Unidad 17
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INTRODUCCIÓN
Los derechos humanos son inherentes a todas las personas, sin importar edad, sexo, raza, nacionalidad, condición
económica, etc.; por ello, es sumamente necesario saber en qué consisten, su reglamentación y la importancia de éstos
para el derecho internacional público.
OBJETIVOS PARTICULARES:
Conocer la importancia que tiene el establecimiento de organismos para la protección de los Derechos mínimos que todo
hombre posee.
CONTENIDO:
17.1 . Antecedentes.
17.3. La Comisión Nacional de los Derechos Humanos en México y la relación con el Derecho internacional.
CAPÍTULO XI
INTRODUCCIÓN
El derecho internacional de los derechos humanos muestra una notable evolución del derecho internacional
contemporáneo; se ha transitado de una etapa en donde se consideraban las cuestiones de derechos humanos como
asunto solamente nacional, a una etapa donde también han adquirido un carácter internacional y universal; es decir, se ha
construido un sistema internacional de promoción y protección de los derecho humanos. El desarrollo de las normas de
derechos humanos han tenido un impacto profundo en el derecho internacional, por que son normas destinadas a la
protección del individuo, el que en determinadas situaciones es ya un sujeto del derecho internacional contemporáneo.
El sistema internacional de protección de los derechos humanos se desarrollo a partir de la Declaración Universal de los
Derechos Humanos de las Naciones Unidas, instrumento pilar de todo el sistema, del cual se derivan todos los
instrumentos universales y regionales. En esta evolución, se ha manifestado que existen ciertos derechos humanos que
son fundamentales, que no dependen de la nacionalidad de la persona, y que la protección de esta persona no está sujeta
a la jurisdicción de un solo Estado.
Uno de los aspectos importantes de las actuales tendencias de globalización, independientemente de los temas
comerciales y ambientales, es la promoción de los derechos humanos a nivel mundial. Actualmente, el tema de los
derechos humanos es una prioridad dentro de la agenda de los Estados, de los Organismos Internacionales y de las
Organizaciones No Gubernamentales.
1.1. Definición
Los derechos humanos son concebibles como “un conjunto de facultades que en cada situación histórica concreta las
exigencias de la dignidad humana, las que deben ser reconocidas por los ordenamientos jurídicos tanto nacionales como
internacionales, y protegidas mediante procedimientos jurisdiccionales y no jurisdiccionales nacionales e internacionales”.
Los derechos humanos son fundamentales, inalienables y esenciales al ser humano.
Ahora, el derecho internacional de los derechos humanos se pueden definir como una rama del Derecho Internacional
Público dirigida a la protección de la persona en contra de los actos del Estado y particulares que lesionan los valores
fundamentales.
Desde el siglo XVI y XVII, los pensadores españoles Vitoria y Suárez intentaron definir qué derechos son acordes al ser
humano y en qué circunstancia, con especial referencia a los derechos de los habitantes nativos de América. Las primeras
manifestaciones formales sobre derechos humanos se remonten al siglo XVII y XVIII, que aunque no se concebían como
inalienables al ser humano, sí se consideraban como un incipiente límite de la autoridad pública.
John Locke introdujo la concepción de que los hombres son libres e iguales en el estado natural, y que el derecho natural
consiste en proteger derechos como la libertad, la vida y la propiedad. Posteriormente, Charles de Montesquieu, al
elaborar su noción de división de poderes, concibió un orden para promover la libertad. J. J. Rosseau, por su parte,
manifestó que dentro de un contrato social, el Estado debía garantizar a la persona mayor libertad que la que gozan en el
estado natural. Hasta cierto punto, las concepciones de J. Locke y J. J. Rosseau entran en conflicto, ya que ofrecen visiones
diferentes respecto de la relación del individuo con el Estado y el goce de los derechos. La noción de Locke refleja una
tradición anglosajona que impone límites al quehacer del Estado; mientras que la visión rousseauniana concibe al Estado
de manera más positiva, ya que también debe garantizar el bienestar común de su población; visión acorde a la tradición
europea continental y latinoamericana.
La primera enumeración moderna de derechos humanos quedó consagrada en la Constitución de Estados Unidos en
1971 en el llamado Bill of Rights, que sitien incorporaba algunos de los derechos ya existentes en el Reino Unido, en esta
Carta se amplían y se colocan a nivel constitucional. La Declaración Francesa de 1789 de Derechos del Hombre y del
Ciudadano contenía un catálogo de derechos humanos; no obstante, no formaba parte de un documento constitucional, y
como tal, no tenía un carácter obligatorio.
Los derechos humanos han evolucionado desde que fueron concebidos como tales, e históricamente no siempre han sido
los mismos derechos a los que se les ha dado mayor énfasis; existen algunos derechos que representan una práctica
constante y generalizada, que a su vez forjan nuevos derechos humanos en nuevas áreas por desarrollar. Conforme a su
aparición histórica existen tres generaciones de derechos humanos.
La primera generación corresponde a los derechos civiles y políticos que abarcan los derechos de integridad, libertades de
acción y todos los derechos relacionados con el debido proceso legal, derechos esenciales dentro del sistema de
protección de derechos humanos tanto nacional como internacional. Los derechos de integridad incluyen el derecho a la
vida, a la libertad y a la seguridad, derechos que protegen al individuo en contra de la tortura, el maltrato, la esclavitud, los
trabajos forzados, los arrestos, las detenciones y los exilios arbitrarios. Las principales libertades de acción son la libertad
de movimiento, de residencia, se incluye la libertad de credo, de expresión, de información, y la libertad de asociación. La
mayoría de los derechos de integridad se consideran como derechos absolutos en el sentido que no se pueden suspender
bajo ninguna circunstancia. En cambio, las libertades de acción pueden ser limitadas en aras de las libertades de terceros y
por cuestiones de seguridad nacional.
Los derechos políticos se refieren al derecho de toda persona a participar en el ejercicio de gobierno ya sea directamente
o mediante representantes., y también incluye el derecho a participar en el servicio público.
La segunda generación se refiere a los derechos económicos, sociales y culturales. Estos derechos corresponden a
exigencias laborales, como e derecho al trabajo, a condiciones laborales justas, el derecho a la educación, a recibir
asistencia médica y otros servicios. Dentro de esta generación, los derechos culturales son complejos y difíciles de definir,
sin embargo, son derechos que se concentran en el derecho de formar parte de la vida cultural de la comunidad, y en el
derecho a preservar la identidad cultural de los grupos minoritarios.
La evolución de los derechos civiles tuvo lugar en el siglo XVIII, los derechos políticos en el siglo XIX, y los derechos
sociales en el siglo XX. Los derechos civiles y políticos implican un no hacer del Estarlo respecto de la esfera in de la
persona; en cambio, los derechos económicos y sociales implican un hacer y son obligaciones del Estado. A estos últimos
se les llama derechos programáticos, ya que no son exigibles de manera tajante, debido a que no existe un mecanismo
jurisdiccional como tal para hacerlos cumplir.
La tercera generación concibe derechos que rebasan las fronteras nacionales y se vinculan en mayor medida con los
instrumentos internacionales. Son derechos que no se pueden categorizar tan fácilmente, ya que no existen en un
documento convencional internacional único, sino que se consagran de manera separada en la Carta de las Naciones
Unidas, la Declaración Universal de Derechos Humanos, y otros instrumentos y declaraciones especificas universales y
regionales. Entre los derechos de la tercera generación encontramos el derecho a la libre determinación ---que es quizá el
derecho más importante—, el derecho al desarrollo, el derecho a un medio ambiente sano, y el derecho a la paz, entre
otros A diferencia de las dos generaciones anteriores que son derechos individuales, esta generación se enfoca en
derechos colectivos, atribuidos a los pueblos.
Se habla de una cuarta generación de derechos humanos, que si bien ha sido objeto de múltiples críticas y debates,
representa una innovación importante, debido a que concibe los derechos de la Humanidad, entendida como las
generaciones pasadas, presentes y futuras.
1.3. Normas de Derechos Humanos: una nueva fase del derecho internacional
En el derecho internacional de los derechos humanos, las normas tienen un doble vínculo, uno de Estado a Estado, y otro
hacia el interior de sus territorios entre el individuo y el Estado quien es el principal obligado de promover, respetar y
proteger los derechos humanos. Esta obligación tiene como fuente las normas internacionales de carácter Convencional y
consuetudinario que ha desarrollado la comunidad internacional, y que han ampliado el régimen de garantías al interior
de los Estados.
El ámbito de los derechos humanos hace que los sistemas nacionales e internacionales se complementen, se amplíen y se
enriquezcan mutuamente. Con el sistema internacional de derechos humanos no se excluye a los sistemas nacionales, sino
que el primero es subsidiario del segundo, es decir, se aplica siempre que se hayan agotado los mecanismos internos o en
ausencia u oscuridad de las leyes nacionales.
El derecho internacional de los derechos humanos contempla conjuntamente el goce y protección de los derechos, y el
cumplimiento de deberes relacionados con éstos. Estos deberes están con tenidos en la Declaración Universal de los
Derechos Humanos, que ha servido de fundamento para otros instrumentos internacionales de derechos humanos, corno
los sistemas interamericano y africano que dedican un capítulo específico al tema de deberes. El artículo 29 de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos con templa que:
1. Toda persona tiene deberes respecto a la comunidad, puesto que sólo en ella puede desarrollar libre y
plenamente su personalidad.
2. En el ejercicio de sus derechos y en el disfrute de sus libertades, toda persona estará solamente sujeta a las
limitaciones establecidas por la ley con el único fin de asegurar el reconocimiento y el respeto de los derechos y libertades
de los demás, y de satisfacer tas justas exigencias de la moral, el orden público y del bienestar general en una sociedad
democrática…
El hecho de que los derechos humanos sean considerados universales, no implica que sean absolutos, ya que corno
establece el párrafo 2 del artículo 29, se contemplan situaciones específicas donde el goce de estos derechos y libertades
se verá limitado de acuerdo a las legislaciones de cada Estado, aunque hay excepciones como el derecho a la vida, a la
nacionalidad al nombre y el derecho a un debido proceso legal.
El carácter universal de las normas internacionales de derechos humanos permite aplicarlas a toda persona en todo lugar
independientemente de la cultura a la que pertenezca, tal es el fundamento con el que se concibió la Declaración
Universal de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en 1948. Sin embargo, han surgido tesis que contradicen este
carácter universal, llamadas tesis de relativismo cultural. Es cierto que la concepción de los derechos humanos obedece a
una situación específica que se desarrolló en los países occidentales, pero también es cierto que la comunidad
internacional ha aceptado que los derechos humanos son progresivos y tienden a ir universalidad. La concepción universal
de los derechos humanos adepta los relativismos culturales como en el caso de la Carta Africana de Derechos y Deberes
de los Pueblos, ya el derecho a ser diferente es un derecho humano tolerado en la medida en que se respeten los
derechos de las personas de manera individual.
2. PROTECCIÓN INTERNACIONAL DE LOS DERECHOS HUMANOS
El mero establecimiento de los derechos humanos no era suficiente para garantizar el respeto por parte de todos los
Estados, hecho que quedó claro en la Primera Guerra Mundial; por eso, la Sociedad de Naciones buscó establecer un
mecanismo de protección que permitiera a los individuos una defensa operativa y adecuada ante las violaciones de sus
derechos por parte de los Estados. La Sociedad de Naciones estableció tres sistemas de protección de derechos huma nos:
un sistema de minorías —reflejo de las grandes migraciones y de la Gran Guerra—, un sistema de mandatos mediante el
cual se daban garantías de un trato justo para los habitantes de los territorios en mandato, y el más importante, un
sistema para la elaboración, promoción y protección de normas internacionales laborales. Este dirimo sistema dio origen a
la Organización Internacional del Trabajo que ha trascendido hasta nuestros días.290
El desarrollo r un sistema internacional de protección de los derechos humanos como tal, se consolida después de la Carta
de las Naciones Unidas de 1945. Para esto, la primera iniciativa en hacer a los derechos humanos universales fue tornada
por el Presidente de Estados Unidos, Franklin D. Roosevelt, en su mensaje al Congreso en enero de 1941:
…ansiamos un mundo cimentado en cuatro libertades fundamentales. La primera es la libertad de expresión —en
cualquier parte del mundo. La segunda libertad es la libertad de culto— en cualquier parte del mundo- La tercera es la
libertad de querer —que significa la capacidad económica de cada nación para garantizar la paz a todos sus habitantes en
cualquier parte del mundo. La cuarta es la libertad contra el temor que significa una amplia reducción en los armamentos
a tal punto que ninguna nación sea capaz de cometer una agresión física en contra de nadie en cualquier parte del
mundo.291
La protección internacional de los derechos humanos se divide en dos sistemas, uno universal que se desarrolla en ámbito
de las Naciones Unidas, y otro que corresponde a los sistemas regionales: el sistema europeo el sistema interamericano y
el sistema africano. Estos sistemas reflejan la existencia de un conjunto de elementos y características básicas que son
comunes a todos ellos. El objetivo es fomentar la conciliación y las soluciones amistosas entre la persona agraviada y el
Estado; los mecanismos para lograrlo son en su mayoría de carácter político por ser más efectivos en el plano
internacional, pero también se contemplan los mecanismos jurisdiccionales.
Los instrumentos internacionales de derechos humanos contienen cláusulas específicas para su aplicación, y están sujetos
a la observancia y cumplimiento de sus normas, mediante la creación de órganos universales y regionales encargados de
monitorear su cumplimiento y denunciar las violaciones a derechos humanos.
Desde la gestación del sistema de las Naciones Unidas, se tomó en cuenta la creación de un sistema universal de
protección de los derechos humanos. Desde entonces, la comunidad internacional considera ha que mediante la
promoción y respeto de los derechos humanos, la paz y la seguridad internacionales estarían aseguradas.
La llamada Carta de Derechos Humanos se integraría con la Carta de las Naciones Unidas, la Declaración Universal de
Derechos Humanos y los dos Pactos Internacionales, constituye el fundamento para el desarrollo de otros instrumentos de
derechos humanos que ofrecen una protección más específica y efectiva. Las Naciones Unidas ha desarrollado una
infraestructura de promoción y monitoreo de los derechos humanos que involucro a sus órganos principales: la Asamblea
General, el Consejo Económico Social (ECOSOC), el Consejo de Seguridad y la Secretaría Gen eral, además de otros
organismos especializados como la OIT, UNESCO, ACNUR y la OMS.
2.1.1. La Carta de las Naciones Unidas.
Los objetivos de las Naciones Unidas incluyen la promoción y protección de los derechos humanos, tal y como está
establecido en el Preámbulo de la Carta.
Nosotros los pueblos de las Naciones Unidas resueltos,… a reafirmar la fe en los derechos fundamentales del hombre, en
dignidad y el valor de la persona humana, en la igualdad de los derechos de hombres y mujeres de las naciones grandes y
pequeñas...
Los propósitos de las Naciones Unidas son… realizar la cooperación internacional en... el desarrollo y estimulo del respeto
a los derechos humanos y a las libertades fundamentales de todos, sin hacer distinción por motivos de raza, sexo, idioma
o religión, y la efectividad de tales derechos y libertades.
Mediante el artículo 55, todos los miembros se comprometen a tomar las medidas necesarias —de manera separada o
conjunta— para cumplir con lo anteriormente mencionado. Con lo anterior, queda establecido el derecho y la obligación
internacionales de proteger los derechos humanos, y la importancia pese tienen para la comunidad internacional.
El artículo 13.1 .b) de la misma Carta establece competencias específicas en materia de derechos humanos a s órgano de
las Naciones Unidas al establecer que, la Asamblea General puede hacer recomendaciones y “ayudar a ser efectivos los
derechos humanos y las libertades fundamentales de todos…”
Una deficiencia de la Carta es que no contiene disposiciones específicas de derechos humanos, dado que no era la
prioridad de la Conferencia de San Francisco.292 Estos errores se subsanarían cuando se designó a un grupo de expertos
a cargo de las Naciones Unidas, que se dio a la tarea de redactar un texto especifico en la materia que cubriera las lagunas
de la Carta haciendo un catálogo de los derechos humanos que debían protegerse poniendo un especial énfasis en su
universalidad. Esto fue difícil de lograr, ya que de 1945 a 1948 no se pensaba que los derechos contenidos en la Carta
fueran para todos, y los países en desarrollo pensaban que sería una intromisión de los países desarrollados en sus
cuestiones internas.
El trabajo de la Comisión de las Naciones Unidas de Derechos Humanos tomo los estudios hechos por una comisión de
expertos, encargados desde 1942 por instrucciones de Roosevelt para redactar una carta universal de derechos humanos.
Con la participación destacada de América Latina, la Comisión en diciembre de 1948 presentó la Declaración Universal de
los Derechos Humanos (en adelante DUDH) que sienta las bases sustantivas de la ulterior actividad de las Naciones Unidas
en la materia.293 La DHDU consolidó lo mejor los avances anteriores a 1945 de una manera más amplia y comprensiva, y
dio el carácter internacional que se necesitaba. Fue la primera vez la comunidad internacional, que incluían representantes
de todas las culturas, se reuniría para acordar y articular derechos y libertades inherentes a todo ser humano,
independientemente de los sistemas políticos, raras, sexos, nacionalidad, credo, etc. Esto representa una evolución en la
materia, sin precedentes.
Probablemente la innovación más importante de la Declaración es la inclusión de los derechos económicos, sociales y
culturales, reconociendo que son indispensables para la dignidad y el desarrollo de la persona.
La redacción de la DUDH presentó algunos problemas, ya que si bien, se quería un documento general, no se deseaba que
tuviera un carácter obligatorio, y finalmente, se adopté una resolución solemne. No obstante, la DUDH ha llegado a
adquirir un carácter de obligatoriedad con el paso de los años, ya que ha sido reforzada por la práctica de los Estados.
Actualmente es considerada como una fuente de derecho consuetudinario, incluso aceptando que algunos de los
derechos humanos contenidos en ella son normas imperativas de Derecho Internacional —normas de ius cogens. En la
Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos en Teherán en 1968, se emitió una resolución que
proclamaba que la Declaración Universal de Derechos Humanos en Teherán en 1968, se emitió una resolución que
proclamaba que la
Declaración Universal de Derecho Humanos… constituye una obligación para los miembros de la comunidad internacional.
Posterior a la redacción de la DUDH, surgió la necesidad de crear instrumentos que si bien se desprendieran de la
Declaración, tuvieran que tener un carácter vinculatorio para las partes. Veinte años pasaron hasta la redacción de los dos
Pactos Internacionales de Derechos Humanos. En 1966, se aprueba el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos
(en adelante PDCP) y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (en adelante PDESC), que
entrarían en vigor diez años después.294
Dentro de los Pactos no se incluyen el derecho a la propiedad, el derecho de asilo, ni el derecho a tener una nacionalidad.
El lenguaje de los Pactos es más específico que el utilizado en la DUDH, y así, la posibilidad de exigibilidad es mayor. Cada
Pacto, aunque son interdependientes prevé mecanismos específicos para velar su cumplimiento. Los Pactos constituyen
instrumentos internacionales que imponen obligaciones jurídicas para los Estados de proteger, respetar y garantizar
dichos derechos, para lo cual tiene que crear legislaciones específicas sólo que el grado de obligatoriedad. Mientras el
PDCP define obligaciones automáticas para el Estado al reconocer y garantizar de manera inmediata los derechos
contenidos en el mismo, el PDESC se concibe como un instrumento progresivo, que define derechos cuyo disfrute se
garantiza en la medida en que el Estado lo disponga en sus políticas y programas nacionales. El PDCP tienen dos
Protocolos Adicionales; el primero del mismo año del Pacto establece un sistema de denuncias individuales, y el segundo
está destinado a abolir la pena de muerte, fortaleciendo la tendencia abolicionista internacional.295
Una característica de ambos Pactos es que contienen artículos en común: en lo relativo al derecho a la libre determinación
y el derecho a la igualdad que suscribe toda práctica de discriminación. El artículo 1º de ambos Pactos proclama la libre
determinación de los pueblos como un derecho humano, que ha sido considerado como sin principio e incluso norma de
derecho internacional desde 1945 y aun más con los movimientos de descolonización en la década de los sesenta. La
Carta lo contempla en el artículo 21. Ahora, este derecho es generalmente aceptado pero la cuestión reside a quién y bajo
qué circunstancias se reconoce. Este derecho se ha desarrollado en dos momentos. El primero representa el derecho a la
independencia y separación de un Estado, que tuvo su auge en la década de los sesenta, y se ha aplicado en la década de
los noventa con la disolución de la ex-Yugoslavia y la ex-Unión Soviética. Un segundo momento representa el derecho
invocado por los pueblos indígenas; ahora se daría una nueva connotación al derecho de autodeterminaciones que no
implica la separación del Estado y por tanto, un quebranto a la integridad estatal del mismo, sino una autonomía interna.
— Convención para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio de 1948.296 El genocidio fue considerado como un
delito internacional por la Asamblea General, y es un delito condenado en todo tiempo, no obstante se cometa en
tiempos de guerra o en tiempos de paz.
— Convención Sobre los Derechos Políticos de la Mujer de 1952.
— Convención Internacional para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Racial de 1965. En la década de los
sesenta, muchas colonias en África alcanzaron su independencia y al convertirse en miembros de las Naciones Unidas,
enfatizaron sus prioridades reflejadas en esta Convención.
— Convención Internacional sobre la Represión y el Castigo del Crimen de Apartheid de 1973.
— Convención sobre la Eliminación de Todas Formas de Discriminación en Contra de la Mujer de 1979.
— Convención Contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles Inhumanos o Degradantes de 1984.
— Convención Internacional para la Protección de los derechos de Todos los Trabajadores Migrantes y de los Miembros
de sus Familias de 1990.
Todas estas convenciones ya han entrado en vigor, pero el nivel de ratificación por parte de los Estados es muy variado;
sin embargo un Tratado que ha recibido la aceptación casi universal es la Convención sobre Derechos del Niño de 1989,
que para el 31 de junio de 1996 había recibido 187 ratificaciones. Ninguna otra Convención había recibido tantas
ratificaciones en tan pocos años. Otras Convenciones se han celebrado bajo el auspicio de otros organismos como la OIT,
la UNESCO y otras agencias especializadas de las Naciones Unidas.
2.1.5. Los órganos y mecanismos
Paralelamente al desarrollo convencional de los derechos humanos, las Naciones Unidas han construido una estructura
orgánica encargada de desarrollar su Programa de Derechos Humanos. Estos órganos han desarrollado mecanismos
políticos y casi jurídicos que se centran en la elaboración de informes, recomendaciones, vistas in loco, trámite de
denuncias individuales e interestatales, que sólo proceden una vez agotado los mecanismos internos de protección de
derechos humanos.
Los órganos a los que se asigna la responsabilidad principal en materia de derechos humanos son la Asamblea
General y el Consejo Económico Social (ECOSOC). Mediante este último las Naciones Unidas establecieron la Comisión de
Derechos Humanos en 1946. La Comisión, que es un órgano gubernamental, nace como un cuerpo técnico y de
asesoramiento, pero con el paso de los años y en vista de la necesidad de un papel más activo, ésta se ha transformado en
un órgano de estudio y codificación de derechos humanos, para lo cual puede establecer órganos subsidiarios y
subcomisiones. Actualmente, la Comisión está compuesta por 53 representantes de los Estados miembros mediante el
principio que garantiza una representación geográfica equitativa.
Después de la Conferencia Mundial sobre Derechos Humanos llevada a cabo en Viena en 1993, la Asamblea General
adoptó por consenso la creación de un Alto Comisionado para los Derechos Humanos,297 a cargo de un funcionario de
las Naciones Unidas que está integrado a la Secretaria General. Su competencia, que aunque fue objeto de muchos
debates, es amplia y le permite ejercer funciones de promoción o y protección de los derechos humanos, coordinar
actividades, proporcionar asistencia técnica y asesoramiento a los Estados y organizaciones que lo soliciten, y funciones de
coordinación con otros órganos en la materia.
Independientemente de lo anterior, cada Convención de derechos humanos establece órganos específicos parsi que velen
por su cumplimiento. Al respecto, el PDCP estableció un Comité que ha servido de modelo para otros órganos. Este
Comité, integrado por 18 miembros elegidos por los Estados que actúan a título personal, vigila el cumplimiento del Pacto
mediante un mecanismo de informes; cabe señalar que el Comité no está propiamente capacitado pan hacer
recomendaciones a los Estados. Para esto, se basa en los informes que le proporcionan los mismos Estados y
organizaciones no gubernamentales de derechos humanos. El PDCP también contempla el mecanismo de denuncias entre
Estados, pero sólo partes del Pacto; sin embargo, este mecanismo todavía no se ha utilizado. El Protocolo Adicional al
Pacto de 1966 establece la posibilidad de denuncias individuales.
Dentro del PDESC también se establece un mecanismo de in formes para supervisar su cumplimiento que como ya se
mencionó, no goza de la misma fuerza que el del PDCP. Los Estados sólo presentan informes de los avances progresivos
en la materia ante el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.298
Dentro del sistema de las Naciones Unidas se estableció el Mecanismo 1503 en 1970 con el objetivo de dar acceso al
sistema de protección a cualquier individuo cuyo Estado no sea parte de las Naciones Unidas, y que pueda manifestar que
se han llevado a cabo violaciones masivas de derechos humanos. Una vez que la Comisión de Derechos Humanos recibe la
queja, el procedimiento posterior es confidencial y no se le da vista al quejoso. La Comisión puede optar por cuatro
opciones: desechar la denuncia, posponerla para un es estudio ulterior, o iniciar un estudio minucioso del caso, sea con el
consentimiento del Estado o sin él. La decisión que pueda tomar la Comisión no tiene fuerza vinculatoria, sin embargo,
tiene la fuerza de la opinión pública y se puede reforzar mediante una resolución del ECOSOC o de la Asamblea General.
La Carta de las Naciones Unidas no específica nada respecto al papel del Consejo de Seguridad en la materia, pero este
órgano y la Secretaría General, han asumido competencias y t papel más activo con el paso de los años. En la década de
los noventas, el Consejo de Seguridad creó los tribunales ad hoc para crímenes internacionales cometidos en la ex-
Yugoslavia y Ruanda.
Una vez analizado el sistema universal de protección de derechos humanos queda claro que es necesario tomar medidas
específicas y más electivas para la protección de derechos específicos poniendo atención en las realidades históricas y
culturales particulares de cada región. Para esto, se han creado los sistemas regionales que complementan y amplían el
sistema universal- Estos sistemas tienen una obligatoriedad y observancia mayor y más efectiva. A nivel regional, los
Estadios se comprometen y confían más en los mecanismos de protección de derechos humanos, además, hay más
posibilidades que un Estado ratifique una convención regional que una universal.
Los sistemas regionales son tres: el sistema europeo, el sistema interamericano y el sistema africano. El primero ha servido
corno modelo para los otros dos, y que es el sistema más avanzado, integrado y complejo de protección de derechos
humanos. Por su parte, el sistema africano es el más joven, y el menos desarrollado así, el sistema interamericano es el
punto intermedio entre ambos.
Los instrumentos derivados de los sistemas regionales están redactados más en detalle que la DUDH e incluso que los
Pactos. Tienen la enorme ventaja de poseer un órgano jurisdiccional específico para las cuestiones de derechos humanos.
Los dos sistemas —el universal y los regionales— se excluyen, en el sentido que no se puede acceder a ambos, sino que al
acceder a uno, necesariamente se cancela el otro.
El sistema europeo de protección de los derechos humanos nace en 1950 en el seno del Consejo de Europa mismo que se
estableció en 1949 con el objetivo de construir una maquinaria internacional encaminada hacia la promoción de la
democracia y hacia la protección de los derechos humanos a nivel regional que todos los Estados que persiguen los
mismos ideales pueden ser parte del Consejo de Europa. Con el fin de la Guerra Fría y sus consecuencia en Europa
Oriental y en la ex-Unión Soviética, el número de miembros del Consejo de Europa y de la Convención aumentó a más le
40.
Los instrumentos del sistema europeo son la Convención Europea de Derechos Humanos y la Carta Social Europea. El 4 de
noviembre de 1950, en Estrasburgo, el Consejo de Europa aprobó la Convención,299 la que cuenta con varios Protocolos
adicionales. Actualmente sus 11 Protocolos, todos obligatorios para las partes. La Carta Social Europea fue redactada en
1961, ésta se concreta a los derechos económicos, específicamente los derechos laborales, y no hace una amplia mención
de los derechos sociales y culturales.300
El órgano principal del sistema europeo es la Corte Europea de Derechos Humanos. Anterior a la redacción del Protocolo
número XI, existía la Comisión Europea de Derechos Humanos creada por la Convención Europea. A partir de 1998, la
Comisión queda eliminada y sólo prevalece la Corte en el centro del sistema. El funcionamiento de la Comisión era
básicamente igual al que lleva a cabo la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Al igual que en el sistema
universal, los mecanismos internos se tienen que agotar para que se pueda tener acceso al sistema internacional europeo.
El trámite de un caso de violación de derechos humanos ante la Comisión y posteriormente ante la Corte, tomaba un
tiempo promedio de 3 a 5 años. Dado esto, y sumado a la saturación del sistema que recibía un enorme de denuncias
anualmente, se tomó la decisión de agilizar el procedimiento, adoptando el Protocolo XI— no opcional— en 1994 para
reestructurar la maquinaria europea y dejar un solo órgano que sería permanente es decir, la Corte Europea.301 La
competencia de la Corte cubre las demandas interestatales y las demandas individuales por violación a la Convención por
uno de los Estados parte. La Corte está abierta a lo individuos, organizaciones no gubernamentales y Estados de manera
directa. Sólo a nivel europeo, se han suscitado las demandas interestatales; ni siquiera es un mecanismo que se ha
utilizado a nivel de las Naciones Unidas. La Corte Europea ha elaborado una jurisprudencia importante, y se retroalimenta
con la que se ha generado en la región. Otro órgano del sistema europeo es el comité de Ministros del Consejo de Europa
que se encarga de supervisar que las sentencias de la Corte se ejecuten.
Cabe destacar que el sistema europeo es diferente al sistema de la Unión Europea. Este último puede tomar decisiones
relacionadas con derechos humanos mediante directivas de la Unión, pero en caso de violación a esa directiva, el
demandante debe acceder a la Corte de la Unión Europea. Aún así, los dos sistemas están en constante comunicación y
coordinación, ya que actualmente, para que un Estado pueda ser miembro de la Unión europea, debe ser miembro del
consejo de Europa. Además, en el sistema europeo está proscrita la pena de muerte, condición necesaria para que un
Estado ingrese a la Unión; ésta es el principal obstáculo para que Turquía sea parte de la misma.
Aunque ciertamente, el sistema interamericano es menos desarrollado que el sistema europeo, éste no deja de tener
grandes aciertos, ya que refuerza la protección internacional de derechos humanos, y contiene un capítulo especial de
deberes, independientemente de los derechos.
Los instrumentos del sistema son: La Carta de la Organización de Estados Americanos —OEA— que fue reformada en
1967 mediante el protocolo de Buenos Aires, para que tuviera disposiciones adecuadas para una protección regional de3
los derechos humanos, 302 la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre de 1948, que fue adoptada
incluso siete meses antes que la Declaración Universal de los Derechos Humanos,303 la Convención Americana de
Derechos Humanos, conocida como el Pacto de San José de 1969. Ésta tomó como antecedente la Convención Europea y
los Pactos Internacionales de las Naciones Unidas.304 La Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura
de 1985, 305 el Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos en Materia de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales, mejor conocido como el Protocolo de San Salvador, suscrito en 1988, y el Protocolo a la
Convención Americana sobre Derechos Humanos relativo a la Abolición de la Pena de Muerte, suscrito en Asunción,
Paraguay, en 1990.
Los órganos principales del sistema interamericano son dos, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (en
adelante CIDH) creada en 1959 por medio de una resolución del Consejo de Ministros de la OEA, y la Corte Interamericana
de Derechos Humanos con la capacidad de procesar reclamaciones, tanto de Estados como de particulares.306
La CIDH, con sede en Washington, D.C., es un órgano principal de la OEA cuya función es la observancia y del cosa de los
derechos humanos consagrados en la Declaración Americana y en la Convención Americana, y servir como órgano
consultivo de la OEA en la materia. La CIDH actúa en representación de todos los países miembros de la OEA. Está
integrada por siete miembros independientes que se desempeñan a título personal, y son elegidos por la Asamblea
General de la
OEA.
La CIDH es un órgano cuasi-jurisdiccional que permite la solución amistosa y extra-judicial de un conflicto; si esto no es
posible, puede presentar el caso ante la Corte. Para desempeñar sus funciones, la CIDH ha desarrollado varios
mecanismos, tales como la redacción de informes generales y especiales, recomendaciones, visitas in loco que requieren la
invitación del país necesariamente—, la realización de diversas actividades de promoción de los derechos humanos,
denuncias individuales, y aunque también contempla la posibilidad de denuncias interestatales, este mecanismo nunca se
ha utilizado La CIDH mantiene además, facultades adicionales entre ellas, por cesar peticiones individuales relativas a
Estados que aún no son parte de la Convención. La CIDH también puede requerir a los Estados que tomen medidas
cautelares para evitar daños graves e irreparables a los derechos humanos en casos urgentes, y puede solicitar a la Corte
que dicte medidas provisionales para los Gobiernos en casos urgentes y en caso de violaciones masivas a los derechos
humanos. Toda persona, grupo de personas u organización no gubernamental puede presentar tina denuncia ante la
Comisión.
La Corte Americana de Derechos Humanos, con sede en San José de Costa Rica, es una institución jurisdiccional autónoma
del sistema interamericano de Derechos Humanos y de la OEA, cuyo objetivo es la interpretación y aplicación de la
Convención Americana de Derechos Humanos. Esta integrada por siete jueces elegidos a título personal por los Estados
Partes de la Convención. La competencia de la Corte es facultativa, es decir, se necesita la aceptación expresa de la
competencia de la Corte. La Corte tiene competencia contenciosa y consultiva. En lo que se refiere a la competencia
contenciosa, sólo la CIDH y los Estados partes de la Convención que reconozcan dicha competencia, pueden someter un
raso relativo a la interpretación o aplicación de la Convención, siempre y cuando se hayan agotado los mecanismos que la
CIDH ofrece. En lo referente a la competencia consultiva, la CIDH y cualquier Estado miembro de la OEA puede solicitar
una opinión consultiva, respecto de la interpretación de la Convención o de otros tratados concernientes a la protección
de los derechos humanos en los Estados americanos.
Algunos retos que se tienen que enfrentar dentro del sistema interamericano son la denuncia del sistema hecho por
Trinidad y Tobago en 1998 debido a que reinstaló la pena de muerte en su legislación interna, en contraposición con la
postura abolicionista del sistema interamericano. Por otro lado, Perú denunció la Competencia contenciosa de la Corte.
Además, queda romper el aislacionismo de Estados Unidos y Canadá que no han ratificado la Convención y por
consiguiente, no han reconocido la competencia contenciosa de la
Corte. […]
CAPÍTULO VII
La Comisión Nacional de Derechos Humanos se creó, inicialmente, como un órgano desconcentrado de la Secretaría de
Gobernación. Estuvo adscrita directamente al titular de la dependencia y sustituyó en aquel entonces, a la Dirección
General de Derechos Humanos de esa Secretaría. El Decreto presidencial correspondiente se publicó en el Diario Oficial
del 6 de junio de 1990.
La filosofía creadora de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, parte de la idea de que en México todos los
individuos, aún aquellos que han cometido los más graves delitos, tienen derecho a gozar de las garantías individuales
que consagra nuestra Constitución, dentro de las cuales están las correspondientes a la integridad y la dignidad de la
persona. Dichas garantías les deben ser respetadas en todos los ámbitos jurídicos en que se manifiesten, aún en las
averiguaciones previas y en los procedimientos de tipo peal en donde, con mayor claridad, deben estar presentes las
garantías de respeto que la ley otorga a cada persona.
En la ceremonia de instalación de esta primera Comisión Nacional de Derechos Humanos, el Doctor Jorge Carpizo Mac
Gregor, quien fue designado primer Presidente de la Comisión, expuso diversos planteamientos sobre los problemas que
debía afrontar ese nuevo organismo desconcentrado, haciendo un detalle amplio del reclamo ciudadano por contar con
una ins tancia protectora de los Derechos Humanos. Afirmó sobre el particular que:
…Tenemos (en México) graves problemas de falta de respeto a los Derechos Humanos. El sol no se tapa con un dedo…1
La exposición de motivos del Decreto Presidencial señaló que corresponde al Estado democrático moderno garantizar la
seguridad de sus ciudadanos, reconocer la pluralidad política, alentar a la sociedad civil, el orden, la paz y la estabilidad
social, salvaguardando el pleno ejercicio de las garantías individuales y la vigencia del principio de legalidad en la
ejecución de las atribuciones de los órganos del gobierno.
De acuerdo a lo anterior los puntos básicos del citado Decreto establecido en sus diversos artículos las competencias de la
naciente Comisión, precisando lo siguiente:
Articulo Segundo. —La Comisión Nacional de Derechos Humanos será el órgano responsable de promover y vigilar el
cumplimiento de la política nacional en materia de respeto y defensa de los Derechos Humanos. Con ese propósito
instrumentará los mecanismos necesarios de prevención, atención y coordinación que garanticen la salvaguarda de los
Derechos Humanos de los mexicanos y de los extranjeros que se encuentren en el territorio nacional; esto último, en
coordinación con la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Artículo Tercero. —Cumplir con las responsabilidades a que se refiere el artículo anterior; la Comisión Nacional de
Derechos Humanos tendrá las siguientes atribuciones:
I. Proponer la política nacional en materia de respeto y defensa de los Derechos Humanos;
II. Establecer los mecanismos de coordinación que aseguren la adecuada ejecución de la política nacional de respeto
y defensa de los Derechos Humanos;
III. Elaborar y ejecutar los programas de atención y seguimiento a los Derechos Humanos;
IV. Elaborar y proponer programas preventivos en materia de Derechos Humanos, en los ámbitos jurídico, educativo y
cultural para la Administración Pública Federal;
V. Representar al Gobierno Federal ante los organismos nacionales y, en coordinación con la Secretaria de Relaciones
Exteriores, ante los internacionales, en cuestiones relacionadas con la promoción y defensa de los Derechos Humanos.
VI. Formular programas y proponer acciones que impulsen el cumplimiento dentro del territorio nacional de los
tratados, convenios y acuerdos internacionales signados por nuestro país.
Con base en el Decreto en comentario, se establecieron diversos órganos directivos de la Comisión, como son: el
Presidente, el Consejo, el Secretario Ejecutivo, el Visitador General.
El artículo quinto del Decreto estableció las facultades del Presidente de la Comisión, como representante de ese
organismo y responsable de los trabajos de la misma. Por cuanto al Consejo, el artículo sexto señaló que estaría integrado
por personas que gocen de reconocido prestigio en la sociedad y - que sean invitadas a tal efecto por el Presidente de la
República; igualmente se integrarán servidores públicos que determine el propio Ejecutivo Federal. El Consejo se integró
como cuerpo colegiado de examen y opinión de la problemática del respeto y defensa de los Derechos Humanos, con el
propósito de proponer al presidente de la Comisión las directrices y lineamientos que se estimen pertinentes para su
adecuada prevención tutela. El Consejo contó con un Secretario Técnico para auxiliar en sus trabajos, designado también
por el Presidente de la República.
El primer Consejo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos estuvo integrado por destacados representantes de
diversos medios sociales, como fueron el Doctor Héctor Aguilar Camín, el Doctor Carlos Escandón Domínguez, el Doctor
Guillermo Bonfil Batalla, el Licenciado Carlos Fuentes, el Licenciado Javier Gil Castañeda, el Embajador Oscar González
César; el Licenciado Carlos Payán Velver, el Doctor Rodolfo Stavenhagen y el Doctor Salvador Valencia Carmona. Fungió
como Secretario Técnico, en esa primera Comisión, el Lic. Dais Ortiz Monasterio.
El procedimiento que se siguió para la creación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos motivó severas críticas. Se
afirmó, en ese entonces, que su integración fue violatoria de la Constitución puesto que se trataba de una institución no
prevista en la Carga Marga. Igualmente se dijo que fueron presiones internas y externas las que apresuraron su creación,
más que una idea verdadera de respeto a los derechos humanos. Además, se señaló que el Decreto fue expedido sin
fundamento legal alguno, y con notables limitaciones en cuanto a la competencia y la autonomía del organismo creado; y
que al supervisarse así mismo dicho organismo, se convertía en juez y parte.2
Especialmente se criticó la dependencia directa que la Comisión tenía del Ejecutivo Federal, a quien correspondía nombrar
al Presidente, al igual que al Secretario Técnico, e invitar a los Consejeras; lo que hacia suponer una muy escasa autonomía
para su operatividad. También se impugnó, des de luego, la ubicación del organismo como mera dependencia
desconcentrada de la Secretaría de Gobernación.
Sin embargo, creemos que es justo decir que si bien la Comisión no fue el remedio para todos los males, y que
independientemente de que el proceso y los mecanismos de su creación no fueron de lo más acertados, la misma logró
un buen avance en el respeto y la defensa de los derechos humanos, al atraer la atención de la opinión pública sobre sus
actividades, haciendo patente que la opinión de la ciudadanía es la base del buen éxito de los organismos con
características de Ombudsman.
2. LA ACTUAL COMISIÓN NACIONAL DE LOS DERECHOS HUMANOS: EL TEXTO CONSTITUCIONAL Y SUS REFORMAS. LA
LEY QUE LA ESTRUCTURA. SU REGLAMENTO
Ante las críticas a que se vio sometida la primera Comisión Nacional de Derechos Humanos, se estimó procedente incluirla
en el texto de la Constitución General del país, a fin de que su actuación estuviera claramente apegada a la ley y se
convalidaran sus propósitos de defensa de los Derechos Humanos. Por ello, mediante la adición que se hizo al Artículo
102 Constitucional de un apartado “B”, quedó establecida la base constitucional del organismo. Esta reforma se publicó en
el Diario Oficial de la Federación del día 28 de enero de 1992, y el texto original de la misma fue el siguiente: Artículo 102.
—
A)...
B) El Congreso de la Unión y las legislaturas de los Estados en el ámbito de sus respectivas competencias, establecerán
organismos de protección de los Derechos Humanos que otorga el orden jurídico mexicano, los que conocerán de quejas
en contra de actos u omisiones de naturaleza administrativa provenientes de cualquier autoridad o servidor público, con
excepción de los del Poder Judicial de la Federación, que violen estos derechos. Formularán recomendaciones públicas
autónomas, no vinculatorias y denuncias y quejas ante las autoridades respectivas.
Estos organismos no serán competentes tratándose de asuntos electorales, laborales y jurisdiccionales.
El organismo que establezca el congreso de la Unión conocerá de las inconformidades que se presenten en relación con
las recomendaciones, acuerdos u omisiones de los organismos equivalentes de los Estados.
El proyecto de esta adición constitucional provocó en la Cámara de Diputados interesantes debates entre los diferentes
partidos políticos, que con cambios mínimos al texto original enviado por el Ejecutivo, la aprobaron por 299 votos a favor,
55 con reserva y tres en contra. Del balance de las posturas asumidas por los partidos políticos, se puede apreciar lo
siguiente:
a) que en lo general todos votaron a favor de la enmienda, lo que de patente el alto grado de aceptación del
ordenamiento.
b) en lo particular, los partidos de oposición estuvieron en contra del texto, en cuanto que se excluyeron del
conocimiento de la Comisión los asuntos laborales, electorales y jurisdiccionales;
c) algunos representantes populares de tendencia radical señalaron que se trataba de usa mero “maquillaje” del
gobierno ante las negociaciones del Tratado de Libre Comercio, a efecto de dar la impresión de que en el país existía un
total respeto a los Derechos Humanos.3
Un dato sobresaliente fue el hecho de que la iniciativa enviada al Congreso para la adición constitucional, estuvo basada
en una propuesta proveniente de la propia Comisión Nacional de Derechos Humanos, conteniendo por ello, ursa serie de
ideas y experiencias de sus integrantes lo que le daba a tal iniciativa una gran riqueza para la reestructuración del
organismo y de esta forma establecer con mayor cuidado la figura del Ombudsman en el país.4
El precepto constitucional en comentario estableció también que en los Estados de la Unión deberían existir Comisiones
Locales de defensa de los Derechos Humanos, como se desprende del tercer párrafo del texto original del apartado B), al
señalar que la Comisión Nacional conocerá de las inconformidades que se presenten en relación con las recomendaciones,
acuerdos u omisiones de los organismos equivalentes de los Estados.
El apartado B) del artículo 102 de la Ley Suprema del país fue formado, según modificaciones que aparecen en el Diario
Oficial de la Federación del 13 de septiembre de 1999, a fin de establecer un nuevo mecanismo de designación de los
consejeros y del titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, quienes ahora son elegidos por la Cámara de
Senadores mediante el voto de las dos terceras partes de sus miembros presentes. Se señala como duración del cargo del
titular, el término de cinco años. Con estas propias reformas se dota a la Comisión Nacional de Derechos Humanos de
plana autonomía administrativa y de gestión.
El texto del apartado B) del artículo 102 Constitucional queda de la siguiente forma:
Artículo 102. —
A…
B. El Congreso de la Unión y las legislaturas de las entidades federativas, en el ámbito de sus respectivas competencias
establecerán organismos de protección de los derechos humanos que ampara el orden jurídico mexicano, los que
conocerán de quejas en contra de actos u omisiones de naturaleza administrativa provenientes de cualquier autoridad o
servidor público, con excepción de los del Poder judicial de la Federación, que violen estos derechos.
Los organismos a que se refiere el párrafo anterior formularán recomendaciones públicas, no vinculatorias y denuncias y
quejas ante las autoridades respectivas.
Estos organismos no serán competentes tratándose de asuntos electorales, laborales y jurisdiccionales El organismo que
establezca el Congreso de la Unión se denominará Comisión Nacional de los Derechos Humanos, contará con autonomía
de gestión y presupuestaria, personalidad jurídica y patrimonio propios.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos tendrá un Consejo consultivo integrado por diez consejeros que serán
elegidos por el voto de las dos terceras partes de los miembros presentes de la Cámara de Senadores o en recesos, por la
Comisión Permanente del Congreso de la Unión, con la misma votación calificada. La ley determinará los procedimientos a
sepan para la presentación de las propuestas por la propia Cámara. Anualmente serán substituidos los dos consejeros de
mayor antigüedad en el cargo, salvo que fuesen propuestos y ratificados para un segundo período.
El Presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, quien lo será también del Consejo Consultivo, será
elegido en los mismos términos del párrafo anterior. Durará en su encargo cinco años, podrá ser reelecto por un sola vez y
sólo podrá ser removido dé sus funciones en los términos del Titulo Cuarto de esta Constitución.
El Presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos presentará anualmente a los Poderes de la Unión un
informe de actividades. Al efecto comparecerá ante las cámaras del Congreso en los términos que disponga la ley.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos conocerá de las inconformidades que se presenten en relación con las
recomendaciones, acuerdos u omisiones de los organismos equivalentes en las entidades federativas.
El Congreso de la Unión expidió la Ley de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, misma que se publicó en el Diario
Oficial de la Federación el 29 de junio de 1992.*
Cabe señalar, igualmente, que de acuerdo a las facultades con que cuenta, la propia Comisión Nacional expidió su
Reglamento Interior que fue publicado en el Diario Oficial de la Federación del 12 de noviembre de 1992.**
Estos dos ordenamientos legales, la Ley y el Reglamento, además del texto constitucional que ha quedado precisado, son
el estatuto legal con el que opera la Comisión Nacional. En atención a ello, siguiendo el orden que nos presenta la Ley, se
detallan las atribuciones, los órganos, los procedimientos, los diversos acuerdos y recomendaciones, y demás actividades
que realiza la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, en correlación, cuando el caso lo amerite, con los preceptos
respectivos del Reglamento.
Los artículos primero, segundo, tercero y cuarto de la mencionada Ley, prevén los aspectos generales fundamentales
referentes a la Comisión, al señalar:
Art. 1º. —Esta ley es de orden público y de aplicación en todo el territorio nacional en materia de Derechos Humanos,
respecto de los mexicanos y extranjeros que se encuentren en el país, en los términos establecidos por el apartado “B” del
artículo 102 constitucional.
Art. 2º. —La Comisión Nacional de Derechos Humanos es un organismo descentralizado con personalidad jurídica y
patrimonio propios que tiene por objeto esencial la protección, observancia, promoción, estudio y divulgación de los
Derechos Humanos previstos por el orden jurídico mexicano.
Art. 3º.—La Comisión Nacional de Derechos Humanos tendrá competencia en todo el territorio nacional, para conocer de
quejas relacionadas con presuntas violaciones a los Derechos Humanos cuando éstas fueren imputadas a autoridades y
servidores públicos de carácter federal, con excepción de los del Poder judicial de la Federación.
Cuando en un mismo hecho estuvieren involucrados tanto autoridades ó servidores públicos de la Federación como de las
Entidades Federativas o Municipios, la competencia se surtirá en favor de la Comisión Nacional.
Tratándose de presuntas violaciones a los Derechos Humanos en que los hechos se imputen exclusivamente a autoridades
o servidores públicos de las entidades federativas o municipios, en principio conocerán los organismos de protección de
los Derechos Humanos de la Entidad de que se trate, salvo lo dispuesto por el artículo 60 de esta ley.
Asimismo, corresponderá conocer a la Comisión Nacional de Derechos Humanos de las inconformidades que se presenten
en relación con las recomendaciones, acuerdos u omisiones de los organismos equivalentes de los Estados de la
Federación, a que se refiere el artículo 102, apartado B de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Art. 4º. —Los procedimientos que se sigan ante la Comisión deberán ser breves y sencillos, y estarán sujetos sólo a las
formalidades esenciales que requiera la documentación de los expedientes respectivos. Se seguirán además, de acuerdo
con los principios de inmediatez, concentración y rapidez, y se procurará, en la medida de lo posible, el contacto directo
con quejosos, denunciantes y autoridades, para evitar la dilación de las comunicaciones escritas.
El personal de la Comisión Nacional deberá manejar de manera confidencial la información o documentación relativa a los
asuntos de su competencia.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), está integra da por un Presidente, una
Secretaría Ejecutiva, hasta cinco Visitadores Generales (actualmente cuenta con cuatro), así como por el número de
Visitadores Adjuntos y personal profesional, técnico y administrativo necesario para la realización de sus funciones.
Además la Comisión cuenta con un Consejo, para el mejor desempeño de sus responsabilidades.
En los términos del artículo 6º de la Ley que la rige, son atribuciones de l CNDH las siguientes:
c) Formular recomendaciones públicas autónomas, no vinculatorias y denuncias y quejas ante las autoridades
respectivas, en los términos establecidos por el artículo 102, apartado B, de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos;
d) Conocer y decidir en última instancia las inconformidades que se presenten respecto de las recomendaciones y
acuerdos de los organismos de Derechos Humanos de las Entidades Federativas a que se refiere el artículo 102, apartado
B, de la Constitución
Política;
e) Conocer y decidir en última instancia las inconformidades por omisiones en que incurran los organismos de
Derechos Humanos a que se refiere el párrafo anterior, por insuficiencia en el cumplimiento de las recomendaciones de
éstos por parte de las autoridades locales, en los términos señalados por esta ley;
f) Procurar la conciliación entre los quejosos y las autoridades señaladas como responsables, así como la inmediata
solución del conflicto planteado, “cuando la naturaleza del caso lo permita;
g) Impulsar la observancia de los Derechos
Humanos en el país;
h) Proponer a la s diversas autoridades del país, que en el exclusivo ámbito de su competencia, promuevan los
cambios y modificaciones de disposiciones legislativas y reglamentarias, así como de prácticas administrativas, que a juicio
de la Comisión Nacional redunden en una mejor protección de los Derechos Humanos;
i) Promover el estudio, la enseñanza y la divulgación de los Derechos Humanos en el ámbito nacional e
internacional;
j) Expedir su Reglamento Interno;
k) Elaborar y ejecutar programas preventivos en materia de Derechos Humanos;
l) Supervisar el respeto a los Derechos Humanos en el sistema penitenciario y de readaptación social del país;
m) Proponer al Ejecutivo Federal, en los términos de la legislación aplicable, la suscripción de convenios o acuerdos
internacionales en materias de Derechos
Humanos;
Las demás que le otorguen la ley y otros ordenamientos legales. […]
Fichas Bibliográficas de los documentos
Ficha Documento
DERECHO INTERNACIONAL
Público Contemporáneo,
2a. Ed., Porrúa, México, 1998.
Pág. 187-205.
DERECHOS HUMANOS,
2º Edic. Porrúa, México 2001.
Pág. 139-146.