Circulacion en Organismos Unicelulares
Circulacion en Organismos Unicelulares
Circulacion en Organismos Unicelulares
Los organismos unicelulares del reino monera, como las bacterias; del reino protista,
como los protozoos y algas; y del reino de los hongos como las levaduras no tienen
sistemas circulatorios especializados. Los nutrientes ingresan a la célula a través de la
membrana celular, por medio de los mecanismos de transporte pasivo y activo. Cuando
las sustancias se encuentran en el interior de la célula, son transportadas al lugar donde
se necesitan, gracias a tres tipos de movimientos: Movimientos citoplasmáticos, motores
moleculares y vesículas de transporte.
Mientras que los animales gastan mucha energía en mover el corazón, las plantas
sorprendentemente son capaces de elevar la savia bruta contra la gravedad y sin
gasto de energía. El movimiento de la savia bruta puede explicarse bien porque se
producen una presión positiva que la empuja (teoría de la presión radicular), o bien
porque existe una fuerza succionadora que, desde arriba, “tira” del agua y de las
sales minerales (teoría de la cohesión-tensión). Aunque en realidad participan
ambos mecanismos, se han obtenido pruebas experimentales que apoyan que la
cohesión-tensión es la teoría principal que explica el movimiento de la savia bruta
por la xilema.
4. Pérdida de agua por transpiración: Las plantas pierden agua por evaporación
constantemente en las hojas mediante la difusión simple. A este proceso se le
conoce como transpiración. Las plantas logran regular la pérdida de agua gracias
a diferentes adaptaciones morfológicas:
Presencia de estomas que son pequeños orificios que se encuentran en la
epidermis de la hoja; estos se cierran o se abren dependiendo de las
condiciones ambientales.
Presencia de células oclusivas en las estomas formando el ostiolo, que
regula la apertura o cierre del poro estomático y por consiguiente, regula la
pérdida de agua en forma de vapor.
Presencia de cutícula que es una capa externa de cera que recubre las
plantas y evita la desecación.