CAPITULO IV

KANTYLA FUNDAMENTACION DE
LA ESTETICAAUTONOMA

La Crftica de la facultad de juzgar (1790), de Emmanuel Kant (1724-1804),

es un texto clave en la historia de la Estetica. Su merito reside en haber dado
el mas s6lido fundamento, hasta entonces alcanzado, a la autonomia de esa
disci plina, distinguiendola de la teoria del conocimiento y de la etica. A
diferencia del empirismo ingles, Kant busca un fundamento a priori, necesario y
universal, convencido de que la justificaci6n de caracter factual no podra
nunca imponer nos de su necesidad. Es imposible comprobar que todos los
"buenos criticos" (Hume), frente a un mismo objeto, deban tener identica o
similar experiencia
de la belleza y del arte. De este modo, el "sujeto trascendental",* referido al co
nocimiento a priori, substituye al "sujeto empirico" de Joseph Addison, Ed
mund Burke o David Hume.

1. Apro:ximaci6n a la filosofia kantiana

Por mas de un motivo, Kant es considerado un fil6sofo de la Ilustraci6n (la

Critica de la facultad de juzgar fue publicada un afio despues de la Revoluci6n
Francesa). Dice Marc Jimenez:

Fuera de! anuncio y del estallido de la Revoluci6n Francesa, pocas cosas

pare cen haber sacudido la serenidad de! ermitaiio de Konigsberg (se dice que
ella lo habria conducido a invertir el sentido de su paseo matinal).'

Kant no habria podido desechar la reflexion estetica porque la Estetica es

marca de Modernidad. Admirador de la Revoluci6n Francesa y de sus ideales de
libertad, escribe en 1784 " Que es la ilustraci6n?". La frase que da comienzo
al texto dice asi: "La Ilustraci6n es la liberaci6n de! hombre de su culpable incapa
cidad".' Esta incapacidad, que hace que el viva como en minoria d edad,
con-
 • Trascender\tal es todo conocimiento que se ocupa no tanto de las objetos coma de nuestro
modo de conocerlos, en cuanto este modo de conocerlos debe ser posible a priori.
 KANTY LA FUNDAMENTACI6N DE LA ESTETICA AUT6NOMA 171
ESTETICA

El primer parrafo de la lntroducci6n a la Critica de la raz6n pura

siste en la imposibilidad de servirse de su inteligencia sin la ia_de ot:o.!al
(segunda edici6n) se inicia con la tesis de que "todo nuestro conocimiento
in capacidad es culpable porque la causa no esta en la falta de mtehgenc1a
smo en comienza con la experiencia". El segundo parrafo expresa que "no por ello todo el
procede de la experiencia". Del hecho de que nuestro conocimiento, en el
la falta de decision y valor para usarla. . , ,
orden de! tiempo, "comience con" la experiencia nose sigue que "proceda
"Sapere aude! jTen valor para servirte de tu prop1a razon!: e aqm el _lema
de la Ilustraci6n", dice Kant.' De esta manera, revela la influenc1a del de" ella. En efecto, si bien para conocer siempre tiene que haber algo que
nos venga al encuentro (las sensaciones o impresiones), esto no basta para
rac10na lismo cartesiano en el siglo XVIII, influencia que tambien pudimos
que haya conocimiento. Ese fue, segun Kant, el gran error de los empiristas:
detectar en Alexander Baumgarten. El fundador de la Estetica, recordemos,
creer que con meras impresiones sobre la mente como "tabula rasa", y nada
habiaestu diado con Wolff, quien recibe influencia de Leibniz, y estea, su
masque con ellas, se puede dar el co
vez, de Des-
cartes. , fi d 1 nocimiento.Segun Kant, hace falta el fundamento a priori, independiente de
El desarrollo de la Estetica en el siglo XVIII responde al marco filoso 1c e
racionalismoy del empirismo; pero correspondera agregar, con Kant, un la experiencia. Es decir que hacen falta las intuiciones puras (espacio y
tiempo) y los conceptos puros del entendimiento (categorias) y de la raz6n
1smo mas: idealismo. Es este un sistema filos6fico cuyo centro no es el
(ideas). Ob s rvemos ue "a priori" no significa anterior -en el tiempo- a la
mundo exte rior sino el sujeto, el "yo", la conciencia, la mente, el espiritu.
experiencia, smo antenor en el orden -atemporal- de la fundamentaci6n.
Debe1:1os obser var que los autores idealistas (Plat6n, Kant, Hegel, entre
otros) sosnenen doc trinas muy distintas y que cuando se habla de "idealismo'.', es
frecuen e entender "idealismo aleman" de los siglos XVIII y XIX (Kant,
LA TERCERA CRfTICA
Fichte, Schelling, Hegel, principalmente). Se suele considerar que el
idealismo aleman comienza n 1781
con la Critica de la raz6n pura, de Kant (idealismo trascendental)y, culmma con
Hegel (idealismo absoluto), lapso en el que Alemania asciende al primer Las dos primeras Criticas -Critica de la raz6n pura y Critica de la raz6n
practica (1788)-pusieron de manifiesto la separaci6n entre fen6menos y nou
rango de la especulaci6n filos6fica. , .
La revoluci6n que introduce Kant en la filosofia fue comparada, por el m1 - menos, mundo sensible e inteligible, entendimiento y raz6n, necesidad y
mo, con la d.eCopernico y su sistema del mundo heliocentrico. Dentro del cr liber tad, ser y deber ser, naturaleza y moral. La Critica de la facultad de juzgaro
ticismo* su "revoluci6n copernicana" consiste en demostrar que el conoc1- "ter cera critica" intentara zanjar el abismo entre esos terminos,
miento o esta determinado por los objetos externos sino por elsujeto.• En la concentrandose no en el conocimiento (cientifico) ni en la creencia o femoral
Critica de la facultad de juzgar esa "revoluci6n" se pone particularm nte sino en la facultad de juicio o simplemente en el Juicio (con mayuscula en
ere lieve, en cuanto que el predicado del juicio de gusto refiere no al obJeto algunas traducciones; mas exactamente, en el "juicio reflexionante" (vease
smo al infra).
Proyectada e iniciada como Critica de] gusto,6se considera que la Critica de
sentimiento del sujeto.
Kant socava de manera terminante los cimientos "realistas" del empirismo la facultad de juzgar (tambien traducida con el titulo mas conocido de Critica
y del racionalismo. Para las filosofias r,ealistas l,o. ete min nte res ltaba se e de] Juicio y tambien, mas recientemente, con el de Critica def discernimiento)'
objeto, la cosa misma (cosa = res en latm; de alh, reahsmo ). El s Jeto -rac1? es el punto culminante de toda la Estetica del siglo XVIII. No es esta la primera
nal empirico- podria ser comparado con un espejo en que el obJeto se vez en, ue Kant analiza la "experiencia estetica".8 Ya lo habia hecho en la etapa
pre-cntlca, en un trabajo de orientaci6n antropol6gica, Observaciones sabre el
O
refleJa.
Retomando la meta.fora de M. H. Abrams que da titulo al libFo El espejoY la vernentes esta
lampara,5 podemos decir que para el id alismo, el ujet es m s bien una "lam dedicada la Critica de la raz6n pura.
para" que ilumina el objeto. No es un simple refleJO de este, smo aquello que lo
hace aparecer. . . , \ • Se entiende par "criticismo" la teoria de! conocimiento kantiana, que consiste funda t;iren,e en la
Para construirsubjetivamente el ambito de la objetiv1dad, Kant criticade la facultad de! conocer yen la investigaci6n de las condicionesde pos1bih-
cons1derara
dac1de! conocimiento.
tan importante la experiencia como la raz6n. El dato _sensible esi Frescind_ible
porque "despierta" la facultad de conocer. Por eso, dice K . t, q : pens
m1en tos sin contenido son vacios". Pero tambien afirma que mtmc1ones
sm con ceptos son degas". Asi, la primera expresi6n da cabida al empirism ;
la segun: da, al racionalismo. A dilucidar la confluencia de estas dos
sentimiento de lo bello y de lo sublime (1764).
La Crftica de]Juicio o, de acuerdo a la traducci6n que hemos
elegido, Critica de la facultad de juzgar (CF!), presenta dos
ambitos de problemas intimamente c?nectados: el de los juicios
esteticos (de lo bello y de lo sublime) y el de los jui c10s
teleol6gicos (vease infra). Es decir que la obra no esta dedicada
exclusiva mente a la Estetica, sino que supone un cierre de todo
el pensamiento fil6sofi co kantiano. Muchas veces, se descuida
injustamente la segunda parte de! texto de Kant titulada "Critica
de la facultad de juzgar teleol6gica". Sin embargo, es la que da
verdadera significaci6n a toda la obra. Sefiala Marc Jimenez:

El p_roblema e Kant no es tanto la belleza natural, las bellas

artes, el gusto, el gemo, lo sublime, etc., sino la cuesti6n de la
finalidad y de la libertad. Launa no va sin la otra. La libertad de
juzgar no sirve para nada si no tiene por finalidad la realizaci6n
de un estado donde todos puedan darse los medias de acceder a
la
 ESTETICA
KANTY LA FUNDAMENTACI6N DE LA ESTETICA AUT6NOMA 17

libertad y de tener la posibilidad de ejercerla. Esto es porque el acto de

identidad de los terminos, lo que hace innecesaria su confirmaci6n en la exp •
juzgar, de evaluar las obras de arte -o !=Ualquier otra cosa humana-
riencia. Son entonces a priori.
permanece fun dador de un espacio de autonomia.•
Al ser a priori, los juicios analiticos son necesarios y universales (la nee I■
dad y la universalidad van siempre juntas). Necesario es lo opuesto a contin
Las ideas esteticas kantianas no estan desligadas del problema de la
gente y universal, lo opuesto a particular; es lo que vale en todos los casos, It
finali dad y de la libertad. Paul Guyer'° analizara la relaci6n entre estetica y
que no tiene excepciones. Aunque siempre verdaderos, los juicios analiticos no
moralidad
y mostrara que el desinteres del juicio de gusto se transforma en experiencia amplian nuestro conocimiento. Si lo hacen los juicios sinteticos, en los qu
de libertad. De este modo, la Estetica se convierte en compafiera esencial de
la moralidad misma. I predicado no esta incluido en el sujeto. Es el caso de "la mesa es blanca". Est
Son muchos los que observan que las teorias expuestas en la CF] pueden juicios son a posteriori; requieren que su verdad o falsedad sea confirmada n
resultar demasiado complicadas y parad6jicas. Sin embargo, era la experiencia.
previsible que de las especulaciones de Kant resultase una teoria compleja y Ademas de juicios analiticos a priori y sinteticos a posteriori, existen Jul•
ademas pa rad6jica ya que la naturaleza de la experiencia estetica es cios sinteticos a priori, estudiados en la Critica de la raz6n pura. Respondiendo
completamente di ferente de la del conocimiento o de la moral. Aunque la a la aspiraci6n de la ciencia, esos juicios amplian el conocimiento, siendo n
teoria kantiana de la experiencia estetica encontr6 partidarios, result6 sarios y universales. "La linea recta es la mas corta entre dos puntos", es un
demasiado dificil satisfacer a todo el mundo. Esta dificultad fue, al menos en so de juicio sintetico a priori. Es sintetico, para Kant, porque el ser "mas
parte, la responsable de que el interes inicial por la tercera Critica decayera cort," no esta contenido en el concepto de "linea recta" yes a priori porque
durante largo tiempo. A poco de publicada, su influjo fue importante; tuvo lo que di ce el predicado es siempre asi, sin que experiencia alguna pueda
repercusi6n, por ejemplo, en las discusiones en torno del clasicismo y del modificarlas.
romanticismo. Pero luego fue quedando relegada en relaci6n al conjunto Llegados a este punto, podemos preguntarnos si el juicio de gusto -es cl •
de los textos kantianos y el movi miento neokantiano no supo interesarse cir el juzgar algo como bello- es analitico o sintetico. Cuando digo "la rosa
realmente por los espinosos proble mas alli planteados. Se dijo, bella", el predicado no esta incluido en el sujeto. Estamos entonces ante un jul
metaf6ricamente, que la CF] fue la "Cenicienta" de las tres Criticas: cio sintetico. Pero, diferente de los juicios que aportan conocimiento, el juici
estetico no dice nada acerca del objeto. Es un juicio subjetivo: habla de! sent!•
Habria de transcurrir mas de un siglo para que, gracias a la intervenci6n de miento (de placer ode displacer) del sujeto. Dice Kant en la primera parted la
al gunos fil6sofos contemporaneos, recobrara el puesto que le corresponde Critica de la facultad de juzgar, titulada "Critica de la facultad de juzgar est ti•
en ra z6n de su linaje y volviese a recuperar el protagonismo de antafio. Nos ca" (CFJE), que el color verde de los prados pertenece a la sensaci6n objetiv,,
estamos refiriendo, sin ir mas lejos, a las lecturas llevadas a cabo por H. Arendt mientras que el que nos agrade o no pertenece a una sensaci6n subjetiva en I
o F. Lyo tard, quienes acertaron a encontrar en ella ciertas.claves con las que que no es representado objeto alguno, "esto es, pertenece al sentimiento, por I
afrontar in quietudes y problematicas del presente." cual el objeto es considerado como objeto de la complacencia (que no es un
nocimiento de aquel)" (CFJE, p. 125).
Asistimos en los ultimas tiempos a una franca revalorizaci6n de la CF]. Ahora bien, c:el juicio estetico es a prion? Uno de los subtitulos de! terc r
La ex "Cenicienta" resulta ahora cortejada por distintas disciplinas, y desde momenta de la "Critica de la facultad de juzgar estetica" es "El juicio de gus o
dis tintas perspectivas. Una y otra vez se vuelve a ella, para tratar de cerrar reposa en fundamentos a priori". Asimismo, la conclusion del cuarto momen
los complejos problemas que el fil6sofo dej6 abiertos. ta es que lo bello es "objeto de una complacencia necesaria", y mas adelante su
braya Kant que el juicio de gusto es a priori al "atribuir esa complacencia com
necesaria a cada cual" (CFJE, p. 200 ).
ACERCA DE LOS /UICIOS Estas afirmaciones de Kant est.in llenas de matices, pues el juicio de
gusto, si bien descansa en fundamentos a priori, no es un juicio l6gico ode
Antes de entrar en el analisis de la CF] creemos conveniente realizar un bre conoci miento. La particularidad del juicio de gusto es que siendo subjetivo
ve.rodeo y presentar algunas precisiones terminol6gicas. Debemos considerar aspira a la validez universal. Para entender esta cuesti6n resulta
la cuesti6n elemental de que todo conocimiento esta constituido por juicios y imprescindible distinguir entre juicio "determinante" y juicio "reflexionante".
que estos pueden ser afirmativos o negativos, verdaderos o falsos, "analiticos" El juicio estetico es un ti• po de juicio reflexionante. Diferente del juicio
o "sinteticos".Juicios analiticos son aquellos en los que el predicado esta conte determinante, en el que lo parLI• cular se subsume bajo lo universal (sea este
nidp;:en el sujeto; son tautol6gicos, por lo que su forma subyacente es: "A es principio, concepto o regla), el jui cio reflexionante es aquel que, dado lo
igual"i"i A". El principio que sirve de fundamento de verdad a estos juicios es la particular, busca para silo universal. El
·iuicio determinante -aquel enel que lo universal esta dado- fueel objeto
dC' la Critica de la raz6n pura; el juicio reflexionante lo sera de la
CFJ.
El juicio reflexionante,en tanto "re-flexi6n" (vuelta de la conciencia sobr
174 ESTETICA noto rio y aun a menudo de admiraci6n ..." (CF], p. 98).

si misma), no conoce cientificamente nada, pera conjetura o supone que

lo particular debe formar parte de lo universal (por encontrar). De esta
manera, mi juicio -subjetivo- pretende ser intersubjetivo, compartido por
otras. Kant distinguira entre dos tipos de juicios reflexionantes -estetico y
teleol6- gico- estudiados, respectivamente, en la primera y la segunda parte
de la CF]. Si el juicio estetico remite al sujeto, el teleol6gico remite al objeto
y se relacio na con la posibilidad de extender el conocimiento cientifico. La
teleologia se convierte, asi, en la Critica de la facultad de juzgar, en una
ficci6n heuristica que permite al cientifico no quedarse varado cuando se
agota la explicaci6n mecanicista (la de la ley causa-efecto, por ejemplo).
El juicio teleol6gico esta basado en un principio aprioristico, puesto que
la gradaci6n, en una unidad, de las leyes naturales no puede derivarse de
expe riencias concretas, sino que constituye la premisa en base a la cual, y
solamente en base a la cual podemos establecer experiencias de caracter
sistematico." Ese juicio responde a la necesidad de pensar la naturaleza
segun un principio de conformidad a fin. Se trata de encontrar una ley
general que ordene la variedad de !eyes empiricas de la naturaleza, dandoles de
una cierta uniformidad com prensible para nosotras. Dice Cassirer:

· Si la multiplicidad y la desigualdad de las !eyes empiricas fuese tan grande

que, aun siendo posible encuadrar algunas de ellas dentro de un concepto
comun de clase, nose pudiera en modo alguno comprender su totalidad en
una gradaci6n unitaria-, ordenada por grados de generalidad, tendriamos que
la naturaleza, aun cuando la concibiesemos sometida a la ley causal, no era
sino "un conglo merado tosco y ca6tico". Ahora bien, la facultad de! juicio
opone a ese concep to de algo informe, no un orden 16gico absoluto, pero si
la maxima que le sirve de acicate y de orientaci6n en todas sus
investigaciones. Loque hace es "presu mir" una amplia sujeci6n de la
naturaleza a !eyes(... ].''

Ahora bien, c:cual es el fin final de la naturaleza? S6lo puede serlo aquello que
sea capaz de formar un concepto de fines. Sera el hombre unicamente quien,
en tanto ser racional, pueda encontrar en si mismo el fin de su existencia. Debemos
agregar que el fin final ha de ser incondicionado y lo unico incondicionado es la
buena voluntad, que se manifiesta en el hombre. Fiel a los principios de la
Ilus traci6n, Kant cierra su sistema filos6fico con la idea de un ser libre y racional,
ca paz de ejercer su buena voluntad, que es lo unico que resulta siempre bueno.
Asi, la existencia en general tiene un fin final que es la realizaci6n de la vida
moral.
Ademas de ser reflexionantes, los juicios teleol6gico y estetico poseen en
comun el sentimiento de placer. El cap. VI de la Intraducci6n a la Critica de la
facultad de juzgar tiene por titulo "Del enlace del sentimiento de placer con el
concepto de la conformidad a fin de la naturaleza". Se observa alli que mientras
que la coincidencia de las percepciones con las ]eyes y los conceptos generales
e la naturaleza (las categorias) no tienen efecto sabre el sentimiento de placer,
'\la unificabilidad descubierta de dos o mas !eyes empiricas heterageneas bajo
\l principio que las abarca a ambas, es el fundamento de un placer muy
 KANTY LA FUNDAMENTACI6N DE LA ESTET!CA AUT6NOMA 175 colectivo, como cuando un grupo cultural aprecia de la misma manera el
mismo objeto, la apre ciaci6n no deja de ser, aunque colectivamente -
2. La Analitica de lo hello sociol6gicamente- subjetiva.'5

La CF] esta dividida en dos partes: "Critica de la facultad de

juzgar estetica" (CFJE) Y "Critica de la facultad de juzgar
teleol6gica". Es preciso realizar aqui una nueva aclaraci6n
terminol6gica, pues el termino "estetica" tiene doble sig
nificado en la filosofia kantiana. En la "Estetica trascendental",
expuesta en la Critica de la raz6n pura, refiere a los principios
a priori de la sensibilidad (la "Estetica trascendental" se ocupa
de las intuiciones puras de espacio y de
tiempo); en la CF] refiere al sentimiento de placer o displacer y
define al juicio de gusto.
Agreguemos que, dentro de la CF], la "Critica de la facultad de
juzgar este tica" se divide, a su vez, en dos secciones ("Analitica
de la facu!tad de juzgar es tetica" y "Dialectica de la facultad de
juzgar estetica"). La primera secci6n se di
vide en dos libras (Libra primera: "Analitica de lo bello", y
Libra segundo: "Analitica de lo sublime").
La "Analitica de lo Bello", que analizaremos a
continuaci6n, se divide en cuatra momentos. El primera -
segun la cualidad- muestra dos aspectos esenciales del juicio
de gusto: la subjetividad y el desinteres; el segundo -se gun la
cantidad- establece que lo hello es lo que place universalmente
sin con cepto; el tercera -segun la relaci6n de fines-
considera la conformidad a fin de! objeto bello (sin
representaci6n de un fin); finalmente, el cuarto momenta
-segun la modalidad- define lo bello como objeto de una
complacencia nece saria, basada en un sensus communis.

PRIMER MOMENTO: SUBJETIVIDAD Y DESINTERES

Se suele considerar que el primer momenta, relativo a la

cualidad, es el mas importante de la CFJE. Segun la cualidad, los
juicios pueden ser afirmativos, negativos o infinitos. Los
afirmativos dicen que una cosa "es esto". Se trata de la categoria
que Kant llama "realidad".••
El primer momento se inicia con una aclaraci6n basica que hace
a la esencia de! juicio de gusto. Kant nos dice que ese juicio es
"estetico". Esta formula pue de parecer redundante e inutil, pera
no lo es porque lo que el llama estetico es el caracter
fundamentalmente subjetivo de la apreciaci6n. Se entiende,
enton ces, por juicio de gusto o estetico "aquel cuyo
fundamento de determinaci6n no puede ser de otro modo sino
subjetivo" (CFJE, p. 121).
Comentando la subjetividad de! juicio de gusto, Gerard Genette (1930),
quien se califica de hiperkantiano, explica:

( ] cuando me gusta o disgusta un objeto, es evidente que ese gusto o disgusto

es un hecho "psicol6gico", y como ta!subjetivo. Y si el sujeto es
 ESTETICA
KANTY LA FUNDAMENTACI6N DE LA ESTETICA AUT6NOMA l77

Luego de aclarar que "el juicio de gusto es estetico", Kant pasa a considerar
rnas alla de la forma de! objeto mismo, no apartarnos de su apariencia, de su
otro rasgo fundamental: el desinteres. El titulo de! segundo paragrafo de la CF
irrealidad.
JE es "La complacencia que determina el juicio de gusto es sin interes alguno".
Este modo "liberal" de trato con la realidad -diferente delas necesidad
NO es la primera vez que el caracter desinteresado de lo estetico es
practicas de la vida, de] reino de las deseos que "gasta" y consume sus objetos
tratado por los filosofos. Ya habia sido considerado por los empiristas
tambien es advertido y desarrollado par Schiller en la idea de juego, queen
Shaftesbury o Hutcheson, y antes por San Agustin (s. IV), Escoto Erigena (s.
esencia consiste en dejar que las objetos se manifiesten en su plena presencia.
IX) y Santo To mas (s. XIII). Pero si bien ese concepto cuenta con una larga
Dejar subsistir libremente al objeto, mas alla de nuestra necesidad o inte
tradicion, previa al siglo XVIII, es entonces cuando adquiere una importacia res, corresponde a lo que Eliseo Vivas llama "atenci6n intransitiva" (vease
mayor.
in fra). Por su parte, Luis Juan Guerrero utiliza la expresi6n "insularidad
Se podria concluir que Kant no "invento" nada. Sin embargo, es
imagina ria". En el paragrafo "Insularidad imaginaria", del apartado "Nuestra
indudable que fue el quien penso de manera mas radical y sistematica el viejo actitud d revelaci6n y acogimiento de obras de arte", dice:
tema del de sinteres. Si con anterioridad al siglo XVIII habia sido un rasgo
mas de lo esteti co, es en ese momento cuando se convierte en rasgo La caracteristica primordial de toda obra de arte, considerada como una
principal que funda, defi nitivamente, la autonomia del campo estetico. opera cion contemplativa, se encuentra en el empuje propio que posee para
Adara Kant que si bien el juicio de gusto no debe estar "determinado por exhibirse por si misma en todo su esplendor. Y, par consiguiente, en su
ningun interes", no quiere esto decir que "no determina ningun interes". En capacidad para desligarse de todas aquellas vinculaciones que le dieron
una nota a pie de pagina explica que ese juicio puede ser muy interesante, origen...'6
es decir, no fundarse en interes alguno, pero suscitar un interes (CFJE, p.
123). De esta manera, en la sociedad, se vuelve interesante tener gusto; Guerrero toma coma ejemplo el caso del crucifijo que se convierte en
aporta un bene ficio mundane, aunque este resulte, para Kant, meramente obra de arte en la medida en que se desprende del mundo de la fe religiosa
subsidiario. que lo ha creado, de suerte que, prescindiendo de esa fe, llega a imponernos
Segun el fil6sofo de Koninsberg, solo si el sujeto se desliga de! interes sus valores intrinsecos como imagen. De la misma manera, a comienzos del
por el objeto puede apreciarlo esteticamente. El interes esta ligado a la siglo XX, mu chas obras que -como las mascaras africanas- formaban parte
representa cion de la existencia de un objeto y va unido al deseo de poseerlo. del patrimonio de museos de antropologia pasaron a ser vistas
El vino espu moso cle las Canarias, para retomar su ejemplo, despierta el principalmente par sus valores plasticos. Fue en parte Matisse, y luego los
deseo. "No es solo una mera aprobaci6n la que le dedico, sino que par este cubistas, quienes contribuyeron a la relectura de esos trabajos ya su posterior
media es producida una inclinacion" (CFJE, p. 129). La inclinacion, el ir hacia traspaso a los museos de arte.
el objeto es lo propio de lo agradable, de aquello que deleita. Aun cuarto de siglo de la aparici6n de la CF/, el influjo del desinteres kan
Encontramos en la CFJE la siguiente distincion:"Agradable llama alguien a tiano se hace sentir en obras coma El mundo coma voluntad y representaci6n
lo que deleita; bello a lo que simplemente place; bueho a lo que es (1818), de Schopenhauer. La experiencia estetica es vista coma "contempla
estimado, aprobado ..." (CFJE, p. 127). El agrado descansa sabre la sensaci6n ci6n", abandono de la actitud normal, practica e interesada, un doblegar la vo
y "vale tam bien para los animales desprovistos de razon; la belleza solo para luntad, un olvido de si, una ocupaci6n de la conciencia con una representaci6n
los hombres" (Ibid.). Estas consideraciones se relacionan con temas tratados estetica de! mundo.
en el segundo momenta de la CFJE, relatives a la cantidad: el interes, en el El caracter desinteresado de la atenci6n estetica es un tema polemico.
caso de lo agrada ble, es individual (el vino me es agradable), mientras que el Co mo veremos mas adelante al considerar las prolongaciones de la estetica
desinteres, en el ca so de lo hello, es universal. kantia na, autores de! siglo XX demostraran que no siempre se da un juicio
Se distinguen dos tipos de deseo: uno, i.nmediato, instintivo, que es puro de gusto, que ciertas apreciaciones, como la del critico de arte, pueden
propio de lo agradable sensitivo, y otro mediato, que es propio de la estar liga das a la necesidad de comunicar sin que par esto se perviertan.
voluntad. Este se gundo tipo de deseo corresponde a lo bueno, que esta Tampoco seria improcedente el deseo de posesi6n. .:.Sera acaso el hecho de que
mediado por la referencia racional a fines y sometido al mas alto interes: el Kant se ocup6 mas de lo hello en la naturaleza que de lo hello artistico, lo que
bien moral. Quebrando la tra dici6n fi!os6fica de la Antiguedad y de! lo ha llevado a insistir en lo impropio de! deseo de posesi6n? Es clara la
Medioevo, que sostuvo la union de lo hello y de lo bueno, Kant -fil6sofo imposibilidad real de poseer el cielo estrellado, las cataratas del Niagara o
mode mo- se preocupara por liberar sus ambitos definitivamente. del Iguazu.
Por ser ajeno a la representaci6n de la existencia de! objeto, el juicio de gus- La teoria kantiana de! desinteres se hace sentir en autores coma Hans G.
to "es solamente contemplativo" (CFJE, p.126). Me aparto de la contemplaci6n Gadamer, quien, buscando legitimar al arte, encuentra en el concepto de
:-_si, por ejemplo, ante la vista de un palacio lo considero reprochando "en buen juego una base antropol6gica principal. El juego, definido coma
stilo rousseauniano, la vanidad de los grandes, que emplean el sudor de! pue automovimiento caracteristico de] ser vivo y manifestado en el arte, le
'blo en cosas tan superfluas" (CFJE, p.122). Contemplar un objeto supone no ir permite al fi!6sofo ale
man justificar la autonomia y el desinteres de lo estetico preconizados par
Kant.''
 ESTETICA
KANTYLAFUNDAMENTACI6NDELAESTETICAAUT6NOMA 179

El desinteres por la existencia del objeto se puso de manifiesto, de

manera drastica, en algunas manifestaciones artisticas de la segunda mitad Por esa irreductibilidad de lo que juzgamos bello, Kant concluye que bello es
del siglo "lo que place universalmente sin concepto". En esto lo bello se distingue de
XX. Tal el caso de las obras de arte efimeras; no solo "desaparecen", en el lo bueno "que es lo que place, por medio de la razon, por el mero concepto".
acto contemplativo, las manzanas reales que Cez·anne pinto; lo que desaparece, lite Kant distingue entre lo bueno para algo - mediatamente, o sea lo util-y lo
ralmente hablando, es la misma obra en su materialidad. bueno en si-absoluta e inmediatamente- (CFJE, p. 1z4). Cuando quiero
encontrar alga que·es bueno tengo que saber primero que clase de cosa es el
objeto, es decir que debo tener un concepto de este. Para encontrar la belleza
SEGUNDO MOMENTO: LA VALIDEZ UNIVERSAL DEL JUICIO DE GUSTO
eso no es necesario. Kant da los siguientes ejemplos: £lores, dibujos libres,
rasgos que se entrelazan sin designio bajo el nombre de follajerias, no
La idea kantiana del desinteres del juicio de gusto abre las puertas a su significan nada, "no dependen de ningun concepto determinado y, sin
vali dez intersubjetiva. En efecto, la definicion de lo bello presentada en el embargo, placen" (CFJE, p. 125).
segundo momenta puede ser deducida de la anterior, que lo definia como Ahorabien, ccomo comunicar a los demas lo que es "sin concepto"? Es
objeto de complacencia sin interes alguno. evi dente que el juicio estetico se encuentra en una situaci6n de perplejidad
Al ser nuestro juicio desinteresado podemos atribuir a otros la misma com radi cal. De lo bello dificilmente se puede hablar, por eso L. Wittgenstein
placencia. Este tema es tratado por Kant en el segundo momenta de la "Analiti sostiene, en el Tractatus Logico-philosophicus, que la Estetica esta en el
ca de lo bello", dedicado a la cantidad. Para el investigador norteamericano Paul limite de lo que se puede decir y de lo que no puede ser dicho sino solo
Guyer, es el momenta de la cantidad, y no el de la cualidad, el fundamental en mostrado.
la CFJ. Porque el juicio de gusto es universal, resulta necesario, desinteresado y Loque el juicio de gusto pone de manifiesto es nuestra capacidad de
puramente formal.'" juicio reflexiva. Con ella no conocemos na'da de! objeto; lo que se produce
Kant se aparta de las posiciones relativistas, defendidas en diferentes pe es una es pecie de vuelta de la conciencia sobre si misma (una re-flexion).
.riodos historicos y por multiples razones.' 9 Observa que, en el caso de lo Por su funda mento de determinacion subjetivo y por la ausencia de
agradable, si podemos hablar de relatividad. El vino espumoso de las Cana concepto, una ciencia de lo bello es impensable. Pero si es posible, como hace
rias me es agradable a mi. Lo mismo podriamos dedr de nuestras preferen Kant, una critica de! jui cio, es decir una investigacion de las formas a priori
cias por comidas o por sabores dukes o amargos. Vale aqui el principio: "a que hacen posible su uni versalidad. Parte principal de esa critica es el
cada cual con su gusto". De gustibus et coloribus non est disputandum, de estudio de! fundamento a priori de la universal comunicabilidad de! juicio
acuerdo al proverbio escolastico. Totalmente diferente es el caso de! juicio estetico, que resulta ser "el estado de! animo en el libre juego de la
estetico porque cuando digo que alga es bello, quiero decir que es bello (y no imaginacion y de! entendimiento" (CFJE, p. 134). Esa universal
solo para mi). Hablo entonces de la belleza como si fuera una propiedad de comunicabilidad reside en la armonia de las facultades (entendimiento e
las cosas y pretendo una aprobacion universal. Mas adelante, J. F. Herbart imaginacion), como es requerible para el conocimiento en general. Ahora
(1776-1841), declarado kantiano, se encargara de estudiar el "umbral esteti bien, la relacion entre imaginaci6n y entendimiento tiene un sentido diferente
co" que separa el placer.meramente subjetivo de aquel que pretende una de la que se da en el conocimiento, pues mientras alli el en tendimiento
aprobacion universal. (mediante el concepto) es lo determinante, ahora esta al servicio de la
Aclaremos que universalidad del juicio de gusto no es igual a aceptaci6n imaginacion.
obligada. Nuestras mejores razones no lograran necesariamente convencer a Cuando Kant dice que las facultades se hallan en libre juego, entiende la
los demas de nuestra predileccion. La universalidad debe ser interpretada en li bertad de la imaginacion no sujeta a la coercion de! concepto, de manera
tonces como pretension de comunicabilidad universal, porque cuando que puede crear, a partir de! material dado, formas siempre nuevas. Tai
afirma mos que algo es bello creemos tener a nuestro favor un voto general. "juego" de imaginacion y entendimiento se da en todo ser humano en virtud
El predicado de! juicio de gusto no es un particular que, dado en una intui de su comun constituci6n. De alli la posibilidad de "universal
cion sensible, pueda ser pensado como contenido de lo universal.Aquino hay comunicabilidad" del juicio estetico. Loque se transmite es un estado de
una universalidad semejante a la de las leyes fisicas, que hacen de la individua animo, un sentimiento de placer (noun conocimiento de un objeto).
lidad de lo sensible un "caso" mas de una ley. En el juicio de gusto, cada objeto Se pregunta Kant si el sentimiento de placer antecede al juicio o este a aquel.
debe valorarse y comprobarse por separado. Observa Gadamer: La solucion de este problema, dice, "es la clave de la critica de! gusto y por eso
merecedora de toda atenci6n". Respondera que el placer no precede al juicio.
Una puesta de sol que nos encanta no es un caso mas de puesta de sol, sino
que es una puesta de sol unica que escenifica para nosotros "el drama de! Es, pues, la universal aptitud de comunicaci6n de! estado de! animo en la re
cielo".'
0
presentaci6n dada, la que, coma condici6n subjetiva de] juicio de gusto, debe
estar en el fundamento de este y tener coma consecuencia el placer en el
objeto (CFJE, p.123).
180 ESTETICA plo de''edificios tales como iglesias, palacios, arsenales. A la lista se suma I

El placer estetico resulta de la universal aptitud de comunicaci6n del

estado del animo. Es la conciencia de una armonia espontanea -compartida
por to dos- dela imaginaci6n y del entendimiento en libre juego. Si bien el
placer no precede al juicio, no debemos entender que primero se da el juicio
y luego el placer. No existe un momenta del juicio y un momenta del
placer. No existe entre ellos separacion temporal sino logica. El placer esta
en el juicio."

TERCER MOMENTO: BELLEZA LIBRE Y BELLEZA ADHERENTE

En el tercer momenta de la "Analitica de lo hello", Kant aborda un tema

no considerado hasta entonces: el del objeto estetico. Deese momenta, el mas
ex tenso de los cuatro, se desprende que si bien el juicio de gusto depende
del su jeto, existen ciertos rasgos del objeto que no deben ser pasados por
alto.
Defiende alli un concepto formalista de la belleza (a diferencia de Hegel
que defendera un concepto contenidista), interpretado a veces como apertura
del camino hacia la apreciaci6n del arte abstracto. En la opinion de Gadamer, la
teoria formalista kantiana es fatal para la comprension del arte. En los casos en
que existiera un fin distinto al de la mera forma, como ocurre en el arte figurati
vo, se caeria en un nivel menor, semejante al de la belleza condicionada par
conceptos."
La belleza, determinada por la forma, no depende de ning(m fin extrafor
mal.'' La belleza -libre- deunaflor no deriva de su utilidad sino de su
"con formidad a fin formal". No esta sujeta a conceptos; por eso procura un
juicio de gusto puro. Que cosa deba ser la flor nadie lo sabe. Schiller <lira
luego que es bella la forma "que no exige ninguna explicaci6n" o tambien
"aquella que se explica sin concepto".'4 En el siglo XX, Henri Focillon, en su
ensayo Vie des formes (1943), sefialara que la obra "no existe masque como
forma".'5 En su opinion, la distincion forma-contenido es inoperante pues "el
contenido fun damental de la forma es un contenido formal".
Kant considera que las figuras geometricas regulares no son verdaderos
ejemplos de belleza formal libre. Un circulo, un cuadrado, un cubo, a pesar
de que son tomados coma ejemplos indubitables de belleza, son simples
presen taciones de un concepto determinado que le prescribe a esa figura la
regla a la que ha de atenerse.'6
Como ejemplos de belleza libre (pulchritudo vaga) del arte, Kant cita
los dibujos a la grecque, las follajerias de los marcos o de los papeles de tapizar
que no representan nada y lo queen musica se denomina fantasias (sin tema).
En la belleza libre de! arte -producto de ese ser imprevisible y absoluta
mente original que es el genio- noactua la natura naturata (la que manipula
la ciencia fisico-matematica). Loque esta en juego es la natura naturans, ese
"eter no monstruo rumiador" (Goethe) caracterizado como fuerza o como
principio _ inmanente.
Diferente de la belleza libre, la adherente (pulchritudo adhaerens) de
pend )ie un concepto de fin. En esto se asemeja a lo bueno. Da Kant el ejem
 KANTY LA FUNDAMENTACI6N DE LA ESTETICA Es indudable que la jerarquizacion de la linea y de la forma en la
AUT6NOMA
estetica kantiana coincide con la "depuracion de! gusto" de mediados de!
siglo XVIIl.' Es el momento en que se rechaza el rococo -con
0

belle a del hombre y la del caballo, que suponen un concepto de fin susrepresentaciones de la fe te galante y su caracteristica disoluci6n de la
que de termma lo que ellos deben ser. Tambien se agrega el arte forma-y se impone el gusto por
"decorativo". Al res pecto, es Hegel quien nos informa que algunos
ven en las obras de arte un "genio benevolo" que jovialmente
adorna todos los entornos, externose in
ternos, mitigando lo serio de las circunstancias y atenuando la
complejidad de la realidad.'7
Debemos agegar que Kant distingue en la belleza adherente, un concepto
del fin externo (utilidad) y otro interno (perfeccion), que somete
a la cosa quitandole libertad.
En o que respecta a la obra de arte, sefiala con justeza Sobrevilla
que Kant ha descub1erto que no debe dejar traslucir "las ideas e
intenciones con las que ha si do r oducida (o sea que no debe ser de
tesis)".'8 En consecuencia, la apreciaci6n estet1ca, concentrada en la
forma del objeto, debe ir mas alla de! dato genealogi co, tecnico o
teorico, porque si bien es cierto que en la produccion de! artista se
filtran conceptos, estos no alcanzaran nunca a explicar la obra
terminada.
Otra cuesti6n de especial importancia para el arte, tratada por
Kant en el tercer momenta de la CFJE, es la relacionada al valor de
la forma y del color. La forma tiene, para el, mas valor que el color.
Este apelaria demasiadoa nuestros sentidos; de alli que se explique
por el atractivo, por lo que debe ser llamado solo "agradable". Se
dice de! color que encanta o deleita. Su funda mento no es mas que
la materia de las representaciones, a saber, unicamente la
sensaci6n. Si bien puede hacer mas vivido al objeto, no lo hace mas
hello ni mas digno de ser mirado. El gusto sigue todavia siendo
"barbaro" donde se
mezclan atractivos y emociones y, mas aun,·cuando de esa mezcla
depende su aprobaci6n.
Segun se afirma en el citado parrafo, para obtener un juicio
puro de gusto es preciso no caer en ningun tipo de efusi6n de
fuerza vital, ta! como la emo cion, que a veces Kant liga al
sentimiento religioso.
Advierte Gadamer que el valor asignado por Kant a la forma
esta condicio nado hist6ricamente por la importancia que su epoca
dio al neoclasicismo.'• Asimismo, esa valorizacion deriva del hecho
de que la forma supone una construcci6n mental activa. Hoy no
diriamos que los colores son meros en c os pues sabemos de la
importancia fundamental que tienen en la compo s1c10n. Loque
debe interesarnos, sin embargo, no es tanto la parcialidad del gusto
de Kant sino el emender por que destaca, como lo hace, a la forma.
La
exp icaci6n estaria en el hecho de que para verla hay que dibujarla, construirla,
y as1 definirla.
Gadamer da como ejemplo de esa construcci6n activa, un
fragmento de Los hermanos Karamazov: el de la escalera por la que
se cae Smerdiakov. Dos toievski la describe (Ia dibuja) de un modo
ta! que vemos perfectamente como es, coma empieza, c6mo luego se
vuelve oscura y se tuerce a la izquierda. La es calera se vuelve
palpablemente clara.
188 ESTETICA
KANTY LA FUNDAMENTACIONDE LA ESTETICA AUT6NOMA 189

CUARTO MOMENTO: EL SENTIDO COMUN [ ] la imaginaci6n productiva (genio) no es nunca enteramente productiva.
Produce, por ejemplo, el centauro de lo dado: el caballo y el hombre.•
0

En el segundo momento de la CFJE, Kant habia descubierto un

fundamen to a priori para el juicio de gusto: "el estado del animo en el
libre juego de la imaginaci6n y del entendimiento". Presentes ambas ARTEYGENIO
facultades en todos los in dividuos, permite hablar de un "sentido comun"
(sensus communis) y, conse cuentemente, de la posibilidad de una La imaginaci6n productiva es la que el genio pone en juego al crear obras de
universal comunicabilidad del juicio. Walter Biemel observa la cercania arte. Precisamente, "arte" es, para Kant, "arte de! genio". La relaci6n es
entre el sentido comun y el gusto, al puntci que Kant llama una vez a este tratada en la "Deducci6n de los juicios esteticos puros", ubicada luego de la
"sentido comun".,. "Analitica de lo sublime".
Salvo que se mantenga una postura esceptica, rechazada por Kant, nada
De las facultades que constituyen el genio, la mas importante es la imagi-
impide suponer la idea de un sentido comun. Al estar las mentes humanas
. naci6n productiva estetica. Por tener el genio una subjetividad descentrada y
construidas de modo identico puede esperarse que algo que actu6
li bre de las presiones de la acci6n y del conocimiento, la imaginaci6n se
esteticamen te en un sujeto tambien lo haga en otro.
libera de! deseo y de! concepto. La libertad de la imaginaci6n es, para Kant,
Sefiala Hannah Arendt que es al analizar el juicio de gusto cuando Kant des la puerta abierta a lo suprasensible ya la moralidad.
cubre el presupuesto trascendental de la comunicabilidad. Ese juicio muestra, de
El genio, gracias a su imaginaci6n creadora, produce la "idea estetica",
manera paradigmatica, el absurdo de un juicio en soledad. "Cuando juzgamos
que da mucho que pensar. Si bien el juicio estetico no es conocimiento, esto
-dice Arendt- lo hacemos siempre como miembros de una comunidad",35 yes
no su pone que no tenga influencia en el pensamiento (recordemos que
en el campo de lo estetico donde mejor se capta esa sociabilidad esencial.
"conoci miento", en el lexico kantiano, es sin6nimo de conocimiento
El "sentido comun" no es una facultad mas sino el efecto del libre juego
cientifico). Dice Kant:
de nuestras facultades cognoscitivas (CFJE, p. 129). La posibilidad de
"cultivar" este sentido no es clara. Emilio Garroni problematiza en su
Bajo idea estetica entiendo aquella representaci6n de la imaginaci6n que
Estetica si el senti do comun es innato, originario, o si es "una facultad a
da ocasi6n a mucho pensar, sin que pueda serle adecuado, empero,
adquirir",36 que debaser desarrollatla, mejorada, completada.
ningun pensamiento determinado, es decir, ningun concepto, a la cual, en
De las dos facultades -imaginaci6n y entendimiento- queintervienen en conse cuencia, ning{m lenguaje puede plenamente alcanzar ni hacer
el juicio de gusto, es la primera la que juega un papel preponderante." En los comprensible (CFJE, p. 222).
primeros parrafos de la "Analitica de lo bello" dice Kant que para discernir si al
go es hello interviene la imaginaci6n quizas unida al entendimiento.Considera
Las obras de arte son "abiertas" (Eco); aceptan un numero ilimitado de
Arendt que si en la Critica de la raz6n pura la imaginaci6n estuvo al servicio de!
in terpretaciones ya que ningun concepto le es totalmente adecuado. Las
entendimiento, en la CFJ el intelecto esta "al servicio de la imaginaci6n".
obras "resuenan" en nosotros. En las creaciones del genio, dice Gadamer, "se
Es la imaginaci6n la que mas merece el calificativo de libre pues el
pulsan los conceptos", segun la expresi6n de Kant. Y agrega que esta es:
entendi miento esta siempre regulado por conceptos. Este protagonismo no
es novedo so en el pensamiento de!siglo XVJIL Baste recordar la obra de
[ ) una bella expresi6n que procede de!lenguaje musical del siglo XVIII y que
Joseph Addison Los placeres de la imaginaci6n (1724).'' Con posterioridad a alude especialmente a ese peculiar quedarse suspendido el sonido del
Kant, Hegel tam bien reconocera la importancia de la imaginaci6n en el arte clavicor dio, cuyo particular efecto consiste en que la nota sigue resonando
a!'sostener que este tiene como campo de acci6n sentimientos e intuiciones, mucho des pues de que se haya soltado la cuerda.4'
que se encuentran ba jo la dependencia de la imaginaci6n.39
En "Observaci6n general sobre la Primera Secci6n de la Analitica" (al Opuesto al espiritu imitativo, el genio, ese "talento (don natural) que le
final de la "Analitica de lo hello"), Kant llama a la imaginaci6n en libertad, da la regla al arte" (CFJE, p. 178), crea segun reglas no concebidas todavia.
"no re productiva" (no sometida a las !eyes de la asociaci6n) sino De alli que sus obras no puedan explicarse por las de! pasado. Contienen en
"productiva" y acti va por si misma. De la imaginaci6n productiva estetica si mismas su propio criterio de valor. Podriamos decir que lo propio de!
dice Kant que "es muy poderosa en la creaci6n, por asi decirlo, de otra genio es crear nuevos paradigmas. A esta cuesti6n refiere Hans G. Gadamer
naturaleza a partir de! material que la naturaleza real le da" (CFJE, p. 222).·
en Verdad y me todo.•' Rudiger Bubner,43 discipulo de Gadamer, ve en la
._ Gracias a la imaginaci6n, superamos la experiencia demasiado cotidiana y
subjetivizaci6n de la creaci6n un signo positivo para el arte contemporaneo y
hait_apodemos transformarla. Acerca de la capacidad de la imaginaci6n pro
considera que es ella la que confiere actualidad a la estetica kantiana, habida
dus;i.iva de crear "otra naturaleza a partir de! material que la naturaleza real le
cuenta de las rupturas de!arte de vanguardia.
da';,'Arendt escribe:
 ESTETICA
KANTY LA FUNDAMENTACI6N DE LA ESTETICA AUT6NOMA
191
La actividad de! genio responde, segun Kant, a un don innato similar al que
Aristoteles hallo en el poeta.•• Afirma Kant: ,Que es lo que nosotros rescatariamos de la vision kantiana de los
fenomenos "esteticos"? Entre otras cosas, cuando menos las siguientes: que
Dado que el talento, como facultad productiva innata del ar sta, ertene e el estos fen6me nos nose confunden con los morales ni tampoco con los
mismo a la naturaleza, podria uno entonces expresarse tamb1en as1: el gemo meramente agrada bles, por ser desinteresados, no determinados por
es la innata disposicion del animo (ingenium), a craves de la cual la conceptos ni por la "mate ria" de las sensaciones y por poseer un alto grado
naturaleza le da la regla al arte (CFJE, p. 216). de validez intersubjedva. Que en su "experiencia" intervienen la imaginaci6n
y el entendimientoy se produce el placer. En cuanto a la obra de arte, Kant
Valeriano Boza! conecta esa interpretacion kantiana a la teoria romantica ha descubierto para la poste ridad -o redescubierto- que aquella no debe
de! genio: dejar traslucir las intenciones con las que hasido producida (o sea que no
debe ser de tesis); que obedece en su proceso de producci6n a reglas, pero
[... ] al aclarar la nocion de genio, el filosofo ha dado un paso import te: ha que estas no alcanzan a "explicar" la obra lograda; que antropologicamente es
es tablecido una relacion entre facultad espiritual y naturaleza, como s1 esta el resultado sabre todo de la actividad de la imaginaci6n creadora; que da
pose yera "facultades espirituales" (los genios). Y al indicar desde un mucho que pensar (o sea que admite un nu mero casi ilimitado de
principio que el genio es parte de la naturaleza, es naturaleza, ha puesto las interpretaciones); que las grandes obras de arte son ab solutamente originales,
bases para la teo ria romantica del genio.45 o sea que llevan en si su propio criterio de valor, nose explican por las obras
de! pasado y deberian influir no suscitando la imitaci6n,
La identificacion "romantica" genio-naturaleza resaltara la originalidad, sino despertando en otros el sentimiento de sus propias posibilidades produc
la libertad, el espiritu no reproductivo o imitativo. I g nio, ese "favorito de I: tivas.48
naturaleza" (Kant), nos permitira tener "la expenenc1a de la naturaleza en s1
misma y no solo de sus fenomenos singulares". . ..
Recuerda Michel de Certau la diferencia entre los prest1d1g1tadores
(Taschenspieler) y los equilibristas (Seiltanzer). Aquellos actuan por conoci 3.Analitica de lo sublime
miento (de los trucos); estos por "arte":

Caminar sobre la cuerda floja es mantener en todo momento un equilibria al

recrearlo a cada paso gracias a nuevas intervenciones; es conservar una r lacion Desde el tratado de la Antigiiedad tardia Sabre lo sublime, de! Pseudo
Longino (s. III), ese concepto pasa a ser parte constitutiva de la Estetica. En 1674
que jamas es adquirida y que una incesante invencion renueva al dar 1 1mpr .
sion de "conservarla". El arte de hacer queda asi admirablemente defimdo, mas la obra fue traducida al frances par Boileau y, en 1725, al ingles, siendo su
aun cuando en efecto el practicante mismo forma parte del equilibria que mo im pacto dificil de exagerar. Que la idea de lo sublime ocupo profundamente
difica sin comprometerlo.•• el pensamiento de! siglo XVIII, esta testimoniada por trabajos de autores
coma Shaftesbm;y, Homey, particularmente, Burke. Antes de la CFJ, Kant
La metafora de la diferencia entre el prestidigitador y el equilibrista sirve considera ese tema en Observaciones sabre el sentimiento de lo hello y lo
para acentuar el hecho de que el artista actua por dones innatos y su hacer no sublime(1764). A diferencia de! Pseudo-Longino, que se interesa par lo
depende de la aplicacion de reglas y modelos. Concluye De Certau que para sublime coma cuestion retorica, coma "estilo", Burke hara de el una categoria
Freud, como para Kant, "se trata aqui de una facultad autonoma que se afina estetica general.
pero nose aprende".47 " , . Kant reconocera expresamente su aporte, al punto de considerarlo "el autor
Al hablar "de! arte en general", Kant sefiala que debena denommarse arte mas distinguido". Sin embargo, sefiala que su exposicion es "fisiologica", "me
ramente empirica".
solo a la produccion por libertad'\ no a las artesanias o "artes remunerativas".
Tampoco deberia incluirse a lo "agradable" porno ser esto "materia duradera En sus lndagaciones filos6ficas sabre el origen de nuestras ideas acerca de
para ulteriores meditaciones" (CFJE, p. 214). Son "artes agradables", para Kant, lo sublimey lo hello (1757), Burke distingue entre el placer, propio de lo belloy,
las que sirven para deleitar a los comensales_en torno de un_a esa, el relato la mezcla de displacer y agrado, propia de lo sublime. Mientras lo sublime
:n tretenido, la locuacidad, los juegos-pasat1empos y la mus1ca de a o pan produ ce tension, el placer tranquilo de lo bello nos distiende. Todo lo que de
mi nto que se mantiene coma un "rumor agradable", templando el ammo, sm algun
que'nadie preste la menor atencion. , . . modo es terribley atenta contra la supervivencia es considerado, par el
,Cuales son las principales aportes de la estet1ca kantiana en lo que hace al filosofo empirista, un principio de sublimidad.
juici6"ae gusto? David Sobrevilla nos brinda un excelente resumen:. Kant retoma muchos conceptos de Burke, si bien su teoria es mas compleja.
Sostuvo Antonio Lopez Molina:
Podemos decir que la "Analitica de lo sublime" es la
replica trascendental al planteamiento meramente
fisiol6gico o psicologico llevado a cabo porE. Bur-
 ESTETICA
KANTY LA FUNDAMENTACI6N DE LA ESTETICA AUT6NOMA
193

ke, al igual que la Crftica de la raz6n pura era una replica similar al Ensayo de
tico Y otro dinamico" sino que lo sublime (de la naturaleza) es, en un casoexa
Locke.••
mi_nado "m tematicame e'.' y, en :1 otro, "dinamicamente"." Entre otrasara
A diferencia de los empiristas, Kant no refiere solo a los fenomenos dops Y tens1ones de! anahs1s kant1ano de lo sublime, Jose Luis Molinuevoex
natura les, sino tambien a la posibilidad de establecer magnitudes infinitas, trae la siguiente: "se distingue entre lo sublime matematico y dinamico, pero al
mas alla de nuestras intuiciones sensibles. final se mezclan y confunden los analisis".s1
Al redactar la "Analitica de lo sublime" (incluida en la primera parte de El"dra _a" sublime consiste en sentir la naturaleza como magnitud (subli
la CFJE), Kant cuenta no solo con los estudios de Burke, sino tambien con el me matematico) o como poder o fuerza (sublime dinamico) que opone un
mo delo construido para su "Analitica de lo bello". Lobello y lo sublime fre noa nuestras acciones. Un ejemplo de la primera situacion es el
tienen en comun el no dependerdeuna sensaci6n (como lo agradable), ni de cieloestrella do. Se trata de la naturaleza como magnitudo (magnitud) y no
un concepto (como lo bueno). Aunque son particulares, se presentan con comoquantitas (algo qu es grand comparativamente), noun fragmento
pretension de uni versalidad. Son ambos reflexionantes, ya que el predicado sometidoa !eyes,
no recae sobre el ob jeto sino sobre un sentimiento de!sujeto. Lo sublime de! cog ,osc1bley domm ble, sino la totalidad absoluta, infinita, incomparable,
cielo estrellado no es el cielo en si, sino el modo en que un sujeto lo percibe. que excede toda med1da de los sentidos".
Tambien el podria igno rar completamente tal sublimidad. Se refiere Kant al cientifico que estima magnitudes por conceptosnumeri
Una diferencia fundamental entre lo bello y lo sublime esta dada por la cos. E_sa e ti_ acion ogica sera matematica; pero aquella que se ejercita
pre sencia o ausencia de forma. Lobello atafie a la forma del objeto, que "enIa
consiste en la limitacion, mientras que lo sublime, por el contrario, "se mer,mtu1c n (segun la medicion a ojo) es estetica" (CFJE, p.164). Estaesti
hallara en un objeto desprovisto de forma" (CFJ, p. 159), por lo que ninguna mac10n estet1ca, determinada subjetiva y no objetivamente, se da en el mo
representaci6n sensible podra serle adecuada. Mientras lo bello es finito, mento en que el cientifico siente su incapacidad de obtener la medida de
loin finito.
acabado y mensurable, lo su blime supera toda medida.
Una grap altura es sublime, igual que una gran profundidad. La , a estimacion es etica "suscita esa emocion que ninguna estimaci6nmate
desmesura de la naturaleza supera las categorias de! entendimiento y resulta mat1ca de las ma_gmtudes por medio de numeros puede efectuar"(CFJE,
violenta pa ra la imaginaci6n; excede todas sus posibilidades. Al respecto, p. 164). Nada me1or que el arte para emocionarnos con la idea de magnitu-
dice Gilles De leuze:

Todo ocurre ahora como si la imaginaci6n estuviese confrontada con su

propio limite, forzada a alcanzar un maxima, sufriendo una violencia que le
lleva a la extremidad de su poder.50

En la experiencia de lo bello, la facultad de juzgar reflexionante estetica po

ne en juego la imaginaci6n y el entendimiento; en la experiencia de lo sublime,
la imaginacion cambia de partenaire: su acompafiante es la razon. Por otra par
te, la experiencia de lo bello supone armonia de las facultades intervinientes, lo
que provoca un sentimiento de placer. Schiller observara que mientras lo bello
es juego, lo sublime es Ernst, seriedad.
La tranquila contemplaci6n de la belleza se diferencia de la experiencia
de lo sublime y pone a las facultades en conflicto, lo que provoca excitaci6n
e in quietud, una mezcla de placer y de displacer. Kant hace referenda al
"placer ne gativo" (CFJE, p. 159), correspondiente a la atracci6n y al rechazo,
a la admira ci6n y al respeto provocado por un objeto. Jean Fran ois Lyotard
habla, respectivamente, de una disposici6n "eufonica" y "cacofonica".s• Pero,
aproxi mai;:idonos al delight burkeano, sera preciso descubrir en la cacofonia una
eufo nia s\blime secreta, de rango superior.
S(J:,ien en la estetica kantiana se distinguen dos clases de sublime, esto
no significa, como observa Lyotard, "que hay dos clases de sublime, uno
matema-
194 ESTETICA
KANTY LA FUNDAMENTACI6N DE LA ESTETICA AUT6NOMA
195

des incomparables. Basten el ejemplo de los paisajes de! pintor romantico

Kaspar Friedrich (1744-1840). Con un sutil pasaje de tonos el capta la
atm6s fera evanescente abierta al infinito para dar expresi6n a una elevada
melan colia.
Otro ejempio es el de! argentino Carlos Silva (1930-1987). Algunas de
sus pinturas son elocuentes intuiciones de lo grande mas alla de toda
comparaci6n, de! espacio infinito y sus puntos de fuga. Su propuesta -post-
geometrica-se vale de la geometria para finalmente superarla. Asi, la
organizaci6n y conten ci6n de! espacio segun un orden serial, quedan
desbordadas en el efecto de in mensidad de la obra.
Todo indica, en lo sublime matematico, la dificultad de representaci6n.
Como ocurre con las ideas de la raz6n, ninguna imagen sera
completamente adecuada. Es este el desafio que Borges asume cuando
intenta decirnos, en su desesperaci6n de escritor, que es el Aleph:

Arribo, ahora, al inefable centro de mi relato; empieza, aqui, mi

desesperaci6n de escritor ... c'-c6mo transmitir a los otros el infinito Aleph,
que mi temerosa memoria apenas abarca?... Por lo demas, el problema
central es irresoluble: la enumeraci6n, siquiera parcial, de un conjunto
infinito. En ese instante gigan tesco, he visto millones de actos deleitables o
atroces; ninguno me asombr6 co mo el hecho de que todos ocuparan el
mismo punto, sin superposici6n y sin transparencia. Loque vieron mis ojos
foe simultaneo: lo que transcribire, suce sivo, porqu·e el lenguaje lo es. Algo,
sin embargo, recogere.

En la parte inferior de! escal6n, hacia la derecha, vi una pequefia esfera

tornaso lada, de casi intolerable fulgor. Al principio la crei giratoria; luego
comprendi que ese movimiento era una ilusi6n producida por los vertiginosos
espectacu los que encerraba. El diametro de! Aleph seria de dos o tres
centimetros, pero el espacio c6smico estaba ahi, sin disminuci6n de tamafio.
Cada cosa (la luna de! espejo, digamos) era infinitas cosas, porque yo 26. Carlos Silva. Agoo, 61eo sobre aglomerado, 180 x
claramente la veia desde todos los puntos de! universo. Vi el populoso mar, 180,1965.
Museo Nacional de Bellas Aries, Buenos Aires.
vi el alba y la tarde, vi las muche dumbres de America, vi una plateada
telarafia en el centro de una negra pirami de, vi un laberinto roto (era
Londres), vi interminables ojos inmediatos escru tandose en mi como en un
espejo, vi todos los espejos de! planeta y ninguno me reflej6, vi en un Lo sublime dinamico, la fuerza poderosa de la naturaleza, hace que el
traspatio de la calle Soler las mismas baldosas que hace treinta afios vi en el hom bre reSu]te, c m arativamente, de una pequefiez insignificante. Asi Io
zaguan de una casa en Fray Bentos, vi racimos, nieve, taba co, vetas de metal, vemos en algunos pa1sa1es de Friedrich. Impotente y degradado ante
vapor de agua, vi convexos desiertos ecuatoriales y cada uno de sus granos de potencias que lo exceden, el hombre las observa con respeto, admiraci6n y
arena, vi en Inverness a una mujer que no olvidare, vi la vio lenta cabellera,
tambien temor por que esas fuerzas podrian aniquilarlo. Los ejemplos que da
el altivo cuerpo, vi un cancer en el pecho, vi un circulo de tierra seca en una
Kant son los si ien t s: rocas que cuelgan amenazantes, nubes de tormenta que
vereda, donde antes hubo un arbol. .. vi el engranaje de! amor y la
se acumulan en el
modificaci6n de la muerte, vi el Aleph desde todos los puntos, vi en el Aleph
cieio con rayos Y estruendos, volcanes y huracanes, el oceano enfurecido Ia al-
la tierra, yen la tierra otra vez el Aleph yen el Aleph la tierra, vi mi cara y mis ta catarata de un rio. '
vis ceras, vi tu cara, y senti vertigo y Hore, porque mis ojos habian visto ese
objeto Para e perimentar lo subl me d_ina1:1ico es preciso estar en Iugar seguro; de
10 contran : el temor nos hana huu o 1mpediria la contemplaci6n, es decir la
· secreto y conjetural, cuyo nombre usurpan los hombres, pero que concentracwn en la apariencia de las cosas.
ning(m
·'hombre ha mirado: el inconcebible universo.54 Hasta aqu_i la posici6n de Kant es similar a Ia de Burke. Sin embargo, como
::erva Valen_ano Boza!, la similud termina aqui pues el
terror burkeano, al ser nte de pehgro, nos saca de la
somnolencia y toma todo nuestro animo,
 ESTET!CA me/be acuerdoa su posici6n ilustrada, Kant <lira que " ... al hombre rust1co le
apa;ecera como meramente aterrorizador aquello que, preparados por la cultu-
mientras que el terror kantiano, siendo a )m smo fuen_t: d_e pelig_ro, "no
con ducea la agitaci6n de nuestras facultades , smo al aux1ho
mmed1ato 7 la r z6n, que nos "proporciona" la idea de lo sublime, co la
cual llegamos a. dom1-
nar" al objeto.ss En otras palabras, si la naturaleza es iuzgada omo sublime:
no lo es simplemente porque despierta temor sino porque perm1te que nos
m1da mos con ella, porque invoca nuestra fuerza moral para "mirar aquello
de lo cual nos curamos (bienes, salud y vida) como pequeno" (CFJE, P·174).
. .
Son muchos los autores que se han referido a lo sublime des e d1st1 t s
6pticas. En el campo de la literatura, Charles Baudelaire enc ntrara en lo c
mico absoluto" de Ernst T. Hoffmann la posibilidad de expenmentar la alegna
de la superioridad del hombre frente a la naturaleza.56 Por su parte, Lyotard ob
serva que, porque en lo sublime la raz6n habla del oder d_el ser humano, pasa
mos del displacer al placer. Mientras lo bello place mmed1at mente Y onlleva
un sentimiento de promoci6n vital, el placer en lo sublime solo es pos1ble me-
diatizado por el displacer (frente al exceso natural)._ .
El siguiente grafico muestra las principales d1ferenc1as entre lo b llo Y l_o
sublime en cuanto a la forma, al sentimiento de placer, a las facultades mterv1-
nientes y al contenido.

Bello Sublime

la forma Joinforme
Conciemea
lo finito lo infinito

placer placer
Sentimiento de
displacer

la naturaleza la naturaleza
Encuentra su
lamoralidad
contenido en
entendimiento raz6n
Facultades
imaginaci6n irnaginaci6n

Jose Luis Villacafias sostendra que, en la experiencia de 1 ,sublime, 1 vi

a que parecia inhibida ante el poder de la naturaleza pasa a ser na expenenc
a de afirmaci6n mas no de la seguridad fisica, como en Burke, smo de la
segun dad morayl s s consecuencias politicas".5' Nuestr: imperfecci6n,
en:onces, ya no duele pues es la ocasi6n de sentir nuestro prop10 po r, nues
a- hbertad, la autoconciencia de nuestro ser moral. Si, en lo sublime, eticay
estenca se nen, esprecisamente porque al resistir a la fuerza (fisica) de la
naturale a se um s nuestra fuerza (espiritual). Esto explica que Kant Harne
a_l,o sublime sentl miento del Espiritu" (GeistesgefiihJ). Hombre de la
Ilustrac10n, proclamaa cra
ves de lo sublime el criunfo de la raz6n y de la libertad. . .
''No todos los seres humanos tendran la misma capacidad de sentn lo s_ubh
 KANTY LA FUNDAMENTACION DE LA ESTETICA AUT6NOMA 197 "tacto" artistico.'9 Loque el llama "tacto" no es una mera dotaci6n natural.
Incluye la formaci6n tanto es tetica como hist6rica. En su interpretaci6n de
ra, llamamos sublime " (CFJE, p.178). Observemos que la necesidad de po estas ideas, Hans G. Gadamer dice que, aunque el "tacto" suponga
seer un espiritu cultivado para apreciar lo hello no aparece en Kant tan formaci6n, "se conduce con la inmediatez de los sentidos", permitiendo
claro co mo cuando considera lo sublime. La interpretaci6n de Hegel, separar (y valorar con seguridad) lo belle de lo
no obstante, es tajante: "Para apreciar lo hello hay que poseer un
espiritu cultivado".
Finalmente, podemos preguntar si es posible hablar de sublime en
el arte. Kant responde que "lo sublime del arte esta, por cierto, limitado
siempre a las condiciones de la concordancia con la naturaleza" (CFJE,
p.159). Entre otros de sus ejemplos figuran las piramides de Egipto y el
volumen interior de la basilica de San Pedro, en Roma. Es evidente que
estas obras son medibles. ,:Por queen tonces considerarlas sublimes?
Porque vistas a cierta distancia, ni muy cerca ni muy lejos, pueden
exceder la medida de los ojos, coma las magnitudes de la naturaleza
bruta (der rohen Natur).
En sintesis, existen distintas formas de apreciar esteticamente la
naturale za. En una de ellas, la imaginaci6n y el entendimiento se
acomodan y armoni zan, lo que produce el placer de lo bello. En la otra, la
imaginaci6n no puede dar cuenta de la naturaleza grandiosa y
magnificente, por lo que requiere del auxi lio de la raz6n, lo que
conduce al placer de lo sublime en la representaci6n de la superioridad
racional de] sujeto. No obstante esta superioridad, como en el ca so de
lo bello, nada llegamos a conocer del objeto mismo.

4. Prolongaciones de la estetica kantiana

Los problemas planteados por Kant en el campo de la estetica

trascendie ron en el pensamiento posterior. Su revalorizaci6n de la
imaginaci6n y la idea de genialidad confluyeron en la vision romantica
de] siglo XIX. La concepci6n formalista kantiana de la belleza se hizo
sentir, asimismo, en pensadores como Friedrich Schiller (1759-1805),
quien sostuvo que es bella la forma "que no exi ge ninguna
explicaci6n", aquella "que se explica sin concepto".58 En cuanto a la
idea de lo sublime, que Kant aplica casi exclusivamente a la naturaleza,
tambien tuvo resonancia en la cualificaci6n ulterior del arte. Schiller y
los hermanos Schlegel se valieron de ella en sus interpretaciones de la
tragedia.
A poco mas de un cuarto de siglo de la aparici6n de la CF], el
influjo de Kant se hizo sentir en teorias relativas a la contemplaci6n
estetica, como la que Arthur Schopenhauer (1788-1860) expuso en El
mundo coma voluntad y re presentaci6n (libro III, caps. 34, 37, 38).
Se trata de una teoria bastante simple, comparada con la complejidad
de la teoria kantiana.
Al tratar la movilidad libre de] espiritu, no regida por conceptos
generales, Hermann Helmholtz (1821-1894) -fisi6logo y psic6logo,
considerado un neo kantiano- introduce el concepto de sensibilidad o
 ESTETICA por ejemplo, la de criticar y co municar.

feo, la buena de la mala calidad.60 Asimismo el "tacto", relacionado con una

manera de comportamiento mesurado, consiste en "mantenerse abierto hacia
lo otro", en "elevarse por encima de si mismo".6' Concluye entonces
Gadamer que "en la conciencia estetica encontramos los rasgos que
caracterizan a la conciencia culta".6, Es este el contexto en el que el describe
el significado del concepto de gusto.
En el siglo XX no son pocos los autores que desarrollan un modo critico
de pensar a partir de la frecuentaci6n de las tesis de fondo kantianas. Asi,
Theodor
W. Adorno en su Teoria estetica, partiendo de los conceptos kantianos de
be lleza natural y lo sublime, los reelabora otorgandoles un nuevo
significado: la belleza natural remitiria a un estado de naturaleza libre de
dominaci6n, y lo su blime consistiria en la naturaleza incorporada a la obra de
arte. Esta resignifica ci6n, tal como sen.ala Ines Buchar, implica el
reconocimiento del caracter hist6- rico del arte y tiene por finalidad el analisis
critico del arte del siglo XX.63 Por su parte, Emilio Garroni reconoce que el
lugar de Kant en sus investigaciones "no puede ser sino central",64 ubicaci6n
que se refleja en sus ideas sobre el sen tido y el no sentido y sobre el "sentido
comun" como facultad a adquirir. Asimismo, Gerard Genette considera
"hiperkantiana" su teoria subjetivista de la "relaci6n estetica".65 Reconoce
expresamente que lo que el denomina "atenci6n aspec tua.I orientada a la
apreciaci6n" fue definido, o al menos calificado por Kant, dentro del juicio
de gusto o juicio estetico.
La idea kantiana del desinteres propio de la apreciaci6n estetica reaparece
en Edward Bullough, quien introduce el concepto de "distancia psiquica". Dis
tingue entre la distancia insuficiente (underdistancing), la excesiva (overdis
tancing) y la correcta, que es aquella que permite, en el caso de la obra artistica,
captarla como ficci6n.66
Muchas otras ideas kantianas son aceptadas o reinterpretadas en la
estetica contemporanea. George Santayana sostiene queen la valoraci6n
estetica los 6r ganos de los sentidos son "transparentes", es decir, que las
percepciones no Ila man la atenci6n sabre ninguna parte de nuestro cuerpo
sino sobre el objeto que se nos enfrenta.67Por su parte, al describir su idea de
"insularidad imaginaria", Luis Juan Guerrero afirma, como ya vimos, que
contemplar una obra de arte es dejarla "exhibirse poi si misma en todo su
esplendor",68 desligada de todas las vinculaciones que pudieron darle origen.
El caracter contemplativo de la experiencia estetica adopta, en el siglo
XX, diferentes nombres. Eliseo Vivas introduce, como ya vimos, el de
"atenci6n intransitiva". El adjetivo "intransitivo"-que el justifica por la
oposici6n entre la experiencia estetica y las experiencias religiosa, cientifica
o moral- indica que nuestra atenci6n esta detenida en el objeto, sin que vaya
hacia ninguna otra cosa.69 Polemizando con lo sefi.alado por Vivas, George
Dickie considerara que el caracter "intransitivo" de la contemplaci6n estetica
es insignificante. En "El mito de la actitud estetica"70 dice que un critico que
va a un concierto para hacer una resefi.a (por lo tanto, de un modo transitivo
e interesado) no por eso de/a,de escucharlo de manera estetica. En SU
opinion, la apreciaci6n estetica pue .e estar ligada a diversas funciones como,
 KANTY LA FUNDAMENTACI6N DE LA ESTETICA AUTONOMA 199 es Crftica de] juicio, sobre la base de la traducci6n consagrada de Manuel
Garcia Morente, de 1914, traducciones co mo las de Pablo Oyarzun, de 1991,
En la polemica en torno de! caracter desinteresado de! conservan el titulo original: Critica de Ja fa culta de juzgar. Una reciente
juicio estetico se suman, entre otros argumentos, el de la traducci6n, de R. Rodriguez Aramayo y Salvador Mas, m_troduce la expresi6n
pertinencia de] deseo de posesi6n. Santayana,'' entre otros, Crftica de] discernimiento (2003).
no considera que el deseo de poseer una obra sea nece Es est_e _un texto fundamental en la historia de la Estetica por el que se
sariamente un obstaculo para la apreciaci6n. justi fica de ltivamente la autonomia de la disciplina, en relaci6n a campos
. La experiencia contemplativa de! arte ha perdido vigencia -co mo la etJca- con el que foe a veces confundida. Asimismo, esta obra de
frente a Ios sus tan iales cambios producidos en el siglo XX, Kant
como los de las obras "no aurati cas_ (Benj min), entre las
que se cuentan los ready-mades de Duchamp y los var ados
e1emplos de arte conceptual. El placer contemplativo, cuasi-
religiasa, dara paso entonces a un placer reflexiva, te6rico.
Si _bien la actitud contemplativa de] sujeto defendida por
Kant ha perdido actuahdad, se mantiene hoy vigente otra de
sus ideas fundamentales relativa a la centralidad del sujeto en
el acta de apreciaci6n. '
Digamas p_ar cancl ir que la tercera Crftica es un texto
al que siempre se v elve. En las ultimas decadas, los
simposios y seminarios que le han sido de 1cadas, com? lo
auspi iad s par el Instituto de Filosofia de! Conseja Supe nor
de lnvest1gac10nes C1ent1ficas de Madrid, hablan de la
vigencia de esa obra y de! estimulo del pensamiento kantiano
sobre temas que siguen abiertos a nuevas desarrollos y
debates. Si bien autores camo Shaftesbury O Hutcheson
abordaron con anterioridad algunos temas de Ia estetica
kantiana coma el del desinteres, es indudable que Kant
pens6 mas radicalmente y sist matiz6 mas que cualquier otro
esa y otras cuestiones fundamentales.
., Si a ve es en el analisis o en la discusi6n sobre el
fen6meno de la aprecia c10n, cons1derado como "juicio de
gusto", no aparece explicit.amente el nom bre de Kant es
parque muchas de sus ideas han sido ya definitivamente
incor poradas como canstituyentes del hecho estetico de
base. Deberia ser esta prueba mas que suficiente de su
vigencia.

Fragmentos seleccionados

Kant, Emmanuel. Cr{tica de la facultad de ;uzgar

trad. Pablo Oyarzun, Caracas, Monte Avila, 1991

(Los n merose. aginaci6n, despues del numero de

parrafo, correspon den a la pnmera ed1c10n del original
aleman.)
La Critica de la facultad de juzgar suele pasar por la
"Estetica" de Kant. Aunque el titulo mas conocido en espafi.ol