DISCURSO 9 de Julio

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DISCURSO PARA EL 9 DE JULIO

La Nación Argentina nació en una casona del interior del país. Seguramente,
fue largo, dificultoso y esforzado el viaje hasta el lugar, no sólo por la distancia,
los medios y los caminos; sino también porque llegar a Tucumán implicó
ponerse de acuerdo, decidir, opinar, mantener ideas y defender ideales.
Por un lado, los Centralistas pretendían organizar el país estableciendo el poder
desde Buenos Aires hacia el interior; por otro lado, los federales pretendían
conseguir la autonomía de cada región y defenderse del poder central de Buenos
Aires. Finalmente, nos encontramos con aquéllos que querían derrotar a los
españoles en primera instancia y luego ocuparse de la organización del país.
Este grupo tenía quizá la meta más ambiciosa: la de la Independencia nacional.
Se generaron peleas entre Centralistas y Federales, y la idea de lograr la
independencia parecía cada vez más difícil de conseguir. Al declararse la
independencia, el Congreso impuso una mirada común para todos los habitantes
de nuestro suelo, una misma meta, un mismo sentir: “Construir la Nación
Argentina”, entre todos, uniendo esfuerzo y trabajo, sin ideas de poder y
dominio, sin separaciones innecesarias…
Los ideales de ese momento, el entusiasmo y las ideas, cobran sentido en la
actualidad, si cada uno de nosotros continúa trabajando sobre esos mismos
ideales y valores. Miremos a nuestro alrededor y preguntémonos: ¿Cuál es la
meta común que nos une como argentinos? ¿Qué ideal deberíamos anteponer a
nuestros gustos o ideales personales? “Para los hombres de coraje se han hecho
las empresas”, dijo el general San Martín.
Hoy, nuestra empresa es mantener la Independencia de nuestro país, sintiendo
orgullo de ser argentinos, defendiendo nuestros ideales, nuestras raíces y
costumbres. Creo, y estoy convencido de esto, que, cuando cada argentino pone
su granito de arena, por más pequeño e insignificante que pueda parecer, cobra
valor la Independencia, que nos legaron aquellos hombres de 1816; y con esto,
el amor por nuestra Patria y nuestro orgullo por ser sus herederos.

Muchas gracias por haberme escuchado

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