Signos Vitales

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REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DE PODER POPULAR PARA LA EDUCACÍON


UNIVERSITARIO
UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL ROMULO GALLEGOS
ÁREA CIENCIAS DE LA SALUD
PROGRAMA DE MEDICINA
HOSPITAL ISRAEL RANUAREZ BALZA
ASIGNATURA: MEDICINA GENERAL IV

SIGNOS VITALES

DOCENTE: PARTICIPANTES:
DRA. NIRUMA GUTIÉRREZ CASTRO, MARYELIN V- 27867493
CASTRO, JEAN V -25887950
CASTRO, JOSELYNE V- 28482614
CEBALLOS, BETZABETH V- 28225104
CEREZO, MICHELLE V- 28531345
COLMENARES, LEIDY V- 27631228
COLMENARES, RAMON V-26179494
SECCION 1

MARZO 2022
CONTENIDO

FISIOLOGÍA SANGUÍNEA.............................................................................................4

Hematopoyesis...............................................................................................................4

Eritrocitos O Hematíes O Glóbulos Rojos.....................................................................5

Leucocitos O Glóbulos Blancos.....................................................................................6

Plasma Sanguíneo..........................................................................................................7

HEMATOLOGÍA COMPLETO........................................................................................8

Serie Roja.......................................................................................................................8

Serie Blanca....................................................................................................................8

Plaquetas Y Capacidad De Coagulación........................................................................9

Alteraciones....................................................................................................................9

SIGNOS VITALES..........................................................................................................13

Presión Arterial................................................................................................................16

FISIOLOGIA DE LA Temperatura.................................................................................19

Pirogenos......................................................................................................................20

Citocinas Pirogenas.....................................................................................................20

Exógenos......................................................................................................................21

Fisiopatología De La Fiebre.........................................................................................21

TEMPERATURA............................................................................................................23

Técnica para la toma de la temperatura corporal..........................................................24


Recomendaciones y precauciones.................................................................................24
HIPOTERMIA.................................................................................................................26

Etiología.......................................................................................................................26

Las manifestaciones clínicas dependen del grado de hipotermia.................................26


Criterios De Derivación................................................................................................27
Fisiopatología................................................................................................................27
Tratamiento...................................................................................................................27
HIPERTERMIA...............................................................................................................28

Fisiopatología...............................................................................................................28

Manifestaciones Clínicas..............................................................................................28

Pruebas complementarias..............................................................................................28
Tratamiento...................................................................................................................28
RESPIRACIÓN................................................................................................................29
FISIOLOGÍA SANGUÍNEA

La sangres es un tejido conectivo líquido que circula por el sistema vascular sanguíneo
(capilares,venas,areterias ) con un sistema de transporte y comunicación para gases ,
nutrientes sustancias de defensa y hormonas .
La sangre es de color rojo debido a la presencia de hemoglobina en los hematíes. Su
viscosidad y su densidad están relacionadas con la cantidad de hematíes y su presión
osmótica, sobre todo, con su contenido en proteínas. Su pH se encuentra entre 7.35-7.45. El
volúmen de sangre circulante o volemia es la cantidad total de sangre que tiene un
individuo y representa aproximadamente el 8% del peso corporal ). Del volúmen sanguíneo
total, alrededor de 1 litro se encuentra en los pulmones, 3 litros en la circulación venosa
sistémica y el litro restante se reparte entre el corazón, las arterias sistémicas, las arteriolas
y los capilares

Entre sus funciones, destacan:


 Distribución de nutrientes desde el intestino a los tejidos
 Intercambio de gases: transporte de oxígeno desde los pulmones hasta los
tejidos y de dióxido de carbono desde los tejidos hasta los pulmones
 Transporte de productos de deshecho, resultantes del metabolismo celular, desde
los lugares de producción hasta los de eliminación
 Transporte de hormonas desde las glándulas endocrinas hasta los tejidos diana
 Protección frente a microorganismos invasores
 Protección frente a hemorragias
El proceso de formación de sangre se llama Hematopoyesis

Hematopoyesis
La hematopoyesis es el proceso de formación, maduración y paso a la circulación
sistémica de las células de la sangre. Los 3 tipos de células sanguíneas no se originan en la
sangre sino que solamente la emplean para realizar sus funciones o para desplazarse de un
lado a otro. En realidad, proceden de un precursor común o célula madre que se origina en
el tejido hematopoyético de la médula ósea y que es pluripotencial porque puede
diferenciarse en cualquier tipo de célula sanguínea.
En la vida embrionaria la hematopoyesis tiene lugar en el hígado, bazo y ganglios
linfáticos. En la última parte del embarazo y después del nacimiento tiene lugar en la
médula ósea de todos los huesos.
La "estirpe mieloide", comprende a los eritrocitos, plaquetas, leucocitos granulares
(neutrófilos, basófilos y eosinófilos) y monocitos-macrófagos.
La "estirpe linfoide", comprende únicamente a los linfocitos, que pueden ser de dos
tipos: linfocitos B y linfocitos T (hay un tercer tipo, los linfocitos NK).
Composición de la sangre :
 Glóbulos rojos o eritrocitos o hematíes
 Glóbulos blancos o leucocitos: Granulocitos o leucocitos granulares (neutrófilos,
eosinófilos y basófilos). Agranulocitos o leucocitos agranulares (linfocitos y
monocitos)
 Plaquetas o trombocitos

Eritrocitos O Hematíes O Glóbulos Rojos


Los glóbulos rojos o eritrocitos o hematíes son el tipo de célula más numerosa de la
sangre ya que constituyen el 99% de los elementos formes de la sangre. En realidad no son
verdaderas células porque no tienen núcleo ni otras organelas y su tiempo de vida es
limitado (unos 120 días).
Su principal función es la de transportar la hemoglobina y, en consecuencia, llevar
oxígeno (O2) desde los pulmones a los tejidos y dióxido de carbono (CO2) desde los
tejidos a los pulmones.
Metabolismo del hierro
es el conjunto de reacciones químicas que mantienen la homeostasis humana del hierro
tanto a nivel sistémico como celular.El hierro es un componente esencial de la hemoglobina
(Hb) porque es necesario para que ésta sea sintetizada
El hierro que se ingiere en una dieta normal es de unos 15-20 mg al día. Es absorbido a
través de las paredes del intestino delgado en cantidades que dependen de las necesidades
del organismo
Leucocitos O Glóbulos Blancos
Los leucocitos son células sanguíneas verdaderas, puesto que tienen núcleo, al contrario
de lo que sucede con los hematíes o las plaquetas. Son las unidades móviles del sistema de
protección (o sistema inmune) del cuerpo humano,son las células encargadas de defender al
organismo de las infecciones y ayudar a eliminar los residuos y desechos de los tejidos.
La cifra normal de glóbulos blancos es de 5.000 a 10.000 por milímetro cúbico y hay
cinco tipos distintos de glóbulos blancos:
Los neutrófilos: son los leucocitos más numerosos y a los que nos referimos
normalmente cuando hablamos de granulocitos. Constituyen cerca del 60-70% de
leucocitos y son los primeros en acudir a una infección.
Los linfocitos: constituyen cerca del 30% del total de glóbulos blancos. Se forman en la
médula ósea, pero luego se dirigen a los ganglios linfáticos, bazo, amígdalas, timo y en
realidad a cualquier parte del cuerpo. Al contrario que los granulocitos, viven mucho
tiempo y maduran y se multiplican ante estímulos determinados.
Hay dos tipos principales de linfocitos: células T y células B. Las células B producen
anticuerpos los cuales se unen y destruyen los virus o las bacterias invasoras. Las células T
son combatientes directos de los invasores extraños y también productoras de citoquinas,
las cuales son sustancias biológicas que ayudan a activar otros componentes del sistema
inmunológico, uno de los cuales son los macrófagos.
Los monocitos: constituyen de un 5% al 12% del total de glóbulos blancos en la sangre.
Su función también es de defensa, destruyendo y digiriendo células infectadas o dañadas.
Pero también tienen otras importantes funciones, pues al igual que los linfocitos se dirigen
a los diferentes tejidos (la piel, los pulmones, el hígado o el bazo), en los que ejercen
distintas funciones como macrófagos (células que engullen y procesan todos los desechos
de células moribundas) o se convierten en células especializadas, como los osteoclastos,
que remodelan el tejido óseo envejecido.
Los eosinófilos: son los encargados de responder a las reacciones alérgicas. Lo que
hacen es inactivar las sustancias extrañas al cuerpo para que no causen daño, y también
poseen gránulos tóxicos que matan a las células invasoras y limpian el área de inflamación.
El porcentaje normal en sangre es del 2 al 10%.
Los basófilos: también intervienen en las reacciones alérgicas, liberando histamina,
sustancia que aumenta la circulación sanguínea en la zona para que aparezcan otro tipo de
glóbulos blancos y, además, facilitan que éstos salgan de los vasos sanguíneos y avancen
hacia la parte dañada

Plasma Sanguíneo
El plasma sanguíneo es un líquido amarillento claro constituído por un 95% de agua y el
5% restante por diversas sustancias en solución y suspensión.Estas sustancias incluyen:
iones minerales (sodio, potasio, calcio, cloro .....), pequeñas moléculas orgánicas
(aminoácidos, ácidos grasos y glucosa) y proteínas plasmáticas (albúminas, fibrinógeno....).
En condiciones normales, las proteínas del plasma constituyen el 7-9% del plasma (6-8
g/100 ml), destacando tres grandes grupos de proteínas: albúminas, globulinas y factores de
la coagulación como el fibrinógeno y la protrombina.
Las albúminas son las más pequeñas y abundantes y representan el 60% de las proteinas
del plasma. Las sintetiza el hígado y actúan como transportadoras de lípidos y hormonas
esteroides en la sangre
Las globulinas representan el 40% de las proteinas del plasma. Se dividen en
a.globulinas, b-globulinas y y-globulinas. son anticuerpos producidos por las células
plasmáticas y resultan fundamentales en la defensa del organismo frente a las infecciones.
El fibrinógeno es un importante factor de la coagulación. Es sintetizado por el hígado y
representa el 2-4% de las proteínas del plasma.
HEMATOLOGÍA COMPLETO

Una hematología completa es un estudio de laboratorio en el cual se reportan los valores


correspondientes a la cantidad y distribución porcentual de las distintas células de la sangre,
el valor de hemoglobina y los llamados índices hematimétricos.
El estudio de hematología se realiza al analizar una muestra de sangre que debe ser tomada
en un tubo que contenga un anticoagulante, sustancia que impedirá la coagulación de la
sangre con el fin de que puedan ser evaluadas las distintas células que la conforman. Por lo
general se utiliza un tubo al vacío con tapa morada que contiene en su interior EDTA como
anticoagulante y no es necesario que la persona se encuentre en ayuno para poder llevarlo a
cabo. El examen podrá ver reflejada la información de hemograma, conteo de glóbulos
blancos y rojos, la concentración de hemoglobina, hematocritos y plaquetas

Serie Roja
En la serie roja valoramos esencialmente el número de hematíes que hay en sangre, el
porcentaje de sangre que ocupan, la cantidad de hemoglobina que tiene cada uno de
promedio, su forma y volumen, entre otros parámetros. Estos parámetros nos permiten
estudiar estados de anemia, entre otras enfermedades.
• Hematíes: número total de células rojas en sangre, que oscila entre 4,5-5,9
millones/mm3 en hombres y 4-5,2 millones/mm3 en mujeres.
• Hematocrito: el porcentaje del volumen de los hematíes con respecto al volumen
total de sangre, cuyos valores son 41-53% en hombres y 35-46% en mujeres.
• Hemoglobina: la proteína de los hematíes que transporta el oxígeno, cuyos niveles
son 13,5-17,5 g/dl en hombres y 12-16 gr/dl en mujeres.
• Volumen corpuscular medio (VCM): valora el tamaño medio de los hematíes, que
oscila entre 80 y 100 ml.
• Hemoglobina corpuscular media (HCN): cantidad de hemoglobina que tienen de
promedio los hematíes, y que oscila entre 27 y 33 pgr.

Serie Blanca
Su estudio nos permite valorar estados de infección o de alteraciones de la inmunidad.
No se diferencian los valores en función del género y se expresan tanto en números totales
como en porcentajes del tipo de leucocitos. Los parámetros más habituales que se estudian
son:
• Leucocitos: total de glóbulos blancos que hay en sangre; sus valores suelen oscilar
entre 4.000-10.000/mm3
• Neutrófilos: un tipo de leucocitos que se eleva en general con las infecciones
bacterianas; sus valores de referencia son 2.000-7.500/mm3 o 40-75%.
• Linfocitos: una clase de glóbulos blancos que se eleva sobre todo en infecciones
víricas y que producen anticuerpos; sus valores de normalidad son 1.500-4.000/mm3 o 20-
45%.
• Monocitos: un tipo de leucocitos que una vez activo se convierte en un macrófago,
que se encarga de fagocitar, es decir, “comerse” a varios microorganismos; sus valores de
referencia son 200-800/mm3 o 2-10%.
• Eosinófilos: una clase de leucocitos que se activa ante reacciones alérgicas o la
presencia de microorganismos que no se pueden fagocitar; sus valores de referencia son 40-
400/mm3 o 1-3%.
• Basófilos: unos leucocitos implicados también en la gestión de las reacciones
alérgicas; sus valores de referencia son 10-100/mm3 o menos de un 1%.

Plaquetas Y Capacidad De Coagulación


Cuando con un hemograma queremos valorar la capacidad de coagulación del paciente
son varios los parámetros que evaluamos:
• Plaquetas, que indica el número total de estas células que hay en sangre, cuyos
parámetros de referencia oscilan entre 150.000 y 400.000 por mm3.

Alteraciones
 Leucocitosis: Se define leucocitosis como aumento del número de leucocitos
circulantes > 11 000 mm3. Pueden ser fisiológicas como ocurre en el recién nacido
(hasta 30 000 mm3), secundarias a ejercicios, alteraciones emocionales como:
miedo, agitación, ovulación o secundarias a inflamación producida por
enfermedades infecciosas inflamatorias, neoplásicas, estados de estrés metabólico
(acidosis, anoxia, convulsiones...), sangramientos agudos o enfermedades
hematológicas.
 Neutrofilia; corresponde al aumento de polimorfonucleares sobre 6 000 o 10 000
mm3. Se ve con mayor frecuencia en las infecciones bacteriana agudas y en forma
pasajera al comienzo de las infecciones virales.

 Linfocitosis Estas pueden ser de dos tipos: relativas o absolutas.

o Las linfocitosis relativas son aquellas en que hay más de 50% de linfocitos
con cifras leucocitarias disminuidas, normales o poco aumentadas. En niños
se presentan con mayor frecuencia frente a infecciones virales respiratorias,
digestivas o exantemáticas (sarampión, rubéola, varicela) con
aproximadamente 10% o más de linfocitos atípicos o hiperbasólicos. Con
menor frecuencia en tifoidea, brucelosis, tuberculosis.

o Las linfocitosis absolutas corresponden a aquellas en que en el hemograma


hay más de 10 000 linfocitos mm3, con cifras leucocitarias aumentadas que
pueden llegar a ser > de 50 000 mm3. Se presentan en coqueluche,
adenovirus tipo 12, linfocitosis infecciosa, mononucleosis infecciosa

 Monocitosis: La presencia de más de 1 000 monocitos mm3 en lactante hasta los 2


años y más de 800 monocitos mm3 en preescolares y escolares, se consideran
momocitosis. Se presentan en general acompañadas de linfocitosis y eosinofilia
moderada en convalescencia de enfermedades infecciosas, como por ejemplo en
reabsorción de neumonías, infecciones crónicas granulomatosas (TBC, Hodgkin),
infecciones virales y en infecciones por gérmenes intracelulares (Brucelosis,
Listeria monicitógena).

 basófilos El aumento en el número de basófilos (basofilia) puede ocurrir en


personas con hipotiroidismo. Los trastornos mieloproliferativos (por ejemplo,
policitemia vera y mielofibrosis) cursan con un notable incremento en el número de
basófilos
 Eosinofilia se considera eosinofilia el aumento de eosinófilos sobre 500 mm3. En el
niño se ven aumentos moderados con mayor frecuencia en parásitos que tengan
contacto con la sangre (ascaris, larva migrante de Toxocara canis o Catis, Triquina
dístoma hepático, anquilostoma, sarcoptes scabiei). Son causa también de
eosinofilia las enfermedades alérgicas como asma, urticarias y eczema, drogas como
penicilinas, amino glicósidos, cefalosporinas, ferroterapia y otras; así como
enfermedades granulomatosas del mesénquima, cirrosis hepática, neoplasias y post
radioterapia.

 Leucopenias se considera leucopenia la presencia al hemograma de menos de 4 000


leucocitosis mm3, con disminución relativa o absoluta de neutrofilos y/o linfocitos.

 Neutropenias el hallazgo de menos de 1 500 polimorfonucleares mm3, corresponde


a neutropenia. Estas pueden ser transitorias o prolongadas y en cuanto al riesgo de
infección pueden dividirse en:
a. Leves: de 1 000 - 1 500 (asintomáticas)
b. Medianas: de 500 - 1 000 (infecciones cutáneas)
c Graves: menos de 500 (infecciones bucofaríngeas, neumonías y sepsis)
En cuanto a su origen puede ser por menor producción, alteraciones en la
maduración (centrales) o por mayor destrucción o secuestro (periféricas). Pueden
ser secundarias a infecciones severas, drogas, esplenomegalia, desnutrición severa,
enfermedades del colágeno, inmunes, aplasias o invasión por células neoplásicas.

 Linfopenia son Menos de 2 000 linfocitos mm3 en el hemograma corresponden a


linfopenias. Pueden ser congénitas que son raras o adquiridas por infecciones
virales, que pueden acompañarse de leucopenias y producir "anergia" importante
(sarampión, rubéola, varicela.) El SIDA, que puede presentarse en hijos de madres
infectadas o por transfusiones, también puede producir linfopenia.
 Monocitopenia es una reducción del recuento de monocitos en sangre a < 500/mcL
(< 0,5 × 109/L). El riesgo de ciertas infecciones aumenta. Se diagnostica por
hemograma completo con fórmula leucocitaria diferencial. Puede ser necesario un
tratamiento con trasplante de células madre hematopoyéticas.
 Eosinopenia: Un número bajo de eosinófilos en la sangre (eosinopenia) puede
observarse en el síndrome de Cushing, en infecciones sanguíneas (septicemia) y en
el tratamiento con corticoesteroides. Sin embargo, un bajo número de eosinófilos no
suele causar problemas debido a que otras partes del sistema inmunitario
compensan adecuadamente esta alteración.
 Basófilos la disminución en el número de basófilos (basopenia) puede producirse
como respuesta a una tirotoxicosis, a reacciones de hipersensibilidad aguda y a
infecciones
SIGNOS VITALES

Los signos vitales (SV) son valores que permiten estimar la efectividad de la circulación,
de la respiración y de las funciones neurológicas basales y su réplica a diferentes estímulos
fisiológicos y patológicos. Son la cuantificación de acciones fisiológicas, como la
frecuencia cardiaca (FC), la frecuencia respiratoria (FR), la temperatura corporal (TC), la
presión arterial (TA) y el pulso. Cualquier alteración de los valores normales, orienta hacia
un mal funcionamiento orgánico. Su toma está indicada al ingreso y egreso del paciente al
centro asistencial, durante la estancia hospitalaria, de inmediato cuando el paciente
manifiesta cambios en su condición funcional y según la prescripción médica.
Pulso Arterial
Es el levantamiento sincrónico con el latid cardiaco, que ocurre en las arterias
periféricas. Las arterias carótidas, braquial, radial, femoral, poplítea y pedias son las
habituales en el conocimiento del pulso arterial.
Características que se estudian al palpar el pulso arterial
-Frecuencia: número de ondas percibidas en un minuto. Se cuenta en 30 segundos y el
número de latidos lo multiplicamos por 2. La frecuencia normal del pulso en el adulto es de
60 a 90 por minuto. Si es menor de 60 hablamos de bradisfigmia y si es mayor a 90
hablamos de taquisfignia.
-Ritmo: el ritmo es regular o rítmico.
-Volumen o amplitud: Normal cuando el pulso es fácilmente palpable, desparece
intermitente y todos los pulsos son simétricos, con elevaciones plenas, fuertes y rápidas.
-Elasticidad: capacidad de expansión o deformación de pared arterial bajo la onda
pulsátil. Una arteria normal, es lisa, suave y recta.

Tipos de pulso
-Pulso bigeminado: Se caracteriza porque se palpan secuencias de dos latidos, el
primero normal, y el segundo de menor amplitud (habitualmente el segundo latido
corresponde a una extrasístole).
- Pulso céler: Es un pulso amplio, de ascenso y descenso rápido. Se encuentra
principalmente en insuficiencias de la válvula aórtica, de magnitud importante. Una
maniobra que sirve para reconocer esta condición es levantar el antebrazo del paciente
sobre el nivel del corazón, palpando el antebrazo, cerca de la muñeca, con todos los dedos
de la mano: el pulso se hace aún más notorio (pulso en “martillo de agua”; pulso de
Corrigan).
- Pulso dícroto: Se caracteriza por una pequeña onda en la fase descendente. Se ha
descrito en cuadros de fiebre tifoidea, pero, en la práctica clínica, es casi imposible de
palpar.
-Pulso filiforme: Es un pulso rápido, débil, de poca amplitud. Se encuentra en pacientes
con hipotensión arterial, deshidratados, o en colapso circulatorio (shock).
-Pulso paradójico: Normalmente ocurre un discreto descenso de la amplitud del pulso y
de la atención arterial.
Sitios para tomar el pulso
1.- Temporal: Explora la arteria temporal, se palpa sobre el área de la sien en la zona
temporal delante del pabellón auricular. Sigue un trayecto, a veces visible, que desde la ceja
hacia el cuero cabelludo (zona de la patilla).
2.- Carótida: Explora la arteria carótida, se palpa a ambos lados de la tráquea, medial al
borde interno del musculo esternocleidomastoideo, siguiendo dicho borde hasta el ángulo
de la mandíbula.
3.- Humeral: Explora la arteria braquial, se palpa sobre la cara anterior del pliegue del
codo.
4.- Femoral: Explora la arteria femoral, se palpa por debajo del ligamento del pliegue,
punto medio de la línea espina iliaca anteroposterior y sínfisis pubiana.
5.- Axilar: Explora la arteria axilar, se palpa en línea media axilar subyacente al húmero
con el brazo en rotación externa. Debajo de las inserciones del pectoral mayor.
6.- Radial: Explora la arteria radial, se palpa en la cara anterior y lateral de las muñecas,
entre el tendón del musculo flexor radial del carpo y la apófisis estiloide del radio.
7.- Cubital: Explora la arteria cubital, se palpa por dentro de las apofestiloides
respectivas.
8.- Poplítea: Explora la arteria poplítea, se palpa en la cara posterior de las rodillas, ya
sea estando el paciente de cubito dorsal o prono.
9.- Pulso pedio: Explora la arteria pedia, se palpa en el dorso de los pies, lateral al
tendón extensor del ortejo mayor. Una palpación transversal a la dirección de la arteria, con
dos o tres dedos, puede facilitar ubicar el pulso.
De todos estos sitios anatómicos, los más utilizados son el pulso carotideo, radial,
braquial y femoral.
Técnica para tomar el pulso arterial
Se utiliza el pulgar y el índice para palpa y presionar la arteria a explorar, con esto se
busca disminuir un poco la presión e identificar la forma de la onda del pulso (frecuencia,
ritmo y amplitud).
Recomendaciones para la valoración del pulso.
1. Manos limpias, secas y en lo posible tibias.
2. Ponga al paciente en reposo al menos unos 10 a 15 minutos antes de controlar el puso.
3. Verificar si el paciente ha recibido medicamentos que afectan la frecuencia cardiaca.
4. Evitar usar el dedo pulgar, porque el latido de este dedo es muy fuerte y se pueden
confundir los pulsos del paciente y del examinador.
5. Oprima suavemente la arteria para no hacer desaparecer totalmente el pulso.
6. Palpar cada pulso en forma individual para evaluar sus características y en forma
simultánea para detectar cambios en la sincronización y la amplitud.
Frecuencia cardiaca
Son los latidos del corazón por minuto, La frecuencia normal en el adulto en reposo
oscila entre 50 y 100 latidos.
Técnica para tomar la frecuencia cardiaca
1. Colocar al paciente en sedestación o decúbito supino.
2. Colocar el diafragma del estetoscopio en el 5to espacio intercostal, línea
medioclavicular izquierda.
3. Contar los latidos en 6, 15 o 30 segundos, y multiplicarlo por 10, 4 o 2 según
corresponda, para obtener el número de latidos por minuto.
Alteraciones de la frecuencia cardiaca
-Taquicardia: FC elevada mayor de 100 latidos por minuto, que no sobrepasa los 160.
-Bradicardia: FC entre 40 y 60 latidos por minuto.
PRESIÓN ARTERIAL

Es la presión que ejerce la sangre en la pared de las arterias al momento que la sangre es
expulsada del corazón en cada contraccion cardíaca. Es necesario para que la sangre sea
distribuida por todos los vasos sanguíneos de nuestro cuerpo de manera constante todos
los días de nuestras vidas , por eso es que las arterias son más gruesas para soportar la
fuerza de la sangre y poder distribuirla por todo el cuerpo
La presión arterial la caracterizamos como dos conjuntos de presiones que se generan en
el corazón y son la sistólica y la sistólica
Diastólica : es cuando el corazón se llena de Sangre es decir se relaja
Sistólica : es la que se genera cuando el corazón expulsa la Sangre ( cuando se contrae
esto sucede inmediatamente después de la diástole )
Las lecturas se dan en número : la presión arterial normal es de 120/80 siendo la
sistólica la más alta y la diastólica las de menor valor pero
Para poder medir la presión arterial debemos utilizar un tensiómetro y un estetoscopio
para que nos den las medicion exacta
¿En qué consiste la prueba para medir la tensión?
Todo el mundo está de sobra familiarizado con la prueba convencional para medir la
tensión: el médico coloca un manguito alrededor del brazo del paciente y lo infla de tal
forma que la tensión alcanza el punto mínimo y máximo. Segura explica que con esta
prueba se busca primero obstruir la arteria que se encuentra en el interior del brazo y
seguidamente, ir abriéndola poco a poco. En el momento en el que esa arteria se abre se
mide la presión máxima, la sistólica. Según el médico especialista, antiguamente, la tensión
arterial se medía escuchando los ruidos que producía la arteria; cuando esos ruidos
desaparecían, se determinaba el valor de la tensión mínima o diastólica. “Hoy en día
contamos con aparatos automáticos detectan estos dos momentos”, precisa Segura.
¿Cuáles son los valores normales de presión arterial?
La tensión arterial normal en adultos es de 120 mm de mercurio, cuando el corazón está
en sus máximas pulsaciones y de 80 mm de mercurio, cuando está más relajado. “El punto
de corte para detectar problemas de hipertensión es si la presión arterial es igual o supera
los 90 mm de tensión diastólica y los 140 de mm de tensión sistólica”, aclara el nefrólogo.
Según Segura, la presión arterial es un parámetro que tiene mucha variabilidad y oscila
mucho dependiendo de la actividad, el momento del día o las comidas que se han realizado.
“Hoy en día disponemos de aparatos que nos permiten conocer cómo se encuentra la
tensión en distintos momentos del día y poder así aplicar mejor, tanto medidas de
diagnóstico, como de tratamiento”, apunta el experto.
¿Cuándo debe recomendar el especialista la automedición de la presión arterial?
En líneas generales, el profesional sanitario puede recomendar la automedición de la
presión arterial siempre (salvo algunas excepciones, principalmente en pacientes obsesivos
y con tendencia a la automedicación). Se trata de un método eficaz que permite conocer la
tensión del paciente fuera de la consulta, en su vida cotidiana, evitando así el conocido
como fenómeno de la bata blanca (la sensación que experimentan los pacientes al llegar al
centro sanitario y ponerse frente al profesional sanitario. Este fenómeno provoca que la
presión arterial de los pacientes se eleve un poco con respecto a su cifra normal).
La automedición de la presión arterial debe realizarse por la mañana y por la noche, tras
un reposo previo de 3 minutos. La posición adecuada es la siguiente: sentado, con las
piernas sin cruzar, la espalda apoyada en la silla y el brazo en donde se coloque el manguito
apoyado sobre la mesa. Es recomendable que el manguito se ponga en el brazo (y no en la
muñeca, salvo excepciones -personas obesas-).
Tras la automedición, el paciente debe registrar los resultados obtenidos apuntándolos en
un cuaderno. Deberá llevar este cuaderno al profesional sanitario correspondiente (médico
o enfermero) cuando tenga su cita para revisarlos juntos. Con estos resultados, el
profesional valorará el tratamiento y seguimiento del paciente.
¿Cómo medir la tensión arterial?
Existen diversas maneras de medir la presión arterial:
Esfigmomanómetro de mercurio: Es el más exacto y menos expuesto a errores. Para
su uso se requiere un fonendoscopio.
Esfigmomanómetro de aire: Es el más utilizado y es también un aparato preciso.
Igualmente necesita de un fonendoscopio para su uso.
Aparato electrónico: Se utiliza mucho para realizar el autocontrol, no necesita
fonendoscopio porque lleva un detector del pulso incorporado y es de fácil manejo. No
obstante, se trata de un aparato muy sensible a los ruidos y a los movimientos, por lo que
para que los valores obtenidos sean exactos, es necesario que el brazo no se mueva y que no
se hable. Es importante que el aparato esté en buenas condiciones y se revise
periódicamente
Además, para medir la presión arterial se requiere cumplir una serie de condiciones:
Para medir la presión arterial debe colocarse el manguito del esfigmomanómetro a la
altura del corazón. El borde superior debe estar como mínimo dos centímetros por encima
de la flexura del codo. A continuación se infla el manguito hasta una presión de 180
milímetros de Hg. Si se sabe que en determinaciones anteriores la presión sistólica era
superior a esta cifra, se infla hasta una presión 200 mm Hg por encima de la última
conocida. Se coloca la campana del fonendo allí donde previamente se ha localizado el
latido arterial en la flexura del codo y se procede a desinflar poco a poco el manguito. El
primer latido que se escucha corresponde a la presión sistólica o máxima y la desaparición
del latido a la presión diastólica o mínima. En los niños y también en algunos adultos, los
latidos no desaparecen; entonces se considera como presión diastólica aquella en la que se
modifica la tonalidad de los latidos
FISIOLOGIA DE LA TEMPERATURA

Se refiere al grado de calor o de frío, expresados en término de una escala específica. La


temperatura corporal representa un equilibrio entre el calor producido por el cuerpo y su
pérdida. Cuando la producción de calor es equivalente a la pérdida de temperatura corporal,
ésta última se mantiene constante en condiciones normales. El control de la temperatura del
cuerpo está regulada en el hipotálamo, que mantiene constante la temperatura central. La
temperatura normal media de un paciente adulto está entre 36.7 y 37ºC.
 Hipotermia: temperatura menor a 36°C
 Febrícula o temperatura subfebril: entre 37,5°C y 38°C
 Fiebre: temperatura entre 38 °C y 39,9 °C
 Hiperpirexia: temperatura mayor a 40°C
 Hipertermia: Aumento de la temperatura por un desequilibrio entre la producción
y la pérdida de calor. Ocurre golpes de calor, alteraciones endocrinológicas,
hipertermia maligna, intoxicación por fármacos o drogas.
 Hipertermia maligna: disfunción súbita y catastrófica del metabolismo muscular
que suele desencadenarse por anestesia general o relajantes musculares.
El hipotálamo es nuestro termostato biológico y recibe e integra señales homeostáticas
para mantener la temperatura dentro de un pequeño intervalo.
Las células pueden ser estimuladas por la formación de pirógenos exógenos para
producir citocinas llamadas pirógenos endógenos, que afectan la termosensibilidad de las
neuronas en el área preoptica del hipotálamo, aumentado la producción de calor y
disminuyendo sus pérdidas, hasta que la temperatura corporal llega al valor de referencia.
Esta información es transferida por la temperatura de la sangre que fluye alrededor del
hipotálamo. Es posible que la fiebre se inicie debido a la producción de pirógenos
endógenos, originados a partir de condiciones que pueden dividirse en varios grupos:
 Infecciones producidas por bacterias, virus y parásitos.
 Reacciones inmunes, anormalidades inmunológicas e inmunodeficiencia adquirida.
 Destrucción de tejidos, como durante traumas, necrosis local (infartos) y reacciones
inflamatorias en tejidos y vasos (flebitis, arteritis), infartos pulmonares, cerebrales y
miocárdicos y rabdomiolisis.
 Inflamaciones específicas (Sarcoidosis, hepatitis granulomatosa).
 Fallas metabólicas agudas, como la artritis úrica, porfiria, crisis de Addison, crisis
tirotóxica y Feocromocitoma.
 Administración de algunas drogas.
 Deshidratación o administración de sales (esta es la razón por la que la fiebre
aparece junto con diarrea)
 Administración de proteínas foráneas (fracción globulina antitetánica de suero de
caballo).
 Destrucción de tejidos, como durante traumas, necrosis local (infartos) y reacciones
inflamatorias en tejidos y vasos (flebitis, arteritis), infartos pulmonares, cerebrales y
miocárdicos y rabdomiolisis.
 Inflamaciones específicas (Sarcoidosis, hepatitis granulomatosa).
 Fallas metabólicas agudas, como la artritis úrica, porfiria, crisis de Addison, crisis
tirotóxica y Feocromocitoma.
 Administración de algunas drogas.

Pirogenos
El término pirógeno se usa para aludir a cualquier sustancia productora de fiebre. Los
pirógenos exógenos proceden del entorno exterior del paciente; casi todos son productos
microbianos, toxinas o microorganismos completos (incluidos los virus). Los pirógenos
exógenos son ajenos al huésped, mientras que los endógenos son producidos por él, en
respuesta generalmente a estímulos iniciadores que suelen ser desencadenados por la
infección o la inflamación. El ejemplo clásico de pirógeno exógeno es la endotoxina de tipo
lipopolisacarido producida por todas las bacterias gramnegativas. Entre los productos
pirógenos de los microorganismos grampositivos están las enterotoxinas de Staphylococcus
aureus y las toxinas de los estreptococos de grupos A y B, llamadas también
superantígenos. Una toxina estafilococica de importancia clínica es la que poseen algunas
cepas de S. aureus obtenidas de individuos con síndrome de choque toxico.

Citocinas Pirogenas
Las citocinas son proteínas pequeñas que regulan los procesos inmunitarios,
inflamatorios y hematopoyéticos.
Por ejemplo, la leucocitosis con neutrofilia absoluta en respuesta a infecciones graves
resulta de la acción de IL-1 e IL-6. La síntesis y la liberación de las citocinas pirógenas
dependen de la inducción de una amplia variedad de pirógenos exógenos que en su mayor
parte proceden de fuentes bacterianas o fúngicas reconocibles. Sin embargo, en ausencia de
infecciones microbianas, la fiebre puede ser una manifestación de la enfermedad. Por
ejemplo, los procesos inflamatorios, los traumatismos, la necrosis del tejido o los complejos
antígeno-anticuerpo pueden inducir la producción de IL-1, TNF, IL-6 o de todas ellas que,
tanto de manera individual como combinada, hacen que el hipotálamo eleve el punto de
ajuste hasta niveles febriles.

Exógenos
Las células pueden ser estimuladas por la formación de pirógenos exógenos para
producir citocinas llamadas pirógenos endógenos, que afectan la termosensibilidad de las
neuronas en el área preoptica del hipotálamo, aumentado la producción de calor y
disminuyendo sus pérdidas, hasta que la temperatura corporal llega al valor de referencia.
Esta información es transferida por la temperatura de la sangre que fluye alrededor del
hipotálamo. Es posible que la fiebre se inicie debido a la producción de pirógenos
endógenos, originados a partir de condiciones que pueden dividirse en varios grupos:
 Infecciones producidas por bacterias, virus y parásitos.
 Reacciones inmunes, anormalidades inmunológicas e inmunodeficiencia adquirida.

Fisiopatología De La Fiebre
En el hipotálamo anterior, en la región preoptica, se encuentra un conglomerado de
neuronas termosensibles, sensibles al Pirógeno, que controlan la temperatura corporal
normal así como el inicio del fenómeno febril; esta zona se conoce como el centro
termorregulador principal (C.T.P.), ya que a nivel de la médula, peritoneo y grandes vasos
sanguíneos, se encuentran neuronas que son importantes en la regulación de la temperatura
corporal (centros termorreguladores accesorios). Estos centros funcionan como
recopiladores de información, que luego es transmitida al C.T.P., para su procesamiento y
eventuales cambios en la regulación de la temperatura. Estas neuronas termosensibles
(especialmente las sensibles al frío), mantienen una frecuencia normal de “disparo”
(estímulos eferentes); esta frecuencia es la que en última instancia controla la temperatura
corporal. El Pirógeno es liberado en la circulación por los macrófagos, llega al centro
termorregulador principal uniéndose a receptores específicos, induciendo en la síntesis de
prostaglandinas de la serie E (E1 -E2) en el hipotálamo anterior. El importante papel de las
prostaglandinas en la producción de fiebre, ha sido demostrado en muchos trabajos. Los
mecanismos específicos en los que actúan las prostaglandinas no han sido aun
adecuadamente establecidos, pero pareciera que se comportan como neurotransmisores,
estimulando la producción de monoaminas y AMP cíclico, que a su vez aumentan la
frecuencia de disparo de las neuronas del C.T.P. (neuronas sensibles al frío). Este aumento
en la frecuencia de disparo de impulsos eferentes, es conducido por sinapsis colinérgicas
desde el hipotálamo anterior al hipotálamo posterior. En el hipotálamo posterior se
encuentra el centro vasomotor, desde el cual y a través de nervios simpáticos se producen
dos efectos periféricos importantes:
1. Aumento franco del metabolismo (aumento producción de calor endógeno).
2. Vasoconstricción periférica (disminución importante de la pérdida calórica por
radiación).
La suma de estos dos efectos es un aumento de la temperatura corporal, dando origen al
fenómeno febril. La aspirina, las drogas anti-inflamatorias no esteroidales y los
glucocorticoides, producen disminución de la temperatura corporal por bloqueo de la
producción de prostaglandinas a nivel del C.T.P. en el hipotálamo anterior, sin interferir
con la producción de P.E. a nivel de los macrófagos. Al pirógeno endógeno se le han
encontrado, en los últimos años, algunas otras actividades biológicas. Su estructura parece
ser idéntica al factor activador de los linfocitos (ahora llamado interleucina-1); y tiene
relación con un aumento en la producción de anticuerpos, a través de un efecto temprano
sobre los linfocitos T facilitadores, ayudado además por un medio ambiente celular, con
una temperatura más alta secundario a la presencia de fiebre; estos dos factores aceleran y
aumentan en forma cuantitativa la producción de inmunoglobulinas.
TEMPERATURA

La temperatura corporal es el resultado del equilibrio entre la producción y la


eliminación de calor. Es un signo vital que puede ser modificado por condiciones
patológicas, como las enfermedades que se manifiestan con fiebre, o por factores
fisiológicos tales como la edad, el ejercicio, la digestión, el ciclo menstrual, la temperatura
ambiental, y otros.
Según la Asociación Medica Americana (American Medical Association) la
normotermia oscila entre 36,5°C – 37,2°C.
 Rectal: 36, 8°c – 37,5/37,8°c
 Oral: 36,2°c – 37°c
 Axilar: 35,5°c – 36,5/36,8°c

Como se ha hecho mención anteriormente, las temperaturas suben y bajan regularmente


a lo largo del día, controladas por el ritmo circadiano de la persona, siendo los niveles más
bajos alrededor de 4 a. m. y el más alto al final de la tarde, entre las 4:00 y las 6:00 p. m.
La temperatura corporal es sensible a muchas hormonas, por lo que las mujeres tienen
un ritmo de temperatura que varía con el ciclo menstrual. La temperatura corporal basal de
una mujer aumenta bruscamente después de la ovulación, a medida que disminuye la
producción de estrógeno y aumenta la progesterona.
Durante la digestión ocurre aumento de la temperatura corporal debido a que el aparato
digestivo libera más calor para absorber los alimentos consumidos. La energía total liberada
durante el metabolismo se emplea aproximadamente una quinta parte en el trabajo y lo
demás se libera en forma de calor; este calor debe ser disipado para mantener las
condiciones de temperatura adecuadas en el cuerpo humano.
También puede variar según las estaciones del año, y a medida que avanza la edad,
debido a que posee una capacidad disminuida para generar calor corporal durante la fiebre,
por lo que incluso una temperatura algo elevada puede indicar una causa subyacente grave
en geriatría .
Temperatura normal aproximada por edad:
 Niños 0-3 meses: (37,44° C)
 Niños 3-6 meses: (37,50° C)
 Niños 6 meses-1 año: (37,61° C)
 Niños 1 a 3 años: (37,22° C)
 Niños 3 a 5 años: (37° C)
 Niños 5 a 9 años: (36,83° C)
 Niños 9 a 13 años: (36, 67° C)
 Niños 13 años hasta adulto: (36,56 a 37,28° C)

Termómetros
 Digitales
 Infrarrojos
 Mercurio

Técnica para la toma de la temperatura corporal


1. Verificar que la columna de mercurio marque menos de 35° C, induce a error no
hacerlo.
2. Para la temperatura bucal, el paciente debe sostener bajo la lengua por 3 minutos,
el termómetro previamente aséptico y lavado. Se efectúa en personas sin alteración de
conciencia con el termómetro personal.
3. En la axila o ingle, deben estar secas. Coloque el termómetro bajo la axila o en la
ingle por 3 a 5 minutos, pidiéndole al paciente que cruce la extremidad (brazos o piernas)
hacia el lado contrario; se prefiere la zona inguinal en pacientes muy delgados.
4. Toma rectal: Con el paciente en decúbito lateral con genuflexión de los miembros
inferiores, introducir en el recto el termómetro lubricado y con sumo cuidado, se espera 1
minuto para su lectura. Su uso no es rutinario y es empleado por el médico para documentar
casos especiales.
5. Para todos los casos, retirar el termómetro y léalo. Limpiar el termómetro después
con una torunda de algodón con alcohol desde región distal hacia el bulbo, luego bájelo

Recomendaciones y precauciones
1. En lo posible use termómetro personalizado.
2. El bulbo debe completamente en contacto con la zona anatómica elegida, que
debe estar sana, seca y tener buena irrigación.
3. La toma de temperatura rectal está contraindicada en personas con diarrea,
procesos inflamatorios anales o rectales, cirugía anoperineal reciente y en pacientes
inmunocomprometidos o que no colaboren (problemas mentales).
4. Para medir la temperatura oral basal, el paciente no debe haber realizado
ejercicios, fumado, comido o bebido líquidos calientes o fríos 15 minutos antes de efectuar
el procedimiento.
5. Evitar medir la temperatura oral en niños, pacientes inconscientes o con disnea,
tos, hipo, vómito, con lesiones en la boca o convulsiones y hacerlo con cautela en menores
de 6 años
HIPOTERMIA

Se define la hipotermia como el descenso de la temperatura corporal central por debajo


de 35ºC, temperatura a la que comienzan a fallar los mecanismos compensadores para
mantener el calor corporal. Según su gravedad se clasifica en: leve (entre 32 y 35ºC),
moderada (entre 28 y 32ºC), grave (por debajo de 28ºC) y profunda (inferior a 20ºC).

Etiología
Según su mecanismo causal las hipotermias pueden ser:

1. Hipotermia accidental o primaria. Es la debida a exposición accidental al frío de


una persona previamente sana. En ella el centro termorregulador actúa
adecuadamente.

2. Hipotermia secundaria. Es la que aparece como complicación de una enfermedad


subyacente. En estos casos tiene lugar un fallo en la termorregulación y no una
exposición ambiental. Afecta generalmente a pacientes ancianos y suele asociarse a
los siguientes procesos: alcoholismo, sobredosis de opiáceos, toma de fármacos que
alteran la termorregulación (fenotiazinas, barbitúricos, tricíclicos, benzodiacepinas),
hipotiroidismo, hipopituitarismo, insuficiencia suprarrenal, cetoacidosis diabética,
acidosis láctica, uremia, fallo hepático, sepsis, quemaduras extensas y eritrodermia,
hemorragia subaracnoidea y lesiones hipotalámicas. En estos casos suele producirse
una hipotermia leve o moderada.

3. Lesiones locales inducidas por frío. Las lesiones locales producidas por
congelación, especialmente las que tienen lugar en la cara y las extremidades,
pueden ocasionar hipotermia en diferentes grados según su severidad.

Las manifestaciones clínicas dependen del grado de hipotermia


• Hipotermia leve: amnesia, apatía, disartria, alteración del comportamiento, taquicardia
seguida de bradicardia progresiva, vasoconstricción, hipertensión, taquipnea, broncorrea y
broncoespasmo, escalofríos, temblor, ataxia.

• Hipotermia moderada: disminución gradual del nivel de conciencia, midriasis,


alucinaciones, desvestimiento paradójico, bradicardia, arritmias auriculares y ventriculares,
hipoventilación, ausencia de reflejos protectores de las vías respiratorias, hiporreflexia,
desaparición de la capacidad de tiritar, rigidez.

• Hipotermia grave: coma (el EEG es plano por debajo de los 18ºC), pérdida de los
reflejos oculares, hipotensión, arrtimias ventriculares, asistolia, edema pulmonar, apnea,
oliguria extrema, arreflexia.
Criterios De Derivación
Con carácter general, todos los pacientes con hipotermia requieren valoración e ingreso
hospitalario. Si la hipotermia es grave o profunda, deben ingresar en una unidad de
cuidados intensivos.

Fisiopatología
El cuerpo pierde calor a través de diferentes mecanismos: radiación, convección,
conducción, evaporación y respiración. En condiciones normales, la radiación es la
principal responsable de la pérdida de calor seguida de la convección, la cual cobra mayor
importancia cuando hay aumento de la corriente de aire. En ambientes secos, la
evaporación corporal es baja. Sin embargo, cuando la ropa está húmeda, la pérdida de
temperatura corporal por evaporación aumenta de forma muy importante y puede alcanzar
6 veces la tasa de producción de calor que genera el metabolismo basal. Igualmente ocurre
con la pérdida de calor corporal por conducción, que aumenta hasta 25 veces en el agua con
respecto al aire.

Tratamiento
El tratamiento de la hipotermia se basa en dos pilares fundamentales: el control de las
alteraciones respiratorias, circulatorias e hidroelectrolíticas asociadas al frío, y las medidas
de recalentamiento.

El recalentamiento puede ser pasivo o activo. El recalentamiento pasivo consiste en la


retirada del ambiente frío y de las ropas (sobre todo si están húmedas) y la cobertura del
cuerpo con mantas o ropa caliente y seca. Las técnicas de recalentamiento pasivo tienen
como objetivo detener el descenso de la temperatura corporal, pero no consiguen elevarla.
Cuando los mecanismos fisiológicos de producción de calor no funcionan (en pacientes con
hipotermia secundaria y en casos de hipotermia moderada o grave) deben asociarse
técnicas de recalentamiento activo. Estas a su vez pueden ser de dos tipos:

• Recalentamiento activo externo: consiste en la aplicación de un foco externo de


calor, como es el aire caliente o el calor radiante. En pacientes con hipotermia moderada o
severa puede tener como consecuencia un descenso paradójico de la temperatura del
paciente, hipotensión, fibrilación ventricular o asistolia, debido al paso de sangre fría y
acidótica desde las extremidades hacia la circulación central, sobre todo si estas se
recalientan al inicio y de forma rápida en pacientes con colapso cardiocirculatorio. Por ello
se recomienda evitar el recalentamiento activo externo durante el transporte, y cuando se
realice, se debe recalentar primero el tronco del paciente

• Recalentamiento activo interno: se basa en la administración de fluidos calientes


como oxígeno, suero salino intravenoso, lavado gástrico, vesical, pleural o peritoneal con
suero salino caliente o el calentamiento con membrana extracorpórea.
HIPERTERMIA

Elevación extrema de la temperatura corporal debido a la elevación de la temperatura


corporal con fracaso de los mecanismos de termorregulación

Fisiopatología
Cuando la temperatura ambiental supera a la temperatura corporal, se reducen
considerablemente los mecanismos de regulación térmica, al perderse la capacidad de
disminuir la temperatura por conducción y radiación. En esta situación la evaporación (por
medio de la sudoración y la respiración) es el mecanismo fundamental para regular de la
temperatura. El grado de humedad relativa del ambiente influye de forma importante sobre
estos mecanismos, dificultando la disminución de la temperatura corporal En situaciones en
las que la sudoración se ve dificultada (como ocurre en los recién nacidos, en niños con
algunas enfermedades cutáneas o que reciben tratamiento con anticolinérgicos,
neurolépticos o antiepilépticos) el riesgo de desarrollar un golpe de calor es mayor.
También son situaciones predisponentes al golpe de calor aquellas que favorecen la
deshidratación, por disminución de la ingesta hídrica (neonatos o niños con encefalopatías)
o por aumento de las pérdidas (fibrosis quística, enfermedad renal poliúrica, diabetes
insípida, diabetes mellitus o tratamiento con diuréticos son las más habituales)

Manifestaciones Clínicas
Consisten fundamentalmente en aumento de la temperatura corporal (que suele ser entre
38-40ºC en las formas más leves y supera habitualmente los 40ºC en el golpe de calor),
sintomas digestivos (sobre todo náuseas y vómitos, también puede aparecer diarrea),
disfunción del sistema nervioso central con alteración variable del nivel de consciencia,
agitación o crisis convulsivas y signos de fracaso circulatorio por shock distributivo.

Pruebas complementarias
En la mayoría de los casos no es necesaria ninguna prueba complementaria, ya que el
diagnóstico es clínico y el tratamiento resuelve los síntomas en poco tiempo.

Tratamiento
El objetivo principal es conseguir un descenso de la temperatura corporal y mantener la
perfusión tisular. En los pacientes con manifestaciones neurológicas o signos de
hipovolemia se debe administrar suero salino fisiológico por vía intravenosa, si es necesario
hasta 20 ml por kilogramo a ritmo rápido cuando hay signos de shock.
RESPIRACIÓN

La respiración normal consiste en la sucesión rítmica y fluida de los movimientos de


expansión (inspiración) y de retracción (espiración torácica).
El proceso de respiración involuntario está controlado por el tronco encefálico que
envía información motora al diafragma a través del nervio frénico. Éste consta del centro
respiratorio bulbar, centro apnéusico y centro neumotáxico. En el tronco encefálico también
se sitúan los quimiorreceptores y otros receptores. Cuando ejercemos un control voluntario
sobre la respiración entonces las órdenes son enviadas de la corteza cerebral en vez del
tronco encefálico.
¿Cómo se mide la frecuencia respiratoria?
Cuando se cuenta la frecuencia respiratoria, conviene que la persona no se dé
cuenta. Para esto se simula estar tomando el pulso, pero en realidad se está observando la
respiración. El examinador observa los movimientos respiratorios sin pretender intervenir
en su ritmo, si una persona sabe que se están contando sus respiraciones, generalmente le es
difícil mantener la función normal. También en éste caso se puede contar el número de
movimientos durante medio minuto y luego multiplicar por dos. Se cuentan las
inspiraciones o las espiraciones, pero no los dos movimientos.
Algunas veces es imposible ver los movimientos torácicos de la respiración, o sea
que apenas se distingue si el paciente respira. En este caso, la frecuencia respiratoria se
explora colocando la mano sobre el pecho del enfermo y contando las respiraciones por
minuto.
La frecuencia respiratoria debe ser de 12 a 20 respiraciones por minuto. En adultos,
se habla de taquipnea si la frecuencia respiratoria es sostenidamente sobre 20 respiraciones
por minuto; y de bradipnea, si es menor de 12 respiraciones por minuto. La disnea es la
respiración trabajosa o difícil, con falta de aliento, se observa con frecuencia e caso de
compromisos cardiacos o pulmonares.
Valores normales
- al nacer de 44 respiraciones por minuto
- a los 5 años es de 26 respiraciones por minuto
- de 15 a 20 años es de 20 respiraciones por minuto
- de 20 a 25 años es de 18 respiraciones por minuto
- de 25 a 30 años es de 16 respiraciones por minuto
- mayor de 40 años es de 18 respiraciones por minuto

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