Arendt Sobre La Filosofia Politica de Kant

CIPE Cuadernos del
Hannah Arendt
Conferencias sobre
la filosofía política
de Kant.
Un estudio interpretativo
José Daniel Parra
n.º 49, marzo de 2021
pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 1 24/03/21 5:52 a. m.

Los Cuadernos de trabajo del Centro de Investigaciones y Proyectos Especiales (Cipe), de
la Facultad de Finanzas, Gobierno y Relaciones Internacionales, son una contribución a la
investigación, al desarrollo del conocimiento, a los debates con especial significado y alcance
en las políticas públicas, las finanzas, la economía y las relaciones internacionales. En los
Cuadernos se expresan los avances de las líneas y los grupos de investigación del Cipe y, por
tanto, son una muestra de los procesos académicos e intelectuales que adelantan profesores,
investigadores y estudiantes de la Universidad Externado de Colombia. El Cipe tiene tres
grupos de investigación reconocidos por Colciencias: Observatorio de Análisis de los Sistemas
Internacionales (OASIS); Observatorio de Políticas, Ejecución y Resultados de la Adminis-
tración Pública (OPERA); Observatorio de Economía y Operaciones Numéricas (ODEON).
rector de la universidad externado de colombia

JUAN C ARLOS HENAO
decano (f) de la facultad de finanzas, gobierno y relaciones internacionales

ROBERTO HINESTROSA R EY
director del centro de investigaciones y proyectos especiales, cipe

GONZALO ORDÓÑEZ-M ATAMOROS
coordinadora de oasis
M ARTHA A RDILA
coordinadora de opera
C AROLINA ISAZA
coordinador de odeon
JOHN FREDDY MORENO
issn 1794-7715
© Universidad Externado de Colombia, 2021
Derechos exclusivos de publicación y distribución de la obra
Calle 12 n.º 1-17 este. Bogotá, Colombia.
pbx: 341 9900 ext. 2002
Correo electrónico: [email protected]
Primera edición: marzo de 2021

Diagramación: Precolombi EU, David Reyes
Impresión y encuadernación: Digiprint Editores S.A.S.
Tiraje de 1 a 300 ejemplares
Impreso en Colombia
Printed in Colombia

3
HANNAH ARENDT
CONFERENCIAS
SOBRE LA FILOSOFÍA
POLÍTICA DE KANT.
UN ESTUDIO
INTERPRETATIVO
José Daniel Parra

5
Contenido
Introducción • 7
Postcriptum sobre el Pensamiento • 8
Primera conferencia: La historia y la facultad del juicio • 11
Segunda conferencia: “¿Qué es el hombre?” • 12

El juicio estético y el juicio teleológico • 13
Tercera conferencia: Revolución y fundación constitucional • 15
Cuarta conferencia: Dignidad y felicidad • 18

Sobre el progreso ilustrado • 19
Quinta conferencia: Selbstdenken • 20
Sexta conferencia: Filosofía crítica y la República de las letras • 23
Séptima conferencia: Razón pública • 27
Octava conferencia: Acción comprometida

y el juicio del espectador • 30

DOCUMENTOS DE TRABAJO
6
Novena conferencia: ¿Armonía pre-establecida? • 33
Décima conferencia: El espectador y la historia • 36

Sobre la facultad del juicio: Genialidad y gusto • 37
Undécima conferencia: El nous y la imaginación • 40
Duodécima conferencia: El espectador imparcial • 42

Crítica del juicio § 39: De la comunicabilidad de una sensación • 43
Crítica del juicio § 40: Del gusto como una especie
de sensus communis • 44
Décima tercera conferencia: “Sentido común”

como sentido de hospitalidad cosmopolita • 45
Crítica del juicio § 41: Sobre el interés empírico en lo bello • 46
Imaginación • 48
Bibliografía • 51

7
Hannah Arendt
Conferencias sobre la
Filosofía política de Kant.
Un estudio interpretativo
José Daniel Parra*
INTRODUCCIÓN Las conferencias sobre la filosofía política

de Kant 1.
Hannah Arendt (1906-1975) es una de Arendt no alcanzó a dar forma de
las pensadoras clave para empezar a en- libro a sus ref lexiones sobre el juicio,
tender y dar cuenta de los movimientos y la planeada tercera parte de su obra La
profundas transformaciones políticas de vida del espíritu (The Life of the Mind )2 .
la historia global contemporánea. Su obra
más conocida, La condición humana, ha
sido referencia imprescindible para ana- * PhD en filosofía política de la Universidad
lizar e introducir de nuevo en el ámbito de Toronto, Canadá. Docente-investigador del
teórico el fenómeno de la vita activa, en Centro de Investigaciones y Proyectos Especiales
tiempos de un racionalismo político cada (Cipe), de la Facultad de Finanzas, Gobierno y
vez más abocado a la planificación ins- Relaciones Internacionales, Universidad Exter-
trumental y el control social. El presente nado de Colombia, Bogotá (Colombia).
documento de trabajo, producto del 1 Referencias a lo largo del texto son de Han-
seminario de la línea de teoría e historia nah Arendt, Lectures on Kant’s Political Philo-
del pensamiento político, Observatorio sophy. Edited with an Interpretative Essay by
Opera, del Centro de Investigaciones y Ronald Beiner (Chicago: U Chicago P, 1992).
Proyectos Especiales (Cipe), se propone 2 Hannah Arendt, The Life of the Mind, Vols.
presentar un estudio interpretativo sobre i-ii (New York: Harcourt, 1978). Aunque la pa-
una obra de Arendt relativamente poco labra inglesa es mind, al parecer el sentido que le
estudiada en el mundo de habla hispana: da Arendt es afín a la expresión “espíritu” en el

8
Ronald Beiner, profesor de filosofía po- como paralelo las tres críticas de la obra
lítica de la Universidad de Toronto, hace kantiana. La tercera parte no publicada
una compilación póstuma de los textos por Arendt, que habría de abordar la fa-
relacionados e intenta reconstruir espe- cultad del juicio, es el foco de estas con-
culativamente el pensamiento de Arendt ferencias reconstruidas por el profesor
referente al tema. Los textos de Arendt Beiner. Las Conferencias sobre la filosofía
sobre el juicio eran, en amplia medida, política de Kant recrean una exposición e
apuntes de seminario, notas de trabajo interpretación arendtiana relativamente
que no estaban preparadas para su pu- libre sobre los escritos estéticos y políti-
blicación. Beiner propone entonces un cos de Kant en su Crítica del juicio. En
ejercicio de curaduría del pensamiento el prefacio a la edición inglesa del texto,
arendtiano donde nos deja entrever una Beiner relata que Arendt impartió las
posible interpretación de Arendt sobre conferencias en la Universidad Chicago,
la materia. El propósito de este estudio y posteriormente, en la New School for
interpretativo es ofrecer una lectura de- Social Research, en Nueva York, hacia
tenida del texto de Arendt, para estimar, el final de su vida entre los años 1964 y
de manera detallada y comprensiva, su 1970. Se trata entonces de una compila-
perspectiva teórica a partir de la filosofía ción de documentos tardíos con respecto
política “no escrita” de Emanuel Kant. a la obra de Arendt.
Comenzamos por notar que la es-
tructura de La vida del espíritu tiene POSTCRIPTUM SOBRE
EL PENSAMIENTO
significado francés del término l´esprit. Para una El texto inicia con una serie de reflexiones
serie de comentarios relevantes sobre la facultad con las cuales concluye el Pensamiento en
del juicio en la teoría política de Arendt, ver: el primer volumen de La vida del espíritu.
Ronald Beiner, “Rereading Hannah Arendt’s En el volumen II del mismo libro, Arendt
Kant Lectures”, Philosophy & Social Criticism aborda la Voluntad y solo esquemática-
23, n.º 1 (January 1997): pp. 21-32; Annelies mente el Juicio. En esta representación,
Degryse, “Sensus Communis as a Foundation una de las maneras de comprender lo
for Men as Political Beings: Arendt’s Reading of que significa pensar (thinking) desde el
Kant’s Critique of Judgment”, Philosophy & Social punto de vista arendtiano, se muestra
Criticism 37, n.º 3 (March 2011): pp. 345-58; por contraste con las otras dos facultades
Bryan Garsten, “The Elusiveness of Arendtian clave de la mente: la voluntad (willing) y
Judgment”, Social Research 74, n.º 4 (2007): pp. el juicio ( judgment). La voluntad es una
1071-1108; María Pía Lara, “Reflective Judgment facultad que proyecta la mente hacia el
as World Disclosure”, Philosophy & Social Criti- futuro, y el juicio da cuenta crítica de lo
cism 34 (2008): pp. 83-100. acontecido en el pasado. Ni la voluntad

9
ni el juicio se enfocan en el presente, el allá de la ley de causa-efecto, o es una

aquí y el ahora. De acuerdo con Arendt, “mera ilusión” (3). Los actos libres de
la capacidad de pensar, en contraste con este modo se constituyen como eventos
la voluntad y el juicio, es una actividad emergentes de carácter excepcional. Al
que toma posición sobre lo “no visible”, parecer, sin embargo, rara vez hacemos
y tiende a estructurarse en términos de uso de la voluntad. La capacidad de la vo-
generalidades no concretas3. luntad está relacionada con el problema
La voluntad y el juicio abordan lo o el misterio de la libertad humana, que
particular, y están así más próximos al Arendt contrasta tanto con los mecanis-
“mundo de las apariencias” (3). Lo que mos de necesidad natural como con el
aquí empieza a esbozarse es la figura uso pragmático de la razón instrumental.
de Hannah Arendt como pensadora fe- Arendt propone sus Conferencias a
nomenológica: pensadora de lo que “se partir de la Crítica del juicio de Kant para
muestra” a los sentidos como experiencia dar cuenta de la facultad de juzgar: de es-
empírica, o, quizá mejor, como “intui- tablecer distinciones y valoraciones entre
ción sensual”4. Aquello que se muestra bueno y malo, al parecer sin recurrir a
ocurre en un ámbito público, inter homi- criterios absolutos. Nos dice, además, que
nes, donde puede tomar lugar la acción no se llega a los juicios ni por medio de la
política. En este contexto común aparece inducción, es decir, la colección de par-
el juicio sobre el pasado como prepara- ticulares para entrever un patrón común
ción particular para ejercer la voluntad o generalidad, ni por medio de la deduc-
futura, y a través de esta facultad activar ción silogística. El juicio para Arendt no
la deliberación presente, plural, de toma es una operación puramente lógica: es un
de decisiones de índole público. “sentido silencioso”, un “gusto estético”
Arendt propone una distinción clave (4). En cuestiones morales y prácticas
entre las deliberaciones del intelecto, las a este estilo de juicio también se le llama
decisiones de la voluntad y la mecánica “consciencia” (conscience)5. ¿Cuál es la
del deseo. La voluntad, a su juicio, o es relación entre la consciencia y el juicio?
una capacidad de acción espontánea más De acuerdo con el texto, la consciencia
vendría siendo la intimación de una “voz
divina, o de Dios, o de la razón”, más
3 Ver Hannah Arendt, “Thinking and Moral allá de las convenciones, leyes y normas
Considerations: A Lecture”, Social Research, meramente humanas.
Spring/Summer 1984, vol. 51, n.º 1-2, pp. 7-37.
4 Albrecht Wellmer, “Hannah Arendt sobre el
juicio: la doctrina no escrita de la razón”, en Fina
Birulés (compiladora), Hannah Arendt: El orgullo 5 Arendt, “Thinking and Moral Considera-
de pensar (Barcelona: Gedisa, 2006), p. 268. tions”, p. 34.

10
En Kant, relata Arendt, el juicio es encontramos que Die Weltgeschichte ist

un “don” que se puede poner en práctica, das Weltgericht (la historia es la corte del
pero que al parecer no puede ser impar- mundo o la historia establece el “juicio
tido o enseñado. El Kant arendtiano al final” del mundo): en este modelo de
parecer se sitúa aquí del lado de Sócrates, historicidad el éxito o la victoria parecen
en contraste con los sofistas clásicos que ser el estándar del juicio. Arendt critica
decían poder enseñar la virtud. Tener la filosofía de la historia hegeliana desde
juicio es distinto a la erudición, o al el punto de vista de la autonomía de la
acopio metodológico y analítico de co- mente. La mente humana está en capa-
nocimiento científico. ¿Es el juicio una cidad de establecer sus juicios críticos
facultad distinta, separada de las demás con relativa independencia del marco
facultades de la mente? Arendt propone colectivo de la historicidad. Arendt va
que las “ideas reguladoras” de la razón a Kant para establecer distancia crítica
–es decir, los postulados metafísicos de del modelo hegeliano/marxista de his-
la “razón práctica” kantiana que no se toricidad (5)7.
pueden aprehender y que, sin embargo, Para dar respuesta al desafío aparen-
constituyen una función esclarecedora temente conductual o teleológico de la
(por ej. Dios, la libertad, la inmortalidad historia en sentido hegeliano/marxista,
del alma)– auxilian al juicio (4). Arendt señala el origen griego de la
Visto de otra manera, el dilema noción de “historia” (historein) en He-
sobre el juicio se relaciona con el sig- ródoto: “indagar para narrar como fue
nificado de la modernidad y con ella [legein ta eonta]”. Añade, además, que
la distinción entre teoría y práctica 6 .
¿Cómo aproximarlas sin que la teoría
decaiga en mero instrumento del activis- 7 Cfr. Hannah Arendt, “The Concept of His-
mo político? ¿Cómo llegar a una teoría tory: Ancient and Modern”, en Between Past
ética plausible? Hegel y Marx tratan and Future: Six Exercises in Political Thought
estas categorías desde la perspectiva de (Viking Press: New York, 1961), Cap. 2. Karl
la filosofía de la historia, donde el fin Löwith Meaning in History (Chicago: U Chica-
o el futuro parecen dar justificación al go P, 1967), Caps. 2-3. Ronald Beiner comenta
devenir aparentemente necesario de los que una posibilidad sería interpretar el énfasis
tiempos. De este modo Hegel y Marx de Arendt sobre Kant como una alternativa a
asumen el progreso historicista de la la disyuntiva entre Leo Strauss con respecto a
humanidad en su conjunto. En Hegel Jenofonte/Platón y la lectura marxista de Kojève
sobre Hegel. Philosophy in a Time of Lost Spirit
(Toronto: U Toronto P, 1997), p. 227. Ver, tam-
6 Nicolas Lobkowicz, Theory and Praxis (South bién, Alexandre Kojève, Kant (Paris: Gallimard,
Bend: Notre Dame UP: 1968). 1973).

11
en Homero (Ilíada XVIII) el historiador propone desarrollar esta vertiente tácita

(histor) es aquel que “juzga”, es decir, da o “no escrita” del pensamiento kantiano.
cuenta comprehensivamente de los asun- Arendt comenta que en la filosofía
tos acaecidos en el pasado (6). Arendt práctica de Kant el “concepto de ley”
quiere reestablecer el criterio de auto- tiene una importancia crucial, ya que el
nomía y dignidad humana en contraste hombre se entiende como “ser legislati-
con el voluntarismo historicista de la mo- vo” (8). Arendt sostiene, sin embargo,
dernidad tardía. Lo hace sin desconocer que el estudio de la filosofía del derecho
la relevancia de la historicidad, pero sin en general se aprecia propiamente no en
atribuirle la última palabra: hay siempre Kant, sino en pensadores como Pufen-
otros mundos posibles en la teoría polí- dorff, Hugo Grotius o Montesquieu.
tica arendtiana. La historia no es solo el Arendt señala que el concepto de historia
relato de los vencedores. Así, dan inicio en Kant es importante, pero no es central
las Conferencias con una cita de Catón el en su filosofía como en la obra de Vico,
joven: “la causa victoriosa satisface a los Hegel o Marx. En Kant la historia es
dioses, pero la vencida satisface a Catón”. parte del dominio de la “naturaleza”.
Kant concibe como agente histórico no
PRIMERA CONFERENCIA: a los individuos, es decir, no a los actos
LA HISTORIA Y LA morales de los hombres, sino a la “secreta
FACULTAD DEL JUICIO astucia de la naturaleza” que al parecer
causa el progreso de la especie hacia sus
Arendt inicia su primera conferencia potencialidades a lo largo de las genera-
con una afirmación controversial: a di- ciones (8). La “historia del mundo” es
ferencia de Platón, Aristóteles, Agustín el destino de dicho progreso, que Kant
de Hipona, Tomás de Aquino, Spinoza, concibe de manera análoga al desarrollo
Hegel, entre otros filósofos de primera orgánico del hombre: el proceso que va
línea, Kant no escribió una filosofía de la infancia a la madurez pasando por
política8. En sus Conferencias Arendt se una serie de pasos intermedios de desa-
rrollo. Al parecer, el interés histórico de
8 Para abordar el tema de la filosofía política

en Kant Arendt recomienda el estudio de Hans que la lectura de Arendt sobre Kant está mediada
Saner Kant’s Political Thought: Its Origin and De- por el pensamiento de Karl Jaspers. Según Bei-
velopment (Chicago: U. Chicago P, 1973). Ronald ner, el Kant arendtiano es un pensador político
Beiner encuentra cuestionable el planteamiento “de-trascendentalizado”. Philosophy in a Time
de Arendt según el cual la filosofía política de of Lost Spirit, pp. 187-191. Contrastar con Karl
Kant ha de ser reconstruida ya que se encuentra Jaspers, Kant. Hannah Arendt Ed. (New York:
de alguna manera “no escrita”. Sostiene, además, Harcourt, 1962).

12
Kant está centrado no en el pasado sino facultad del juicio: un juicio crítico en
en el despliegue hacia el futuro de la capacidad de considerar la calidad del
especie. Una historia de progreso cuyo gusto. ¿Cómo se relacionan moralmen-
producto, según Arendt, es la “cultura” o te el juicio crítico y el gusto estético?
la “libertad” o la “sociabilidad” (Gesellig- Este es quizá el problema clave en la
keit). El progreso se muestra aquí como exploración teórica de Arendt, ya que la
el concepto dominante de la ilustración cuestión moral en Kant no se resuelve ni
del siglo XVIII: un movimiento asintótico por el gusto ni por el juicio, sino por la
que da sentido al mejoramiento de la “razón práctica”. Para Arendt el punto
humanidad en su conjunto, por medio clave es encontrar en Kant un criterio
de lineamientos filosóficos normativa- para discernir fenómenos particulares
mente institucionalizados y legalmente sin depender de un modo de razón pro-
establecidos a lo largo del tiempo. cedimental y normativamente abstracta9.
Ahora bien: Arendt nota a su vez
que Kant como filósofo contempla el SEGUNDA CONFERENCIA:
movimiento del progreso también de “¿QUÉ ES EL HOMBRE?”
una cierta manera melancólica. Desde el
punto de vista del individuo autónomo En la conferencia anterior, Arendt sos-
la historia es una “serie interminable tiene que hay dos preguntas pendientes
de males, los cuales […] no permiten en Kant tras terminar sus tratados de
que se produzca el contento” (9). Kant filosofía crítica. La primera se refiere a
establece en su pensamiento tardío la la sociabilidad del hombre: el hecho de
distinción entre política y sociedad, que el hombre no vive solo, y que esto
donde al parecer no es del todo claro que tiene que ver no solo con los cuidados
su melancolía filosófica pueda descansar básicos del cuerpo sino con la facul-
o encontrar sosiego en el progreso del tad de la mente, ya que, según Arendt
mundo. Arendt comenta que, a pesar de “la compañía es indispensable para el
dicho desasosiego, tras concluir sus tra- pensador” (10). Esta noción es clave en
tados en filosofía crítica Kant se centra la primera parte de la Crítica del juicio.
en dos cuestiones: 1). La sociabilidad o La segunda pregunta, planteada en la
interdependencia del hombre, es decir, el Crítica del juicio § 67, hace referencia a
postulado según el cual ningún hombre la necesidad de la existencia del hombre
podría vivir completamente solo. 2). La como tal (12). Esta al parecer es una
pregunta de por qué es necesario que evocación de la pregunta fundamental
existan los hombres.
Kant llamó inicialmente a la tercera
Crítica “Crítica del gusto” (10). De- 9 Cf. Hans-Georg Gadamer, Truth and Method
trás del gusto sensorial Kant postuló la (New York: Continuum, 1975), Parte I.

13
de Leibniz, también de Schelling, con de un propósito determinado? El tema

la que Heidegger inicia su Introducción de la posibilidad de dar nuevos inicios
a la metafísica: ¿por qué hay algo en vez “espontáneos” sin precedentes es clave
de nada? Kant, por otro lado, se plantea en la teoría política de Arendt10.
los siguientes tres interrogantes que, a
su vez, son paralelos al desarrollo de las El juicio estético y
tres Críticas: el juicio teleológico
a) ¿Qué puedo conocer? Encontramos en el texto que Arendt

b) ¿Qué debo hacer? divide la Crítica del juicio en dos partes:
c) ¿Qué puedo esperar? crítica del juicio estético y crítica del jui-
cio teleológico. Así, ve al menos dos cone-
A las que Kant añade una cuarta que xiones importantes entre las dos partes:
reúne y sintetiza las tres anteriores: ¿qué
es el hombre? 1) Según Arendt, en ninguna de las
Las tres primeras preguntas, que dos partes de la Crítica al juicio
según Arendt son una especie de antro- Kant habla del hombre como ser
pología filosófica, llevan por tanto a la cognitivo. La palabra “verdad” solo
cuarta. La pregunta ontológica de Leibniz aparece una vez, y en lo que sería un
–¿por qué hay algo en vez de nada?– contexto especial. Habría aquí una
Arendt la enlaza con la pregunta sobre diferencia clave entre la Crítica de la
el hombre formulada ahora en forma de razón práctica y la Crítica del juicio:
un “por qué”, es decir, en términos de un las leyes morales universales de la
propósito que en su estimación tiene una primera tienen validez para todos
cierta connotación trascendental. Arendt los seres dotados de inteligencia,
encuentra, sin embargo, una relación mientras que la facultad del juicio
de perplejidad entre las preguntas del tiene validez específica para los seres
“por qué” y el propósito trascendental humanos en la tierra.
(13). Kant, por otra parte, en la Crí- 2) La facultad del juicio se ocupa de
tica del juicio propone que la aparente particulares, que como tales con-
perplejidad ante la pregunta sobre el tienen algo contingente con res-
propósito, que a su vez está relacionada pecto a lo universal: de lo universal
con la pregunta sobre si el mundo tiene como tal se encarga normalmente
una primera causa o si ha existido por la
eternidad, es afín a la experiencia de cada
uno de “establecer inicios a lo largo de
nuestras vidas” (13). ¿Es posible conjugar 10 Hannah A rendt, The Human Condition
la libre espontaneidad con la función (Chicago: U Chicago P, 1998), pp. 8-9; 247.

14
el pensamiento. Estos fenómenos contradicción entre naturaleza “mecáni-

particulares son de dos tipos: ca” y un supuesto propósito teleológico
a) Los objetos del juicio propiamen- natural. Kant pareciera solucionar esta
te hablando (esto se aborda en la antinomia otorgando dicho propósito no
primera parte de la Crítica del a los estadios particulares intermedios
juicio). Por ejemplo, cuando ha- sino al direccionamiento asintóticamente
blamos de “lo bello” sin por ello progresivo del proceso histórico en su
subsumir el objeto en la categoría conjunto.
universal de la “belleza”. Arendt Arendt añade las siguientes coor-
nota que no llegamos al juicio de denadas de referencia que en su lectura
que una rosa particular es bella son relevantes para interpretar la teoría
a través del silogismo: “todas las política kantiana a partir de la Crítica
rosas son bellas, esta flor es una del juicio:
rosa, por tanto, esta rosa es bella”
(13). a) El enfoque en lo particular, ya sea
b) Los objetos de planeación huma- como hecho natural o como evento
na (esto se desarrolla en la segun- histórico.
da parte de la Crítica del juicio). b) La facultad del juicio en sí, y la capa-
Kant da la impresión de replicar cidad del hombre para establecerla
la distinción de origen cartesia- con respecto a dichos particulares.
no entre naturaleza “mecánica” c) La sociabilidad del hombre como
y su opuesto que es “técnico” condición para ejercer esta facultad.
o “artificial”, es decir, sujeto a Es decir, que la sociabilidad del
un objetivo racional, fabricado hombre no solo está relacionada con
racionalmente por el hombre con la supervivencia básica sino también
un propósito concreto. Pareciera con el ejercicio de sus facultades
establecerse una distinción entre superiores (14).
lo natural, que es mecánico y no
depende de la planeación huma- Arendt sostiene que en Kant el juicio
na, y lo técnico, que es fabricado sobre particulares: “esto es bello, esto
para un propósito tangible espe- es feo” o “esto es correcto (right), esto es
cífico. incorrecto (wrong)” no tiene cabida en su
“filosofía moral” (15). ¿Por qué? Porque
Kant, sin embargo, introduce también Kant establece una distinción entre la
la categoría de propósito en las leyes “razón práctica” y la facultad del juicio.
de la naturaleza. Esto es relevante por- La razón práctica razona en términos de
que para Kant la historia hace parte ley universal: nos dicta, por tanto, qué
de la naturaleza. Hay al parecer una hacer y qué no hacer con la voluntad.

15
La razón práctica kantiana opera con TERCERA CONFERENCIA:

el dictado del imperativo categórico. REVOLUCIÓN Y FUNDACIÓN
El juicio, por otro lado, surge del mero CONSTITUCIONAL
“placer contemplativo o de la complacen-
cia inactiva”. Al sentimiento del placer Arendt nota que la revolución america-
contemplativo Kant lo llama el “gusto”. na, y sobre todo la revolución francesa,
El placer contemplativo no hace parte de atraen la atención de Kant en materia
la razón práctica que en el pensamiento constitucional. ¿Cómo reconciliar el
kantiano tiene que ver con la voluntad problema de la organización del Estado
y la ley universal que le da fuerza impe- con su filosofía moral, es decir, con los
rativa moral. dictados de la razón práctica? Kant, al
La Crítica del juicio leída arendtia- parecer, es consciente del impasse: su
namente se desarrolla en relación obli- filosofía moral no es de utilidad en esta
cua al evento histórico de la revolución cuestión de fundación y regeneración
francesa de la que Kant fue simpatizante política (17). Por otro lado, en términos
apasionado y espectador “contemplativo” particulares: ¿cómo llevar a un hombre
(15). Aunque el Kant temprano no se a ser buen ciudadano, aún si esa persona
interesó por asuntos constitucionales al parecer no es moralmente buena? ¿Es
o institucionales, este interés cambió compatible la razón práctica kantiana
radicalmente en su pensamiento tardío, con el evento de la fundación constitu-
con su atención hacia los cambios revolu- cional? Kant podría responder con su
cionarios en Francia y Norteamérica. La famosa formulación: “el problema de la
Crítica del juicio aparece en 1790 (Kant organización del Estado, por difícil que
tiene 65 años en 1789). Surge la pre- parezca, se puede resolver hasta para una
gunta entonces sobre cómo fundar una estirpe de demonios, siempre que tengan
comunidad política basada en principios entendimiento” (17). Arendt añade lo
ilustrados11. Al parecer, este apasionante siguiente, citando a Kant:
problema legal ocupó a Kant durante sus
últimos años. El problema está en reconciliar un con-
junto de seres racionales que requieren
leyes universales pero cuyas inclinacio-
11 Sobre el tema de la fundación política en la nes privadas los llevan a querer eximirse
modernidad, ver Ronald Beiner, Civil Religion: de dichas leyes; el asunto está entonces
A Dialogue in the History of Political Philosophy en cómo establecer una constitución
(Cambridge: Cambridge UP, 2011). La narrativa en la cual a pesar de que las inclina-
del texto da cuenta del proyecto moderno desde ciones privadas puedan estar en con-
el Contrato social de Rousseau hasta la ontología flicto, sin embargo, estas se contengan
fundamental de Heidegger. mutuamente, con el resultado de que

16
la conducta pública sea tal que como contra el interés general. Este modelo de
si no estuvieran dichas inclinaciones. universalidad legal pública –lo que hoy
se denomina “transparencia”– pareciera
En otras palabras, al parecer “un hom- tener correlato en el régimen político
bre malo” puede comportarse como un republicano que las revoluciones ameri-
“buen ciudadano” al hacer parte de un cana y francesa ponen en marcha en el
“Estado bueno” (17). Aristóteles sostiene plano histórico.
que un buen hombre puede ser un buen Arendt señala que, en política, a
ciudadano solo en una polis buena. En diferencia de la moral, todo depende de
Kant la expresión “malo” se explica en la “conducta pública” (18). En sus Obser-
relación con su filosofía moral con res- vaciones sobre el sentimiento de lo bello y
pecto al imperativo categórico: “actúa de de lo sublime Kant anota que solo pocas
tal modo que la máxima de tu conducta personas actúan con base en principios,
pueda devenir una ley general” o “nunca lo cual, al parecer, paradójicamente es
debo proceder más que de modo que bueno ya que se puede estar fácilmente
pueda querer también que mi máxima equivocado con respecto a principios.
se convierta en ley universal”. La gran mayoría de gente, según esta
Por ejemplo: no puedo convertir la observación, actúa desde los impulsos de
mentira en ley universal, porque esa ley la bondad espontánea, basada a su vez en
acabaría con la facultad de hacer prome- el amor a su propia persona. Esto, según
sas. Algo similar ocurriría con el robo: Kant, a la manera de los pensadores li-
universalizado, acabaría con el derecho berales en materia de economía política,
a la propiedad que en la teoría política opera indirectamente hacia el interés
liberal es uno de los fundamentos del común. Kant, en otras palabras, intenta
derecho civil. El “hombre malo”, enten- señalar las ventajas del interés propio
dido desde la razón práctica kantiana es ilustrado. Aunque Arendt anota que hay
el que se exime de la ley universal. Arendt dificultades con esta teoría, su punto
anota que el “hombre malo” no tiene de momento es discutir las siguientes
voluntad de hacer el mal: la voluntad implicaciones para su interpretación de
como tal siempre busca el “bien” (17). El la filosofía política de Kant:
“demonio” desde la perspectiva kantiana
es el que busca exceptuarse secretamen- 1) Esta teoría asume un “gran propósi-
te, hacer de sí mismo una excepción to natural” detrás de las interaccio-
de la ley universal. El punto clave en nes particulares de los hombres: de
el análisis está en eximirse de manera otra manera, “la estirpe de demonios
secreta o no pública de la ley universal. se autodestruiría”. Arendt anota que
Si la excepción fuera pública, al parecer para Kant el mal es generalmente
se hace evidente que estaría operando autodestructivo. La antropología

17
filosófica kantiana postula inteli- Arendt explica que la Crítica de la

gencia y deseo de autopreservación razón pura trata sobre lo que se puede y,
naturales. sobre todo, lo que no se puede conocer.
2) Al parecer, no sería necesaria una Las cuestiones metafísicas en Kant tratan
gran transformación del hombre, acerca de lo que se puede pensar pero no
ni una formación prolongada del conocer. Es posible pensar sobre aquello
carácter como en la filosofía política que, según Kant, no puedo conocer co-
clásica, para llevar a cabo el cambio mo la existencia de Dios, la inmortalidad
o la transformación política. del alma, o la libertad sin la cual la vida
3) Hay un marcado énfasis en la consti- humana al parecer carecería de dignidad
tución y en la publicidad: al parecer y tendría un carácter “bestial”. Estas son
para Kant los “pensamientos malos” para Kant cuestiones con implicaciones
son idiosincráticos, no universaliza- morales y es por medio de la “razón
bles, por definición. práctica” que es posible tratar con ellas.
El “mayor interés”, lo que “se espe-
Ninguna de las tres preguntas clave de ra”, es la felicidad en la “vida futura”.
Kant –¿Qué puedo saber?, ¿qué debo Kant se muestra aquí de algún modo
hacer? (y su correlato con la idea de la como pensador luterano: crítico de las
libertad), ¿qué podría esperar?– pare- jerarquías en materia moral, de métodos
ciera concordar con el zoon politikón confesionales, relaciona la ilustración,
aristotélico. En Kant la pregunta “¿qué es decir, pensar por sí mismo, con la
puedo saber?” se refiere a lo que se puede autonomía de la ley universal postulada
pensar en el rango de lo cognoscible a lo como la razón moral o “razón práctica”.
incognoscible. La pregunta “¿qué debo Las tres preguntas kantianas están basa-
hacer?” concierne, según Arendt, a la das en el interés propio: para Kant todos
conducta con independencia de los otros: los hombres desean la felicidad. Según
es una forma de “libertad negativa”12. La Arendt, Kant busca armonizar la felici-
pregunta “¿qué podría esperar?” toma dad con la dignidad y la autoaceptación:
en Kant la expresión de lo que se puede ser digno de la propia felicidad. Que no
atender o entrever razonablemente con haya contradicción entre la satisfacción
respecto a la noción de inmortalidad del deseo y la consciencia de dignidad
(19). (20).
Arendt cierra esta sección con un
contraste entre Kant y otros filósofos
políticos. Con respecto a Platón dice lo
12 Arendt, The Human Condition, pp. 38-39; siguiente: al parecer el filósofo-gober-
Isaiah Berlin, Four Essays on Liberty (Oxford: nante platónico tendría incentivo para
Oxford UP, 1992), pp. 118-172. gobernar, pero no porque desee hacerlo.

18
Tiene dos razones para ello: 1). No ser la ciudad13, y que la filosofía es “aprender
gobernado por alguien menos capaz en a morir”14 (22). La prioridad ontológica
materia gubernamental. 2). Tener como platónica está en la trayectoria de la psi-
prioridad que haya tranquilidad en la co- qué incluidos los ámbitos anterior y pos-
munidad política, lo cual sería favorable terior de la vida política. Según Arendt,
para la serenidad de la vida filosófica. En los pensadores presocráticos Parménides,
la ética aristotélica, el hombre político Heráclito, Pitágoras comparten esta po-
está supeditado a la independencia y sición trascendental.
autosuficiencia contemplativa del hom- Arendt da un giro y se centra en
bre teórico. Con respecto a Spinoza, su este punto en el problema del sectarismo
principal propósito no es político sino “pitagórico”, en contraste con la intensa
la libertad de filosofar. Hobbes a su actividad social inter homines ese roma-
vez escribió el Leviatán para teorizar la na. En Roma, al contrario del legado
mayor paz y tranquilidad civil posibles. ateniense, los viejos filosofaban y los jó-
Finalmente, Arendt plantea un contraste venes se dedicaban a la actividad pública.
con Pascal: la vida filosófica es simple y Antes de la experiencia romana Sócrates
discreta. Según Pascal, Platón y Aris- trae la filosofía a la tierra. Considera la
tóteles escribieron sobre política como muerte como un dormir sin sueños. El
para poner orden a un asilo de lunáticos. poeta Sófocles parece sostener que no
Su propósito era moderar esa locura haber nacido sería mejor que estar en
hasta donde fuera posible (22). El Kant la tierra. Encuentra una segunda mejor
arendtiano, a diferencia de estos autores opción en regresar lo más pronto posible
de la tradición filosófica, no hace una al ámbito del origen (23). La posición
distinción tajante entre teoría y práctica. filosófica parece concluir que la vida
humana, en suma, es más dolor y pro-
CUARTA CONFERENCIA: blemas que placer y gratificación (24).
DIGNIDAD Y FELICIDAD O el dolor y el placer no son realmente
Pascal ejemplifica entonces, desde la

perspectiva de Arendt, la tensa relación 13 Arendt, The Human Condition, p. 16.
entre filosofía y política. Esta sería la 14 Platón, Fedón 64 a3-4. Arendt parece estar
actitud de la mayoría de filósofos hacia aludiendo tácitamente a la filosofía de Heidegger,
la arena de los asuntos humanos. ¿Cuál en particular la noción fundamental de finitud.
es la perspectiva general de Kant al res- Martin Heidegger, Ser y tiempo (Buenos Aires:
pecto? Platón, interpretado por Arendt, Fondo de Cultura Económica: 2014), §46-53.
señala que es “el cuerpo” el que habita en El tema desde una biografía intelectual sobre
Arendt lo aborda Laure Adler, Hannah Arendt:
Una biografía (Bogotá: Ariel, 2019), p. 337 ff.

19
opuestos. Así, no se entra en la vida Sobre el progreso ilustrado

meramente por disfrute. El problema
de la vida no es la brevedad o la finitud En la era de la ilustración el “progreso”
humana sino la carencia de sentido y de hace referencia a la especie humana en su
visión de conjunto. conjunto, y esto al parecer tiene poco que
De este modo, Kant llama a la vida ver con el individuo. Hay, por tanto, po-
un “tiempo de prueba” (“time of proba- co énfasis en la particularidad concreta
tion”). Experimenta que los deseos de como foco de atención en el progresismo
placer y dolor describen la experiencia de ilustrado: lo particular tiene sentido en el
la vida. Como anota Arendt en la sección marco del progreso universal. La ilustra-
anterior, en la Crítica de la razón pura ción enfatiza el paso racional o razonable
Kant da cuenta especulativa de la cone- de lo particular a lo universal. Esto no
xión entre dignidad y felicidad: ¿cómo es peculiar en Kant: Arendt referencia
ser feliz dignamente? Si desestimaran el amor fati de Spinoza, que interpreta
la dignidad humana las leyes morales como la aquiescencia ante todo lo que
serían “vanas quimeras”. Arendt nota que es. En Kant paradójicamente la apari-
en la esperanza, en la pregunta sobre lo ción de guerras, catástrofes, el mal y el
que cabe esperar transcendentalmente, dolor, existen de alguna manera para la
en Kant se enfatiza menos la figura de producción y despliegue de la cultura:
la inmortalidad que un género de vida “sin ellos, los hombres retornarían al
mejor (25). El Kant arendtiano busca estado de brutalidad regido por una mera
aliviar una disposición melancólica pro- satisfacción animal” (26)15.
fundamente enraizada, y así: Ahora bien, en medio de la ilustra-
ción general, Kant también encuentra
Se preocupa poco de los juicios ajenos, concerniente la dignidad moral del hom-
de lo que los otros tienen por bueno o bre individual. ¿Por qué existe el hombre?
verdadero: se apoya solo en su propio En la antropología filosófica kantiana
pensamiento. [Estima que] la verdad la cuestión del “para qué” del hombre
es sublime, y odia la mentira y el di- no se puede formular, ya que el hombre
simulo. […] todas las cadenas le son considerado como ser moral es un fin en
odiosas, desde las doradas de la corte sí mismo. En este orden de ideas, Arendt
hasta los pesados hierros del galeote. encuentra tres perspectivas desde las
Es un rígido juez de sí mismo y de los cuales considerar los asuntos humanos:
demás, y a menudo siente disgusto de
sí mismo y del mundo […] está en
riesgo de convertirse en un visionario,
o en un chiflado (25). 15 Tom Darby, The Feast: Meditations on Time
(Toronto: U Toronto P, 1990), pp. 94-117.

20
a) La especie humana y su progreso. c) Los hombres en el sentido de cria-

b) El hombre como ser moral y como turas en la tierra, que viven en co-
fin en sí mismo. munidades. Dotados de un sentido
c) Los hombres en plural, los cuales común, sensus comunis, que Kant en-
son el centro de los asuntos políticos, tiende como “sentido comunitario”.
cuyo “fin” es la sociabilidad. Los hombres en este tercer sentido
no son autónomos, se necesitan unos
Según Arendt, dar cuenta de la distin- a otros incluso para pensar libre-
ción entre estas tres perspectivas es una mente: “la libertad de expresión solo
precondición necesaria para entender tiene sentido inter homines”. Esta
el pensamiento político de Kant. Así, posibilidad comunitaria es aborda-
cuando Kant habla de “el hombre” hay da en la primera parte de la Crítica
al menos tres definiciones posibles: del juicio, y está relacionada con el
ejercicio del juicio o gusto estético.
a) El hombre entendido como la es-
pecie humana en el sentido de la QUINTA CONFERENCIA:
“humanidad”, que hace parte de SELBSTDENKEN
la naturaleza y como tal se encuadra
en la dimensión de la “historia”. Arendt propone que la disposición filo-
La historia en este contexto Kant sófica de Kant busca dar lugar no solo
la contempla como la “astucia de la al intelecto sino también a la experiencia
razón”, operando a través de las moral y al ejercicio de la sensibilidad. Es-
pasiones en movimiento teleológi- ta conferencia inicia con una distinción
co. Este juicio teleológico Kant lo entre Kant y el Sócrates platónico16. En
explora en la segunda parte de la el Fedón, por ejemplo, Sócrates comenta
Crítica del juicio. que los placeres distraen al intelecto:
b) El hombre como ser moral y racio- la implicación sería que el intelecto es
nal, sometido a las leyes de la razón inmaterial, y se encuentra más allá de
práctica que él mismo se otorga. la percepción. Esta no es la posición del
Autónomo, fin en sí mismo, perte- Kant arendtiano, para quien la cognición
neciente a un Geisterreich o reino de es la combinación entre intelecto y sensi-
los seres dotados de intelecto, que bilidad. Para Arendt la Crítica de la razón
podría especulativamente existir en pura vendría siendo una “justificación o
otras partes del universo. Esta forma hasta una glorificación de la sensibilidad
de antropología filosófica la aborda
en la Crítica de la razón práctica y
Crítica de la razón pura. 16 Cf. Arendt, “Thinking and Moral Conside-
rations”, pp. 7-37.

21
humana” (27). En Kant el cuerpo y los ‘necesidad’ (need ) de la condición hu-

sentidos no son en sí la fuente del mal. mana (29). La distinción entre pocos
Esto podría tener al menos dos conse- y muchos no radica en la inteligencia
cuencias: sino en la moral: en la nueva virtud de
la honestidad. Los pocos son quienes no
1) El filósofo kantiano-arendtiano se engañan a sí mismos en este respecto.
clarifica las experiencias que todos Kant se distancia de Platón y al parecer
tenemos. El filósofo no tiene polí- se aproxima a Aristóteles en que no hay
ticamente hablando, según Arendt, contradicción entre el filósofo y la comu-
una perspectiva independiente de la nidad política. En el pensamiento clásico
condición humana: no está por “fue- el gobernante escucha al filósofo, quien
ra de la cueva”. El filósofo kantiano tiene una mirada de conjunto sobre los
vive entre los hombres, no se retira asuntos políticos. Kant, sin embargo,
a la torre de marfil alejado, entre abandona la jerarquía aristotélica entre
filósofos, de la plaza pública17. la vida política y la vida teórica. De este
2) El filósofo kantiano-arendtiano no modo en su pensamiento dejaría de pre-
cuenta con una perspectiva privile- valecer la tensión clásica entre filosofía y
giada para evaluar genéricamente la comunidad política.
experiencia sensorial. Evaluar la vida Con respecto a la experiencia del
con respecto al placer y el dolor co- juicio, Arendt hace referencia a la “satis-
rresponde a cada hombre con “buen facción desinteresada” hacia la belleza.
sentido”, no solo a los filósofos. Anota que el hecho de que el hombre sea
afectado por la belleza de la naturaleza
Kant parte de la base de la igualdad en indica que “está hecho para este mundo y
la capacidad moral de los hombres (28). que concuerda con él” (30). ¿Pero, cómo
La inf luencia de Rousseau lo llevó a reconciliar la belleza del mundo con el
pasar del honor y la jerarquía intelectual sufrimiento histórico humano? Arendt
a la igualdad y libertad moral humana. considera que con respecto a la “teodi-
No hay distinción entre los “pocos” y cea” Kant tomó la posición del libro de
los “muchos” como en el modelo clási- Job: “los caminos de Dios son inescru-
co. Lo que trasciende los límites de lo tables”. Si Kant hubiera escrito una teo-
que se puede conocer, constituye una dicea, la belleza habría tenido una parte
clave en la misma. Un modelo histórico
de ese tipo significaría que las partes es-
17 Contrastar con Leo Strauss, On Tyranny. tán justificadas y se explican en relación
Including the Strauss-Kojève Debate (Chicago: U con el significado del todo orquestado
Chicago P, 2000), pp. 177-212. Beiner, Philosophy en su conjunto.
in a Time of Lost Spirit, Cap. 13.

22
Arendt concluye que, desde un pun- resultado de la ilustración es pensar por

to de vista global, para Kant el mundo es sí mismo: Selbstdenken18.
bello y, por tanto, es un lugar apropiado En uso de su razón, Kant descubre
para la vida, pero los hombres, en calidad también el “escándalo de la razón”, es
individual quizá no elegirían vivir en él decir que al parecer la razón misma
de nuevo (31). El hombre es un fin en sí, nos puede inducir al error (32). Lo que
y la especie humana en su conjunto está busca su filosofía crítica es establecer
sujeta al progreso. Sin embargo, estas las fuentes y límites de la razonabilidad:
dos nociones –la moral individual y el reconocer hasta donde la razón sigue
progreso colectivo– son contradictorias. siendo razonable. La crítica se configura
El progreso toma al hombre individual en contraste con la noción de “doctrina”:
como un medio, pero el individuo kan- no es ni dogmatismo ni escepticismo “pi-
tianamente hablando, como nos reitera rrónico”. Crítica significa comprensión
Arendt, es un fin en sí mismo. Ante esta estructural en forma arquitectónica: dar
paradoja, Arendt propone seguir explo- cuenta del todo y las partes. Esto, en el
rando una filosofía política “no escrita” ámbito de las artes, busca establecer las
en Kant que intenta dar cuenta de esta reglas del gusto, encontrar estándares
contradicción entre la dignidad singular para el quehacer creador. El pensamiento
del hombre y el postulado del progreso crítico kantiano no está postulado como
lineal de la humanidad. preparación hacia un nuevo dogmatis-
La filosofía kantiana es una pie- mo. La crítica va unida a la adultez del
dra de toque del pensamiento crítico ser humano, que significa pensar por
de la ilustración. Busca un “beneficio sí mismo sin depender del criterio de
negativo”, es decir, purificar la razón, otros19. El pensamiento crítico “deja
asegurarse de que “ni la experiencia ni la
sensación interfieran con la actividad de
pensar” (31). La edad de la ilustración es 18 Richard Bernstein propone la noción arend-
la edad de la crítica. La ilustración está tiana del Selbstdenken ilustrado como respuesta
constituida por una actividad crítica de a la filosofía de Heidegger en “Provocation and
negación: de toma de distancia de las Appropriation: Hannah Arendt’s Response to
tradiciones para dar forma a una socie- Martin Heidegger”, en John P. Mccormick ed.,
dad cada vez más racional y moralmente Confronting Mass Democracy and Industrial Tech-
igualitaria. Ilustración significa, en este nology: Political and Social Theory from Nietzsche
contexto, “liberación de los prejuicios, to Habermas (Durham: Duke UP, 2002), pp.
de la autoridad, así como un evento 295-318.
de purificación” (31). Se produce así, 19 Emanuel Kant, ¿Qué es la Ilustración?
en principio, una examinación abierta (Madrid: Alianza, 2007). Ver Stanley Rosen,
y libre de la vida social y política. El Hermeneutics as Politics (New Haven: Yale UP,

23
atrás” las alternativas del escepticismo entonces a un Kant que interpreta como
relativista y del dogmatismo doctrinario. pensador socrático20 .
Sin embargo, al parecer todos de
una manera u otra comenzamos como SEXTA CONFERENCIA:
dogmáticos: aquí Arendt deja entrever FILOSOFÍA CRÍTICA Y LA
sus presupuestos cartesianos. Una posible REPÚBLICA DE LAS LETRAS
reacción ante el pensamiento crítico es
el escepticismo radical, es decir, afirmar Kant toma la noción de crítica como
que no hay verdad, donde escojo mi ver- símbolo clave de la edad de la ilustración.
dad con base en preferencias pragmáticas La crítica describe el espíritu filosófico
o tradicionales. Por otro lado, el dog- kantiano: a partir de la hermenéutica
mático acusará al escéptico de nihilista. kantiana, por medio de la distancia crí-
La posición crítica no es ni escéptica ni tica, podemos al parecer comprender a
dogmática: propone una alternativa a la un autor mejor que este se comprendió
disyuntiva “estéril” entre dogmatismo y a sí mismo. La crítica avanza en medio
escepticismo. Asume una posición que de un espíritu de negación interpretati-
Arendt denomina de modestia intelec- vamente esclarecedora. El historicismo
tual. Por tanto, el pensador crítico arend- kantiano postula que es posible para “la
tiano dirá: “aunque los hombres tienen posteridad entender mejor a un autor que
una noción, una idea de verdad para como él se entendió a sí mismo” (Crítica
regular sus procesos mentales, quizá no de la razón pura, B370).
sean capaces, en tanto que seres finitos, Como observábamos en la conferen-
de tener la verdad” (33). Arendt inter- cia anterior, el pensador crítico plantea
preta esta línea de pensamiento en clave una alternativa distinta al escepticismo
socrática: “ningún hombre como tal es y al dogmatismo. La noción escéptica
sabio”. Y hace referencia a la Crítica de según la cual “no hay verdad”, une por
la razón pura donde Kant señala que es oposición a los dogmáticos. Y lo contrario
posible inquirir sobre las facultades que ocurre con afirmaciones absolutas de la
nos han sido dadas (aunque no sabemos verdad desde un punto de vista huma-
por quién ni cómo). Desde este punto no. El pensador crítico anota que tanto
de partida de perplejidad epistémica la el dogmático como el escéptico tienen
primera Crítica analiza lo que podemos una noción absolutista de la verdad: así,
saber y lo que no. Arendt nos presenta sus conceptos de verdad se polarizan y
son excluyentes. Quizá hay algo social o
2003), pp. 19-49. Susan Shell, The Rights of

Reason: A Study of Kant’s Philosophy and Politics. 20 Arendt, “Thinking and Moral Considera-
(Toronto: U Toronto P, 1980). tions”, p. 35.

24
políticamente cuestionable con ese con- llama a esta postura del joven Hegel
cepto de verdad. Una pregunta clave, sin una supuesta ‘recaída’ en la mentalidad
embargo, es si la crítica al absolutismo platónica 23. En la siguiente generación,
ha de llevarnos al desastroso problema posterior a la de Kant, el espíritu de la
de la “posverdad”. Arendt sugiere que ilustración se empezó a diluir, y la filoso-
“quizás” como seres finitos, aunque no fía kantiana fue interpretada como otro
la poseamos, los hombres tengamos una “sistema”. Arendt anota que la genera-
noción abierta de verdad. ción posterior a la de Hegel (la de Marx
La Crítica de la razón pura intenta y Nietzsche) decidió, aparentemente
establecer el límite de la razón especu- por inf luencia de Hegel, “dejar atrás”
lativa. Esta función negativa establece la filosofía kantianamente entendida
límites a las especulaciones metafísicas. (36). Interpretaron la filosofía crítica
Estrictamente hablando no hay ontología kantiana como “destrucción” y no como
en Kant, porque aparentemente la “cosa límite y purificación. El Capital de Marx
en sí” se puede postular hipotéticamente, originalmente se titulaba Crítica de la
pero no se puede constatar por medio de economía política. Marx además llamaba
la razón humana. Kant postula una críti- a Kant “el filósofo de la revolución fran-
ca a la estructura mental del escolasticis- cesa” (36). Según Arendt, para Marx,
mo cerrado: la filosofía crítica kantiana, pero no para Kant, lo que unía y mediaba
por ejemplo, limita las especulaciones entre la teoría y la práctica es la crítica: a
tomistas o la llamada arrogancia de las partir del marxismo el desmantelamiento
“escuelas”. Kant comunica estas especu- crítico del antiguo régimen precede la
laciones por medio de la República de las puesta en práctica de su destrucción.
letras, que es la audiencia abiertamente Esta sería, según Marx, la manera como
universal del pensador crítico21. “la idea atrapa a las masas”. En la lectura
En el joven Hegel, por otra parte, arendtiana sobre Marx ilustración y re-
la naturaleza de la filosofía toma según volución se complementan mutuamente.
Arendt un matiz esotérico22 . El lengua- Ahora bien, por otro lado, Arendt
je filosófico aparentemente da un giro sostiene que en Kant lo que conecta
desde el llamado “sentido común”, y la teoría y la práctica es el juicio. Por
se orienta ahora desde la premonición ejemplo: en los casos del médico o el
hacia una “verdad superior” (35). Arendt abogado, que aprenden la teoría y luego
21 Leo Strauss relata una visión crítica sobre la 23 Ver Friedrich Nietzsche, Más allá del bien y
República de las letras en On Tyranny, p. 195. del mal (Madrid: Edimat, 2003), § 30. Shlomo
22 Cf. Leo Strauss, Persecution and the Art of Avineri, Hegel’s Theory of the Modern State (Cam-
Writing (Chicago: U Chicago P, 1988), pp. 7-37. bridge: Cambridge UP, 1979), p. 86.

25
establecen su práctica, aplicando las le- está basada en un principio de pensa-

yes y procedimientos aprendidos a casos miento según el cual debemos “actuar de
particulares. En el caso del pensamiento tal manera que la máxima de la acción
crítico kantiano, Arendt recalca que pueda postularse voluntariamente como
su origen es “socrático”. Sin embargo, ley general”. No contradecirse determina
Arendt también especula que a diferen- entonces conjuntamente el pensamiento
cia de Sócrates, al parecer Kant creía y la acción.
en la posibilidad de un futuro sistema Sócrates no era miembro de ningu-
metafísico (37). na secta, no fundó ninguna escuela 24.
Así las cosas, Arendt se plantea Arendt proyecta en la figura de Sócrates
la pregunta: ¿qué es la teoría crítica? un modelo de “filosofo público” (38).
La teoría crítica consiste en separar el Las escuelas y las sectas “pitagóricas”,
pensamiento del prejuicio irref lexivo, por otro lado, no son “ilustradas” en
purificando el alma en dirección al co- el sentido kantiano porque apelan a
nocimiento. Inesperadamente, esta for- las doctrinas de sus fundadores. En ese
mulación, anota Arendt, resulta más sentido Arendt menciona la academia
platónica que socrática. En una interpre- platónica, que a su juicio pareciera estar
tación aporética de Sócrates, no se llega a constituida en oposición a la “opinión
un estado concluyente de conocimiento pública” 25. Arendt experimenta en la
a partir de la examinación dialéctica. La
vida examinada socrática produce más
preguntas que respuestas: por tanto, abre 24 Contrastar con Pierre Hadot, ¿Qué es la
la mente a la capacidad de asombro, de filosofía antigua? (México: FCE, 2000); Philosophy
“ver” lo que hay en sentido esencialmente as a Way of Life (Oxford: Blackwell, 1995). Hadot
profundo (cf. Fedón 118a1-3). Para el muestra persuasivamente que el ámbito de las
Sócrates arendtiano pensar es un fin escuelas es fundamental para desarrollar formas
en sí mismo. La vida sin examinar no de vida filosóficas, que quizá en sí mismas no
merece ser vivida. tendrían necesariamente que decaer en modelos
Lo que hace Sócrates es hacer pú- dogmáticos. El contraste entre Arendt y Leo
blico discursivamente en el ágora el pro- Strauss en torno a la fundación y las dinámicas
cedimiento del pensamiento. Esto está dentro de las “escuelas filosóficas” lo discute
basado en la regla de la consistencia so- Ronald Beiner, “Hannah Arendt and Leo Strauss:
crática, o el “axioma” “lógico” y “ético” The Uncommenced Dialogue”, en Philosophy in
de la no-contradicción. Este, a su vez, a Time of Lost Spirit, pp. 105-133.
se convierte en el primer principio del 25 Cfr., sin embargo, Hannah Arendt, ¿Qué es la
pensamiento aristotélico. Posteriormente política? (Barcelona: Paidós, 1997), p. 82 donde
en Kant se transforma en un principio Arendt señala que mediante la fundación de la
ético: la ética o “razón práctica” kantiana academia platónica se hizo posible que la teoría

26
teoría crítica una alternativa tanto del entre filosofía y vida pública el arte del
dogmatismo popular de las mayorías, pensamiento crítico siempre tiene im-
como del dogmatismo de la “torre de plicaciones políticas. Tuvo consecuen-
marfil”26. En su criterio, en la relación cias “graves en el caso de Sócrates” que
fue condenado a muerte por la Atenas
democrática. El pensamiento crítico
es en principio antiautoritario. Sócrates
política viniera de la filosofía y no meramente aparentemente “no enseñaba nada” o no
de lo político. Así, el hecho de que la academia tenía una doctrina positiva. El problema
platónica no estuviera necesariamente condi- del pensamiento crítico, desde el punto
cionada por un marco político particular hizo de vista de la sociedad, es que pone en
posible que de allí surgiera “un espacio nuevo cuestión los pilares de las tradiciones
de libertad máximamente real que ha llegado establecidas. Kant, sin embargo, tenía la
hasta nuestros días como la libertad de las uni- esperanza de que su pensamiento pudiera
versidades y la libertad académica de cátedra”. popularizarse para dar sostén filosófico
A este respecto ver la carta del joven Nietzsche a la edad de la ilustración.
a Erwin Rohde (diciembre 1870). El tema de la Según Arendt, el pensamiento crí-
refundación de la academia platónica lo abordo tico en sentido kantiano-socrático está
en J.D. Parra, “‘Who Educates the Educators?’ basado en el libre examen, abierto a re-
Nietzsche’s Philosophical Therapy in the Age flexionar sobre las opiniones recibidas.
of Nihilism”, en Horst Hutter y Eli Friedland, La edad de la ilustración es la edad del
eds., Nietzsche’s Therapeutic Teaching (London: “uso público de la razón”: la libertad más
Bloomsbury, 2013), Cap. 5; también en “Filosofía importante para Kant, que es la libertad
política en el pensamiento neoclásico de Euge- de expresión y de publicación. La liber-
nio Trías: Una lectura de El artista y la ciudad ”, tad política tal como la ejerció Kant es
Praxis Filosófica (51), julio-diciembre 2020, p. hacer uso público de la razón en el sen-
55-76. El tema en relación con los métodos pe- tido de comunicarse en calidad de docto
dagógicos de “tradición oral” lo menciona Pico en la República de las letras. La persona
della Mirandola en On the Dignity of Man. Trad. docta se distingue porque tiene criterio
Charles Glenn Wallis (Indianapolis: Hackett, de “ciudadano del mundo” (39). La teo-
1998), pp. 12; 30; 33. ría crítica de Kant se despliega entonces
26 Contrastar con la crítica cultural que hace como una modalidad de pensamiento
Allan Bloom al principio moderno-democrático cosmopolita. Es de este modo que el
aplicado transversalmente a la educación univer- pensador ilustrado de corte kantiano
sitaria en The Closing of the American Mind (New
York: Simon & Schuster, 1987), junto con la
respuesta de Charles Taylor en favor de la “ética en la era moderna en The Malaise of Modernity
de la autenticidad” que se está abriendo paso (Toronto: Anansi, 1991), p. 13 ff.

27
tiene la posibilidad de expresar y comu- Crítica del juicio: debe tener “vocación
nicar sus opiniones para compartir su de comunicabilidad general”, en especial
punto de vista e intentar persuadir a sus en materias que conciernen al hombre
conciudadanos. como tal (40).
De acuerdo con el criterio kantiano
la facultad del pensamiento tiene como SÉPTIMA CONFERENCIA:
correlato su uso público. La razón no está RAZÓN PÚBLICA
hecha para aislar sino para hacer posible
la comunidad. Kant, relata Arendt, está El pensamiento crítico implica entonces
de acuerdo con Platón en que pensar es comunicabilidad. La “vocación natural”
un diálogo silencioso consigo mismo. Sin de la comunicabilidad se da entre los
embargo, a menos que se esté en alguna hombres en plural, no en el hombre en
capacidad de comunicar el pensamiento sentido universal abstracto. Arendt rei-
con otros, Arendt estima que el ejercicio tera que, aunque el pensamiento es una
de dicha facultad en soledad tiende a ocupación solitaria, este en su modali-
atenuarse y desaparecer. La “verdad” de dad crítica depende relacionalmente de
la acción humana se manifiesta entonces otros: “aquel poder exterior que le quita
como aquello que podemos comunicar a los hombres la libertad de comunicar
públicamente. En este punto pareciera públicamente sus pensamientos, les quita
haber una aproximación clave entre la también la libertad de pensamiento”
filosofía crítica arendtiana y la acción (41). El pensamiento crítico es pensa-
comunicativa de Habermas27. Mientras miento público.
que la “verdad científica” se puede repli- Sócrates en el ejercicio mayéuti-
car experimentalmente, la “verdad filo- co aterriza a la filosofía, examinando
sófica”, en sentido kantiano-arendtiano, opiniones de sus conciudadanos, des-
es de otra índole: debe tener aquello que cubriendo sus contradicciones e im-
Kant exige a los juicios del gusto en la plicaciones latentes. Según Arendt, el
pensamiento crítico es eso: un análisis
de las implicaciones latentes de deter-
27 Albrecht Wellmer señala como punto clave en minados conceptos. Por ejemplo: Arendt
la acción comunicativa habermasiana la noción toma el concepto de “progreso” y su
de intersubjetividad en un mundo aparentemente aparente correlación con la metáfora
“desencantado”. Tanto Habermas como Arendt orgánica en su significado teleológico de
teorizan con base en una pluralidad de individuos “organización”. Este concepto al parecer
que deliberan desde una reflexividad intersubje- implica plantear el progreso como un
tiva cartesiana-kantiana. Cf. Richard Bernstein, proceso natural de “maduración” histó-
ed., Habermas and Modernity (Cambridge: Polity rica que va así justificando su proceso
Press, 1985), pp. 53-54. de organización a lo largo del tiempo.

28
Arendt protesta contra esta noción de A nivel filosófico, esta transfor-

historicidad: hay otros mundos posibles mación comenzó con los sofistas: los
distintos a lo colectivamente establecido representantes de la ilustración en la
y organizado en el plano del devenir Grecia clásica (42)29. El Sócrates arend-
histórico. tiano al parecer continúa este proceso
El pensamiento crítico presupone de transformación con el método del
estar en capacidad de explicar lo que se elenchus, es decir, la examinación de la
piensa y se dice. Los presocráticos, por opinión pública por medio de una es-
ejemplo, son oraculares en su formula- tructura de pregunta-respuesta basada
ción del entendimiento: no dan cuenta en la no-contradicción y la analogía de
de sus pensamientos, permanecen en la techné. Este es el legado histórico del
silencio cuando se les pide una explica- pensamiento crítico como lo entiende
ción. El logon didonai, “dar cuenta”, no Arendt: comienza con los sofistas, se
necesariamente “probar” en el sentido afina en Sócrates, y se cristaliza even-
de un silogismo irrefutable, sino ser tualmente en la teoría crítica kantiana.
capaz de explicar razonablemente cómo Kant, como lo hará más adelante Max
se llegó a una opinión, por qué razones se Weber, distingue entre la quaestio facti,
llegó a formar una opinión: esto separa la cuestión de los hechos, o cómo se lle-
al Sócrates platónico de sus predecesores gó a obtener un concepto, y la quaestio
presocráticos. El ejercicio y la expresión juris: “¿se tiene derecho a contar con un
de “dar cuenta” –que es muy distinto a concepto X?” Aplicando los estándares
rendir cuentas, ya que implica una rela- críticos al propio pensamiento, se llega
ción de simetría ciudadana, mientras que al arte del pensamiento crítico. En la
la noción de rendición denota relaciones práctica esto se aprende en un ejercicio
de asimetría profunda– tienen un origen público, en el contraste deliberativo con
político. Es responder, explicarse a sí el pensamiento razonable de otros: no so-
mismo, asumir responsabilidad en un lo para refutar, sino para afinar el propio
ámbito de isonomía política 28. pensamiento. Implica la búsqueda de la
imparcialidad en el contraste diferencia-
do de pensamientos, tomando en cuenta
28 Arendt, ¿Qué es la política?, p. 70. Arendt

se sitúa del lado de la igualdad moral universal
kantiana en contraste con el pensamiento político
aristotélico donde el ejercicio de ciudadanía no es 29 El trabajo clásico sobre los sofistas en la
potencialmente universal y lo clave es “gobernar Grecia antigua es de Jacqueline de Romilly, Los
y ser gobernado” dentro de una polis particular. grandes sofistas de la Atenas de Pericles (Barcelona:
Cf. La Condición humana, pp. 32; 215. Seix Barral, 1997).

29
el punto de vista de otros, sin ubicarse en las Leyes de Platón). El pensamiento

“por encima del meollo”30. crítico, sin embargo, no constituye una
El movimiento del pensamiento empatía desmesurada. Pensar crítica-
parece producirse desde el ámbito par- mente significa para Kant la capacidad
ticular al general y viceversa: verificando de Selbstdenken, pensar por sí mismo,
observaciones, “tensando” la mente en lo sin la pasividad inercial de las lealtades
específico y “relajando” en lo macro. Así ciegas o del prejuicio irreflexivo.
se va flexibilizando, “ampliando” (enlar- La ilustración se explica como la
ging) la mente en el proceso deliberativo. progresiva liberación del prejuicio. Esto
Esta ampliación de la mente, tomando incluye comprender el punto de vista de
en cuenta todos los puntos de vista con- los otros: el lugar en el que se encuentran,
siderables, juega un papel clave en la las condiciones a las que están sujetos,
interpretación arendtiana de la Crítica comprender sin necesariamente aprobar
del juicio. La ampliación mental se lleva sus prejuicios. Este modo de pensar
a cabo comparando nuestros juicios con extensivo es, en primer lugar, una abs-
los de los otros, no solo en términos de tracción de las limitaciones contingentes
lo dado, sino también de lo posible: de lo de nuestro propio juicio, del interés
que no es actual, pero podría llegar a propio que en Kant no es ilustrado,
serlo. Este ejercicio que nos permite po- sino fácticamente limitante. Esta am-
nernos panorámica y singularmente en pliación panorámica va a lo general, sin
el lugar de otros se hace por medio de la ser necesariamente conceptual. Arendt
facultad de la imaginación (43). sostiene que no se trata de una genera-
El pensamiento crítico se hace po- lidad conceptual en la que se subsumen
sible cuando las posturas de todos los y determinan los particulares, sino es
“otros” están abiertas a ser inspecciona- una ampliación dispuesta a reflexionar a
das. Es una actividad solitaria, pero no partir de los mismos (44). Esto significa
solipsista: puede tomar en cuenta a todos que la reflexión se despliega con base en
los demás, está abierta a ser persuadida, las condiciones particulares de los puntos
adoptando la posición de ciudadano del de apoyo por los que cada uno tendría
mundo (cf. la posición del “visitante” que atravesar para llegar al “punto de vis-
que propone Kant en La paz perpetua; ta general” o “imparcial”. El punto de
contrastar con el “extranjero ateniense” vista imparcial es desde donde se puede
ref lexionar crítica e ilustradamente a
cerca de los asuntos humanos.
30 Sobre la figura clave del espectador ver la Arendt reconoce que esta posibili-
lectura de Ronald Beiner en su “ensayo inter- dad de reflexión no indica, sin embargo,
pretativo”, Hannah Arendt: Lectures on Kant’s cómo actuar. Tampoco da indicacio-
Political Philosophy, p. 125. nes sobre cómo poner en práctica en el

30
campo político la sabiduría adquirida el plano histórico “el evento reciente”32 .

desde el “punto de vista general”. Según Para Kant es “simplemente el modo de
Arendt, Kant nos dice cómo tomar en pensar de los espectadores el que se revela
cuenta a los otros, pero no nos dice cómo públicamente en el juego de las grandes
concertar con ellos para llevar a cabo transformaciones” (45). Los espectadores
cursos de acción concretos. Entonces se no están comprometidos con el juego
pregunta: ¿es el punto de vista general el histórico y, sin embargo, sienten una
lugar del espectador? En Kant este es el simpatía desinteresada hacia el avance
punto de vista del ciudadano del mundo: de la predisposición moral de la especie
¿qué significa esta noción “idealista”? humana. El progreso de la causa moral
Ser ciudadano implica tener derechos, en la medida en la que no sea olvidado
deberes, responsabilidades, las cuales no es completamente reversible. La revo-
tienen sentido en un territorio delimi- lución francesa constituye el avance de
tado y concreto. Encontramos entonces un pueblo singular que hace que gradual-
que el ciudadano del mundo kantiano mente otros pueblos participen de estos
es, en efecto, un Weltbetrachter un “es- “eventos” de profunda transformación
pectador del mundo” potencialmente histórica.
privado de derechos civiles. En Kant
no hay gobierno mundial porque dicha OCTAVA CONFERENCIA:
institución sería, en la lectura de Arendt, ACCIÓN COMPROMETIDA
la “peor tiranía imaginable” (44). A la Y EL JUICIO DEL ESPECTADOR
hora de pensar la figura del espectador
en el plano histórico concreto, Arendt El significado de los “eventos” auténtica-
encuentra una contradicción aparente mente históricos para Kant está en el ojo
en Kant entre su admiración por la re- de los espectadores: en la opinión que es-
volución francesa, y su repulsión hacia tos formulan o proclaman públicamente.
el comportamiento revolucionario por Esta proclamación establece la “prueba”
parte de los ciudadanos franceses.
Como anotábamos antes, Marx lla-
maba a Kant el filósofo de la revolución 32 Para una exploración filosófica de la noción
francesa 31. La revolución francesa es en ontológica e histórica de “evento” ver Martin
Heidegger, The Event (Indianapolis: Indiana
University Press, 2013), Prefacio. También, J.D.
Parra, “Global Enframing, Authentic History,
Dasein: Thoughts on the Preview of Heidegger’s
31 Cfr. Shlomo Avineri, The Social and Political Beiträge zur Philosophie”, en Lee Ward, ed., Cos-
Thought of Karl Marx (Cambridge: Cambridge mopolitanism and its Discontents (Lanham, MD:
UP, 1986), pp. 8-9; 21-22; 69. Lexington Books, 2020), Cap. 8.

31
del progreso moral de la humanidad punto de vista del espectador, condena

(46). Es la simpatía de esta participa- los actos revolucionarios, pero en el caso
ción la que otorga al evento significado de la revolución francesa afirma casi con
en el sentido de una esperanza hacia la entusiasmo sus consecuencias históricas.
existencia cosmopolita. La esperanza Arendt señala entonces el conflicto entre
cosmopolita se presenta en este marco el actor comprometido y el espectador
histórico como el propósito más alto de que juzga: un conflicto entre la política
la naturaleza para el desarrollo inma- y la moral. El modelo de ilustración
nente de las capacidades humanas (47). kantiano reitera que los actos que no se
Aunque la revolución francesa apunta en puedan acometer bajo el principio de
esa dirección, Arendt observa que hay publicidad corren el riesgo de favorecer
un problema con el acto revolucionario intereses particulares por encima de los
como tal, ya que siempre es ilegal en colectivos. La justicia cívica es insepa-
cuanto es contrario al marco establecido rable del principio de publicidad en la
de la ley. El origen de las revoluciones se filosofía política kantiana. Los cambios
presenta en un punto de saturación por el de régimen, por tanto, parecieran reque-
descontento generalizado producido por rir una profunda saturación que haga
malas constituciones. Bajo la lógica re- del clamor popular un movimiento de
volucionaria, si se vulneran los derechos transformación públicamente declarado.
del pueblo, no habría injusticia cuando Hay injusticia tanto en el despotis-
se depone a un tirano. Sin embargo, mo (que no reconoce los derechos ciuda-
Arendt anota que paradójicamente para danos), como en la rebelión (que no reco-
Kant no es solo ilegal sino además es noce los derechos de la autoridad estatal
moralmente ilegítimo por parte de los constituida). Nadie que tenga un poder
ciudadanos reivindicar sus derechos de decididamente superior necesita ocultar
modo revolucionario. ¿Cómo salir enton- sus planes. Todas las máximas que re-
ces de situaciones de profunda injusticia quieren publicidad para no fracasar en
colectiva? sus fines concuerdan con la política y el
Al parecer, en esta disyuntiva se derecho kantiano juntos. En la filosofía
presenta un conflicto entre el principio moral de Kant la publicidad es criterio de
ref lexivo del juicio y el principio de rectitud: la ley moral se puede declarar
acción y transformación política. Si los públicamente por todo el mundo. Así, las
revolucionarios no tienen éxito en la lu- máximas privadas son sujetas a examen
cha por deponer al tirano, serán sujetos para estimar si pueden ser sostenidas pú-
a un castigo severo, y no podrán clamar blicamente. En este punto de la discusión
injusticia del mismo modo que el tirano la moral se estima como la coincidencia
tampoco hubiera podido hacerlo si estos de lo privado y lo público. Insistir en la
hubieran triunfado (48). Kant desde el privacidad de la máxima, según Kant,

32
es una característica del mal ya que la al parecer se perdería la inspiración en

moralidad en su criterio significa que se los hombres sensatos de hacer algo por
es digno de ser visto por “los hombres, el bien común.
y por Dios como conocedor omnisciente En ese sentido histórico, Arendt aso-
del corazón humano” (49-50). cia esta noción de progreso con la inquie-
Por otro lado, Arendt propone abor- tud política de Maquiavelo (Príncipe,
dar la figura del “legislador”, quien solo cap. XXV), según la cual la fortuna o la
puede serlo si es libre. La precondición de contingencia aparente se extiende fácil-
esta libertad es la libertad de la palabra mente si los hombres no le imponen lími-
escrita: la existencia de una esfera públi- tes suficientes. Kant, por otro lado, está
ca de opinión, que a su vez se manifiesta de acuerdo con la consideración tradicio-
como acción política. Al parecer, para nal según la cual el mal se autodestruye
Kant el momento de rebelarse sería si (51). El comienzo del mal en su criterio
la libertad de expresar opiniones de ma- son las inclinaciones no generalizables
nera escrita es abolida. Arendt establece de los hombres. La moral de la transpa-
aquí un paralelo con la filosofía política rencia es consecuencia de esta postura
de Maquiavelo: resistir el mal conlle- kantiana. Desde la perspectiva del es-
va a tener conductas similares a las de pectador, como el mal se autodestruye,
aquellos a quienes se está resistiendo; el al parecer la tendencia progresiva de lo
cuidado por el mundo pone en juego la bueno tendría tendencia a mantenerse
paz interior (50). Pero Maquiavelo, quien y ampliarse una vez ha logrado estable-
de alguna manera inaugura la filosofía cerse. Habría entonces tres alternativas
política moderna, le da prelación a la referentes a la direccionalidad histórica:
ciudad sobre el alma 33.
Según Kant en el plano histórico a) Regresión: que produciría desespe-
es clave asumir el principio, el llamado ración.
deber innato, del progreso. En su estima- b) Repetición eterna: con la que al
ción, este deber, aunque a veces pueda parecer moriríamos por tedio.
verse interrumpido, no se rompe. La c) Asumir la idea regulativa del pro-
supererogación no obliga humanamente greso.
a nadie. Sin la esperanza de progreso no
habría esperanza de un tiempo mejor, y Aunque los actores no parezcan cansarse,
Arendt resalta en el texto que los actores
son “necios” (“ fools”)34, el espectador sí
33 Ver la carta de Maquiavelo a Francesco
Vettori (16 abril 1527). Niccolo Machiavelli,
The Prince. Trans. Harvey Mansfield (Chicago: 34 Eugenio Trías, Drama e identidad (Barcelona:
U Chicago P, 1998), pp. 107-111. Barral Editores, 1974), p. 138. Thomas Hobbes,

33
se daría cuenta del juego al instante si de lo “sublime” en relación con la guerra

concluyera razonablemente que todos y la paz, Kant se sitúa en el campo de la
los actos toman lugar en un movimiento paz. Sin embargo, Arendt en ese sentido
obsesivo-compulsivo de la eterna recu- es consciente de que desde un punto de
rrencia de lo mismo (51). vista humano el cementerio sería la ima-
gen de la “paz perpetua”. Pareciera haber
NOVENA CONFERENCIA: una relativa tensión entre la aspiración
¿ARMONÍA PRE-ESTABLECIDA? de paz y el movimiento vital que como
tal puede llevar a la oposición y posible
La naturaleza misma que, según el Kant conflicto entre los hombres.
de la Paz Perpetua, se podría llamar tam- Arendt continúa: aunque se afirma
bién “providencia” o quizá “destino”, es en la convicción pacifista de Kant, tam-
según Arendt la garantía, al menos para bién reivindica que la guerra tiene algo
el espectador, de que todo está desenvol- sublime (53). Es sublime, por ejemplo,
viéndose acompasadamente. El propósito contemplar al soldado valiente, cuya
de la naturaleza es producir el movimien- mente no se deja subsumir por el miedo.
to desde la discordia hacia la armonía en- Desde el punto de vista “estético” del
tre los hombres por medio de la historia. espectador una paz prolongada trae con-
Este es el significado de progreso (52). sigo el espíritu comercial que pareciera
El espectador, al no estar fácticamente atenuar la disposición moral, en especial
apegado a los acontecimientos, puede el coraje, de la gente. En la lectura ho-
asimilar este orden natural, el cual no es mérica de Arendt las guerras parecieran
evidente para el actor. Sucede entonces hacer parte del apasionado propósito
que por un lado está el espectador con cosmopolita de la naturaleza. Una direc-
su mirada panorámica y, por el otro, está ción hacia la paz cosmopolita, a la que,
el actor y los aparentes accidentes y con- anota Arendt con realismo político, se
tingencias del devenir coyuntural. En el llegará quizá no por la razón o la buena
caso de la revolución francesa Kant tenía voluntad sino por el agotamiento de las
la opinión según la cual el significado partes. En este apartado Arendt se sitúa
último del evento lo tenía el espectador. mucho más cerca de Homero, Tucídides
Ahora bien, en referencia a la experiencia o Maquiavelo que de la serenidad de la
filosofía platónica (ver Gorgias 481 d2-3).
Arendt parece concluir que los jui-
Leviathan (Indianapolis: Hackett, 1994), p. cios estéticos reflexivos con respecto a la
90. J.D. Parra, Heidegger’s Nietzsche: European naturaleza de la historia son distintos a
Modernity and the Philosophy of the Future (Lan- las consecuencias prácticas de la “acción”
ham MD: Lexington Books, 2019), p. 62 n. 14; para la cual es un deber moral que no ha-
170-171. ya guerra. Arendt encuentra una posible

34
distinción entre la máxima pacifista para comprender lo que hay. Los filósofos se
la acción moral y el juicio estético reflexi- sitúan donde puedan contemplar la vi-
vo (54). Quizá la perspectiva homérica sión de conjunto. El actor es parcial por
del espectador, en el plano de los actos, definición: actúa una parte. El especta-
conlleva a tomar demasiada distancia dor es imparcial, ya que no se le asigna
del orden moral. Por otra parte, si el ninguna parte: no toma lugar particular
espectador olvida el discernimiento al- dentro del juego. El actor está interesado
canzado desde la perspectiva panorámica en la doxa: la fama y la opinión de los
y toma parte en la acción, corre entonces demás. Su preocupación decisiva se sitúa
el riesgo de creerse un ‘buen hombre’ en cómo aparece ante la opinión de los
cuando en realidad su criterio es el de otros. Así, el actor depende de la opinión
un “necio idealista” (54). El fundamento de otros actores y sobre todo del especta-
existencial del espectador es su no-parti- dor. Desde un criterio histórico, el actor
cipación, el no ser parte interesada en los no es autónomo. No actúa siguiendo
acontecimientos. Desde el punto de vista la voz interior de la razón sino lo hace
“estético” del espectador la revolución conforme a lo que los demás actores y los
francesa es un “gran evento” que instau- espectadores esperan de él. El espectador
ra en el plano del tiempo la noción de kantiano-arendtiano establece, modela,
progreso, abriendo la esperanza de una o relata el estándar de la acción histórica.
promesa socialmente emancipatoria para En esa medida, el espectador kantiano-
las futuras generaciones. Esta afirmación arendtiano pareciera contar con una
progresista de la revolución francesa se relativa autonomía, una cierta libertad
distingue del punto de vista del actor, interpretativa, con respecto al devenir de
quien tendría en la paz un deber moral. los actos. Para los filósofos “pitagóricos”
Aquí Arendt espera una relación entre el teórico es el estándar: contempla desde
guerra, tecnología y progreso: hay en su la parte divina del alma lo universal y
criterio una historia de la tecnología que necesario, las verdades eternas, lo que
va en dirección del progreso, por tanto, no puede ser diferente a lo que es. Kant
posiblemente del conflicto hacia la paz. discrepa de esta interpretación: desde
Es el espectador y no el actor quien su punto de vista el espectador asume
comprende el significado global de los la posición de “juez”, relator, o cronista
acontecimientos. El significado o la histórico (56).
“verdad” se revela a quienes se abstienen Para explicar esta perspectiva, Kant
de actuar (55). La vida, en la versión pi- emplea una serie de metáforas legales,
tagórica, es un “carnaval” donde algunos en especial el “tribunal de la razón”,
compiten, otros comercian y otros vienen ante el cual comparece lo que ocurre en
a observar. Los actores andan en busca el mundo. El punto de vista general lo
de fama y ganancia, los filósofos buscan encarna la imparcialidad del juez, quien

35
deja de lado el “me parece” o el deseo de hegeliana en la que el significado se

aparecer ante otros, renunciando así a la revela al “final de la historia”. La espe-
doxa. ¿Cuál es el estándar entonces de ranza de progreso es la que hace de la
este tipo de juicios? Arendt indica que revolución francesa un “gran evento”
el estándar del juicio histórico deviene y “punto de inflexión”. Hegel la llama:
en la noción de progreso. acontecimiento de la historia del mundo
El progreso –el movimiento que y aurora (56). La pregunta para Arendt
va de la discordia hacia la armonía na- sería entonces ¿quién es el “sujeto” de
tural– se muestra como estándar de la la historia entendida como narrativa o
historia. Según este criterio, el juicio story? No los hombres de la revolución
busca encontrar la verdad del evento in- que no tienen mirada panorámica. En
dividual, del acto particular, sin razonar Hegel es el “Espíritu absoluto” el que
en términos deterministas o maquinales se revela en el proceso histórico. Esto es
de tipo causa-efecto. La “narración” lo que, al final del proceso, comprende
(story), una vez terminada, contiene el filósofo hegeliano (57). La historia
toda la significación que el espectador eventualmente se cierra y llega a su fin
estaría en capacidad de narrar o describir tanto para Hegel como para Marx. El fin
comprensivamente en su conjunto. De escatológico de la historia para ambos es
esta manera se comprende el lugar de las de importancia decisiva para revelar su
partes; así, por ejemplo, desde el punto significado36.
de vista de la historiografía clásica, Ho- Según Arendt, en Kant el sujeto de
mero, Heródoto o Tucídides consiguen la historia es la especie humana misma.
ser justos con el enemigo vencido. La En la historicidad kantiana al parecer
“historia” (story) singular a su vez puede el progreso es perpetuo y no termina.
dar pautas de acción para generaciones Arendt referencia a Alexandre Kojève en
futuras. Arendt comenta que el último el sentido de que al final de la historia
libro que al parecer se escribió con este hegeliano-marxista el hombre no puede
espíritu fue las Historias florentinas de hacer otra cosa que repensar perpetua-
Maquiavelo35. mente el proceso histórico que ha cul-
En el progreso kantiano-arendtiano, minado37. En Marx, el fin de la historia,
la apertura, la esperanza hacia nuevos
horizontes, se perfila como estándar en
contraste con la filosofía de la historia 36 Karl Löwith, Historia del mundo y salvación:
Los presupuestos teológicos de la filosofía de la
historia (Buenos Aires: Katz, 2007).
35 Contrastar con Martin Fleisher, Ed., Machia- 37 Alexandre Kojève, Introduction to the Reading
velli and the Nature of Political Thought (New of Hegel (Ithaca: Cornell UP, 1980), pp. 159-162.
York: Atheneum, 1972), Rosen, Hermeneutics as Politics, pp. 137-140;

36
la sociedad sin clases y el ámbito de la Al parecer no hay destinación última

libertad se traducen en que cada hombre en sentido escatológico para la especie,
estará dedicado a algún tipo de afición. aunque las dos metas inmanentes son la
Kant, por otro lado, plantea un progreso libertad (en el sentido de no ser gober-
asintótico hacia lo indeterminado. Este nado por otro) y la paz entre naciones,
progreso no es de los individuos, sino como prerrequisito de la unidad de la
de la especie en general. Así, al parecer humanidad (59). En este modelo el pro-
la esencia del hombre como especie no greso perpetuo hacia la libertad y la paz
podría determinarse por completo. La le da sentido razonable a la historia. Los
pregunta sobre por qué existe el hombre hombres, aunque criaturas naturales,
no puede responderse humanamente trascienden la “naturaleza” en virtud
porque el proceso natural de progreso de su razón. Por medio de la razón, dan
de la especie es infinito, perpetuo (58). propósito al proceso natural humano y lo
Desde la filosofía política de Kant en convierten en historia. En este contexto
clave arendtiana el ciudadano del mundo, notamos que el espectador se muestra
o espectador del mundo, es quien estima, como figura hermenéutica singular. La
juzga y decide desde su visión de conjunto tradición platónica lo plantea como reti-
si un evento singular hace parte o no de rado del ruido de las mayorías partisanas,
la narrativa del progreso histórico. en actitud solitaria y contemplativa, fue-
ra de la caverna 38. Aunque el espectador
DÉCIMA CONFERENCIA: kantiano-arendtiano está en el mundo,
EL ESPECTADOR Y LA HISTORIA no pertenece a él.
Arendt menciona que en el Político
Lo que quizá se puede entrever en la de Platón se plantea una distinción entre
interpretación de Arendt es una aparente “uno” que es sabio y gobierna sin actuar, y
incompatibilidad entre la perspectiva los “muchos” que, en la acción, al parecer
concreta del actor y la comprensión pa- llevan a cabo sus diversas orientaciones o
norámica del espectador. Mientras que el disposiciones políticas. Sin embargo, los
espectador observa desapegadamente la planes del gobernante sabio platónico no
historia, para Kant el “héroe” de la histo- se pueden revelar públicamente de prin-
ria es la humanidad en su conjunto: una cipio a fin: al haber demasiada distancia
serie de generaciones que proceden hasta entre la visión filosófica y las prácticas
la “infinidad” en progreso perpetuo.
38 Cf. el breve y agudo estudio de Josef Piper,

Darby, The Feast, p. 185-87; 190. George Grant, Sobre los mitos platónicos (Barcelona: Herder,
Technology and Empire (Toronto: Anansi, 1969), 1998). Ver también Nietzsche, Más allá del bien
pp. 79-109. y del mal, § 284.

37
tradicionales de una comunidad, si dicha razón práctica en este marco no es la teo-

visión se hace pública sin atenuantes, no ría sino la “especulación”, es decir, el uso
solo es un riesgo para el filósofo sino que, especulativo de la razón. Según Arendt,
además, es muy posible que su mensaje no la teoría política en Kant en materia de
sea comprendido y recibido eficazmente. historia universal consiste en “el progreso
Sucede entonces que la visión filosófica perpetuo y la unión federal de naciones
platónica no cumpliría con el prerrequi- para dar a la idea de humanidad realidad
sito de publicidad kantiano (60). ¿Cuál es política” (61). Como hemos visto a lo lar-
la solución? Arendt reitera que en Kant el go de las Conferencias, Arendt aventura
“público” de espectadores se constituye en la hipótesis según la cual, como Kant no
la República de las letras donde se puede, escribió una filosofía política41, la mejor
en principio, debatir abiertamente, aun manera de abordar particularmente el
sobre visiones utópicas o profundamente asunto es desde su Crítica del juicio. Es
críticas del statu quo vigente. a partir de este punto en concreto don-
Arendt resalta nuevamente que Kant de, al parecer, comienza propiamente
difiere de la tradición platónica con hablando la lectura como tal de Arendt
respecto a la distinción entre teoría y sobre el texto de Kant.
práctica 39. La noción de praxis en Kant
está determinada por la razón moral. La Sobre la facultad del juicio:
Crítica de la razón práctica, que no trata Genialidad y gusto
ni del juicio ref lexivo ni de la acción
política, aborda el imperativo moral El punto de partida lo toma Arendt
kantiano. Arendt constata que no hay desde la discusión de la producción de
lugar para el juicio reflexivo estético en la obras de arte en relación con el gusto. Se
razón práctica de Kant. Recalca que este plantea aquí una distinción clave entre la
tipo de juicio se origina desde el “placer genialidad y el gusto (62). La genialidad
contemplativo” y la “complacencia inac- se requiere para la producción de obras
tiva” (61). En materias “prácticas” o de la de arte. En la Crítica del juicio Kant
metafísica de la moral kantiana no es el enumera al menos cuatro características
juicio sino la voluntad la que es decisiva. del talento del genio:
“Práctico”, por tanto, significa “moral”
en Kant, y concierne al individuo co-
mo individuo en su posible destinación
sublime40. El “verdadero opuesto” de la Kant, Crítica del juicio. Ed. y Trad. Manuel
García Morente (Madrid: Espasa, 1995), § 23-29.
41 Cf. Beiner, “Re-reading Hannah Arendt’s
39 Shell, The Rights of Reason, pp. 109-110. Kant Lectures”, en Philosophy in a Time of Lost
40 Sobre la noción de “lo sublime”, ver Emanuel Spirit, pp. 184-194.

38
1) Originalidad o la capacidad de pro- facultad distinta de la imaginación, la

ducir su obra sin estar condicionado razón y el intelecto– permite al genio
por una regla de proceder predeter- dar expresión a sus ideas y conceptos
minada. comunicando lo que de otra manera sería
2) La obra de arte genial tiene carácter un estado mental meramente subjetivo43.
ejemplar: es modelo que no proviene El espíritu inspira así la genialidad, a lo
de la imitación, y a su vez sirve como que Arendt añade que “ninguna ciencia
medida particular del juicio. la puede enseñar ni se puede aprender
3) El genio da el estándar y medida a por medio de la industriosidad”, ya que
su actividad como naturaleza: el arte la genialidad consiste en “expresar lo
creador encuentra en sí mismo los inefable en el estado del sentir profundo
talentos y las pautas para establecer (Gemüt) que ciertas representaciones
sus propias reglas. producen en nosotros, pero para las que
4) El talento natural, mediante el ge- carecemos de palabras, y que sin el genio
nio, presenta la regla no para la cien- carecerían de expresión” (63).
cia sino para el arte y “solo en cuanto El genio hace que este sentir profun-
este ha de ser bello”42 . do sea “generalmente comunicable”44.
La facultad que guía al genio es el gusto
El genio se constituye como el ejercicio de o el juicio crítico, el cual sin embargo
la facultad de la imaginación productiva. no es su privilegio exclusivo. Según este
La producción viene de la genialidad: de modelo, la comunicabilidad es además
la originalidad e imaginación productiva condición sine qua non para la existencia
ejemplar. El gusto, por otro lado, decide de los objetos bellos: es el juicio del es-
con respecto a la cualidad estética de la pectador el que crea el espacio crítico de
obra de arte. El gusto proviene del ejer-
cicio crítico del juicio. Kant subordina la
genialidad al gusto: el gusto disciplina, le 43 El “espíritu” estético sería la capacidad de ex-
da claridad y orden a la genialidad. Para presión que vivifica la comprensión del sentimien-
el arte auténtico se requieren al menos to profundo proporcionándole sentido más allá de
cuatro atributos: imaginación, intelecto, la mera subjetividad. Anota Kant: “Una poesía
espíritu y gusto. A su vez el gusto crítico, puede estar muy bien y ser muy elegante, pero sin
es decir, el juicio estético, conjuga los tres espíritu. Una historia es exacta y está ordenada,
primeros. El gusto pone a la libertad de pero sin espíritu. Algunas conversaciones son en-
la imaginación en conformidad con la tretenidas, pero sin espíritu […]. ¿Qué es, pues, lo
ley del entendimiento. El espíritu –como que aquí se entiende por espíritu (Geist)? Espíritu,
en su significación estética es aquello por medio
de lo cual […] se vivifica el alma”. Ibid. § 49.
42 Kant, Crítica del juicio § 46. 44 Ibid. § 49.

39
comprensión donde tales objetos pueden que es a su vez componente clave de la

aparecer. Para el Kant de la Crítica del facultad del juicio, o de la capacidad de
juicio leído en clave arendtiana, el ám- distinguir entre correcto e incorrecto,
bito público lo constituyen los críticos y esté basada en el sentido del gusto. Arendt
espectadores, no los actores y producto- continúa haciendo ahora una distinción
res. La originalidad potencial del artista entre las características de los sentidos
o actor depende de hacerse entender según su capacidad de representación.
por los críticos y espectadores. De este Los sentidos de la vista, el oído y el tacto
modo, el genio puede ser singular, pero tienen referente en objetos externos, los
los espectadores siempre son plurales. cuales por ello son fácilmente comuni-
Para Arendt, en relativa diferencia con cables. Al parecer estos sentidos pueden
respecto al teórico “pitagórico”, el es- hacer presente, es decir, re-presentar algo
pectador siempre es plural: observa de que está ausente. Sin embargo, Arendt
manera concertada con otros espectado- intima que, a diferencia de la vista, la
res. La facultad que el auténtico genio y escucha y el tacto, el gusto y el olfato no
el espectador tienen en común no es la entran directamente en la facultad de
genialidad sino la facultad del juicio o representación. De acuerdo con Arendt,
el gusto crítico. el olfato y el gusto ofrecen sensaciones
Arendt siente que de algún modo la privadas que aparentemente no son co-
demencia o insania (insanity) es perder municables desde el punto de vista del
el sentido común que nos permite juz- “sentido común”: por tanto, quizá no se
gar como espectadores. La contraparte podrían expresar objetivamente en pala-
del sentido común es el sensus privatus, bras. El olfato y el gusto son los sentidos
“Eigensinn lógico”, o la facultad lógica directamente “discriminatorios”. Puede
de razonar silogísticamente, extrayendo suspenderse el juicio en lo que se ve, se
conclusiones de premisas, la cual puede oye o se toca. Pero para Arendt en asun-
aparentemente funcionar sin establecer tos del gusto y el olfato el “me agrada o
relaciones de comunicabilidad compar- no me agrada” es inmediato e irresistible
tida. En su criterio, el uso del sentido (64). Aquí el placer o el displacer son
lógico privado, en ausencia del senti- idiosincráticos, sentidos en primera ins-
do de proporción común, puede llevar tancia directamente sin la mediación de
a la insania, si se pierde la capacidad de la representación crítica. ¿Por qué elevar
constatación y validación gracias a la entonces el gusto como vehículo de la
presencia y el contraste con el sentido facultad mental del juicio?
común de otros (64). El juicio, que aquí hace referencia
En este punto de su lectura, Arendt a lo correcto e incorrecto, ¿por qué ba-
al parecer encuentra sorprendente que la sarlo en un sentido privado? ¿Se pueden
actividad del “sentido común” kantiano, tener debates razonables y concluyentes

40
en materia de gusto? La solución a este unos con otros en contraste con lo que
impasse, en la interpretación de Arendt, sería el arquetipo del espectador solitario
está en la facultad de la imaginación. La pitagórico.
imaginación, o la “habilidad de hacer Arendt registra que Kant en la Crí-
presente lo que está ausente”, permite tica del juicio trata un tema análogo
que la percepción o el sentir personal con respecto al artista que hace la obra
se convierta en objeto de reflexión (65). de arte. Es decir, el tema del genio, en
Por medio de la imaginación se trans- relación con la audiencia. ¿Qué tarea es
forman los objetos de sensación privada más “noble” la producción de la obra
en “objetos de representación”. Tales re- de arte o el juicio del crítico sobre la
presentaciones evocan placer o displacer misma?46 Arendt encuentra en Cicerón
no desde la percepción directa del objeto y, por tanto, parece estar haciendo alu-
sino desde la operación de la reflexión sión a la experiencia republicana romana
crítica retrospectiva. tardía, que cada quien parece capaz de
discriminar sobre lo correcto e incorrecto
UNDÉCIMA CONFERENCIA: con respecto al arte, pero muy pocos son
EL NOUS Y LA IMAGINACIÓN capaces de realizar una auténtica obra
artística.
Al parecer en Kant la distinción platóni- El juicio se realiza por medio de un
co-aristotélica entre teoría y práctica45 da “sentido silencioso” que desde Baltasar
un giro crítico, y se postula como la dis- Gracián también se conoce como “el
tinción entre actor y espectador. Arendt gusto” (66). Arendt subraya de nuevo
sostiene que, para sorpresa del lector, los que Kant hasta 1787 llamó la Crítica del
espectadores toman precedencia sobre juicio la crítica del gusto. El fenómeno
el hombre de acción. Lo que hace de la
revolución francesa un fenómeno para no
ser olvidado, un “evento” en la historia 46 Stanley Rosen, Plato’s Republic: A Study (New
del mundo, fue la “opinión” o la “entu- Haven: Yale UP, 2005), Cap. 13, ofrece una lec-
siasta aprobación” de los espectadores tura detenida sobre el libro 10 de la República,
que no estuvieron envueltos directamen- donde se aborda la distinción clave entre el co-
te en el acontecimiento. Tales especta- nocimiento de fabricación y el conocimiento del
dores estaban en contacto deliberativo uso. En la filosofía política platónico-aristotélica
el estándar del trabajo artístico se encuentra en
su uso. Aristóteles, por ejemplo, presenta la dis-
45 Sobre la antropología filosófica clásica ver el tinción entre quienes tocan las flautas y quienes
estudio de Eric Voegelin, Order and History. Vol. las hacen: en el uso virtuoso del instrumento se
III: Plato and Aristotle (Baton Rouge: Louisiana halla el propósito y criterio de medida para su
State UP, 1972). fabricación (La Política, Libro III, 1282b ff ).

41
mental del juicio reflexivo se deriva del en “objeto” algo que no está presente,
sentido del gusto y no de los sentidos pero que de alguna manera siento que
más objetivos: especialmente la vista, he internalizado (66). La imaginación
que es el más objetivo de todos. Arendt –la facultad de tener presente lo que se
considera clave reiterar que el gusto y el encuentra ausente– me afecta como si
olfato son los sentidos más subjetivos o me fuera dada por un sentido no obje-
privados: a través de ellos no se percibe tivo (67).
el objeto sino una sensación interior. Al Arendt en este punto de su interpre-
parecer este sentir interior, según Arendt, tación cita a Parménides (Fragmento 4),
no es directamente del objeto sino de la quien habla del nous, o la intuición con-
sensación misma (66), de tal modo que templativa, como la facultad que puede
la remembranza olfativa o del gusto se hacer presente lo que está ausente (67).
hace posible con una renovada sensación. ¿Cuál es la relación entre la imaginación
La implicación sería que no puede haber y el nous? Según Arendt, Kant afirma
re-presentación directa de esos sentidos, que algo es bello cuando me place en
a diferencia de la vista, el tacto o la escu- el mero acto de juzgarlo 47. Lo que nos
cha. El olfato y el gusto son los sentidos place meramente desde la percepción es
más íntimos. gratificante pero no bello. Es la imagina-
El punto clave que Arendt busca re- ción, según Arendt, la que permite que
saltar es que solo el gusto y el olfato discri- podamos reflexionar críticamente sobre
minan por naturaleza lo particular como lo bello más allá de la mera percepción.
particular. El “me agrada o me desagra- Solo desde la representación reflexiva, y
da” está sobrecogedoramente presente en no desde la afectación directa, es como
el gusto y el olfato. Ocurren al parecer el espectador que no se involucra en la
en primera instancia sin mediación del acción puede juzgar lo correcto o lo inco-
pensamiento o de la reflexión. El gusto y rrecto, lo bello o lo feo, o algún punto in-
el olfato son subjetivos e interiores: si me termedio entre estos opuestos. Así, según
agrada o no está relacionado con aquello Arendt, se da el encuentro entre el gusto
que va de acuerdo conmigo o no. Estos y el juicio. Aunque el gusto puede seguir
sentidos nos afectan directamente y, así, estando afectado, por medio de la re-
al parecer no podría haber disputa sobre presentación se hace posible la reflexión
la materia: en una primera instancia no para poder aprobar o desaprobar algo
se pueden comunicar, ni son objeto de de manera crítica, es decir, sin lealtades
argumentos. La manera entonces de ex- ciegas ni prejuicios irreflexivos. Como
presar y transmitir el gusto es por medio las sensaciones del gusto y el olfato no
del sentido común y de la imaginación.
La imaginación es la facultad que pone
presente lo que está ausente. Convierte 47 Kant, Crítica del juicio §45.

42
pueden representarse directamente, se a pesar de la naturaleza personal del

hace uso entonces de la imaginación, que sentido del gusto en sí (68). A pesar de
presenta dichas sensaciones al juicio, por esta idiosincrasia, el Kant arendtiano
medio de la reflexión crítica. deriva el juicio a partir de este sentido,
Removiendo el objeto se establecen por medio de la imaginación reflexiva.
las condiciones de imparcialidad para el En la intimación del fenómeno del juicio,
juicio. Con respecto al “sentido común” el opuesto a lo bello no es lo feo necesa-
(entendido como “sentido de comuni- riamente, sino lo que nos disgusta o nos
dad”), Arendt propone que para Kant en despierta repulsión o asco.
materia de gusto lo bello nos interesa solo
cuando estamos en sociedad. En soledad, DUODÉCIMA CONFERENCIA:
según Kant, no hay incentivo para el EL ESPECTADOR IMPARCIAL
adorno 48. La satisfacción estética parece
venir de sentir que la intersubjetividad es En esta conferencia Arendt propone
auténticamente posible. Por otra parte, un comentario de las secciones 39 y 40
al parecer nos da vergüenza que nuestro de la Crítica del juicio. El propósito es
gusto no lo compartan los otros. Con el explorar en mayor detalle las nociones
gusto se supera el egoísmo, es decir, con de comunicabilidad y sensus communis.
el gusto somos considerados “en el sentido Como preámbulo, Arendt esboza una
original de la palabra” (67). Es así como discusión sobre las dos operaciones men-
se pasa de las sensaciones subjetivas tales que componen la facultad del juicio:
del ego a consideraciones abiertas de la imaginación y la reflexión.
la intersubjetividad49. Arendt concluye La imaginación hace posible juzgar
paradójicamente: “el elemento no sub- los objetos que ya no están presentes,
jetivo de nuestros sentidos no objetivos que se encuentran removidos de la per-
es la intersubjetividad”. En materia de cepción sensorial inmediata. Por medio
gusto juzgamos como miembros de la de la imaginación, aunque el objeto
comunidad de los hombres, no como no nos afecte directamente ya que está
miembros de un grupo suprasensible. removido de los sentidos exteriores, este
Por ejemplo, se piensa en soledad, pero se convierte en referente del sentido inte-
se disfruta una comida en compañía. Los rior (68). El ejercicio de la imaginación
juicios del gusto nos refieren a los otros, preparara la operación de la ref lexión
que es donde se produce el juicio como
tal. La capacidad de sentirse a sí mismo,
48 Ibid., §41. de experimentar un sentido interior, la
49 Cf. Ronald Beiner Political Philosophy: What incorpora la facultad del gusto. Esta do-
it is and Why it Matters (Cambridge: Cambridge ble operación –del sentido interior y de
UP, 2014), pp. 5-6. la imaginación– establece la condición

43
más importante para el juicio: la “con- “sentido común” entendido como sensus
dición de imparcialidad”, de “placer communis o sentido de comunidad. En la
desinteresado” (disinterested delight). lectura arendtiana la consideración clave
Aquí Arendt hace referencia a la figura para favorecer una elección a partir del
trágica del poeta invidente: un espectador gusto reflexivo es que se pueda socializar
imparcial, que sin embargo se encuen- y hacer pública en términos intersubje-
tra afectado por los acontecimientos. tivamente universales.
Esta figura simboliza la facultad de ver
con el “ojo del espíritu”, condensando Crítica del juicio § 39: De la
sintéticamente, unificando la variedad comunicabilidad de una sensación
de impresiones exteriores. “Ver” el todo
que da significado a las partes sin des- Arendt inicia su comentario sobre la sec-
conocer las mismas. La ventaja clave del ción 39 de la Crítica del juicio enfocándo-
espectador es que considera el juego en su se en las llamadas sensaciones singulares.
totalidad, mientras que el actor reconoce Se trata, inicialmente, de sensaciones
solo su parte correspondiente50. El actor privadas que como tal no involucran
es parcial por definición. al juicio. Las recibimos pasivamente:
Arendt propone ahora algunas preci- pueden producir reacciones, pero no
siones sobre la capacidad de reflexionar. involucran una espontaneidad cons-
¿Cuáles son los estándares de la opera- ciente como cuando nos imaginamos
ción de la ref lexión? La imaginación algo voluntariamente o ref lexionamos
presenta al sentido interior lo que de sobre ello.
otra manera habría estado ausente. El En el polo opuesto de las sensaciones
sentido interior discrimina por defi- privadas están los juicios morales: estos,
nición: dice “me place o no me place” según Kant, son necesarios, dictados por
(69). Se le llama gusto porque aprueba la vocación moral de la razón práctica.
o desaprueba, es decir, está en capacidad Son válidos así sean o no comunicados.
de elegir reflexivamente. Esta elección En materia del juicio estético, o del pla-
en sí también puede complacernos o no. cer que nos produce lo bello, este placer
¿Cuál es el criterio para aprobar la elec- va junto a la aprehensión ordinaria de un
ción? El criterio de la elección reflexiva objeto en la imaginación. Esta aprehen-
según Arendt es la comunicabilidad, y sión (no “percepción”) se funda sobre el
el estándar de la comunicabilidad es el “intelecto (Verstand) común y sano”, que
Kant supone que cada uno tiene. Arendt
aquí se pregunta cómo se distingue este
50 Beiner, “Ensayo interpretativo”, Hannah sentido común de los otros sentidos, que
Arendt: Lectures on Kant’s Political Philosophy, también tenemos en común, con los cua-
pp. 144-156. les, sin embargo, no se puede garantizar

44
un acuerdo respecto a las sensaciones manifiesta en el sensus communis. Es el

(70). Kant en la sección 39 de la Crítica sentido humano o humanitario porque
del juicio desea desarrollar el análisis del depende de la comunicación, el discurso
“juicio con gusto”, donde en su criterio es o el logos. Arendt, como Aristóteles en
clave que la consciencia no se equivoque este caso, distingue comunicación de
y no confunda la materia con la forma “expresión”: para expresar dolor, por
(que no confunda la seducción con la ejemplo, gestos o sonidos son suficientes,
belleza, por ejemplo). El punto del gusto, pero los hombres estamos en capacidad
según Kant, es encontrar un sentimiento de dar voz a las sensaciones privadas en
universalmente comunicable sin media- términos de un lenguaje o sentido racio-
ción de conceptos51. nal común. Como anotábamos, según el
Kant arendtiano, el síntoma general de
Crítica del juicio § 40: Del gusto como la demencia es perder el sentido común
una especie de sensus communis y sustituirlo por el mero sentido privado
(sensus privatus).
Al utilizar la expresión sensus communis Así, la persona demente no pierde
Kant indica una capacidad extramental la capacidad de expresión, solo tiene
que nos permite integrarnos y deliberar, ausencia del sensus communis. Dentro
no sub specie aeternitatis, sino desde un del sensus communis kantiano-arendtiano
punto de vista compartido o comuni- está incluida la capacidad del juicio:
tario. Esta capacidad de deliberación, a comparando el racionamiento, de alguna
primera vista, se asemeja a la ciudadanía manera, con la razón colectiva de la hu-
aristotélica que nos distingue de las manidad (71). Es por medio de este tipo
bestias y de los dioses52 . Según Arendt, de racionalidad compartida que damos
es la humanidad del hombre la que se el paso de lo actual o dado a postular lo
posible. Es una abstracción del encanto
y la emoción singulares para llegar a un
51 Kant, Crítica del juicio §39. juicio que pueda servir de estándar uni-
52 Aristóteles, La Política (1253a). Beiner, sin versal. Arendt enumera algunas máximas
embargo, sostiene que el igualitarismo kantiano del sensus communis que, nos dice, en sí
de Arendt contrasta fundamentalmente con las no son materia de cognición o máximas
asimetrías de la ciudadanía aristotélica, y toma silogísticas:
distancia a su vez del enfoque aristotélico sobre la
“naturaleza humana”. A pesar de su recuperación
de la imagen de la polis griega como espacio clave
de la acción pública en la Condición humana, la
teoría política de Arendt estaría mucho más cerca Beiner y Thomas Pangle, Philosophy in a Time of
de Kant que de Aristóteles. Ver el diálogo entre Lost Spirit, pp. 118-133.

45
a) Pensar por sí mismo (máxima de la de cada uno de los “otros” que forman
ilustración). parte de una comunidad. Es el sentido o
b) Ponerse en el lugar de cada uno de visión de conjunto que tiene un maestro
los otros en el ejercicio comunicativo en el arte de la novela, por ejemplo, y esa
(mentalidad amplia). capacidad panorámica y singular, según
c) Ser consistente (estar de acuerdo Arendt, le da validez especial al juicio.
consigo mismo)53. El sentimiento de “me place o no me
place” como tal pareciera ser privado y
El gusto se define entonces como sentido así no podría comunicarse más allá de
de comunidad, donde “sentido” quiere su expresión idiosincrática. Sin embargo,
decir “el efecto de la ref lexión en la al estar enraizado o constituido en el
mente” sobre nosotros mismos. La re- “sentido de comunidad” el sentimiento
flexión afecta la mente como si fuera una ( feeling) se hace comunicable una vez ha
sensación del gusto: permite discriminar sido transformado por la reflexión. Esta
y elegir (72). Se podría definir el gusto ref lexión a partir del sensus communis
crítico como la facultad del juicio de lo toma en cuenta a los demás y sus senti-
que se puede comunicar ampliamente, mientos al considerar reflexivamente y
sin mediación de un concepto, según la comunicar el juicio. No obstante, Arendt
representación de una sensación hecha nos recuerda que los juicios del gusto
posible por la imaginación ref lexiva. no tienen la validez de una proposición
Según Arendt, en Kant tenemos la vo- cognitiva o científica determinada, los
cación de evolucionar del gusto privado cuales propiamente hablando no son
al juicio reflexivo y público con vocación juicios sino afirmaciones lógicas nece-
intersubjetiva y humanitaria. sarias. Los juicios en sí se comunican
por medio de la persuasión, la cual apela
DÉCIMA TERCERA CONFERENCIA: al “sentido de comunidad” (72). Así, no
“SENTIDO COMÚN” COMO puede haber compulsión lógica para estar
SENTIDO DE HOSPITALIDAD de acuerdo con un ejercicio de resonancia
COSMOPOLITA y proporcionalidad persuasiva como es el
juicio. De acuerdo con Arendt, cuando
El sensus communis kantiano-arendtiano uno juzga, lo hace considerándose den-
es un sentido de comunidad que se con- tro de una comunidad intersubjetiva de
trasta con el sensus privatus. En otras pa- sentido. La perspectiva cosmopolita o
labras, el sensus communis hace referencia universal, en la que se tiene en cuenta el
a la posibilidad de ponerse en el lugar punto de vista de los otros, se conjuga
53 Kant, Crítica del juicio §40.

46
dentro de un contexto comunicativo en la sección 41 de la Crítica al juicio se

compartido54. habla de un “interés” en el desinterés:
el paradójico interés o la utilidad del
Crítica del juicio § 41: Sobre desinterés hacia lo bello. En la natura-
el interés empírico en lo bello leza hay objetos que despiertan nuestro
interés porque favorecen el proceso de
Arendt encuentra que es la capacidad de la vida. El interés o la utilidad es lo que
incorporar una “mentalidad amplia” (en- favorece naturalmente el proceso vital. De
larged mentality) la que permite ejercer el lo bello nos “place su existencia” (73).
juicio de manera correcta. El sentido de Arendt estima que la sociabilidad, que
comunidad hace posible esta mentalidad a su juicio significa que el hombre está
amplia: la capacidad de abstraerse de las de alguna manera destinado para la vida
condiciones y circunstancias privadas, en sociedad, se ve favorecida por nuestra
las cuales inhiben y limitan el ejercicio capacidad de juzgar, es decir, de comuni-
del juicio (73). Según Arendt, la imagi- car de manera potencialmente universal
nación y la reflexión nos liberan de los nuestros sentimientos a otros hombres.
condicionantes privados donde suelen Así la sociabilidad se muestra como
repetirse inercialmente los prejuicios. En el origen de nuestra humanidad: nuestra
su criterio, entre menos idiosincrático condición humana en la medida en la
sea el gusto, mejor y con mayor claridad que hacemos parte del mundo de los
puede comunicarse. La comunicabili- hombres. A ese respecto la facultad del
dad, el dar cuenta de manera reflexiva, juicio presupone la presencia de otros.
coherente y persuasiva, es el punto clave Nuestros sentimientos y emociones tie-
de referencia del juicio intersubjetivo nen importe (worth) en la proporción en
arendtiano. que pueden ser dialogados en presencia
Arendt interpreta que en Kant el de otros. Según Arendt, solo podemos
placer hacia lo bello es en principio des- comunicarnos públicamente si somos
interesado55. Aunque en el juico sobre capaces de pensar desde el punto de vista
lo bello habría como base un desinterés, del otro: de otro modo, no podríamos
en apariencia no sucede lo mismo con encontrarnos significativamente y ser
respecto al juicio sobre lo “correcto e in- comprendidos (74). Al comunicar los
correcto” (right or wrong). Sin embargo, gustos se comunican las elecciones, en
particular la elección de compañía56. Este
54 Ibid., §40.
55 Kant señala que el placer no es el factor
determinante en el juicio del gusto acerca de lo 56 El texto clásico donde se describen en forma
bello. Ibid., §41. narrativa este tipo de dinámicas y vínculos es

47
punto es clave para sustentar la base de humanismo entendido como “existencia

relación entre comunicación y comu- cosmopolita” (75).
nidad: nos comunicamos de manera Para concluir esta sección: el juicio
significativa con aquellos con quienes arendtiano incorpora la capacidad de
formamos comunidad. Arendt curio- pensar comunicativamente lo particular.
samente cita a Cicerón para elaborar El problema para Arendt es que pensar
este punto: “prefiero estar equivocado consiste en generalizar. Por tanto, en el
con Platón que en lo correcto con los juicio se combinan “misteriosamente” lo
pitagóricos” (74). Para Arendt pareciera particular y lo general (76). No se puede
haber, al menos en este punto del texto, juzgar un particular por medio de otro
una posible distinción entre la filosofía particular: es necesario un tercer referen-
platónica y la forma de vida pitagórica. te para comparar un particular con otro.
No nos dice más, sin embargo, sobre a Un referente que esté relacionado con los
su juicio en qué podrían consistir las dos particulares, y que al mismo tiempo
posibles diferencias. sea distinto. Hay dos posibles ideas en
Arendt considera clave que el sen- Kant para precisar el juicio: el propósito
tido de comunidad esté compuesto por y la ejemplaridad. Arendt anota que los
la noción de humanidad compartida. únicos dos referentes que parecen carecer
En virtud de la idea de humanidad las de propósito necesario son los objetos
personas nos hacemos humanas, no so- estéticos, por un lado, y los hombres,
lo en nuestros juicios, sino también en por el otro. Ambos son fines en sí mis-
nuestras acciones. En este punto el actor mos. Aunque el propósito es una noción
y el espectador comparten un mismo que puede ayudar a dar regulación al
estándar. La noción de humanidad se juicio reflexivo, Arendt encuentra en la
transforma en la vocación de la hospita- ejemplaridad un referente crucial por ser
lidad57. La cordialidad hacia el otro, la concretamente persuasivo58.
hospitalidad hacia el extraño, es la cone-
xión entre el sentido de comunidad y el
58 Jorge Dotti, “La libertad del juicio: Episte-

Johann Wolfgang Goethe, Las afinidades electivas mología y política a la luz de la tercera Crítica”,
(Buenos Aires: Clásicos Galerna, 2012). en David Sobrevilla, Comp., Filosofía, política
57 Shell, The Rights of Reason, p. 175. Cf. y estética en la Crítica del juicio de Kant (Lima:
Montserrat Herrero, “Políticas de la hospitalidad Instituto Goethe de Lima, 1991), p. 133, define
en el pensamiento de Jacques Derrida”. Revista la figura ejemplar como tertium comparationis
de Estudios Políticos, 180, (abril-junio, 2018), pp. entre particulares. Contrastar con el trabajo
77-103. imprescindible en teoría literaria de Rene Girard,

48
Arendt propone aquí tres posibili- mujer es un fin en sí mismo. El progreso

dades para encontrar un tertium compa- no tiene término.
rationis para el juicio: ¿Cómo estimar entonces el significa-
do del progreso histórico? En la medida
a) La idea universal platónica, que reú- en la que la modernidad se interpreta
ne formalmente todas las instancias como sinónimo del progreso Arendt
particulares posibles (el ejemplo pa- propone una crítica a la modernidad.
radigmático que utiliza es la “idea de Como hemos señalado, ante las filosofías
mesa” del libro 10 de la República). de la historia de Hegel y de Marx, Arendt
b) La abstracción de muchos objetos de retoma a su manera la figura de Kant
sus propiedades secundarias, de tal para pensar desde la teoría política el mo-
manera que se llega a la “mesa” en vimiento de la historia. El progreso así
abstracto, con un mínimo “esencial” pensado significa que la historia (story)
de propiedades. no tiene un fin determinado y, por tanto,
c) La mesa ejemplar: una mesa autén- el final de la historia es la infinidad (77).
ticamente singular que resalta como Arendt, al parecer en concordancia con
estándar o modelo de las mesas59. el historicismo heideggeriano, parece
indicar que no hay punto de Arquímedes
Arendt comenta que la palabra ejemplo desde el cual orientarse en la historia60.
viene de la expresión eximere: “eximir Así, Heidegger y Arendt son pensadores
o distinguir un particular” (77). Un del tiempo 61.
particular que como tal revela lo general
que de otra manera no podría definirse. IMAGINACIÓN
Ahora bien: lo bello en Kant, así como la
dignidad humana, es un fin en sí mismo. Esta última sección del texto está com-
No se puede instrumentalizar. Hay una puesta por una serie de notas del semi-
contradicción entre la idea de progreso nario impartido por Arendt en The New
que instrumentaliza a los hombres (vuel- School for Social Research, durante el
ve a los hombres medios en función del
propósito del progreso), y la dignidad
humana que significa que cada hombre y 60 Cf. Arendt, La condición humana, p. 11.
Contrastar con J.D. Parra, Heidegger’s Nietzsche:
European Modernity and the Philosophy of the
Deceit, Desire and the Novel: Self and Other in Future, p. 61 n. 11. Beiner Political Philosophy,
Literary Structure (Baltimore: Johns Hopkins p. 5.
UP, 1976). 61 Mark Lilla, The Reckless Mind: Intellectuals in
59 Contrastar con Martin Heidegger, Poetry, Politics (New York: New York Review of Books,
Language, Thought (New York: Harper, 2001). 2001), pp. 3-46.

49
semestre de otoño de 1970. Como co- “lo que ya no está” con lo que “aún no
menta el profesor Beiner en su introduc- es” en relación con el ahora (80). La
ción a esta conferencia que le da cierre imaginación, por otra parte, no es una
al texto base, para Arendt la noción de facultad temporal: puede poner presen-
validez ejemplar está relacionada con la te a voluntad en la mente un referente
imaginación trascendental que Kant ana- ausente para los sentidos. Arendt hace
liza en la primera edición de la Crítica de la asociación desde la facultad de la ima-
la razón pura. Esta noción, señala Beiner, ginación kantiana hacia el nous según
es crucial para el entendimiento de la Parménides 63 .
ciencia política, no a partir de concep- Parménides, en el Fragmento 4,
tos universales (como lo sería el proceso define el nous como “la facultad de ver
histórico en clave hegeliana o marxista), consistentemente las cosas presentes
sino de particulares (es decir stories, o aunque estén ausentes” (80). Para Arendt
ejemplos históricos). Lo que los esque- esta es una afirmación ontológica, refe-
mas son a la cognición, los ejemplos son rente al Ser: el Ser nunca está presente,
al juicio 62 . Como ha señalado Arendt, no se hace presente a los sentidos, aunque
la imaginación es la facultad de poner se muestre al “ojo de la mente”. Por otro
presente lo que está ausente por medio de lado, en Anaxágoras se afirma paradó-
la re-presentación (79). La imaginación jicamente: “ver las apariencias es mirar
representa intuitivamente un objeto que lo no-visible”. Arendt interpreta que al
no está presente para los sentidos. Así, “intuir” por medio de las “apariencias”
permite tener una imagen en la men- uno deviene consciente de algo que no
te del objeto ausente. La imaginación aparece. Ese “algo” es el Ser como tal.
productiva del genio humano nunca es Arendt añade que en la ontología, la
productiva completamente: opera pro- pregunta sobre el Ser se deriva de la
duciendo síntesis con elementos dados. consciencia misteriosamente dada o in-
Aunque según Arendt la imagina- tuida por la mente de lo que no aparece
ción presupone la memoria, al parecer en lo que aparece. Arendt afirma que
se trata de una facultad más amplia. el rol de la imaginación para nuestras
Arendt sostiene que hay facultades aso-
ciativas como la memoria, que pone de
presente lo pasado, y de la “adivinación” 63 Contrastar con Platón, Filebo (25d11-e2;
(divination) que hace presente lo futuro. 28d7-9; 29c6-8); Crátilo (396b3-c3). Ver tam-
Aunque ni la memoria ni la adivinación bién: Eric Voegelin, “Reason: The Classic Expe-
son percepciones, sirven para conectar rience”, en Anamnesis (Columbia: University of
Missouri P, 1978), pp. 89-115. Stephen Menn,
Plato on God as Nous (South Bend: St. Augustine
62 Kant, Crítica del juicio § 59. Press, 1995).

50
facultades cognitivas es quizá el mayor marco no se ha dado noéticamente a la

descubrimiento de Kant en la Crítica de manera platónica como ella lo interpreta,
la razón pura (B 176 ff.). sino que se trata de una imagen o esque-
La misma facultad de la imagina- ma particular potencialmente concreto.
ción, que provee esquemas para la cog- Este esquema se encuentra más allá o
nición, provee también ejemplos para entre el entendimiento y la sensibilidad:
el juicio. En Kant hay dos ramas de pertenece al entendimiento en que es
la experiencia y el conocimiento: a). exteriormente invisible, y pertenece a la
intuición (sensibilidad), y b). conceptos sensibilidad en que se puede especificar
(entendimiento). Mientras que la intui- como una imagen (82).
ción siempre nos da algo particular, el Arendt sostiene que para nosotros
concepto permite entender o “capturar” estos serían entonces los puntos deci-
cognitivamente ese particular. Mientras sivos:
la intuición señala este objeto, el concep-
to permite la comunicabilidad general. a) En la percepción de algo particular
¿Cómo se encuentran las dos facul- (por ejemplo, una mesa), está con-
tades de la intuición y la conceptuali- tenida la imagen de “la mesa” como
zación en el marco kantiano? Arendt tal. No hay percepción posible sin la
sostiene que mientras los conceptos del imaginación. La imaginación es un
entendimiento ordenan las intuiciones, ingrediente necesario de la percep-
la imaginación ofrece la “capacidad de ción.
síntesis” que hace posible el conoci- b) El “esquema” de “mesa” es válido
miento (81). La imaginación produce para todas las mesas particulares. De
por tanto las síntesis. Provee la imagen otro modo nos referiríamos al objeto
al concepto: esta imagen en términos nominalmente indicando “esto”,
cognitivos tiene el nombre de esquema. “esto”, “esto”, etc. en consecuencia
La imaginación, es decir, el “arte” o ca- de un devenir constante, pero no
pacidad de síntesis, permite el vínculo tendríamos modo de referirnos al
triangular entre la sensibilidad (intui- objeto como tal (83).
ción) y el entendimiento (concepto). c) Sin el concepto “mesa” no podría-
Así funciona como “raíz común” de la mos comunicar la percepción del
sensibilidad y el entendimiento. Arendt objeto particular con esas caracte-
añade que sin el esquema que produce rísticas. La imagen del esquema nos
la imaginación no tendríamos capacidad permite hacer referencia general al
de reconocimiento común de las cosas. objeto.
Platón llama eidos a ese esquema no
dado a los sentidos sino al “ojo de la men- Según Arendt, lo que hace comunicable
te” (82). No obstante, según Arendt este un objeto particular es que tenemos

51
en mente al esquema característico de parecer juega un papel clave en los juicios

dichos particulares. En Kant estas imá- sobre particulares tanto reflexivos como
genes esquemáticas son producto de la determinantes. Los ejemplos correcta-
imaginación. mente elegidos nos guían y orientan: el
Arendt concluye los apuntes sobre ejemplo es el particular que contiene en
la facultad kantiana de la imaginación sí el concepto o la regla general. Arendt
comentando que la Crítica del juicio trata concluye que la mayoría de los conceptos
de juicios “reflexivos” en contraste con en la historia y en la ciencia política son
juicios “determinantes”. En los juicios de esta naturaleza: se originan en un
determinantes se subsume un particular momento o incidente histórico particu-
bajo un tipo de norma o regla general. lar, y de ahí se procede a darles validez
Los juicios reflexivos, por su parte, deri- ejemplar, es decir: ver en lo particular lo
van la regla del particular ejemplar. Con- que es modelo o estándar para más de un
forme al análisis anterior, en el esquema solo caso. El modelo ejemplar, revelado
se figura algo universal en el particular. de manera narrativa a través de historias,
Nuestra sensibilidad pareciera requerir permite la comunicación del gusto o
de la imaginación, no solo como ayuda juicio estético desde donde los hombres
al conocimiento, sino para reconocer pueden encarnar un sentido y aspiración
la similitud (sameness) en la diversidad. de comunidad.
Kant anota en la Crítica de la razón pura:
“la síntesis de la imaginación constituye BIBLIOGRAFÍA
antes de la apercepción el fundamento
de la posibilidad de todo conocimiento, Adler, Laure. Hannah Arendt: Una biografía.
especialmente de la experiencia” (B 104). Bogotá: Ariel, 2019.
En la formulación kantiana que Arendt, Hannah. Between Past and Future: Six
presenta Arendt la “imaginación” de- Exercises in Political Thought. Viking
termina la sensibilidad a priori. De tal Press: New York, 1961.
modo que la imaginación es inherente —. Lectures on Kant’s Political Philosophy. Edited
a todas las percepciones. Sin esta, no with an Interpretative Essay by Ronald
habría intersubjetividad humana en el Beiner Chicago: U Chicago P, 1992.
mundo, ni tampoco habría comunica- —. ¿Qué es la política? Barcelona: Paidós, 1997.
bilidad (84). En la Crítica de la razón —. The Life of the Mind Vols. I-II. New York:
pura la imaginación está al servicio del Harcourt, 1978.
intelecto. En la Crítica del juicio el inte- —. The Human Condition. Chicago: U Chicago
lecto está al servicio de la imaginación: P, 1998.
Arendt explica este punto por medio —. “Thinking and Moral Considerations: A
de las figuras de esquema conceptual y Lecture”, Social Research, Spring/Summer
ejemplo imaginativo. La ejemplaridad al 1984, vol. 51, n.º 1-2, pp. 7-37.

52
Aristóteles. Basic Works. New York: Modern Goethe, Johann Wolfgang. Las afinidades electi-
Library, 2001. vas. Buenos Aires: Clásicos Galerna, 2012.
Avineri, Shlomo. Hegel’s Theory of the Modern Girard, Rene. Deceit, Desire and the Novel: Self
State. Cambridge: Cambridge UP, 1979. and Other in Literary Structure Baltimore:
—. The Social and Political Thought of Karl Marx. Johns Hopkins UP, 1976.
Cambridge: Cambridge UP, 1986. Grant, George. Technology and Empire. Toronto:
Beiner, Ronald. Civil Religion: A Dialogue in the Anansi, 1969.
History of Political Philosophy. Cambridge: Hadot, Pierre. Philosophy as a Way of Life. Oxford:
Cambridge UP, 2011. Blackwell, 1995.
—. Philosophy in a Time of Lost Spirit. Toronto: —. ¿Qué es la filosofía antigua? México: FCE,
U Toronto P, 1997. 2000.
—. Political Philosophy: What it is and Why it Heidegger, Martin. Poetry, Language, Thought.
Matters. Cambridge: Cambridge UP, 2014. New York: Harper, 2001.
—. “Rereading Hannah Arendt’s Kant Lectures”, —. Ser y tiempo. Buenos Aires: Fondo de Cultura
Philosophy & Social Criticism 23, n.º 1 Económica: 2014.
(January 1997): pp. 21-32. —. The Event. Indianapolis: Indiana UP, 2013.
Bernstein, Richard. Ed., Habermas and Moderni- Herrero, Montserrat. “Políticas de la hospitalidad
ty. Cambridge: Polity Press, 1985. en el pensamiento de Jacques Derrida”. Re-
Birulés, Fina. Comp. Hannah Arendt: El orgullo vista de Estudios Políticos, 180, (abril-junio,
de pensar. Barcelona: Gedisa, 2006. 2018), pp. 77-103.
Bloom, Allan. The Closing of the American Mind. Hobbes, Thomas. Leviathan. Indianapolis: Ha-
New York: Simon & Schuster, 1987. ckett, 1994.
Darby, Tom. The Feast: Meditations on Time. Jaspers, Karl. Kant. Hannah Arendt Ed. New
Toronto: U Toronto P, 1990. York: Harcourt, 1962.
Degryse, Annelies. “Sensus Communis as a Kant, Emanuel. Crítica del juicio. Madrid: Es-
Foundation for Men as Political Beings: pasa, 1995.
Arendt’s Reading of Kant’s Critique of —. ¿Qué es la Ilustración? Madrid: Alianza, 2007.
Judgment”, Philosophy & Social Criticism Kojève, Alexandre. Kant. Paris: Gallimard, 1973.
37, n.º 3 (March 2011): pp. 345-58. Lara, María Pía. “Reflective Judgment as World
Fleisher, Martin. Ed., Machiavelli and the Nature Disclosure”, Philosophy & Social Criticism
of Political Thought. New York: Atheneum, 34 (2008): pp. 83-100.
1972. Lilla, Mark. The Reckless Mind: Intellectuals in
Gadamer, Hans-Georg. Truth and Method. New Politics. New York: New York Review of
York: Continuum, 1975. Books, 2001.
Garsten, Bryan. “The Elusiveness of Arend- Lobkowicz, Nicolas. Theory and Praxis. South
tian Judgment”, Social Research 74, no. 4 Bend: Notre Dame UP: 1968.
(2007): pp. 1071-1108.

53
Löwith. Karl. Historia del mundo y salvación: Los eds., Nietzsche’s Therapeutic Teaching. Lon-
presupuestos teológicos de la filosofía de la don: Bloomsbury, 2013.
historia. Buenos Aires: Katz, 2007. Piper, Josef. Sobre los mitos platónicos. Barcelona:
—. Meaning in History. Chicago: U Chicago Herder, 1998.
P, 1967. Platón. Complete Works. Indianapolis: Hackett,
Machiavelli, Niccolo. The Prince. Trans. Harvey 1997.
Mansfield. Chicago: U Chicago P, 1998. Rosen, Stanley. Hermeneutics as Politics. New
Mccormick, John. Confronting Mass Democracy Haven: Yale UP, 2003.
and Industrial Technology: Political and —. Plato’s Republic: A Study. New Haven: Yale
Social Theory from Nietzsche to Habermas. UP, 2005.
Durham: Duke UP, 2002. Saner, Hans. Kant’s Political Thought: Its Origin
Menn, Stephen. Plato on God as Nous. South and Development. Chicago: U. Chicago
Bend: St. Augustine Press, 1995. P, 1973.
Nietzsche, Friedrich. Más allá del bien y del mal. Shell, Susan. The Rights of Reason: A Study of
Madrid: Edimat, 2003. Kant’s Philosophy and Politics. Toronto: U
Parra, J.D. “Filosofía política en el pensamiento Toronto P, 1980.
neoclásico de Eugenio Trías: Una lectura Sobrevilla, David. Comp. Filosofía, política y es-
de El artista y la ciudad ”, Praxis Filosófica tética en la Crítica del juicio de Kant. Lima:
(51), julio-diciembre 2020, pp. 55-76. Instituto Goethe de Lima, 1991.
—. “Global Enframing, Authentic History, Strauss, Leo. On Tyranny. Including the Strauss-
Dasein: Thoughts on the Preview of Kojève Debate. Chicago: U Chicago P,
Heidegger’s Beiträge zur Philosophie”, en 2000.
Lee Ward, ed., Cosmopolitanism and its Taylor, Charles. The Malaise of Modernity. To-
Discontents. Lanham, MD: Lexington ronto: Anansi, 1991.
Books, 2020. Trías, Eugenio. Drama e identidad. Barcelona:
—. Heidegger’s Nietzsche: European Modernity Barral, 1974.
and the Philosophy of the Future. Lanham, Voegelin, Eric. Anamnesis. Columbia: University
MD: Lexington Books, 2019. of Missouri P, 1978.
—. “‘Who Educates the Educators?’ Nietzsche’s —. Order and History. Vol. III: Plato and Aristotle.
Philosophical Therapy in the Age of Ni- Baton Rouge: Louisiana State UP, 1972.
hilism”, en Horst Hutter y Eli Friedland,

Editado por el Departamento de Publicaciones
de la Universidad Externado de Colombia
en marzo de 2021
Se compuso en caracteres Adobe Garamond Pro de 11 puntos

y se imprimió sobre propalibros de 70 gramos
Bogotá, Colombia
Post tenebras spero lucem

Arendt Sobre La Filosofia Politica de Kant

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

Arendt Sobre La Filosofia Politica de Kant

Cargado por

Información del documento

Descripción original:

Título original

Derechos de autor

Formatos disponibles

Compartir este documento

Compartir o incrustar documentos

Opciones para compartir

¿Le pareció útil este documento?

¿Este contenido es inapropiado?

Copyright:

Formatos disponibles

Arendt Sobre La Filosofia Politica de Kant

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

CIPE Cuadernos del

José Daniel Parra

n.º 49, marzo de 2021

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 1 24/03/21 5:52 a. m.

rector de la universidad externado de colombia

decano (f) de la facultad de finanzas, gobierno y relaciones internacionales

director del centro de investigaciones y proyectos especiales, cipe

Primera edición: marzo de 2021

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 2 24/03/21 5:52 a. m.

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 3 24/03/21 5:52 a. m.

Postcriptum sobre el Pensamiento • 8

Primera conferencia: La historia y la facultad del juicio • 11

Segunda conferencia: “¿Qué es el hombre?” • 12

Tercera conferencia: Revolución y fundación constitucional • 15

Cuarta conferencia: Dignidad y felicidad • 18

Quinta conferencia: Selbstdenken • 20

Sexta conferencia: Filosofía crítica y la República de las letras • 23

Séptima conferencia: Razón pública • 27

Octava conferencia: Acción comprometida

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 5 24/03/21 5:52 a. m.

Novena conferencia: ¿Armonía pre-establecida? • 33

Décima conferencia: El espectador y la historia • 36

Undécima conferencia: El nous y la imaginación • 40

Duodécima conferencia: El espectador imparcial • 42

Décima tercera conferencia: “Sentido común”

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 6 24/03/21 5:52 a. m.

INTRODUCCIÓN Las conferencias sobre la filosofía política

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 7 24/03/21 5:52 a. m.

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 8 24/03/21 5:52 a. m.

ni el juicio se enfocan en el presente, el allá de la ley de causa-efecto, o es una

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 9 24/03/21 5:52 a. m.

En Kant, relata Arendt, el juicio es encontramos que Die Weltgeschichte ist

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 10 24/03/21 5:52 a. m.

en Homero (Ilíada XVIII) el historiador propone desarrollar esta vertiente tácita

8 Para abordar el tema de la filosofía política

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 11 24/03/21 5:52 a. m.

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 12 24/03/21 5:52 a. m.

de Leibniz, también de Schelling, con de un propósito determinado? El tema

a) ¿Qué puedo conocer? Encontramos en el texto que Arendt

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 13 24/03/21 5:52 a. m.

el pensamiento. Estos fenómenos contradicción entre naturaleza “mecáni-

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 14 24/03/21 5:52 a. m.

La razón práctica kantiana opera con TERCERA CONFERENCIA:

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 15 24/03/21 5:52 a. m.

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 16 24/03/21 5:52 a. m.

filosófica kantiana postula inteli- Arendt explica que la Crítica de la

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 17 24/03/21 5:52 a. m.

Pascal ejemplifica entonces, desde la

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 18 24/03/21 5:52 a. m.

opuestos. Así, no se entra en la vida Sobre el progreso ilustrado

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 19 24/03/21 5:52 a. m.

a) La especie humana y su progreso. c) Los hombres en el sentido de cria-

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 20 24/03/21 5:52 a. m.

humana” (27). En Kant el cuerpo y los ‘necesidad’ (need ) de la condición hu-

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 21 24/03/21 5:52 a. m.

Arendt concluye que, desde un pun- resultado de la ilustración es pensar por

pi Cuaderno del CIPE No 49_final.indd 22 24/03/21 5:52 a. m.

2003), pp. 19-49. Susan Shell, The Rights of