El Fantasma Definitivo

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El Fantasma en

la Máquina
Más allá de la Vía Láctea
Algunos párrafos destacados
─Una persona es mucho más que un nombre y ciertas
características físicas, mentales y emocionales.
─El dualismo es la tesis que considera la mente y el
cerebro como sustancias distintas.
─ La mente, puede considerarse como un sistema de
“órganos de computación” diseñado por selección natural
─El alma sólo es el “comentario” que acompaña al
margen el texto que va estableciendo el cuerpo, auténtico
sujeto de la vida.
─El Emergentismo considera la “totalidad” como más
que la suma de las partes…
─Durante el sueño el cerebro puede estar tan activo y
trabajar incluso más que cuando estamos despiertos.
─Los seres humanos están programados innatamente
para la supervivencia,
─Cuando suprimes un impulso o deseo, lo estás forzando
a ir por debajo del nivel de conciencia: al inconsciente.
─En el lenguaje común no se suele diferenciar
inconsciente de subconsciente.
El Fantasma
en la Máquina
El fantasma en la máquina
A modo de introducción

Quiero comenzar comentando que todo lo que voy


escribiendo en este apunte son temas que llaman mi
atención y que selecciono de lo que voy leyendo en la
bibliografía como en una tabla de ricos quesos y fiambres,
voy picando con mi palillo (escarbadientes), lo que más
me apetece. Tengo en cuenta, al elegir, la calidad
didáctica de los autores optando por aquellos que mejor
explican cada tema. A todo esto le doy una vuelta y
agrego mis comentarios personales.
La idea es que todo lo que considero interesante
(interesante y no importante) tenerlo a mano de forma
escrita, consultarlo cuando me apetezca; además, sólo
selecciono lo que me atrae de verdad, todo lo referencio
para saber de donde proviene el material adoptado.
La personalidad humana es inmensamente compleja.
Una persona es mucho más que un nombre y ciertas
características físicas, mentales y emocionales. Es extraño
que alguna vez sintamos que conocemos a los demás,
cuando el más mínimo examen de nuestra propia psique
revela de inmediato que apenas sabemos nada sobre
nosotros mismos. Ni siquiera moramos solos en nuestros
propios cuerpos, somos en su mayor parte un campo de
batalla entre lados opuestos de nuestra naturaleza; y
cuando uno asume el mando, luego otro, presentamos
colores constantemente cambiantes de un camaleón.
Sigfredo
2

Empecemos por introducir la terminología que en los


libros se encuentra muy dispersa. Además otro de los
defectos que noto mucho en los desarrollos filosóficos es
que se nombra muchas veces un cierto concepto que se
tarda en definir o incluso ni se llega a definir.

Dualismo: mente y cerebro dos sustancias


─El dualismo es la tesis que considera la mente y el
cerebro como sustancias distintas. Según los dualistas, la
mente no es el cuerpo, ni “surge” naturalmente en
función del comportamiento del cuerpo (como lo hace,
por ejemplo, la digestión). Esta era la teoría de René
Descartes (1596–1650) que ha sido muy discutida durante
más de 300 años pero sigue estando ahí.
«En Descartes, el dualismo se presenta como el segundo
momento trascendente de su filosofía. Una vez
demostrada la existencia de Dios, dice Descartes,
debemos considerar también si hay cosas externas,
objetos corporales. Esta idea lleva a Descartes a
considerar otra sustancia, distinta de la cosa pensante,
también clara y transparente: la sustancia extensa. El
mundo material es así una serie indefinida de variaciones
en la forma, tamaño y movimiento de una materia
homogénea, única y simple que él denomina res extensa.
Se incluyen aquí a todos los eventos físicos y biológicos,
incluso el complejo comportamiento animal que él
considera como el resultado de procesos puramente
mecánicos. En este sentido, el cuerpo humano es una
sustancia extensa, está en el espacio, sujeto a leyes físicas
y mecánicas, y sus procesos y estados pueden ser
controlados por observadores externos.
3

…Sin embargo, existe una clase de fenómenos que, de


acuerdo con Descartes, no puede ser entendida de esta
manera: la experiencia consciente, la conciencia, lo mental,
el pensamiento, etc. El pensamiento no ocupa lugar en el
espacio, ni sus funciones están sujetas a leyes mecánicas.
Las operaciones de la mente no son observables y su
desarrollo es privado. Sólo uno mismo puede tener acceso
directo a los estados y procesos de su propia mente.
…Así queda diseñado el dualismo cartesiano. Este
dualismo de la sustancia propone que a la par de la res
extensa que constituye el universo material, hay una res
cogitans que es independiente de la materia (1)».

Fisicalismo
«Esta teoría sostiene que los fenómenos de la mente
encuentran una explicación totalmente satisfactoria en
causas físicas que, por lo general, proceden del cerebro.
Al contrario que el dualismo, partidario de dos sustancias
diferentes, el fisicalismo es una forma de monismo, según
la cual sólo existe una sustancia, cuya naturaleza es física.
Una de las ventajas sobre el dualismo es que posibilita el
estudio científico, de modo que, en teoría, los fenómenos
mentales podrían describirse en términos físicos »(2).
El fisicalismo ─también llamado “La Teoría de la
identidad”─ es la tesis que considera que la mente y el
cerebro son exactamente la misma cosa. 'Mente' y
'Cerebro' son como 'Clark Kent' y 'Superman'; o también
como “agua” y “H2 O”: dos formas de referirse a lo mismo.

( 1 ) Santiago Koval – “Crítica al Dualismo Cartesiano” - UBA


( 2 ) Warburton pequeño (Warby) (pp. 214 - 215)
4

─Una metáfora muy interesante pergeñada por Gilbert


Ryle (1900-1976), en “El concepto de lo mental”(3) que
relaciona ‘cerebro’ y ‘mente’, la propone de esta forma:
«A un extranjero que visita Oxford o Cambridge por primera
vez, se le muestran los colleges, bibliotecas, campos de
deportes, museos, departamentos científicos y oficinas
administrativas. Pero luego pregunta: "¿Dónde está la
Universidad? He visto dónde viven los miembros de los
colleges, dónde trabaja el Registrador, dónde hacen
experimentos los científicos, pero aún no he visto la
Universidad donde residen y trabajan sus miembros". Se le
tiene que explicar, entonces, que la Universidad no es otra
institución paralela o una especie de contrapartida de los
colleges, laboratorios y oficinas ( 4 ). La Universidad es la
manera en que todo lo que ha visto se encuentra organizado.
Cuando se ven sus edificios y se comprende su coordinación,
puede decirse ‘que se ha visto la Universidad’.»
Además en este mismo libro Ryle también nos deja esta
bellísima perla:
"A pesar de que el cuerpo humano es un motor, no es
un motor ordinario, dado que algunas de sus
funciones están gobernadas por otro motor en el
interior del primero, siendo este segundo motor de
una clase muy especial. Es invisible, inaudible y no
tiene ni peso ni tamaño. No puede ser reducido a
pedazos y las leyes que lo gobiernan no son las que
conocen los ingenieros". Gilbert Ryle (p. 18)

( 3 ) Gilbert Ryle fue uno de los conductistas más acérrimos y que más denostó a Cartesio.
( 4 ) Todo este conjunto es a lo que nosotros denominamos “Campus”.
5

Monismo
─ Actualmente el monismo materialista ( 5 ) reduce al
fisicalismo (la mente es una función del cerebro), y que
cualquier contenido de la conciencia es literalmente
idéntico a un estado cerebral determinado. El dualismo es
ya es difícil de sostener, pues si bien se admite que el
conocimiento de las bases neuro-bio-físico-químicas del
cerebro aún presenta escaso desarrollo, es casi imposible
negar una relación entre los estados sinápticos neuronales
y las sensaciones o pensamientos, es decir, que mantener
que son dos sustancias separadas queda completamente
descartado.

¿Mente o Alma?
─Para un primer “approach” Steven Pinker en su libro
“Cómo funciona la mente” nos deja esta breve alegoría:
«La mente, puede considerarse como un sistema de
“órganos de computación” diseñado por selección natural
para resolver los problemas que enfrentaban nuestros
antepasados evolutivos en su estilo de vida cazador-
recolector.»
─En un sistema bien diseñado, los componentes son otras
tantas “cajas negras”(6) que llevan a cabo sus funciones
como por arte de magia. Y eso mismo cabe decir de “La
mente”, pues la facultad que nos permite reflexionar
sobre el mundo “no es capaz de mirar al interior de sí

( 5 ) El monismo, en contraposición al dualismo, afirma que sólo hay una sustancia. Hoy en día
casi todos los monismos son materialistas. Así, afirman que la única sustancia existente es la
materia (cerebro), aunque también se podría afirmar que no hay materia, sino sólo espíritu.
( 6 ) Steven Pinker en «Cómo funciona la mente» (p. 13)
6

misma”ni tampoco a las otras facultades que nos son


características para ver así qué las hace funcionar. Este
hecho nos aboca a una ilusión: la creencia de que nuestra
propia psicología proviene de cierta fuerza sobrenatural,
de una esencia misteriosa o de un principio omnipotente.
─A veces la gente suele mezclar otras dos nociones:
“mente” y “alma”, donde “El alma” es un concepto
antiguo utilizado por las religiones con el fin de infundir
miedo a “sus fieles” para que a las religiones, no se les
muera la gallina del huevo de oro. Aquellos que no creen
en religiones ni en espíritus eternos suelen asumir que el
alma y la mente son la misma cosa, aunque no lo son.
«En la actualidad sabemos que aquella “supuesta alma”
inmaterial puede ser “viviseccionada” (7) con el bisturí,
alterada con fármacos, detenida o activada mediante la
aplicación de corrientes eléctricas y puede extinguirse a
consecuencia de un fuerte golpe o por la simple falta de
oxígeno. Visto al microscopio, el cerebro presenta una
complejidad en su estructura física fascinante, y esta
complejidad se halla en plena correspondencia con la
riqueza de la mente. Pinker (8).»
─Debo destacar la sinceridad de V. S. Ramachandran,
neurocientífico de la Universidad de California en San
Diego, al dejarnos dejo la siguiente respuesta:
«¿El alma, como suele decirse, un espíritu inmaterial que
ocupa cerebros individuales y que sólo evolucionó en los
seres humanos?, todo esto es una completa tontería.
( 7 ) La Disección In vivo (Vivisección), una salvajada en toda regla y sin atenuantes.
( 8 ) Steven Pinker en «Cómo funciona la mente» (p. 76)
7

Creer en ese tipo de alma es básicamente superstición»


(Dean, 2007 - Dean C. “Science of the Soul?”)
─Eventualmente lleguemos a conclusiones similares a las
alcanzadas por Sir Thomas Browne (1605–1682) en su
famosa obra, la Religio Medici:
«Entre todos esos raros descubrimientos y piezas curiosas
que encuentro en la “Fábrica del Hombre”, no existe
Órgano ni Instrumento para el Alma racional; porque en
el cerebro no veo nada más importante de lo que puedo
descubrir en la garganta de una bestia, y este es un
argumento de la inorganicidad del Alma. Así somos
Homosapiens y no sabemos cómo; ¿hay en nosotros algo
que puede estar sin nosotros y existir después de nosotros?;
aunque es extraño que no tenga historia de lo que fue
antes de nosotros, ni pueda decir cómo entró en nosotros»
(Browne, 1635).
El la idea de lo que es el alma ha pasado por un proceso de
transformación a lo largo de los siglos hasta llegar a
convertirse en el concepto moderno de mente. Esto no
quita que aún se sigan utilizando ambos vocablos o
términos indistintamente como intercambiables.
─No quiero analizar aquí tonterías históricas tales como
por ejemplo cuando en el año 1907, el Dr. Duncan
MacDougall de Haverhill, Massachusetts, decidió pesar
diferencialmente el alma pesando a un ser humano en el
acto de morir.
8

─Leonardo da Vinci (1452-1519), con su asombroso genio,


colocó el alma por encima del quiasma óptico en la región
del tercer ventrículo anteroinferior (Santoro et al., 2009).
Llovió mucho desde entonces, eran otros tiempos…

Figura 1 – Ubicación del alma según el cuaderno de Leonardo

─Antes de sumergirnos aún más en “el reino de la mente”


quisiera resumir uno de los escritos actuales más bellos y
fuertes de Fernando Savater: “El alma mortal” donde el
genio nos regala pensamientos como estos:
«El destino del alma es el cuerpo. El alma sólo es —y nada
menos que es— el “comentario” que acompaña al margen
el texto que va estableciendo el cuerpo, auténtico sujeto
de la vida.
…Nuestra especie biológica, como todas las restantes
dotadas de vida, destina a los individuos que la componen
a la desaparición para así poder ser reemplazados por
otros semejantes. La misma necesidad que nos hace nacer
nos exige perecer, en un círculo sin fin ni finalidad, el
despropósito de cuya “circularidad” (círculo vicioso)
desesperaba al pesimista Schopenhauer.
9

…De modo que para los materialistas el alma es tan


mortal como el cuerpo y para los espiritualistas el cuerpo
es mortal pero el alma no, sino que, cuando naufraga
nuestra “envoltura carnal”, siempre tiene un bote
salvavidas listo para rescatarla. El cuerpo es en efecto una
“amalgama de partes”, reunidas transitoriamente en una
forma tal del mismo modo que dichas partes antes
pertenecieron a compuestos materiales diferentes con
otras formas distintas. Llámese a esas partes átomos,
genes o el nombre que la ciencia correspondiente les
otorgue en el momento actual.
…Lo cierto es que “esas partes” ni se crean ni se destruyen,
sólo se transforman (Lavoisier) en conjuntos variables que
se agregan y se disgregan según ritmos temporales más
largos o más breves. Lo que llamamos “muerte” del cuerpo
no es sino una metamorfosis hacia otras combinaciones
sucesivas, que reutilizan una y otra vez los elementos
materiales imperecederos. No se trata de una
desaparición final ni una aniquilación, solo de un cambio
dentro de una inagotable cadena de recomposiciones.
« Según el materialismo, el alma es tan mortal como el
cuerpo y le acompaña en su finitud; pero si vamos más
allá nuestra postura es que el alma es mortal aunque el
cuerpo realmente no lo sea. Es decir, que el alma no sólo
es mortal sino que es lo único mortal en el hombre. Sólo
“el alma” muere en nuestro tétrico mundo, nada más. Por
tanto nosotros los humanos, seres dotados de conciencia
autorreflexiva, es decir, de alma, somos los únicos
mortales del universo que conocemos». F. Savater
10

─Cuanto más se analiza una mente que piensa y siente ,

más nos cuesta aceptar el asociarla a una fría y aterradora


computadora orgánica.
Dado que la evolución humana aún está en ciernes
(aún no nos hemos despojado totalmente del “taparrabos”)
parece probable que los asombrosos poderes del cerebro
humano apenas hayan comenzado a desentrañarse. Si
pudiéramos utilizar nuestra materia gris para evitar
destruirnos a nosotros mismos, podríamos descubrir que
la historia de los potenciales superiores de la humanidad
apenas estaría en sus comienzos.

─Ennapadam S. Krishnamoorthy (2009) nos dice con un


extraordinario acierto qué es “La mente”:
« La mente... es una “Entidad virtual”, que refleja el
funcionamiento de las redes neuronales y los sistemas químicos
y hormonales de nuestro cerebro". No puede localizarse en
áreas particulares del cerebro, así toda la corteza cerebral y la
materia gris profunda forman componentes importantes. La
conciencia, la percepción, el comportamiento, la inteligencia, el
lenguaje, la motivación, el impulso, el impulso de superación y
el razonamiento del tipo más complejo son el producto de
vínculos extensos y complejos entre las diferentes partes del
cerebro. »

La Consciencia
─La consciencia es muy difícil de definir sin embargo John
Searle(9) se ha animado a dar una definición sencilla.

( 9 ) John Searle en “The Mystery of Consciousness”(p. 5)


11

Cuando se le preguntó si era posible definir qué es la


consciencia respondió:
«La gente siempre dice que la conciencia es muy difícil de
definir. Más bien pienso que es fácil de definir, si no se le
intenta dar una definición científica. No estamos listos
para una definición científica, sino para una “definición de
sentido común”. La conciencia consiste de todos aquellos
estados de sentimiento, sensación o de alerta que
empieza en la mañana cuando uno se despierta “de
dormir sin soñar”, y continúa todo el día hasta que nos
vamos a dormir o morimos o que de alguna forma nos
hagan inconscientes (una anestesia por ejemplo). Los
sueños, en esta definición, son una forma de conciencia.
Ésta es una definición de sentido común.»
«Sabemos que el cerebro produce conciencia, pero no
sabemos cómo» El cerebro es un órgano con rasgos y
propiedades intrínsecas. El pensamiento humano es
distinto a los procesos computacionales digitales ( 10 ).
Las únicas cosas intrínsecas en un ordenador son los
circuitos electrónicos y encontramos maneras de unir, en
ellos, computación con interpretación. En un ordenador
todo es relativo y se refiere a un observador, cosa que no
se da en las máquinas biológicas. La computación
matemática es un proceso mental abstracto que
encontramos maneras de implementar en una máquina
diseñada para ello. Pero es un error pensar en el cerebro
como un ordenador. ¡Es un órgano! No es más parecido a
un ordenador que un corazón o un estómago.»

( 10 ) Recordemos que esta es la opinión de Searle, pero no todos los filósofos piensan eso.
12

¿Qué es la cognición?
─El concepto “cognición” ─por todos utilizado y por nadie
definido─ deja su significado en manos de los diccionarios
que ya sabemos cómo se las gastan cuando intentan dar
definiciones sobre la terminología técnica.
La cognición definida correctamente sería como sigue:
El concepto de “cognición”(11) se puede definir como la
capacidad de algunos seres vivos de obtener información
de su entorno y, a partir de su procesamiento por parte
del cerebro, de interpretarla y darle un significado. En este
sentido, los procesos cognitivos dependen tanto de las
capacidades sensoriales como del sistema nervioso central.
Dicho de manera resumida, la cognición es la información
que puede ser plasmada en ideas y conceptos y que
podemos expresar más o menos mediante las palabras
(aunque no siempre hay lenguaje allí donde hay cognición,
como ocurre en animales no humanos y en personas con
ciertos tipos de afasia).

El Conductismo (12)
─El conductismo propone una salida estrambótica a las
tesis de las teorías dualistas y fisicalistas respecto del
problema de la mente y el cuerpo, porque niega la
existencia de la mente. Veamos cómo se las arreglan para
negar con alguna verosimilitud lo que parece un hecho
evidente para la mayor parte de los seres humanos.

( 11 ) Ver A. Torres - “Cognición: definición, procesos principales y funcionamiento”. Afasia:


trastorno debido a una lesión a las partes del cerebro responsables por el lenguaje.
( 12 ) De “Filosofía básica”, “Warby”, (pp. 222-223).
13

«Para los conductistas, cuando decimos de alguien que


experimenta dolor o que está irritado, no hablamos de la
experiencia mental de esa persona, sino de su conducta
pública real o posible en una situación hipotética. En otras
palabras, describimos lo que haría en tales y tales
circunstancias, es decir, su disposición a conducirse de una
determinada manera. Soportar un padecimiento es
mostrar tendencia a hacer muecas de dolor, llorar, gritar,
gemir, etc., según la intensidad del sufrimiento. Estar
irritado es mostrar una tendencia a gritar, a dar patadas
o a contestar con brusquedad. Aunque, cuando hablamos,
nos referimos a nuestros estados mentales, según los
conductistas lo que hacemos es abreviar la expresión de
un comportamiento y de una tendencia a actuar de un
modo determinado. Esta forma abreviada de expresar la
conducta mental nos ha hecho creer que la mente es una
cosa aparte. Gilbert Ryle, uno de los conductistas más
famosos, denominó a esta visión dualista “El dogma del
fantasma en la máquina”(13), donde el fantasma era la
mente y la máquina el cuerpo. ¿Problema? ¿Qué problema?
…Para el conductismo, la relación del cuerpo con la mente
es un pseudoproblema, no un problema genuino, ya que
la experiencia mental se entiende en términos de pautas
de comportamiento. Es decir, los conductistas no se
preocupan de solucionar el problema, porque, en realidad,
lo han descartado por completo.»
Aunque Wittgenstein, Ryle y los autores que los
siguieron no niegan la existencia de los procesos mentales,
sí afirmaron que no podemos conocer la experiencia
( 13 ) De donde el título de este apunte que fuera acuñado por Ryle pero yo me apropié de él.
14

psicológica de otras personas. Usamos las palabras para


hacer referencia a experiencias internas abstractas, de
manera que nunca las transmitimos de forma fiel o
completa (14).

El Funcionalismo
─Para seguir el razonamiento de John Searle sobre “El
Funcionalismo” voy a recurrir al famoso Warby, (alias el
“Warburton pequeño”, Filosofía básica) que iluminará el
tema con una analogía computacional (pp. 227-229).
«El funcionalismo, un enfoque de desarrollo reciente, está
destinado a hacer frente al problema mente/cuerpo. Se
centra en el papel funcional de los estados mentales: en la
práctica, esto significa concentrarse en las entradas
(inputs), las salidas (outputs) y la relación entre los
estados internos. Un funcionalista define cualquier estado
mental en términos de sus relaciones típicas con otros
estados mentales y sus efectos sobre la conducta. Así, un
pensamiento sobre el tiempo se define en términos de sus
relaciones con otros pensamientos y con la conducta: lo
que me lleva a tener el pensamiento; su relación con mis
otros pensamientos; y lo que me lleva a hacer. Como tal,
el funcionalismo se beneficia de algunas de las ideas del
conductismo –como que la actividad mental suele estar
íntimamente ligada a las disposiciones conductuales–, al
tiempo que admite que los acontecimientos mentales
pueden ser en realidad causas de la conducta.
…El funcionalismo puede entenderse más fácilmente a
través de una alegoría: la relación entre una computadora

( 14 ) Sobre este tema cabe recomendar el artículo “Conductismo filosófico” de Alex Figueroba.
15

y su programa. El software suele ser un complicado


sistema de instrucciones que actúa sobre el hardware de
la computadora, que se puede llevar a cabo físicamente
de varias maneras diferentes, pero con el mismo resultado.
El software generalmente se puede adaptar para su uso
en varios sistemas (computadoras) diferentes.
…Como teoría de la mente “El funcionalismo” se ocupa del
“software del pensamiento” más que del hardware. En
esto se parece al conductismo. Por el contrario, el
fisicalismo se preocupa por mostrar la relación entre
ciertos bits de hardware (el cerebro humano) y un paquete
de software particular (el pensamiento humano). El
funcionalismo no es una teoría sobre el hardware del
pensamiento, y, aunque resulta compatible con varios
tipos de “fisicalismo”, se mantiene en una posición neutral
sobre las clases de sistemas físicos de programas
mentales. Su interés se centra en las relaciones entre los
distintos tipos de pensamientos y la conducta.»

─Un factor que ha contribuido poderosamente al objetivo


de “cerebralizar” la mente son “las máquinas que piensan”.
La literatura paracientífica ha cometido todo tipo de
excesos en este terreno, con la licencia que confiere la
esperanza en un progreso indefinido y la inocencia que la
ignorancia permite. Las técnicas de cálculo y tratamiento
de la información han sugerido la posibilidad de imitación
de todos los comportamientos mentales, lo que debería
haber replanteado con el oportuno vigor la pregunta:
¿qué significa pensar?; pero la tendencia a considerar lo
mental un cierto tipo de producto del funcionamiento
cerebral cabe decir que ha prevalecido. En este punto no
16

estará demás anotar una sutilísima sugerencia de Malcolm


apoyada en una observación de Wittgenstein (Zettel, 605,
606): «la identificación de la mente con el cerebro se
beneficia del encanto de "lo oculto", de "lo mágico"
(1986:200). (15)»

─Para Searle (16) el Funcionalismo deja fuera una vez más,


el rasgo central de la mente: “La Consciencia”; por
ejemplo, ahora que se ha popularizado “la habitación o
el cuarto chino”, nos pide que imaginemos a un individuo
que se encuentra encerrado en una habitación y que no
entiende nada de chino. Sin embargo, en la habitación se
encuentra un cesto con inscripciones chinas y un libro (en
español) sobre cómo utilizar los símbolos chinos.
Supongamos que el individuo empieza a recibir por un
buzón de la habitación preguntas en chino y él sin saber
nada de chino comienza a correlacionar unos signos con
otros de tal forma que logra devolver parejas o conjuntos
de símbolos que constituyen respuestas a las preguntas
recibidas. Incluso su habilidad se perfecciona de tal
manera que sus respuestas son indistinguibles de las
dadas por un hablante chino.
Resumiendo: el individuo visto desde el exterior actúa
como si comprendiera chino, sin embargo, la realidad es
que no sabe ni comprende nada de chino. Para Searle lo
que hace el individuo en la habitación es lo mismo que
haría un programa de ordenador, un algoritmo: se limita
( 15 ) Ver José Luis González Quirós en “Mente y Cerebro”.
( 16 ) Este párrafo John Searle lo explica en amplitud y con lujo de detalles en su libro “Mentes,
Cerebro y Ciencia”. También lo explica David Papineau en Introducing Consciousness, –el
libro que recomienda Warburton de primero–, que explica el tema en forma gráfica a nivel
“pedestrian” en un formato de historieta.
17

a operar con símbolos. Por tanto, el funcionalismo al


comparar la mente con un ordenador, al comparar el
pensamiento con el manejo de signos, no es capaz de
ofrecernos una imagen completa de la mente. Pues
reduce la mente a “la sintaxis”, a seguir reglas y operar
con ellas, dejando de lado el significado y la comprensión,
en una palabra, “la semántica” (17).

Figura 2 – El cuarto chino (según Papineau)

De todas formas “La habitación china” no es una verdad


absoluta para nada y ha sido refutada por varios filósofos
muy actuales como el canadiense Steven Pinker así como
el australiano David Chalmers y otros. Las discusiones
resultan enrevesadas para un “pedestrian-87”, alias yo,
además es un tema para el cual más bien será el futuro
de la “IA fuerte” la que probablemente tendrá la última
palabra.

( 17 ) Como una “metáfora loca” me imagino la computadora como alguien que quiere
comunicarse en una legua extranjera pero necesita pensar en su lengua nativa para mantener
una conversación.
18

El Emergentismo
─La idea central del emergentismo asume que la mente
ha emergido de la evolución del cerebro, teniendo ya de
por si grandes implicancias en lo que respecta a la
perspectiva comparada y al concepto de mente aplicada
en animales no humanos. De esta forma la mente o “lo
mental” sería una propiedad de la materia (cerebro) que
interactúa y está influenciada por ella, pero que a su vez,
posee estructura y leyes propias. Esta postura posee
diferentes matices y cada una de ellos con sus críticas,
sobre todo porque se puede llegar a malinterpretar que
pueden existir elementos mentales sin asiento orgánico, o
por lo menos características de “lo mental” que no sean
abordables o explicables a través de lo que sucede a nivel
orgánico. A pesar de todo esto es una de las teorías –que
vinculan la mente con el cerebro– más aceptadas dentro
de la psicología (sobre todo la vertiente cognitiva).
El Emergentismo referido a la filosofía de la mente y
a las ciencias cognitivas, describe aquellas propiedades o
procesos de un sistema no reducibles a las propiedades o
procesos de sus partes constitutivas (la “totalidad” es
más que la suma de las partes, y por lo tanto no es
reductible a la sumatoria de estas).

Aclaración(18).– Algunos filósofos antiguos suponían que


los átomos, los elementos últimos de la Materia, deben
tener las mismas propiedades observadas en los objetos;
y más aún suponían que las propiedades del objeto,
independientemente del sujeto, le pertenecen ya no como
( 18 ) Este tema está muy bien tratado en el libro del filósofo George Henry Lewes - “Problems of
Life and Mind” (1875), en el capítulo “The rules of philosophising”.
19

elementos de la combinación entre objeto y sujeto, sino


como cualidades de la cosa per se; mientras que aún
mayor es el número de los que asignan a un factor de una
causalidad el carácter observado en un resultado debido a
varios factores.

Todo matemático sabe (p. 98) que hay innumerables


teoremas válidos para los números enteros que no lo son
para las fracciones, ya que las propiedades de las
fracciones suelen diferir ampliamente de las propiedades
de los números enteros. El error aquí señalado surge a
menudo al no discriminar entre partes componentes y
elementos constituyentes. Lo que es cierto para el todo
es generalmente cierto para cualquier parte de ese todo,
siendo la diferencia sólo cuantitativa. Una molécula de
agua tiene las propiedades de un litro de agua. Pero
incluso esto es cierto sólo para aquellas propiedades que
no dependen directamente de la cantidad: porque los
ensayos con sustancias finamente divididas muestran que
muchas sustancias comienzan a perder sus propiedades
molares al volverse moleculares, ya que algunos de los
efectos que dependen de las moléculas individuales, y
que masivamente estaban en equilibrio mutuo, luego
empiezan a manifestarse, perturbándose el equilibrio. La
distinción aquí dicha entre Componentes y Constituyentes,
o entre Partes y Elementos, es importante.

─Se considera que un número es la suma de sus unidades;


un cuerpo en movimiento sigue una trayectoria en una
dirección “dibujada” por las posiciones instantáneas
producidas tal como si cada una de las fuerzas incidentes
hubiera actuado sucesivamente sobre él durante un
20

instante infinitesimal; por el contrario, un producto


químico o vital es una “combinación de elementos” que
no se pueden ver en los elementos individuales. “Emerge”
de ellos como un fenómeno nuevo.

La triple i : inteligencia, instinto e intuición


─A modo de introducción voy a poner unas definiciones
con el fin de que queden referenciadas unas ideas sobre
las capacidades de “La triple i”. Pero el tema no se va a
quedar en esto ya que estas capacidades de los seres
vivos son inherentes a la evolución a la que me referiré
después de estas definiciones sucintas.
─Las características asociadas al concepto inteligencia,
como “capacidad de solucionar problemas, de razonar, de
adaptarse al ambiente”, han sido muy valoradas a lo largo
de la historia. Hoy en día se conoce que la inteligencia (o
inteligencias) se halla en todas las personas en mayor o
menor grado, incluso en los animales no humanos.
─Por su parte, hay comportamientos en los animales que
se presentan sin necesidad de que exista una experiencia
previa, es decir, que no son aprendidos. A este tipo de
comportamientos los llamamos innatos o instintivos, es
decir una capacidad que denominamos instinto.
─Y de tercera la intuición que “es la habilidad de conocer,
comprender o percibir algo de manera clara inmediata,
sin necesidad de la intervención de la razón.”
─En sentido anecdótico, para matizar, cabe recordar a
uno de los héroes de la ciencia más célebres de la historia,
21

el supuesto pináculo de la racionalidad Albert Einstein, a ,

quien se le atribuye la siguiente cita histórica:


«La mente intuitiva es un don sagrado y la mente
racional una sirvienta fiel. Hemos creado una sociedad
que honra al siervo y se ha olvidado del don.» Einstein

La evolución creadora
─A la sombra de este título voy a desarrollar lo relativo a
la “triple i” dejándome guiar por Henri Bergson a partir
de su libro de título homónimo a este párrafo. Hay que
“tomar conciencia” de que para entrar en temas tan
complejos como estos es imprescindible dar un paseo por
la evolución de la vida.
─Henri Bergson en “La Evolución Creadora”(19) desarrolla
un extenso y valioso estudio evolutivo del que vale tomar
unas cuantas perlas que habrá que enhebrar en estas
notas y documentar de donde provienen.

«La historia de la evolución de la vida, por incompleta


que todavía sea, nos deja entrever cómo se ha constituido
la inteligencia por un progreso ininterrumpido, a lo largo
de una línea que asciende, a través de la serie de los
vertebrados, hasta el hombre. Ella nos muestra, en la
facultad de comprender, un anexo de la facultad de
actuar, una adaptación cada vez más precisa, cada vez
más compleja y flexible, de la conciencia de los seres vivos
a las condiciones de existencia que les son dadas (B 6).

( 19 ) Las referencias a la “La Evolución Creadora” figurarán como (B [mi nº pág.]), p.ej. “(B 6)”,
es decir “B” de Bergson y “6” la página que contiene la idea de párrafo (resumida). Si hay varios
párrafos concatenados la referencia la pongo en el último de ellos.
22

La vida, desde sus orígenes, es la continuación de un


solo y mismo impulso que se ha repartido entre líneas de
evolución divergentes. Algo se ha agrandado, algo se ha
desarrollado por una serie de adiciones que han sido otras
tantas creaciones. Es este mismo desarrollo el que ha
llevado a disociarse tendencias que no podían aumentar
más allá de un cierto punto sin volverse incompatibles
entre sí (B 56-57).
En rigor, nada impediría imaginar un individuo único,
en el cual, como consecuencia de transformaciones
repartidas en miles de siglos, se hubiese efectuado la
evolución de la vida. O también, a falta de un individuo
único, podría suponerse una pluralidad de individuos
sucediéndose en una serie unilineal. En los dos casos la
evolución no habría tenido, si podemos expresarnos así,
más que una sola dimensión. Pero la evolución se ha
producido en realidad por intermedio de millones de
individuos sobre líneas divergentes, cada una de las cuales
abocaba a una encrucijada de donde partían nuevos
caminos, y así sucesiva e indefinidamente (ramificaciones).
Si nuestra hipótesis tiene algún fundamento, si las
causas esenciales que trabajan a lo largo de estos diversos
caminos son de naturaleza psicológica, deben conservar
algo de común a despecho de la divergencia de sus efectos,
como camaradas separados durante largo tiempo guardan
también los mismos recuerdos de la infancia (B 57).»

Han debido de producirse bifurcaciones, abrirse vías


laterales en las que los elementos disociados se
desarrollaban de una manera independiente; sin que las
23

partes dejaran de seguir avanzando debido al impulso


primitivo del todo. Algo del todo debe, pues, subsistir en
las partes. Y este elemento común podrá hacerse sensible
a los ojos de una cierta manera, quizá por la presencia de
órganos idénticos en organismos muy diferentes(B 57).»

─La tesis de Bergson (B 57) resultó creíble una vez que


investigadores de todo el mundo con sus investigaciones
llegaron a la conclusión expresada en el párrafo siguiente.

Los genes Pax-6 (*) de vertebrados e invertebrados codifican


factores de transcripción tanto con un dominio emparejado
como con un homeodominio ( I ). Se expresan en el ojo en
desarrollo y en el sistema nervioso central. Las mutaciones por
pérdida de función en mamíferos y moscas dan como resultado
una reducción o ausencia de ojos y la expresión dirigida de los
genes Pax-6 de Drosophila ‒la mosca de la fruta‒ y de ratón
induce estructuras oculares ectópicas en la Drosophila.

Estructuras oculares ectópicas en la Drosophila


Resulta así que la morfogénesis de los diferentes tipos de ojos
está controlada por una vía genética dependiente del gen Pax-6
y que los distintos tipos de ojos son de origen monofilético.(20)

(*) Sacha Glardon et al. en “Conservation of Pax-6 in a lower chordate, the


ascidian Phallusia mammillata”. University of Basel. Switzerland.
20
) Monofilético. Originado por evolución a partir de un único grupo ancestral.
24

Se ha aislado también un gen


homólogo del “Pax-6” de una ascidia
(pertenece al género de los tunicados)
que ocupan una posición importante en
la evolución temprana de los cordados
que se caracterizan por presentar un
cordón nervioso, posición dorsal, a partir
del cual, en los actuales animales más
complejos, se desarrolla el cerebro y la
espina neural.
La expresión ectópica del gen ascidio “Pax-6” indica una función reguladora
genética altamente conservada.

Seguimos con la “triple i”.- La inteligencia permanece


como el núcleo luminoso alrededor del cual el instinto,
incluso ampliado y depurado en intuición, no forma otra
cosa que una vaga nebulosidad. Incluso así, a falta del
conocimiento propiamente dicho, reservado a la pura
inteligencia, La intuición podrá hacernos aprehender lo
que los datos de la inteligencia tienen aquí de insuficiente
y dejarnos entrever el medio de completarlos (B 164-165).

La conciencia ha escindido en intuición e inteligencia, es


debido a la necesidad de aplicarse a la materia y seguir, al
mismo tiempo, la corriente de la vida. (B 165).
Podríamos suponer que, incluso en el animal más
rudimentario, la conciencia cubre, por derecho propio, un
campo enorme, pero que está constreñida, de hecho, en
una especie de torno: cada progreso de los centros
nerviosos, al dar al organismo la posibilidad de elección
entre un mayor número de acciones, lanzaría un
llamamiento a las virtualidades capaces de envolver lo
real, aflojaría sus ligaduras y dejaría pasar la conciencia
con más libertad (B 166). Veamos el siguiente ejemplo.
25

Por ejemplo, el recuerdo de un mismo espectáculo al que


hayan asistido el dueño con su perro, modificará de la
misma manera el cerebro de un perro y el cerebro de un
hombre, caso de que la percepción haya sido la misma;
no obstante, el recuerdo será completamente distinto en
el hombre que en el perro. En el perro, el recuerdo
permanecerá como cautivo de la percepción. Dicho
recuerdo no se despertará más que cuando venga a
reavivarlo una percepción análoga que reproduce el
mismo espectáculo, y se manifestará entonces por el
reconocimiento, mejor ejecutado que pensado, de la
percepción actual antes que por un renacer verdadero del
recuerdo mismo. (B 167)
El hombre, por el contrario, es capaz de evocar el
recuerdo a su gusto, en no importa qué momento,
independientemente de la percepción actual. No se limita
a actualizar su vida pasada, sino que se la representa y la
sueña. Al ser la misma la modificación local del cerebro a
la cual está ligado el recuerdo, la diferencia psicológica
entre los dos recuerdos no podrá tener su razón en tal o
cual diferencia de detalle entre los dos mecanismos
cerebrales, sino en la diferencia entre los dos cerebros
tomados globalmente: al poner en contacto entre sí un
mayor número de mecanismos, el más complicado de los
dos ha permitido a la conciencia libertarse de unos y
otros y alcanzar así la independencia (B 167).

Mente y Consciencia
«Por misteriosa que parezca, la mente no es más que
una colección de funciones del cerebro, como sentir y
percibir, tener motivaciones y emociones, dormir,
26

aprender y recordar, o pensar y hablar. De esas funciones


generales derivan otras más específicas, como ver y oír,
sentir hambre, sed o deseo sexual, soñar, envidiar u odiar,
amar, olvidar, crear, razonar e intuir, y otras muchas,
todas ellas resultado del trabajo de los millones de
neuronas del cerebro.»
«La mente no es una simple suma de capacidades
diferentes, sino un sistema funcional, pues lo que
caracteriza a un sistema es que las partes que lo integran
están relacionadas, se influyen unas a otras y funcionan
acopladamente. Esto supone una gran ventaja, pues con
ello la mente gana potencia, pero también es un
inconveniente, porque significa que cuando falla uno de
sus componentes, pueden también hacerlo otros o
incluso todo el sistema, toda la mente (21).»
─Conciencia viene a ser una especie de sinónimo de
comunicación, tanto si el diálogo es interior como si es
exterior. La conciencia con frecuencia es llamada yo.
William James (1989) cuestiona la existencia de la
conciencia como entidad subsistente, considera que no es
una entidad sino una función.
«La consciencia es un estado de la mente que
permite darnos cuenta de nuestra propia existencia, de la
de los demás y de las cosas que pasan en nuestro mundo.
Es el estado que perdemos cuando dormimos sin soñar o
cuando nos anestesian en el quirófano. El hecho de dormir
o de estar anestesiados no nos hace perder la mente, la
cual sigue trabajando, pero de manera inconsciente. Sólo
la perdemos si el cerebro deja de funcionar, pero eso no
( 21 ) Ignacio Morgado. “El cerebro y la mente humana”. ( )
27

ocurre en ambas situaciones ya citadas. En ellas el cerebro


sigue funcionando, aunque de un modo diferente al
normal, y por eso perdemos la consciencia (22).»
«Gracias a [la autoconsciencia] el poder de la mente
aumenta exponencialmente y nos convierte a cada uno de
nosotros en un explorador profundo de nuestros propios
pensamientos y sentimientos. Pensando sucesivamente
sobre pensamientos, ─como si nuestra mente fuera una
especie de “matrioska”, esas bonitas muñecas rusas─ ,
podemos alcanzar cotas de imaginación extraordinarias
que nos ayudan a valorar incluso lo que todavía no existe,
pero podría existir en el futuro, para tomar decisiones y
comportarnos convenientemente (23).»
No existe, la conciencia dividida en trozos o estados,
sino que es una continuidad psicológica. A semejanza de
Darwin, James afirma que el contenido de la conciencia es
menos importante que lo que hace; lo primordial es su
función, no su contenido. La función primaria de la
conciencia es elegir. La conciencia crea y al mismo tiempo
está al servicio de los fines del organismo, el primero de
los cuales es la supervivencia por medio de la adaptación
al entorno (24).
Sin embargo es la consciencia, y no la mente, lo que
desaparece cuando nos desmayamos o nos anestesian en
un quirófano. Pero del mismo modo que la imagen de un
televisor nos presenta la información del resultado final
del procesamiento de los datos que tiene lugar en sus

( 22 ) Ignacio Morgado. “El cerebro y la mente humana”. ( )


( 23 ) Íbidem (22). [ibidem: se usa cuando una obra se cita más de una vez en forma consecutiva]
( 24 ) José Eduardo Moreno et al. “El sí mismo” Una noción clave de la psicología…”
28

circuitos electrónicos y no del proceso mismo que tiene


lugar en ellos, la consciencia no es más que un estado
informativo de la mente que nos permite conocer el
resultado final del sofisticado análisis y procesamiento de
información que tiene lugar continuamente en nuestro
cerebro.
Más cerca del proceso mismo, pero lejos aún de su
explicación, las técnicas modernas de tomografía o
resonancia magnética funcional nos ofrecen vistosas
imágenes cromáticas de aquellas partes o regiones del
cerebro cuyas neuronas están activas al unísono de los
procesos mentales, sean o no conscientes. Aún con sus
limitaciones, incluyendo la de no ser una ventana abierta
a todos los procesos y contenidos de la mente, el
fenómeno de la consciencia constituye una experiencia
singular extraordinariamente útil, pues confiere a los
organismos una gran flexibilidad para conocer e interpretar
el mundo y regular su propio comportamiento (25).

─Me he propuesto no entrar en aspectos de la psicología


aunque cuando de Consciencia se trata es inevitable
merodear los confines de esta especialidad. Es que, el
hombre es un ser que vive y que sabe que vive, es decir
que posee conciencia de la propia vida. El significado y
función de la conciencia es saber para qué vive y vivir
conforme a ese saber. De este modo la conciencia
verdaderamente humana comienza con la reflexión, con
el volver sobre sí de la autoconciencia, forma acabada de
ser consciente. La conciencia significa también anticipación,
posibilidad de elección.
( 25 ) Ignacio Morgado. “Qué es la mente? ¿cómo surgió? (p.14)
29

El estudio del yo y de la personalidad nos introduce


naturalmente en el estudio de la conciencia, ya que
el yo y sus facultades son conciencia de sí como
sujeto y principio de la vida psicológica. (Jolivet,
“Curso de Filosofía” 1965, pág. 207).
La conciencia psicológica es la función por la cual
conocemos nuestra vida interior, es decir nuestros estados
psicológicos, a medida que se nos van presentando. A esta
función se la suele denominar conciencia subjetiva por
oposición a la conciencia objetiva que es el conjunto de
nuestros estados psíquicos.
Jolivet (26) distingue la conciencia espontánea, que
acompaña a todos los estados psicológicos permitiendo
que todos estos estados no sean extraños al sujeto, de la
conciencia refleja que consiste en volver deliberadamente
sobre los estados psíquicos a fin de observarlos y, por lo
tanto, le permite al sujeto escapar del determinismo de
las representaciones y tomar posesión de sí mismo (27).

Subconsciente o Inconsciente
─Cuando suprimes un impulso o deseo, lo estás forzando
a ir por debajo del nivel de conciencia. Pero cuando
empujas lo que se siente demasiado peligroso como para
ocultarlo muy abajo en la conciencia, en algún momento
ya no es reconocible. Y de eso se trata la represión. Es
una reacción involuntaria, ya que representa un
mecanismo psicológico de defensa, y todos esos
funcionamientos de autoprotección son instintivos que

( 26 ) Jolivet, Régis (1965). Curso de Filosofía. Buenos Aires: Declée de Brouwer Ediciones.
( 27 ) José Eduardo Moreno et al. “El sí mismo” Una noción clave de la psicología” (pp. 27-28).
30

operan de forma autónoma y (para bien o para mal) rigen


tu comportamiento.
«Considera que los seres humanos están programados
innatamente para la supervivencia, o, más exactamente,
cualquier cosa que se perciba en un momento particular
como conmensurable con la supervivencia. Es decir, por sí
sola, tu mente logra eliminar de la conciencia cualquier
cosa experimentada como una amenaza mortal, ya sea
física, mental o emocional.
…Pero en última instancia, este plan biológico conlleva
desafortunadas ramificaciones al final del día. En aquel
entonces, careciendo de los recursos para hacer frente
con eficacia, y mucho menos superar, un peligro
profundamente sentido, te sentías abrumado, tal vez
incluso como paralizado. Consecuentemente, tu aparato
psicoprotector "preprogramado" (es decir, las defensas
psicológicas freudianas como la disociación, negación,
desplazamiento o proyección) intervinieron para aliviar tu
angustia intolerable. Y debe agregarse que todas tus
defensas residen en tu mente inconsciente, que es otra
forma de decir que están mentalmente reprimidas.
…Entonces, para comprender mejor tu “inconsciente”, es
fundamental que comprendas que esta es la parte de tu
ser que reprime los recuerdos extremadamente
desagradables o los esconde lejos de ti. Como dice un
autor, es ese aspecto de la mente que incluye ideas
socialmente inaceptables, deseos, recuerdos traumáticos
y emociones dolorosas que han sido reprimidas. Una vez
más, en ese autoconsiderado momento de crisis todavía
no habías desarrollado la capacidad de lidiar efectivamente
31

con lo que se consideraba gravemente amenazante a tu


bienestar.

…Diferenciar entre el inconsciente y el subconsciente es


complicado. Y, de hecho, varios autores han observado
que en el lenguaje común se emplean indistintamente, y
también por muchos escritores profesionales. Al igual que
al distinguir entre lo que es reprimido y lo suprimido, es
útil pensar en la conciencia como análoga a la punta de
un iceberg: está por encima del agua, completamente
visible. El inconsciente y el subconsciente, mientras que
en conjunto son mucho más grandes de lo que el ojo
puede ver, ambos existen por debajo de lo que es
fácilmente perceptible. Entonces, la única forma
significativa en que se pueden distinguir es a través de la
comprensión de su relativa inaccesibilidad (28).»

Dormir y soñar
«Durante el sueño el cerebro puede estar tan activo y
trabajar incluso más que cuando estamos despiertos, por
lo que más bien es como si en el cerebro hubiera dos
aceleradores, uno para estar despiertos y otro para activar
y mantener el sueño.

( 28 ) Leon F. Seltzer. Autor de Paradoxical Strategies in Psychotherapy. Ver: “Subconsciente


vs. Inconsciente: cuál es la diferencia”
32

…El sueño potencia el aprendizaje y la memoria, pues del


mismo modo que cada vez que recordamos algo
reactivamos su memoria y la hacemos más fuerte y
estable, la reactivación de lo aprendido ocurre también
inconscientemente cuando dormimos.

…Pero quizá la más sorprendente de sus funciones es que


el sueño integra los contenidos de las nuevas memorias
que adquirimos en las ya existentes, pues, por ejemplo,
incorpora nuevas palabras en el léxico mental que ya
tenemos. También genera nuevas asociaciones y extrae
características y reglas ocultas en el conjunto de la
información recibida, es decir, mientras dormimos el
sueño crea un nuevo conocimiento que supera a la suma
del preexistente en el cerebro.
El sueño es un gran promotor de ese tipo de
conocimiento que surge como por arte de magia, pero
que en realidad se basa en un reprocesamiento de la
información precedente almacenada en el cerebro. Si,
mientras dormimos, como acabamos de explicar, esa
información se combina de manera inconsciente y da
lugar a generalizaciones, extracción de regularidades y
reglas, inducciones y deducciones, no es extraño que
cuando despertamos hayamos generado un nuevo
33

conocimiento que supera a la simple suma del que ya


teníamos (29).»

El habla
─Dotados ya de una mente consciente, las presiones y
dificultades ambientales para protegerse, hallar comida y
reproducirse, generaron en nuestros antepasados
homínidos la necesidad y el deseo de relacionarse más
estrechamente entre ellos, de ayudarse y cooperar para
afrontar más eficazmente tales dificultades. En ese
contexto, en un tiempo aún bastante indeterminado,
aparece progresivamente el lenguaje hablado, una pieza
fundamental para la socialización de los homínidos.
Fundamental no sólo por ser un vehículo de comunicación,
sino también, y quizá más importante, por catapultar las
propiedades de la mente, pues los fonemas y los
sintagmas, engarzados mediante la sintaxis, constituyen
el mejor sistema concebible de representación de
cualquier entidad, real o imaginada, concreta o abstracta,
en la mente humana con independencia del contexto (30).

( 29 ) Ignacio Morgado. “El cerebro y la mente humana”. ( )


( 30 ) Íbidem (29). “¿Qué es la mente? ¿cómo surgió?” (Cap. 19)
34

─Hace unos 60 mil años, los seres humanos salieron de


África y se empezaron a dispersar al resto del mundo. Los
investigadores de la Universidad de Reading piensan que,
durante la Edad de Piedra, los Homo sapiens ya se
transmitían el conocimiento de manera oral. Es decir: se
enseñaban mutuamente cómo construir herramientas no
sólo con rocas, sino con huesos e incluso con pedazos de
madera más trabajados.

«Los seres humanos en la Edad de Piedra tenían ropa,


zapatos y hacían refugios, y cazaban juntos para comer»,
detalla Pagel. «Hace 40 mil años, y posiblemente incluso
antes, los humanos modernos dibujaron imágenes en las
paredes de las cuevas (31).»

Fin
( 31 ) Andrea Fischer. National Geographic (Historia) 5 septiembre, 2022
35

PostData
─Me pareció interesante el tema del gen Hox, y ya que lo
mencioné en el transcurso de estos apuntes en el ejemplo
de la Drosophila voy a transcribir el interesante artículo
de Jorge Garrido Bautista:

«Los genes Hox son grosso modo un grupo de genes


que controlan el desarrollo embrionario de los animales,
más concretamente su eje anteroposterior. La historia de
estos genes se remonta a 1894. Por aquel entonces uno
de los primeros genetistas de la historia, el inglés William
Bateson, descubrió en la mosca de la fruta (Drosophila
melanogaster) ciertas anormalidades morfológicas. En sus
estudios teratológicos, Bateson observó que ciertas
partes del cuerpo de la mosca aparecían en otras
regiones. A estas variaciones las llamó homeosis (que
significa literalmente semejanza). Décadas más tarde los
biólogos Calvin Bridges y Morgan observaron en esta
misma especie de mosca que ciertas identidades de una
parte del cuerpo se convertían en otras distintas o se
duplicaban. Encontraron por ejemplo que un segmento
del tórax estaba duplicado y que la mosca poseía dos
pares de alas en lugar de uno solo. A estos cambios los
denominaron mutaciones homeóticas. No fue hasta 1983
cuando estas mutaciones se describieron con rigor y
fundamento genético. Los grupos de genes implicados en
estas variaciones homeóticas fueron descritos de forma
independiente por Walter Gehring en la Universidad de
Basilea, Suiza, y por Matthew Scott y Amy Weiner en la
Universidad de Indiana. Ambos grupos descubrieron que
los genes implicados en las mutaciones homeóticas
36

estaban divididos en dos grupos. Estos dos grupos génicos


se encontraban en el cromosoma 3 de Drosophila
melanogaster y los llamaron Antennapedia y Bithorax: el
primero se encargaba de regular el desarrollo de la cabeza
y los segmentos torácicos anteriores, y el segundo del
abdomen y segmentos torácicos posteriores.

Con el tiempo se descubrió que la secuencia de estos


genes Hox tenía mucha homología (o semejanza) con
ciertos genes que se encontraban en otros grupos
animales. En un inicio se comprobó que estos genes es
encontraban en todos los animales con simetría bilateral
(aquellos cuyo cuerpo puede dividirse en dos mitades
especulares), pero con el tiempo se descubrió que estaban
presentes incluso en los animales que no mostraban un
eje anteroposterior diferenciado, es decir, que no poseían
una cabeza ni una cola como tal. Aunque no agrupados,
existen homólogos de los genes Hox en las esponjas,
medusas o ctenóforos. Incluso se han descrito genes
similares en hongos y plantas, los genes Mads.
37

¿Y son los genes Hox los mismos genes que


encontraron Walter Gehring, Matthew Scott y Amy
Weiner? Sí y no. Estos biólogos describieron lo que se
conoce como genes homeóticos, y dentro de los genes
homeóticos se encuentran los genes Hox. Los genes
homeóticos se definen como genes implicados en el
desarrollo embrionario de los animales y que determinan
la identidad de sus segmentos o partes corporales. Una
característica fundamental de estos genes es que todos
poseen una secuencia de 180 nucleótidos que codifica
para una región de la proteína que dan lugar. Esta región
se denomina homeodominio. Por cierto, el nucleótido es
cada uno de los peldaños del ADN o ARN y el aminoácido
el peldaño de las proteínas. Pues bien, dentro de los
genes homeóticos encontramos tres grupos: genes NK,
genes ParaHox y genes Hox. Aunque todos están
implicados en el desarrollo embrionario del animal de una
forma u otra, los genes Hox se encargan
fundamentalmente de definir el eje anteroposterior
usando un sistema muy particular. Los Hox se encuentran
agrupados dentro de un cromosoma siguiendo un
determinado orden y este mismo orden es el que siguen
al expresarse en el organismo. Es decir, que el orden que
muestran en el cromosoma se corresponde con el orden
de expresión en el eje anteroposterior del animal.
Simplificando: los genes del extremo derecho se expresan
antes y en la parte anterior del animal, y los del extremo
izquierdo después y en la parte posterior. Esta propiedad
se conoce como principio de colinearidad temporal y
espacial, y se cumple en todos los grupos de genes Hox
aun cuando éstos estén dispersos en el genoma.
38

Ya hemos dicho que la principal función de los Hox


es establecer el eje anteroposterior del animal. Sin
embargo se ha visto que algunos Hox están involucrados
en otras funciones del desarrollo como la formación del
órgano luminiscente de las luciérnagas, el alargamiento
de segmentos de las patas posteriores de algunos
insectos o la formación del cráneo de los vertebrados.
Una vez los genes Hox delimitan la identidad de los
segmentos del cuerpo, estos codifican para proteínas
(siempre con el homeodominio) que se encargan de
activar otros genes. Estos genes activados desencadenan
en última instancia la formación de los órganos o
extremidades de dicho segmento.

¿Pero qué pasa con aquellos animales con planes


corporales donde no hay un patrón regionalizado o que
no tienen extremidades? Pongamos por ejemplo las
serpientes. Las serpientes, u ofidios, pertenecen al grupo
de los reptiles y no tienen extremidades. Los reptiles se
engloban, junto con los mamíferos, anfibios y aves, en el
grupo de los tetrápodos (del griego «cuatro patas»).
Aunque no las presenten en su estado juvenil o adulto,
las patas sí pueden observarse durante su desarrollo
embrionario. La característica distintiva del esqueleto de
las serpientes es que está desregionalizado, es decir, que
no presenta regiones especializadas o morfológicamente
diferentes al resto; todo el esqueleto es similar a
excepción del cráneo. Sin embargo, las serpientes
presentan los mismos grupos de genes Hox que el resto
de vertebrados. ¿Cómo lo hacen entonces para suprimir
el desarrollo de sus extremidades en su estado juvenil y
adulto?
39

Un estudio de Woltering y sus colaboradores de


2009 dilucidó el porqué de esta peculiaridad. Dentro de
los grupos de genes Hox, el grupo 10, llamado Hox10,
controla la formación de las vértebras lumbares y
posteriores. Los genes del grupo Hox10 provocan la
inhibición del desarrollo de las costillas, por lo que la
inactivación de estos genes produce un incremento en el
número de vértebras con costillas. Esto es precisamente
lo que sucedió en el linaje de las serpientes hace varios
millones de años. En su estudio, Woltering y sus
colaboradores concluyeron que en el grupo de las
serpientes los genes Hox10 perdieron la habilidad de
suprimir el desarrollo de vértebras con costillas en la
parte torácica y posterior. Este evento mutacional de
supresión dio lugar a un esqueleto alargado y sin
extremidades.

Este es solo un ejemplo de los muchos en los que


variaciones en los genes Hox dan lugar a nuevas especies
o grupos de animales. La evolución de los grupos de
genes homeóticos se ha estudiado exhaustivamente en
varios grupos animales y ha permitido comprender con
mayor facilidad cómo se han diversificado los planes
corporales existentes. Pero este tema queda reservado
para una próxima entrega.»
40

Referencias:

1. J.M. Woltering, Freek J. Vonk, Hendrik Muller, Nabila


Bardine, Ioana Laura Tuduce, Merijin A.G. de Bakker,
Walter Knoechel, Ioan Ovidiu Sirbu, Antony J. Durston y
Michael K. Richardson (2009). Axial patterning in snakes
and caecilians: evidence for an alternative interpretation
of the Hox code. Developmental Biology, 332 (1): 82-89.
2. Sanjay V. Ganeshkar, Ambesh Kumar Rai y Joe E.
Rozario (2015). The master of craniofacial orchestra:
homeobox genes and neural crest cells. International
Archives of Integrated Medicine (IAIM), 2 (7): 162-170.
3. Steven Hrycaj y Deneen Wellik (2016). Hox genes and
evolution. F1000Research, 5: 859.

¡ Seis premios Nóbel ! :


¿A qué se debe la fascinación por la mosca de la fruta?

Este artículo tiene más de 6 años. Las Drosophila


comparten el 60 por ciento del ADN humano, lo que las
hace perfectas para la investigación que ha dado lugar a
avances vitales en el tratamiento del cáncer, el autismo,
la diabetes y muchos otros males.
Robin McKie, editor científico
Dom 8 de octubre de 2017 01.05

Am not I
A fly like thee?
Or art not thou
A man like me?
41

Con estas líneas de La mosca, William Blake planteó


una cuestión de presciencia inusual para un poeta que
escribió hace 200 años. A primera vista, parece haber
pocas similitudes entre el Homo sapiens y los insectos
aéreos. Sin embargo, Blake no estaba tan seguro. Podía
ver conexiones. Y en los últimos años, la ciencia ha
descubierto que probablemente tenía razón. Resulta que
las moscas de la fruta tienen características comunes con
los humanos en un grado notable (compartimos el 60%
del mismo ADN), un punto subrayado la semana pasada
cuando el comité Nóbel otorgó otro premio a los
científicos que han utilizado Drosophila melanogaster
como base de investigación innovadora.
─Si no supiéramos que se trata de un insecto milimétrico
la siguiente imagen podría quitarnos el sueño, pero si la
analizamos en detalle no nos queda más remedio que
admirar la sofisticación que exhiben estas curiosas fauces.
42

En este caso, Jeffrey Hall, Michael Rosbash y Michael


Young, todos ellos residentes en Estados Unidos,
recibieron el premio Nóbel de fisiología o medicina por su
trabajo sobre los mecanismos moleculares que controlan
los ritmos circadianos, es decir, el reloj biológico de 24
horas que controla las vidas en todo el reino animal.
Fundamentalmente, este trabajo se realizó en gran
medida experimentando con moscas de la fruta.

Tampoco fue esta la primera vez en la investigación


de Drosophila. Al menos otros cinco grupos han recibido
premios Nóbel por su trabajo utilizando moscas de la
fruta para desentrañar los secretos de la fisiología
humana y la biología en general. Esta historia de amor del
Novel con la drosophila comenzó a principios del siglo XX,
cuando el biólogo estadounidense Thomas Morgan utilizó
moscas de la fruta para confirmar que los genes están
ubicados en los cromosomas como cuentas en un hilo, y
que algunos genes están vinculados; en otras palabras, se
heredan juntos. Al hacerlo, Morgan estableció la genética
como una ciencia moderna.

Desde entonces, la disciplina se ha basado (en un


grado sorprendente) en la investigación de la mosca de la
fruta, lo que ha dado lugar a avances en una amplia gama
de temas. Hoy en día, los científicos creen que alrededor
del 75% de los genes de enfermedades humanas
conocidas tienen una coincidencia reconocible en las
moscas de la fruta. Estos incluyen el síndrome de Down,
el Alzheimer, el autismo, la diabetes y todos los tipos de
cáncer. "Es casi como si estuvieran diseñados para ayudar
a los científicos", dice el genetista Steve Jones.
43

Como sugiere su nombre, a las moscas de la fruta les


gusta comer fruta, especialmente la variedad que está
madura, y aparecen en verano para posarse en manzanas,
peras y bebidas dulces. (De ahí la observación de Groucho
Marx de que “el tiempo vuela como una flecha pero la
fruta vuela como un plátano”.) No representan una
amenaza para la salud, pero tienen una serie de
características que las convierten en forraje de laboratorio
ideal: las drosophila tienen un ciclo de vida de dos
semanas. Comen harina de maíz, levadura y azúcar, y
poco más, y pueden alojarse en diminutos tubos.

Si Juntas un macho y una hembra, quince días


después tienes una nueva generación de moscas de la
fruta para estudiar", dijo Simon Collier, director de la Fly
Facility de la Universidad de Cambridge. "Eso las convierte
en una herramienta muy poderosa para estudiar las
mutaciones en genes".

Por sí solo, eso sería bastante útil. Sin embargo, la


mosca de la fruta posee otras características clave que
impresionan a los científicos. El genoma de Drosophila
tiene sólo cuatro pares de cromosomas. Los humanos
tenemos 23. Eso significa que es mucho más fácil
manipular y estudiar la función de los genes y
comprender cómo interactúan. "Además, los genes de la
mosca de la fruta tienen tasas de mutación muy altas y
eso las hace muy útiles para estudiar", dice Jones. “Los
cambios que producen estas mutaciones se pueden
rastrear con bastante facilidad en un organismo
relativamente simple como la drosophila. En animales
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más complejos, como ratones o hombres, estos cambios


son mucho más difíciles de rastrear”.

Podemos planificar un experimento con una mosca


de la fruta y tener el resultado en tres semanas. En un
ratón que podría tardar un año.
Andreas Prokop, biólogo
Como resultado, la mosca de la fruta ha
desempeñado un papel clave en el desciframiento de los
procesos biológicos durante el último siglo. "Gracias a
este trabajo, Drosophila es ahora el organismo más
conocido del planeta", afirmó el profesor Andreas Prokop,
de la Universidad de Manchester. “Gracias a este
conocimiento, podemos planificar un experimento con
una mosca de la fruta y tener el resultado en tres
semanas. En un ratón eso podría tardar un año. Las
moscas de la fruta ofrecen una vía rápida y económica
para comprender cuestiones biológicas complejas que
luego pueden traducirse en aplicaciones médicas”.

En el caso de Prokop, la mosca de la fruta ha


aportado una nueva comprensión de las extensiones de
las células nerviosas conocidas como axones. Estos se
degeneran a medida que las personas envejecen, pero de
manera mucho más pronunciada si padecen Alzheimer u
otra enfermedad degenerativa. “Podemos cultivar
neuronas de Drosophila en cultivo y utilizarlas para
estudiar el desarrollo de los axones. Eso nos ayuda a
obtener una nueva comprensión de las causas de las
enfermedades neurodegenerativas”.
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Otro ejemplo lo proporciona el trabajo del Instituto


de Investigación del Cáncer. "Existe un proceso biológico
conocido como muerte celular que ocurre en todos los
seres vivos, desde los gusanos hasta los humanos", dijo el
profesor Pascal Meier, jefe del laboratorio de muerte
celular e inflamación de la unidad de cáncer de mama del
instituto. “Esencialmente, se trata de un mecanismo
suicida fundamental para la vida, y los aspectos clave se
descubrieron por primera vez en las moscas de la fruta.
Cuando una célula se daña, se desencadena su muerte, un
proceso conocido como apoptosis (32), y se elimina, lo que
permite que los órganos permanezcan sanos”.

Sin embargo, en el cáncer, la muerte celular no se


desencadena, y esto ayuda al proceso por el cual los
tumores se propagan. "Ahora sabemos, gracias a la
investigación sobre la mosca de la fruta, que están
involucradas moléculas conocidas como inhibidores de las
proteínas de la apoptosis (IAP)", dijo Meier. “Actúan para
bloquear la muerte celular. En otras palabras, si los
niveles de IAP son elevados, se previene la apoptosis y se
propagan los cánceres”.
Por ello, los científicos ahora están probando
fármacos que pueden inhibir las IAP en humanos y
permitir así que la apoptosis recupere el control de las
células. "Es un enfoque muy prometedor", afirmó Meier.
“Sin embargo, el comportamiento de las IAP en humanos
es más complejo que en las moscas de la fruta y eso
complica la búsqueda de drogas. Sin embargo, es una vía

( 32 ) Modalidad específica de muerte celular programada, que participa en el control del


desarrollo y del crecimiento celulares.
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de tratamiento del cáncer que no habría existido hoy si no


hubiéramos hecho descubrimientos básicos utilizando
moscas de la fruta”.

Hoy en día, el tema de las moscas de la fruta es una


tarea importante en los centros de investigación. Las
instalaciones para moscas de Cambridge albergan 60.000
tubos que contienen drosophila y proporcionan moscas
cuidadosamente cruzadas para unos 30 grupos de
investigación. "La gran mayoría de estos científicos están
investigando las condiciones humanas o problemas
biológicos generales", dijo Collier. “Sólo uno o dos
participan en investigaciones sobre insectos. Eso muestra
la utilidad de la investigación sobre la mosca de la fruta
para la investigación biológica en general y para
comprender cómo funciona el cuerpo humano en
particular”.

Por supuesto, no todo el mundo está convencido del


valor de la investigación sobre la mosca de la fruta. En su
candidatura electoral de 2008 para ser vicepresidenta de
Estados Unidos, Sarah Palin –en uno de sus primeros
discursos políticos– hizo todo lo posible para denunciar
los experimentos con drosophila. “Realmente no tienen
mucho sentido y, a veces, estos dólares se destinan a
proyectos que tienen poco o nada que ver con el bien
público. Cosas como la investigación de la mosca de la
fruta. No bromeo”, anunció.

Palin instó a que se gastara más dinero en prioridades


de investigación particulares, como el autismo,
comentarios que fueron aprovechados por científicos
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enfurecidos que señalaron que sólo unos años antes, los


científicos habían identificado una sustancia química
llamada neurexina que en algunas formas parece ser una
sustancia genética, factor de riesgo para el autismo. Y no
hay premio por adivinar dónde se identificaron por
primera vez las neurexinas: en las moscas de la fruta.
Como señaló Richard Wolffe, corresponsal principal de
Newsweek en la Casa Blanca, este fue “el comentario más
estúpido, ignorante y desinformado que hemos visto de la
gobernadora Palin y ha habido mucha competencia por
ese premio”.

Afortunadamente, otros han apreciado más el uso


de moscas de la fruta en la investigación, incluido Michael
Rosbash, uno de los ganadores del Premio Nóbel de
Medicina la semana pasada. Se enteró de que había
ganado el premio cuando el presidente del comité Nóbel
lo llamó a las cinco de la mañana, hora local. "Cuando
suena el teléfono fijo a esa hora, normalmente es porque
alguien ha muerto", dijo Rosbash la semana pasada.
Entonces recibió la buena noticia. “Estoy muy contento
por la mosca de la fruta”, respondió.

( ) Homeodominio. Secuencia fija de 60 aminoácidos que contienen las proteínas producidas


I

por genes homeóticos –genes que participan en el desarrollo de los organismos y que
determinan la identidad de los segmentos o partes individuales del embrión en sus etapas
iniciales–, que controlan el plan general del embrión, similares en las distintas especies.

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