Unidad III 2021
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UNIDAD III
De la posesión
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Contenido
1- Posesión. Generalidades: ........................................................................................................... 3
2- Concepto: .................................................................................................................................. 3
2.1.- Poder de hecho que no implica posesión ................................................................................ 3
3- Posesión en las doctrinas de Savigny y de Ihering ...................................................................... 4
3.1. Teoría de Savigny: .................................................................................................................. 4
3.2. Teoría de Ihering: ................................................................................................................... 4
4- Sujetos de la posesión: ............................................................................................................... 4
4.1- Poseedor inmediato ................................................................................................................ 4
4.2.- Poseedor mediato .................................................................................................................. 5
5- Objeto de la posesión: ................................................................................................................ 5
5.1- Cosas susceptibles de posesión ............................................................................................... 5
6- Poseedor de buena y de mala fe.................................................................................................. 5
6.1.- Poseedor de buena fe: ............................................................................................................ 5
6.2- Poseedor de mala fe ................................................................................................................ 6
6.3. Momento en que debe existir la buena fe ............................................................................ 6
6.3.1 – En la adquisición de cosas particulares: .......................................................................... 6
6.3.2.- En la percepción de los frutos.......................................................................................... 6
6.3.3.- En la coposesión ............................................................................................................. 6
6.3.4 Tratándose de personas representadas ................................................................................ 6
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1- Posesión. Generalidades:
La posesión es, con seguridad, uno de los temas más controvertidos y difíciles de todo el
Derecho Civil. La razón histórica de la incertidumbre se concentra en la extraordinaria
heterogeneidad de los sistemas elaborados por las distintas legislaciones, pudiendo señalarse
las siguientes particularidades:
a) El derecho no consiguió concretar un único concepto de la posesión en todos los
tiempos;
b) Tanto el derecho romano como el germano no lograron unificar la reglamentación de
la posesión;
c) Las variaciones que ha tenido la concepción de la posesión a través del tiempo,
resultando una combinación de elementos históricos; y,
d) Que los grandes maestros como Savigny y Ihiering, han centrado sus estudios relativos
a la posesión en el derecho romano, especialmente.
2- Concepto:
Poseedor es quien tiene sobre una cosa el podes físico inherente al propietario, o al titular de
otro derecho real que lo confiera. Art. 1909. CCP.
El código Civil no da una definición de lo que es la posesión sin embargo se pone de resalto lo
de poder físico sobre la cosa, es decir el ejercitado sobre ella, pues cualquier facultad o derecho
sin tal aplicación material no compartiría ninguna clase de posesión, aunque a la vez, cabe
expresarlo, no siempre es poseedor quien tiene el contacto físico, ni la posibilidad física,
aunque entren dentro de sus atribuciones.
Asimismo, se puede hacer uso de tal poder físico por intermedio de otros. Es sabido que con
esta regla se busca eludir el problema latente con el sistema de Savigny, el de tener que sumar
el corpus y el animus de que goza todo se conscientes y libre. Ahora, quien dispone sobre una
cosa, del poder físico inherente al propietario o al titular de otro derecho real pertinente, ha de
considerarse poseedor, aparte de aquellos mencionados en el artículo 1911 del Código Civil:
usufructuario, acreedor prendario, locatario, depositario, que también son considerados
poseedores.
Por tanto, los llamados poderes físicos sobre a cosa, constituye el uso y goce de la misma. De
este modo, para nuestro Derecho, poder ser poseedores los dueños de la cosa también los que
sin ser dueños, la tiene bajo ese título (arrendatario, usufructuario depositario), porque ejercen
sobre a cosa los poderes físicos de uso y goce de ella.
El poder físico ejercido sobre una cosa, no implica la posesión a los efectos del Código Civil,
ya que se está ejerciendo la misma para otra persona y tiene que obedecer órdenes del poseedor;
hay una relación de dependencia entre ambos. En esta situación se encuentran los
administradores de bienes de terceros, los dependientes, las personas de servicio, etc.
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3- Posesión en las doctrinas de Savigny y de Ihering
3.1. Teoría de Savigny:
Sostiene este autor que la posesión supone la existencia de dos elementos esenciales: el
corpus y el animus. El corpus es el elemento físico de la posesión, sin el cual esta no se
concibe. Es la posibilidad material de hacer de la cosa lo que se quiera, impidiendo toda
injerencia extraña.
Pero no basta con el corpus. Para que una persona sea realmente tenida por poseedora,
es necesario que posea con ánimo de dueño. Por el contrario, si tiene la cosa
reconociendo en otro el derecho de propiedad, es un simple detentador.
Es por consiguiente el animus, lo que distingue al poseedor del tenedor; el otro
elemento, el corpus, no permite por si distinguirlos, ya que tanto el poseedor como el
detentador tiene la cosa de la misma manera.
En cuanto al animus que requiere Savigny, muchas veces es imposible probar, puesto
que se trata de un elemento intencional
Sostuvo la necesidad de repensar el concepto de corpus, esto es, del elemento material
de la posesión. No se trata i de la aprehensión física, ni de la posibilidad física de
aprehender la cosa; se trata de comportarse respecto de la cosa como lo haría el
propietario o las personas a las cuales la ley reconoce el derecho de posesión: lo
decisivo es que esa conducta sea la adecuada al destino económico de la cosa de servir
a los hombres.
4- Sujetos de la posesión:
Son sujetos de la posesión, las personas físicas y las jurídicas. Las personas físicas
pueden adquirir la posesión por si mismas, sin necesidad de representantes, desde los
catorce años. Las personas jurídicas lo hacen por intermedio de sus representantes.
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Esta distinción entre posesión mediata e inmediata viene a sustituir la vieja distinción
entre posesión y tenencia.
5- Objeto de la posesión:
El objeto típico de la posesión son las cosas corporales susceptibles de tener un valor
económico, las cuales deben estar perfectamente determinadas.
Por eso, en las cosas no individualizadas (aquellas que aparecen confundidas con otras
de sus misma especie), antes de tomar la posesión, es necesario separarlas del conjunto,
individualizándolas.
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Siendo la buena fe un hecho puramente psicológico, le resulta imposible al poseedor
producir la prueba positiva de que la tenía. La ley sale al cruce de esta dificultad
presumiendo la buena fe a menos que se pruebe lo contrario o que en determinadas
circunstancias, la ley presuma esa mala fe.
6.3.3.- En la coposesión
Art.1915.- Si dos o más personas poseyesen en común una cosa indivisa, podrá cada
una ejercer sobre ella actos posesorios, con tal que no excluya los de los otros
coposeedores.
Art.1923.- Si fueren varios los poseedores, la naturaleza de la posesión se juzgará
respecto de cada uno de ellos.
Cuando dos o más personas poseen en común una cosa, cada una de ellas responderá
de la buena o la mala fe de sus posesión; debe tenerse en cuenta que el Derecho ampara
la buena fe y no habría razón alguna para extender sus beneficios al poseedor de mala
fe, por la sola razón de que el coposeedor sea de buena fe.
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el acto que realice en nombre de su representado. Siempre, por supuesto que ese
representado fuere capaz, pues el precepto se refiere a la representación por poder.
De modo que, siendo el representante de mala fe, en la adquisición de la posesión o en
su mantenimiento, excluye cualquier buena fe del representado, sin que en caso
contrario su buena fe pueda salvar la mala fe del mandante.
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