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TÉCNICA ::: SISTEMAS :::

EVALUACIÓN DEL RIESGO

DE DAÑOS EN EDIFICIOS
REFERIDO A LOS MOVIMIENTOS DE SUELOS
EN LA CONSTRUCCIÓN DE TÚNELES Y EXCAVACIONES

El transporte subterráneo dentro de las grandes ciudades, ha tomado auge

en los últimos años debido a la necesidad de descongestionar el tránsito
vehicular en la superficie.
La construcción de túneles y las excavaciones, inherentes al desarrollo de
este tipo de emprendimientos, provocan un impacto medioambiental que es
necesario evaluar. Una parte importante de este impacto son los movimien-
tos del terreno que inevitablemente vienen asociados a este tipo de obras.
Los criterios de evaluación preliminar del riesgo de daños a los edificios
que pueden provocar las excavaciones subterráneas, constituyen una herra-
mienta fundamental para poder decidir la adopción, o no, de medidas pro-
tectoras que atenúen los movimientos del terreno y, en consecuencia, los
eventuales daños. La sensibilidad que el tema de daños provoca y el coste
económico añadido que comporta, marcan la importancia de los criterios de
Por Güelfo Guillermo Gagliardi evaluación de daños y pone de manifiesto que, su interpretación y aplica-
Ingeniero en Construcciones (UNLP) ción en cada caso, debe hacerse con gran rigor y cuidado.
Ingeniero Civil (UNLP) Ingeniero En este artículo se vuelca la experiencia obtenida, en este tema, en las
de Caminos, Canales y Puertos obras de la Línea 9 del Metro de Barcelona, España, que es un emprendi-
GISA (GESTIÓN DE INFRAESTRUCTURAS miento de transporte subterráneo de gran envergadura. La longitud de la
DE LA GENERALITAT DE CATALUNYA) – Línea 9, una vez concluidas las obras, será de 44 km, con 47 estaciones y
España (*) 14 intercambiadores con otras líneas de subterráneos y ferrocarriles. La
excavación de los túneles se realiza principalmente con tuneladoras (TBM)
de gran diámetro del tipo EPB (presión de tierras balanceada). Se prevé que
a finales de 2008 estarán en funcionamiento cinco tuneladoras simultánea-
mente, tres de 12 m de diámetro y dos de 9,40 m de diámetro.
En el caso de la Línea 9, el criterio adoptado para evaluar el riesgo de
daños en edificios, provocados por el paso de las tuneladoras, es el de
Boscardin y Cording.
La aplicación de este criterio de evaluación, por parte de los diferentes
implicados en el proyecto de los túneles de la Línea 9, no ha sido uniforme
y se han revelado, en diversos proyectos, presentaciones e informes, dife-
rentes interpretaciones para la determinación de los parámetros necesarios
para su implementación.

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El objetivo de este artículo es Los criterios de evaluación de daños son muy conservadores, fundamen-
analizar la interpretación y aplica- talmente porque las hipótesis en que se basan, como veremos más adelante,
ción de los criterios de evaluación generalmente ignoran la rigidez propia del edificio, pues postulan que este
de riesgo de daños en edificios. adapta su deformación a la forma de la subsidencia del terreno. En conse-
También se exponen algunas medi- cuencia, los resultados de la “evaluación detallada” normalmente conduci-
das a adoptar, con el objetivo de rán a una reducción del nivel de posibles daños.
acotar la diversificación de las Por lo tanto, la necesidad técnica de medidas preventivas debería surgir
interpretaciones para que la imple- siempre como consecuencia del resultado de la “evaluación detallada”.
mentación de estos criterios refleje
la uniformidad necesaria para la CLASIFICACIÓN DE DAÑOS
toma de decisiones. Normalmente se distinguen tres categorías de daños en edificios debidos
a movimientos del terreno, según el tipo de afección que causan:
ALCANCE DE LOS CRITERIOS
DE EVALUACIÓN DE RIESGOS • I) afectan el aspecto o estética del edificio.
Los criterios de evaluación de • II) afectan la funcionalidad y estado de servicio del edificio.
riesgos que comentamos solo con- • III) afectan la estabilidad del edificio.
ducen a la identificación de aquellos
edificios que, como resultado de la Según la importancia de los desplazamientos de la cimentación del edificio
evaluación, reflejen la posibilidad los daños pueden progresar de la categoría “I” a la “III”. Burland y otros auto-
de estar afectados por la ejecución res (1977) [1] resumiendo los trabajos de Jenning y Kerrich (1962) [2], U.K.
de túneles y/o obras subterráneas. National Coal Board (1975) [3] y los de MacLeod y Littlejohn (1974) [4] propu-
Para los edificios que, según estos sieron una clasificación más detallada que se ha impuesto como referencia nor-
criterios, superen un determinado mal, y generalizado su uso, cuando se evalúa el riesgo de daños en edificios.
umbral de riesgo de daños (definido En el Anexo I adjuntamos esta clasificación. En ella se definen seis cate-
para el conjunto de las obras de un gorías numeradas de 0 a 5 en orden creciente de la severidad de los daños.
determinado proyecto), habrá que Las categorías 0, 1 y 2 están relacionadas con los daños estéticos, la 3 y 4
realizar una “evaluación detallada”. con los daños funcionales y la 5 con los que afectan la integridad estructu-
Esta evaluación detallada tendrá en ral del edificio. Un aspecto significativo que resaltan los autores es la impor-
cuenta las características particula- tancia del límite entre las categorías de daños 2 y 3, o de otra manera, el
res del edificio (orientación, estruc- límite entre daños estéticos y funcionales.
tura, cimentación, estado de conser- El análisis de numerosos casos de edificios estudiados revela que los
vación, movimientos previos, etc.) y daños hasta la categoría 2 pueden deberse a diferentes causas, desde las pro-
el proceso de excavación (caracte- pias de la estructura (contracción, efectos térmicos, etc.) hasta las debidas al
rísticas de la tuneladora y/o maqui- terreno en donde están cimentados. Normalmente es muy difícil determinar
naria de excavación, tipo de soste- el origen de esos daños y a menudo se deben a una combinación de causas.
nimiento, etapas constructivas, etc), Si los daños exceden la categoría 2 la causa es más fácil de identificar y
así como las condiciones tensode- generalmente tiene que ver con movimientos del terreno. Según esta litera-
formacionales del terreno y su inte- tura la mayoría de los edificios son considerados de “bajo riesgo” si la pre-
racción con la estructura, si las con- dicción del grado de daños cae dentro de las tres primeras categorías (0, 1 y
diciones del caso lo exigieran. 2). Dentro de estas categorías la integridad estructural del edificio no está

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en riesgo y los daños pueden ser relacionar la deformación crítica de tracción ∑crit con sus dimensiones (L,
reparados en forma rápida y econó- longitud; H altura), constantes elásticas (E, módulo de deformación longitu-
mica. Por estas razones es impor- dinal; G, módulo de deformación transversal; U, relación de Poisson) y con
tante este umbral. la relación de deformación (Δ/L, donde Δ es el desplazamiento relativo, defi-
nido en el Apéndice 1 del artículo [5]. Ver Anexo III).
CRITERIO DE BOSCARDIN La deformación crítica de tracción ∑crit puede producirse de dos mane-
Y CORDING ras extremas. Una manera, es en el estado de flexión pura (deformación de
Este criterio de evaluación está des- flexión pura ∑bmax), que se origina en las fibras externas y que produce
crito en el artículo de referencia [5]. fisuras perpendiculares al eje de la viga. La otra se produce en el estado de
El concepto en que se basa el corte puro (deformación de corte puro ∑bmax) que se origina en el eje neu-
método formula que los daños en tro, está inclinada aproximadamente 45º y produce fisuras en diagonal. En
paredes de carga de mampostería se general ambas maneras actúan simultáneamente y se debe averiguar, en
deben al agrietamiento que sobre- cada caso, cual de ellas es la crítica. En general cuando la relación altura /
viene cuando es sobrepasada la longitud del edificio (H/L) es pequeña, la influencia de las deformaciones
capacidad a tracción del material. por corte es también pequeña. Por ejemplo, para el caso planteado de viga
Polshin y Tokar (1957) [6] asociaron equivalente, que es el de una viga simplemente apoyada en sus extremos,
la aparición de fisuración visible con carga concentrada en el centro del vano, si la relación H/L es de 0,1
(comienzo de daños observables) a (longitud diez veces la altura) la contribución del esfuerzo de corte a la
la deformación crítica de tracción deformación de la viga es del 4 % aproximadamente y si la relación es 1, la
∑crit del material. contribución es del 400 %. Es decir, la contribución de la deformación debi-
Burland y Wroth (1974) [7] apli- da al esfuerzo cortante, respecto a la de flexión, se incrementa 100 veces
caron esta idea de la aparición de cuando la relación H/L se incrementa 10 (relación cuadrática).
fisuras, cuando se sobrepasa la La contribución de cortante es proporcional a la relación E/G y los
deformación crítica de tracción comentarios del párrafo anterior tienen validez para una relación de módu-
∑crit, a una viga simple que ideali- los E/G de 2,6, es decir, para un coeficiente de Poisson de 0,3.
za el comportamiento de los edifi- Boscardin y Cording introducen la distorsión angular ß, que es una medi-
cios. Para ello suponen que el edifi- da de las deformaciones de cortante, como parámetro a relacionar con la
cio se adapta al perfil del terreno deformación crítica de tracción ∑crit, en lugar de la relación de deforma-
deformado por una causa que no ción Δ/L. La distorsión angular ß‚ es el máximo cambio de pendiente a lo
sea su propio peso. Las solicitacio- largo de la viga equivalente y corresponde a la pendiente en los extremos.
nes, inherentes a la excavación de Para llegar a esta conclusión Boscardin y Cording presentan, en el artículo
túneles y/o obras subterráneas, que comentado, curvas donde relacionan la distorsión angular ß en la relación
provocan los daños en el edificio, L/H de la viga, para una amplia variación de la relación E/G. En ellas obser-
son debidas exclusivamente a la van que, para E/G altos (mayor ductilidad a cortante) la aparición de daños
deformación impuesta por el terre- está gobernada por deformaciones de cortante en una amplia gama de la
no. Es decir, no se analizan los esta- relación L/H. Para E/G bajos, la aparición de daños gobernados por defor-
dos tensionales previos del terreno maciones de cortante se reduce a una gama pequeña de la relación L/H,
y de los edificios. generalmente menor que la unidad.
De las fórmulas de la teoría de la No obstante, como la característica de las deformaciones inducida por
elasticidad, aplicadas a una viga excavaciones es que se propaguen afectando gradualmente a la estructura,
simplemente apoyada, se puede siempre habrá una relación L/H baja que las afecte que irá progresivamen-

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te creciendo. Por lo tanto, en general, originan las deformaciones ∑h y ∑bmax, tienen la misma dirección y por-
la aparición de fisuras y daños esta- que se supone que la deformación de tracción horizontal ∑h es uniforme en
rá controlada por deformaciones de toda la altura de la viga. En la zona de corte puro la composición se debe
cortante. Esta situación es corrobo- realizar con la ayuda del círculo de Mohr de deformaciones pues, en este
rada en la práctica pues es típico que caso, ∑h tiene dirección horizontal y ∑dmax tiene dirección diagonal
la aparición de fisuras debidas a ten- (aprox. 45º).
sión diagonal es previa a la de fisu- Estos conceptos están plasmados en un gráfico que se ha generalizado
ras por flexión. para evaluar el riesgo en edificios, a pesar de que se ha desarrollado con
Por lo anterior, los autores llegan hipótesis muy concretas. Es válido para estructuras con paredes de carga de
a la conclusión que la distorsión mampostería, está basado en el análisis de una viga equivalente, como ya
angular ß, es un parámetro apropia- describimos, con el eje neutro coincidiendo con uno de los bordes y para
do para correlacionar con el com- una relación L/H igual a uno.
portamiento de los edificios cuando Como primera aproximación se aplica a otros tipos de edificios (p.e.
son sometidos a deformaciones estructuras de hormigón armado aporticadas o con núcleos de rigidización)
inducidas por excavaciones. El otro aun considerando que el método sobrestima los daños previstos. En el grá-
concepto importante que introducen fico están representadas curvas que relacionan la distorsión angular ß (abs-
es que, tanto la relación de deforma- cisas) con la deformación de tracción horizontal ∑h (ordenadas). Las curvas
ción Δ/L, como la distorsión angular están basadas en las ecuaciones comentadas más arriba y representan un
ß, necesarias para producir la defor- valor dado de la deformación crítica de tracción ∑crit. Los valores de la
mación crítica de tracción ∑crit., deformación crítica de tracción ∑crit que representan son 0,0005; 0,00075;
decrecen cuando la estructura está 0,0015 y 0,003. Las curvas delimitan cinco superficies (zonas) que represen-
sometida a deformación de tracción tan un nivel de daños que se denominan Despreciables, Muy Ligeros,
horizontal ∑h. Ligeros, Moderados a Severos y Severos a Muy Severos. Estos valores lími-
Inversamente a lo que ocurre con te, que son los de intersección de cada curva con el eje vertical (distorsión
las deformaciones del terreno debidas angular ß igual a cero) coinciden con los recomendados por “National Coal
al peso propio de las estructuras, con Board” [3] para estructuras de 30 a 40 m de longitud.
las deformaciones inducidas por En el Anexo I se adjuntan las tablas donde se describen los niveles de
excavaciones subterráneas aparecen daños y la relación entre estos niveles y la deformación crítica de tracción
deformaciones horizontales que se ∑crit.
superponen con las derivadas de las
deformaciones verticales. APLICACIÓN DEL CRITERIO DE BOSCARDIN Y CORDING
Por lo tanto, para alcanzar el Para aplicar el criterio y evaluar el riesgo de daños en los edificios es
estado de deformación crítica de necesario disponer de curvas de desplazamientos horizontales y verticales
tracción ∑crit, se debe componer la superficiales (o a nivel de la cimentación) del terreno, provocadas por una
deformación de tracción horizontal excavación subterránea y la localización de los edificios con sus característi-
∑h con la deformación de flexión cas y dimensiones. Estas curvas de subsidencias (cubetas de asiento, para los
pura ∑bmax y, por otro lado, con la desplazamientos verticales) pueden ser obtenidas como resultado de cálculos
deformación de corte puro ∑dmax. sobre modelos, que reproducen el proceso de excavación, o directamente de
En la zona de fibras extremas la adaptación de curvas semi-empíricas al mismo proceso. Un aspecto muy
(flexión pura) la composición es la importante de la aplicación de este método es la determinación de la altura
suma directa, pues las tensiones que y longitud del edificio.

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La altura debe ser considerada desde el techo hasta la cimentación del de deformación crítica de tracción
edificio. ∑crit. para categorizar los daños.
La longitud a considerar en los cálculos depende de la localización rela- Además, introducen la distorsión
tiva del edificio respecto a la cubeta de asientos. Se adopta la hipótesis, angular ß, en lugar de la relación de
normalmente reconocida, de analizar al edificio separadamente a uno y otro deformación Δ/L, como parámetro
lado del punto de inflexión de la curva de desplazamientos verticales, en el más idóneo para representar el com-
caso que este punto caiga dentro de los límites del edificio. Otra limitación portamiento de los edificios ante las
es la de no considerar, para cubetas provocadas por un túnel simple, la por- deformaciones inducidas por las
ción del edificio que se extiende mas allá de 2,5 veces la distancia del punto excavaciones.
de inflexión al eje de la cubeta (eje del túnel). El punto de inflexión de la Posteriormente, Burland y otros
cubeta de una excavación subterránea separa dos zonas características, una [8][9] adoptan estos nuevos concep-
convexa (hog) y otra cóncava (sag). En el caso de cubetas de asentamiento tos introducidos por BC, aunque
provocadas por la excavación de un túnel, el punto de inflexión, también mantienen la relación de deforma-
separa una zona donde las deformaciones horizontales son de tracción ción Δ/L y remplazan la denomina-
(zona hog) de otra donde son de compresión (zona sag). ción de deformación crítica de trac-
Por lo tanto habrá que definir, según corresponda, una longitud para la zona ción ∑crit por deformación límite
de Hogging (Lh) y otra para la de Sagging (Ls). (Ver gráficos del Anexo IV). de tracción ∑lim, por considerar a
Luego habrá que calcular los parámetros de distorsión angular ß y de estos límites como parámetros de
deformación de tracción horizontal ∑h, correspondientes a esas longitudes, servicio que pueden ser variados
que son las coordenadas del punto a insertar en el gráfico. De acuerdo con para tener en cuenta distintos mate-
la zona a la que pertenece el punto así determinado, se puede evaluar el riales y estados límites de servicio.
riesgo de daños. Los parámetros ß y ∑h que permiten la localización del Burland, en [8], destaca las limita-
punto en el gráfico, están perfectamente definidos en el artículo que justi- ciones del gráfico de BC y presenta
fica el método. uno similar, aunque en él se relaciona
En el apéndice I del artículo [5], aparece la definición de distorsión angu- ∑h con Δ/L en lugar de hacerlo con ß,
lar ß, con gráficos para mejorar su interpretación. Este parámetro también donde enfatiza que se trata de un caso
está perfectamente definido en los artículos de las referencias [8] y [9] que, particular para L/H igual a uno (1).
por otra parte, coinciden con los de la definición anterior. Adjuntamos en Entre esas limitaciones resalta una que
el Anexo II y III las definiciones y gráficos de los referidos artículos. es muy importante: Para determinar la
distorsión angular ß‚ es necesario
MÉTODO DE EVALUACIÓN UTILIZADO EN LA EXTENSIÓN DEL METRO conocer la rotación de cuerpo rígido ω
DE LONDRES (JUBILEE LINE EXTENSION) POR BURLAND Y OTROS (Tilt) de la estructura o parte de ella
Ha habido una interacción entre el método de Boscardin y Cording (en (ver definiciones y gráficos adjuntos).
adelante BC) y el de Burland y Wroth (en adelante BW). BC [5] se basan en Este parámetro ω ofrece dificultades
la idea de BW [7] de utilizar la viga equivalente para analizar los edificios e para su identificación.
introducen nuevos conceptos para desarrollar su método de evaluación. Además, alertan que no se debe
Estos nuevos conceptos son la deformación de tracción horizontal ∑h, pre- confundir distorsión angular ß con
sente en las deformaciones del terreno debidas a excavaciones, y los niveles deformación angular α que es la

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rotación entre tramos de referencia en este artículo, el de BW y el de BC, puesto que en principio deben arrojar
adyacentes. Por estas razones resultados similares. También ayuda en el mismo sentido programar analí-
Burland y otros [8][9] prefieren uti- tica y gráficamente el proceso de aplicación. En el Anexo V adjuntamos
lizar la relación de deformación Δ/L tablas y gráficos de un ejemplo con los datos de entrada y salida progra-
como medida de la distorsión de un mados en una hoja de cálculo.I
edificio. En el Anexo IV se presentan
las figuras que aclaran el significado Referencias
de los parámetros que se han defini- [1] Burland, Broms and de Mello, 1977. Behaviour of foundation and structures – SOA Report, session
do en el informe. 2, Proc. 9 th int. Conf. SMFE, Tokio, 2; 495-546.
[2] Jenning and Kerrich (1962) The heaving of buildings and the associated economic consequences,
APLICACIÓN DE LOS CRITERIOS with particular reference to the Orange Free Stated Goldfield. The Civ. Engr. In South Africa, 5; 5, 122.
DE EVALUACIÓN DEL RIESGO [3] National Coal Board (1975). Subsidence engineers handbook. National Coal Board Production Dept.,
DE DAÑOS EN LOS EDIFICIOS London, England.
La aplicación de los criterios de eva- [4] MacLeod and Littlejohn (1974). Discussion on Session 5. Conf. Settlement of Structures, Cambridge,
luación a menudo no resulta coherente Pentech Press, London, pp 792-795.
entre los profesionales que representan [5] Boscardin y Cording “Building response to excavation-induced settlement” Journal of Geotechnical
a distintos responsables de una obra Engineering, Vol 115, Nº 1 de enero de 1989.
determinada (Proyectistas, Dirección de [6] Polshin and Tokar “Maximum allowable non-uniform settlement of structure” Proc. 4th Int´l. Conf.
Obra, Contratistas, Consultores, etc.). On Soil Mech. And Found. Engr., 1, London, England, 402-405, 1957.
La interpretación de estos criterios es [7] Burland and Wroth, C.P. 1974. Settlement of buildings and associated damage. SOA Review. Conf
dispersa y, a veces contradictoria, Settlement of structure”, Cambridge, pentech Press, London, pp 611-654.
sobre todo a la hora de la determina- [8] Burland “Assessing the risk of building damage due to tunnelling – lessons from the Jubile line
ción de los parámetros que sirven para Extension, London” Chapter 3 Assessment methods used in desing – Vol 1 Ed. Ciria - Thomas Telford, 2001.
su aplicación. Debe procurarse que la [9] Burland, Standing and Jardine “Assessing the risk of building damage due to tunnelling – lessons
evaluación del riesgo de daños en los from the Jubilee Line Extension, London” Proc. 2nd Int. Conference on Soil Structure Interaction in
edificios sea coherente y consensuada Urban Civil Engineering – Zurich / March 2002.
entre los diferentes entes responsa- [10] Potts and Addenbrooke “A structure´s influence on tunnelling-induced ground movements” Proc.
bles de la construcción y gestión de Instan Civ. Engrs Geotech. Engng, 125, Apr., 109-125, 1997.
un determinado proyecto, para que la
toma de decisiones sobre la disposi- Nota: Los Anexos mencionados en esta nota se encuentran disponibles en la página
ción de protecciones para mitigar los Web del CPIC, www.cpic.org.ar
eventuales daños sea homogénea y
equitativa desde el punto de vista
técnico.
(*) PERFIL DEL AUTOR: Ingeniero en Construcciones - Universidad Nacional de La Plata – Argentina,
Una medida que tiende a eliminar Ingeniero Civil - Universidad Nacional de La Plata – Argentina, Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos.
divergencias en la aplicación es que Ex-Jefe de Trabajos Prácticos en la Universidad de Buenos Aires y en la Universidad Tecnológica Nacional
la evaluación se realice utilizando los de "Tecnología del Hormigón". Jefe de Cálculo de la Línea 9 del Metro de Barcelona.
dos métodos mencionados y descritos

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