Sala Constitucional - 22-06-2018 - Expediente - 17-0941
Sala Constitucional - 22-06-2018 - Expediente - 17-0941
Sala Constitucional - 22-06-2018 - Expediente - 17-0941
Indicó que ( ) [e]n la presente causa, una vez, el fiscal que conocía la
causa ordenó el sobreseimiento por prescripción de la acción penal, el
procedimiento que se siguió fue el establecido en el procedimiento ordinario
penal. Emitido el acto conclusivo de prescripción de la acción penal por el
Ministerio Público y negado el sobreseimiento por el órgano jurisdiccional
de control, el Fiscal Superior [del] Ministerio, rectificó la petición fiscal y
ordenó a otro fiscal que siguiera la investigación ( ) .
Reiteró que ( )[e]l título II del Libro Tercero del Código Orgánico
Procesal Penal no existe una norma que establezca el trámite procesal a
seguir, ni el lapso procesal fijado que disponga el tiempo que tendrá el fiscal
que conozca ahora de la continuación de la investigación, ni a partir de
oportunidad procesal se pueda contar dicho lapso de tiempo, por lo que
irremediablemente debe recurrirse por remisión del artículo 353 del Código
Orgánico Procesal Penal a las normas del [c]itado [c]ódigo que en materia
ordinaria establece el artículo 295 ejusdem (sic) ( )
Alegó que ( ) [a]l aplicar las sentenciadoras los artículos 363 y 364 del
código Orgánico Procesal Penal, para negar el recurso de apelación,
actuaron fueron (sic) de su competencia y en consecuencia violaron la Ley,
por cuanto las normas que rigen el proceso penal venezolano, no permiten
la analogía y mucho menos que los jueces penales para un caso concreto,
recurran a escindir las normas procesales penales y de esta crear una nueva
norma procesal y produjeron una lesión directa a los derechos
constitucionales de RAINIER ALMARZA HERNANDEZ (sic), del debido
proceso contenida en el artículo 49 de la Constitución.
En definitiva, solicitó:
II
DE LA DECISIÓN ACCIONADA
omissis .
omissis
Siguiendo el mismo orden de ideas, resulta pertinente traer a colación lo
expresado por la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, en
sentencia No. 594 de fecha 22 de mayo de 2013, con ponencia del
Magistrado Arcadio Delgado Rosales, en la cual apuntó con respecto al
derecho a la defensa y al debido proceso, lo siguiente:
omissis
omissis
Por su parte, con la entrada en vigencia del Código Orgánico Procesal Penal,
conforme a la última reforma que sufriere el mismo, de fecha 15-06-2016,
publicado en Gaceta Oficial Extraordinaria N 6.078, el legislador patrio
instituyó la inclusión en el libro tercero titulado De los procedimientos
especiales , un procedimiento para el juzgamiento de los delitos menos
graves, constituyendo la inserción del mencionado procedimiento una
reforma al sistema de administración de justicia, toda vez que se crearon
nuevas instancias jurisdiccionales y procedimientos para el conocimiento de
los delitos menos graves, cuya pena no exceda en su límite máximo de ocho
(08) años de privación judicial preventiva de libertad, siendo la finalidad de
este procedimiento otorgarle oportunidad a aquella persona que comete un
hecho delictivo, el cual tenga estipulado una pena que en su límite máximo
no exceda de ocho (08) años a resarcir el daño causado, a través del trabajo
comunitario, con el objeto de reinsertarse a la sociedad.
omissis
omissis
omissis .
omissis
omissis .
Razón por la cual es procedente en el presente caso, dictar el [a]rchivo
[j]udicial del presente asunto, siendo la consecuencia jurídica del mismo a
tenor de lo establecido en el artículo 364 ejusdem, (sic) hacer cesar todas
las medidas de coerción Asimismo y como consecuencia se declara SIN
LUGAR la solicitud INTERPUESTA por el representante de la víctima
(Negrillas de la Corte).
Ahora bien, una vez realizada la revisión a las actas que conforman el
presente asunto, estas [j]uzgadoras de [a]lzada conciertan en destacar con
énfasis que el procedimiento especial contenido en los artículos 354 y
siguientes de la Ley Adjetiva Penal, viene a regular la forma de juzgamiento
en los considerados delitos menores por el límite máximo de la pena que
pudiera llegar a imponerse; con esta reforma el [l]egislador pretendió un
procedimiento breve y expedito en aras de la celeridad procesal con el fin
último del juzgamiento en libertad y la participación comunitaria en la
readaptación del sujeto activo del delito a la sociedad, resultando lo más
importante de este procedimiento que en el acto de imputación, aun en los
casos de flagrancia, existe la posibilidad para el imputado de someterse
desde ese momento a alguna de las fórmulas alternativas a la prosecución
del proceso, como el acuerdo reparatorio o la suspensión condicional del
proceso.
Así ha quedado claramente establecido en la exposición de motivos del
Decreto N 6.078 mediante el cual se dict[ó] el Decreto con Rango, Valor y
Fuerza de Ley del Código Orgánico Procesal Penal, lo cual se plasma de
forma textual a continuación:
omissis
Entre las reformas mas (sic) resaltantes realizadas al contenido de este
[l]ibro, se encuentra la inclusión de un nuevo título referente a los
procedimientos para el juzgamiento de los delitos menos graves, el cual
será de la competencia de los [T]ribunales de [P]rimera Instancia Municipal
en funciones de Control, como ya se ha mencionado. Al respecto, esto
constituirá una reforma de fondo del sistema de justicia penal, que se
caracterizará por la aplicación de nuevas instancias jurisdiccionales y
procedimientos para el conocimiento de los delitos menos graves cuya pena
en su límite superior no exceda de ocho (8) años de privación de libertad,
previéndose su juzgamiento mediante la aplicación de un procedimiento
breve que permita el enjuiciamiento en libertad, y posibilite la inclusión del
imputado o imputada en el trabajo comunitario . (Subrayado de Sala)
omissis .
omissis .
En razón de esa pretensión de celeridad el artículo 363 del Código Orgánico
Procesal Penal, establece para el [f]iscal la obligación de dictar el acto
conclusivo que considere según lo que haya arrojado la investigación, en un
lapso perentorio de sesenta días, cuando dispone:( ); resultando importante
señalar, que el término de caducidad de sesenta días continuos establecido
en el mencionado artículo 363, no tiene la posibilidad de prórroga por
cuanto ello desnaturalizaría el procedimiento, así una vez haya sido
notificado el Fiscal del Ministerio Público del incumplimiento de la
[s]uspensión [c]ondicional del [p]roceso o del [a]cuerdo [r]eparatorio por
parte del imputado o la imputada o desde el momento de la audiencia de
flagrancia o de imputación sin que se haya acogido a alguno de los modos
alternos mencionados, el Ministerio Público deberá presentar en sesenta
(60) días continuos el acto conclusivo que corresponda, en cumplimiento del
procedimiento legal establecido.
Así pues, se observa que indudablemente, por una lado la Jueza de Control
se pronunció sobre lo peticionado por la defensa privada, considerando el
decreto del [a]rchivo [j]udicial de las actuaciones, conforme al
procedimiento especial establecido en el artículo 364 del Código Orgánico
Procesal Penal, en concordancia con lo establecido en el artículo 363
ejusdem (sic); ya que en el ejercicio del ius puniendi el Estado a través del
Ministerio Público cuenta con funcionarios investidos de la autoridad de
llevar a cabo la investigación, en cuya responsabilidad está la función del
ejercicio de la acción penal, encontrándose legalmente facultados para
decretar el archivo fiscal, solicitar el sobreseimiento o presentar la
acusación respectiva, aunado a lo establecido en el artículo 285 de nuestra
[c]arta magna, y legalmente en el artículo 108 del Código Orgánico Procesal
Penal. Por tanto, para la Fiscalía es obligatorio discernir acerca de la
pertinencia y utilidad de la práctica de las diligencias solicitadas por las
partes, demandándose la exposición de los argumentos de hecho y de
derecho que le sirven de fundamento para la solicitud de nuevas
imputaciones, cuando aparezcan nuevos elementos de convicción durante la
realización de las diligencias de investigación, que conlleven a la imputación
de nuevos delitos o al cambio de la calificación jurídica provisional.
omissis
Por lo que, debe advertirse que las disposiciones legales que establecen el
procedimiento a seguir para dirimir el conflicto son de eminente orden
público, de manera que no pueden, bajo ningún motivo ser inobservadas o
modificadas por las partes ni por el Juez de la causa. Ello se afirma, por
cuanto es la propia Constitución de la República Bolivariana de Venezuela,
la que establece en su artículo 49, numeral 4, el derecho de toda persona a
ser juzgada por sus jueces naturales en las jurisdicciones ordinarias o
especiales, con las garantías establecidas en esta Constitución y en la ley.
Asimismo, el artículo 253 del texto constitucional señala, que corresponde a
los órganos del Poder Judicial conocer de las causas y asuntos sometidos a
su competencia mediante los procedimientos que determinen las leyes.
omissis
Así las cosas, observa este Tribunal, que la observancia de las formas, no es
sólo una garantía de justicia, sino también una condición necesaria de la
confianza de los ciudadanos en la justicia. No basta que el proceso haya
alcanzado efectivamente su fin jurídico, o sea, el de conducir el exacto
conocimiento de la verdad, sino que es preciso que esto sea creído por los
justiciables. Ese es el fin de las formas procesales, y cuando estas formas
no se observan, se violenta el debido proceso contenido del artículo 49 de la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que se traduce y se
concentra en la exigencia de que se respeten todas las garantías procesales
establecidas en la ley a los fines de garantizar un proceso justo.
III
COMPETENCIA
IV
Por otra parte, estima esta Sala que en el caso en concreto conforme a
lo dispuesto en el artículo 353 del Código Orgánico Procesal Penal, resultan
aplicables de manera supletoria las reglas que rigen el procedimiento
ordinario, siempre y cuando surjan situaciones o incidencias no previstas en
la tramitación de ese tipo de procedimientos especiales (delitos menos
graves), sin que esta remisión excepcional implique la desnaturalización del
procedimiento especial y los lapsos que lo regulan, como erróneamente lo
alegó la parte actora en el libelo de la presente pretensión, por lo tanto, la
decisión adversada en amparo que declaró sin lugar el recurso de apelación
y confirmó la decisión recurrida que decretó el archivo judicial de las
actuaciones, así como el cese de todas las medidas de coerción y la
condición de imputado del presunto responsable, no puede ser considerada
como una extinción del referido proceso, pues el accionante o en su defecto
el Ministerio Público, tienen abierta la posibilidad de solicitar la reapertura
de la investigación cuando surjan nuevos elementos que así lo justifiquen,
previa autorización del Juez de la causa, ello aplicando supletoriamente lo
establecido en el artículo 296 del Código Orgánico Procesal Penal.
DECISIÓN
El Presidente,
Los Magistrados,
Ponente
La Secretaria,
Exp. 17-0941
LBSA/