Folleto Guía Cuaresma 2024 SEDEC
Folleto Guía Cuaresma 2024 SEDEC
Folleto Guía Cuaresma 2024 SEDEC
Apreciables catequistas:
Les saludo con afecto y alegría en este año que inicia, deseando que sus trabajos y
labores pastorales se vean siempre bendecidos por el amor y la misericordia de Jesucristo,
nuestro Señor.
Por ello, desde el SEDEC de Guadalajara, hemos optado por ofrecerles una propuesta
de vivencia cuaresmal que privilegie en cada uno de nosotros el itinerario de los discípulos de
Jesús, favoreciendo la cercanía con nuestros hermanos y fortaleciendo la esperanza en las
comunidades en que desempeñamos nuestro servicio pastoral. Lo anterior implica la novedad
de que recorramos un camino de Cuaresma que inicie el Miércoles de Ceniza, se nutra semana
a semana con momentos de reflexión, se exprese en compromisos concretos que den
testimonio de una verdadera conversión personal y pastoral para irnos conduciendo rumbo a
la experiencia comunitaria de un Retiro Espiritual, que se realice ya sea por Decanato o Vicaría.
El presente folleto digital que ponemos a su disposición será la guía que nos
acompañará a vivir ese itinerario cuaresmal y lleva por lema “Servidores de la misericordia”,
inspirados en la cita bíblica de la Visitación de María (cfr Lc 1, 36-56).
Les invito a aprovechar todos los recursos didácticos que como apoyo a este itinerario
cuaresmal pueden encontrar en nuestras redes sociales, así como comunicarse con nosotros
para cualquier duda o comentario durante la organización y realización de este.
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Mensaje del Santo Padre para la Cuaresma 2021
2
Reciban un abrazo fraterno, mi bendición y la intención de mi oración por sus personas
y vocaciones para que sigan siendo fruto de misericordia en cada comunidad y aprovecho para
encomendar al equipo diocesano de catequesis a sus oraciones. Que María, Madre de
Misericordia, en la advocación de Nuestra Señora de Zapopan los acompañe siempre.
Alegremente
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Retiro Espiritual de Cuaresma 2024
“Servidores de la misericordia”
Lc 1, 36-56
“Mira, tu pariente Isabel también ha concebido un hijo en su vejez, y ya está de seis meses la
que todos tenían por estéril; porque para Dios nada hay imposible.
María dijo: -Aquí está la esclava del Señor, que me suceda como tú dices. Y el ángel la dejó.
Por aquellos días, María se puso en camino y fue de prisa a la montaña, a una ciudad de Judá.
Entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. Y cuando Isabel oyó el saludo de María, el niño
saltó en su seno. Entonces Isabel, llena del Espíritu Santo, exclamó a grandes voces: -Bendita
tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre. Pero ¿Cómo es posible que la madre de
mi Señor venga a visitarme? Porqué en cuanto oí tu saludo, el niño saltó de alegría en mi seno.
¡Dichosa tú que has creído! Porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá.
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Objetivo general: Que los evangelizadores y catequistas reaviven su vocación a través
del encuentro con Jesús, maestro de la misericordia, y preparen su corazón para
recibirlo y salir al encuentro de los demás con actitud de servicio.
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6
Hoy miércoles de ceniza, prepárate para ello. Busca a lo largo del día y antes de ir a
tomar este sacramental un momento de oración personal, que vaya disponiendo y
cimentando las bases para una adecuada reflexión espiritual en este camino cuaresmal.
Señor:
Como Tu pueblo elegido que empleaba la ceniza
como señal de arrepentimiento, dolor y penitencia,
concédeme recibirla hoy que inicia la Cuaresma
no por costumbre o por superstición,
sino para expresar mi deseo de conversión,
mi compromiso para apartarnos del pecado,
reconciliarme contigo, y crecer en la fe, esperanza y amor,
a través de los caminos que propone la Iglesia:
oración, para dialogar diario contigo, mi amigo,
caridad, para estar atento a los otros
y ayudarles en su necesidad,
y ayuno y abstinencia para aprender a dominarme
y a privarme de bienes para compartirlos con los demás.
Señor Jesús:
Que en mi camino cuaresmal Tu Palabra sea mi luz,
y la Eucaristía el alimento que fortalezca mi corazón
para acompañarte hasta la cruz
y llegar a la Pascua a celebrar contigo
que derrotaste la muerte con Tu Resurrección.
Amén.
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SUGERENCIAS GENERALES
Este momento se vivenciará de manera comunitaria por lo que conviene que en cada parroquia lo
preparen con tiempo y convoquen a participar en el mismo a los evangelizadores y catequistas que
acompañan la vida de fe de las personas de diferentes edades, ambientes y situaciones, es decir, no
solo a los catequistas de niños. Dígase lo mismo para los demás momentos de esta propuesta.
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GUIÓN DE HORA SANTA (60 minutos)
1. Para Estar con Jesús (15 minutos)
Exposición del Santísimo
Se dispone un altar al centro de la asamblea (flores, manteles, velas, incienso, luces, etc.) con la
oportunidad de podernos poner a su alrededor y poder colocar los letreros con los nombres de los
movimientos evangelizadores y centros de catequesis de la parroquia.
El sacerdote, diácono o ministro expone el Santísimo y se puede acompañar este momento con los
siguientes cantos de presencia e intimidad:
El monitor invita a algunos de ellos a expresar en voz alta, para todos, algo de lo reflexionado.
Canto sugestivo:
Dime Señor - Rafael Moreno
b) Cada uno de los participantes escribe en una papeleta una palabra que exprese el compromiso
que está dispuesto a asumir como fruto de su reflexión. Pasa y lo coloca en el altar.
Oración comunitaria:
Señor Jesús, como agente de pastoral, como discípulo misionero en esta comunidad, hoy me
quiero hacer responsable de la alegre y valiente tarea de llevar tu presencia y tu Palabra a los
demás. Salir de mi comodidad, de mi espacio de referencia, de lo que me da seguridad y, como tantos
cristianos en el mundo entero, ir a encontrarte en cada una de las periferias existenciales, zonas
marginadas, espacios olvidados de la pastoral y, sobre todo, en la vida de las personas que me han
sido encomendadas.
Dame tu santa gracia para llevar un corazón abierto a tu inspiración, fuerte por tus dones y ágil para
responder a todas las situaciones. Concédeme la gracia de aprender de Nuestra Señora de Zapopan
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y como ella salir, llevar tú misericordia a quienes más lo requieran y así, sumarme a tantos otros que
como “Servidores de Misericordia”, asumen la gran tarea de la evangelización. Amén.
A nombre de Nuestro Señor Jesucristo y de la comunidad a la que servimos, yo los envío a llevar la
Misericordia de Dios a todos los confines de la humanidad, comenzando por los más cercanos para
llegar pronto a aquellos de quienes aún estamos alejados y siempre haciéndolo al estilo de Jesús.
Salgan llevando a Dios en su corazón, vayan al encuentro de los demás ‘sin asco y sin miedo’,
fortalecidos por el Espíritu Santo quien siempre nos precede en toda acción pastoral y acompañados
por nuestro(a) santo(a) patrono(a) y todos los santos y mártires que nos dan testimonio de misericordia
(en este momento si cuentan con ella, se acercan y toman la imagen del santo o mártir a quien está
encomendado su movimiento evangelizador o centro de catequesis).
Canto de adoración
♪ ♫ ♩ Digno de alabar - Athenas Busca en Spotify la playlist
con los cantos para este momento
Bendición con el Santísimo como Cuaresma SEDEC 24 –
Hora Santa o escanea el código
Canto de despedida: qr y accede a ella.
♪ ♫ ♩ Alma misionera // Mi lámpara encendida // Daniel Poli
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Hemos iniciado la Cuaresma: un tiempo para el silencio, para la revisión de vida, para la
conversión, en el que nos preparamos a vivir el Misterio Pascual.
Para vivir este momento es conveniente que busques un tiempo propicio y un lugar adecuado
(sin distracciones). Dispón de un cuaderno o papel y de una pluma. Puedes poner música
instrumental en volumen bajito.
Siéntate cómodamente, respira de forma pausada y profunda por unos minutos, y ve trayendo a tu
mente y a tu corazón cómo has vivido este último año:
1) Trae a tu mente, lentamente, los rostros de las personas con las que te encuentras
cotidianamente: de tu familia, trabajo, escuela, vecinos, parroquia, grupo de catequesis, etc.
Pregúntate: ¿Qué tengo para agradecer a Dios? (le agradezco en silencio).
2) Ahora trayéndolos a tu mente y a tu corazón, pregúntate: ¿Cómo han sido mis encuentros
con estas personas? ¿He cuidado el amor? ¿Pude haber expresado más mi amor y mi
agradecimiento?
3) Ahora trayéndolos a tu mente y a tu corazón, pregúntate: ¿Cómo han sido mis encuentros
con estas personas? ¿He cuidado el amor? ¿Pude haber expresado más mi amor y mi
agradecimiento?
Al concluir responde en tu cuaderno: ¿Cómo me siento al hacer este ejercicio? ¿Qué descubro?
¿Qué quiero modificar? Y me hago el propósito de ponerlo en práctica durante la cuaresma.
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• Integrar un equipo organizador a nivel Decanal o Vicarial, según sea el caso, en
conjunto con el sacerdote asesor y el laico coordinador.
• Elegir un lugar amplio y adecuado que albergue a todos los participantes.
• Adornar con creatividad el lugar con grandes imágenes alusivas a la temática del Retiro
Espiritual de Cuaresma.
• Convocar a los grupos de evangelizadores y catequistas que atiendan cualquier edad,
ambiente o situación específica de catequesis.
• Establecer dentro del esquema de organización las siguientes comisiones; si el Retiro
se realizará de manera Vicarial distribuirlas por Decanatos y si será a nivel Decanal
entonces distribuirlas por parroquias para propiciar una mayor participación:
• Invitación: Conviene que con tiempo la envíe el Vicario Episcopal, el Decano y los
correspondiente sacerdotes asesores y hacerla llegar a todas las comunidades.
• Sede: Conseguir el lugar para el Retiro y prever que cuente con sillas y servicios
sanitarios suficientes. Tener el dato de contacto de la persona que de parte del lugar
puede resolver cualquier imprevisto que se presente.
• Sonido: Contar con un equipo de sonido que sea adecuado para las características
del lugar, así como la presencia durante el Retiro de una persona que sepa
manejarlo. Prever el número de micrófonos que se requerirán tanto para los
momentos de reflexión, oración y considerar los requerimientos del coro.
• Video: Contar con un equipo para proyección de los recursos que utilicen los
expositores.
• Adorno: Cuidar del aseo del lugar, el adorno de este con letreros e imágenes
motivacionales y alusivas a la temática a abordar.
• Bienvenida: Gafetes, equipo de acogida que reciba a los participantes.
• Animación: Coro que mantenga a la asamblea animado para la participación en
cada momento del retiro.
• Expositores: Personas preparadas para dirigir cada momento.
• Liturgia: Preparar los momentos oracionales y la Eucaristía.
• Conducción: Un par de personas que irán ubicando a la asamblea previo a cada
momento, llevando el hilo de la secuencia del retiro, presentarán a los expositores
y cuidarán que el horario se vaya cumpliendo.
• Materiales: Prever las fotocopias con las actividades y demás apoyos que se
necesitarán.
• Refrigero o comida: En caso de que se vaya a ofrecer algo al inicio o final del retiro.
Cuidar de no trastocar el clima de oración y reflexión.
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Para este momento oracional se sugiere colocar al frente una imagen de Jesús, un cirio y un letrero
grande con la palabra “Misericordia” dentro de la imagen de un corazón. Ambientamos el momento
y el espacio con música instrumental e invitamos a los participantes a cerrar un momento sus ojos.
Así en este tiempo de tranquilidad y silencio, escuchamos lo siguiente:
Monitor: Querido Catequista, Dios realizará en ti, mediante su amor, su obra de perfección, de
santidad. No te empeñes en hacer, deja, simplemente, que Él haga su obra en ti.
Misericordia: es el acto último y supremo con el cual Dios viene a nuestro encuentro.
Misericordia: es la ley fundamental que habita en el corazón de cada uno de nosotros,
cuando mira con ojos sinceros al hermano que encuentra en el camino de la vida.
Misericordia: es la vía que une a Dios y al hombre, porque abre el corazón a la esperanza
de ser amados para siempre no obstante el límite de nuestro pecado."2
La predicación de Jesús nos presenta estas obras de misericordia para que podamos
darnos cuenta si vivimos o no como discípulos suyos.
Redescubramos las obras de misericordia corporales: (se leen pausadamente cada una
y se deja un espacio de silencio)
2
Papa Francisco, Bula Misericordiae Vultus, 2016.
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Y no olvidemos las obras de misericordia espirituales:
Lector 1: Oh Dios bueno y eterno, altísimo Señor, en este día vengo ante ti porque creo en tu presencia,
creo en tu amor y en tu santísima misericordia, creo en que tú estás a mi lado, guiándome y
acompañándome cada día de mi vida. Yo creo en que tú sabes mi sentir, mi pensar y mi actuar, pues
a ti nada podemos ocultarte, Señor. Tú lo conoces todo y sabes en tu corazón todas las veces que
actuamos bajo tus divinas enseñanzas, pero también sabes todas las veces que hemos caído, que
hemos sido débiles y que te hemos fallado, Señor.
Lector 2: Ayúdame, oh Señor, a que mis ojos sean misericordiosos, para que yo jamás recele o juzgue
según las apariencias, sino que busque lo bello en el alma de mi prójimo y acuda a ayudarle.
Lector 3: Ayúdame, oh Señor, a que mis oídos sean misericordiosos, para que tome en cuenta las
necesidades de mi prójimo y no sea indiferente a sus penas y gemidos.
Lector 4: Ayúdame, oh Señor, a que mi lengua sea misericordiosa, para que jamás hable
negativamente de mi prójimo, sino que tenga una palabra de consuelo y de perdón para todos.
Lector 5: Ayúdame, oh Señor, a que mis manos sean misericordiosas y llenas de buenas obras, para
que sepa hacer sólo el bien a mi prójimo y cargar sobre mí las tareas más difíciles y penosas.
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Lector 6: Ayúdame, oh Señor, a que mis pies sean misericordiosos, para que siempre me apresure a
socorrer a mi prójimo, dominando mi propia fatiga y mi cansancio. Mi reposo verdadero está en el
servicio a mi prójimo.
Lector 7: Ayúdame, oh Señor, a que mi corazón sea misericordioso, para que yo sienta todos los
sufrimientos de mi prójimo. A nadie le rehusaré mi corazón. Seré sincera incluso con aquellos de los
cuales sé que abusarán de mi bondad. Y yo misma me encerraré en el misericordiosísimo Corazón de
Jesús. Que tu misericordia, oh Señor, repose dentro de mí.
Oración
Dios, Padre Misericordioso, que has revelado Tu Amor en tu Hijo Jesucristo y lo has derramado
sobre nosotros en el Espíritu Santo: Te encomendamos hoy el destino del mundo y de todo
hombre. Inclínate hacia nosotros, pecadores; sana nuestra debilidad; derrota todo mal; haz que todos
los habitantes de la tierra experimenten Tu Misericordia, para que en Ti, Dios Uno y Trino, encuentren
siempre la fuente de la esperanza. Padre Eterno, por la Dolorosa Pasión y Resurrección de Tu Hijo,
Ten Misericordia de nosotros y del mundo entero (San Juan Pablo II). Amén.
Confío en ti - Jesed
El tiempo de Cuaresma es un tiempo para limpiar la mirada del corazón de cada uno de los
evangelizadores y catequistas. Descubrimos que hemos de aprovechar tiempos, circunstancias
y personas que nos permitan poder llegar a la alegría de la Resurrección con un corazón
dispuesto a prologar la esperanza de creer en Cristo que vive.
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DIMENSIÓN APOSTÓLICA. Examinemos nuestra DIMENSIÓN APOSTÓLICA, con los 10
mandamientos, examina como desenvuelves tu tarea de ser catequista: con tus
interlocutores (niños, adolescentes, jóvenes o adultos), examina las relaciones pastorales
con los demás catequistas y evangelizadores, pregúntate: ¿Cuánto testimonio de comunión,
participación y acción misericordiosa damos a toda la parroquia? ESCRIBE TUS
CONCLUSIONES.
En este momento nos auxiliamos con la Bula el Santo Padre Francisco para convocar al jubileo
extraordinario de la misericordia
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"Misericordiae Vultus" (MV), el rostro de la misericordia (Año 2015). Queremos hacerlo ahora en este
contexto de Cuaresma y pensando más específicamente en los compañeros de esta misión común de
la evangelización: catequistas y evangelizadores.
Entendemos por misericordia la virtud que inclina el ánimo a compadecerse de los sufrimientos y
miserias ajenas. Está relacionada con el amor, es sinónimo de compasión, de ternura y otras palabras.
En cierta ocasión Felipe le dice a Jesús: "Señor, muéstranos al Padre" y Jesús le contesta: "Tanto
tiempo hace que estoy con vosotros y no me conoces Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al
Padre"(Jn 14,8-9)… Quiere decir que Jesucristo nos descubre el misterio de Dios, nos revela la
naturaleza misma de Dios.
Jesucristo es el "el rostro de la misericordia del Padre. El misterio de la fe cristiana parece encontrar
sus síntesis en esta palabra. Ella se ha vuelto viva, visible y ha alcanzado su culmen en Jesús de
Nazareth. El Padre, rico en misericordia (Ef 2,4), después de haber revelado su nombre a Moisés como
Dios compasivo y misericordioso, lento a la ira, y pródigo en amor y fidelidad (Ex 34,6) no ha cesado
de dar a conocer en varios modos y en tantos momentos de la historia su naturaleza divina. En la
plenitud del tiempo (Gal 4,4), cuando todo estaba dispuesto según su plan de salvación. Él envió a su
Hijo nacido de la virgen María para revelarnos de manera definitiva su amor. Quien ve a Él, ve al Padre
(cfr. Jn 14,9). Jesús de Nazareth, con su Palabra, con sus gestos y con toda su persona revela la
misericordia de DIOS." (MV,1).
Dios es lento para enojarse y generoso para perdonar (en ocasiones nosotros somos al revés, rápidos
para enojarnos y lentos para perdonar). Con estas dos palabras se describe en el AT la naturaleza
misma de Dios, su misericordia está por encima del castigo y la destrucción." La misericordia de Dios
no es una idea abstracta, sino una realidad concreta en la cual El revela su amor, que es como el de
un padre o una madre que se conmueven en lo más profundo de sus entrañas por el propio hijo" (MV,6).
"Eterna es su misericordia" esta expresión se vuelve un estribillo en el Salmo 136 donde se muestra
como la misericordia de Dios hace la historia de la salvación, como diciendo que no sólo en la historia
caduca del hombre está la misericordia sino por "toda la eternidad el hombre estará siempre bajo la
Misericordia del padre" (MV,7).
Los seguidores de Jesús tenemos que volver continuamente nuestra mirada a El para ver si vamos
bien o nos devolvemos a dónde él nos indica. "Con la mirada fija en Jesús y en su rostro misericordioso
podemos percibir el amor de la Santísima Trinidad. La misión que Jesús ha recibido del Padre ha sido
la de revelar el misterio del amor divino en plenitud "Dios es amor" (n,4,8.16). afirma por primera y única
vez en toda la Sagrada Escritura el evangelista Juan. Este amor se ha hecho visible y tangible en toda
la vida de Jesús." (MV,8).
Jesús ante las multitudes que lo seguían y estaban cansadas y extenuadas y sin guía sintió desde lo
profundo de su corazón compasión de ellas. Mateo nos lo dice: "Jesús recorría todas las ciudades,
enseñando en las sinagogas, proclamando la Buena Nueva del Reino, y sanando de toda enfermedad
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y dolencia. Al ver a las muchedumbres, se compadeció de ellas, porque estaban vejadas y abatidas
como ovejas sin pastor"(Mt 9,35-36). Cómo no ver ahí las grandes multitudes hacinadas en las
periferias de la ciudad o las caravanas de emigrantes.
"Lo que movía a Jesús en todas las circunstancias no era sino la misericordia, con la cual leía el corazón
de los interlocutores y respondía a sus necesidades más reales"(MV,8). Las parábolas de la
misericordia, simplemente recordemos las del capítulo 15 de Lucas, son un claro ejemplo de cómo es
Dios nuestro Padre que nunca se da por vencido ante la miseria del pecado humano.
"Sed misericordiosos como vuestro Padre es misericordioso" (Lc 6,36; Mt 5,48). Ir apropiándose de las
obras de misericordia, tanto corporales, como espirituales, ahí se nota si somos o no discípulos de
Jesús. Recordando las palabras de San Juan de la Cruz "En el ocaso de nuestras vidas, seremos
juzgados en el amor" Y como dice el dicho: "sobre aviso no hay engaño". Tenemos una buena
oportunidad en la preparación para la Primera Confesión de los niños, mostrarles la misericordia de
Dios, que no quiere la muerte del pecador, sino que se convierta y viva.
Ahora finalmente, nuestro pensamiento se dirige a María la Madre de Jesús que se muestra presurosa,
saliendo a prestar su servicio a su pariente Isabel(LC 1,29-45). Nadie, como ella ha conocido y
experimentado la profundidad de Dios hecho hombre, elegida para ser Madre del Hijo de Dios custodió
en su corazón la divina misericordia, nos da un ejemplo de lo que debe ser nuestra evangelización que
tiene que ser de " salida"... Su canto de alabanza en el umbral de la casa de Isabel estuvo dedicada a
la misericordia que se extiende de generación en generación (cfr. Lc 1,46-56).
Y en nuestro servicio como evangelizadores y catequistas debemos aprender de ella las actitudes
necesarias que a ejemplo de Jesús, nos han de configurar como servidores de la misericordia en el
mundo de hoy, con los niños, los adolescentes, los jóvenes y los adultos, con todos ellos, con quienes
podemos compartir la alegría que es Jesús y a quienes debemos decir en este tiempo de Cuaresma,
“Dios te ama y nunca te abandona” pues es tan grande su misericordia que es una realidad que en
María, también Dios nos ama y nunca nos abandona, ella la Madre de Misericordia, nuestra madre a
quien en medio de situaciones críticas, circunstancias dolorosas o adversas recurrimos a ella para que
con su mediación de Dios, su misericordia nos toque, nos alcance y nos transforme. Ella es la madre
de Jesús, maestro de la misericordia, ella es nuestra madre, es la madre que invocamos en la Salve:
"Dios te salve reina y madre, de misericordia, vida y dulzura, esperanza nuestra..." Terminemos
reflexionando la siguiente pregunta, ¿qué actitud necesito aprender hoy de María para ser un servidor
de la misericordia en mi comunidad a ejemplo de Jesús?
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Has ido preparando el corazón para poder albergar en él la misericordia que viene de Dios,
observaste la realidad y te dejaste tocar por ella.
Ahora te corresponde asumir compromisos concretos, realizables durante esta Cuaresma, que una vez
llegada la Pascua podrás evaluar como signo vivo de la acción de Dios en tu vida; que no sea solo algo
temporal, sino que permanezca en los tiempos venideros.
Recuerda que eres quien mejor se conoce y sabes de aquello, que tal vez no lo quieres aceptar, urge
ser atendido para mejorar sustancialmente como persona. Escribe tres compromisos concretos que, a
favor de ti mismo, vas a empezar a realizar durante esta Cuaresma y te propones seguir con ellos de
aquí en adelante.
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2-
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• Compromiso hacia con mi familia.
Aquellos con quienes convives cotidianamente, tus familiares, son el espacio vital para que, alegre y
generosamente con un significativo testimonio sin palabras, solo con hechos, hagas manifiesta la
presencia de Dios en tu corazón.
¿Qué vas a hacer para crear un ambiente que facilite una vida más armónica en tu familia?
En este caso son las pequeñas acciones, que a veces no has valorado, las que vendrán a
generar situaciones más favorables para tu familia. Piensa por ejemplo en lavar los platos,
vasos y demás utensilios que hayan usado tú y tu familia durante la comida, en lavar y mantener limpio
el área del sanitario y regadera de tu casa, en barrer la banqueta y calle frente a donde vives, etc.
Estos compromisos no requieren que los platiques con la familia, ni que al hacerlos estés dando un
discurso a los demás; simple y sencillamente los asumes y los realizas inicialmente durante esta
Cuaresma y los sigues haciendo después de ella.
1-
2-
3-
La participación ciudadana ha sido antes, hoy y siempre el camino para que las situaciones
desfavorables vayan disminuyendo y en su lugar surjan vínculos y acuerdos que consoliden la identidad
que como comunidad y como nación tenemos.
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Qué tal si durante esta Cuaresma y luego después de ella haces algo en favor de la vida social, por
ejemplo: sensibilizar respecto al beneficio de acudir a votar (sin promover algún candidato o partido
político), integrarte en el comité de vecinos de tu colonia, promover el ahorro del agua al bañarse
colocando una cubeta bajo la regadera para captar agua que usarás en otras actividades domésticas,
responsabilizarte del reciclado de productos que usualmente tiras a la basura, etc.
1-
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3-
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De acuerdo con las posibilidades de cada Decanato o Vicaría, puede concluir el Retiro
Espiritual con la Celebración Eucarística o con una Hora Santa. Aquí les proponemos un
esquema para la oración ante el Santísimo. En caso de tener Misa usen el esquema
correspondiente al día en que tengan el retiro.
Se sugiere sea presidida por el Vicario Episcopal, Decano o sacerdote asesor de catequesis y
se exponga el Santísimo según se acostumbra. Luego, se sigue el esquema propuesto.
Objetivo: Meditar y orar el camino de la cuaresma a través de los Evangelios dominicales para
fortalecer nuestra fe en Jesucristo, y proclamarlo como nuestro Dios, nuestro Rey y Señor.
Materiales
• Letreros en cartulina para cada uno de los domingos de cuaresma: primer domingo,
segundo domingo y así hasta el quinto domingo.
• Palos de madera para pegar a cada letrero.
• Botellas llenas de arena para que sostengan los letreros.
• Lazos o tela para formar un camino pone cada uno de los letreros con sus signos.
• Una tarjeta con el dibujo de una montaña, o el desierto, o el trigal, para cada participante.
• Lápiz o pluma para cada participante.
Busca en Spotify la playlist con
los cantos para la vivencia de este
momento como Retiro Cuaresma
Signos SEDEC 2024 o escanea el código
• Una charola de arena. qr y accede a ella.
• Un dibujo o maqueta de una montaña.
• Un dibujo o maqueta del Templo de Jerusalén.
• Un dibujo de Nicodemo hablando con Jesús.
• El dibujo de un trigal o una canasta con espigas de trigo.
• Cruz, clavos, azote, corona de espinas.
Nota:
• Antes de iniciar la Hora Santa tener ya preparado el camino con los letreros de cada uno
de los domingos de Cuaresma.
• Lectores para cada uno de los Evangelios.
• Lector para la meditación.
• Los lectores deberán leer los textos con anticipación para dar el sentido y evitar
equivocaciones lo más posible.
• Los cantos sugeridos se pueden cambiar por otros.
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Estación
Canto: Entraré o Bendito, bendito
Guía: Alabemos y demos gracias en cada instante y momento
Todos: Al Santísimo y Divinísimo Sacramento
Padre Nuestro, Ave María, Gloria
Canto: Altísimo Señor
Guía: Alabemos y demos gracias en cada instante y momento
Todos: Al Santísimo y Divinísimo Sacramento
Padre Nuestro, Ave María, Gloria
Canto: Gloria a ti Hostia Santa
Guía: Alabemos y demos gracias en cada instante y momento
Todos: Al Santísimo y Divinísimo Sacramento
Padre Nuestro, Ave María, Gloria
Canto: Cuánto he esperado este momento
En estos lugares, si vamos atentos, con los ojos abiertos y aguzado el oído
encontraremos signos o pistas que nos ayudarán a ir cambiando nuestro corazón para
encontrar la gran muestra de la misericordia que nos espera. ¿Cuál? El tesoro de la
CRUZ donde está el misterio de Jesús, su pasión dolorosa: Cristo muerto y Resucitado.
La máxima muestra de amor.
Momento de silencio
Lector: Señor Jesús, ¡qué pocas veces he ido al desierto en busca de la Palabra de Dios que
vence las tentaciones! Cuántas cuaresmas he vivido, y aún no me he convertido, no he creído
verdaderamente en el Evangelio y muy poco he ayudado a que otros se conviertan y crean en
el Evangelio.
Signo: Pasa una persona con la imagen de la montaña, la coloca delante de la cartulina con
el letrero de segundo domingo de cuaresma.
Momento de silencio
Lector: Señor Jesús, en este momento quiero decirte lo mismo que Pedro, Santiago y Juan,
¡qué a gusto estoy aquí!, porque no vendré más seguido a verte, Tú siempre me estás
esperando, llamando y acogiendo para visitarte. Creo que estás presente en el Sacramento
del Altar. Te doy gracias por haberme dado a tu madre María, como mi madre y por estar hoy
contigo.
Momento de silencio
Lector: Jesús, tú sabes quién soy yo, conoces mi corazón, lo débil y frágil que es, no necesitas
que nadie te hable de mí, me conoces desde antes de nacer, me tienes grabado en tu palma.
Por eso, ten piedad y misericordia de mí.
Guía: Jesús, la noche que Nicodemo fue a verte se presentó lleno de dudas, pero tu fuiste muy
claro al hablarle del nuevo nacimiento, de la vida eterna que todos queremos, de la salvación
del mundo, de la fe en el hijo de Dios, de la verdad que es luz y se irradia a los demás.
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Sobre todo, dijiste que tu Padre Dios amó tanto al mundo que entregó a su Hijo único para que
ninguno se perdiera. Por todo esto, te alabo, te bendigo y te doy gracias.
Momento de silencio
Lector:
Como Nicodemo, he salido de noche para encontrarme con Jesús. Le pido perdón por mi
ambigüedad, por mis miedos, por mis dudas, y por mi cobardía para testimoniarle, para
comprometerme. Le pido que me ayude a nacer de nuevo, a cambiar, a convertirme, a ponerme
en su seguimiento de una manera más firme, más fiel, más coherente.
Le doy gracias porque Él me invita continuamente al encuentro y al seguimiento, porque se me
ha revelado y manifestado, me ha hecho contemplar su luz, su cruz y su gloria.
Momento de silencio
Lector: Muriendo en tierra, el grano de trigo produce una rica cosecha. Muriendo en la
cruz, Jesús nos da vida eterna. También los discípulos de Jesús hemos de
arriesgar nuestras vidas por los demás.
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Busca la canción en
Canto: Canción del grano de trigo. Youtube o escanea el código
qr y accede a ella.
Entrega las tarjetas y lápices a cada participante.
31
[email protected]
33 3618 6666
33 2338 4352
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