Audiencias Unilaterales

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Universidad Mariano Gálvez de Guatemala

Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales


Clínica Procesal Penal

“Audiencias Unilaterales”

Ian Rodrigo Castillo Castillo - 050-21-16884

Guatemala 14 de abril. de 2024


Orden de Aprehensión

Fundamento Legal:
Artículo 257 del código procesal penal de Guatemala.
Definición:
La orden de aprehensión en Guatemala es un mandato judicial que autoriza la
detención de una persona sospechosa de haber cometido un delito. Según el
Código Procesal Penal en su articulo 257, la policía puede aprehender a
alguien sorprendido en flagrancia, es decir, en el acto de cometer el delito o
inmediatamente después, con pruebas que sugieran su participación. Si la
aprehensión no se realiza en el lugar del hecho, la policía puede perseguir al
delincuente siempre que haya continuidad entre el delito y la persecución.

Cualquier persona también puede realizar la aprehensión en casos de


flagrancia y debe entregar al detenido y las pruebas a la autoridad competente
lo antes posible. El Ministerio Público puede solicitar al juez la aprehensión de
un acusado si considera necesario su encarcelamiento, y el juez puede ordenar
medidas sustitutivas de la privación de libertad o liberar al sindicado.
En resumen, la orden de aprehensión es una herramienta legal que permite a
las autoridades actuar rápidamente en casos de delitos flagrantes y garantiza
que los sospechosos sean llevados ante la justicia, respetando el debido
proceso y los derechos humanos.

Análisis
Así como lo establece el artículo 257 del Código Procesal Penal de Guatemala,
la emisión de una orden de aprehensión es un paso crucial en el proceso
penal, ya que implica la privación de libertad de una persona sospechosa de
cometer un delito. Esta medida cautelar se toma cuando el Ministerio Público
considera que existen suficientes elementos para sostener la acusación y que
la detención del acusado es necesaria para el curso adecuado de la
investigación y para garantizar la comparecencia del mismo ante la justicia.
La solicitud de orden de aprehensión debe fundamentarse en pruebas
suficientes que indiquen la participación del individuo en el delito y la necesidad
de su encarcelamiento. Esto puede incluir testimonios, evidencia física,
informes periciales u otros elementos probatorios.
Una vez emitida la orden, las autoridades policiales tienen la responsabilidad
de ejecutarla, asegurando que el acusado sea aprehendido y puesto a
disposición del juez competente. El juez que controla la investigación evaluará
si la medida de privación de libertad es necesaria o si pueden aplicarse
medidas sustitutivas, como la prisión preventiva o la libertad bajo fianza,
garantizando así el equilibrio entre los derechos del acusado y la necesidad de
mantener el orden y la seguridad pública.
La orden de aprehensión es, por lo tanto, una herramienta legal que busca
asegurar la efectividad del proceso penal y proteger los intereses de la
sociedad, al tiempo que garantiza el respeto de los derechos fundamentales de
los individuos involucrados en el proceso judicial. Su emisión y ejecución deben
realizarse de acuerdo con los principios del debido proceso y el respeto a los
derechos humanos.

Allanamiento, inspección y registro


Fundamento legal:
Artículos 187, 188, 189, 190, 191, 192, 193 del código procesal penal de
Guatemala.

Definición:
El allanamiento, la inspección y el registro son términos utilizados en el
contexto legal para referirse a acciones autorizadas por la autoridad judicial
para investigar y recolectar evidencia en relación con un presunto delito.

 Allanamiento: Se refiere a la entrada autorizada por un juez o tribunal en


un lugar específico, como una residencia, edificio o propiedad, con el
propósito de buscar evidencia relacionada con un delito. El allanamiento
generalmente implica una orden judicial y se lleva a cabo con la
presencia de autoridades policiales u otros funcionarios designados.
 Inspección: Consiste en la observación y evaluación de personas,
lugares o cosas con el fin de verificar su estado, buscar posibles
vestigios del delito o identificar la presencia de personas buscadas por la
justicia. La inspección puede llevarse a cabo tanto en lugares públicos
como privados, y puede requerir autorización judicial dependiendo de la
situación específica.
 Registro: Implica la búsqueda sistemática y detallada de personas,
lugares o cosas con el propósito de encontrar evidencia relacionada con
un delito. Durante un registro, las autoridades pueden examinar objetos,
documentos, dispositivos electrónicos u otros elementos en busca de
pruebas que puedan ser relevantes para la investigación criminal. El
registro generalmente se realiza con una orden judicial, aunque pueden
existir circunstancias excepcionales que permitan realizar registros sin
autorización previa en casos de emergencia o riesgo inminente.
En resumen, el allanamiento, la inspección y el registro son herramientas
legales utilizadas por las autoridades para investigar delitos y recopilar
pruebas, pero cada uno implica diferentes niveles de intrusión y requerimientos
legales dependiendo de la situación específica.

Análisis:
Los artículos 187 al 193 del Código Procesal Penal de Guatemala establecen
los procedimientos y requisitos para llevar a cabo inspecciones, registros y
allanamientos en el contexto de una investigación criminal. Estas acciones se
justifican cuando existen motivos suficientes para sospechar la presencia de
evidencia relacionada con un delito o la ocultación de personas implicadas.
Para realizar una inspección o registro, se requiere autorización judicial.
Durante la diligencia, se debe levantar un acta detallada que describa lo
acontecido, incluyendo cualquier evidencia relevante encontrada. Si las
personas presentes en el lugar se oponen a la inspección, pueden ser
compelidas por la fuerza pública.
Los registros en lugares cerrados están restringidos a ciertos horarios,
generalmente entre las seis de la mañana y las seis de la tarde, a menos que
existan circunstancias excepcionales. Además, se establecen condiciones
específicas para realizar allanamientos en dependencias cerradas, como una
morada o casa de negocio. Se requiere una orden escrita del juez, a menos
que existan circunstancias de emergencia que pongan en peligro la vida o
existan indicios claros de que se está cometiendo un delito.
La orden de allanamiento debe contener información detallada, incluyendo la
identificación del lugar a ser registrado, la autoridad responsable y los motivos
de la diligencia. Esta orden tiene una duración máxima de quince días, a
menos que circunstancias especiales justifiquen su extensión.
Durante un allanamiento, se notifica la orden al habitante del lugar y, en caso
de resistencia, se puede recurrir a la fuerza pública. Al finalizar el registro, se
asegura que los lugares queden cerrados adecuadamente.
En el caso de lugares públicos, se puede prescindir de la orden de
allanamiento con el consentimiento de las personas responsables del lugar, a
menos que ello perjudique la investigación, en cuyo caso se requerirá la orden
judicial.

Escuchas Telefónicas
Fundamento legal:
Artículos 48 al 71 de la ley contra la delincuencia organizada.
Definición:
Las escuchas telefónicas son la interceptación, grabación y reproducción de
comunicaciones para investigar delitos según la ley contra el crimen
organizado. Se necesita autorización judicial, solicitada por fiscales, detallando
el delito, los números involucrados y justificando la necesidad. La autorización
dura máximo 30 días y puede prorrogarse. El fiscal informa periódicamente al
juez sobre el progreso. Solo las grabaciones obtenidas legalmente se pueden
usar como pruebas, y quienes participan deben mantener la confidencialidad.
Las voces interceptadas pueden ser utilizadas como evidencia en el proceso
penal.

Análisis:
Las interceptaciones telefónicas y otros medios de comunicación en base a los
artículos de la ley contra el crimen organizado revelan un marco legal integral
para la aplicación de esta medida como herramienta para prevenir, investigar y
combatir delitos graves, especialmente aquellos cometidos por grupos
delictivos organizados. Algunos puntos clave incluyen:

1. Autorización judicial: Se requiere autorización judicial para llevar a


cabo interceptaciones de comunicaciones. Los fiscales del Ministerio
Público son los encargados de solicitar esta autorización, la cual debe
estar fundamentada en la necesidad e idoneidad de la medida, así como
en la descripción detallada del delito investigado y los medios de
comunicación involucrados.
2. Competencia y requisitos: Los jueces de primera instancia del ramo
penal son competentes para autorizar las interceptaciones. Las
solicitudes deben incluir información específica sobre el delito
investigado, los medios de comunicación a interceptar, las diligencias
realizadas hasta el momento y los datos de las personas afectadas por
la medida, entre otros requisitos.
3. Control y supervisión judicial: Los jueces tienen la responsabilidad de
supervisar el proceso de interceptación para garantizar que se cumplan
todas las formalidades legales y que solo se intercepten las
comunicaciones autorizadas. Además, deben verificar que no se realicen
interceptaciones no autorizadas y realizar visitas de control
personalmente al menos una vez dentro del período autorizado.
4. Duración y prórroga: La autorización de interceptación tiene una
duración máxima de treinta días, pero puede prorrogarse según lo
establecido en la ley. El Ministerio Público debe solicitar la prórroga con
anticipación y justificar la necesidad e idoneidad de continuar con la
medida.
5. Protección de datos y derecho a la privacidad: Se establecen
medidas para garantizar la protección de datos personales y el respeto
al derecho a la privacidad de las personas afectadas por las
interceptaciones. Se excluye cualquier información personal o íntima que
no sea relevante para la investigación del delito.

La ley establece un marco legal riguroso para la aplicación de las


interceptaciones como medida de investigación, garantizando al mismo tiempo
el respeto por los derechos individuales y la integridad del proceso judicial.

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