Apunte de Clases - Unidad 1 - Antropologia y Educación
Apunte de Clases - Unidad 1 - Antropologia y Educación
Apunte de Clases - Unidad 1 - Antropologia y Educación
Materia Optativa:
ANTROPOLOGÍA Y EDUCACIÓN: HISTORIA Y PRESENTE DE UN CAMPO DE ESTUDIOS
Equipo docente:
María Laura Diez, Horacio Paoletta y Cecilia Diez
Año 2023 – Segundo cuatrimestre
Introducción
En esta unidad vamos a introducirnos en la historia de un campo de estudio amplio
(Etnografía educativa en América Latina y la antropología de la educación en la
Argentina) para enmarcar gran parte de los aportes conceptuales que vamos a trabajar
en la materia. En particular, queremos reconstruir ciertos debates centrales de la
disciplina antropológica que complejizan la mirada sobre el tratamiento de la diversidad
y la desigualdad en el campo educativo. Para ello retomaremos diferentes autores que
desde un enfoque histórico-etnográfico aportan a la desnaturalización y
descotidianización de los procesos socioeducativos, permiten hacer visibles las
posiciones de sujetos y colectivos históricamente silenciados en la investigación social y
educativa, y proponen una mirada que, trascendiendo la perspectiva normativa, se
acerca al análisis de los procesos y las prácticas concretas.
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A continuación, abordaremos los núcleos temáticos de la presente unidad a través de
los principales conceptos y discusiones trabajados por lxs autorxs. Estos aparecen
reagrupados de acuerdo con sus contribuciones a los ejes que guían esta unidad.
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B. Levinson es Dr. en Antropología, Prof. en Educación y en Antropología y Estudios Latinos, Director del
Centro de estudios latinoamericanos y del Caribe. Universidad de Indiana. D. Holland es profesora del
Departamento de Antropología, Univ. de Carolina del Norte, Chapel Hill.
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Doctora en Ciencias en la especialidad de Investigaciones Educativas, Investigadora del Departamento
de Investigaciones Educativas, Centro de Investigación y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico
Nacional de México. Línea de Investigación: Antropología e historia de la educación y la cultura escrita.
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Sobre la relación entre saberes, vamos a trabajar cuando abordemos la relación entre Interculturalidad
y Educación.
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El texto “Escuela y clase subalterna” de Ezpeleta y Rockwell (1985), al que aludiremos en la Unidad 4,
recoge parte de esta reflexión e introduce la tensión entre el control-apropiación, como categorías para
el análisis.
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apropiaciones particulares en cada contexto. Por otro lado, las escuelas, ubicadas en un
espacio entre lo local y lo nacional, han demostrado ser un recurso contradictorio: si por
un lado proveen habilidades y herramientas o son dadores de “oportunidades”, por el
otro pueden arrastrar a los sujetos hacia proyectos dominantes, atándolos más
firmemente a un sistema de clase, género y desigualdad étnica y racial. De la misma
forma, pueden tanto promover sentidos del yo “entendido” como alentar sentidos del
yo como “fracaso”.
• Educación y escolarización
El principal punto de partida es la diferencia entre Escuela y Educación. Todas las
sociedades proveen algún entrenamiento y conjunto de criterios mediante los cuales los
miembros pueden ser identificados como más o menos entendidos. Ello supone que
todas elaboran prácticas culturales que definen a la persona “educada”.
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GARCÍA CASTAÑO Y PULIDO MOYANO: Antropología de la educación. El estudio de la transmisión-
adquisición de cultura, Madrid, Eudema, 1994, capítulo 2, pp. 25-40.
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La relevancia de esta distinción radica en que permite dar cuenta de los procesos de
continuidad o controversia en relación con la escolarización y la educación. Invita a
pensar los recursos y limitaciones para la acción social en diversas instituciones
educativas6.
Los textos propuestos, así como otros materiales de los autores aludidos, ofrecen un
recorrido por la Investigación Educacional Crítica, en el que señalan los aportes teóricos
de la producción británica y norteamericana y la necesidad de expandir estudios en otras
regiones, para comprender problemáticas más específicas de América Latina.
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En este sentido, la perspectiva de estos autores se inscribe dentro de los debates sobre los alcances y
límites de la capacidad de agencia que tienen los sujetos respecto de las determinaciones estructurales
7
en el marco de una amplia transformación de la disciplina asociada especialmente a una mirada reflexiva
del proceso de descolonización.
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En las próximas unidades haremos alusiones a estas teorías.
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Durante la década del 80 se fue planteando la necesidad de expandir los estudios y
recorrer la especificidad de los procesos en Latinoamérica, con desarrollos teóricos
apropiados para analizar la realidad. Como veremos en la Unidad 3, con matices propios
y cuestionamientos a partir de la mirada etnográfica, hay influencias de:
-La teoría de la reproducción: que elabora una crítica a los efectos sociales de la
escolarización; las escuelas son vistas como exacerbantes o perpetuadoras de las
desigualdades sociales. (Althusser, 1984; Bourdieu y Passeron, 1977),
5
- El trabajo sobre la dimensión cultural de los fenómenos educativos. Se busca
reconstruir y reconocer condiciones diferentes de producción cultural,
interculturalidad y poder. Ello supone ampliar la escala temporal y asumir el reto
de repensar las alteridades.
Con relación a esta última línea, los estudios etnográficos latinoamericanos en
educación plantearon la necesidad de problematizar la noción de pluralidad cultural de
la región, atender al horizonte colonial, y avanzar sobre las “construcciones nacionales
de la alteridad” (concepto que recoge los aportes de Rita Segato y Claudia Briones). A
lo largo de la materia iremos abordando este tipo de conceptualizaciones, que proponen
también una reflexión sobre los procesos de identificación de población indígena,
afrodescendiente y migrante latinoamericana desde una mirada histórica y de derechos
humanos.
El campo de la antropología y educación en Argentina se va consolidando en la década
del 90 alrededor del debate sobre los usos de la diversidad en educación, en conjunción
con la atención a los procesos de desigualdad. Trabajos como los de Neufeld y Thisted
(1999) propusieron atender a las formas en que se construyen sentidos y prácticas sobre
las diferencias (culturales, étnicas, sociales, etc.) en distintos espacios educativos. Para
estos autores, esas construcciones son inescindibles de las relaciones de subordinación
a nivel más amplio.9 Algunos de los grandes temas, recortes y problematizaciones que
fueron estructurando la investigación local, han sido:
-El trabajo en contextos educativos-escolares y el atravesamiento del contexto:
desigualdad, derechos y regulaciones estatales, políticas de estado.
-La diversidad en contextos educativos, el discurso de la interculturalidad, usos
de la diversidad “desde arriba” y “desde abajo”.
-Las experiencias formativas de los sujetos y las dimensiones productivas,
expresivas, recreativas, étnico-políticas y vinculadas al mundo de las escuelas.
-Las construcciones de infancia y juventud, las edades de la vida y el ejercicio de
derechos. Las relaciones intra e intergeneracionales. Discusiones sobre las
formas de crianza y cuidado.
Los avances en este campo se enfrentaron al desafío de producir, revisar, discutir y
adaptar las herramientas teóricas para abordar aspectos o dimensiones de la realidad
que no habían sido sistemáticamente documentadas. En este recorrido, se hizo evidente
la necesidad de elaborar herramientas conceptuales y metodológicas para registrar
historias “no contadas”, la dimensión cotidiana de los procesos formativos (escolares y
no escolares), las políticas públicas y las regulaciones estatales de las identidades.
9
Neufeld, M.R. y Thisted, A. (comps.) (1999). “De eso no se habla...” Los usos de la diversidad sociocultural
en la escuela. Eudeba, Buenos Aires.
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¿Cómo ampliar la mirada? ¿Cómo trabajar en un campo tan cargado de nociones de
sentido común y conceptualizaciones pedagógicas? ¿Cómo corrernos de una actitud
valorativa/evaluativa?
Frente a esos interrogantes, los estudios argentinos en antropología y educación
hicieron de la noción de Vida Cotidiana una herramienta conceptual para el análisis,
como opción metodológica y como recorte empírico. Para estos autores el abordaje de
lo Cotidiano está ligado también a la necesidad de dar una mayor visibilidad a la
participación histórica de los sectores populares. La vida cotidiana está impregnada de
contenido histórico; también es el ámbito donde la agencia de los sujetos y su
competencia reflexiva para comprender y transformar el mundo en cada momento
específico y en cada contexto sociocultural particular resultan ineludibles.
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despliegue de nuevas temáticas. Esta periodización es interesante para abordar la
manera en que la antropología de la educación fue definiendo temas, problemas,
perspectivas y recortes que la caracterizan, así como construyendo una mirada sobre la
complejidad de los procesos históricos que signaron el campo político, social y educativo
en los últimos 40 años.
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- la lógica epistemológica de la etnografía es fundamentalmente procesual
(relevar procesos socioculturales y relaciones entre dimensiones estructurales y
la vida cotidiana).
¿Por qué mencionamos todas estas cosas? En principio porque a lo largo de la materia
vamos a ir proponiendo un recorrido sobre el campo estatal, educativo,
sociocomunitario, de los derechos, que reconoce su especificidad en la mirada
antropológica y etnográfica. Nos referimos a una mirada atenta a los procesos locales,
a las voces de múltiples sujetos, a las tensiones en una pluralidad de ámbitos de la vida
cotidiana.
-La pertinencia de la Etnografía y sus Límites
Hay problemas que no pueden estudiarse con este enfoque. En el campo educativo es
importante distinguir entre la etnografía y la práctica educativa. La etnografía no
produce por sí misma una alternativa pedagógica.
Retomemos un ejemplo que resulta muy claro: la distinción saber pedagógico-saber
docente. En su tarea de integrar el conocimiento local, la etnografía puede acercarse a
este saber docente, que raramente se documenta. Este saber no es prescriptivo, como
tradicionalmente se concibió el saber pedagógico. Para abordar el saber docente, como
el quehacer cotidiano de maestras y maestros, hay que relevar la dimensión local de
cualquier práctica, incluso las que trasgreden las normas. Atender a las biografías, a la
historia social e institucional. Reconstruir voces, posiciones, tensiones.
El objetivo no es evaluar o juzgar lo que se aparta de la norma, si no abordar la relación
entre saber docente y saber pedagógico, y la relación entre estos dos conocimientos
locales, tanto fuera como dentro del aula. Las prácticas se orientan por la norma, pero
nunca se limitan a ella. Por eso hay que relevar lo que se Dice y lo que se Hace. La vida
social se caracteriza por su complejidad y el comportamiento humano, por su
historicidad.
-Contribución y destino del conocimiento
Su valor radica en la recuperación del conocimiento local y la memoria histórica. La
etnografía no es una práctica que transforme por sí misma las prácticas educativas,
aunque puede contribuir a procesos encaminados a ello. La transformación social se
origina en los procesos políticos y en acciones colectivas de otro orden, que tienen su
propia lógica. Pero contribuye a comprender procesos.
Por eso en esta materia proponemos una mirada que pueda correrse de la normativa, o
en todo caso, vaya de las normativas a las prácticas. Para eso es importante reconstruir
las huellas de la historia en la documentación oficial, en las tradiciones orales y la
memoria colectiva, en las prácticas y concepciones el mundo. También reconocer la
diferencia entre conocimientos educativos de larga duración y los coyunturales.
Recuperar lo particular y lo significativo desde lo local y situarlo a una escala social más
amplia y en un marco conceptual más general.
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Al describir saberes y prácticas en las escuelas, se trata de comprender procesos sociales
más amplios, avanzar sobre contenidos culturales explícitos o implícitos de lo que se
enseña. Reconocer en ellos las tensiones entre conocimiento escolar/conocimiento
científico y otras formas de saber. Encontrar los límites reales que fijan las condiciones
materiales del trabajo docente, los procesos coercitivos, el poder dominante y estatal y
también otras tramas.
Como plantea la autora, la integración del conocimiento local es posible mediante una
perspectiva teórica que lo reconozca y lo valore como saber válido en el proceso de
investigación. Por ejemplo, el registro de las múltiples lenguas de habla, para abordar el
lugar de la lengua que enseña la escuela y su relación con las otras lenguas de habla
(conocimiento importante para entender cómo juegan las ideologías lingüísticas, y
revisar el lugar de las lenguas subalternizadas). O el registro de distintas experiencias
formativas y comunidades de prácticas de las que participan niñxs y jóvenes, para pensar
la relación entre los saberes, la sociabilidad y las prácticas vinculadas con las
identificaciones. Se busca hacer inteligibles otras realidades, para apreciar
características particulares y comprender lógicas propias.
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EZPELETA, J. Y ROCKWELL, E. “Escuela y clases subalternas”; en Educación y clases subalternas en América
Latina. México: IPN – DIE, 1985.
FOLEY, D. “El indígena silencioso como una producción cultural”. Traducido por Alejandra Cardini.
Cuadernos de Antropología Social, N°19, Sección de Antropología Social, ICA, Facultad de Filosofía y
Letras, UBA, julio 2004.
GARCÍA CASTAÑO Y PULIDO MOYANO: Antropología de la educación. El estudio de la transmisión-
adquisición de cultura, Madrid, Eudema, 1994, capítulo 2, pp. 25-40.
GOMES, A. M. “El proceso de escolarización de los Xakriabá: historia local y rumbos de la propuesta de
educación escolar diferenciada”. En Cuadernos de Antropología Social, Nº 19, Facultad de Filosofía y
Letras, Universidad de Buenos Aires, 2004.
HERSKOVITS, M. “La educación y las sanciones de la costumbre”. En El hombre y sus obras (pp. 343 – 359).
Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 1981.
LEVINSON, B. y HOLLAND, D. “La producción cultural de la persona educada: una introducción”. En
Levinson, Foley y Holland, The cultural production of the educated person. State University of New York
Press, 1996. (Traducción). Pp1-4
MEAD, M. Sexo y temperamento en las sociedades primitivas (Cap. IV). Barcelona: Editorial Laia, 2006
[1935].
NEUFELD M. R.: “El campo de la antropología y la educación en la Argentina: problemáticas y contextos”.
En Pereira Tosta y Rocha: Diálogos sem fronteiras. Ed Auténtica, 2011.
NEUFELD M.R. y THISTED, J.A. (comps). De eso no se habla...” los usos de la diversidad sociocultural en la
escuela. Eudeba, 1999.
RIVAL, L. “La educación formal y la producción de ciudadanos modernos en la Amazonia ecuatoriana”. En
Levinson, Foley y Holland, The cultural production of the educated person. State University of New York,
1996
ROCKWELL, E. “La relevancia de la etnografía”. En La experiencia etnográfica. Historia y cultura en los
procesos educativos. Buenos Aires: Paidós, 2009. (Selección de páginas)
ROCKWELL, E.: “La dinámica cultural en la escuela”, en Alvarez, A. y Del Río (eds.): Hacia un currículum
cultural: un enfoque vygotskiano. Madrid. 1996.
WILLIS, P. “Introducción y capítulo 2: Elementos de una cultura”. En Aprendiendo a trabajar, o cómo los
chicos de clase obrera obtienen trabajos de clase obrera. Madrid: Editorial Akal, 1983.
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