacionalsocialismo mos -
trarse como el partido salvador de Alemania.
Los nazis se definían a sí mismos como anticapitalistas, anticomunistas y racistas. Muchos alema-
nes que sufrían el desempleo o que no disponían de crédito o de dinero, en medio de la crisis mundial
de los años 30, se identificaron con la hostilidad manifestada por los nazis hacia los grandes bancos y hacia lo que ellos lla -
maban “el capitalismo financiero judeo-internacional”.
Por otro lado, el nazismo expresaba un nacionalismo fanático; postulaba la formación de una nueva comunidad na-
cional, espiritual y racialmente homogénea, que devolvería a Alemania su grandeza y acabaría con las humillantes disposi -
ciones del Tratado de Versalles luego de la derrota de la Primera Guerra Mundial. Esa nueva comunidad nacional estaría in -
tegrada por todos los alemanes dispersos en otras naciones (pangermanismo), mientras que excluiría a los judíos y a los
bolcheviques. El pangermanismo nazi era, a su vez, el fundamento de una actitud imperialista: Hitler buscaba expandir el
espacio vital (Lebensraum) de Alemania hasta el mundo entero.
Hitler y el holocausto judío
El Estado hitleriano planificó el exterminio de los ju-
díos y lo justificó afirmando que formaban parte de una
raza inferior. El antisemitismo no era un fenómeno exclu-
sivamente alemán: desde fines del siglo XIX se había ex-
tendido entre los habitantes de otros países de Europa.
La idea de la “superioridad racial” ya había sido sostenida
por los ingleses para justificar la dominación de pueblos
africanos y asiáticos. Sin embargo, el odio racista nunca
antes se había llevado a la práctica de manera tan siste-
mática y brutal.
Hitler llamó la "solución final" a su plan de exterminio
de los judíos. Antes de consumar la matanza, los judíos
fueron privados de sus derechos como ciudadanos y obli-
gados a vivir en barrios llamados “guetos”, cuyos límites
no podían traspasar. Allí vivían confinados y condenados
a sobrevivir penosamente, hacinados y hambreados. Lue-
go, eran fusilados o llevados a campos de concentra-
ción que estaban diseminados por Alemania y Polonia. En estos campos, alrededor de seis millones de judíos, cientos de
miles de gitanos y homosexuales, y también miles de opositores políticos fueron obligados a trabajos forzados y luego
muertos en las cámaras de gas.
Actividad:
1. Resume la vida y obra de José Stalin. ¿Por qué era un Régimen Totalitario?
2. ¿Qué eran los los fasci di combattimento? ¿Cómo llegó Benito Mussolini al poder y en qué consistió su Estado dictatorial?
3. ¿Qué ocurrió en Alemania en 1923? ¿Qué salidas revolucionarias se intentaron para salir de la crisis?
4. ¿Cómo llegó Hitler al poder? ¿Qué ideas definían a los Nazis?
5. ¿Cómo justificaban los nazis el exterminio de los judíos? Realiza una valoración personal.

También podría gustarte