Actividades Español Ciclo V Infortec
Actividades Español Ciclo V Infortec
Actividades Español Ciclo V Infortec
Actividad
Para la Casa
Actividad
Para la Casa
Actividad
Para la Casa
CIUDAD Y LITERATURA
La ciudad puede ser perfectamente un tema literario, escogido por el interés o la
necesidad de un autor determinado. Ahora pululan escritores que se autodenominan
o son señalados por alguna crítica” como escritores urbanos. No obstante, considero
que muchos de ellos tan sólo se acercan de manera superficial a ese calificativo y lo
hacen equívocamente al pretender referirse a la ciudad a través de una mera
nominación de calles, de bares en esas calles, de personajes en esos bares de esas
calles, como si la descripción más o menos pormenorizada de esas pequeñas
geografías nos develara una ciudad en toda su complejidad.
La ciudad es, en sí misma, un tema literario. Además, es el escenario donde
transcurren y han transcurrido miles y miles de historias de hombres y mujeres. La
ciudad es la materia prima de los sueños y las pesadillas del hombre moderno, el
paisaje en el cual se han formado sentimental e intelectualmente muchas
generaciones de narradores en todo el mundo.
Esa condición de escenario ambulante y permanente hace que la ciudad sea casi un
imperativo temático o, mejor, el espacio natural de la imaginación narrativa
contemporánea. Por supuesto que existen otros temas y otros imaginarios, distintos
a los urbanos; pero quiero señalar de forma especial la impresionante presencia de
lo citadino en la literatura y, en este caso, primordialmente en la cuentística
universal del presente siglo.
Frente a la pregunta de qué es lo urbano en literatura, habría que contestar que
urbano no es necesariamente lo que sucede o acontece dentro de la urbe. Una
narración puede ubicarse legítimamente en la ciudad pero estar refiriéndose a una
forma de pensar, actuar y expresarse “rural” o ajena al universo comprendido por lo
urbano. Esto último, lo urbano, posee sus maneras específicas de manifestarse, sus
lenguajes, sus problemáticas singulares: en definitiva, un universo particular. En
consecuencia se podría afirmar que la narrativa urbana es aquella que trata sobre
los temas y los comportamientos que ha generado el desarrollo de lo urbano, y
siempre a través de unos lenguajes peculiares.
Esta definición no pretende ser exhaustiva ni excluyente, pero es útil para delimitar
ese universo esquivo y manoseado de lo urbano.
(Tomado de: TAMAYO S., Guido L. Prólogo al texto Cuentos urbanos. Colección El
Pozo y el Péndulo, Bogotá: Panamericana, 1999.)
Responde de la pregunta 1 a la 19.
1. La intención del texto anterior es
A. describir una teoría en torno a lo urbano en la literatura, para caracterizar la
estructura de un libro.
B. exponer una posición sobre la ciudad como tema literario, para motivar a la
lectura de un libro.
C. narrar algunas experiencias de escritores urbanos, para mostrar algunos
fragmentos de un libro.
D. apoyar una postura tradicional sobre la literatura urbana, para promover la venta
de un libro.
2. El texto anterior se ocupa fundamentalmente de
A. la relación entre narradores urbanos y rurales en la literatura contemporánea.
B. la similitud entre literatura y urbanismo en la narrativa contemporánea.
C. la diferencia entre urbanismo y ciudad en la literatura contemporánea.
D. la relación entre ciudad y literatura en la narrativa contemporánea.
3. En el texto, con el enunciado “La ciudad puede ser perfectamente un tema
literario” se
A. afirma algo que posteriormente se sustenta.
B. predice algo que luego se constata.
C. instituye algo que posteriormente se realiza.
D. advierte algo que luego se comprueba.
4. En el primer párrafo del texto, la palabra crítica aparece entre comillas para
A. enfatizar el sentido de esa palabra en eltexto.
B. señalar que se trata de una postura que el autor no comparte.
C. nombrar algo que ha sido mencionado por alguien especial.
D. señalar que lo que se dice proviene de un juicio colectivo.
5. A partir del texto anterior, podemos afirmar que la crítica literaria es:
A. un proceso por el cual se valora o califica la producción literaria en un contexto
particular.
B. la acción de organizar la producción literaria teniendo en cuenta sus aspectos
geográficos.
C. el acto por el cual alguien señala los aspectos negativos en la producción literaria
de otro.
D. una actitud con la cual se muestran las cosas positivas en la producción literaria
de alguien.
12. Del enunciado “La ciudad es la materia prima de los sueños y las pesadillas del
hombre moderno” se puede inferir que
A. la problemática y el presente del hombre moderno se pueden estudiar a partir de
la literatura urbana.
B. el estado mental del hombre moderno depende del grado de desarrollo expresado
en la ciudad.
C. la imaginación es una diferencia fundamental entre el hombre moderno y el
hombre antiguo.
D. el hombre moderno desarrolla su capacidad para soñar únicamente si vive en la
Ciudad
14. Por la manera como se presenta la información en el texto, se podría decir que
en él predomina un discurso
A. informativo.
B. poético.
C. narrativo.
D. argumentativo
15. De acuerdo con los planteamientos que se desarrollan en el texto con relación a
la literatura urbana, se puede afirmar que
A. todo escrito que tenga como referente a la ciudad puede llegar a ser considerado
como ejemplo de la literatura urbana.
B. el referente fundamental para valorar una obra literaria como perteneciente a la
literatura urbana es el lugar donde haya nacido el escritor.
C. una obra literaria puede llegar a ser considerada como ejemplo de la literatura
urbana cuando en ella se percibe la vida que se moldea en el complejo mundo de lo
urbano.
D. todo escrito puede llegar a ser clasificado como literatura urbana si en él se
describen los espacios que caracterizan una forma de vida.
17. Podríamos decir que la visión del autor en torno a la relación entre literatura y
ciudad es
A. reduccionista, porque se limita a unos pocos ejemplos.
B. objetiva, porque considera el contexto en el que sucede.
C. ingenua, porque se basa en concepciones tradicionales.
D. subjetiva, porque no considera más que su propio interés.
Actividad
Para la Casa
Responde la pregunta 1 a la 7
1. La imagen que aparece en el cuadro ha sido creada por el pintor surrealista
René Magritte. Con respecto a una obra como ésta, se puede afirmar que
2. Uno de los intereses esenciales del pintor René Magritte giró en torno a la
liberación del hombre de cualquier restricción mental o física. Según la
imagen, se podría pensar que el autor está interesado en provocar una
reflexión en torno a múltiples aspectos, excepto en torno a
A. Un hombre estuvo trabajando todo el día, llegó muy temprano a casa y deseó
poder quitarse los pies como si fueran zapatos.
B. Un hombre con una gran sensibilidad deseó poder tocar el suelo y sentir su
textura con unos zapatos tan sutiles como pies.
C. Un pintor partió de la idea de que hay cosas inútiles que deben existir y
representó sus propias necesidades cotidianas.
D. Un hombre decidió que era necesario transformar el arte a partir de las
necesidades humanas e hizo este bosquejo.
5. El cuadro “El modelo rojo”, como toda obra de arte, puede remitir a quien la
contempla a múltiples significados, pero si se piensa que estos zapatos acaban
de ser usados por alguien, una posible causa de que hayan sido dejados al lado
de una construcción de madera es que, para esta persona,
A. sentir las piedras del camino es más agradable que usar zapatos.
B. un lugar a donde ingresó está sucio y no desea dañar sus zapatos.
C. el camino que va a recorrer es suave y no necesita zapatos.
D. el suelo que va a pisar ya no exige el uso de zapatos.
Actividad
Para la Casa
El bus acelera su marcha y la ciudad desaparece. Baudrillard dice que “un simulacro
es la suplantación de lo real por los signos de lo real”. No hay lo real, tan sólo la
ventanilla que nos refleja. Nosotros, los pasajeros, suplantamos la realidad, somos el
paisaje. ¿Somos los signos de lo real? Un semáforo nos detiene en una esquina. Otro
bus se acerca lentamente hasta quedar paralelo al nuestro; ante mí pasan otras
ventanillas con otros pasajeros de otra comunidad igualmente apática.
Pasan dos señoras en el primer puesto. Serán amigas -pienso-, quizás compañeras de
trabajo. Pero no hablan entre ellas. Sigue pasando la gente detrás de las otras
ventanas, mezclando su imagen real con nuestro reflejo. Creo verme sentado en la
cuarta ventanilla del bus que espera la señal verde junto a nosotros. Es mi reflejo,
intuyo; pero no es reflejo: soy yo mismo sentado en el otro bus. Con temor y
asombro, él y yo cruzamos una mirada cómplice, creo que nos sonreímos más allá del
cansancio del día de trabajo. Los dos vehículos arrancan en medio de una nube de
humo negro.
(Texto tomado de: PÉRGOLIS, Juan Carlos; ORDUZ, Luis Fernando; MORENO,
Danilo. Reflejos, fantasmas, desarraigos. Bogotá recorrida. Bogotá: Arango
Editores, Instituto Distrital de Cultura y Turismo, 1999.)