Analisis Política Nacional para El Acceso de Las Mujeres A Una Vida Libre de Violencia
Analisis Política Nacional para El Acceso de Las Mujeres A Una Vida Libre de Violencia
Analisis Política Nacional para El Acceso de Las Mujeres A Una Vida Libre de Violencia
PRESENTADO POR:
Candelario Tunaca
Carlos Edgardo Tovar Galdámez
Jacquelin Vanessa Delgado
Jose Salvador Argueta Argueta
Kevin Alexander Guevara Perez
Manuel de Jesús Barrera Rodriguez
FACILITADOR:
Mtro. Dionicio Ernesto Alonso Sosa
ABRIL 2018
San Salvador, El Salvador, Centro América
ÍNDICE
Páginas
Introducción ……………………………………………………………………………… i
Generalidades ……………………………………………………………………………… 1
El Derecho Humano de Igualdad, incidencia principal de las políticas públicas en América
Latina ……………………………………………………………………………… 3
La práctica de los Estados podría afectar Derechos Humanos de las mujeres……. 4
Instrumentos Internacionales y Regionales que consagran el derecho humano a la
igualdad y no discriminación ……………………………………………………………… 6
Obligaciones del Estado para cumplir los compromisos adquiridos en los instrumentos
internacionales……………………………………………………………………………… 8
Las observaciones de los órganos de los Tratados en relación con la temática…… 10
Recomendaciones específicas al caso de estudio por los Órganos de los Tratados 11
Conclusiones……………………………………………………………………………….. 13
Recomendaciones…………………………………………………………………………. 14
Bibliografía………………………………………………………………………………….. 15
i
INTRODUCCIÓN
La violencia contra las mujeres es un factor que limita a que estas se desarrollen
en igualdad de condiciones en relación con el hombre, a nivel de la región
latinoamericana se observa que los gobierno muestran voluntad política en torno al tema y
a los diferentes compromisos adquiridos cuando adoptaron diversos instrumentos
internacionales y regionales que buscan proteger los derechos de las mujeres.
En la lucha contra la violencia de la mujer, la promulgación de legislación para
abordar dicha problemática es un primer paso. Sin embargo, para abordar a fondo dicha
problemática no basta con ello, es fundamental también elaborar planes de desarrollo,
políticas públicas y estrategias que faciliten dicha aplicación, que las personas e
instituciones responsables de la materialización conozcan a fondo y se comprometan a
aplicarla de manera adecuada y teniendo en cuenta la perspectiva de género.
Por otro lado, la sociedad juega un papel importante en el tema y se concientice a
través de la divulgación cuales son los roles que deben jugar en su comunidad en apoyar
a las víctimas y sobre todo exigir a las autoridades la aplicación de una justicia pronta y
eficaz, sobre todo resarcir el daño a las víctimas, plasmar dichas directrices en planes de
acción, campañas, acuerdos interinstitucionales, planes locales y regionales, sería una
buena forma de garantizar la aplicación eficaz de las leyes relativas a la violencia contra la
mujer.
En la investigación se ahonda en los instrumentos internacionales y regionales que
han sido adoptados por El Salvador y que buscan proteger los derechos de las mujeres,
también se analizan las observaciones que los órganos de los tratados hacen al Estado
en torno a los dos últimos informes presentados por este, se determina observaciones
específicas que influyen directamente en la temática investigada.
ii
POLÍTICA NACIONAL PARA EL ACCESO DE LAS MUJERES A UNA VIDA LIBRE DE
VIOLENCIA.
1. Generalidades.
“Todos son iguales ante la ley”, así lo establece el Art. 7 de la Declaración Universal
de los Derechos Humanos, y la mayoría de las cartas magnas de los 33 países de la
región Latinoamericana, si esto se aplicara literalmente ¿Por qué es necesario establecer
que las mujeres son consideradas por la Organización de las Naciones Unidas (ONU)
como un grupo vulnerable?, en ese sentido con motivo de la conmemoración del Día
Internacional de Eliminación de la Violencia contra la Mujer 1, el Secretario General de la
ONU expreso que “a nivel mundial, una de cada tres mujeres ha sufrido algún tipo de
violencia física o sexual por parte de su pareja o esposo, además otras 750 millones de
mujeres fueron casadas antes de los 18 años y más de 250 millones han sufrido de
mutilación genital”.
Es decir, que, para entender la problemática de la violencia contra las mujeres,
primero se deben desarrollar algunos conceptos tales como: violencia doméstica,
violencia de género, violencia intrafamiliar, y violencia contra las mujeres, pues en la
mayoría de los casos estos conceptos son utilizados como equivalentes o sinónimos,
pero ciertamente ninguno se refiere a las mismas situaciones, aunque pudieran ser
similares.
En efecto, y en un sentido amplio la violencia se refiere a todo acto que cause daño
o sufrimiento, pudiendo ser físico, psicológico, patrimonial, emocional o económico por
cita algunos criterios.
Conviene subrayar, que para ONU Mujeres, se habla de violencia domestica
cuando “esta es perpetrada en un ámbito privado vale decir el hogar, independientemente
si el agresor es el hombre o la mujer” 2; también define a la violencia intrafamiliar a toda
expresión de violencia ejercida por personas que integran una familia esta se puede
manifestar en ámbito privado o público y al igual que la anterior no hace diferencia entre
el sexo del agresor, igualmente la violencia de genero debe entenderse como la violencia
ejercida contra una persona en razón de su identidad o condición de género.
Por otra parte, la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar
la Violencia contra la Mujer (Convención de Belem do Pará) conceptualiza esta como
“cualquier acción o conducta, basada en su género, que cause muerte, daño o
sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto en el ámbito público como el
privado”3 este tipo de violencia es la que más ha marcado a la mujer en Latinoamérica, ya
que por la falta de educación y por el machismo inculcado culturalmente en la sociedad
hacen que los hombres cometan todo tipo de acciones violentas en contra de mujeres.
En consecuencia, los datos obtenidos en la investigación realizada por ONU
Mujeres, arroja resultados que deben ser analizados por los países con mucho cuidado,
pues estas podrían ser las causas que están influyendo en que la violencia contra las
1
ONU, Di Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer 25 de noviembre, recuperado el 23
abril 2018 de http://www.un.org/es/events/endviolenceday/
2
ONU, Del Compromiso a la Acción: Políticas para Erradicar la Violencia Contra las Mujeres América Latina
2017, Panamá, PNUD.
3
Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer (Convención
de Belem do Pará) articulo 7.
1
mujeres se incremente paulatinamente en detrimento de las medidas adoptadas por los
Estados para paliar el fenómeno, cabe resaltar que 24 de los 33 países de la región de
América latina y el Caribe solo cuentan con leyes de primera generación es decir, que
solo protegen los derechos de las victimas sobrevivientes de violencia doméstica o
intrafamiliar, sin embargo han logrado avances considerables en materia legislativa para
enfrentar la violencia contra las mujeres.
Estos avances se reflejan en que al año 2016, quince países habían hecho
reformas a sus normativas para tipificar el femicidio o feminicidio, incluyendo entre estos
El Salvador, en el caso de Argentina solo es considerado como homicidio agravado, tal
situación deja en claro que casi la mitad de los países se están adecuando a los
compromisos adquiridos en los instrumentos regionales e internacionales, por
consiguiente es una muestra de respuesta al incremento de referidos delitos y sobre todo
a la impunidad de que gozaban los actores4.
Ciertamente, la Convención de Belém do Pará, entre una de las metas que
persigue es que los Estados parte busquen por todos los medios a su alcance establecer
planes o políticas que estén encaminadas a prevenir, sancionar y erradicar la violencia
contra las mujeres, a este respecto al año 2016 los Estados de la región Latinoamericana
habían mostrado avances sustanciales en el sentido que nueve impulsan planes de
acción nacionales específicos para la violencia contra las mujeres, otros dos tienen
planes nacionales de violencia doméstica, más cuatro que se enfocan a la violencia de
género, ocho que enfocan en forma amplia políticas públicas nacionales con componente
específicos para abordar las violencias contra las mujeres.
Lo anterior nos lleva a concluir que al 2016 un 94% de los países de la región están
abordando políticas o planes nacionales específicos para tratar la violencia contra las
mujeres, a groso modo parece que el éxito de la convención es un hecho, sin embargo,
los resultados en la práctica dejan muchos vacíos pues los índices de feminicidios o
hechos violentos contra las mujeres sigue en aumento, por lo que es necesario hacer una
revisión a las posibles causas de los pocos efectos positivos de los planes o políticas
públicas nacionales encaminadas a erradicar la violencia contra las mujeres.
En realidad, el problema se puede visualizar en la implementación de los planes o
políticas públicas nacionales, pues si bien es cierto que en la región se observan la
existencia de Mecanismos Institucionales para el Adelanto de Mujer (MAM) como un
signo positivo de la voluntad política de los Estados para cumplir los compromisos
asumidos con la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación
contra la Mujer (CEDAW), todos los países han creado una institución que vele por la
implementación de planes o políticas, pero el problema está en el nivel jerárquico que
ocupan en la estructura organizativa del Estado, lo que en gran medida les merma las
capacidades institucionales con implicaciones en el ejercicio de sus funciones.
Es decir que no todos los MAM poseen un nivel de jerarquía alto, como por
ejemplo que estos sean ministerios o que su titular sea de rango ministro/a y que tenga
plena participación en el gabinete de gobierno, en América Latina solo 13 países de los
33 logran alcanzar este rango y lo que es peor que 18 países es decir más de la mitad de
los países de la región cuentan con un MAM con bajo nivel de jerarquía institucional,
entre ellos El Salvador, pue sus instituciones son dependientes de segunda o tercera
4
ONU, Del Compromiso a la Acción: Políticas para Erradicar la Violencia Contra las Mujeres América Latina
2017, Panamá, PNUD.
2
línea de un ministerio siendo su función nada más la de articular el trabajo con otras
instituciones5.
A pesar de todo se evidencia que la región está dando pasos cortos, pero bien
enfocados con miras de prevenir, sancionar y erradicar todas las formas de violencia
contra las mujeres y mejor aún el enfoque positivo de la voluntad política de cumplir los
compromisos adquiridos al ratificar los diferentes instrumentos internacionales en la
materia.
2. El Derecho Humano de Igualdad, incidencia principal de las políticas públicas en
América Latina.
Como se ha dejado en claro anteriormente el compromiso político de cumplir con las
obligaciones adquiridas por la ratificación de la normativa internacional, ha llevado a los
países Latinoamericanos a plantear las políticas nacionales para el acceso de las mujeres
a una vida libre de violencia bajo la premisa del Derecho Humano a la Igualdad y principio
de no Discriminación, pues como lo establece el Art. 1 de la Declaración Universal de
Derechos Humanos, “…todos nacemos libres e iguales en dignidad y derechos…”6.
Por consiguiente, la totalidad de los países de América Latina están impulsando
acciones en tres ejes a saber: prevención, atención y sanción, siendo el desafío por
superar la reparación, ya que escasamente se promueve la reinserción de las víctimas y
la reparación de los derechos que les han sido vulnerados.
En cuanto a El Salvador la Constitución en el artículo 3 establece el Derecho
Fundamental de Igualdad para todas las personas sin distinción y como resultado del
trabajo de diferentes organizaciones se ha logrado avanzar en el reconocimiento de la
violencia de género, la desigualdad y la discriminación contra las mujeres creando leyes y
políticas encaminadas a ayudar en su erradicación.
Es decir, que El Salvador ha venido desde la década de los años noventa
implantando y cada vez mejorando la Política Nacional para las Mujeres, establece
actualmente “lineamientos organizados en tres ámbitos de actuación y coordinación
institucional: Prevención, Atención y Procuración”, es de hacer notar que al igual que el
resto de los países Latinoamericanos las líneas de actuación en los planes o políticas
públicas en relación con el tema son similares7.
Tal como, se desarrolló en los párrafos precedentes la Política Nacional para las
Mujeres actualizada al 2014, tiene un nivel jerárquico bajo, pues su supervisión y garantía
recae según lo establece la Ley Especial Integral para una Vida libre de Violencia para las
Mujeres (LEIV) en el Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU) quien
se convierte en la institución rectora de la política nacional; siendo esta una institución de
segundo orden dentro de la organización jerárquica del Estado, la influencia que pueda
tener es limitada.
Por otra parte, el enfoque de la Política Nacional para las Mujeres, se fundamenta
en dos principios fundamentales e indivisibles de los Derechos Humanos es decir la
igualdad y la no discriminación, desarrollados en el artículo 3 de la Constitución; también
en el orden internacional (tema que será desarrollado más adelante) la CEDAW desarrolla
ampliamente lo referente a la no discriminación de las mujeres, entendiendo que la
5
IDEM.
6
ONU, Declaración Universal de los Derechos Humanos, 1948
7
ISDEMU, Política Nacional para el Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, noviembre 2013
3
igualdad no es la existencia de trato idéntico, si no, la eliminación de todas las formas de
discriminación, a través de las acciones del Estado.
3. La práctica de los Estados podría afectar Derechos Humanos de las mujeres.
Por consiguiente, las políticas públicas para una vida libre de violencia contra
las mujeres, desde el enfoque de Derechos Humanos presentan gran eficacia en
su aplicación; si al momento de implementar políticas públicas los Estados se
enfocaran a la necesidad del grupo social más desprotegido, marginado y
discriminado por la sociedad y el Estado mismo, presentan poco impacto por el
mínimo interés presentado por las instituciones y funcionarios responsables de su
implementación.
Al respeto, la Organización de las Naciones Unidas cuyo objetivo es velar por
el respeto a los derechos de todos los seres humanos establece en la Declaración
Universal de Derechos Humanos, “Toda persona tiene todos los derechos y
libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna …” por lo que la
línea a seguir por los Estados en la implementación de los planes y políticas
públicas en materia de familia se enfoca específicamente a la inclusión social de
las mujeres en todos los ámbitos y actividades.
Por consiguiente, los Estado deben legislar internamente o en lo posible
acondicionar las ya existente a fin de cumplir con los compromisos adquiridos por
las normativas internacionales y regionales, bajo este enfoque visionario nace el
Comité para la Eliminación de la Discriminación contra las mujeres, con el fin de
vigilar el fiel cumplimiento de la Convención sobre la Eliminación de Todas las
Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), referida convención tiene un
carácter excluyente, visto desde la óptica masculina hacia los hombres, y
puramente incluyente hacia las mujeres.
Esto es, porque a lo largo de la historia de la humanidad por criterios
meramente culturales, religiosos, entre otros el machismo prevalece desde la
época del patriarcado hasta la actualidad, tal comportamiento ha llevado a que la
mujer sea invisibilizada por el Estado, la política, la religión entre, otros, por el
simple hecho de ser mujer se consideraba y en algunas culturas y Estados aún se
considera como una persona que es objeto y no sujeto de derechos, dándole con
esta connotación una muerte legal no ha su existencia física y legal, como tal,
sino, una muerte al disfrute y ejercicio de sus derechos para con el Estado.
Ante esto la CEDAW, entre sus considerandos específicamente el tercero
establece “los Estados partes en los pactos internacionales de Derechos Humanos
tienen la obligación de garantizar a los hombres y mujeres la igualdad en el goce
de todos los derechos económicos, sociales, culturales, civiles, y políticos” Es en
ese sentido que El Salvador como Estado miembro de la ONU, ratifica la presente
convención y se obliga de conformidad al artículo 2 “A condenar la discriminación
contra la mujer en todas sus formas, convienen en seguir, por todos los medios
apropiados y sin dilaciones, una política encaminada a eliminar la discriminación
contra la mujer”.
4
También, los Estados se comprometen según la misma normativa
“consagrar, si aún no lo han hecho, en sus constituciones nacionales y en
cualquier otra legislación apropiada el principio de igualdad del hombre y de la
mujer y asegurar por ley u otros medios apropiados la realización de práctica de
ese principio”, El Salvador también es ratificante de la Convención Interamericana
para prevenir, sancionar y erradicar la violencia Contra la Mujer (Convención de
Belén do Pará), que contempla en el considerando tercero “… la violencia contra
la mujer es una ofensa a la dignidad humana y una manifestación de las
relaciones de poder históricamente desiguales entre mujeres y hombres”.
Es decir, que esta da una definición clara sobre lo que se debe entender por
violencia contra la mujer “cualquier acción o conducta, basada en su género, que
cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual, o psicológico a la mujer, tanto en
el ámbito público como en el ámbito privado”, es en ese orden de ideas que el
Estado salvadoreño con voluntad política de cumplir las disposiciones
internacionales y regionales, crea las normas secundarias y especiales que
regulan la Política Nacional para el Acceso de las Mujeres a una vida Libre de
Violencia, esta política pública sin duda está en marcada en las disposiciones de
los tratados internacionales que obligan de forma indirecta a El Salvador a fijar su
mirada en un grupo determinado de la sociedad que estaba siendo discriminado.
Con la implementación de referida política pública se afectan todos los
Derechos Humanos en sentido positivo, debido a que obliga al Estado a reconocer
que existe un problema que afecta la colectividad y que requiere ser agendado en
el orden de prioridades de todas las políticas a implementar en su Plan
Quinquenal de Desarrollo, la afectación se evidencia en los Derechos Humanos
del grupo social que va dirigida la política en comento, es decir a la totalidad de las
mujeres; reconoce el derecho a la igualdad constitucionalmente dando a todas las
personas iguales ante la ley, es decir igualdad jurídica entre mujeres y hombres.
También, está reconociendo una situación desventajosa por la discriminación
en su ordenamiento y marco legal, obligándose a convertir la política pública
adoptada en un derecho exigible donde los funcionarios, públicos y/o particulares
se obliguen ante este derecho reconocido a las mujeres a dar, hacer, o no hacer.
Ahora bien, como se afecta un derecho, se afecta cuando se norma por una
ley especial, que deviene de una política pública, en este caso todos los Derechos
Humanos de la mujer se ven reconocidos en la Política Pública para una vida libre
de violencia contra las mujeres, se vuelve exigible ante los órganos del Estado a
través de los cuerpos normativos tales como: la constitución, los Tratados y
Convenios Internacionales y la normativa interna creada para tal fin.
En definitiva, la política pública implementada por el Estado es de aplicación
progresiva y sus resultados son positivos. (Tomado de: El enfoque de derechos. -
Sonia Solís Umaña), “El esfuerzo orientado a articular una nueva ética con
políticas públicas a nivel social y judicial y privadas, es lo que se ha denominado el
enfoque de Derechos Humanos. Esta procura construir un orden centrado en la
creación de relaciones sociales basadas en el reconocimiento y respeto mutuo y
en la transparencia, de modo que la satisfacción de las necesidades materiales y
5
subjetivas de todas las personas y colectividades, sin excepción alguna, constituya
una obligación jurídica y social. Buscando construir mecanismos jurídicos y
políticos que transformen las instituciones, y consecuentemente la vida social y
cotidiana de las personas con base en una nueva ética del desarrollo humano”.
Finalmente, El Salvador busca tutelar los derechos de las mujeres
enmarcándolos en un sistema jurídico especial y creando las instituciones
pertinentes para volver exigibles y tutelables esos derechos. Además, implementa
políticas de igualdad y no discriminación en instituciones ya existentes con el fin
de volver exigible y reconocida la política dándole la publicidad interna y externa.
4. Instrumentos Internacionales y Regionales que consagran el derecho humano a
la igualdad y no discriminación.
A lo largo de la historia, el ser humano siempre ha tratado se ser la especie
dominante en el planeta, dominando animales, creado idealismos para tener a sus
semejantes bajo su dominio, tal objetivo principal de tratar de ser la especie dominadora,
trasciende a descubrir nuevas formas de vida, inventos, logros, descubrimientos, etc., la
mujer a pesar de tener un papel relevante en la historia al igual que el hombre, se ha visto
victimizada por este bajo la opresión de las consecuencias de que el hombre ha querido
siempre tener el dominio de todo, incluso del “sexo débil” la mujer y debido a esto es que
ella se ha vuelto víctima de un largo expediente histórico de violencia por parte del
hombre y la misma sociedad, violencia que ha venido de generación en generación, y tal
como van las cosas no se vislumbra fin a corto plazo, a decir verdad la lucha para detener
este defecto social, ha ido avanzando paulatinamente, pero con pocos logros en concreto.
Además, con el surgimiento de idealismos de derechos para las mujeres
primeramente con la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer en 1947, se
centró en establecer normas y formular convenciones internacionales que cambiaran las
leyes discriminatorias y aumentaran la sensibilización mundial sobre las cuestiones de la
mujer, en sus aportaciones a la redacción de la Declaración Universal de Derechos
Humanos, la Comisión defendió con éxito la necesidad de suprimir las referencias a “los
hombres” como sinónimo de la humanidad, y logró incorporar un lenguaje nuevo y más
inclusivo.
Por otra parte, elaboró las primeras convenciones internacionales sobre los
derechos de la mujer, como la Convención sobre los Derechos Políticos de la Mujer de
1953, que fue el primer instrumento de derecho internacional en reconocer y proteger los
derechos políticos de las mujeres; para 1963, los esfuerzos para consolidar las normas
relativas a los derechos de la mujer condujeron a la Asamblea General de las Naciones
Unidas a solicitar a la Comisión que elaborara una Declaración sobre la eliminación de la
discriminación contra la mujer, que la Asamblea aprobó en última instancia en 1967. A
dicha declaración siguió en 1979 la Convención sobre la eliminación de todas las formas
de discriminación contra la mujer (CEDAW), un instrumento jurídicamente vinculante cuya
redacción también corrió a cargo de la Comisión. En 1999, el Protocolo Facultativo de la
Convención introdujo el derecho de presentar una demanda para las mujeres víctimas de
discriminación.
En 1987, en el marco del seguimiento de la Tercera Conferencia Mundial sobre la
Mujer celebrada en Nairobi, la Comisión asumió el liderazgo de las labores de
coordinación y promoción del trabajo del sistema de las Naciones Unidas en los asuntos
económicos y sociales para el empoderamiento de la mujer. Sus esfuerzos consiguieron
6
elevar las cuestiones de género a la categoría de temas transversales, dejando de ser
asuntos independientes. En ese mismo periodo, la Comisión contribuyó a que, por
primera vez, el problema de la violencia contra las mujeres figurara en primer plano de los
debates internacionales. Esos esfuerzos cristalizaron en la Declaración sobre la
eliminación de la violencia contra la mujer, aprobada por la Asamblea General el 20 de
diciembre de 1993.
En 1994, la Comisión de Derechos Humanos nombró una Relatora especial sobre la
violencia contra la mujer, sus causas y consecuencias, con el mandato de investigar e
informar sobre todos los aspectos de la violencia contra las mujeres. La Comisión sirvió
como órgano preparatorio para la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer de 1995, en
la que se aprobó la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing. Tras la Conferencia, la
Asamblea General dio a la Comisión el mandato de desempeñar un papel central en la
supervisión de la aplicación de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing y de
asesorar al Consejo Económico y Social en consecuencia. Como pedía la Plataforma de
Acción, se creó una nueva oficina de las Naciones Unidas para la promoción de la
igualdad de género: la Oficina del Asesor Especial en Cuestiones de Género y Adelanto
de la Mujer.
El 23 de febrero de 1994 surge la Declaración sobre la eliminación de la violencia
contra la mujer es creada en un intento de ampliar los derechos de la mujer, de
salvaguardar su reconocimiento en la sociedad como un sujeto de derechos y de hacer
valer y realzar la magnitud de la importancia de la mujer, el desarrollo de la igualdad, la
paz, la seguridad, sea objetivo principal y fundamental de declaración, trascendiendo por
toda clasificación de mujeres como su origen, religión, legua, culturas etc. que sin importar
cada una de sus cualidades y diferencia sean reconocidos universalmente.
Uno de los instrumentos internacionales es la resolución aprobada por la asamblea
general sobre las Medidas de prevención del delito y de justicia penal para para la
eliminación de violencia contra la mujer. El 2 de febrero de 1998 en cual en uno de sus
párrafos manifiesta que “Insta a los Estados Miembros a que examinen o evalúen su
legislación y sus principios, procedimientos, políticas y prácticas legales vigentes en
materia penal, en forma consonante con su propio ordenamiento jurídico, a fin de
determinar si tienen un efecto negativo en la mujer y, de ser así, los modifiquen para que
la mujer reciba un trato imparcial en el sistema de justicia penal; Insta también a los
Estados Miembros a que pongan en marcha estrategias, formulen políticas y
difundan información con miras a promover la seguridad de la mujer en el hogar y
en la sociedad en general, incluidas estrategias específicas de prevención del
delito que reflejen la realidad de la vida de la mujer y tengan presentes las
necesidades propias de la mujer en esferas como el desarrollo social, la
ordenación del medio ambiente y los programas educativos de carácter
preventivo; Insta además a los Estados Miembros a que promuevan una política
activa y manifiesta que incorpore un criterio de equidad entre los sexos en la
formulación y ejecución de todas las políticas y programas en materia de
prevención del delito y justicia penal que puedan contribuir a eliminar la violencia
contra la mujer a fin de que, antes de que se adopten decisiones, las mismas se
hayan analizado para asegurar que no entrañen prejuicios basados en el sexo”
Claramente se interpreta que la resolución manifiesta que se implementen políticas
de prevención del delito contra las mujeres, que en el área penal estas políticas sean
ejercicio de justicia ante la igualdad y equidad de los sexos, implementando medidas
7
adecuadas para que la sociedad adopte la idea que una norma penal no actúa en
prejuicio a un objetivo con falta de visión de género.
Una de las principales observaciones a cera del tema de la violencia contra la mujer
es Recomendación general numero 12 la violencia contra la mujer, considerando que los
artículos 2, 5, 11, 12 y 16 de la Convención obligan a los Estados Partes a proteger a la
mujer contra cualquier tipo de violencia que se produzca en la familia, en el trabajo o en
cualquier otro ámbito de la vida social, recomienda que los Estados Partes incluyan en
sus informes periódicos al Comité información relativa a: la legislación vigente para
protegerla de la frecuencia de cualquier tipo de violencia en la vida cotidiana (la violencia
sexual, malos tratos en el ámbito familiar, acoso sexual en el lugar de trabajo, etc.); otras
medidas adoptadas para erradicar esa violencia; los servicios de apoyo a las mujeres que
sufren agresiones o malos tratos; datos estadísticos sobre la frecuencia de cualquier tipo
de violencia contra la mujer y sobre las mujeres víctimas de la violencia.
En otro orden, entre los instrumentos de orden interno podemos citar la Ley Especial
Integral para una Vida libre de Violencia contra las mujeres, en la cual se plantea la
protección de los derechos de la mujer en torno a una vida libre de la violencia, donde sus
derechos sean respetados en base a la paz, la libertad, la justicia la igualdad, y la calidad
de vida, la no discriminación, la integridad física y la vida, en torno a estos parámetros que
sirven como base; la ley es creada y vigente para velar por el bien jurídico protegido de la
mujer a rango constitucional base al hecho de ser persona humana.
Finalmente, la violencia hacia la mujer es una problemática que día con día
conllevan a crear mecanismos e instrumentos para combatir su desarrollo en la sociedad,
tratar de cambiar una realidad tan marcada por los años requerirá más que de una política
con falta de coercibilidad para la erradicación de la violencia, con el paso de los años se
ha demostrado que cambiar una cultura y peor aún, una forma de pensar tan individualista
de cada ser humano es una tarea que va más allá de implementar un mecanismo que
establezca el respeto hacia la mujer en todo ámbito de su vida, no es imposible, pero, la
política pública es solo una pequeña porción de lo que se debe hacer para combatir la
violencia contra la mujer; en el campo de aplicación no solo se manifiestan las políticas
públicas, los instrumentos de derechos, etc., si no, el papel más importante lo juega la
sociedad, misma que aun contempla una visión que carece de igualdad y equidad de
género.
5. Obligaciones del Estado para cumplir los compromisos adquiridos en los
instrumentos internacionales.
8
El acceso a la justicia es un Derecho Humano esencial donde la persona debe tener
un espacio para ser asistida, tener una respuesta efectiva, donde el Estado se obliga
erradicar, actos de violencia en contra de las mujeres y lograr una plena satisfacción de
tutela del derecho vulnerado, en el derecho internacional lo encontramos inmerso en el
artículo 8 de la Convención Americana de Derechos Humanos, las garantías judiciales
que manifiesta en su numeral uno que toda persona tiene derecho a ser oída por un
tribunal o juez de manera imparcial, con las debidas garantías para asegurar la efectividad
del derecho vulnerado en un plazo que no menoscabe la dignidad de las personas, así
mismo el Artículo 25 de referida convención, regula el derecho de petición a la
institucionalidad del Estado teniendo acceso a recursos judiciales que sea sencillo pero
eficaz revestido de garantías para su exigibilidad que no sean engorrosos cuando las
mujeres denuncien hechos de violencia, así como es menester de los Estados de actuar
para prevenir, investigar, sancionar y reparar estos hechos, la justicia en la esfera pública
al que tienen derecho todos los seres humanos mediante mecanismos idóneos, teniendo
la obligación el Estado de hacerlo accesible actuando con diligencia generando confianza,
seguridad jurídica y erradicar toda sensación de desconfianza departe las victimas hacia
el órgano judicial implementando instancias creando tribunales especializados con
programas de capacitación de los operadores de administración de justicia en zonas
rurales y urbana con recursos idóneos y efectivos de Derechos Humanos.
También, la Convención Para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra La
Mujer, regula en el artículo 7 el acceso a la justicia manifestando que no solamente como
figura jurídica de justicia si no que debe de instaurarse también en las políticas públicas
con enfoque de Derechos Humanos donde las mujeres se vean involucradas en la
realización como en la implementación o en cualquier fase de dicha política, el Estado
como obligado tiene que actuar contrarrestando todo tipo de violaciones a Derechos
Humanos.
La Conferencia Mundial de Viena Sobre los Derechos Humanos, regula en el
articulado la violencia física, sexual y psicológica a no ser víctimas de cualquier acto de
tortura a no ser discriminadas por su condición de género donde se vea a la mujer con
subordinación o inferioridad o por razones de raza o condición en la que se encuentre la
mujer, la discriminación constituye un impedimento a todos sus derechos como acto de
vulneración a Derechos Humanos en contra de las mujeres encontrándose su contenido
normativo en La Convención Sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación
Contra la Mujer (CEDAW), que manifiesta en el artículo 1 que discriminación es toda
acción de distinción y exclusión basada está en la condición del sexo vulnere o
menoscabe sus derechos fundamentales en todas las esferas públicas o privadas ya sea
política, social cultural y civil vulnerando su derecho de igualdad.
El derecho de igualdad se encuentra regulado en la Declaración sobre la
Eliminación de la Violencia contra la Mujer en el artículo 3 literal b, no se pretende con
este enfoque que se traten a las mujeres igual que a los hombres sino más bien eliminar
todas las formas de discriminación en las mujeres dándole a los hombres el mismo valor
humano que la mujer, se menoscaba impidiendo que participe en las mismas condiciones
que el hombre entorpeciendo el desarrollo de la mujer.
Por consiguiente, en el orden interno la Constitucional regula en el artículo 3 que
todas las personas son iguales ante la ley, en contraste con la Declaración sobre la
Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que regula que todo tipo de violencia que baya
dirigida hacia una mujer constituye una violación de Derechos Humanos como también las
9
libertades menoscabando su dignidad impidiéndole dichos derechos en casos de violencia
en contra de las mujeres.
De modo que, la conducta del Estado a la luz de la normativa internacional debe ir
encaminada a guiarse por los instrumentos internacionales y regionales acatando las
observaciones, es decir, a los protocolos, pactos, convenciones y declaraciones sobre los
derechos de las mujeres, debe respetar, no obstaculizando el ejercicio de los derechos de
las mujeres, garantiza cuando se asegura que el derecho siempre estará vigencia del
derecho mismo, proteger, verificar que no se afecten los derechos, garantizar y promover
las políticas públicas por medio de difusión de la información, el reconocimiento jurídico y
las estrategias y planes de acción para tutelar los derechos de las mujeres.
Del mismo modo, las obligaciones internaciones que se derivan de los Derechos
Humanos enmarcados en la política de violencia en contra de las mujeres, vincula la
Convención Para Prevenir, Sancionar y Erradicar La Violencia Contra la Mujer pues ahí se
establece la obligación del Estado a adoptar, por todos los medios apropiados y sin
dilaciones políticas públicas que vayan encaminadas a prevenir, sancionar y erradicar
todo tipo de violencia contra las mujeres, también debe establecer procedimientos agiles,
la prevención a través de programas, investigar y sancionar, se debe en lo posible
erradicar la impunidad establecer procedimientos legales justos aplicando los principios
inmersos en la normativa internacional para la mujer que haya sido víctima de violencia.
Las obligaciones que se enmarcan están delimitadas en de no hacer en el momento
de no impedir el acceso a estos derechos disipando todo obstáculo, obligándose a
garantizar el goce de todos los derechos bajo el enfoque de derechos tomando en cuenta
las recomendaciones, declaraciones para favorecer la igualdad de las mujeres,
implementando todas las medidas necesarias para eliminar todo tipo de estereotipo de
discriminación como legislar normativa especial para eliminar toda forma de
discriminación.
Igualmente, el Estado debe garantizar el ejercicio del derecho que las mujeres
puedan activar el órgano jurisdiccional en una institucionalidad organizada con enfoque de
derechos obligándose a su vez a garantizar estos derechos fundamentales de las
mujeres, plasmados en la Convención Americana, el acceso a la justicia y la defensa del
derecho de las mujeres a una vida libre de violencia constituye un proceso de acciones
que con una institucionalidad, un sistema judicial y administrativo efectivo y rápido ante
hechos punibles perpetrados contra las mujeres; que sean de efectiva garantía desde que
la víctima interpone la denuncia, celeridad en la investigación posterior la restitución del
daño, la rehabilitación de la víctima, la indemnización por daños ya sean de carácter
moral o civil , activando garantías que tutelen el derecho a no perpetrase de nuevo,
legislando normativas internas que sean efectivas, donde todas las mujeres puedan exigir
su derecho vulnerado, obligación de garantizar a las víctimas de violencia la
representación legal gratuita para ser oídas en los tribunales.
6. Las observaciones de los órganos de los Tratados en relación con la temática.
Los "Órganos de los Tratados" son órganos que fueron creados a raíz de la
implantación de un tratado internacional y su objetivo es servir a la protección de
Derechos Humanos concretos y a defenderlos contra las posibles vulneraciones de
derechos contemplados en los mismos.
Otro aspecto que tomar en cuenta son las observaciones que los órganos de los
tratados hacen a los Estados a través de sus comités, en ese orden y para el caso de
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estudio es importante analizar las observaciones hechas por diferentes comités,
primeramente, el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, examinó
los informes periódicos octavo y noveno combinados de El Salvador.
Por consiguiente, El Comité muestra satisfacción con los progresos realizados
desde el examen en 2008, pues se han emprendido reformas legislativas para adoptar
normativa relacionada a la temática tales como 8: la Ley de Igualdad, Equidad y
Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, y la Ley de Protección Integral de Niños,
Niñas y Adolescentes (LEPINA), en abril de 2009, que ordena al Ministerio de Educación
brindar educación sobre género, salud y discriminación contra las mujeres en el sistema
educativo: la Ley sobre una vida libre de violencia para las mujeres (LIEV), en 2012: la
Ley de promoción, protección y desarrollo de las microempresas y las pequeñas
empresas, en 2014, cuyo objetivo es promover un mayor acceso de las mujeres al
desarrollo empresarial; la Ley de promoción, protección y apoyo de la lactancia materna,
en junio de 2016.
También le satisface los esfuerzos de El Salvador por mejorar su marco institucional
y de políticas para acelerar la eliminación de la discriminación contra la mujer y promover
la igualdad de género, adoptando lo siguiente instrumentos: el Pacto sobre la defensa de
los derechos civiles y políticos de la mujer, en 2014; el Sistema Nacional de Igualdad
Sustancial (SNIS) y su Plan Nacional, en 2013; el Sistema de Estadísticas y Monitoreo
para la Igualdad (SEMI), en 2013; la Política nacional para el acceso de las mujeres a una
vida sin violencia, en 2013, y sus planes nacionales para 2013-2015 y 2016-2020; el Plan
Nacional para la Igualdad y la Equidad para las Mujeres Salvadoreñas, en 2012. el Plan
"El Salvador Seguro", en 2015, que aborda la violencia de género.
Sin embargo, siempre hay situaciones que deben ser superadas, en ese sentido el
Comité hace ciertas observaciones a El Salvador, como Estado Parte debe tomar en
cuenta, primero debe Desarrollar una estrategia integral y un plan de acción para prevenir
y combatir la trata y la explotación sexual de mujeres y niñas, prestando especial atención
a la victimización relacionada con las pandillas;
Segundo, Incluir en dicha estrategia programas y medidas de prevención y
protección para la rehabilitación y la integración social de las víctimas de la trata.
Siguiente, Proporcione en su próximo informe periódico datos sobre la trata, la
explotación de la prostitución de mujeres y niñas, el número de enjuiciamientos y
condenas en casos de trata y explotación sexual, así como sobre el impacto de las
medidas adoptadas para combatir estos fenómenos.
Luego, el Comité observa con preocupación que la legislación sobre la trata de
personas se aplica indiscriminadamente a las mujeres, que trabajan de manera autónoma
en la prostitución, lo que da lugar a discriminaciones por el personal local en la aplicación
de la ley; también está preocupado por los informes de discriminación por parte del
personal de salud contra las mujeres dedicadas a la prostitución.
Por último, el Comité pide al Estado que en un plazo de dos años proporcione
información por escrito sobre las medidas adoptadas para aplicar las recomendaciones de
que asigne recursos humanos, técnicos y financieros adecuados para permitir el
funcionamiento eficaz de la jurisdicción especial recientemente creada sobre delitos
8
Observaciones finales sobre el séptimo informe periódico de El Salvador Comité de Derechos
Humanos 122° período de sesiones 12 de marzo a 6 de abril de 2018
11
contra la mujer, acelere la aprobación de una legislación que refuerce el papel dirigente
del Instituto Salvadoreño para el Adelanto de la Mujer (ISDEMU).
7. Recomendaciones específicas al caso de estudio por los Órganos de los
Tratados.
El Comité para la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer
(CEDAW), hace referencia en sus recomendaciones las preocupaciones que se enmarcan
en la desventaja que tiene la mujer frente a sus Derechos Humanos, la necesidad de
enfocar al Estado en un Estado de derecho donde la dignidad de la persona sea el centro
de la institucionalidad y la gestión pública, donde se puedan hacer efectivos los Derechos
Humanos de las mujeres a través de garantías solidad de eficaz cumplimiento por la
espera pública.
Por consiguiente, la violencia a las mujeres se observa en las dificultades que tiene
para acceso a la justicia, el acceso a la salud a su desarrollo pleno de sus derechos de
igualdad y la no discriminación, los estereotipos de discriminación y desigualdad, como la
violencia en contra de las mujeres es una preocupación del Comité.
Por esta razón, recomienda al Estado que investigue de forma global,
entendiéndose que en todos sus aspectos y condiciones las necesidades en el ámbito de
salud sexual y reproductiva de las mujeres estableciendo medidas necesarias que
busquen la erradicación de la violencia y goce de los derechos sociales afín de
implementar programas que vayan encaminados a la planificación familiar; que establezca
programas de educación sexual para las niñas niños y adecentes logrando que su
comportamiento sexual sea responsable.
Otro aspecto, que el Estado estimule la participación en la política y en la gestión
pública de las mujeres atreves de cargos públicos, que el Estado exija a los diferentes
órganos e instituciones, que se aborde el tema de la aparente falta de conciencia que
manifiestan los partidos políticos del país en cuanto involucrar a las mujeres en la
participación política y publica en condiciones de igualdad, según los principios del
derecho de igualdad de las mujeres y no discriminación.
De modo que, el Estado adopte las medidas necesarias en el ámbito legislativo
electoral vigente para que las mujeres participen en la esfera política y pública en un
entorno de igualdad de derechos atreves de mecanismos de establecimiento de cuotas,
asegurar mediante mecanismos efectivos los derechos políticos económicos y sociales de
las mujeres erradicando la discriminación y violencia de género, capacitándolas atreves
de programas sobre el rol de liderazgo en las participaciones de cualquier proceso.
En otras palabras, el Estado debe guiar mecanismos para eliminar el patriarcado
respecto a las responsabilidades y rol que ocupan las mujeres y hombres en la familia,
trabajo y sociedad obstaculizando los Derechos Humanos en las mujeres disipando
patrones que fomentan la desigualdad en las mujeres.
Por último, recomienda que se elimine el sexismo cumpliendo así parte del
compromiso del Estado, para eliminar las diferencias de poder, reflejado en la violencia de
genero materializado por las relaciones desiguales de roles ya que la ideología sexista
indica que el eje principal del sexismo es la desigualdad y esto conlleva una serie de
consecuencias que conllevan a que si el hombre se siente menos que la mujer, puede
utilizar la violencia como mecanismo de defensa para recuperar el poder perdido.
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También, el Comité De Derechos Económicos, Sociales y Culturales, coincide con
los derechos que se persiguen garantizan en la política nacional de las mujeres para el
acceso a una vida libre de violencia, haciendo recomendaciones pertinentes, primero, que
el Estado atreves de programas públicos siga sus esfuerzos por implementar iniciativas
que busquen el empoderamiento en el área económica de las mujeres vigilando los
efectos que causan las políticas públicas en nuestro país referente al tema de los
derechos económicos y sociales, erradicando la violencia en contra de las mujeres, en
materia de derechos económicos y sociales uno de los logros que se ven reflejados en la
política es la ley del acceso a la información pública sin embargo una mujer con escasa
formación escolar está imposibilitada a acceder a este derecho como el acceso a la
justicia como derecho humano.
Pero, la adopción de un enfoque global para hacer frente a la violencia contra las
mujeres y las niñas, además de la aplicabilidad de la legislación vigente, capacitaciones
sobre cuestiones de género a funcionarios públicos para que tomen conciencia de todas
las formas de violencia contra las mujeres, recomendación que también se relaciona con
el caso de estudio ya que la eficacia de la legislación es de suma importancia, pero ha
encontrado problemas en la aplicación y efectividad de la Ley Especial Integral para una
vida libre de Violencia para las Mujeres, así como la ley para Prevenir y Erradicar la
Violencia en contra de las Mujeres, situación que se respalda con el alto índice de
feminicidios registrados en el año 2017 y en los primer trimestre del año 2018 que ya
suman 33 muertes violentas de mujeres, por lo tanto insta a capacitar a funcionarios
públicos como principales tragadores de la ley especial.
En los derechos sociales como el de salud aborda la dificultad que existe para
acceder a los servicios de salud especialmente en las zonas rurales, las contradicciones
que siempre se da en la mortalidad materna, el aborto ilegal en los adolescentes; y la
limitada eficacia del acceso al sistema de salud en manera de ejemplo la Organización
Internacional del Trabajo reporto que el 56% de la población en el mundo no tiene
cobertura en este derecho social, el ministerio de salud en el programa ecos familiares
que es un programa de modelo de atención primaria de salud ha tenido deficiencias en su
implementación por no dar los resultados esperados, ya que hay muchos lugares donde
no cuentan con un centro de salud y a las mujeres en Estado de embarazo se les dificulta
desplazarse por carecer de recursos económicos.
Entre tanto, establece su preocupación por los altos índices de hechos punibles en
que se ven reflejados en casos de violencia como la violencia intrafamiliar, violencia
sexual, el acoso sexual en niñas niños y adolescentes en lo laboral y centros escolares,
homicidios de mujeres viendo con preocupación esta problemática la comisión observa la
ineficacia en las investigaciones sobre estos casos en que los actores de estos actos
quedan siempre en la impunidad.
8. Conclusiones.
Primero, a nivel regional los 33 países de Latinoamérica hacen esfuerzos y
muestran voluntad política para cumplir con los compromisos adquiridos por la adopción
de los instrumentos internacionales, aunque los frutos de dichos esfuerzos aun no son de
importante relevancia, se evidencia que se ha tomado la ruta correcta en torno a la
materia.
Segundo, si bien es cierto la tendencia de los Estados está enfocada a prevenir,
sancionar y erradicar las conductas típicas de violencia contra las mujeres, estos se
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quedan cortos a la hora de perseguir a los agresores como también a la reparación de los
daños de las víctimas.
Siguiente, El Salvador cuenta con una institución responsable de la supervisión e
implementación de la Política Publica para el Acceso de las Mujeres a una Vida libre de
Violencia, esta carece del nivel jerárquico acorde a su actuación por lo que se ve limitada
en el ejercicio de sus funciones.
Luego, los Derechos Humanos plasmados en los instrumentos internacionales y
regionales y normativas internas de los Estados, han sido tomados en cuenta a la hora de
formular los planes y las políticas publicas en torno a la temática, generando consistencia
entre ambas normativas.
Seguidamente, las observaciones de los órganos de los tratados en relación con la
política publica de mujeres, son acatadas por el Estado y retomadas por las instituciones
responsables de la ejecución, sin embargo, la falta de recursos hace que los logros sean
mínimos.
9. Recomendaciones.
Adecuar las normativas internas conforme los compromisos adquiridos en los
instrumentos internacionales y regionales.
Enfocar las políticas publicas a resarcir los daños sufridos por las víctimas, a través
de planes de reinserción social y accesibilidad a una justicia diligente.
Dotar de los recursos humanos, materiales y financieros a las instituciones
responsables de la ejecución de las políticas y planes relacionados con la violencia contra
las mujeres.
Cumplir en lo posible todas las observaciones hechas por los comités de los
órganos de los tratados.
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10. Bibliografía.
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